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MARCO DE POLÍTICAS PÚBLICAS EN POPULARIZACIÓN Y ENSEÑANZA DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA EN LOS PAÍSES DEL CONVENIO ANDRÉS BELLO

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MARCO DE POLÍTICAS PÚBLICAS EN POPULARIZACIÓN Y ENSEÑANZA

DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA EN LOS PAÍSES DEL CONVENIO

ANDRÉS BELLO

Serie documentos: Ciencia, tecnología e innovación No. 0022

Segunda edición

MARCO DE POLÍTICAS PÚBLICAS EN POPULARIZACIÓN Y ENSEÑANZA DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA EN LOS PAÍSES DEL CONVENIO ANDRÉS BELLO

Bogotá, Colombia, mayo 7 de 2007

Lisbeth Fog Corradine Elsa Castañeda Bernal Rocío Puentes Suárez

CONTENIDO

1 PRESENTACIÓN ________________________________________________________ 1 2 JUSTIFICACIÓN_________________________________________________________ 2 3 MARCO CONCEPTUAL___________________________________________________ 5 4 DIAGNÓSTICO DE LAS POLÍTICAS EN POPULARIZACIÓN Y ENSEÑANZA DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA __________________________________________________ 9

4.1 Nivel mundial _______________________________________________________ 9 4.2 Nivel países CAB___________________________________________________ 11

5 PROPUESTA MARCO DE POLÍTICA PÚBLICA DE POPULARIZACIÓN Y ENSEÑANZA DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA EN LOS PAÍSES CAB _________________________ 14

5.1 Principios _________________________________________________________ 14 5.2 Popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología como problema político en los países CAB ___________________________________________________________ 16 5.3 Objetivos _________________________________________________________ 18

5.3.1 Objetivos específicos______________________________________________ 18 5.4 Lineamientos ______________________________________________________ 18 5.5 Actores___________________________________________________________ 19 5.6 Estrategias________________________________________________________ 21 5.7 Instrumentos ______________________________________________________ 21

5.7.1 Iniciativas colectivas para la popularización de la ciencia y la tecnología _____ 22 5.7.2 Iniciativas en tecnologías de información y experiencias en comunicación en medios para la popularización de la ciencia y la tecnología_______________________ 23 5.7.3 Iniciativas en la enseñanza (no formal e informal) y el aprendizaje de la ciencia y la tecnología ___________________________________________________________ 23 5.7.4 Iniciativas para la investigación y gestión de los procesos de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología______________________________________ 24

5.8 Mecanismos de implementación _______________________________________ 25 5.9 Toma de decisión___________________________________________________ 26 5.10 Evaluación de resultados_____________________________________________ 26

6 BIBLIOGRAFÍA_________________________________________________________ 26

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1 PRESENTACIÓN

El subproyecto “Políticas, evaluación y transferencia de innovaciones en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología” plantea como objetivo principal lograr la incorporación de políticas públicas y estrategias de evaluación y transferencia de innovaciones en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, que propicien la sostenibilidad y efectividad de los procesos en estos campos.

El presente documento se propone para la discusión de los expertos de los países del Convenio Andrés Bello. Debe conducir a la construcción del marco común de una normativa argumentativa y estratégicamente funcional en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, útil para el fortalecimiento de las políticas públicas de los países CAB, de acuerdo con las características, condiciones e intereses de cada uno de ellos.

No obstante que el concepto “popularización de la ciencia y la tecnología” aún se asume desde diferentes enfoques y perspectivas, lo cual no permite proponer una sola definición, para el proyecto CAB se ha optado por entenderlo como un concepto amplio, que tiene que ver fundamentalmente con las iniciativas sociales, productivas y educativas dirigidas a favorecer la apropiación social de la ciencia y la tecnología, no sólo en los especialistas (comunidades científicas y académicas) sino en los diferentes sectores de la sociedad1.

Desde esta perspectiva, se asume la enseñanza de la ciencia y la tecnología como parte fundamental de la popularización, aunque no en su dimensión formal, sino, por el contrario, haciendo énfasis en las actividades de educación no formal e informal, donde las innovaciones involucran a diversos sectores y actores de la sociedad, incluida por supuesto la comunidad educativa, pero también al sector productivo, los tomadores de decisión, las organizaciones no gubernamentales, por mencionar sólo algunas de ellas, con el fin de trabajar de manera conjunta hacia el desarrollo científico y tecnológico, así como hacia la divulgación del conocimiento.

En los procesos de comunicación de la ciencia y la tecnología se busca la generación o enriquecimiento de una “cultura científica”, entendida en toda su dimensión, lo que significa que la ciudadanía que está expuesta al mensaje ofrecido por las diferentes fuentes a través de múltiples canales, no solamente lo consuma, sino que lo entienda, lo adapte y le de un uso en su vida cotidiana, es decir se apropie de ese conocimiento.

La generación de una cultura científica va más allá de la sola transmisión de resultados y avances de la ciencia2. Tiene que ver con el desarrollo de capacidades propias del desarrollo humano y social: con el análisis, la creatividad, la crítica constructiva, el trabajo colectivo, la síntesis, la adaptación a los cambios que enfrentamos a diario, la evaluación y la mirada hacia las consecuencias de nuestros pensamientos y acciones, la comunicación para el enriquecimiento cultural, la generación de valor agregado gracias al conocimiento, el permanente interés. Tiene que ver con enseñar a pensar.

1 Protocolo del Proyecto 2004: Innovaciones en Popularización y Enseñanza de la Ciencia y la Tecnología en los Países del Convenio Andrés Bello. CAB. Pág. 8. 2 Fog, Lisbeth. Comunicación de la ciencia e inclusión social, en Revista Quark, Ciencia, Medicina, Comunicación y Cultura. Abril –junio, 2004. Número 32. Págs. 36-41

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Tiene que ver también con el concepto de aprendizaje para toda la vida, al cual se refirió Emlyn Koster durante su presentación en el Foro Conciencia Abierta3, un aprendizaje innovador, para la exploración de la naturaleza, la humanidad y la tecnología, con base en el respeto de la diversidad regional, que se inicia en la escolaridad formal, pero que forma a los individuos para que adquieran conocimiento continua y permanentemente a lo largo de su vida.

Una verdadera apropiación social de la ciencia y la tecnología depende de las actitudes individuales, las normas culturales y las políticas nacionales. La posibilidad de generar una política regional de popularización y enseñanza de la ciencia fortalecerá el desarrollo mismo de la ciencia y la tecnología en los países y apoyará la formación de ciudadanos mejor informados y más participativos en la toma de decisiones públicas.

Para formular políticas de comunicación científica, estudios como el de Dorothy Nelkin4 reflejan la convicción de que, en una sociedad cada vez más dependiente del conocimiento tecnológico, es extremadamente importante contar con una información honrada, crítica y exhaustiva sobre ciencia y tecnología. Esta idea va adquiriendo carta de naturaleza en las sociedades desarrolladas, hasta el extremo de que estudiosos tan relevantes como Bernard Schiele asumen la convicción de que una política científica debe basarse, ante todo, en una política de comunicación científica. Si se tiene en cuenta que son los políticos quienes deciden sobre el gasto público en investigación y desarrollo (I+D) y que éste está vinculado directamente con la economía nacional y regional, la información sobre ciencia debería tener mayor relevancia en las sociedades contemporáneas5.

2 JUSTIFICACIÓN

El lugar que ocupan la información y el conocimiento como las expresiones máximas de la denominada “sociedad del conocimiento” lleva a que los países y sus gobiernos, se planteen como una de sus prioridades, el desarrollo científico y tecnológico, en la medida en que la capacidad de producir conocimiento de esta naturaleza, principalmente en los países del tercer mundo, está directamente relacionada con su capacidad para reducir la inequidad, la pobreza y sus bajos niveles de desarrollo.

Para el investigador argentino Juan Carlos Tedesco, la importancia tan grande que adquiere el conocimiento en la época actual está directamente relacionada con el hecho de que “ahora se ha transformado en el factor clave para explicar tanto el desempeño productivo como el desempeño ciudadano. Desde el punto de vista del desempeño productivo, el uso intensivo de conocimientos es el factor que permite obtener altos niveles de competitividad genuina, definida como la competitividad basada en la incorporación de progreso técnico a la producción. Desde el punto de

3 La apropiación social de la ciencia y la tecnología: un mundo, un futuro, por Emlyn Koster, Presidente del Liberty Science Center, en Estados Unidos. Memorias del Foro Conciencia Abierta, por una cultura de ciencia, tecnología e innovación en la sociedad. Convenio Andrés Bello, Colciencias y Maloka. Bogotá, Colombia. Marzo de 2004. www.cab.int.co clic en ciencia y tecnología y luego en icono de Memorias. 4 Nelkin, Dorothy, Selling Science, How the Press Cobres Science and Technology. W.H. Freeman and Company. Nueva York. 1990 5 Calvo Hernando, Manuel, diciembre de 1997. Objetivos de la divulgación de la ciencia, en Revista Latinoamericana de Comunicación Chasqui, # 60.

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vista del desempeño ciudadano, el acceso al conocimiento es la condición necesaria para una conducta reflexiva, propia de la ciudadanía”6.

Desde esta perspectiva y dada la misión del Convenio Andrés Bello de favorecer el fortalecimiento de los procesos de integración y la configuración y desarrollo de un espacio cultural común, el tema del fortalecimiento regional y nacional de las políticas publicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, se convierte en una de sus prioridades y en el escenario estratégico de acciones comunes entre sus países miembros.

Como organización internacional de carácter intergubernamental, el CAB tiene como visión contribuir en la configuración de una comunidad de naciones a partir de la consolidación de una cultura de integración mediante la promoción y el desarrollo de políticas vinculadas al bienestar de los pueblos de los países miembros, con el aporte convergente de la educación, la cultura, la ciencia y la tecnología. En este esfuerzo participarán protagónicamente, con perspectiva intercultural, los grupos poblacionales excluidos, la niñez y la juventud.

En el tema de popularización y enseñanza de la ciencia el CAB tiene una historia de varias décadas. Para no remontarnos demasiado en los años, durante la Reunión de Expertos en Popularización e Innovaciones en la Enseñanza de la Ciencia y la Tecnología de los países del Convenio Andrés Bello, realizada en Bogotá, Colombia, los días 9 y 10 de octubre de 2002, se recalcó la importancia de trabajar de manera prioritaria en los siguientes temas relacionados con la popularización de la ciencia y tecnología: (a) la elaboración y perfeccionamiento de planes nacionales en popularización de la ciencia y la tecnología; (b) la evaluación, difusión y transferencia de experiencias en el campo de la popularización de la ciencia y la tecnología, (c) la socialización del conocimiento científico y tecnológico que producen nuestros países a través de los medios masivos de comunicación, (d) la formación de recurso humano en las áreas prioritarias para la divulgación de la ciencia; (e) la producción de material de divulgación científica, (f) la articulación de acciones aisladas y creación de redes de intercambio y (g) la creación de centros interactivos y museos.

De igual manera, en esta misma reunión, se propuso para las innovaciones en la enseñanza de la ciencia y la tecnología: a) promoción de políticas de desarrollo e integración regional para el avance de la enseñanza de la ciencia y la tecnología; b) búsqueda de estrategias de sostenibilidad de los proyectos a través de articular los diferentes actores; c) definición, desde una perspectiva regional, de una posición frente a temas como: ¿por qué y para qué se enseñan las ciencias? ¿Cuáles son los objetivos de aprendizaje en la educación básica y media?; d) sistematización, investigación, evaluación, difusión e intercambio de experiencias en innovación en la enseñanza de la ciencia y la tecnología; e) organización de congresos regionales y actividades conjuntas sobre innovaciones en la enseñanza de la ciencia y la tecnología en la escuela básica y media; y f) formación de maestros en nuevas tendencias y estrategias metodológicas para guiar los procesos de aprendizaje.

La Declaración de Macuto, firmada en el Estado de Vargas, en Venezuela, el 31 de julio del 2003, definió el Plan de Acción Conjunta en Ciencia y Tecnología de los Países del Convenio Andrés Bello

6 Tedesco, Juan Carlos (2004) Las políticas de la apropiación social y la popularización de la ciencia y la tecnología en la América Latina. Bogotá. Memorias del Foro Conciencia Abierta, por una cultura de ciencia, tecnología e innovación en la sociedad. Convenio Andrés Bello, Colciencias y Maloka. Bogotá, Colombia. Marzo de 2004. www.cab.int.co clic en ciencia y tecnología y luego en icono de Memorias.

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para los años 2003 a 20107, entre cuyas acciones se resalta el fortalecimiento a una cultura científica y tecnológica. En tal sentido, el reto de contar con un marco común de políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología favorece “la adopción de efectivos mecanismos nacionales y regionales que fortalezcan el diseño, implementación, racionalización y desarrollo de políticas públicas de popularización de la ciencia y la tecnología que promuevan la articulación, el intercambio, la conformación de redes y alianzas estratégicas con miras a favorecer a los más diversos sectores poblacionales de nuestros países”. Así mismo, posibilita enfrentar el desafío “para transformar las actuales políticas de enseñanza de la ciencia y la tecnología y la necesidad de generar una cultura de la innovación educativa, constituyendo a la escuela en un dinámico instrumento de fomento y difusión de estrategias innovadoras en la enseñanza-aprendizaje de la ciencia y la tecnología en la región, en lo cual el desarrollo de la creatividad juega un papel fundamental”8.

El Foro Conciencia Abierta, organizado por el Convenio Andrés Bello, el Instituto Colombiano para el Desarrollo de la Ciencia y la Tecnología, Colciencias, y el Centro Interactivo de Ciencia y Tecnología, Maloka, en marzo del 2004, dio espacio a ministros y autoridades de once países para que presentaran sus propuestas de política en popularización de la ciencia y la tecnología que den marco a las actividades que realizan9.

El Foro abrió y –en algunos casos- reforzó el espacio para el debate sobre la necesidad sentida de generar un marco de políticas en la región sobre el tema de la popularización del conocimiento científico y tecnológico. Como consecuencia, tanto las autoridades como los participantes al Foro firmaron un acuerdo que se compromete a:

1. Impulsar instrumentos y mecanismos de apropiación social y popularización de la ciencia y la tecnología en cada uno de los países, adecuados a sus diferentes marcos institucionales, y constituidos por autoridades del gobierno, directivos de universidades, instituciones, empresas y otros organismos representativos de la sociedad civil, que tengan como misión el impulso de acciones nacionales e internacionales.

2. Analizar la conveniencia y oportunidad de un Fondo Internacional de Fomento a la Apropiación Social y Popularización de la Ciencia y la Tecnología

3. Promover de manera conjunta y oficial políticas de apropiación social y popularización de la ciencia y la tecnología articuladas con las estructuras educativas y culturales nacionales con el objetivo de lograr que los ciudadanos accedan a un aprendizaje para toda la vida

4. Fortalecer las redes de transferencia de mejores prácticas en políticas y experiencias innovadoras en apropiación social y popularización de la ciencia y la tecnología partiendo de la estructura de la Secretaría Técnica CAB-ONCYT (Convenio Andrés Bello - Organismos de Ciencia y Tecnología de los países CAB).

7 Plan de acción conjunta en ciencia y tecnología de los países del Convenio Andrés Bello 2003 - 2010. Comisiones técnicas. Cartagena de Indias, Colombia, mayo 19-21 de 2004. 8 Declaración de Macuto, Estado de Vargas, Venezuela, julio 30 y 31 de 2003. Plan de Acción Conjunta en Ciencia y Tecnología de los países del Convenio Andrés Bello. 9 Memorias del Foro Conciencia Abierta, por una cultura de ciencia, tecnología e innovación en la sociedad. Convenio Andrés Bello, Colciencias y Maloka. Bogotá, Colombia. Marzo de 2004. www.cab.int.co clic en ciencia y tecnología y luego en icono de Memorias.

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5. Impulsar alianzas internacionales en apropiación social y popularización de la ciencia y la tecnología, basada en las instituciones nacionales competentes.

3 MARCO CONCEPTUAL

Como se expuso al inicio del documento, aún es necesario trabajar sobre la definición del concepto de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, lo que se intentará hacer en este punto del documento10. Así mismo, será preciso acercarse a una definición del término “política pública”, en tanto éste puede ser asumido desde diferentes perspectivas.

• Políticas públicas

Una política pública es un conjunto de decisiones a las que se llega por consenso entre diferentes sectores de la sociedad, para resolver un problema que les atañe. Como las sociedades cambian, se transforman y evolucionan, las políticas públicas tienen ese mismo carácter dinámico que las hace abiertas, democráticas y participativas. Por su carácter dinámico, el logro de los objetivos se realiza de manera gradual, a medida que se producen los ajustes necesarios y se implementan sus líneas de acción. Una política pública debe ser viable socialmente y factible económicamente. Para que pueda ser implementada, los objetivos trazados deben ser alcanzables.

Las políticas públicas intervienen problemas socialmente relevantes y ofrecen posibles soluciones. Como en los países de la región los recursos no son abundantes, es necesario priorizar los problemas, para ir solucionándolos de acuerdo con las posibilidades.

Para América Latina el tema de las políticas públicas, tanto desde la perspectiva de su análisis como desde su formulación, está ligado a los estados democráticos que empezaron a instaurarse y consolidarse en los últimas década, y a las fuertes transformaciones sociales, económicas, políticas y culturales vividas a nivel mundial, donde las desigualdades, la inequidad y la pobreza hacen parte del escenario social.

Este marco situacional parece exigir dos requisitos fundamentales para gobernar: gobernar por políticas y gobernar con sentido público, lo cual significa que los problemas públicos, como son los problemas sociales y culturales, que por sus particularidades y circunstancias difieren los unos de los otros, requieren también que las políticas para su atención sean específicas en sus objetivos, instrumentos, modos, procedimientos, agentes, tiempos.

En el contexto del trabajo del Convenio Andrés Bello “el surgimiento de la política pública está relacionado con las necesidades de cohesión social y mediación que requieren las sociedades modernas para atenuar o eliminar las disfunciones, tensiones o competencias que se presentan al interior de los sectores y de los diversos grupos” 11.

10 Mónica Lozano, en el documento Políticas, Programas y Experiencias en Popularización de la Ciencia y la Tecnología (en impresión) dice al respecto: “Intentar una presentación de los aspectos conceptuales de la popularización plantea el problema de que, al no existir como una disciplina, sus abordajes dependen particularmente de los intereses (y objetivos) de quienes la investigan, de los campos disciplinarios a partir de los cuales se aborda, de las concepciones sobre popularización que se tienen”. 11 Propuestas para la generación de políticas públicas en prospectiva científica y tecnológica en los países CAB, versión preliminar preparada por Rocío Puentes Suárez. Marzo, 2004

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Las políticas públicas comprenden varios aspectos: identificación del problema, formulación de la solución, toma de decisiones, aplicación de la acción y evaluación de los resultados 12.

Para Aguilar Villanueva13 “el diálogo y la discusión abierta, manifiesta, son elementos constitutivos de la elaboración de las políticas. Esto es lo propio y lo irrenunciable de los regímenes democráticos. Aquí la elección y desarrollo de una política no resulta de un sofisticado cálculo tecnocrático o de una preferencia autocrática. Es, en cambio, producto de la discusión y persuasión recíproca de muchos actores políticos y gubernamentales, participantes en su formulación, aceptación y puesta en práctica”.

En tal sentido, la popularización y la enseñanza de la ciencia y la tecnología requieren de políticas públicas que obedezcan a situaciones, modalidades, causas, oportunidades, percepciones y problemas sentidos y vividos por cada país, pero que no por esto pueden también obedecer a objetivos, metas y estrategias que hagan parte de un marco común de políticas regionales que posibilite hacer comparaciones, intercambiar experiencias, aunar recursos, hacia la búsqueda de la integración latinoamericana.

En la práctica, y a nivel regional, podría decirse que con respecto al análisis de situación sobre una posición política de popularización y enseñanza de la ciencia y tecnología en los países CAB hay un avance significativo en cuanto a disposiciones legales: leyes, decretos, resoluciones, que buscan orientar la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología dirigida a niños, niñas, jóvenes y población en general, así como proyectos, programas y experiencias publicas y privadas.

No obstante la normatividad y la multiplicidad de proyectos, programas y experiencias, éstos por si mismos no se constituyen en políticas públicas, en tanto ellas hacen referencia al “conjunto de toma de posiciones que involucran una o varias instituciones estatales (simultánea o secuencialmente). Pero igualmente significa la materialización de las decisiones tomadas en términos de acciones que producen resultados sobre la situación problemática y los actores involucrados con la misma”14.

En tal sentido, para formular y fortalecer las políticas públicas asociadas con la popularización y enseñanza de la ciencia y tecnología, es necesario avanzar hacia la sensibilización de las autoridades políticas nacionales para que la popularización y la enseñanza hagan parte de la agenda política de los países a través de programas de acción coordinados entre los diversos sectores gubernamentales e instituciones y organizaciones públicas y privadas, orientadas por un marco general de acción armónico y con sentido, que identifique con precisión los públicos, individuos o instituciones beneficiarios así como las metas y objetivos a lograr.

• Popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

Así como sólo existen orientaciones para la formulación e implementación de las políticas públicas, tampoco hay últimas palabras ni definiciones consensuadas sobre el término “popularizar” el cual, de acuerdo con la Real Academia Española se refiere a la acción y efecto de poner (el conocimiento

12 Meny, I y Thoening, J. (1992). Las políticas públicas. España. Ariel Ciencias Políticas. 13 Aguilar Villanueva, Luis F. (2003) El estudio de las políticas públicas. México, Grupo editorial Miguel Ángel Porrua. Tomos I, II, III, IV. 14 Vargas, A. (1999). El Estado y las políticas públicas, Bogotá, Almudena Editores. En: Durán, E y col (2002). Niños, niñas y conflicto armado en Colombia. Una aproximación al estado del arte 1990-2001. Colombia. Convenio del Buen Trato, Fundación Antonio Restrepo Barco, p, 114.

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científico y tecnológico) al alcance de quienes tienen poco acceso a la cultura en general. Viene del latín “popularis”, que se refiere al pueblo.

El término que se utilizó a comienzos de la segunda década del siglo XX fue el de “vulgarizar”, cuya definición “exponer una ciencia, o una materia técnica cualquiera, en forma fácilmente asequible al vulgo”, es más pertinente al tema que nos atañe. Sin embargo este verbo tiene una connotación que desdibuja todo el sentido ideológico de entregar el conocimiento a la inmensa mayoría, presentándolo de una manera ordinaria, poco culta, sin rigurosidad, y poco confiable. De tal manera que aunque aún algunos autores lo utilizan hoy en día, no es muy frecuente.

Otros términos que has sido utilizados son: “Difundir” se refiere a la acción y al efecto de extender, esparcir, propagar físicamente. Propagar o divulgar conocimientos, noticias, actitudes, costumbres, mientras “divulgar” se refiere a la acción y efecto de publicar, extender, poner al alcance del público (el conocimiento científico). “Comunicar” es la acción y el efecto de hacer a otro partícipe de lo que uno tiene (ésta sería una acción de los científicos, pero también de los mediadores entre quienes tienen el conocimiento y quienes no lo poseen). También se refiere a hacer saber a alguien (la mayoría), algo (el conocimiento científico y tecnológico).

Los términos mencionados hasta ahora adolecen todos de una etapa en el proceso: todos entregan el conocimiento, pero no sabemos si su destinatario realmente lo recibió. Se concibe este enfoque dentro de lo que los teóricos han denominado “modelo de déficit”, donde el emisor tiene una “suficiencia científica” y el receptor pertenece a un público “deficitario”, pasivo15.

Podría decirse que ni siquiera es necesario ir hasta los autores, investigadores de los procesos de comunicación de la ciencia, para entender que cuando estamos hablando de políticas públicas de popularización de la ciencia, nos referimos a un proceso social, democrático, que implica la comunicación en doble vía, donde el receptor actúa, demuestra interés, también juega un papel activo y dinámico, y genera en él diferentes reacciones16.

Así, los modelos que se buscan actualmente responden más a términos como “Alfabetización científica”, “Cultura científica”, o “Apropiación social de la ciencia y la tecnología”, que no solamente involucran al emisor del mensaje, sino hacen que el receptor forme parte activa del proceso de la comunicación. Así, la idea es que la ciudadanía en general, incluyendo los diferentes sectores que la componen, sin dejar a ninguno de lado, tenga acceso al conocimiento, se lo apropie, lo que significa interiorizarlo, comprenderlo, analizarlo, y utilizarlo para su aplicación en la vida cotidiana. Hoy, más que nunca, se trata de un proceso que promueve y coadyuva a la necesaria “inclusión social”.

De tal manera que en este contexto, al hablar de popularización se incluye el concepto de comunicación en doble vía, teniendo como referente al emisor y al canal que utilice para la entrega del mensaje sobre ciencia y tecnología, PERO alimentado con el impacto que sus mensajes produzcan en su receptor, así como al conocimiento preciso de la ciudadanía a la cual se dirige, para entender su idiosincrasia, sus necesidades, su contexto, y su nivel de comprensión.

15 Estrategias de enseñanza y formación de recursos humanos en divulgación científica. Algunas observaciones críticas, por Amalia Beatriz Dellamea. Mayo, 1998 16 En el documento Políticas, Programas y Experiencias en Popularización de la Ciencia y la Tecnología (en impresión), escrito por Mónica Lozano, se encuentra una revisión histórica de los conceptos utilizados en el proceso de popularización de la ciencia y la tecnología.

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La enseñanza de la ciencia y la tecnología, entendida en el marco de la educación no formal e informal como se dijo anteriormente, se refiere a los procesos mediante los cuales se forman actitudes científicas en la población, con prioridad en niños y jóvenes, se desarrollan habilidades investigativas y creativas, y se utilizan herramientas científicas y tecnológicas en la solución de problemas cotidianos17.

Una experiencia o una iniciativa de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología es una actividad que utiliza una o varias estrategias para acercar los temas de ciencia y tecnología a diferentes sectores de la población18. Pueden ser programas, redes, proyectos, prácticas, experiencias, o actividades puntuales de popularización y enseñanza de la ciencia y tecnología, o las instituciones que han sido creadas específicamente para tal fin19. Se trata, en todo caso, de acciones que pueden apoyar o complementar a la educación formal, o pueden apoyarse en ella para su desarrollo.

A las experiencias de carácter no formal20, pertenecen las actividades de popularización de la ciencia que desarrollan los clubes, olimpiadas, concursos, ferias científicas juveniles, campamentos y museos y centros interactivos de ciencia y tecnología, que por su naturaleza no están supeditadas al sistema de grados y niveles de la educación formal, pero que complementan, apoyan y enriquecen los procesos educativos formales. A las iniciativas informales pertenecen aquellas propuestas que aproximan a la población en general al conocimiento científico y tecnológico de manera libre y espontánea, a través de los medios masivos de comunicación, el trabajo en red y otros mecanismos de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología.

Para el Convenio Andrés Bello, la innovación es el foco de amarre entre la popularización y la enseñanza de la ciencia y la tecnología, por tanto una política orientada en este sentido, además de promover una cultura de la innovación y la capacidad de innovar de los diferentes actores involucrados en los procesos de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, deberá tener en cuenta que las iniciativas, programas o experiencias que más se aproximan a tener una impronta innovativa son aquellas que logran por lo menos cumplir con los siguientes requisitos: 1) integran lo formal con lo no formal e informal, 2) aproximan a la población en general no sólo al conocimiento y los avances científicos y tecnológicos sino a la lógica de su producción, o sea a los métodos científicos, 3) ponen en juego estrategias pedagógicas y metodológicas que posibilitan desarrollar la capacidad de aprender a aprender a lo largo de la vida y, en consecuencia, 4) posibilitan la incorporación de la ciencia y la tecnología a la vida cotidiana como una manera del ejercicio de la ciudadanía.

17 Portafolio programado de ciencia y tecnología del Convenio Andrés Bello (2005 – 2008), David Gómez Villasante y Henry Yesid Bernal, compiladores. Cartagena, Colombia. 2004. 18 Lozano, H.M., et al, Castañeda B, E. et al, en Proyecto: Innovaciones en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en los países del Convenio Andrés Bello, 2005 – 2008, Marzo, 2004. 19 Ejemplos de programas nacionales pueden ser Destellos, de Panamá, o Explora, de Chile. Un ejemplo de red es la RED POP, de la UNESCO. Ejemplos de actividades puntuales son las ferias juveniles de ciencias, los espacios sobre ciencia y tecnología en los medios masivos de comunicación, kits educativos, caminatas ecológicas, entre otras muchas. Un acertado ejemplo de instituciones creadas con ese objetivo son los museos y centros de ciencia. 20 Ley 115 General de Educación de Colombia.

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4 DIAGNÓSTICO DE LAS POLÍTICAS EN POPULARIZACIÓN Y ENSEÑANZA DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA

4.1 Nivel mundial

Una revisión sobre el tema permitiría concluir que los organismos internacionales como la UNESCO, la OEA, la OEI y el CAB, más que las iniciativas de los propios países, han sido los que han permitido el desarrollo y consolidación de lineamientos de política en popularización de la ciencia y la tecnología, en los que la participación ciudadana se asume como un componente fundamental para el desarrollo mismo de la ciencia y la tecnología de las naciones y de las regiones21.

En el Reino Unido, la Royal Society y la Asociación Británica para el Avance de la Ciencia, entre otras instituciones, han liderado e impulsado el tema de la “comprensión pública de la ciencia” (Public Understanding of Science, PUS), como pilar fundamental que contribuye a la democracia y la economía de las naciones, por medio de la creación de riqueza y el aumento de la calidad de vida22. Dentro de los beneficios identificados por estas instituciones y que han perneado la política nacional británica están, entre otros:

• Prosperidad nacional, entendida como ciudadanos mejor informados y fuerza de trabajo mejor entrenada

• Políticas nacionales, a través de las cuales se asume que los líderes están mejor informados y por tanto las decisiones públicas se toman con conocimiento de causa.

• Elección del estilo de vida, que incluye temas de salud individual, consumo informado, calidad del medio ambiente

• Participación cívica, formando valores y políticas, empoderando al electorado, e incluyendo los riesgos y las incertidumbres como factores fundamentales del tema de ciencia y tecnología

Asimismo, en los Estados Unidos, a través de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, el concepto de “alfabetización científica” (Scientific Literacy)se propone como el conjunto de habilidades para familiarizarse con el mundo natural, reconocer su diversidad y su unidad, entender los conceptos fundamentales y los principios científicos, así como la interrelación entre las matemáticas, la ciencia y la tecnología como empresas humanas con fortalezas y limitaciones, y usar el conocimiento científico y la manera de pensar científica con propósitos individuales y sociales23. También promueve el aprendizaje para toda la vida, y el aumento de oportunidades de participación en cuestiones científicas y tecnológicas

Vale la pena anotar que a nivel mundial, un país como China implementó desde el 2002 una política pública a favor de la popularización de la ciencia, que produjo la Ley de la República Popular de

21 Para más información sobre las diferentes declaraciones y reuniones al respecto ver Mónica Lozano, en el documento Políticas, Programas y Experiencias en Popularización de la Ciencia y la Tecnología (en impresión) CAB. 2004 22 Public Understanding of Science. British Council, Briefing Sheet 6. July 2001 23 Science for all Americans online. http://www.project2061.org/tools/sfaaol/Intro.htm

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China en Popularización de la Ciencia y la Tecnología24, adoptada en junio 29 del mismo año, con seis capítulos y 34 artículos, producto de una reflexión y una posición frente al tema.

Quizá lo que más llama la atención de dicha ley es el capítulo sobre la responsabilidad que le impone a la misma sociedad frente a la popularización de la ciencia y la tecnología. “La popularización de la ciencia y la tecnología es una tarea común de toda la sociedad en su conjunto. Gente de todos los sectores de la sociedad debe organizarse para PARTICIPAR en las diferentes actividades de la popularización de la ciencia y la tecnología.”

Con relación a algunos avances en políticas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en la región, la Organización de Estados Americanos, OEA, inició el proyecto Iniciativa Hemisférica sobre Popularización de la Ciencia en el que participan todos los países de las Américas, bajo la coordinación del Ministerio de Ciencia y Tecnología del Brasil25.

La comunidad investigativa en el tema de la comunicación de la ciencia y la tecnología ha sido testigo de la evolución en los objetivos, instrumentos y canales, entre otros, pero sobre todo en la manera como se diseñan las iniciativas, planes y programas en los países: hoy en día, más que la mera entrega de la información, se hace énfasis en un proceso de comunicación de doble vía, en el cual no solamente es importante el mensaje que se entrega y la forma de hacerlo, sino instrumentos de medición, para comprobar si la información (el conocimiento en este caso) llegó a los diferentes sectores de la sociedad, y tuvo algún impacto en su cotidianidad26.

La puesta en práctica de las diferentes iniciativas ha generado incluso un nuevo tipo de profesional: el comunicador o divulgador de la ciencia, que más se ha formado en la experiencia que en la educación formal. Es un depositario de diferentes saberes, disciplinas y herramientas, autodidacta en el campo de la divulgación, y expresamente creativo y convencido de que la mediación entre quienes tienen el conocimiento y aquellos que pueden beneficiarse de él, es un objetivo de vida.

En ese proceso de comunicación, que se manifiesta en variadas y muy disímiles formas, es necesario considerar una a una las diferentes etapas que se viven desde la generación del conocimiento27, la mediación que permite adaptar el mensaje desde la terminología de la comunidad científica hacia una vivencia más universal, y que es diferente de acuerdo con el instrumento que se utilice28, hasta la apropiación social del conocimiento.

24 http://unpan1.un.org/intradoc/groups/public/documents/apcity/unpan014305.htm#1ea001 25 http://www.science.oas.org/Components/Brasil/Brasil_Informe.htm 26 Para una actualización permanente sobre el estado del arte de los estudios en comunicación científica y apropiación social de la ciencia y la tecnología recomendamos la suscripción a las siguientes publicaciones periódicas sobre el tema: Quark, revista del Observatorio de Ciencia y Tecnología de la Universidad Pompeu Fabra, de Barcelona, España Quark: http://www.imim.es/quark/quark.htm en español; Public Understanding of Science, publicación en un esfuerzo conjunto entre Estados Unidos y la gran Bretaña, en http://www.ingenta.com/journals/browse/sage/pus, Science Communication, publicación también de Estados Unidos generada por Science Communication:. http://www.ingenta.com/journals/browse/sage/j258, en inglés. Además en la publicación Chasqui, de CIESPAL, con sede en Ecuador, también se encuentran artículos en esta área de la comunicación. 27 Por lo general, y en la mayoría de los casos incluye la etapa de la creatividad, pasa por el proceso que desarrolla la idea, la formula, la comprueba y la valida, para luego iniciar el proceso de transmisión. 28 En esta mediación, los diferentes tipos de lenguaje, la traducción o “transcodificación” de la información, el tipo de mensaje que se divulga, la concepción misma de ciencia y tecnología, son solamente algunos de los factores que inciden en la efectividad de la

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Lo cierto es que encuestas realizadas en países como Argentina, España, Brasil y Uruguay29, así como la llevada a cabo en 2004 en Colombia30, demuestran que la ciencia es aún lejana para la población de estos países. Podría decirse que ni la ciencia ni la tecnología causan un efecto (o impacto) de consideración en la formación de contenidos, actitudes y expectativas en las sociedades de estos países. “La percepción pública de la ciencia y la ‘cultura científica’ se han convertido en las últimas décadas en objeto de la política científica y de todos aquellos actores relacionados con los procesos de I+D. El desarrollo de encuestas estimula, al mismo tiempo, el debate en la literatura especializada”31.

Los resultados de las encuestas sobre percepción pública de la ciencia en países de Iberoamérica, en el trabajo liderado por la RICYT (Argentina, Brasil, España y Uruguay), el 94.5% de los encuestados remarcó la importancia de participar en las actividades de ciencia y tecnología, al tiempo que sólo un 7.3% manifestó haber tenido experiencias de participación concretas32. La participación ciudadana aún está en etapas embrionarias.

4.2 Nivel países CAB

Desde la segunda mitad del siglo XX, los países del Convenio Andrés Bello adelantan actividades de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, buscando promover el espíritu científico en sus ciudadanos, principalmente en los niños y los jóvenes, para lograr una cultura donde el pensamiento y el método científico ayuden a elevar el nivel de vida de nuestras sociedades.

Cada uno de los países ha entrado en este proceso respondiendo a sus necesidades y coyunturas, pero en diferentes tiempos, con especificidades propias de cada uno, con resultados diversos en la aplicación de los programas adelantados, lo que se demuestra en los diferentes grados de desarrollo que hoy en día presentan.

Aún en los casos que podrían considerarse con una mayor evolución y madurez, la falta de políticas públicas para llevar a cabo planes de acción coherentes y pertinentes para cada país en popularización y enseñanza de las ciencias, ha significado dispersión de recursos, apoyo a proyectos de corto plazo, y una situación atomizada de diversas iniciativas sin un hilo conductor que les de contexto y garantice su impacto.

Paralelamente al desarrollo de estas experiencias, y quizás impulsada por éstas, se ha generado en los organismos gubernamentales una conciencia de la importancia de la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología que empieza a reflejarse dentro de las políticas nacionales. Estas políticas toman impulso a partir de la década de los años 90 debido a los acuerdos internacionales divulgación. Manuel, Calvo Hernando utiliza la palabra “transcodificación” para describir una traducción del lenguaje científico al lenguaje cotidiano, dentro de un contexto determinado que le da el sentido. 29 Proyecto Iberoamericano de Indicadores de Percepción Pública, Cultura Científica y Participación Ciudadana, Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICyT) del Programa CYTED. 30 La percepción que tienen los colombianos sobre la ciencia y la tecnología, Marzo, 2004. Colciencias, A.C.A.C. y Centro Nacional de Consultoría. 31 Notas sobre presupuestos implícitos en la construcción de indicadores de percepción y “cultura científica”, por Carmelo Polina, María Eugenia Fazio y Leonardo Vaccarezza, en La Ciencia ante el Público: Cultura humanista y desarrollo científico-tecnológico, Octubre, 2002. 32 Proyecto Iberoamericano de Indicadores de Percepción Pública, Cultura Científica y Participación Ciudadana, Organización de estados Iberoamericanos para la educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICyT) del Programa CYTED.

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que han señalado este campo como un elemento fundamental en la búsqueda de alternativas para lograr el desarrollo y la equidad en los pueblos. Sin embargo, a pesar de la preocupación que el tema despierta en los países, sólo en contadas ocasiones se ve reflejado en los planes nacionales de ciencia y tecnología y menos en las líneas estratégicas, objetivos o dentro de la visión de los mismos33.

Así, en las políticas públicas generales de ciencia y tecnología de los países signatarios del CAB, es posible encontrar menciones, párrafos o articulados que se refieren a la necesidad de que la sociedad tenga acceso a la ciencia y la tecnología:

• “Garantizar el acceso de todos los sectores de la sociedad al conocimiento científico y tecnológico en igualdad de condiciones y oportunidades”. Articulo 24 de la Ley 2209 de Fomento de la Ciencia, Tecnología e Innovación de 2001. Bolivia

• “El Gobierno asignará los espacios permanentes en los medios de comunicación de masas de propiedad del Estado para la divulgación científica y tecnológica”. Artículo 10 de la Ley 29 de Ciencia y Tecnología de 1990. Colombia

• “Partiendo del principio de que no existe conocimiento sin comunicación, y que es inseparable la generación de conocimiento de su apropiación y aplicación, es indispensable el fortalecimiento de mecanismos de comunicación e información de la actividad científica y tecnológica, así como de la difusión, discusión y uso de sus resultados entre académicos, investigadores, gobierno, empresarios y público en general”. Documento Conpes 3080 Política Nacional de Ciencia y Tecnología (2000-2002). Departamento Nacional de Planeación. República de Colombia

• “Inculcar una cultura de ciencia, tecnología e innovación en toda la sociedad y en particular en el sector empresarial”. Documento de Política Nacional de Ciencia y Tecnología de El Salvador

• “El 4 Plan Nacional de I+D+i 2000 – 2003 incorpora por primera vez de forma explícita las actividades de divulgación de la ciencia y la tecnología, mediante el mecanismo de convocatorias de acciones especiales”. España34

• “Promover la difusión de actividades científicas, tecnológicas, de innovación y de la calidad, así como realizar su ordenamiento y sistematización”. Ley 2279 del 2003. Paraguay

• “La promoción, difusión, divulgación e intercambio de CT e I, desde el nivel escolar hasta el empresarial, a través de museos, ferias, premios nacionales y otros mecanismos que propicien la valoración social del conocimiento, la identificación y promoción de talentos y la adopción de

33 Lozano, H.M., et al, Castañeda B, E. et al, en Proyecto: Innovaciones en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en los países del Convenio Andrés Bello, 2005 – 2008, Marzo, 2004. 34 Cultura científica: una prioridad para el diálogo entre ciencia y sociedad en España, por José Manuel Báez Cristóbal, director de programas y estudios de la Fundación Española Ciencia y Tecnología, FECYT. Memorias del Foro Conciencia Abierta, por una cultura de ciencia, tecnología e innovación en la sociedad. Convenio Andrés Bello, Colciencias y Maloka. Bogotá, Colombia. Marzo de 2004. www.cab.int.co clic en ciencia y tecnología y luego en icono de Memorias.

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hábitos permanentes de investigación e innovación”. Artículo 9, inciso f. del Anteproyecto de Ley General de Promoción de la Ciencia y la Tecnología para el Desarrollo Nacional”. Perú (2003)35

• “El interés público de la ciencia y la tecnología como uno de los instrumentos fundamentales para el desarrollo económico, social y político del país, así como para la seguridad y soberanía nacional”. Articulo 110 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999)

• “Desarrollar principios orientadores, articular acciones e implementar mecanismos institucionales y operativos para la promoción, estímulo y fomento de la investigación científica, la apropiación social del conocimiento y la transferencia e innovación tecnológica”, Artículo 1 de la Ley Orgánica de Ciencia y Tecnología de Venezuela (2001)

Con el apoyo de organismos internacionales, y en varios casos gracias a los préstamos del Banco Interamericano de Desarrollo –BID– los países dieron prioridad a algunas actividades de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, siendo las más frecuentes aquellas experiencias como las Actividades Científicas Juveniles –ACJ– (que se refieren a congresos, ferias regionales, nacionales e internacionales, clubes de ciencia, entre otras), la Semana o el Día de la Ciencia, (en Colombia fue el Año de la Ciencia y la Tecnología, 1988-1989), premios y reconocimientos a la comunidad científica, apoyo a iniciativas de los medios de comunicación, al fomento, creación y consolidación de museos, jardines botánicos, zoológicos y centros interactivos de ciencia y la tecnología, y más recientemente programas como Leamos la Ciencia para Todos, y la utilización de las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación –TICs– para la creación de redes de clubes de ciencia, profesores de ciencia o de periodistas científicos.

En su gran mayoría, las actividades cuentan con el apoyo de los Oncyt de los diferentes países, pero también han sido promovidas por entidades como las asociaciones para el avance de la ciencia, las asociaciones de periodismo científico, academias científicas, universidades, organizaciones no gubernamentales.

Es interesante observar que aún con diferente nivel de importancia, los países tienen un objetivo común: la popularización del conocimiento científico y tecnológico, entendido éste como la comprensión, validación y uso del conocimiento por parte de la sociedad, aunque en cada país este proceso se denomina de diferente manera.

Colombia es uno de los países miembros del Convenio Andrés Bello que ha formulado un documento titulado Política Nacional de Apropiación Social de la Ciencia y la Tecnología. Busca con ello diseñar una estrategia que convoque y movilice a los agentes de la ciencia y tecnología de Colombia para crear una atmósfera nacional de interés y compromiso en torno de la ciencia y la tecnología como estrategia de futuro, lo que significa “asegurar el incremento de la riqueza nacional, la generación, comunicación, discusión y uso del conocimiento científico y tecnológico que contribuyan al mejoramiento de la calidad de la vida y de la vida democrática, así como la exploración y presentación de alternativas de solución de los conflictos colombianos con base en el conocimiento valido. Y esto sólo es posible si instituciones de la totalidad de la estructura política,

35 Plan de Popularización de la Ciencia y Tecnología en el Perú, por Teresa Salinas Gomero, jefa de la Oficina de Actualización y Fortalecimiento de las Ciencias. Memorias del Foro Conciencia Abierta, por una cultura de ciencia, tecnología e innovación en la sociedad. Convenio Andrés Bello, Colciencias y Maloka. Bogotá, Colombia. Marzo de 2004. www.cab.int.co clic en ciencia y tecnología y luego en icono de Memorias.

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económica, social y cultural de la sociedad colombiana se movilizan en torno a la ciencia, la tecnología y la innovación” 36.

Entre otras acciones de los países del Convenio Andrés Bello, es de especial interés, por la necesidad apremiante que reviste, promover una política que entregue los lineamientos para hacer que esas actividades se enmarquen en un proyecto macro que les dé sentido dentro de un contexto, lo cual permitirá una mayor cohesión y sentido, y por tanto mayor impacto en la sociedad. Se busca que las actividades que se delineen como prioritarias en cada país tengan los componentes de investigación, calidad y evaluación, como ejes principales de su puesta en práctica.

La triada educación, desarrollo científico y tecnológico, y sociedad se constituye en el marco de referencia para la formulación e implementación de iniciativas para la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, a la vez que amplía la gama de reflexiones que obliga tanto a gobiernos como a las comunidades académicas y científicas a pensar en la educación más allá de su función netamente escolar, hacia su función social y sus vínculos con los otros sectores de la sociedad37.

Desde esta perspectiva, el reto para las políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en los países CAB está en asumirlas no sólo como la comprensión de las bases científicas y técnicas de determinados procesos vitales sino también de la dimensión política de los procesos y de las decisiones científicas. Esto implica que tanto la popularización como la enseñanza de la ciencia y la tecnología deben estar estrechamente articuladas con la ética y con las humanidades en general porque las respuestas a los dilemas que enfrenta hoy la ciudadanía movilizan no sólo conocimientos científicos, sino los sistemas básicos de valores de los ciudadanos y de los grupos sociales38.

5 PROPUESTA MARCO DE POLÍTICA PÚBLICA DE POPULARIZACIÓN Y ENSEÑANZA DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA EN LOS PAÍSES CAB

5.1 Principios

La propuesta de generar un documento marco de políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología se fundamenta en los siguientes principios básicos:

36 Política de Apropiación Social de Ciencia y Tecnología, documento presentado al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, Concyt, el 25 de junio de 2004. 37 Lozano, H.M., et al, Castañeda B, E. et al, en Proyecto: Innovaciones en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en los países del Convenio Andrés Bello, 2005 – 2008, Marzo, 2004. 38 Juan Carlos Tedesco (2004) asume esta mirada bajo el marco de la formación ciudadana. Al respecto comenta: “El nuevo capitalismo coloca a la ciudadanía moderna frente a decisiones cruciales que implican el manejo intensivo de conocimientos y de informaciones. Así, por ejemplo, decidir acerca de la protección del medio ambiente, acerca del uso del conocimiento del genoma humano, acerca de la protección de la salud pública y personal, acerca del manejo de la política económica del país, son algunos de los ejemplos más significativos de las cuestiones que un ciudadano moderno debe enfrentar y para lo cual necesita manejar un caudal importante de conocimientos y de informaciones. Los conflictos y las opciones que enfrentamos actualmente son, todos ellos, intensivos en conocimientos”. Las políticas de la apropiación social y la popularización de la ciencia y la tecnología en la América Latina. Memorias del Foro Conciencia Abierta, por una cultura de ciencia, tecnología e innovación en la sociedad. Convenio Andrés Bello, Colciencias y Maloka. Bogotá, Colombia. Marzo de 2004. www.cab.int.co clic en ciencia y tecnología y luego en icono de Memorias.

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• El acceso a los beneficios y al conocimiento obtenidos por la ciencia y la tecnología son un derecho de todo ciudadano y un deber del Estado39: La misión del Convenio contempla la generación de consensos y cursos de acción en las áreas de cultura, educación, y ciencia y tecnología, con el propósito de que sus beneficios contribuyan a un desarrollo equitativo, sostenible y democrático de los países miembros. El CAB entiende que sus países miembros están habitados por poblaciones diversas, y que el respeto a las individualidades y a las identidades nacionales prima por encima de cualquier acción. Dentro de este principio, promueve que los países trabajen por lograr consensos, entre ellos una cultura científica homogénea, democrática e incluyente, uno de sus objetivos. Abrir espacios para la discusión de las iniciativas y los acuerdos de su máxima autoridad, la Reunión de Ministros, se convierte en una de sus principales actividades.

• La popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología debe ser guiada por los principios básicos de la ética y la responsabilidad social, y orientada hacia la formación de ciudadanos críticos y conscientes de su papel en la sociedad a fin de extender la inclusión social y reducir los desequilibrios regionales: El valor intrínseco del conocimiento, clave en la historia de la humanidad, de su desarrollo y de la evolución de la cultura, involucra y promueve la participación de los integrantes de la sociedad en decisiones basadas en el conocimiento y en la ética, en tanto de las consecuencias de dichas decisiones depende el bienestar de las comunidades. Una sociedad informada tiene más posibilidades de incidir en las políticas públicas de su nación y tiene además la responsabilidad de actuar éticamente.

• La popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología democratiza el acceso al conocimiento científico y tecnológico para que todos los ciudadanos puedan participar en la generación, comunicación y uso del mismo, y como consecuencia en el desarrollo de las naciones promoviendo equidad y justicia social: Como consecuencia del anterior, la democratización de la ciencia y la tecnología se convierte en un principio que beneficia a todos los segmentos de la sociedad sin excepción alguna.

• La popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología es responsabilidad tanto de los entes gubernamentales como del sector productivo, las comunidades científica y académica y del ciudadano en general: Pero se trata de un proceso de doble vía. Si bien toda la población debe tener garantizado el acceso al conocimiento, también es cierto que todos los sectores de la sociedad tienen responsabilidad frente a la generación de lineamientos y actividades que promuevan una sociedad con más información y más conocimiento.

• La transferencia de las experiencias innovadoras de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, así como sus procesos, mecanismos y herramientas, favorece el desarrollo de los pueblos: Es necesario evitar la duplicación de esfuerzos, y sentar las bases de la transferencia de aquellas experiencias innovadoras que comprueben su efectividad en sus poblaciones objeto.

• La creación de instrumentos para evaluar los resultados y el impacto social de las experiencias es una necesidad: La falta de una política integradora ha tenido como consecuencia no solamente la atomización de iniciativas de popularización y enseñanza de la ciencia y la

39 En el Informe del Taller de Trabajo Popularización de la Ciencia y la Tecnología, organizado por la OEA en febrero de 2004 en Río de Janeiro, se destacan algunos de los principios que aquí recogemos. http://www.science.oas.org/Components/Brasil/Brasil_Informe.htm

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tecnología, sino la dificultad de diseñar instrumentos para sistematizar las experiencias, evaluarlas y validarlas.

• La popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología fomenta la creatividad para la solución de problemas de los mismos ciudadanos y, extensivamente de los países y regiones: Una política de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología refuerza la posibilidad que tienen los ciudadanos de todos los sectores de diseñar estrategias y soluciones para enfrentar los problemas naturaleza o generados por la acción humana.

• Los procesos de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología contribuyen a legitimar las diferentes formas de conocimiento: Los procesos de popularización del conocimiento deben contribuir a la construcción de una sociedad próspera y culta, lo que significa una capacidad para adaptar esos conocimientos a su cotidianidad, así como legitimar las diferentes formas de conocimiento local y ancestral, y ponerlas a dialogar con el conocimiento científico considerado universal

5.2 Popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología como problema político en los países CAB

Una política de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología buscará resolver los problemas que afrontan las sociedades de los países miembros del CAB, siendo el problema central “la escasa incorporación de conocimiento científico y tecnológico en la vida cotidiana de las personas para mejorar su calidad de vida”40. De este problema macro, el CAB ha identificado las siguientes situaciones problema:

• Desigual desarrollo en los países del CAB de los programas de la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología que enfatiza en la necesidad de establecer lazos de cooperación y de aprendizaje conjunto a través de la transferencia de experiencias que se han demostrado como exitosas.

• Falta de procesos de investigación y sistematización de las experiencias de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología.

• Ausencia de procesos de evaluación de experiencias en popularización y enseñanza en ciencia y tecnología.

• Políticas públicas que no contemplan la ciencia y la tecnología en la educación de sus ciudadanos

• Escasa motivación por parte de la comunidad a la apropiación de los contenidos científico-tecnológicos, producidos en nuestros países

• Falta de talento humano especializado en popularización y enseñanza de ciencia y tecnología desde una perspectiva integracionista.

40 David Gómez Villasante y Henry Yesid Bernal, compiladores. Portafolio programado de ciencia y tecnología del Convenio Andrés Bello (2005 – 2008), Cartagena, Colombia. 2004.

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El desarrollo de una cultura científica en países menos industrializados requiere de estrategias de divulgación del conocimiento científico que se produce en dichos países mostrando su sentido local, su riqueza y sus múltiples formas. Los agentes que promueven la divulgación científica deben concentrar sus esfuerzos en transformar el tradicional imaginario de la ciencia como algo extranjero, ajeno e inalcanzable y mostrarla como una actividad humana en estrecha relación con nuestro medio, con nuestros problemas y nuestra capacidad de resolverlos. De esta manera no sólo tendremos empresarios, políticos y ciudadanos convencidos de su valor, sino una ciencia mejor41.

Es indudable que las vicisitudes y problemáticas de los países en desarrollo exigen acciones urgentes de solución en temas como la pobreza, el hambre, las condiciones de vida muchas veces infrahumanas de sus pobladores, las guerras internas, que dejan de lado, por no decir en último lugar, el apoyo en general a la actividad científica y tecnológica, y a sus posibilidades de popularización y enseñanza hacia los ciudadanos.

Pero es igualmente cierto que la ciencia y la tecnología podrían tener en sus manos las posibles soluciones en el mediano y largo plazos a las situaciones que deben enfrentar las poblaciones de los países miembros del CAB. La puesta en marcha de iniciativas que promuevan la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, y el refuerzo y apoyo a aquellas que de alguna manera han demostrado ser exitosas en su labor de permear a sus audiencias, se consolidan como el puente más idóneo y eficiente para lograr que los diferentes grupos sociales que forman las poblaciones de los países CAB vuelvan su mirada hacia una nueva fuente de ideas que ha sido menospreciada hasta el momento, que les permita tener una calidad de vida aceptable y digna.

No es difícil encontrar experiencias de popularización y enseñanza de la ciencia en determinados lugares que surgen por iniciativa de los pobladores locales y que con el apoyo de entidades gubernamentales y no gubernamentales, resuelven problemas de su cotidianidad basados en el conocimiento científico42.

La información deberá ser de libre acceso y la utilización de la misma podrá beneficiar a las diferentes comunidades, dar respuesta a problemáticas de la vida diaria, prevenir desastres, proponer soluciones creativas, adaptar conocimientos y tecnologías. Sin ser la panacea, cuando el conocimiento científico y tecnológico está al alcance de la mayor parte de la población (ojalá de toda para hablar de un proceso de inclusión social como tal), es más viable conseguir resultados que realmente promuevan una mejor calidad de vida para los ciudadanos.

Las encuestas realizadas en países de la región iberoamericana para medir la percepción que los ciudadanos tienen sobre la ciencia y la tecnología dan cuenta de este problema: las poblaciones encuestadas reconocen la necesidad del conocimiento científico y tecnológico, pero no lo asumen como parte de su cotidianidad. Si bien el imaginario social favorece de alguna manera al tema tecnológico, por cuanto se percibe como más cercano a la realidad de las poblaciones, frente a la ciencia aún es largo el camino por recorrer.

41 El público y las políticas de ciencia y tecnología, por Mauricio Nieto Olarte, en Interciencia Volumen 27. Número 2. Febrero, 2002 42 Ver por ejemplo la experiencia de la “Cátedra del Agua”, en Medellín, Colombia, o el mismo Programa Ondas, que se enfoca hacia la solución de problemas locales con base en el conocimiento, siendo la población infantil y juvenil su protagonista. Memorias del Foro Conciencia Abierta, por una cultura de ciencia, tecnología e innovación en la sociedad. Convenio Andrés Bello, Colciencias y Maloka. Bogotá, Colombia. Marzo de 2004. www.cab.int.co clic en ciencia y tecnología y luego en icono de Memorias.

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La escasa incorporación de conocimiento científico y tecnológico en la vida cotidiana de las personas por tanto es el problema central que ha motivado al CAB a proponer a sus países signatarios el diseño y aprobación de una política de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología. Para que esto sea posible, en cada país esta propuesta deberá estar sustentada en una política general de ciencia y tecnología que le de un marco conceptual y un peso específico.

5.3 Objetivos

Promover que la ciudadanía se interese, comprenda, convalide y utilice la ciencia y la tecnología en su cotidianidad, y fortalecer la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología de acuerdo con las realidades de cada país.

5.3.1 Objetivos específicos

• Movilizar a los actores de la sociedad de los países del Convenio Andrés Bello para que participen activamente en la generación de procesos de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología.

• Integrar las actividades de popularización y enseñanza de la ciencia en un sistema coherente que las complemente, las enriquezca, y permita su transferencia entre regiones.

5.4 Lineamientos

• Investigación, sistematización y evaluación permanente de los planes, programas y experiencias nacionales en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología: Sin duda alguna planes, programas y experiencias que se adelantan en los países y en la región son producto de una reflexión profunda de las necesidades y problemas de las poblaciones. Lo que no es muy común es encontrar un seguimiento sostenido y continuo que permita una valoración objetiva de esas actividades de popularización y enseñanza que demuestre los procesos vividos, el impacto logrado, los niveles de cobertura, calidad y eficiencia, por mencionar algunos ejemplos. La falta de instrumentos que permitan hacerlo de una manera homóloga y satisfactoria es uno de los retos para la región.

• Difusión y apoyo a las mejores prácticas y programas nacionales de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología: Para difundir y apoyar las mejores prácticas y programas, el primer paso es definirlas, sistematizarlas, evaluarlas y valorarlas, para luego seleccionarlas por medio de procesos y métodos confiables, diseñados con ese objetivo.

• Transferencia de las mejores prácticas en el campo de la popularización y las innovaciones en la enseñanza de la ciencia y la tecnología: El programa de transferencia de mejores prácticas debe permitir la identificación y futura transferencia de aquellas iniciativas con resultados satisfactorios para las poblaciones a las cuales se dirigen, medición que podrá adelantarse a través de un proceso de medición de indicadores de formulación, de insumos, de gestión, de impactos y de resultados en el corto, mediano y largo plazos. Tradicionalmente el Convenio Andrés Bello ha apoyado la generación y fortalecimiento de iniciativas que promueven una cultura científica en sus países signatarios, extendiendo su campo de acción incluso a otros países de la región. Este camino recorrido le ha demostrado que no es necesario reinventar la rueda: la experiencia de algunos de sus países miembros en diseñar y consolidar iniciativas que

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fortalezcan la apropiación social del conocimiento científico en toda la población demuestra cierto grado de madurez que bien puede ser aprovechado por aquellos que aún se encuentran en etapas tempranas de estos procesos de enseñanza y popularización de la ciencia y la tecnología.

• Formación de talento humano en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología desde una perspectiva integracionista: La capacitación de personal para popularizar y promover innovaciones en la enseñanza de la ciencia y la tecnología es un pilar fundamental de la política que se propone. Sin personal capacitado profesionalmente para la ejecución de estas actividades será difícil evolucionar. Con excepciones, quienes tienen en sus manos la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología son profesionales de otras disciplinas. Ya es hora de que la región inicie programas universitarios con planes de estudio pertinentes a los diferentes países, promoviendo además escuelas de pensamiento basadas en las realidades de la región.

• Fortalecimiento de redes de articulación e intercambio nacional y regional entre entidades gubernamentales y no gubernamentales que trabajan en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología: Hoy en día el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación, TIC´s, favorece la puesta en marcha de manera eficiente y continua, de redes que existen actualmente, así como de aquellas que pueden generarse en el corto o mediano plazos.

5.5 Actores

Una política pública en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología considera tres actores fundamentales, que se insertan en un contexto determinado, dependiendo de las sociedades de los países del CAB: los tomadores de decisión, las comunidades científica, académica y de innovadores tecnológicos, y el público en general. Sin embargo las empresas, organizaciones no gubernamentales, asociaciones sin ánimo de lucro, grupos de interés, entre otros, deberían consolidarse poco a poco como actores claves para los procesos de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología.

Si se pretende una política realmente pública de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, es necesario involucrar al mayor número de instituciones, actores e intereses.

A nivel nacional, en primer lugar, el sector político, en cuyas manos está la toma de decisiones para adoptar políticas públicas que conlleven a una mejor comprensión de la utilidad del conocimiento científico y tecnológico por parte de los ciudadanos. La mayoría de las decisiones económicas, ambientales, de infraestructura, que deben tomar los gobernantes, estarían mejor sustentadas y comprometerían menos el entorno y la sociedad, si tuvieran la posibilidad de acceder con mayor facilidad al conocimiento. El sector político es un sector clave: por ser quien en últimas toma las decisiones, debe estar sensibilizado frente a la necesidad de ampliar las fuentes de información y conocimiento en ciencia y tecnología.

El sector productivo, que jalona el crecimiento económico del país y su desarrollo hacia un modelo sustentable, que promueve las innovaciones, que ofrece posibilidades de empleo y aporta a la formación de los ciudadanos activos laboralmente.

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La comunidad científica y los innovadores tecnológicos de los países, quienes producen conocimientos y promueven desarrollos e innovaciones en productos y procesos, deben desempeñar un papel protagónico, como fuentes directas de la ciencia y la tecnología. Es evidente que su misión será promover la divulgación del trabajo que realizan desde sus propios centros de investigación, con el propósito de realzar los desarrollos que se producen nacionalmente. En segunda instancia porque son las fuentes más idóneas para sentar posiciones y generar debates respecto de los desarrollos de la ciencia y la tecnología a nivel internacional.

La comunidad académica donde se forman los ciudadanos del futuro de los países del Convenio Andrés Bello, y que integran docentes, alumnos, padres de familia y el entorno escolar en general. Las instituciones de educación formal tienen en sus manos la posibilidad de estimular vocaciones científicas, facilitar el diseño y puesta en marcha de iniciativas de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, promover el interés de toda la comunidad por una cultura donde el componente científico sea el disparador de un pensamiento inquieto, curioso y reflexivo.

Las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales de todo tipo, asociaciones y grupos con intereses comunes, no solamente aquellos que están en el campo de la ciencia y la tecnología. A medida que se vaya permeando a las diferentes instancias de acción participativa de los países, todos ellos encontrarán un espacio donde el capítulo de ciencia y tecnología representará un nicho de acción.

Las instancias de decisión regionales, actores indispensables para dar cohesión a un marco común de políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en los países del Convenio Andrés Bello.

Las agencias de cooperación internacional, comprometidas con procesos sociales en países en vía de desarrollo.

La niñez, la juventud y la tercera edad, grupos de la población que desde sus respectivas esencias y perspectivas, son actores fundamentales tanto para la emisión como para la recepción del nuevo conocimiento. Grupos de jóvenes y niños conformados en clubes de ciencia, o participantes de actividades científicas extraescolares con intereses científicos, y profesores e investigadores jubilados que pueden propiciar actividades para multiplicar el conocimiento adquirido durante toda su vida.

Las poblaciones marginadas y desplazadas, a las que se excluye de los proyectos de popularización de la ciencia y la tecnología por diferentes razones. Será necesario crear mecanismos de acción efectivos y apropiados para llegar con el mensaje a los integrantes de dichas poblaciones.

Los comunicadores científicos y tecnológicos, mediadores entre el conocimiento y las diferentes audiencias, componentes clave de los procesos de transmisión y recepción del nuevo conocimiento. Se trata de un nuevo profesional que, no importa de la disciplina que provenga, tiene en sus manos la destreza y los instrumentos para comunicar la ciencia de una manera efectiva, participativa y democrática.

Los ciudadanos de los países del Convenio Andrés Bello en general.

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5.6 Estrategias

• Estrategia para la investigación, sistematización y evaluación permanente de los planes, programas y experiencias nacionales y regionales en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología: Generar un mecanismo para promover estos procesos dentro de la comunidad de gestores de las experiencias.

• Estrategia de difusión y apoyo a las mejores prácticas en el campo de las innovaciones en la enseñanza de la ciencia y la tecnología: Con base en el anterior mecanismo, promover la cultura de la evaluación y valoración para poder contar con un banco de mejores prácticas, fortalecerlas y difundirlas.

• Estrategia para el intercambio y adecuación de mejores prácticas y programas nacionales de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología: Generar un programa de transferencia de mejores prácticas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología.

• Estrategia de formación personal especializado en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología desde una perspectiva integracionista: Apoyar y promover programas de formación de comunicadores, popularizadores e innovadores en la enseñanza de la ciencia y la tecnología.

• Estrategia de fortalecimiento de redes de articulación e intercambio nacional y regional entre entidades gubernamentales y no gubernamentales que trabajan en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología: Iniciar con el fortalecimiento de las redes ya existentes, articulándolas y estructurándolas de acuerdo con los objetivos de la política.

5.7 Instrumentos

Con diferente grado de implementación, todos los países signatarios del CAB han desarrollado actividades de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología desde hace varios lustros, iniciativas que cuando se ponen en marcha se convierten en los mejores instrumentos para adelantar la Política Pública en Popularización y Enseñanza de la Ciencia y la Tecnología en los Países del Convenio Andrés Bello.

Sin tener aún un mecanismo perfeccionado que permita identificar las mejores prácticas, existen ciertas líneas de acción mundialmente aceptadas, que deberán ser reforzadas, apoyadas, integradas al resto de actividades identificadas como prioritarias. Otras deberán ser diseñadas y transferidas de acuerdo con las necesidades y expectativas locales.

La implementación exitosa de la política se verá reflejada cuando las diferentes actividades que se lleven a cabo sean complementarias e integradoras; cuando cada una de las iniciativas tenga vida propia, sea autosuficiente, tenga sus objetivos, resultados e impacto particulares, pero forme parte sustantiva de un conjunto coherente de actividades, que representará la materialización de la política.

Tradicionalmente, las experiencias más conocidas en la región son:

• Actividades Científicas Juveniles –ACJ– (que se refieren a congresos, ferias regionales, nacionales e internacionales, clubes de ciencia, entre otras)

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• Ferias locales, departamentales, nacionales y regionales de ciencia y tecnología

• Olimpíadas de ciencia y tecnología

• Museos y centros interactivos locales, nacionales e itinerantes

• Divulgación científica y tecnológica en medios masivos de comunicación

• Producción de materiales para la enseñanza-aprendizaje de la ciencia y la tecnología

• Programas de periodismo científico

• Encuentros entre la población infantil y juvenil y la comunidad científica

• Programas de estímulo hacia el mundo científico dirigidos a las poblaciones infantiles y juveniles

• Semana o Día de la Ciencia

• Premios y reconocimientos a la comunidad científica y a los divulgadores del conocimiento

• Programas especiales de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en jardines botánicos, zoológicos, planetarios y otros escenarios similares

• Programas como Leamos la Ciencia para Todos

• Redes de clubes de ciencia, profesores de ciencia o de periodistas científicos

Indudablemente existen innumerables formas de expresión de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, cada una con sus particularidades. Para efectos de proponer estrategias macro en Política Pública de Popularización y Enseñanza de la Ciencia y la Tecnología proponemos:

5.7.1 Iniciativas colectivas para la popularización de la ciencia y la tecnología

Las líneas de acción que contempla este apartado incluyen iniciativas puntuales, gubernamentales o no gubernamentales, dirigidas a públicos concretos, que buscan incidir sobre ellos y generar actitudes a través de la entrega de un mensaje específico en algún campo de la ciencia o la tecnología. Tienen como objetivo principal transformar una realidad específica y solucionar un problema generado, a través de la entrega de una mayor información sobre el tema y de la generación de acciones de participación que involucren a las comunidades seleccionadas.

Entre estas iniciativas se destacan:

• Las acciones por parte de la comunidad científica (universidades, centros e institutos de investigación, etc.) para entregar información sobre los procesos y resultados de sus estudios hacia la comunidad (Revistas y otros medios de divulgación)

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• Los espacios (conferencias, demostraciones, talleres, etc.) donde los representantes de la comunidad científica y de innovadores tecnológicos tengan la oportunidad de comunicar su conocimiento

• Organización de círculos de interés (sociedades de amigos de la astronomía, de la biodiversidad, de las cuencas hidrográficas, de la literatura científica, historia de la ciencia, etc.), para la producción y diseño de experiencias que no solamente enriquezcan a sus integrantes, sino que permeen a las poblaciones afectadas o interesadas directamente.

• Los museos y centros interactivos de ciencia y tecnología donde existan y promover la construcción de nuevos espacios de esa naturaleza en localidades estratégicamente ubicadas.

• Las acciones innovadoras de popularización y enseñanza de la ciencia en lugares, centros e instituciones tradicionales como los jardines botánicos, los zoológicos, los planetarios.

5.7.2 Iniciativas en tecnologías de información y experiencias en comunicación en medios para la popularización de la ciencia y la tecnología

En ellas se incluyen las iniciativas que utilizan a los medios masivos de comunicación como canales para la entrega de informaciones y contenidos de ciencia y tecnología. Tienen como objetivo principal informar sobre estos temas, generar opinión sobre los mismos, y promover actitudes críticas y participativas entre sus audiencias.

Entre estas iniciativas se destacan:

• Los espacios en los medios masivos de comunicación (prensa escrita, radio, televisión, cine, agencias de noticias e Internet) para la divulgación de la ciencia y la tecnología, con énfasis en los procesos y resultados de la ciencia en la región.

• Los espacios que los medios masivos de comunicación ya destinan a la ciencia y la tecnología, facilitando material de ciencia y tecnología de la región.

• Los escenarios de encuentro entre la comunidad científica y los tradicionales comunicadores y periodistas, para fortalecer los lazos y propiciar un mejor entendimiento. Ejemplos de ello son ruedas de prensa, almuerzos científicos, talleres y cursos de capacitación, etc.

• Las estrategias de sensibilización a los directores y editores de los medios masivos de comunicación para que vean en la ciencia y la tecnología nacionales y regionales una valiosa fuente de información.

• Los cursos de capacitación para comunicadores de ciencia que trabajan en los medios masivos de comunicación.

5.7.3 Iniciativas en la enseñanza (no formal e informal) y el aprendizaje de la ciencia y la tecnología

En esta categoría se incluyen las iniciativas que utilizan al sistema de educación formal para generar espacios extracurriculares (no formales) dirigidos a la comunidad educativa (estudiantes de todos los

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niveles, docentes, padres de familia, entre otros). Buscan motivar vocaciones científicas e investigativas en los estudiantes, desde los niveles básicos hasta la universidad, y permear a la comunidad educativa en general.

Entre estas iniciativas se destacan:

• Los Clubes de Ciencia y otras manifestaciones de las Actividades Científicas Infantiles y Juveniles (Olimpiadas, excursiones, etc.) para que su diseño e implementación como programas estén acordes con las necesidades e intereses locales, nacionales y regionales.

• Las actividades participativas que fusionen el arte y la ciencia, como teatro y comedias, conciertos, pintura, escultura, etc.

• Libros y materiales virtuales sobre ciencia y tecnología de consumo masivo, producidos por niños, jóvenes, docentes y tercera edad.

• Los festivales, ferias y exposiciones de ciencia y tecnología desde el aula, hasta el nivel internacional.

• Las actividades que promueven la enseñanza de la ciencia utilizando la red virtual Internet y otras tecnologías.

5.7.4 Iniciativas para la investigación y gestión de los procesos de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

El diseño, la realización y la puesta en marcha de las diferentes iniciativas de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología requieren de un permanente monitoreo y estudio que entregue información sobre su evolución, desarrollo y real impacto en sus audiencias.

Es muy poca la investigación que se realiza en los países signatarios del CAB frente a los procesos que conducen a la apropiación de la ciencia por parte de los ciudadanos. Como parte central de la política es necesario crear las condiciones para apoyar a los investigadores sociales en comunicación de la ciencia para fortalecer su actividad, y facilitar la formación de nuevos investigadores. Los resultados generados por los estudios a nivel nacional y regional permitirán tomar decisiones basadas en la calidad, eficiencia e impacto de las diferentes iniciativas.

Entre estas iniciativas se destacan:

• La investigación social en la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología.

• La formación de investigadores en el campo, a través del diseño de programas universitarios regionales y nacionales.

• La formación de profesionales capacitados para adelantar tanto las investigaciones como las propias actividades.

• Cursos de formación de los comunicadores sociales de la ciencia y la tecnología.

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5.8 Mecanismos de implementación

De acuerdo con los avances e intereses de cada país y siguiendo los lineamientos propuestos en este documento, el marco de políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología para los países CAB deberá contemplar los siguientes mecanismos:

• Un foro permanente que sensibilice, formule, revise, realice seguimiento y promueva la consulta continua entre los gobiernos y sus socios de las políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y tecnología

• Una política pública regional de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, diseñada de manera conjunta y oficial, debe articularse con las estructuras educativas y culturales de cada país con el objetivo de lograr que los ciudadanos accedan a un aprendizaje para toda la vida

• Un Fondo internacional de fomento a la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

• La existencia de redes de transferencia de mejores prácticas en políticas y experiencias innovadoras en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología permite impulsar alianzas internacionales, basadas en las instituciones nacionales competentes.

• Alianzas estratégicas entre agencias de desarrollo internacional, bilateral, organizaciones no gubernamentales y gubernamentales, y todos aquellos comprometidos con la popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología.

• Planes de acción y programas concertados de acuerdo con los objetivos, mandatos y sectores que representan y que se plantean en la política pública.

• Cooperación entre grupos y países CAB que comparten ciertas características e intereses.

• Foros Nacionales Permanentes de Políticas Públicas en Popularización y Enseñanza de la Ciencia y Tecnología, liderados por los Oncyt de los diferentes países con el apoyo del Área de Ciencia y Tecnología del CAB, en los que haya responsabilidad compartida por los sectores tanto públicos como privados en cada país. Dependiendo de los avances de cada país, los foros podrán convertirse en espacios de concertación y discusión para:

o Sensibilizar a los tomadores de decisión de políticas públicas y posibles socios sobre la importancia de formular e implementar políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

o Aportar a la definición de las políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

o Revisar las políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

o Hacer seguimiento a las políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

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o Intercambiar experiencias y avances en las políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología

o Realizar consultas continuas sobre avances, resultados, problemas, etc.

• Un Sistema de Evaluación y Validación de Mejores Prácticas en Popularización y Enseñanza de la Ciencia y la Tecnología en los Países del Convenio Andrés Bello. Los estudios confirman que poco se ha avanzado en los sistemas de evaluación que permitan afirmar con certeza la pertinencia de una experiencia de popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología en determinado lugar. Pocas fueron las que se presentaron en el Foro Internacional Conciencia Abierta (Bogotá, Colombia, marzo 24-26 de 2004), que al menos proponían un mecanismo de validación de sus resultados.

5.9 Toma de decisión

Estará en manos de los ministros y autoridades máximas de los países signatarios del CAB la adopción de un marco de política pública en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología, y su posterior adaptación a las necesidades nacionales, con el concurso de los actores mencionados en el anterior item.

Este primer paso dado por los países CAB será el pilar sobre el cual otros países de la región iniciarán la construcción y puesta en marcha de sus propias iniciativas de política pública en el tema que nos compete.

5.10 Evaluación de resultados

La propuesta de sistematización, evaluación y validación de mejores prácticas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología que sigue a este documento se convierte en un instrumento de evaluación de los resultados de la política pública.

El montaje del Foro permanente para guiar la acción de sensibilización, formulación, revisión, seguimiento y consulta continua entre los gobiernos y sus socios de las políticas públicas en popularización y enseñanza de la ciencia y la tecnología permitirá también revisar continuamente la evolución de la puesta en práctica de la política en cada país e insertarla en el escenario regional.

La generación de una cultura de medición de la percepción pública de la ciencia y la tecnología en los diferentes países permitirá además ofrecer un panorama de la posición de los ciudadanos frente a la ciencia y la tecnología.

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