estudios estructurales
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estudios estructurales biotecnologíaTRANSCRIPT
INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL
Centro de Desarrollo de Productos Bióticos
Estudios Estructurales de Almidón de Fuentes No Convencionales: Mango
(Mangifera indica L.) Y Plátano (Musa paradisiaca L.)
T E S I S
Que para obtener el grado de Maestría en Ciencias en Desarrollo de Productos Bióticos
PRESENTA Vicente Espinosa Solis
Director de tesis
Dr. Luis Arturo Bello Pérez
Yautepec, Morelos 2008
Este trabajo fue realizado en el Laboratorio de Control
de Calidad del Departamento de Desarrollo Tecnológico del Centro
de Desarrollo de Productos Bióticos del Instituto Politécnico
Nacional y en el Laboratorio de Carbohidratos del Departamento de
Ciencia de los Alimentos y Nutrición Humana en la Universidad
Estatal de Iowa (Ames, Iowa, EUA), bajo la dirección del Dr. Luis
Arturo Bello Pérez.
Se agradece al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
(CONACYT) y al Programa Institucional de Formación de
Investigadores (PIFI‐IPN) por las becas otorgadas para la
realización de estos estudios.
A G R A D E C I M I E N T O S
Dr. Luis Arturo Bello Pérez, por haberme permitido
incorporarme a su grupo de trabajo y ser director de esta tesis,
de quien aprendí que la disciplina es importante para salir
adelante en cualquier meta que me proponga.
Dra. Jay‐Lin Jane, por los consejos recibidos durante mi
estancia en la Universidad estatal de Iowa.
Dra. María Guadalupe del Carmen Méndez Montealvo, por su
apoyo en la primera etapa de este trabajo, por los consejos
brindados y por su tutoría incondicional.
A mis amigos por brindarme su apoyo y porque con ellos viví
muchas cosas buenas y malas de las cuales aprendimos a no caer y
superarnos siempre.
I N D I C E
Página
Lista de figuras I
Lista de cuadros III
Lista de Abreviaturas IV
Resumen VI
Abstract VII
I INTRODUCCIÓN 1
II ANTECEDENTES 3
2.1 Generalidades del almidón 3
2.2 Características de la amilosa 4
2.3 Características de la amilopectina 6
2.4 Organización del gránulo del almidón 9
2.5 Propiedades funcionales del almidón 12
2.5.1 Gelatinización 12
2.5.2 Retrogradación 15
2.5.3 Propiedades de formación de pasta 16
2.6 Fuentes y usos del almidón 18
2.6.1 Fuentes no convencionales 20
2.6.1.1 Plátano 21
2.6.1.2 Mango 22
2.7 Estudios estructurales 23
2.7.1 Peso molecular y radio de giro 24
2.7.2 Distribución de la longitud de las
cadenas de la amilopectina
26
2.8 Relación estructura – función 27
III JUSTIFICACIÓN 30
IV OBJETIVOS 31
4.1 Objetivo general 31
4.2 Objetivos específicos 31
V MATERIALES Y MÉTODOS 32
5.1 Materia prima. 32
5.2 Métodos 32
5.2.1 Almidón total 34
5.2.2 Contenido de amilosa aparente 35
5.2.3 Microscopia electrónica de barrido 35
5.2.4 Difracción de rayos X 36
5.2.5 Tratamiento del almidón con dimetil
sulfóxido (DMSO) al 90%
36
5.2.6 Cromatografía de permeación en gel (CPG) 37
5.2.7 Electroforesis capilar asistida con un
fluoróforo (ECAF)
38
5.2.8 Cromatografía de alta resolución por
exclusión de tamaño (CLARET) acoplada a
detectores de dispersión de luz multi‐
ángulos (DDLMA) e índice de refracción
(IR)
40
5.2.9 Calorimetría de barrido diferencial
(CBD)
41
5.2.10 Análisis rápido de la viscosidad 41
5.2.11 Análisis estadístico 42
VI RESULTADOS Y DISCUSIONES 43
6.1 Contenido de almidón total y amilosa aparente 43
6.2 Microscopia electrónica de barrido 47
6.3 Difracción de rayos X 47
6.4 Cromatografía de permeación en gel 50
6.5 Electroforesis capilar asistida con fluoróforos 52
6.6 Cromatografía de alta resolución por exclusión de
tamaño (CLARET) acoplada a detectores de
dispersión de luz multi‐ángulos (DDLMA) e índice
de refracción (IR)
56
6.7 Calorimetría de barrido diferencial 59
6.8 Análisis rápido de la viscosidad 63
6.9 Relación estructura función 67
VI CONCLUSIONES 69
VII BIBLIOGRAFÍA 70
I
L I S T A D E F I G U R A S
Figura Pagina
1 Conformación de las unidades de glucosa en la
estructura de la amilosa
5
2 Modelos propuestos para la estructura de la
amilopectina
7
3 Organización estructural del granulo de almidón
en relación a sus dos estructuras cristalinas y
amorfas
10
4 Patrones de difracción de almidones tipo A, B y
C.
13
5 Empaquetamiento de las dobles hélices de
amilopectina en base al tipo de polimorfismo
14
6 Representación esquemática de las propiedades de
formación de pasta del almidón
17
7 Perfil de viscosidad, obtenido con un analizador
rápido de la viscosidad
19
8 Aminación reductiva con APTS (A) y marcaje con
APTS de amilopectina desramificada (B).
28
9 Diagrama con los procedimientos experimentales
realizados a las muestras de almidón de mango,
plátano y maíz normal
33
II
10 Micrografía electrónica de barrido de almidones
de maíz normal (A), mango (B) y plátano (C). (la
barra en la parte inferior de las fotografias
corresponde a una escala de 20 μm).
46
11 Patrón de difracción de rayos X. de almidones:
maíz normal, mango y plátano.
49
12 Perfiles de elusión obtenidos mediante
cromatografía de permeación en gel, para
almidones de maíz normal (A), mango (B) y
plátano (C). (valor azul ) y (carbohidratos
totales )
51
13 Distribución de la longitud de cadena para
amilopectinas desramificadas [maíz normal (A),
mango (B) y plátano (C)].
54
14 Perfiles de viscosidad de los almidones maíz
normal (o), mango (∆) y plátano (◊), obtenidos
con un analizador rápido de la viscosidad. (8 %
bs).
65
III
L I S T A D E C U A D R O S
Cuadro Pagina
1 Almidón total, afinidades al yodo y contenido
de amilosa aparente de almidones.
44
2 Distribución de la longitud de las cadenas de
la amilopectinas.
55
3 Peso molecular (MM), radio de giro (RG) y (ρ)
densidad molecular de amilopectinas de
diferentes fuentes botánicas
58
4 Propiedades térmicas de gelatinización de
almidón
61
5 Propiedades térmicas de retrogradación de
almidón
62
6 Propiedades de formación de pasta de almidón,
determinado mediante un analizador rápido de la
viscosidad
66
IV
L I S T A D E A B R E V I A T U R A S
%R Porcentaje de retrogradación
AT Almidón total
CHO Carbohidratos
Da Dalton
ΔH Cambio de entalpía
dn/dc Cambio de índice de refracción
g Gramos
g/mol Gramo / mol
GP Grado de polimerización
h Hora
kV Kilovolt
M Molaridad
mg Miligramo
min Minuto
mL Mililitro
mL Microlitro
mm Micrometro
MM Masa molecular
mM Milimolar
mV Milivolt
N Normalidad
nm Nanometro
°C Grado Celsius
θ Angulo teta
ρ Densidad molecular
RG Radio de giro
V
rpm Revoluciones por minuto
Tc Temperatura de conclusión
To Temperatura de inicio
Tp Temperatura pico
UB Unidades Brabender
UVR Unidades de viscosidad rápida
V.A. Valor azul
VI
R E S U M E N
El almidón es un carbohidrato importante en todo el mundo,
debido a su uso en diferentes industrias como: la alimenticia,
farmacéutica, textil, etc. Las propiedades funcionales del almidón,
son consecuencia de la organización física de la amilosa y
amilopectina dentro del gránulo. El objetivo de este trabajo fue
determinar la estructura y propiedades fisicoquímicas de los
almidones aislados de mango (Mangifera indica L.) y plátano (Musa
paradisiaca L.) en estado inmaduro. La distribución de la longitud de
las cadenas de la amilopectina de mango mostró mayores cantidades de
cadenas de longitud larga y corta, y la amilopectina de plátano
presentó altas cantidades de cadenas largas, ambos comparados con la
amilopectina de almidón de maíz normal. Esto está relacionado con los
patrones de difracción de rayos X desplegados para los almidones de
mango y plátano: tipo‐A y tipo‐C, respectivamente. Los almidones de
plátano y mango contienen 36.2 y 31.1 % de amilosa aparente. Los
almidones de plátano y mango tuvieron masas moleculares promedio 3.37
x 108 y 5.01 x 108 g /mol, y radios de giro de 267 y 297 nm,
respectivamente. El almidón de plátano presentó la temperatura
(76.5°C) y entalpía (16.5 J/g) de gelatinización más altas. Las
pastas de almidón medidas mediante análisis rápido de la viscosidad,
tuvieron viscosidades pico de 215.8 y 194.1 RVU, con una temperatura
de empastado de 79.3 y 71.3 °C, viscosidad final 323.8 y 239.1 RVU,
para los almidones de plátano y mango, respectivamente. Por lo
anterior, se encontró, que la estructura fina de la amilopectina,
está relacionada con las propiedades fisicoquímicas de los almidones
de mango y plátano.
VII
A B S T R A C T
Starch is an important carbohydrate in the entire world, due
to their use in different industries like: food, pharmaceutical,
textil, etc. the functional properties of starch are consequence of
amylopectin and amylose’s physical organization in the granule. The
aim of this work was to determinate the structure and physicochemical
properties of starch isolated from unripened mango (Mangifera indica
L.) and banana (Musa paradisiaca L.) starches. The chain length
distribution of mango amylopectin showed higher amounts of both short
and long chains, and banana amylopectin presented higher amounts of
long chains and lower amounts of short chains, both compared to
normal maize amylopectin, this is related to the X‐ray diffraction
patterns displayed by mango and banana starch: A‐type and C‐type,
respectively. Banana and mango starches contained 36.2 and 31.1 %, of
apparent amylose content. Banana and mango starch amylopectins had
molecular weights of 3.37 x 108 and 5.01 x 108 g/mol, and gyration
radii of 267 and 297 nm, respectively. Banana starch had the highest
temperature (76.5 ºC) and enthalpy (16.5 J/g) of gelatinization.
Starch pastes, measured by using a Rapid Visco‐Analizer, had peak
viscosity of 215.8 and 194.1 RVU, final viscosity 323.8 and 239.1
RVU, setback 141.7 and 95.2 RVU, with a pasting temperature of 79.3
and 71.3ºC, for banana and mango starches, respectively. Moreover,
the amylopectin branch chain length distribution is related with the
physicochemical properties of mango and banana starches.
1
I. INTRODUCCIóN
El almidón es sintetizado en forma de gránulos
semicristalinos, almacenado en diferentes órganos de plantas
incluyendo: hojas, semillas, tubérculos, raíces y frutas. El almidón
está conformado por dos tipos de polisacáridos: la amilosa, una
molécula fundamentalmente lineal compuesta de glucanos unidos
mediante enlaces -(14), y por la amilopectina, una molécula de
mayor peso molecular altamente ramificada con enlaces -(16). La
funcionalidad del almidón y organización física dentro de la
estructura granular se debe a estas macromoléculas (French, 1984). Es
de gran importancia entender las características estructurales del
almidón para sugerir posibles aplicaciones de este polímero en
diversos sistemas. La mayoría de las caracterizaciones estructurales
y fisicoquímicas del almidón, han sido llevadas a cabo en almidones
de trigo, maíz, papa y arroz debido a su importancia comercial. Por
otra parte, poco se conoce acerca de almidón de fuentes no
convencionales como lo son mango y plátano.
Mango (Mangifera indica L.) y plátano (Musa paradisiaca L.)
son frutas climatéricas que en México y muchos otros países son
consumidos en estado maduro. Por esta razón, considerables cantidades
de frutas son perdidas durante su comercialización, como consecuencia
de un deficiente manejo pos cosecha. Las altas cantidades de almidón
reportadas para estas frutas en estado inmaduro, las hacen fuentes
aceptables para el aislamiento de almidón (Bello-Pérez et al., 1999).
Existen estudios, que han demostrado las propiedades
fisicoquímicas de los almidones de mango y plátano, utilizando
diferentes variedades de estas frutas. Kuar et al. (2004) estudiaron
cinco variedades de almidones de mango aislado de huesos de esta
2
fruta y reportaron sus propiedades fisicoquímicas y morfológicas;
Sandhu y Lim (2008) reportaron las características estructurales y
digestibilidad in vitro de mango chusa y kuppi; Torres-Gutiérrez et
al. (2007) estudiaron las características estructurales de almidón de
plátano cuadrado (Musa balbisiana); Millán-Testa et al. (2005)
reportaron las características estructurales y morfológicas de
almidones de plátano, mango y okenia. Sin embargo, no existen
estudios sobre la estructura fina de la amilopectina de estos
almidones.
El presente trabajo analiza las características estructurales
de almidones extraídos a partir de 2 fuentes no convencionales:
plátano variedad “macho” y mango variedad “Tommy Atkins”, usando
microscopia electrónica de barrido (MEB), titulación con yodo,
difracción con rayos X, cromatografía líquida de alta resolución por
exclusión de tamaño (CLARET) acoplados a detectores de dispersión de
luz multiángulos (DDLMA) e índice de refracción (IR), y
electroforesis capilar asistida con fluoróforo (ECAF), así como sus
propiedades fisicoquímicas mediante un analizador rápido de la
viscosidad (ARV) y calorimetría de barrido diferencial (CBD).
3
II. ANTECEDENTES
2.1 Generalidades del almidón
El almidón es el principal carbohidrato de reserva sintetizado
por las plantas y es una fuente de energía para muchos organismos.
Representa una fracción importante en un gran número de productos
agrícolas como son : los cereales (maíz, trigo, arroz), en los cuales
se ha reportado un contenido de almidón del 30 al 80%; las
leguminosas (frijol, chícharo, haba) con un contenido entre 25 a 50%;
los tubérculos (papa y yuca) con un 60 a 90%; y algunas frutas
(plátano y mango) que en su estado inmaduro alcanzan contenidos de
almidón de hasta el 70% en base seca (Bello-Pérez y Paredes-López,
1999).
Este polisacárido está organizado en partículas discretas
conocidas como gránulos, cuya morfología, composición química y
estructura son características de cada especie botánica. El tamaño de
los gránulos de almidón varía de 0.5 a 100 µm. Se pueden encontrar
gránulos de gran tamaño en el almidón de papa (15 a 100 µm) y
gránulos tan pequeños como los del almidón de amaranto (0.8 a 2.5 µm)
(Bello-Pérez y Paredes-López, 1999).
Químicamente, el almidón está integrado por dos polímeros de
diferente estructura: la amilosa y la amilopectina. Las cantidades
relativas de estos dos polímeros y su organización física dentro de
la estructura granular, le confieren propiedades fisicoquímicas y
funcionales características a los diferentes almidones (Bello-Pérez,
1995).
4
2.2 Características de la amilosa
La amilosa es un polisacárido esencialmente lineal, conformado
por unidades de D-glucosa unidas por enlace -(14) (figura 1); sin
embargo, se ha demostrado la presencia de algunas ramificaciones las
cuales están unidas mediante enlace -(16) (Thomas y Atwell, 1999).
La amilosa en soluciones neutras forma una hélice, la cual
presenta 6-8 unidades de glucosa por cada vuelta. La amilosa y el
yodo forman un complejo, el cual es de color azul obscuro y es
convencionalmente usado para cuantificar el contenido de amilosa en
los almidones. La amilosa tiene una capacidad de enlazamiento de yodo
del orden de 20 mg de yodo por 100 mg de amilosa a una longitud de
onda de máxima absorción entre 620 y 640 nm. La intensidad del color
azul del complejo amilosa-yodo proporciona información acerca de la
longitud de cadena de la amilosa. La titulación potenciométrica de la
amilosa con yodo, ha sido usada para determinar el contenido de
amilosa de los almidones (Schoch, 1964).
Los alcoholes de longitud de cadena larga y los lípidos,
también pueden formar complejos con la amilosa, los cuales son
capaces de prevenir la retrogradación. Estos complejos pueden
utilizarse para separar la amilosa de la amilopectina y para
modificar las propiedades de la amilosa, en un sistema que contenga
agentes formadores de complejos (Schoch, 1942).
La amilosa tiene una masa molar aproximadamente de 1 x 105 – 1
x 106 Dalton (Da) con un promedio de 500 a 6000 unidades de D-
glucosa, repartidas en un número de cadenas que va de 1 a 20
(MacAllister, 1979).
5
Figura 1. Conformación de las unidades de glucosa en la estructura de
la amilosa (Gallant y Bouchet, 1986).
6
2.3 Características de la amilopectina
La amilopectina es el componente ramificado del almidón, está
formada por cadenas de residuos α-D-glucopiranósidos unidos por
enlaces α-(14), presenta enlaces α-(16) en los puntos de
ramificación, los cuales representan un 5-6 % de los enlaces totales
(Buleón et al., 1998).
La amilopectina es el componente mayoritario del almidón, se
encuentra en una proporción de 70-80% (almidones normales), en
ciertos casos alcanza niveles de hasta un 98-99%, este tipo de
almidones son definidos como ceroso (Zobel, 1988). Su estructura,
composición y proporción en el gránulo contribuyen notablemente en
las propiedades funcionales del almidón, por esta razón, ha sido
estudiada ampliamente en términos de su tamaño molecular,
ramificación y longitud de las cadenas internas y externas (Bello-
Pérez et al., 2002).
La masa molar de la amilopectina varía entre 1 x 106 y 1 x 10
8
Da, estas variaciones dependen del origen botánico del almidón, de
las condiciones de fraccionamiento de las moléculas de amilosa y
amilopectina y del método usado para determinar la masa molar (Bello-
Pérez et al., 2002).
El estudio de la molécula de amilopectina ha ido aumentando a
lo largo del tiempo conforme se han desarrollado nuevas técnicas para
su estudio (figura 2). Uno de los primeros modelos establecidos fue
el modelo “trichitic” propuesto por Meyer (1895), este modelo no
encajó con el comportamiento de la amilopectina, debido a que asumía
una estructura con ramificaciones frecuentes, lo cual delimitaba el
espacio, conforme se elongaba la amilopectina hacia el exterior
del granulo. Posteriormente, con el estudio de la amilopectina
7
Figura 2. Modelos propuestos para la estructura de la amilopectina.
Modelo “Trichitic”1895
Modelo “Trichitic”Modificado
Meyer 1940 Modelo ClusterNikuni 1969
Modelo ClusterFrench 1972
Modelo ClusterHizukuri 1986 Robin 1974
8
mediante hidrólisis enzimática, llevada a cabo con -amilasa, se
reveló que las cadenas varían en longitud y debido a ello se
desarrolló una modificación del modelo “trichitic”. Este modelo
permitía una expansión indefinida a partir del extremo reductor de
la molécula, con una cantidad de ramificaciones que dependían
del espacio disponible dentro de la molécula.
Meyer et al. (1940), hidrolizaron amilopectina con -amilasa y
subsecuentemente con amiloglucosidasa. Con sus resultados propusieron
una estructura en forma de arbusto, deducida del porcentaje de
reducción de productos de la hidrólisis.
A finales de los 60’s, nace el primer modelo de racimo o
“cluster”, el cual fue propuesto por Nikuni (1969), en este modelo,
los cluster en la amilopectina estaban espaciados uno de otro. Al
igual que Nikuni, French (1972) propuso un modelo de cluster más
compacto, este modelo podría ser concebido sólo si parte de la
molécula de amilopectina cristalizara durante la biosíntesis del
gránulo, así, esa parte de la molécula de amilopectina no podía ser
elongada. Este patrón molecular presentaba regiones cristalinas y
amorfas alternadas.
Robin et al. (1974) realizaron estudios enzimáticos (-amilasa
y pululanasa) y cromatográficos (filtración en gel) con almidón de
papa lintnerizado, los cuales confirmaron y modificaron el modelo de
cluster propuesto por French (1972). En este modelo las cadenas -A- y
-B- son lineales y tienen un grado de polimerización (GP = numero de
unidades de glucosa que conforman un polisacárido) promedio de 15 y
45, respectivamente. La cadena -B- forma la columna de la molécula de
amilopectina y se extiende sobre dos o más cluster. Cada cluster
contiene de dos a cuatro cadenas -A- estrechamente asociadas. Un
cluster completo tiene aproximadamente 9 nm de largo.
9
Con el desarrollo de nuevas técnicas, el modelo de cluster fue
nuevamente analizado, esta vez por Hizukuri (1986), quien utilizó
cromatografía de permeación en gel y desramificación, para
desarrollar una estructura de cluster, en la cual podemos encontrar
cadenas tipo -A-, que no presentan ramificaciones; cadenas tipo -B-
las cuales pueden presentar ramificaciones por cadenas -A- o -B-. Las
cadenas –B- fueron divididas en cadenas -B1-, que al igual a las
cadena –A- se pueden encontrar en un sólo cluster, mientras que las
cadenas -B2-, -B3- y -B4-, se extienden sobre 2, 3 o 4 clusters,
respectivamente.
2.4 Organización del gránulo de almidón
En la naturaleza, la amilosa y amilopectina se encuentran en
forma semi-cristalina, en entidades llamadas gránulos, los cuales
pueden ser estudiados mediante microscopia electrónica de barrido
(MEB), la cual ha probado ser una herramienta efectiva para su
caracterización morfológica. Cuando los gránulos de almidón nativo
son sometidos a microscopia de luz polarizada, muestran un patrón de
birrifrigencia conocido como Cruz de Malta. Esta Cruz de Malta indica
un alto orden dentro del gránulo. En el centro de la cruz de Malta se
encuentra el hilum, el cual se cree, es el punto de inicio de la
biosíntesis (French, 1984).
Los gránulos de almidón presentan anillos de crecimiento
compuestos por regiones amorfas y cristalinas (figura 3), las cuales
rodean al hilum. La amilopectina llega a conformar clusters, los
cuales se alinean perpendicularmente a los anillos de crecimiento y
crecen a partir del hilum hacia la superficie del gránulo en un
arreglo radial (French, 1984).
10
Figura 3. Organización estructural del granulo de almidón en relación a sus dos estructuras cristalinas
y amorfas (Donald et al., 1997).
A) Microscopia electrónica de barrido de un granulo de almidón.
B) Estructuras semicristalinas separadas por láminas amorfas.
C) Visión de la apilación de las estructuras cristalinas y amorfas.
D) Lámina cristalina formada por las dobles hélices de la amilopectina mientras que las
laminas amorfas las constituyen los puntos de ramificación amilopectina.
A B C D
11
Las cadenas de la amilopectina son las responsables de las
regiones cristalinas dentro del gránulo, mientras que la región
amorfa esta formada por puntos ramificados de la amilopectina y
por la amilosa (Zobel, 1988).
Debido a que los gránulos son sintetizados en capas, se ha
sugerido que la amilosa es sintetizada a la par con la
amilopectina. Las ramificaciones de la amilopectina tienen una
mayor tendencia a interactuar entre ellas y formar estructuras
cristalinas constituidas por dobles hélices. Las ramificaciones
-(16) de la amilosa al igual que las ramificaciones de
la amilopectina, interactúan con otras cadenas para formar dobles
hélices. Así, la amilosa permanece amorfa en el granulo de almidón
e intermezclada con la amilopectina (Jane, 2006).
Estudios de gelatinización a diferentes proporciones de la
superficie del gránulo, en almidones de papa y maíz, usando
soluciones saturadas de LiCl y CaCl2, han demostrado que las
moléculas de amilosa están más concentradas hacia la periferia del
granulo, que en la parte central. El aumento en la concentración
de amilosa en la periferia del gránulo de almidón, hace posible
que incrementen las interacciones y asociaciones entre la amilosa
y amilopectina. La red de amilosa-amilopectina fuertemente
asociada en la perifereria del gránulo, proporciona una menor
susceptibilidad a la hidrólisis enzimática y resulta en una
digestibilidad menor (Jane, 2006).
La difracción de rayos X puede utilizarse para examinar la
naturaleza cristalina de los gránulos de almidón y para definir
las cantidades relativas de las áreas amorfas y cristalinas dentro
del gránulo. Las dobles hélices, formadas por las cadenas de la
amilopectina, se pueden ordenar en tres arreglos, lo cual da lugar
a tres patrones de difracción de rayos X: almidón tipo A, B y C
(Zobel, 1988) (figura 4). Estas dobles hélices son estabilizadas
12
por puentes de hidrogeno y fuerzas de Van der Waals (Imberty et
al., 1991)
El polimorfismo tipo A es encontrado regularmente en la
mayoría de los cereales y algunas raíces (yuca y camote), las
dobles hélices de la amilopectina están empaquetadas en forma
monoclínica y contienen de 4-8 moléculas de agua; el polimorfismo
tipo B, por lo regular es encontrado en tubérculos y raíces (papa
y canna) y presentan dobles hélices de amilopectina empaquetadas
en forma hexagonal y con 36 moléculas de agua (figura 5). Por otra
parte, el polimorfismo C, es una mezcla de los polimorfismos A y
B, es característico de almidones de leguminosas (Buleon et al.,
1998; Imberty et al., 1991).
2.5 Propiedades funcionales del almidón
2.5.1 Gelatinización
Los gránulos de almidón no son solubles en agua a
temperatura ambiente, debido a su estructura semicristalina.
Cuando el almidón se encuentra con suficiente agua, los gránulos
absorben una pequeña cantidad de ésta y se hincha hasta cierto
limite (30-50 % peso seco de almidón) (French 1984). Este proceso
es reversible antes de que se alcance la temperatura de
gelatinización. Mediante el calentamiento de los gránulos de
almidón en exceso de agua y sobrepasando la temperatura de
gelatinización, los gránulos de almidón pierden su orden molecular
manifestándose en cambios irreversibles en las propiedades tales
como: pérdida de la estructura cristalina nativa (solubilización)
y pérdida de la birrefringencia (Atwell, 1988).
13
Figura 4. Patrones de difracción de almidones tipo A, B y C
(Spence y Jane, 1999).
14
Figura
Figura 5. Empaquetamiento de las dobles hélices de amilopectina
en base al tipo de polimorfismo (Gallant et al., 1997).
15
Este proceso es conocido como gelatinización. La
gelatinización del almidón es un proceso endotérmico que
corresponde a la disociación de las moléculas de almidón, las
cuales se encuentran en una conformación con dobles hélices y
pasan a una conformación amorfa. La temperatura de gelatinización
y el incremento en la entalpía de gelatinización, pueden ser
determinados utilizando calorimetría barrido diferencial (CBD). El
pico en una endoterma de CBD refleja la pérdida de dobles hélices
de la amilopectina (Srichuwong y Jane, 2007).
2.5.2 Retrogradación
La retrogradación se presenta durante el almacenamiento
prolongado de las dispersiones de almidón gelatinizado. Las
moléculas de almidón, que tras la gelatinización, se presentan en
forma amorfa, gradualmente se reasocian formando cristales, que
están compuestos por las dobles hélices del almidón. La formación
de dobles hélices se debe a interacciones hidrofobicas y puentes
de hidrogeno, las cuales se forman entre las cadenas del almidón.
Las moléculas de amilosa retrogradan mucho más rápido que las
moléculas de amilopectina. La formación de dobles hélices en las
moléculas de amilosa se presentan inmediatamente después de la
gelatinización, por lo cual, la amilosa es la responsable de los
cambios reológicos iniciales de las pastas de almidón. Por su
parte, la retrogradación de la amilopectina es más lenta, y puede
presentarse a lo largo de días o semanas, debido a su estructura
altamente ramificada. La velocidad de retrogradación depende de
varios factores como: la longitud de las cadenas de la
amilopectina, de la concentración de lípidos y derivados monoester
y fosfatos (Srichuwong y Jane, 2007).
16
2.5.3 Propiedades de formación de pasta.
El término “pasta de almidón” engloba varios procesos:
hinchamiento del gránulo, lixiviación de componentes a partir del
gránulo (principalmente amilosa), y eventualmente la
desintegración del gránulo, como es mostrado en la figura 6
(Atwell, 1988).
La amilopectina es la principal responsable del hinchamiento y
viscosidad de la pasta de almidón (Tester y Morrison, 1990).
Durante el hinchamiento de los gránulos, los puentes de hidrógeno
entre las cadenas de almidón se disocian y son reemplazados con
puentes de hidrógeno con las moléculas de agua, lo cual incrementa
la viscosidad. La amilosa es el principal componente que lixivia
el gránulo y la concentración de la amilopectina solubilizada,
incrementa conforme la temperatura aumenta. En general, las
propiedades de formación de pasta de los almidones son afectadas
por la concentración de almidón, velocidad de calentamiento y
esfuerzo de corte aplicado, contenido de amilosa del almidón,
estructura molecular de la amilopectina, tamaño de gránulo y
contenido de componentes minoritarios (Srichuwong y Jane, 2007).
Los cambios de viscosidad en las dispersiones de almidón
durante el calentamiento, comúnmente son medidos con instrumentos
llamados viscoamilografos (Brabender) y analizadores rápidos de
la viscosidad (ARV). Estos aparatos llevan a cabo programas de
mezclado, calentamiento y enfriamiento, que generan perfiles de
gelatinización y retrogradación altamente reproducibles. Las
unidades de medida son unidades brabender (UB) y unidades de
viscosidad rápida (UVR), para un viscoamilografo y ARV,
respectivamente (Thomas y Atwell, 1999).
17
Figura 6. Representación esquemática de las propiedades de formación de pasta del almidón (Srichuwong y
Jane, 2007).
18
Un perfil típico de viscosidad registrado por un ARV es
presentado en la figura 7. Durante la fase inicial de
calentamiento, se registra un aumento de la viscosidad, como
indicativo de que los gránulos de almidón comienzan a
hincharse. En este punto, los polímeros con bajo peso
molecular, particularmente las moléculas de amilosa, comienzan a
lixiviar a partir del granulo. Durante la formación de pasta, se
obtiene un pico de viscosidad, lo cual representa que la mayoría
de los gránulos se han hinchado. Durante el rompimiento
(BreakDown), la temperatura se mantiene a 95 °C, registrándose una
disminución de la viscosidad, debido al rompimiento de los
gránulos hinchados, a la disociación de la amilosa y a que las
moléculas de almidón continúan solubilizandose. Por ultimo, en la
fase de enfriamiento, la amilosa y amilopectina solubilizadas
empiezan a reasociarse manifestándose otro incremento en la
viscosidad, el cual es conocido como la viscosidad de
recuperación (Set-Back) (Thomas y Atwell, 1999).
2.6 Fuentes y usos del almidón
Ningún otro ingrediente alimenticio se compara con el
almidón en términos de versatilidad de aplicación en la industria.
Este carbohidrato fue diseñado por la naturaleza para fungir como
almacén de energía. Sin embargo, el hombre ha extendido su uso más
allá de su diseño original (Taggart, 2004).
Casi todas las industrias han encontrado algún uso para el
almidón. En la industria de alimentos, el almidón ha sido
utilizado para impartir propiedades funcionales a los alimentos,
tales como: agente espesante, encapsulante, impartir sabor, como
relleno, etc.
19
Figura 7. Perfil de viscosidad, obtenido con un analizador rápido
de la viscosidad (Zhou et al., 1998)
20
El almidón es utilizado en sopas enlatadas, postres,
helados, carnes procesadas, salsas, productos horneados, entre
otros. El almidón también puede ser convertido en azúcar; es
utilizado para fabricar edulcorantes, jarabes y enzimas para la
producción de glutamato monosódico, un potenciador de sabor. Los
usos del almidón en las industrias no-alimenticias son tan
diversos como en la industria alimenticia, los principales usos
incluyen las industrias: textil, papel, adhesivos y farmacéutica
(Fuglie y Oates, 2001).
En el 2006, el Instituto Internacional del Almidón, reportó
que el maíz es la principal fuente de obtención del almidón a
nivel mundial, seguido de la papa, el camote y la yuca. La mayor
parte de los almidones comerciales se produce a partir de maíz y
papa; más del 80% del almidón que se produce a nivel mundial se
obtiene de maíz, principalmente en Estados Unidos. Europa es el
mayor productor de almidón de trigo y papa; en Asia se produce
almidón a partir de yuca y tapioca; en varios países se produce en
menor proporción almidón de arroz y camote (Jobling, 2004; Huang
et al., 2007).
2.6.1 Fuentes no convencionales
El almidón extraído de las diversas fuentes botánicas tiene
diferentes propiedades. Las industrias requieren de almidones
específicos para la fabricación de sus productos. Además, siendo
el maíz el más utilizado y debido a la problemática en su precio
de venta, hoy en día la búsqueda de fuentes alternativas ha tomado
más fuerza.
El almidón de algunas fuentes no convencionales ha sido
estudiado en estado nativo; se pueden mencionar los siguientes:
avena, frijol, chícharo, lenteja, tubérculo de chayote, jicama,
21
sorgo, yam chino, taro, sago (Kim et al., 1997; Perez et al.,
1997; Hoover et al., 2003; Srichuwong et al., 2005; Jiménez-
Hernandez et al., 2007; Stevenson et al., 2007; Sandhu y Lim,
2008;).
Numerosos tipos de frutas acumulan almidón durante su
desarrollo. Sin embargo, la caracterización de almidones de frutos
ha recibido poca atención, debido a que pocas frutas contienen
altos niveles de almidón cuando son consumidas. Se cuenta con
trabajos reportado de almidón de: calabaza (Cucurbita maxima D.),
manzana (Malus domestica Borkh), Kiwi (Actinidia deliciosa),
plátano (Musa paradisiaca L.), y mango (Mangifera indica L.)
(Bello-Pérez et al., 2000, 2005a; Stevenson et al., 2005, 2006a,
2006b;), entre ellos el plátano ha recibido mayor atención.
2.6.1.1 Plátano
El plátano (Musa Paradisíaca L) tuvo su origen en Asia
meridional, siendo conocido en el Mediterráneo desde hace 650 años
atrás. El plátano llegó a Canarias en el siglo XV y desde allí fue
llevado a América en el año 1516. El plátano pertenece a la
familia de las Musáceas teniendo dos variedades principales M.
cavendish (plátanos comestibles cuando están crudos) y M.
paradisíaca (plátanos machos o para cocer).
El plátano es el cuarto cultivo más importante del mundo,
después del arroz, el trigo y el maíz. Además de ser considerado
un producto básico y de exportación, el plátano constituye una
importante fuente de empleo e ingresos en numerosos países en
desarrollo (Zhang et al., 2005).
El plátano es considerado el principal cultivo de las
regiones húmedas y cálidas del sudoeste asiático. La producción
mundial de plátano en el año del 2003 fue estimada en 102 millones
22
de toneladas métricas (TM). Latinoamérica y las Islas del Caribe
cubren el 80% de las exportaciones de este fruto a nivel mundial
(FAO, 2003).
Se ha reportado que el fruto del plátano en estado inmaduro
contiene 70-74% de humedad, 1% de proteína, 0.3-0.5% de grasa, 20-
30% de carbohidratos totales, 0.5% de fibra bruta, 3.5% de fibra
dietaria y el 1% de cenizas (Tobin y Muller, 1988; Chávez et al.,
1992). Cabe destacar que el polisacárido predominante en el
fruto del plátano en estado inmaduro es el almidón; Flores-
Gorosquera et al. (2004), llevaron a cabo el aislamiento del
almidón en el fruto del plátano y ellos reportaron que obtuvieron
una pureza del 95%.
2.6.1.2 Mango
El mango es nativo del noroeste de la India, de las laderas
del Himalaya, de donde se ha distribuido desde épocas remotas por
todo el suroeste de Asia y Archipiélago Malayo.
El cultivo del mango es probablemente un híbrido natural
entre M. indica y M. sylvatica, que ocurrió en el noroeste de la
India, entre las laderas del Himalaya y Sri Lanka, 400 años
atrás. El mango fue introducido en el continente Americano,
llegando primeramente a Brasil en el año de 1700 y tiempo después
a Florida y México en el año de 1800 (Infoagro, 2006). El mango se
cultiva en todos los trópicos y subtrópicos del mundo.
El mango (Mangifera indica L) pertenece a la familia de las
Anacardiaceae. El género Mangifera comprende aproximadamente 50
especies nativas del suroeste de Asia. Mangifera indica L.,
variedad “Tommy Atkins”, es una variedad que se logró en la década
de 1920 en Fort Lauderdale, Estado de Florida (EUA). El árbol es
de copa redonda, densa, los frutos son de tamaño mediano a grande
23
(400-600 g), de cáscara gruesa y forma oval-oblonga, de semilla
pequeña (representa el 7-8 % con relación a la pulpa). En la
madurez adquiere el color rojo y tono púrpura. La pulpa es firme y
jugosa, posee cierta cantidad de fibra y es de buena calidad
(Aguirre, 1998).
El fruto del mango es de alta aceptación para el consumo
humano. En su estado de madurez, estado en el cual es usualmente
consumido, la porción comestible representa entre 60 y 75% del
peso total del fruto. El mango contiene 84% de agua, 15% de
azúcares y 0.5% de proteínas. También, es una fuente excelente
de muchas vitaminas, reportándose contenidos de vitamina C hasta
de 300 mg por 100 g de pulpa (Singh y Chada, 1961). Los minerales
presentes en mayor proporción en el mango son el magnesio, el
calcio, el sodio y el fósforo. El carbohidrato predominante en el
mango verde es el almidón, que en la fruta madura es reemplazado
en gran parte por sacarosa, glucosa, y fructuosa.
Guilbot y Mercier (1985) reportaron un contenido de almidón
en el fruto del mango verde de un 70% en base seca.
2.7 Estudios estructurales
La masa molecular y el tamaño de la molécula de
amilopectina, es más grande que cualquier otro polímero natural o
sintético. Debido a ello, la estructura del almidón no es del todo
bien entendida. Técnicas cromatográficas, tales como cromatografía
de permeación en gel (Jane y Chen, 1992; Wang et al., 1993),
cromatografía líquida de alta resolución por exclusión de tamaño
(Yuan et al., 1993) y cromatografía líquida de alta resolución por
intercambio aniónico (Jane et al., 1999), han sido utilizadas para
el estudio de las ramificaciones de las moléculas de amilopectina.
24
2.7.1 Peso molecular y radio de giro
La falta de estándares de calibración, principalmente
debido al tamaño grande de la amilopectina, causa dificultad en la
determinación de su peso molecular utilizando cromatografía por
exclusión de tamaño (CLARET). La técnica de dispersión de luz
multi-ángulos combinada con CLARET, es una herramienta poderosa
para determinar el peso molecular absoluto de macromoléculas tales
como el almidón (Aberle et al., 1994). Una buena separación entre
la amilopectina y amilosa, es un requisito para conducir una
medida exacta del peso molecular de la amilopectina utilizando
esta técnica. (Yoo y Jane, 2002b)
Los métodos utilizados para obtener la completa disolución
de la dispersión de almidón, sin llegar a romper los enlaces
covalentes, son críticos para el análisis cromatográfico. Una
dispersión de almidón pobremente disuelta, da como resultado
moléculas de amilopectina/amilosa insolubilizadas lo cual afecta
el resultado de la masa molecular (MM) y radio de giro (RG), el
cual es la raíz cuadrada de la distancia media de los diferentes
elementos desviados a partir del centro de la masa. determinado
por la técnica de dispersión de luz estática (Yoo y Jane, 2002b).
Cuando la muestra es inyectada en el sistema CLARET, la
solución es llevada a través de una columna (fase estacionaria)
por una fase móvil, a diferentes velocidades y con volumen de
separación por la columna. Las moléculas grandes son eluidas más
rápidamente que las moléculas pequeñas, porque las primeras
tienen menos penetración dentro de los poros de la columna.
Posteriormente, las moléculas eluidas pasan a través del
detector de dispersión de luz, en cualquier instante las moléculas
suspendidas tendrán una serie particular de posiciones dentro del
volumen de desvío, las moléculas desvían la radiación del
detector, las fases relativas de las ondas desviadas cambian
25
debido a que las fases incidentes difieren en esas posiciones y
también en las distancias partícula-detector (Bello-Pérez, 1995).
El detector de dispersión de luz permite obtener la masa molar
(MM) y radio de giro (RG). Teniendo en cuenta que a una
concentración (g/ml) dada, la señal de luz dispersada es
proporcional al MM , por lo cual, con pesos moleculares bajos, se
requieren altas concentraciones para producirse una señal en el
detector de luz.
Las técnicas CLARET y dispersión de luz, requieren de la
determinación en serie de la concentración para cada fracción de
elusión. A altos pesos moleculares y bajas concentraciones se
tiene dificultad para determinar la concentración utilizando los
métodos convencionales (cuantificación del índice de refracción).
Por lo que, se requiere una determinación correcta del incremento
de índice de refracción (dn/dc). El detector de índice de
refracción es un instrumento capaz de medir las diferencias en el
índice de refracción entre el disolvente y la solución, ya que el
índice de refracción de la solución cambia a medida que lo hace la
concentración de la sustancia disuelta, y así se puede entonces
deducir el cambio de concentración de un soluto diluido (Wyatt,
1993).
Para cada tiempo de elusión le corresponde un volumen, la
concentración se calcula del diferencial de la respuesta del
índice de refracción. Siguiendo esta determinación, la medición de
la luz dispersada utilizando los 18 fotodiodos del detector Heleos
permite, la determinación de la MM y RG de los α-glucanos empleando
el programa ASTRA V 5.1.9.1. (Wyatt, 1993).
26
2.7.2 Distribución de la longitud de las cadenas de la
amilopectina
Uno de aspectos más comúnmente reportados de la estructura
del almidón, es la distribución de la longitud de sus cadenas.
Cuando el almidón es sometido a hidrólisis con enzimas
desramificantes (isoamilasa o pululanasa), los enlaces -(16)
son hidrolizados para producir una mezcla de cadenas lineales. Los
métodos comúnmente utilizados para caracterizar la longitud de las
cadenas del almidón desramificado son: la cromatografía líquida de
alta resolución por exclusión de tamaño (CLARET) y la
cromatografía líquida de alta resolución por intercambio aniónico
(CLARIA). La CLARET proveé una descripción de todas las cadenas
presentes en la dispersión de almidón desramificado, pero no puede
dar información acerca de un determinado GP. Por su parte CLARIA
provee información para un GP individual, pero sólo para cadenas
con GP de un máximo (bajo circunstancias ideales) de alrededor de
80 GP (Yao et al., 2005).
Recientemente, se introdujeron técnicas que emplean
marcadores fluorescentes para el estudio de la amilopectina
(Morell, 1998; Hanashiro et al., 2002; Nakamura et al., 2002). La
distribución de longitud de las cadenas puede ser determinada
mediante electroforesis capilar equipada con un detector de
fluorescencia inducida por laser. El marcaje con fluoroforo
permite la cuantificación directa de la distribución en base molar
de las cadenas de glucosa.
Para poder llevar a cabo esta técnica, primero se debe de
realizar la desramificación de la molécula de amilopectina. Una
vez desramificada, se procede a el marcaje con el compuesto
fluoróforo. La aminación reductiva, ha sido utilizada como un
medio para el marcaje de los extremos reductores de las cadenas,
introduciendo un fluoróforo a su molécula. La introducción de un
27
sólo marcador en el extremo reductor, permite la cuantificación en
base molar. La aminación reductiva de la glucosa con acido-8-
amino-1,3,6-pirenetrisulfonico (APTS) está representada en la
figura 8 (O´Shea et al., 1998).
2.8 Relación estructura – función
Debido a que la amilopectina es el componente principal en
la mayoría de los almidones, las variaciones en su estructura
puede resultar en gránulos de almidón con diferentes propiedades
fisicoquímicas, funcionales y de digestibilidad.
Estudios realizados por Yuan et al. (1993) con
amilopectinas provenientes de diferentes genotipos de maíz ceroso,
encontraron que las amilopectinas que presentaban una mayor
proporción de cadenas largas, tenían mayor tendencia a
retrogradar, que aquellas que mostraron una mayor proporción de
cadenas cortas.
Jane et al. (1999) observaron que los almidones tipo B,
mostraban una temperatura de gelatinización menor que los
almidones tipo A, cuando ellos presentaban el mismo tipo de
distribución de cadena. Lo cual se atribuyó a una estructura
cristalina altamente compacta.
Vandepputte et al. (2003) reportaron que el porcentaje de cadenas
B1 (GP 13-24) presentaban una correlación positiva con la
temperatura de gelatinización de inicio en almidones de arroz,
mientras que el porcentaje de cadena corta A (GP ≤ 12)
correlacionaban negativamente con la temperatura de gelatinización
de inicio.
28
Figura 8. Aminación reductiva con APTS (A) y marcaje con APTS de
amilopectina desramificada (B) (O’Shea et al., 1998).
A
B
29
Los almidones que contienen amilopectinas con mayor
proporción de ramificaciones de GP 6-12 muestran una temperatura
de formación de pasta, viscosidad de pico menor y una viscosidad
de rompimiento (breakdown) mayor y esto es debido a que las
cadenas cortas no proveen interacciones fuertes para mantener la
integridad de los gránulos hinchados. De esa manera, los gránulos
se desbaratan durante el calentamiento, lo cual resulta en bajas
valores de viscosidad pico (Stevenson, 2003).
30
III. JUSTIFICACIÓN
En el mercado existen fuentes convencionales para el
aislamiento del almidón como son maíz y papa, las cuales son
fundamentales para la alimentación humana. Se ha considerado
buscar fuentes alternativas de almidón, como el mango y el
plátano, los cuales pueden presentar diferentes propiedades
funcionales a los almidones de fuentes convencionales y por lo
tanto, sean usadas para nuevas aplicaciones o el desarrollo de
nuevos productos.
El grupo de trabajo del Departamento de Desarrollo
Tecnológico ha estudiado las características fisicoquímicas y
funcionales de los almidones de plátano y mango, encontrándose que
estos almidones podrían tener una diversidad de aplicaciones a
nivel industrial.
En los últimos años, ha cobrado gran interés el estudio de
la relación estructura-función, para poder explicar cómo la
estructura repercute en las propiedades funcionales de los
almidones y con esto, buscar las mejores aplicaciones.
.
31
IV. OBJETIVOS
4.1 Objetivo general
Determinar las características estructurales y fisicoquímicas
de almidones de fuentes no convencionales: mango (Mangifera indica
L.) y plátano (Musa paradisiaca L.).
4.2 Objetivos específicos
Determinar la distribución de la longitud de las cadena de la
amilopectina en los almidones mediante electroforesis capilar
asistida con un fluoróforo
Determinar la masa molecular (MM) y el radio de giro (RG) de
los almidones mediante cromatografía líquida de alta
resolución por exclusión de tamaño acoplada a detectores de
dispersión de luz multiángulos e índice de refracción
(CLARET-DDLMA-IR).
Evaluar las propiedades fisicoquímicas de gelatinización y
retrogradación mediante calorimetría diferencial de barrido,
así como la formación de pasta mediante análisis rápido de
viscosidad.
Relacionar las características estructurales con las
propiedades fisicoquímicas, para sugerir posibles
aplicaciones de los almidones.
32
V. MATERIALES Y METODOS
5.1 Materia Prima
Se obtuvieron almidones de mango (Mangifera indica L.)
variedad “Tommy Atkins” y plátano (Musa paradisiaca L.) variedad
“macho”, en el Departamento de Desarrollo Tecnológico del Centro
de Desarrollo de Productos Bióticos perteneciente al IPN. El
almidón de maíz normal fue adquirido de la empresa Sigma-Aldrich.
Este último fue utilizado como estándar en todas las mediciones
realizadas. Todos los compuestos fueron grado reactivo.
5.2 Métodos
A continuación se muestra un diagrama de los procedimientos
realizados a los almidones de mango y plátano (figura 9)
33
Figura 9. Diagrama con los procedimientos experimentales realizados a las muestras de almidón de mango, plátano y maíz normal.
Almidón
Estudios Estructurales
Propiedades Funcionales
Amilosa Aparente
Tratamiento Con DMSO 90%
Análisis Rápido de Viscosidad
Calorimetría de barrido diferencial
Almidón Total
Difracción de Rayos X
Microscopia electrónica De barrido
Masa molecular (MM) y Radio de giro (RG)
Fraccionamiento del Almidón
Distribución de la longitud de las cadenas
de amilopectina
Relación Estructura - función
34
5.2.1 Almidón total
Para verificar la pureza del almidón aislado se cuantificó el
contenido de almidón total (AT) por el método enzimático de Goñi et
al. (1997). Para ello se pesaron 50 mg de muestra en tubos de
centrifuga de 50 mL de capacidad. Se añadieron 3 mL de agua destilada
y 3 mL de KOH 4 M, se mezcló y agitó vigorosamente a temperatura
ambiente durante 30 minutos. Se añadieron aproximadamente 5.5 mL de
HCl 2 M y 3 mL de regulador de acetato sódico 0.4 M, se ajustó a pH
4.75. Se añadieron 60 μL de suspensión de amiloglucosidasa. Se mezcló
e incubó a 60 °C durante 45 min en un baño de agua con agitación. Se
centrifugó (15 min, 3000 rpm) y se recogieron los sobrenadantes en
matraces aforados de 50 mL. Se adicionaron al menos una vez, 10 mL de
agua destilada con la finalidad de realizar los lavados de la muestra
remanente en los tubos, se realizó la centrifugación correspondiente
y se recuperó el sobrenadante. Se aforó el matraz y se evaluó el
contenido de glucosa con el reactivo de glucosa oxidasa/peroxidasa
(GOD/POD), para ello: a) en tubos de ensayo, se transfirieron con una
pipeta 50 μL de la muestra, b) se añadió 1 mL del reactivo de
glucosa. Los tubos se incubaron en un baño con agitación durante 15
min a 37 °C, c) Se leyó la absorbancia a 510 nm. El porcentaje de
almidón total se calculó empleando las siguientes ecuaciones:
ml
g
muestrag
xxvolumenxml
aglug
AT_
1009.0cos__
%
Donde: Volumen = 50 mL 0.9 = Factor de conversión de glucosa a almidón
Absorbancia de la muestra
Absorbancia del estándar de glucosa
g de glucosa
35
5.2.2 Contenido de amilosa aparente
La concentración de amilosa fue determinada mediante un método
potenciométrico, siguiendo la metodología de Jane et al. (1999). Para
lo cual 3 g de almidón fueron desgrasados utilizando metanol al 85%
en un equipo soxhlet durante 24 horas. El almidón fue resuspendido en
10 mL de etanol y centrifugado a 7000 rpm durante 20 min.
Posteriormente fue filtrado a través de un filtro de celulosa
Whattman tamaño 1 (11 m tamaño de poro) y secados en un horno a 50
C durante toda una noche. Se colocaron 100 mg de almidón desgrasado
en un vaso de precipitado. Se humectó el almidón con 1 mL de agua y
se puso en agitación durante 10 min. Se agregó 5 mL de KOH 1 N y se
continúo con la agitación por 30 min (colocando el vaso de
precipitado sobre hielo, para evitar una posible degradación de las
moléculas del almidón). Se neutralizó la solución con HCl 0.5 N y
para ver el cambio de pH se agregaron unas gotas de naranja de
metilo. Se adicionaron 10 ml de una solución de KI 0.5N. Se agregó
agua hasta obtener un peso de muestra de 100.9 g.
Las afinidades al yodo del almidón desgrasado fueron
cuantificadas usando un titulador potenciométrico automático (702 SM
Tirino, Metrohm, Herisau, Suiza). El análisis fue realizado por
triplicado para cada muestra.
5.2.3 Microscopía electrónica de barrido
La morfología de los gránulos de almidón fue analizada
mediante microscopia electrónica de barrido. Los gránulos de almidón
fueron esparcidos sobre una cinta conductora de plata, la cual fue
montada sobre un disco de latón. Posteriormente los gránulos fueron
recubiertos con oro y paladio, en una proporción 60/40, usando el
36
equipo Polaron E5100 (Polaron equipment Ltd., Watford, UK). Las
imágenes de los gránulos de almidón fueran capturadas a una
magnificación de 1500X usando un microscopio electrónico de barrido
modelo JSM-5800LV (JEOL, Tokio, Japón).
5.2.4 Difracción de rayos X
El patrón de cristalinidad del almidón fue estudiado mediante
difracción de rayos X, las muestras fueron equilibradas en una cámara
de humedad relativa al 100 % y a temperatura ambiente durante 24
horas. Los patrones de difracción de rayos X de los almidones fueron
obtenidos mediante un difractómetro (D-500, Siemens, Madison, WI). El
difractometro fue operado a 27 mV y 50 kV. La región de búsqueda o
barrido con ángulo dos teta (2) fue de 4° a 40° con un tamaño de
paso de 0.05°, con un tiempo de conteo de 2 segundos. El porcentaje
de cristalinidad fue calculado utilizando la siguiente ecuación:
100)(
(%) xAA
AdadCristalini
aC
C
Donde Ac= área cristalina bajo el difractograma de rayos X Aa= área amorfa bajo el difractograma de rayos X.
5.2.5 Tratamiento del almidón con dimetil sulfóxido (DMSO) al
90 %
El uso del almidón en productos alimenticios y no alimenticios
comúnmente requiere la disolución en un medio acuoso, para disolver
el almidón usualmente se utiliza el calentamiento y/o agitación. Sin
embargo, las cadenas de los componentes del almidón en soluciones
37
acuosas neutras tienen una limitada estabilidad y constantemente
sufren cambios físico-químicos. Por este motivo, el análisis de la
estructura del almidón se dificulta en un medio acuoso. Un disolvente
comúnmente usado para el almidón es el dimetil sulfóxido (DMSO). Para
dispersar adecuadamente el almidón en DMSO es necesaria una pequeña
cantidad de agua, para prevenir el rápido hinchamiento del gránulo.
Una capa del gel formada en la superficie del gránulo debida a el
hinchamiento, impediría que el DMSO penetrara al gránulo (Han y Lim,
2004).
El tratamiento del almidón con dimetil sulfóxido fue llevado
siguiendo la metodología de Yoo y Jane (2002a). Para lo cual 100 mg
de almidón fueron humectados con 1.0 mL de agua y agitados durante 10
min, posteriormente se dispersaron en 9 mL de DMSO, para obtener una
solución de DMSO al 90 %. La suspensión fue agitada mecánicamente
durante 1 h mientras era calentada en un baño de agua hirviendo, en
el que se mantuvo en agitación durante 24 h a 25 C. Una alícuota
(2mL) de la dispersión se mezcló con 4 volúmenes de etanol (8 mL)
para precipitar el almidón. El almidón fue separado mediante
centrifugación a 7000 rpm durante 20 min. El almidón fue entonces
redisuelto en 5 mL de agua caliente (se obtuvo una concentración de 4
mg /mL) y fue agitado durante 30 min en un baño de agua hirviendo. La
muestra se filtró a través de una membrana de nylon de 5.0 m tamaño
de poro.
5.2.6 Cromatografía de permeación en gel (CPG)
El fraccionamiento de los componentes del almidón fue llevado
a cabo mediante cromatografía de permeación en gel (CPG) siguiendo el
método de Song y Jane (2000), 5 mL de dispersión de almidón (4mg/mL)
38
pretratado con DMSO (90 %) fue inyectada en una columna de [2.6 cm
(diámetro interno) x 90 cm (longitud)] empacada con gel sefarosa CL-
2B (Pharmacia Inc., Piscataway, NJ). La columna eluyó en forma
ascendente. Una solución de 1 M de NaCl, 40 mM de NaOH y 0.8% NaN3
fue utilizada como fase móvil a una velocidad de 30 mL/h.
Colectándose fracciones de 4.8 mL para posteriormente analizarse
mediante las técnicas de carbohidratos totales (fenol - acido
sulfúrico) (Dubois et al., 1956) y valor azul (tinción con Yodo)
(Juliano, 1971) en un espectrofotómetro automático, modelo ELx 808
(Bio-Tek Instruments, Inc. Winooski USA.) a 490 y 630 nm,
respectivamente.
Con los cromatogramas se determinaron las fracciones donde se
localizó la amilopectina. Estas fueron colectadas, se les ajustó el
pH a 7.0 y se concentró la dispersión en un rotavapor (modelo R,
Büchi Labortechnik AG Meierseggstrasse, Suiza), cuidando que la
amilopectina no quedara pegada en las paredes del matraz. Una vez
concentrada la dispersión, se precipitó con 4 volúmenes de etanol y
se dejó reposar en un refrigerador durante toda la noche. Al otro día
se centrifugó a 7000 rpm durante 20 min y se seco en un horno a 50
C.
5.2.7 Electroforesis capilar asistida con un fluoróforo
(ECAF)
La longitud de cadena de la molécula de amilopectina fue
determina de acuerdo a los métodos descritos por O´Shea y Morrell
(1996) y O´Shea et al. (1998). Para lo cual 20 mg de amilopectina
fueron humectados con 0.5 mL de agua desionizada y agitados por 10
min. A continuación fueron agregados 4.5 mL de DMSO y la dispersión
39
fue colocada en un baño de agua hirviendo bajo agitación magnética,
se agitó durante 12 horas y fue precipitada agregando 4 volúmenes de
etanol, separada mediante centrifugación a 7000 rpm durante 20 min.
Se agregó 10 mL de agua desionizada y filtrada a través de una
membrana 0.02 m tamaño de poro, con lo cual se obtuvo una dispersión
de 2 mg/mL. La que ebulló por 30 min, al término de este, se filtró a
través de una membrana de 5 m (tamaño de poro). Se tomaron 80 L de
la dispersión antes mencionada y se agregaron 19 mL de una solución
amortiguadora de acetato de sodio (pH = 3.5) y 1 L (1U = unidad de
actividad de enzima) isoamilasa obtenida de Pseudomonas sp.
(Megazyme, wicklow, Ireland), la muestra fue puesta en incubación por
2 horas a 40 C, con lo cual se logró la desramificación de la
molécula de amilopectina debido a que esta enzima hidroliza enlaces
-(16). Esta desramificación generó cadenas lineales con diferentes
grados de polimerización (GP). Para inactivar la enzima la muestra se
ebulló durante 10 min. Posteriormente se colocaron 50 L de esta
solución en tubos eppendorf para ser secados al vacío. Una vez secada
la muestra se agregaron 2 L de solución de APTS (acido 8-amino
1,3,6-pirenotrisulfonico) y 2 L de NaBH3CN (cianoborohidruro de
sodio) agitados en un vortex e incubados durante 18 h a 40 C, con
este paso se lograron marcar a las cadenas lineales de la
amilopectina con un fluoróforo. Se agregaron 46 L de agua destilada,
desionizada y filtrada (membrana con tamaño de poro de 0.02 m). Se
mezcló en vortex y se centrifugó a 7000 rpm por 2 min. Se tomaron 10
L de la solución y se colocaron en tubos de PCR (reacción en cadena
de la polimerasa), se agregó 190 L de agua y se cuantificó la
longitud de las cadenas mediante electroforesis capilar con un
detector de luz uv. Para lo cual se utilizó el equipo P/ACE MDQ
Glycoprotein system (Beckman Coulter, Inc. Fullerton, CA. USA).
40
5.2.8 Cromatografía de alta resolución por exclusión de tamaño
(CLARET) acoplada a detectores de dispersión de luz
multi-ángulos (DDLMA) e índice de refracción (IR)
El peso molecular de la amilopectina es más grande que
cualquier otro polímero natural o sintético conocido. Por lo tanto,
no hay compuestos que sean utilizados como referencia para la
calibración de los cromatogramas de permeación en gel. La masa
molecular promedio de amilopectinas determinado mediante CLARET-
DDLMA-IR muestran valores en un intervalo de 108 a 109 Da, para una
amplia variedad de amilopectina provenientes de diferentes fuentes
botánicas, incluyendo cereales, raíces y tubérculos.
El peso molecular y radio de giro de las moléculas de
amilopectina fueron determinadas mediante el sistema de cromatografía
líquida de alta resolución por exclusión de tamaño acoplado a
detectores de dispersión de luz multiángulos e índice de refracción
(CLARET-DDLMA-IR), siguiendo la metodología utilizada por Yoo y Jane,
(2002b). Los almidones pretratados con DMSO al 90%, fueron inyectados
al sistema CLARET-DDLMA-IR a una concentración de 0.3 mg/mL, EL
sistema CLARET-DDLMA-IR consistió de una bomba isocrática HP 1050
(Hewlett Packard, Valley Forge, PA) equipada con una válvula de
inyección (100 L de capacidad, modelo 7125, Rheodyne), un detector
multiángulos de dispersión de luz (Dawn DSP-F, Wyatt Tech. Corp.,
Santa Barbara CA) con un láser de He-Ne (=632.8 nm) y una celda de
flujo K-5, un detector de índice de refracción HP 1047A RI (Hewlett
Packard, Valley Forge, PA). Para separar a la amilosa de la
amilopectina se utilizo una guarda columna Shodex OH pak KB-G y dos
columnas analíticas KB-806 y KB-804 (Showa Denko K.K., Tokio, Japan).
La temperatura del inyector y de las columnas fue mantenida a 55.0 C
usando un calentador de columna CH-460 y un controlador TC-50
41
(Eppendorf, Madison, WI). La temperatura del detector de índice de
refracción fue de 30 C. La fase móvil utilizada fue agua desionizada
y filtrada a través de una membrana de 0.02 m, cuya velocidad de
flujo fue 0.5 mL/min. Los resultados obtenidos de las señales de los
detectores DDLMA-IR fueron analizados mediante el software ASTRA
(version 4.7.07, Wyatt Technology, Santa Barbara. CA. USA).
5.2.9 Calorimetría de barrido diferencial (CBD)
Las propiedades térmicas de los almidones fueron determinadas
usando un calorímetro de barrido diferencial (DSC-7, Perkin-Elmer,
Norwalk, CT) (Jane et al., 1999). Aproximadamente 2 mg de almidón
fueron pesados en una charola de aluminio, mezclado con 6 mL de agua
desionizada y selladas herméticamente. Las muestras fueron
equilibradas durante 1 hora a temperatura ambiente, la prueba fue
llevada a cabo a una velocidad de calentamiento de 10 °C /min en un
intervalo de 10-100 °C. Una charola vacía fue utilizada como
referencia. La velocidad de retrogradación del almidón fue
determinada usando las muestras gelatinizadas, almacenadas a 4 °C por
7 días, y analizadas usando CBD. El porcentaje de retrogradación es
la relación entre la (HR)/(HG). El análisis de las propiedades
térmicas fue llevado a cabo por triplicado para cada muestra.
5.2.10 Análisis rápido de la viscosidad (ARV)
Las propiedades de formación de pasta fueron analizadas usando
un analizador rápido de la viscosidad (ARV) (RVA-4, Newport
Scientific, Sydney, Australia) (Jane et al., 1999). Se preparó una
suspensión de almidón (8% p/p), pesando 2.24 g de almidón en un bote
42
de ARV y se agregó agua destilada hasta un peso final de 28 g. La
suspensión de almidón fue equilibrada a 30 °C por 1 min y calentada a
una velocidad de 6.0 °C/min hasta 95 °C, posteriormente se mantuvo a
esa temperatura por 5.5 min, y se enfrió hasta 50 °C a una velocidad
de 6 °C/min. Se utilizó una velocidad de rotación de pala de 160 rpm
durante todo el análisis. La prueba fue realizada por triplicado.
5.2.11. Análisis estadístico.
Para determinar las diferencias estadísticas en las
propiedades funcionales y afinidad al yodo se aplicó un análisis de
varianza (ANOVA) de una vía. A un nivel de significancia de 5 % ( p =
0.05) y los parámetros estadísticos se calcularon empleando el
paquete estadístico Sigma Stat versión 2.03.
43
VI. RESULTADOS Y DISCUSION
6.1 Contenido de almidón total y amilosa aparente
El contenido de almidón total de los almidones de maíz normal,
mango y plátano fueron: 97.8, 96.6 y 96.8 %, respectivamente (Cuadro
1). La pureza de estos almidones fue alta, el resto de los contenidos
están dados por cenizas, proteínas o lípidos, presentes en los
almidones, pero en mínimas cantidades.
La afinidad al yodo y su correspondiente contenido de amilosa
aparente se muestran en la Cuadro 1. El contenido de amilosa fue
diferente en los tres almidones analizados. El almidón de plátano
presentó el mayor contenido de amilosa (36.2 %), seguido del mango
(31.1 %) y maíz normal (29.7%). La diferencia en el contenido de
amilosa se ve reflejada en las propiedades fisicoquímicas, debido a
que los almidones con altos contenidos de amilosa, producen geles más
firmes y claros, así como, mayores propiedades de retrogradación y
formación de películas.
El contenido de amilosa aparente encontrado en el almidón de
plátano, concuerda con los valores reportados por Aparicio-Saguilan
et al. (2005), que determinaron un contenido de amilosa aparente de
37 %, y por Hernández et al. (2008) quienes cuantificaron el
contenido de amilosa en almidón de plátano con un método
colorimétrico (40 %) y mediante cromatografía de permeación en gel
(46 %); El almidón de mango presentó valores similares al reportado
por Agustiano-Osornio et al. (2005), quienes obtuvieron un contenido
de amilosa aparente de 28.7 % para almidón de mango de la misma
especie utilizada en este estudio. Sin embargo, existen reportes de
contenidos de amilosa aparente menores, reportados para almidones
44
Cuadro 1. Almidón total, afinidades al yodo y contenido de amilosa
aparente de almidones.
Fuentes Almidón totala (%) Afinidad al yodoa (%)* Amilosa aparenteb (%)
Maíz normal 97.8 1.60 5.88 0.15a 29.7
Mango 96.6 1.66 6.21 0.17a 31.1
Plátano 96.8 0.92 7.23 0.26b 36.2
1. Promedio de tres replicas desviación estándar
2. Calculado como C=(100 x AI)/20, donde: C es el porcentaje de amilosa aparente y AI es la afinidad al yodo del almidón desgrasado.
* Letras iguales indican que no existe diferencias estadísticas significativas (p 0.05).
45
de mango de las variedades criollo (12.9%) y manila (13.3%) (Bello-
Pérez et al., 2005a); por su parte el almidón de maíz normal,
presentó un contenido de amilosa aparente semejante al encontrado por
Jane et al. (1999), para almidón de maíz normal (29.7%) y empleando
titulación potenciométrica.
6.2 Microscopia electrónica de barrido
La figura 10 muestra las imágenes de los gránulos de almidón
de maíz normal (A), mango (B) y plátano (C), obtenidas por el
microscopio electrónico de barrido. La forma de los gránulos de
almidón depende de la fuente botánica, y se encuentran en la
naturaleza en diferentes formas y tamaños. El tamaño de granulo del
almidón de maíz normal estuvo en el intervalo de 10-15 m, mostrando
formas redondas, ovaladas y poligonales.
Los gránulos de almidón de mango presentaron forma esférica,
forma de campana, divididos y algunas hendiduras, con tamaño de
gránulo promedio de 5–10 m. Bello-Pérez et al. (2005a) reportaron el
tamaño de gránulo para dos variedades de mango (criollo y manila),
las cuales concuerdan con los valores reportados en este estudio. Por
otra parte, este tipo de morfología ha sido encontrada en otras
frutas como la calabaza (Stevenson et al., 2005) y la manzana
(Stevenson et al., 2006a). Las hendiduras en los gránulos de almidón
de mango, podrían deberse a que no existe un crecimiento uniforme en
el gránulo durante su desarrollo, o a que estos colapsan durante el
proceso de secado. Los gránulos de almidón de plátano fueron los de
mayor tamaño, con una longitud promedio de 40 m y un radio promedio
de 20 m, dichos valores coinciden con otros reportes
46
Figura 10. Micrografía electrónica de barrido de almidones de maíz normal (A), mango (B) y plátano (C). (La barra en la parte inferior
de las fotografías corresponde a una escala de 20 m).
A
B
C
47
de tamaño de gránulo para almidones de plátano (Bello-Pérez et al.,
2000; 2005b; Jane et al., 1994).
El tamaño de granulo es un parámetro importante que afecta las
propiedades funcionales y fisicoquímicas. Se ha reportado que los
gránulos muy pequeños pueden absorber una mayor cantidad de agua, en
comparación con gránulos grandes, debido a una mayor área de
contacto (Paredes-López et al., 1989).
6.3 Difracción de rayos X
El almidón de mango, al igual que el almidón de maíz normal,
presentó un patrón de difracción tipo A (figura 11). El patrón de
difracción tipo A se caracteriza por la presencia de picos de mayor
intensidad de difracción para los ángulos 2 = 15, 17, 18 y 23;
una diferencia entre ambos almidones se mostró en el pico a 2 = 20,
que es debido al complejo amilosa-lípidos (Tang et al., 2001), el
cual es más evidente en el almidón de maíz. Se tienen estudios de
almidón aislado de diferentes variedades de mango, los cuales también
han presentado un patrón de difracción tipo A (Bello-Pérez et al.,
2005a; Millán-Testa et al., 2005; Sandhu y Lim, 2008b), el cual es
típico de almidones de cereales (Zobel, 1988)
El almidón de plátano presentó un patrón de difracción que es
una mezcla entre los polimorfismos tipo A y B, el cual es referido
como el patrón de difracción tipo C. Ha sido reportado que el patrón
de difracción tipo C lo presentan algunas leguminosas y tubérculos
tropicales (Spence y Jane, 1999).
48
Como se puede observar en la figura 10, los tres almidones
estudiados mostraron picos similares, pero existen diferencias en el
almidón de plátano, debido a la presencia de cristales tipo B (el
cual presenta picos característicos de mayor intensidad en los
ángulos 2 = 5.6°, 17°, 22 y 24°). El patrón de difracción
determinado en el almidón de plátano, fue similar al reportado en
otros estudios de este tipo de almidón (Yoo y Jane, 2002b; Bello-
Pérez et al., 2005b; Millán-Testa et al., 2005).
El porcentaje de cristalinidad fue mayor para el almidón de
plátano (29%), seguido por el mango (27%) y el de menor cristalinidad
fue el maíz normal (22%). El valor de cristalinidad determinado para
plátano y mango fue menor que los calculados para las misma fuente
(36% y 35% almidón de plátano y mango, respectivamente) (Millán-Testa
et al., 2005). Jenkins y Donald (1995) investigaron la variación del
contenido de amilosa, sobre la estructura interna de almidones de
maíz, cebada y chícharo; indicaron que la amilosa se puede encontrar
dentro de las regiones cristalinas de la amilopectina, incrementando
el orden estructural, por lo que un aumento en el contenido de
amilosa incrementaría el porcentaje de cristalinidad de los
almidones. Este comportamiento fue encontrado en los almidones
estudiados, ya que el de plátano presentó el mayor contenido de
amilosa y el de cristalinidad.
Los almidones de plátano y mango presentaron diferentes
patrones de difracción, siendo ambos almidones de frutos. La forma en
que están empaquetadas las dobles hélices y el contenido de agua, son
parámetros determinantes del tipo de polimorfismo. Las dobles hélices
que presentan los cristales tipo A, están empaquetadas en forma
monoclínica y presentan de 4-8 moléculas de agua, mientras que los
cristales tipo B, presenta dobles hélices arregladas en forma
49
Figura 11. Patrón de difracción de rayos X de almidones: maíz normal, mango y plátano.
50
hexagonal y con un contenido de agua de 36 moléculas (Imberty et al.,
1991). Esto indica, que el almidón de mango presentó una estructura
mas compacta en comparación con el almidón de plátano, debido al
empaquetamiento de las dobles hélices de la amilopectina.
6.4 Cromatografía de permeación en gel
Los perfiles de elusión de los almidones nativos presentados
en la figura 12, muestran el contenido de carbohidratos totales y la
respuesta del valor azul derivado de la prueba de tinción con yodo.
En los perfiles de elusión, el primer pico (fracción I) corresponde a
la amilopectina, la cual, debido a su gran tamaño molecular, fue
eluida del gel en primer lugar. El segundo pico (fracción II)
corresponde a la amilosa.
Diversas investigaciones han detectado la presencia de
material intermedio eluido entre las fracciones I y II, representado
como una elevación del valor de la línea base, que no permite la
clara separación de ambas fracciones. El material intermedio presenta
propiedades diferentes a las de la amilosa y la amilopectina. (Wang
et al., 1993)
Entre los perfiles de elusión, existe una diferencia entre el
valor azul reportado para los tres almidones. Los almidones de
plátano y mango presentaron una mayor elevación de la línea base,
entre los valores de las fracciones I y II, lo que podría estar
asociado a la presencia de material intermedio.
El fraccionamiento del almidón fue llevado a cabo con la
finalidad de poder colectar las fracciones del primer pico (fracción
I), correspondiente a la amilopectina y con ello poder realizar la
51
Figura 12. Perfiles de elusión obtenidos mediante cromatografía de permeación en gel, para almidones de maíz normal (A), mango (B) y plátano (C). (valor azul ) y (carbohidratos totales )
0
0.1
0.2
0.3
0.4
0.5
0.6
0.7
0.8
0.9
1
20 30 40 50 60 70 80
Fracción
Re
sp
ue
sta
de
CH
O (
630
nm
)
0
0.5
1
1.5
2
2.5
3
Re
sp
ue
sta
de
V.A
. (4
90 n
m)
A
0
0.1
0.2
0.3
0.4
0.5
0.6
0.7
0.8
0.9
1
20 30 40 50 60 70 80 90
Fracción
Res
pu
es
ta C
HO
(6
30 n
m)
0
0.5
1
1.5
2
2.5
3
Re
sp
ue
sta
V.A
. (49
0 n
m)
B
0
0.1
0.2
0.3
0.4
0.5
0.6
0.7
0.8
0.9
1
20 30 40 50 60 70 80 90
Fracción
Re
sp
ue
sta
de
CH
O (
63
0 n
m)
0
0.5
1
1.5
2
2.5
3
Re
sp
ue
sta
V.A
. (49
0 n
m)
C
52
determinación de la distribución de sus cadenas. Para evitar la
caracterización del material intermedio, se colectaron las fracciones
correspondientes a 3/4 partes de la fracción I.
6.5 Electroforesis capilar asistida con fluoróforos
La figura 13 y Cuadro 2 muestra la distribución de la longitud
de las cadenas de la amilopectina para los almidones de maíz normal,
mango y plátano.
Cada uno de los almidones mostró un perfil de distribución de
cadenas distintivo, localizado en las cadenas cortas con un GP en el
intervalo 6–8. El maíz normal presentó una baja proporción de cadenas
con un GP 6, las cuales incrementaron gradualmente hacia los GP 7 y
8, lo cual ha sido reportado en almidones de cereales. (Jane et al.,
1999); El almidón de plátano también presentó un incremento en la
proporción de cadenas con un GP 6-8. Sin embargo, este incremento fue
más notorio que para el caso del almidón de maíz normal; el almidón
de mango presentó una proporción de cadenas cortas con un GP 7 mayor
a los GP 6 y 8, este tipo de distribución de cadena ha sido reportado
en almidones de tubérculos (McPherson y Jane, 1999). Algunas
tendencias han sido reportadas para la distribución de la longitud de
las cadenas de amilopectina, por ejemplo, una distribución bimodal
con una alta proporción de cadenas con un grado de polimerización
entre 13-24, seguido por una proporción de cadenas cortas con GP
entre 6-12, y adicionalmente cadenas con GP 37 (Hanashiro et al.,
1996).
Hanashiro et al. (1996) y Jane et al. (1999), reportaron que
los almidones con patrón de difracción tipo A tienen mayor proporción
de cadenas cortas, con un GP 6-12 y una menor proporción de cadenas
53
largas, con un GP 37, en comparación con los almidones tipo B. Lo
anterior concuerda con lo encontrado en este estudio, en donde los
almidones de mango y maíz normal, al ser almidones tipo A,
presentaron una mayor proporción de cadenas cortas con un GP 6-12
(mango 25.7% y maíz normal 24%) y una menor proporción de cadenas
largas con un GP 37 (mango 16.6% y maíz normal 13.4%) en
comparación con el almidón de plátano, que presentó una cristalinidad
tipo C, el cual mostró una menor proporción de cadenas cortas (20.5%)
y una mayor proporción de cadenas largas (18.6%).
En el Cuadro 2, se reportan los valores de longitud de cadena
promedio para las amilopectinas. La amilopectina aislada de almidón
de plátano, presentó una longitud cadena promedio que fue comparable
con el reportado para la amilopectina de almidón de Ginkgo biloba
(24.2), el cual, al igual que el almidón de plátano, presenta una
patrón de difracción tipo C (Spence y Jane, 1999). Por su parte, los
almidones de maíz normal y mango, presentaron una longitud de cadena
promedio comparable a los reportados para almidones de maíz común
(21.1) (Kuakpetoon y Wang, 2008) y arroz (22.7) (Patindol y Wang,
2002), los cuales mostraron un patrón de difracción tipo A.
La distribución de la longitud de cadenas de la amilopectina
desramificada, ha sido estudiada utilizando cromatografía de alta
definición por intercambio aniónico (CLARIA), equipada con un
detector de pulsos amperométricos (DPA). Amilopectinas de varios
cultivares fueron desramificadas con isoamilasa y estudiadas mediante
CLARIA-DPA. Patindol y Wang (2002), reportaron 4 grupos de cadenas,
la primera fue las cadenas tipo A y los otros tres grupos
correspondían a las cadenas B del modelo de cluster. Se encontraron
diferencias en el porcentaje de distribución de esos grupos entre los
cultivares.
54
Figura 13. Distribución de la longitud de cadena para amilopectinas desramificadas [maíz normal (A), mango (B) y plátano (C)]
55
Cuadro 2. Distribución de la longitud de las cadenas de la amilopectina.
Fuente LC Distribución (%) mayor valor
Promedio GP 6-12 GP 13-24 GP 25-36 GP 37 GP DetectableMaíz normal 21.5 24.0 50.2 12.3 13.4 80
Mango 22.3 25.7 46.1 11.6 16.6 84
Plátano 23.9 20.5 48.1 12.9 18.6 89
Promedio de dos replicas.
LC = longitud de cadena
GP = grado de polimerización
56
6.6 Cromatografía de alta resolución por exclusión de
tamaño (CLARET) acoplada a detectores de dispersión de luz
multi-ángulos (DDLMA) e índice de refracción (IR)
La masa molecular promedio (MM) y radio de giro (RG) de las
amilopectinas de almidón de maíz normal, mango y plátano, se
muestran en la Cuadro 3. Las amilopectinas de mango y maíz normal
presentaron valores similares de MM, y este fue más alto que el
calculado para amilopectina de plátano. Este patrón también se
presentó para el radio de giro de los almidones estudiados, debido
a que la amilopectina de mango mostró el valor de RG mayor (297.85
nm) y la amilopectina de plátano el valor más bajo (267.10 nm). El
valor de la MM encontrada para maíz normal, concuerda por lo
reportado en la literatura (Yoo y Jane, 2002b). La masa molecular
y radio de giro de la amilopectina de plátano presentó un valor
mayor al reportado en la literatura (Yoo y Jane, 2002b), lo cual
puede ser atribuido a la diferente especie del almidón de plátano
utilizado.
Una característica de las MM de los tres almidones, es que
disminuye conforme aumenta el contenido de amilosa, una
correlación similar ha sido encontrada en otros estudios (Yoo y
Jane, 2002b; Millán-Testa et al., 2005; y Sandhu y Lim, 2008).
Esto se atribuye, a que durante la biosíntesis del almidón, el
flujo de carbono en forma de ADP-glc (adenosin difosfato glucosa)
es dividido entre la síntesis de amilosa y amilopectina. Esto
provoca que los almidones con mayor contenido de amilosa generen
amilopectinas con menor masa molecular, debido a que la mayor
parte de ADP-glc es incorporada a las moléculas de amilosa.
Las amilopectinas de mango y maíz normal presentaron MM
similares y RG diferentes, siendo la amilopectina de mango la que
mostró un RG mayor al RG de la amilopectina de maíz normal (Cuadro
3), lo cual esta asociado con los resultados obtenidos de la
distribución de la longitud de las cadenas de amilopectina, en
57
donde se determinó que el mango tiene mayor proporción de cadenas
largas (GP 37), en comparación con el almidón de maíz normal,
por lo que ocupara un volumen mayor, debido a que los valores de
RG están asociados con el volumen de las moléculas de amilopectina
cuando estas permanecen en solución (Millard et al., 1997). Así,
la amilopectina de mango presentó un RG mayor, debido a la
estructura de sus cadenas.
La amilopectina de mango y maíz normal tuvieron una
densidad mayor a la del plátano (Cuadro 3). Esto se relaciona con
el tipo de cristalinidad, ya que los almidones de maíz y mango
tuvieron una cristalinidad tipo A, la cual presenta un
empaquetamiento más compacto (debido al contenido de agua y
longitud de las cadenas de amilopectina), en comparación con la
cristalinidad tipo C mostrada por el almidón de plátano. Por lo
cual, entre mayor es la densidad molecular la molécula es mas
compacta.
Estudios en amilopectinas de diversas fuentes botánicas han
mostrado MM en un intervalo entre 5.4 x 107 y 1.1 x 108 g/mol y
valores de RG entre 171 y 242 nm (Aberle et al., 1994). La
amilopectina de maíz, solubilizada utilizando calentamiento con
microondas por 35 s, mostró MM de 2.2 x 108 g/mol y RG de 229 nm
(Bello-Pérez et al., 1998). Amilopectinas de diversas fuentes
botánicas presentaron MM entre 2.9 x 107 y 3.5 x 108 g/mol, y RG
entre 95-340 nm (You et al., 1999); y MM entre 1.3 – 56.8 x 108
g/mol, y RG entre 201-782 nm (Yoo y Jane, 2002b). Las
amilopectinas de almidón de Tef [Eragrostis tef (Zucc.) Trotter]
provenientes de diversas cultivares, presentaron MM en un
intervalo de 1.0 a 1.4 x 108 g/mol, y RG entre 156 y 205 nm
(Bultosa et al., 2008). Estos estudios emplearon el sistema
CLARET-DDLMA-IR similar al utilizado en este trabajo.
58
Cuadro 3. Peso molecular (MM), radio de giro (RG) y () densidad
molecular de amilopectinas de diferentes fuentes
botánicas.
Amilopectina
Fuentes MM x 10 8 (g/mol)a RG (nm)
a (g/mol/nm3)b
Maíz normal 5.154 ± 0.065 281.10 ± 1.980 23.20Mango 5.013 ± 0.177 297.85 ± 1.202 18.97Plátano 3.371 ± 0.179 267.10 ± 5.515 17.69
a Promedio de dos replicas
b = (MM / RG3)
59
6.7 Calorimetría de barrido diferencial
Las características de gelatinización de los almidones
estudiados se presentan en el Cuadro 4. El almidón de plátano
presentó las mayores temperaturas (To, Tp, Tc) y entalpía (H) de
gelatinización, seguido por el almidón de mango y maíz normal. La
transición observada corresponde al proceso de fusión de las
dobles hélices de la amilopectina y a la perdida de cristalinidad
(Cooke y Gidley, 1992).
Yuan et al. (1993), reportaron que los valores altos de H
para el almidón ceroso ae, se atribuía al alto porcentaje de
cadenas largas que presentaba; por otra parte, Jane et al., (1999)
y Patindol y Wang (2002), infirieron que las ramificaciones con
cadenas larga en la amilopectina, podrían minimizar la tendencia
de la amilosa para formar complejos e interlazarse con otras
ramificaciones, manteniendo así la integridad de los gránulos de
almidón durante su calentamiento, lo cual podría resultar en una
temperatura de gelatinización mayor. Estos estudios concuerdan con
lo encontrado para los almidones de plátano, mango y maíz normal,
ya que el almidón de plátano presentó una mayor temperatura y
entalpía de gelatinización, así como una mayor proporción de
cadenas largas en comparación con los almidones de mango y maíz
normal.
Además, el almidón de plátano presentó el mayor porcentaje
de cristalinidad, comparado con los almidones de maíz normal y
mango, lo que podría estar relacionado con la entalpía de
gelatinización (Tang et al., 2001), ya que un valor alto de
entalpía de gelatinización, puede sugerir que una mayor cantidad
de energía fue requerida para fundir los cristales formados por
las cadenas de amilopectina (Patindol y Wang, 2002).
60
Los datos de CBD del almidón retrogradado se presentan en
el Cuadro 5. Los parámetros de retrogradación (To, Tp, Tc, H y
%R) encontrados para el almidón de plátano, fueron mayores en
comparación con los almidones de mango y maíz normal. El mecanismo
de retrogradación es un proceso que involucra varios factores:
diferencias en la proporción e interacción de las moléculas de
amilopectina y amilosa, a la distribución de la longitud de las
cadenas y tamaño molecular de la amilopectina (Eliasson and
Gudmunsson, 1996), contenido de lipidos, fosfolípidos y
monoesteres de fosfato (Jane et al., 1999). El almidón de plátano
retrogradado durante 7 dias a 4 °C, presentó mayor estabilidad
térmica, en comparación con los almidones mango y maíz normal,
debido a que se desorganizó a una mayor temperatura y con alta
entalpía. Este patrón indica que un mayor perfeccionamiento de los
cristales fue desarrollado en el almidón de plátano, en
comparación con los otros almidones. Sin embargo, es importante
mencionar que la temperatura de pico de las muestras almacenadas,
fueron menores que las determinadas en el estudio de
gelatinización, debido a que durante el fenómeno de retrogradación
se forman cristales pequeños y/o imperfectos, los cuales se
desorganizan a menor temperatura (Paredes-López et al., 1994;
Bello-Pérez et al., 2005c). El almidón de plátano presentó el
valor de entalpía de retrogradación más alto. Este patrón
concuerda con el mayor nivel de cadenas largas (GP 37)
encontrado en el almidón de plátano. El almidón de mango mostró
el grado de retrogradación mas bajo, lo cual se atribuye a la alta
proporción de cadenas cortas de la amilopectina (Shi y Seib, 1992;
Yuan et al., 1993). El almidón de plátano presentó un grado de
retrogradación más alto; se han reportado una retrogradación
rápida del almidón de plátano, porque después de 14 horas de
almacenamiento aparecen algunos picos de cristalinidad; sin
embargo, el polimorfismo de almidón de plátano retrogradado es
tipo A (Bello-Pérez et al., 2005c).
61
Cuadro 4. Propiedades térmicas de gelatinización de almidón1
Fuente TO (C) TP (C) TC (C) ∆H (J/g)
Maíz normal 63.9 ± 0.2a 68.7 ± 0.3a 73.2 ± 0.4a 13.4 ± 0.3a
Mango 66.5 ± 0.2b 71.3 ± 0.3b 76.1 ± 0.3s 14.0 ± 0.7a
Plátano 70.9 ± 0.6c 76.5 ± 0.9c 83.3 ± 1.0c 16.5 ± 0.7b
1 = Temperatura de inicio (TO), Temperatura de pico (TP), Temperatura de conclusión (TC), cambio de entalpía (∆H).Valores promedio de 3 replicas.
* Letras iguales indican que no existe diferencias estadísticas significativas (p 0.05).
62
Cuadro 5. Propiedades térmicas de retrogradación de almidón1
Fuente T0 (C) TP (C) TC (C) ∆H (J/g) % R
Maíz normal 37.3 ± 0.5a 50.2 ± 0.2a 61.5 ± 0.8a 7.2 ± 0.6a,b 53.6a
Mango 39.9 ± 2.3b 52.7 ± 1.4a 62.3 ± 0.1a 5.4 ± 0.0a 38.4b
Plátano 42.1 ± 0.6b 56.5 ± 2.4b 67.7 ± 0.4b 9.4 ± 1.9b 56.9a
1 = Temperatura de inicio (TO), Temperatura de pico (TP), Temperatura de conclusión (TC), cambio de entalpía (∆H). Porcentaje de retrogradación (%R). Valores promedio de 3 replicas.
* Letras iguales indican que no existe diferencias estadísticas significativas (p 0.05).
63
6.8 Análisis rápido de la viscosidad.
Las propiedades de formación de pasta del almidón son
afectadas por los contenidos de amilosa, lípidos y por la
distribución de cadena de la amilopectina. La amilopectina
contribuye al hinchamiento del gránulo de almidón, mientras que la
amilosa y lípidos inhiben el hinchamiento (Tester y Morrison
1990). La distribución de la longitud de cadenas de la
amilopectina y el tamaño molecular de la amilosa produce un efecto
sinergístico sobre la viscosidad de las pastas de almidón (Jane y
Chen, 1992). Por lo cual el efecto de las características
estructurales sobre las propiedades de formación de pasta es
complejo. Cuando las dispersiones de almidón son calentadas
utilizando una velocidad de calentamiento constante, la viscosidad
aumenta hasta obtener un valor máximo (Figura 14). Los valores de
la temperatura de formación de pasta de los almidones estudiados,
fueron obtenidos en el siguiente orden maíz normal plátano
mango (Cuadro 6).
Los valores de viscosidad pico obtenidos, mostraron que el
almidón de plátano presentó el valor mas alto y al maíz normal el
mas bajo. La diferencia entre la temperatura de inicio de
gelatinización (To), obtenida con CBD y la temperatura de
formación de pasta obtenida con ARV, fue mayor en el almidón de
maíz que para los almidones de mango y plátano, debido a que el
hinchamiento del granulo pudo ser inhibido por la presencia de
complejos amilosa – lípidos.
La viscosidad pico del almidón de mango fue obtenida a una
temperatura menor, que para los almidones de plátano y maíz
normal, y puede observarse una platea, hasta que la temperatura
del sistema se mantuvo a 95 °C. La altura de los picos refleja la
habilidad de los gránulos de almidón para hincharse libremente
antes de su rompimiento físico (Singh et al., 2003). Cuando el
almidón es calentado en exceso de agua, sus gránulos se hinchan y
64
al mismo tiempo parte de sus componentes (principalmente amilosa
y algunas cadenas externas de la amilopectina) son solubilizadas,
dando lugar a partículas hinchadas y dispersas en una fase
continua (Thebaudin et al., 1998). Este patrón se relaciona con la
distribución de las cadenas de la molécula de amilopectina, más
que con su MM (Shibanuma et al., 1996).
Durante la fase de calentamiento constante a 95 C, una
disminución de la viscosidad fue encontrada para los tres
almidones, debido al rompimiento de algunos gránulos. Stevenson et
al. (2006a) encontraron una correlación entre la viscosidad de
rompimiento (BreakDown) de los gránulos y la distribución de la
longitud de las cadenas de la amilopectina. Sus resultados
mostraron que los almidones con amilopectinas con mayor porcentaje
de cadenas largas (GP 37), menor cantidad de cadenas con GP 13-
24, y con un alto contenido de amilosa aparente, presentaron
valores bajos de viscosidad de rompimiento, debido a que, durante
el hinchamiento del gránulo, estos tres factores ayudan a mantener
su integridad.
Durante la fase de enfriamiento, se presentó un incremento
en la viscosidad, debido a la reorganización de las cadenas
solubilisadas durante la fase de calentamiento y fase de
sostenimiento, produciendo una red que retiene una mayor cantidad
de moléculas de agua (Mali et al., 2003; Gimeno et al., 2004) y
dan las características de una pasta.
Los valores de viscosidad de recuperación (setback) están
asociados con los contenidos de amilosa (Thitripraphunkul et al.,
2003). Almidones con altos contenidos de amilosa presentan mayores
viscosidades de recuperación, lo cual concuerda por lo reportado
para los almidones en este estudio.
65
Figura 14. Perfiles de viscosidad de los almidones maíz normal (o), mango (∆) y plátano (), obtenidos con un analizador rápido de la viscosidad. (8 % bs).
66
Cuadro 6. Propiedades de formación de pasta de almidón, determinado mediante un analizador rápido
de la viscosidad.1
Viscosidad (RVU)
Fuente
Temperatura de
formación de
pasta (°C) Pico
Rompimiento
(BreakDown) Final
Recuperación
(Set Back)
Maíz normal 84.3 ± 0.889a 149.8 ± 0.5a 68.3 ± 0.8a 145.1 ± 0.7a 63.6 ± 1.0a
Mango 71.3 ± 0.2b 194.1 ± 3.2b 50.2 ± 3.4b 239.1 ± 2.7b 95.2 ± 2.0b
Plátano 79.3 ± 0.3c 215.8 ± 2.7c 33.5 ± 2.2c 323.7 ± 6.3b 141.4 ± 5.4c
1 promedio de tres replicas.
* Letras iguales indican que no existe diferencias estadísticas significativas (p 0.05).
67
6.9 Relación estructura función.
La distribución de las cadenas de la amilopectina del almidón
de plátano, presentó una mayor proporción de cadenas largas, lo cual
esta relacionado con un patrón de difracción de rayos X tipo B- ó C-.
Debido al arreglo de estas cadenas en una estructura cristalina, la
hidrólisis enzimática de este tipo de almidón se ve disminuida, esta
característica del almidón de plátano puede ser utilizada para la
producción de almidón resistente (Aparicio-Saguilan et al., 2005)
Además, el almidón de plátano puede ser adicionado a varios
productos alimenticios, tales como: galletas, bisquetes, pastas, etc.
Los cuales son elaborados en condiciones de baja humedad, con lo cual
no se lleva a cabo una gelatinización completa del almidón y se
conserva parte de su estructura granular nativa hasta el momento de
ser consumidos. Esto produce un alimento con baja digestibilidad del
almidón, el cual es considerado un alimento nutraceútico, el cual
tiene efectos benéficos sobre la salud.
El almidón de mango mostró una mayor proporción de cadenas
cortas, lo cual repercutió sobre el porcentaje de retrogradación,
presentándose un bajo porcentaje, por lo que se sugiere que el
almidón de mango sea utilizado en panificación, ya que este
retardaría el endurecimiento de los productos y se mantendrían suaves
por más tiempo.
Otra característica del almidón de mango, es que debido al
alto porcentaje de cadena cortas, las temperaturas de formación de
pasta y de gelatinización son menores, lo que permitiría una
dispersión de la pasta almidón a bajas temperaturas y proveería una
textura suave (sin grumos) al alimento, debido a la ausencia de
gránulos de almidón sin gelatinizar. Además, el almidón de mango
68
presenta una viscosidad mayor (en comparación con el almidón de
maíz), por lo que puede ser aprovechado para la elaboración de
salsas, sopas y aderezos
La baja temperatura de formación de pasta (71 °C) del almidón
de mango, presenta ventajas sobre los almidones de cereales, tales
como el maíz y arroz, cuya temperatura de formación de pasta es
mayor por 10-12 °C y almidones de trigo, cebada y centeno con
temperaturas de formación de pasta mayores por 18-25 °C, por lo cual,
las industrias alimenticias pueden ahorrar energía para obtener
viscosidades similares y los consumidores pueden beneficiarse con una
textura menos granulosa, la cual se obtiene cuando los almidones no
son procesados a temperaturas mayores a los 80 °C (Thomas y Atwell,
1998)
Los gránulos de almidón de mango son más pequeños que el
almidón de maíz, y debido a la ausencia de gránulos mayores a 10 m
de diámetro, se sugiere que este podría tener aplicaciones como un
sustituto de grasa.
69
VII. CONCLUSIONES
- Se encontró que la amilopectina de plátano mostró valores de MM,
RG y menores en comparación a los mango, esto se relaciona con
el tipo de cristalinidad, lo que indica que existe una
estructura y mecanismo biosintético distinto.
- El almidón de plátano presentó una mayor entalpía de
gelatinización y alta viscosidad de empastado, debido al alto
contenido de amilosa y mayor porcentaje de cadenas largas que
presenta la molécula de amilopectina.
- Los resultados obtenidos para los diferentes almidones
estudiados, pueden ser importantes para sugerir aplicaciones
específicas con la finalidad de desarrollar nuevos
productos.
70
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