seguridad alimentaria

9
SEGURIDAD ALIMENTARIA El Plan Nacional de Seguridad Alimentaria (PNSA) fue creado en 2003 en el marco de la Ley 25.724, con el objetivo de posibilitar el acceso de la población en situación de vulnerabilidad social a una alimentación complementaria, suficiente y acorde a las particularidades y costumbres de cada región del país. La seguridad alimentaria de una familia o comunidad contempla, según lo establece la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) , los siguientes componentes: disponibilidad de alimentos; acceso suficiente a los alimentos; buena selección; correcta elaboración, manipulación y conservación; adecuada distribución dentro del grupo familiar; y buen aprovechamiento por el organismo. En este sentido, la ejecución del PNSA involucra en sus líneas de acción los distintos aspectos necesarios para promover la seguridad alimentaria y realiza actividades de educación nutricional que aseguren el derecho a tener acceso a información científica, culturalmente aceptada y adecuada a las distintas comunidades del país.

Upload: gabriela-jan

Post on 19-Dec-2015

2 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Seguridad Alimentaria - Ministerio de Desarrollo de la Nación

TRANSCRIPT

Page 1: Seguridad Alimentaria

SEGURIDAD ALIMENTARIA

El Plan Nacional de Seguridad Alimentaria (PNSA) fue creado en 2003 en el marco de la Ley 25.724, con el objetivo de posibilitar el acceso de la población en situación de vulnerabilidad social a una alimentación complementaria, suficiente y acorde a las particularidades y costumbres de cada región del país.

La seguridad alimentaria de una familia o comunidad contempla, según lo establece la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), los siguientes componentes: disponibilidad de alimentos; acceso suficiente a los alimentos; buena selección; correcta elaboración, manipulación y conservación; adecuada distribución dentro del grupo familiar; y buen aprovechamiento por el organismo.

En este sentido, la ejecución del PNSA involucra en sus líneas de acción los distintos aspectos necesarios para promover la seguridad alimentaria y realiza actividades de educación nutricional que aseguren el derecho a tener acceso a información científica, culturalmente aceptada y adecuada a las distintas comunidades del país.

Una de sus líneas fundamentales es la implementación de tarjetas magnéticas a las que el Estado transfiere dinero para la compra de alimentos, de manera que las personas eligen libremente que alimentos comprar de acuerdo a sus gustos y hábitos. Las titulares de derecho de esta acción son aquellas familias con niños menores de 14 años, embarazadas, personas

Page 2: Seguridad Alimentaria

con discapacidad y adultos en condiciones socialmente desfavorables y de vulnerabilidad nutricional. De este modo, se promueve la autonomía en la selección de alimentos, se fomenta la comida en familia y se favorece el acceso a alimentos frescos (frutas, verduras, leches, yogures, quesos y carnes, entre otros).

Por otra parte, se realizan transferencias de fondos bajo proyectos, a los estados provinciales, destinados a reforzar la alimentación de niños y niñas en edad escolar y el fortalecimiento a organizaciones sociales que desarrollan actividades en espacios comunitarios y brindan prestaciones alimentarias. Se acompañan estas acciones con actividades de educación alimentaria nutricional y promoción del desarrollo infantil y familiar, tanto para técnicos locales, como referentes comunitarios y familias.

El PNSA desarrolla además, otras líneas de acción que complementan las acciones mencionadas anteriormente: • Familias y Nutrición contribuye al desarrollo y fortalecimiento de las familias en torno a la nutrición y a la alimentación desde un enfoque integral que contempla los diversos aspectos que influyen en las elecciones alimentarias;• Abordaje Comunitario impulsa el desarrollo de las organizaciones comunitarias que brindan servicios alimentarios;• Pro-Huerta promueve el acceso a una alimentación saludable mediante la autoproducción de alimentos frescos para el consumo personal, familiar y comunitario;• Educación Alimentaria y Nutricional se centra en generar capacitaciones con el objetivo de convertir los conocimientos en hábitos de alimentación saludable.

Todas las acciones desarrolladas por el PNSA son acompañadas y fortalecidas a través de la edición de libros, folletos, cuadernillos, afiches y textos educativos, como así también por medio del desarrollo de acciones de comunicación dirigidas a la comunidad.

FAMILIAS Y NUTRICIÓNEste proyecto tiene como propósito contribuir al desarrollo y fortalecimiento de las familias en torno a la nutrición y a la alimentación desde un enfoque de derechos. Ello implica posicionarse frente a la problemática alimentaria nutricional desde un enfoque integral que tiene en cuenta la salud, la educación, aspectos culturales, económicos y vinculares. Esta iniciativa genera instancias de capacitación, comunicación y educación alimentaria nutricional en contextos institucionales, familiares y comunitarios del país.

Para su implementación, el Ministerio de Desarrollo Social articula sus acciones con equipos provinciales, locales y con los distintos actores sociales involucrados en la temática de infancia y familia. Asimismo, lleva adelante la elaboración y ejecución de las siguientes propuestas:

• Asistencia técnica y capacitación a referentes provinciales y locales de programas alimentarios.

• Asistencia técnica y capacitación a técnicos y promotores del programa Pro Huerta.

• Acceso al derecho a la información en torno a la alimentación y a la soberanía alimentaria mediante la promoción de estrategias de comunicación social, popular y comunitaria.

Page 3: Seguridad Alimentaria

• Capacitación a organizaciones comunitarias y a personal de los Centros de Desarrollo Infantil Comunitario.

Además, para acompañar estas acciones, un equipo técnico del programa Familias y Nutrición selecciona, elabora y distribuye diversos materiales educativos y didácticos:

• Módulos literarios y de divulgación científica para lectores no convencionales, primeros lectores y lectores con mayor autonomía.

• Juegos y juguetes de construcción, dramatización, de mesa y para bebés.

• Nutrijuegos de educación alimentaria diseñados especialmente para compartir en familia.

• Películas para ver en espacios comunitarios.

Estos materiales didácticos aportan herramientas para enriquecer el pensar y el hacer de los múltiples actores que despliegan sus acciones en las diversas localidades del país. Se utilizan en actividades culturales, jornadas y espacios de encuentro especialmente generados para compartir experiencias, fortalecer la identidad, los vínculos y las redes comunitarias.

Familias y Nutrición también lleva adelantela propuesta “Revalorizando nuestros alimentos tradicionales: seguridad alimentaria, identidad y diversidad cultural en el MERCOSUR”. El mismo promueve el intercambio de experiencias entre países de la región para la promoción de una identidad alimentaria basada en el respeto por la diversidad biológica, cultural y el fomento de productos tradicionales.

De esta forma, la iniciativa busca fortalecer la soberanía alimentaria, revalorizar las formas de producción local, así como también reconocer y promover las diversas prácticas y representaciones culturales vinculadas al consumo de los alimentos compartidos.

Desde su inicio en 2004, las estrategias de trabajo del proyecto Familias y Nutrición han permitido dar visibilidad y credibilidad a las acciones que lleva a cabo; fortalecer la conformación de redes e involucrar en la tarea diaria a diversos actores, posibilitando una mayor consistencia y sustentabilidad a las acciones en desarrollo.

ABORDAJE COMUNITARIO

Enmarcado en Plan Nacional de Seguridad Alimentaria, este programa está destinado a acompañar a las organizaciones comunitarias que brindan servicios alimentarios a niñas, niños y adolescentes de 0 a 18 años, mujeres embarazadas, madres lactantes y adultos mayores.

Su principal objetivo es contribuir al fortalecimiento de estas organizaciones desde una perspectiva de derechos, mediante acciones que incrementen su capacidad de gestión y

Page 4: Seguridad Alimentaria

mejoren las condiciones en que desarrollan los diferentes servicios que ofrecen a sus comunidades.

Con este propósito, brinda acompañamiento y asistencia a través de sus equipos técnicos y financia proyectos para actividades alimentarias y complementarias; ofrece además una serie de espacios de encuentro, trabajo, capacitación e intercambio de experiencias. La iniciativa también promueve la articulación de las organizaciones comunitarias entre sí y con otros actores, a nivel local y nacional.

Para su implementación, Abordaje Comunitario articula sus acciones con otros programas nacionales, tales como Primeros Años y Familias y Nutrición. Asimismo desarrolla líneas de acción territoriales e instancias de trabajo conjunto con el Consejo Nacional de las Mujeres, la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.

Hasta 2016, el programa continuará acompañando a las organizaciones comunitarias que se incorporaron hasta 2004, y que se encuentran ubicadas en 28 grandes conglomerados de 20 provincias, 24 municipios del conurbano bonaerense y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Page 5: Seguridad Alimentaria

PRO HUERTA El programa Pro Huerta es una política pública implementada por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). El mismo fue creado en 1990 mediante Resolución Nº 239/90.

Destinado a la autoproducción de alimentos con bases agroecológicas, su objetivo central es mejorar la soberanía alimentaria, favorecer la participación y organización de sectores vulnerables de la población y propiciar la comercialización de excedentes.

Con 23 años de desarrollo, el Pro Huerta trabaja en la capacitación y asistencia técnica de familias, entidades y organizaciones de la comunidad, brindando insumos tales como semillas, frutales, animales de granja y herramientas.

Junto a la puesta en marcha de huertas familiares, comunitarias y escolares, este programa capacita a promotores voluntarios de la comunidad; genera, adapta y aplica tecnologías apropiadas; asiste técnicamente en los procesos de producción de excedentes en ferias de economía social agroecológicas y en la adquisición de capacidades para asumir emprendimientos productivos.

Con presencia territorial en el 88% de los municipios del país, en la actualidad Pro Huerta cuenta con más de 630 mil huertas y 130 mil granjas que constituyen un aporte alimentario y nutricional para más de 3,5 millones de personas. Esta iniciativa de alcance nacional cuenta además con una red de más de 20 mil promotores voluntarios que propician el desarrollo y sostenimiento de esta política pública, constituyéndose en actores sociales con capacidad de resolución de problemáticas en cada una de sus comunidades (acceso a servicios básicos; mejoramiento de las condiciones sanitarias de los barrios; defensa del medio ambiente; rescate de especies nativas, entre otras).

La convergencia entre el saber popular y la asistencia técnica, priorizada por el Pro-Huerta a través de formas participativas y solidarias de producción de alimentos saludables, favorece la integración social, el arraigo territorial y la seguridad alimentaria de población socialmente vulnerable, partiendo de sus propias capacidades.

El programa Pro-Huerta es considerado por Estados y organizaciones de cooperación nacional como una política exitosa en materia de autoproducción de alimentos a recrear. La experiencia que Argentina viene desarrollando en Haití a través de este programa y el Curso Latinoamericano de Autoproducción de Alimentos, Seguridad Alimentaria y Desarrollo Local, co-organizado entre el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, el INTA, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) y Cancillería, son ejemplo en este sentido.

En 2008, la JICA identificó a Pro-Huerta como un modelo regional para la mejora de soberanía alimentaria, y promovió la organización de este curso durante los 5 años siguientes, a fin de incrementar las capacidades técnicas y metodológicas de los representantes de distintos países de la región para la generación e implementación de políticas, estrategias, programas y proyectos de seguridad alimentaria y desarrollo local.

Page 6: Seguridad Alimentaria

EDUCACIÓN ALIMENTARIA NUTRICIONAL

Este programa, previsto por la Ley 25.724, promueve el desarrollo de hábitos saludables permanentes para la producción, selección, compra, manipulación y utilización biológica de los alimentos mediante la educación alimentaria nutricional.

La iniciativa está dirigida a los sujetos de derecho de las distintas líneas de acción del Plan Nacional de Seguridad Alimentaria (PNSA), así como también a diversos actores institucionales y comunitarios, equipos técnicos provinciales y municipales, organizaciones de la sociedad civil, promotores del programa Pro Huerta y de otros programas que trabajan con las familias en sus comunidades. Busca generar espacios para compartir y poner en valor las prácticas de cuidado alimentario, proponiendo revalorizar la mesa familiar y reflexionar sobre los grupos de alimentos, sus características y recetas; abriendo posibilidades de aprendizaje, construcción y transmisión de saberes en las familias, sus comunidades y entre comunidades.

La Educación Alimentaria Nutricional es un proceso dinámico a través del cual los individuos, las familias y su comunidad adquieren, reafirman o cambian sus conocimientos, actitudes, habilidades y prácticas, actuando racionalmente en la producción, selección, adquisición, conservación, preparación y consumos de los alimentos, de acuerdo a sus pautas culturales, necesidades individuales y a la disponibilidad de recursos en cada lugar.

En este sentido, las actividades que comprende el programa están orientadas a acercar a las personas información confiable y garantizar su derecho a elegir los alimentos que le sean sanos, inocuos, nutritivos, variados, diversos y culturalmente apropiados.

Para su implementación, el programa impulsa diversas propuestas de formación, a través de la comunicación comunitaria, el teatro, la música, talleres y otras experiencias con el arte que recuperen los saberes y experiencias de las propias familias y promuevan prácticas saludables y solidarias. En este marco, se generan espacios para compartir y poner en valor las prácticas de cuidado alimentario, proponiendo revalorizar la mesa familiar y reflexionar sobre los grupos de alimentos, sus características y recetas; abriendo posibilidades de aprendizaje, construcción y transmisión de saberes.

De esta manera, se busca profundizar acciones de educación alimentaria nutricional que impacten sobre las prácticas personales, familiares, institucionales y comunitarias. Se brindan herramientas para que las personas puedan elegir adecuadamente sus alimentos, teniendo en cuenta una diversidad de factores económicos, nutricionales, culturales y afectivos, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de todos las y los habitantes del territorio nacional.