Hoy en día nos enfrentamos con una nueva reali-dad, ¿para bien o para mal? Pregunta que más bien tendríamos que hacer a los que habitualmente creaban los contenidos; aunque quizás no repre-sente ningún mal, sino una oportunidad para el cambio y para adaptarse a ésta nueva forma de vida, ya que ahora son los mismos usuarios quienes se convierten en los generadores de contenidos.

Si bien, en un momento el miedo pudo radicar en la prensa escrita o el papel impreso, ya que en su momento el boom que causo el Internet desplazó a muchos de estos e indudablemente redujo sus ventas; fue ahí cuando los periódicos comenzaron a generar también sus contenidos para un .com, y quién iba a decir, después llegaron las redes sociales y como se mencionó anteriormente los consumi-dores se convirtieron en los creadores y distribui-dores de la información.

Como resultado a todo esto vemos a los que tradi-cionalmente generan contenidos ingresar a las redes y buscar llegar de esa forma a sus lectores, Jeff Javis menciona un dato importante en su artículo Los medios y las esferas de hallazgo en evo-lución, “si la noticia es tan importante, me encon-trará” y así pasa, debido a este fenómeno hoy en día según Hitwise, Facebook ya es el cuarto mayor gen-erador de audiencia de los medios.

Pongo el ejemplo del 27 de febrero acerca del tem-blor en Chile, fue una noticia tan sonada que puedo asegurar que más de alguno de nosotros se enteró por alguna red social. El mismo conductor del noticiero que escuchaba al medio día en CNN en español destacó el papel protagónico que las redes sociales tomaban con esta tragedia, está cambiando la forma de hacer periodismo, mencionó un par de veces.

Es impresionante, pero también es un hecho, están más rápido las noticias en Twitter que en los periódicos.

La cuestión económica es otro punto importante del que hablan los medios, estás nuevas tecnologías han venido a evolucionar todo, relaciones entre creadores y clientes y el mismo modelo de negocio.

Actualmente se paga por el acceso, no por los contenidos, ¿acaso está será también una nueva tendencia? Para algunos medios sí, muchos periódicos digitales o sitios importantes limitan el acceso a su información, solicitan suscrip-ciones o generan cargos en sus usuarios, pero caemos en lo mismo, qué tan rentable puede ser esto, si siempre existirán los blogueros que publiquen lo que se les antoja y sin ningún costo extra. Obviamente estos medios importantes conocen sus segmentos y por lo mismo de cobrar a sus lectores generan un valor agregado a sus con-tenidos; aquí es donde radica la diferencia entre leer una página común y corriente o un portal de noticias como The Economist o The New York Times, sino que caso tendría, todos publicarían lo mismo y los periódicos o sitios oficiales ya no tendrían seguidores.

De cualquier forma la creación de los conteni-dos ya no está en un mismo lugar, sino que se convierte en constantes actualizaciones y enlaces de los consumidores o usuarios.

La realidad respecto a los medios de infor-mación que se vincula a través de redes sociales es contundente, aquél usuario que no esté en sintonía o mejor dicho involucrado con grupos de interacción, no podrá estar enterado del acontecer mundial.

Quienes sean ajenos a estos mencionados grupos sociales llegarán a sentir obsolescencia por tendencias que han rebasado ya la interac-ción humana.

Si los sitios oficiales logran generar productos basados en los intereses y necesidades del público habrán logrado su cometido, de no ser así, el protagonista seguirá siendo el creador y distribuidor de la información, cuyo logro radi-cará en el simple hecho de dar un click para exis-tir entre un sin fin de notas gemelas.

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luego existes.pau garcía béjar