el imparcial

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,A t:A Tíradade El IVIPA3CIAL de ayer: 77.570 A,Tiancios:ia.oioaal©3,0,50 oáata. do peseta líuaa.' ídem axbPaajerog,0,75 id. da id. id, ídem en la fceroera p l a a a , 3 peaobaa id, OomutúoadosyreaúfcidosipreoioacoaTeaíáaaalM Número suelto 5 céntimos fiMVMiJU^A* 3Mel«in3te^4»18#Í^ <«-• DIABIO ilBERAti ^ FUNDADO POR D. EDUARDO GASSET Y ÁRTIME ' V Poriugal,7,50 id. id. Daolásp infc03 lalatfcranjarOjlOptas.trimestí»^ BSíbadosÜaidosda^ aáá-l^p;^,^. _ i.-;^._fc«i o a . O a b a 7 P a a r b o R.ioe>. | l&paaaiias bíimeabr*. sioaesie \^ério»y \sta. r'' *<*• * * ^, •Jjodalaaoírsípoadaaaiaygiroadebaadiri^rádil Galle de Mssonero Raninos, núm, 31 ios SALIENTES E El Sr^'Villaverdé no es ministro. ¿Qué le Jmportar si sale del gabinete acompañado or lo^ aplausos y las simpatías de cuanto ay de reeto, de sano y de moral en la na- oiOR^ s 1-1 j. ]Ya podían dar por nna salida semejante iBtts i n s e g u r a s c a r t e r a s ios ministros que se quedan para servir, no á su país, sino ios Caprickos y voluntariedades del Sr. Cáno- vas! En vano este señoix intenta deprimir al íninistro saliente con postizos y ridículos desdenes manifiestos en los sueltQS oficiosos y en las formas con que se ha procedido á cubrir la vacante de Gobernación. Esas arrogancias las puede tener cualquiera que deje á un lado la cortesía. Al dejar sus puestos el Sr. Vülaverde y eíSr. Dato j eíSrr^mitojoyiA-xattipqrLéa de Cubas, da quien nadie puede suponer que continúe desempeñando su cargo en Sitj condiciones en las cuales se le coloca, prestan un gran servicio á la nación conte- niendo con su ejemplo el negr9 pesimismo inspirador de la funesta creencia de que en este país no quedan ya caracteres enérgi- cos y viriles capaces de dignas y serias re- soluciones. Ni es menor el servicio prestado á iaa ideas conservadoras y al partido conserva- dor, que todo el mundo verá desde ahora representado por ellos y no por ese gabine- te de cortesanos^de la Huerta. El prestigio alcanzado en la lucha por una causa justa y moralizadora recaerá sobre todo er nu- meroso elemento de ese partido, identifica- do con los dignísimos ñmcionarios dimi- tentes, y dará pronto á la colectividad así remozada y robustecida nueva savia y vida nueva. De la descomposición horrible que la mano del Sr. Cánovas está Uevando á todas las esferas de la vida pública se Ubra, por la conducta del Sr. Vülaverde y sus amigos, lo más estimable del partido conservador. Se ha procurado envolverles en la marea de impopularidad y desprestigio en que todo va Sumergiéndose. Su entereza y rectitud los han sEdvado. ¿Qué mayor satisfacción pa- r a eU.os? Bien han podido ya conocer el efecto profundo y lisonjero causado en el ánimo ae todas las clases sociales. Ayer el Sr. Yi- Uaverde al salir del ministerio era saludado por todas partes como un triunfador. Su ca- sa era anoche visitada por multitud de per- sonas que acudían á demostrarle su apro- bación y sus simpatías. Los diputados con- servadores, en BU inmensa mayoría, lo ma- nifiestan su adhesión. El-partido conservador salió ayer del gobierno con los funcionarios dimitentes^ nada de cuanto de hoy más suceda le sera imputable. En el poder sólo quedan elemen- tos advenedizos y ruinas. LOS QUE SE QUEDAN El cerebro de Nabucodonosor no pudo tesistir el peso de su soberbia. El relato bí- blico es bastante conocido para que lo repi- tamos aquí. Mas se nos figura que el señor Cánovas va por 0I cammo de Nabucódo- Jiosor. ¡Heconocer él que se equivocó en la cri- sis de Noviembre del año pasado! ¡Nunca! ¿Padece por ello el interés púbKco? ¡Que pa- dezca y hasta que se ha^a pedazos! ¿Se (quebranta y descompone el partido conser- yador? ¡Que se aguante! ¿Para que están el f )aís y el partido, sino para satisfacer las vo- untariedades «del monstruo de la edad pre- sente?* ¿Se va el Sr. Viilaverde por no consentir en que permanezcan impunes las enormida- des cometidas en el Ayuntamiento de Ma- ^d? (Que se vaya, él lo sustituirá con cual- quier Danvila! . ¿Dimite el marqués de Cubas por no ha- ^cerse solidario de una conducta que alenta- á cuantos han convertido el Ayunfcamien- jto de Madrid en algo peor que un pudride- ro? ¡Que dimita; él le buscara tiu sucesor de ía misma madera del que ha dado al señor ^Viilaverde! ^^ ¡La opinión pública! El la desprecia... ¿iientras no la oye rugir en las calles. Los 'gandes intereses de la nación y de la mo- aiarquía, ¿qué son delante de los empeños de su amor propio? Así, en ese estado mental va el Sr. Cáno- .Xa,a destruyéndolo todo, y más que nada su J)ropia reputación. Uu amigo verdadero le aconsejaría que conservase á lo menoa loa , restos que aun se hallan en pie, con una larudente retirada. '( ¡Cómo va quedando su figura histórica! p a sincex'a compasión. Y todavía, si aquella ¿o parece peor, es porque se la compara con las de sus compañeros de gabinete. •;iFuera del Sr. Oos-Gayón, que es una espe- cie do familiar, y del Sr. Concha Castañeda, «juetieoelaimperturbabilidadde las momias, 'el único ejemplar de la hueste conservadora es el flamante ministro Sr. Danvila. El du- •que de Tetuán es un desertor liberal, el gé- •iieral Beranger un radical errante, el señor .Jjinares Eivas un converso de los líltimos ,iiempos, el Sr. Eomero Eobledo un refor- jxiista. ¿Dónde está el partido conservador? • •-•>Y ese gabinete así constituido, para pro- longar su arrastrada existencia tiene que pasar por todo, hasta por la pobre comedia que se quiere ensayar en el asunto de la Memoria del Sr. Dato; comedia antes silba- da que vista. ; ¡Destino fatal! Esta situación acabará á «ilbidos. , LO QUE NO SE HA VISTO JAífiÁS ' 'J El Sr. Cánovas explotó grandemei^te para sus fines políticos los escándalos del rsáyimtamiento de Madrid en la época fusio- .pista. El Si% C á n o v a s so utilizó de la des- jUnión de algunos elementos liberales. Esta ,<Je3unión y aquellos escándalos motivaron f& crisis por la cual el Sr. Cánovas fué en- 'fcargado de la presidencia del Consejo. Sin embargo, ni los escándalos ni la desunión jfueroa entonces lo que son en la actualidad. ',|ííay Tin rasero^ para medir'los aconteoi- ¡ipaientos de las situaciones liberales y otro ^ara las situaciones cauovistas? \; El Sr. Cánovas se considera seguro, por- t ) ere© quo ha llegado á infunSr miedo tando determinados elí^mentos del Esté.- / j«F <íse *« »teey« Á fexi4 ¿g£»« ÍJW»-^ bien que esos elementos y que el país ente- ro no conocen su juego, y n o l e apHcan el caüfioativo que merece A ' El Sr. Cánovas, que dejó en descubierto & la reina regente en la cuestión del viaje á Granada; que acaba de dejar de igual suer- te á la corona en la concesión de ios indul- tos, entabla un pleito oon su propio parti- do, cuyos elemei^tos máa e&uQS mantienen la urgente necesidad de moralizar el Aymi- tamiento de Madrid, y oon la prisa, que es el mejor recurso de las sorpresas, hace que la corona resuelva á su favor al aceptar sti candidato al ministerio vacante. ¿Es así como cumple sus deberes de ministro cons- titucional el Sr. Cánovas? ¿De esa manera atrae spbre todas las responsabilidades ante la opinión? - ElSf. Cánovas, qu« ]grQvoca las mayores dificultades por no sacrificar sus empeños de amor propio, sus voluntariedades, sus ca- prichos, luego mis el oonfiicto viene quiere q;;e, j)ara salvarlo, sacrifiquen otro^s lo más j;p'6Qia^,.Qoiyi^yapg£%Jte.IfOLÍ^^ tir, exifia al Sr. Villaverd© que sacnfioase sÚ digpidad, al Sr. Dato que sacrificase su seriedad y su porvenir, al marqués de Cubas que sacnfioase su alta reputación. ¿Es de esta suerte como entiende sus obligaciones de jefe de gobierno y de partido el Sr. Cá- novas? Aquí hemos visto muchas aberraciones. Tamañas como éstas no las habíamos visto jamás. ' i EL WABQUES DE CUBASI También ha dimitido el alcalde do Ma- drid. Las grandes esperanza^ que esté su- frido vecindario había puesto en la gestión de este hombre dignísimo, probo, inteligen- te, enérgico y activo, han sido defraudadas por una torpe y desatentada política. Los abusos contenidos por él, volverán con más fuerza como cenagosas aguas de pantano que han roto el dique. Era demasiada fortuna la que nos haTbía deparado un alcalde como el que . el puehlo madrileño deseaba hacía tantos años. La obra emprendida con tanto valor y entereza por el señor marqués de Cubas vendrá á tierra apenas apartada de ella la vigorosa mano que la levantaba; pero la figura del ilustre patricio quedará más ele- vada que nunca, porque su salida del Con- sejo municipal es no menos digna y noble que su entrada. De igual modo qixedará en el ánimo de todos el consuelo de saber que los caracte- res viriles y abnegados no han desaparecido de esta tierra de Castilla. Los jornaleros, por cuyo sustento y ocu- pación en los tristes días del invierno tanto se afanaba el marqués de Cubas; los pobres vendedores ambulantes, á quienes el im- puesto merma SUB míseras ganancias, y que por el alcalde dimisionario iban á ser redi- midos de tal gravamen; las numerosas cla- ses de contados recursos, que los hubieran visto aumentados oon la supresión de los abusos qtie en gran parte los devoran; los vecinos todos, que aimelaban j)or la purifi- cación de los asuntos del Municipio, lamen- tarán la pérdida sufrida; pero siem;pre aca- riciarán la esperanza de volver algún día á ver en la presidencia del Ayuntamiento al patriota insigne á quien su recta conciencia y su elevada dignidad n o l e h a n consentido seguir en las condiciones en que se preten- día colocarlo. Eeciba el señor marqués de Cubas, cuya eficaz gestión siempre tuvo nuestro modes- to apoyo, nuestro saludo y nuestro aplanso, no menos sincero, por su último dignísimo acto, que levanta los corazones lo mismo que los levantaron sus i'esoluciones enérgi- cas en el Municipio. Hay una satisfacción no igualada por ninguna _ otra satisfacción te- rrena: la de hacer el bien; el señor marqués de Cubas tendrá en ella su mejor recom- pensa. Hay otra satisfacción: la de expresar la gratitud á quien hace el bien. Esta es la que corresponde ahora al noble pueblo de Ma- drid. ,...,. .:..,„..,,,.., MISCELÁNEA POLÍTICA DÍSPAHATEJOE CRÍTERÍO Se nos ha escapado una errata en el títu- lo; no le Uaman ala crisis disparate de cri- terio, sino disparidad, pero... «En ocasiones, dentro do los grandes errores, se encierran las grcipdes verdades» ha dicho uno dé esos notables pensadores de los que descubre D. Manuel Becerra, por lo menos dos cada mañana. ' Y muy bien, pudiera ocurrir que dei;itro de nuestra errata hubiera una verdad, y que se tratase aquí de un disparate más e.i el criterio de D. Antonio. *** Lo primerito quo ha dicho el presidente del Consejo al Sr. Viilaverde, ea que hace falta oir á ciertos concejales. ¿Les parece á ustedes que no se les ha oido? Pues bien alto han gritado. La prueba es que han escandalizado á todo el mundo. Lo segundo es más curioso todavía, ha manifestado el Sr. Cánovas (La Correspon- dencia dixit): «Que no hay en el asunto motivo alguno de urgencia.» Vamos, el Sr. Cánovas no tiene prisa. Los concejales tampoco, como que le di- cen al machito: —Mira, no corras que no hiiy prisa. El Sr. Viüaverdo ha dicho: —Yo tengo prisa, de modo quQ h&sta más ver. Los madrileíios: ¡Qué lástima que el cargo (ó la carga) de vecino de Madrid sea tan dififcil de dimitir! ^ En seguida de decir estas cosas el. señor Cánovas, plagiando al personaje de un dra- ma célebre, añadió: —Ahora vamos á obrar. Y según afirma^un periódico, «El for. Cánovas se puso al habla por te- léfono con el Sr. Danvila y le ofreció la car- tera, de Gobernación.» Eso es, nos parece bien. Encargar un ministro por teléfono. Nada, como quien encarga un queso. *** Inmediatamente le.faé servido al Sr. Cá- novas ©1 ministro pedido por teléfono, j así, de la mano se maroharoa por los trigos» á jurar La única advertencia qtie, según no- ticias, hizo el Sr. Cánovas al Sr. Danvila fué la de que en sus discursea no fuera tan lar- go como de costumbre; esto es, que no diera cuenta de las cosas como otras veces. *** Al saber la noticia de la dimisión del se- ñor Vülaverde, durante algunas horas se daba por seguro el siguiente nombramiento: Ministro de la Gobernación: D. Alberto Bosch y Fusteguera». En medio de todas estas notas tristes para el gobierno, M Estandarte viene máa contento que unas castañuelas. Verán ustedes: «No son I08 conaeryadores como fueron, son y serán sus adversarios los fusionistaa, eí?tre qjiienes cada hombre es ana Opinión, cada perso- nalidad una aspiración, y todas ellas una rebe- lión constante contra el jefe que no tiene carác- ter ni acierto para dirigir eVpartido. ,_^.pieatra£.3ft,,j3,giM»-apÍ3MM^^ loB fasionisrtas, suponiendo itnaginanoS OJSMB- tos personales y crisis inveroaímiles, la polítioa sería, levantada y provechosa del gobierno.» Ole ya. «Con los gobiernos conservadores no mandan las personas, sino los principios; no se imponen las pasiones, sino las conveniencias del país.» ¡Qué desengaño cuando el colega vuelva en sí de la pítima ministerial, y vea lo ocu- rrido! LOS ESCÁLALOS PEl PANAli (POK TELEGEAPO) (DB NÜBSTBO OOHilEaPONSAt.) París 30 (10,15 noche) Mag-lstradeis «ue protestan Los magistrados no ooultan au displicencia por la ingerencia do loa diputados en la cuestión del Panamá. El presidente del tribunal de apela- ción califica de anárquica la intervención del Parlamento en las funciones judiciales. El fiscal general d» la república, Mr. Ques- nay de Beaurepaire, aatá fañoso y ante un gru- po de letrados ha declarada hoy en el Palacio da Justicia que el consejero Mv. Prinet debió ca- llarse, respetando el secreto profesional y negar- se á comparecer ante la comisión informadora. También ha manifestado el fiscal que le ha molestado mucho el discurso de Mr. Brisscn^ y que ha escrito 4 este político invocando eJ. prm- cipio do la separación da poderes, fundada en el derecho páblico. —Caere—ha díoho—defendiendo loa derechos de la magisti-atura y del foro y reoha7.ando cual- quiera ingerencia Je la comisión parlamentaria en los dominios de la justicia. Se añade que Mr. Quesnay de Beaurepaire, leo'os de presentar la dimisión de su cargo, aguar- dará á que le destituyan, porque así podrá vana- gloriarse de haberprocedido como un defensor de la independencia de los tribunales. Censuras Ae los sonadores Hoy han celebrado una reunión los senado- res que figuran en los grupos de la izquierda, y han censurado La tardanza 4e la magistratura en incoar la persecución contra los explotadores de los accionistas y obligacionistas del Panamá, No aprueban, sin embargo, el nombramiento da la comisión parlamentaria, porque su acción lia de producir la confusión de poderes, quo 1-93 reuniaoa califican de perturbadora y revofuoio- naria, HítseTas revelaciones Entre tanto la comisión informadora daba au- diencia, á pesar da no haberse resuelto, ni estar, en vías de resolverse hoy la crisis ministeriaL 1 Ha comparecido ol perito que insijeccionó los libros de la Compañía universal del canal de Pa- namá. Ha declarado que hasta 1888 la empresa ha- bía empleado 600 millones de francos en traba- jos para abrir el Canal, lOO en pagar gastos de administración y 300 en cubrir loa llamados gas- tos de emisión. Todos loa periódicos, sin distinción de colo- res, recibieron dinero, oegún su importancia y circulación obtuvieron sumas más ó menos con- siderables. La cuota mínima fué da 7.500 francos, y la máxima de 125.000. Además fueron distribddos 1.250.000 francos entre varias personas influyentes. Estas indicaciones han causado profunda im- presión en la opinión pública. l i » c o r r n p c i é n coiaprolbada Después de terminar su declaración el perito, se leyó la espoñtán^, de Mr. Thiórrec, garan- to de la conocida oas^de banca Thierrec y com- pañía. Dice el banqaero_ Thierrec: «El barón de Eeinach me envió un cheque de 3.390.000 francos, extendido en nombro de la Compañía del Canal de Panamá. Él 17 de Julio de 1888 mi caja giró contra el Banco da Francia 26 cheques al portador, quo representaban la indicada suma. Me obliga mi conciencia á declarar, si bian no he de revelar las firinas de los cheques sin pre- vio mandato de uh magistrado. Lo que haré será presentar mis libros á un individuo da la comisión informadora para que sean examinados y el gobierno ordene inmedia- tamente quo se incaute de ellos iin juez.> En cuanto fué tei-minada la Jeotura, tres indi- viduos de la colisión parlamentaria se tr^.slada- roa á las oficinas de la casa Thiorroc, y registl-a- dos los libros, recogieron datos elocuentísimos y qua bastarán para aclarar lo sucedid^, si el Ban- co de Francia no so niega á revelar quién cobró 'os cheques. Entre aquellos, cuyos números ha anotado la subcomisión, hay dos da nn millón do francos cada uno: los demás representan cantidades qué valían desde 5,000 á 16U.(XX) francos. Ijá «léinostraclón íínal El ministro de Justicia dimisiónai'io, Mr. Bi- card, ha ordenado ai fis-cal Mr. Quasnay da Beau- repaire que formule la demanda de incautación da los Lbros. La comisión parlamentaria confía en que ma- ñana quedarán aclaradas las cuestiones sobre que está llamada á informar.—A. * * PAEÍS 30.—Mi'.RosfiígnoI, perito calígrafo que examinó loa Hbros de la empresa del Panamá, ha dado á la comisión infamadora importantes de^ talles sobre las sumas distribuidas por dicha ero- presa á los periódicos; pero añadiendo que duran- te su esaman no encontró en dichos libros ningún nombre de hombres políticos.—Fabra, obispo de Sión fué su anciana madre, que con ademán tembloroso incHnó la cabeza besando el anillo. La escena fuá verdaderamente hermosa; el nuevo prelado, nopudiendo sobreponerse á la in- tensa y legítima amoción que le invadía, levantó del suslo a su madre y la recibió en Sus brazos con delirante efusión. Hijo y madre lloraron largo rato abrazados y una escena BemejaBte ocurrió al bendecir á los fieles, entre los cuales estaban loa hermanos del Sr. Cardona. _ Éste, á quien apadrinó el duque de Medina Sidonia en representación de la reina regetite, recibió los plácemes más sincaros de la familia real. Su primer acto fué el da enviar un telegra- ma da adhesión y profundo amor al Santo Padre. En seguida regresó á la iglesia del Buen Su- ceso en un coche de Palacio y acompañado del duque de Medina Sidonia, . Las campanas del templo acogieron C09 ale- gre repique la llegada del prelado, que pronun- ciará su primer sermón como vicario general castrense éñ la fiesta que el día de Santa Bárba- ra celebrarán loa artillsros en la iglesia de San tíerónimo. EL OBISPO _DE PALACIO Ii» consasrracidn Se celebró ayer con inusitada pompa ea la capilla de Palacio, siendo consagrante nuncio da Su Santidad, asistido de los prelados da Ta- masao y de Huesca. La familia real asistió desde su tribuna á la solemne ceremonia. Celebrada la idisa do consagración, que fué rezada^ y cantado un Te JDeum, el nuevo obispo recorrió proceaionalment^ la capilla bendiciendo á los fieles. Después abrazó á los prelados que asistieron al acto y dio á besar e} gijiUo á los invitados. L» primera serson&fUo sa arrodilló á&t^ «I iagracaánTuso" la oasulte. y ^paaefríqúísimo temo de Alfonso VI, bordado oon perlas y sedas d© colores. _______„.«„__ WevM ájél disb IMINISTROI ¡WINiSTROI A las seis y inedia salió del Consejo el Br. Cánovas, do tmiforme, dirigiéndose á. Pa- lacio, donde H'i »e enfoatraba «{Sr. Danvila. (De La Época), íEl íVao, 1» banda do Isabel ID jA vestirme! Estas cosas como le gustan á Cánovas, ensd- gnidita, cuanto antas mejor, ¡A ver tm coche! ¡Cochero, muy dapriaa á Palaciol ¡Paras cerca la puerta del Príncipe! Llegado allí, miró á todas partas; el coche del presidenta no estaba. Cada treinta segundos una consulta al reloj, cada minuto un suspiro de impaciencia, cada cuarto de hora mil canas más. Así corrieron las agujas del cronómetro d_esde las cinco y cuarto á las seis y media. ¿Qué ocurriría? ¡Aún le costaba sudar, ea Noviembre! 1¡1 des- asosiego le producía irresistible hoi-migueb; éste se convirtió en picor; hubo momentos que creía que se rascaba en el hueso. Allí metido en e) modesto simón, rozando el frac coa la mugrienta gutapercha, láu frac!, lla- mado á tocar muy pronto magníficos brocatélejs, vetustos tapices, sedas riquísimas, «Basta ya de cal suplicio —Cochero, acércate a la puerta. A un portero: —Dígame Vd, ¿Ha venido el Sr. Cánovas? —No, señor. —¿No ha enviado recado alguno para el Sr..« —Nada hamos recibido, ¡Alfin!esa miniatura do trueno prolongado quo hace el rodar de un buen coche en nuestro mal empadrado anunció la llegada del presidft&te del Consejo. —Ha venido uzté antez que yo, —Siempre me he adelantado á los deseos de usted. Vamoz, vamon i. ivLvece. —Dos horas qtte no hago otra cosa. Los anarquistas do X^rez Sentencia secreta '" (POR TELÉGEAFO) ^' (PE NUESTBO 0(mBESfONSAIi) Jerez 30 (d,4S noche) El consejo de guerra se reunió á las nueve do la mañana de_ hoy y ha eatado deliberando hasta las seis y cincuenta y cinco da la tarde.] Me ha sido impósiblo averiguar nada [acerca del fallo, porque los miombroa del consejo guar- dan impenetrable silencio respecto á este asunto. Después da pronunciada la sentencia, la cau- sa instruida contra los anarquistas ha sido con- ducida al domicilio del juess custodiada' por sol- dados. La sentencia ha sido comunicada esta noche al capitán general de Sevilla. Si el Sr. OoaUo la aprueba, será comunicada á loa reos esta misma semana; en caso contrario, pasará la sentencia al Tribunal Supremo de Q-ue-* rra y Marina. Los anarquistas preses ©sUn impacientes por conocer la sentencia. La fantasía popular exagera, por lo mismo que nada se sabe, la importancia del fallo. Sa dice quo la sentencia no está conforme con la acusación fiscal y que resulta condenado á po- nas graves mayor número de reos que los pedi- dos en la acusación. Excuso decir que estos rumorea están oom- Í netamente destituidos de fundamento, porque os individuos del tribunal están reservadísimos. La tranquilidad en Jerez ea completa.— Quero, _____________ .•/ -•w-^''" li» cnestióu d e l d i » ^^í^' "'*^'*'" La del pan fué ayer la cuestión del día en to- das las casas de Madrid: absorbió por completo la atención feínenina, á la cual no interesaba la crisis ministerial sino en forma muy secundaria. El panadero fué aguardadq con gran impá» ciencia, pu,ea había mucha cúrioaidaa por Cono- cer los nuevos panecillos. Da todo hubo al verlos: sorpresas y decep- ciones. _ Las bizcochadas, panes bajos y demás pane- cillos del llamado candeal ó español parecieron generalmente muchísimo más grandes que de or. diñarlo: como presagiábamos, representaban ta- ñer casi doble tamaño. Pero en el pan francés, y sobretodo en las francesillas, el aumento do .tamaño no era tan vi- sible, ni mucho menos. Esto dio lugar á que muchas familias reposa- ran el pan en casa ó en las tiendas do nltrafiaarj- nos, pues ea las tahonas no énti'a en nuestíás costumbres el hacerlo r6p63ar,.y el resultado fué descubrir deficiencias bastante numerosas, prin- cipalmente en las últimas clases citadas, Lo chistoso del caso és que puesta ya á com- probar, la gente empezó á ver los pesos que la habían dado el carnicero, el pescadero, etc., y por casualidad salía un peso exacto: siempre fal- taba una cantidad nada daspreciabla da gramos. Precisa reconocer que la innovación en el fraccionamiento del pan no ha sido en general recibida con e.ntusiasmo, por las razones que apuntamos ayer. Las clases pobres y las familiaa quo tienen muchos niños y en las cuales el panecillo peque- ño, de 10 céntimos, resolvía ql problema, eran las que mayor descontento mostraban por la supre- sión de aqnal tipo da pan, qua los obliga á dar á los chicos—quo diría El Corí-eo—panecillos de 14 céntimos, Todo el mundo se consolaba, sin embargo, en la confianza de que no tardaría en venir la baja da pre.cio, con la cual resultaría el vecindario co- miendo bastante más pan y por el mismo dinero que antes. liAS faltas de «yei* En materia de enmienda los tahonero» no tie- nen ni el punto de ootttrioióa do cíao h a h k Don Juan TeáoxíSr Ayer mismo, aguardando la visita de los \ nientés de alcalde, se corrieron muchísimos c. ellos en no correrse en el paso. iTendrlan certí, dumbre de que los tenientes de alcalde del Ayuíft tamiento actual no habían de meterse con ello|| Como hemos dicho, numerosas familias óbse# varón faltas de peso tan considerables, que so í j ^ taban á la simple vista. Además, los panecillos largos ni la» fraBÍÉ^ sillas llevaban el sello que m^segii las Ordaa«|p zas. .';^; f- ! ! El teniente alcalde del diátítlfí do Buena^il. ta, Sr. yillanova, cUmpHendo á conciencia su oM bar, visitó las tahonas de su demarcación y P U ^ decomisar panecillos con faltas de 30 á 60 gramos. ' i En estos últimos los tahoneros ae hablan qiftM dado con 240 gramos por kilo, es decir, que baban al púbHco cerca de 14 céntimos por k||l$ gramo. , Por esta cuenta resulta el pan á los 70 oáat mos de marras, que es la cuenta que desde hii< muchos meses se vienen haciendo los tahonero^ Los señores tahoneros culpables de estás fa tas fueron multados con 60 pesetas cada uno, además se dio cuenta del hecho al juzgado.- Esperamos que, como diaponen las Ordena^ zas, serán cerradas las fábricas de esto,-» ind«^ tríales á la tercera falta que cometan, sin peqt ció de entregarlos á los tribunales., _ ' _ El marqués de Arenzana también tuvo 00# sión do imponer multas. El Sr. Binoón, q ue ísp^?# mente visitó varías tahonas, dijo que había eifi oontrado d pan en regla. : y los demás tenientes de alcalde no hioiew»! máa míe averiguar si dejaba la alealdia el ma^jñ qués de Cubas, que es lo que interesa á nueatrei simpáticos y populares ediles. ' Una treta < A las autoridades—si es que las tenemos l»|ñ| —y al vecindario debemos poner sobre avisó qf una treta inventad» por el ingenio de los tohfe ñeros, y cuya existencia pudo comprobarse (k?Nn En loa despachos públicos tienen una oiaM de pan, que pudiera llamarse de muestra, oon éJ peso exacto y los requisitos quo exigen las op^fé^ nanzas. [)' y para el reparto á domicilio elaboran oiífc clase, bastante mermada de peso. f Gomólos tenientes de alcalde hacen, por-Tá general, sus visitas á los despaehos,^ so les esoM pa el pan destinado al reparto á domiciiio, que M el falto, y que los fetjíceros se apresuran á saeai de la tahona en cnanto sala del horno. UN LEGADO ORIGINAL Dice anoche un perióiico que una señora <ia0 fué dentista muy Conocida y anunciada, y que h# muerto, ha dnjado por herederos á loíi condua» toras de una do las empi-esas de tranvías do Má-» drid en pago á la amabilidad con que la ayadAf ban á bajar del cocha. No hay x)ara' qué hacer misterio sobre la 3i» funta, que fuá doña Polonia S;uiz, dentií>u do o4' mará nada menos que de Muley el Abbp.s. Figúrese el lector el regocijo con quo babrAt^ acogido los conductores el Kogalo y el gutto ooft que comerán algún tiempo del producto do I«A muelas que arrancó doña Polonia, lo cual VÍ«B« ¿ realizar el lema, do aquel otro, dentista que dp» cía:—yo soy un hombre quo come con la boca loa demás. Añade el colega que da la noticia que alguno de los conductores afirma que ya conoció élqw» doña Polonia era señora de principios. y puede añadir, dinero en mano, que de p ^ tres también. Falta saber cmál ea la línea de tranví» (||;ii« goza de conductores con tan buena conductai Para no subir, si es posible, más que en 41. La noticia hará por el pronto que se Aunt0t|¡ cen los conductores, cuando menos oon ií« flofir ras, por si alguna resulta Polonia, y éso saldremos ganando los demás, LA CONTRiBUCION INDUSTRIAL El comercio en nlsadn Abierta información en el Círculo de la I7ld^ Mercantil é Industrial con motivo de la publIcM ción del nuevo -reglamento da la contribución vm dustriaí, la junta directiva tiene acordado el noxm bramiento.de una comisión para Bu estadio; peta habiéndose publicado en la Gaceta las nuevas 1^ rifas de dicha contribución, en las que no sÓlo ¿1 observan aumentos importantes en las cuotaffl sino también reformas trascendentales;- y lo qtii es más, que dándolas afecto retroactivo se tratia de plantear á partir desde 1." de Julip próaííiáf E aMdo, dicha Sociedad cree de gran ogortunidiil aceruna excitación á los slniicas de I03 gr« míos para que éstos reúnan inmediatamente'i sus ooTMniadés con elfinde hacerles cbnooet w lea reformas, y en su vista expongan al presideflj te do dicho Cfrcttlo, sin pérdida d^ tieijípo, 1^ .objeciones que estimen convenientes para p94<^l entablar laá oportUnaíi recla&jicwiios B,^^ entablar las oportunas reclamjicwnes aijt| poderes pább'cos antes que finaho'o el plazo lado ea el citado real decreto. EXPOSICIÓN DOiLLAS ARTESQ MAS TnmojOB A las extensas listas que ayer pubJicamoiMl nemÓB que añadir las recompensas siguionteSí .,f KSCnltni'» ^y' Menciones honoríficas.~Gl»va,e6, P . X a w Adela Ginós, P. Gibert, Ckrhonell. Cjuej^vOi Ji£fttt|j Francisco. Sección háftívaí Primeras medaUas^lWÚ, Cari Marr, «Ee* to.»—1614, Francoia Jíímband^ «L» oración Schamyl antes do % Ba;tallí^.»^1589, Auga^ Leonhardi, «Arroyo en la riíOntáaa.^*^1605, í chard von Poschinger, «Calle cerca de Muíiioi Segundas ni«dams.-^lH%,^8ím von Bártelí «Aguardando.»—1,548, j . Bergmaai», «BOÍT' gos.»—1.5.64, Édmund GrUtzuer, «Probando fino.*—1.669, Híirmánn Hartwioh, «Láv^ndei del lago Oarda.s—1.592, Joaef M^ati*gzo¡tj «Retíáto.s-^1.622, O, Seiler, «La sorpresa.}, 1.608, Jok León Raab, «Las de Oanaáns toftM do),—1.571, Antón Hess, «Busto da S. M. el re^ D. Luis I de Baviera» (en mármoH.—1.620, Q% briel Seidl, «Villa del profesor Leubach.» ¿ Terceras medaíías.—l.&áO, Edmuad Blanm «Padre nuestro.»—1.660, Frajaeois Bisenhü» «Guardián atento.»—1.666, Niool Qysis, «reregrtf nación.»—1.578, Hugo Kauffmaun, «Postilloiajl —1.582, Gotthard Kübl, «La iglesia de San Juan de Munich.»—1.629, I*. A. BeKgmann, «El pía,* tor.»—1.644, LundezA. Andersen, «Paisaje, invierno.»—1.658, Conrad Eilers, «Cazador era porro.*—1,645, Max Bareaíánger, «Jobo Chaú^ bors» (agua fuerte}.—1.607, señorita Doiús Baa» «Retrato» (copia Benibrandt).-^1.597, Féo^Jí von MUler, «Indio» (estatua en bronco), '' Menciones honoriMas. Bv^Ung, Fr5sc''*9 Hartmann, Hocker, fíofmberg, Hummol, Kelleí Kúní, Mayer, Noez, Puhóhiy, Rex, Rotta, Spria^" Stuhlmüller, Voelmy, Wunech, Oarstens, Gji ger, Heine^ Petera, Willroidar.Harburger, M,i¡ thaler, Wmd jjr Seidl. Sección francesa •'' Primeras medallas, Alberto Aublet, «1* marqueaíta.9—Eugenio Boudin, «Barcas á 1^ j S Ia.»-Emmanuel Damoye,-Ob arles Mácb«rd.<Ría trato al pastel de Mad. Julos Machard.j—i^milg Renard, «Retrato,»—BimifioRonouf, «Un náufr» go.>—Alfredo Brune.| Debainos, Aguafaert* íPoxting day.»—Louis M. Bourgeo's, «RetrfkM en yeso de Mad. y. d» 8.» —Imbert Noel (L0U19J «Bañista,» estátíia en mármol. ^ ;f Segundas, medallas, Camilo Bollangtierj «AÍsor adormecido.»—Claadío Botirgoun.ler, i\M Íial4»—MfredoBramtot|<.EU ««^á<} d^ mtm

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ejemplar del 1 de diciembre de 1892

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Page 1: el imparcial

,A t:A

Tíradade El IVIPA3CIAL de ayer: 77.570

A,Tiancios:ia.oioaal©3,0,50 oáata. do peseta líuaa.' í d e m axbPaajerog,0,75 id. da id. id, í d e m en l a fceroera p l a a a , 3 peaobaa id ,

OomutúoadosyreaúfcidosipreoioacoaTeaíáaaalM

Número suelto 5 céntimos

fiMVMiJU^A* 3Mel«in3te^4»18#Í < « - •

DIABIO ilBERAti ^

FUNDADO POR D. EDUARDO GASSET Y ÁRTIME' V

P o r i u g a l , 7 , 5 0 i d . id . Dao lásp infc03 la la t fcranjarOj lOptas . t r imest í»^ BSíbadosÜaidosda^ a á á - l ^ p ; ^ , ^ . _ i.-;^._fc«i

oa .Oaba 7Paa rbo R.ioe>. | l&paaaiias bíimeabr*.

s i o a e s i e \ ^ é r i o » y \ s t a . r ' ' *<*• * * ^, • J j o d a l a a o í r s í p o a d a a a i a y g i r o a d e b a a d i r i ^ r á d i l

Galle de Mssonero Raninos, núm, 31

Lá i o s SALIENTES

E

E l Sr^'Villaverdé n o es min i s t ro . ¿Qué le Jmportar si sale de l g a b i n e t e a c o m p a ñ a d o

or l o ^ aplausos y las s impa t í a s de c u a n t o a y d e ree to , de sano y de m o r a l e n la n a -

oiOR^ s 1-1 • j . ]Ya pod í an d a r p o r n n a sal ida semejan te

iBtts inseguras ca r t e ra s ios min is t ros que se q u e d a n p a r a servir , n o á su pa í s , s ino ios Caprickos y vo lunta r iedades del Sr . Cáno­vas! E n vano este señoix i n t e n t a depr imi r a l íninis t ro sal iente con post izos y ridículos desdenes manifiestos en los sueltQS oficiosos y en las formas con que se h a procedido á cubr i r la vacan te de Gobernac ión . E s a s a r roganc i a s las p u e d e t e n e r cua lqu ie ra que deje á u n lado la cortesía .

Al dejar sus pues tos el Sr . Vü lave rde y e í S r . D a t o j eíSrr^mitojoyiA-xattipqrLéa de Cubas, da quien nad ie p u e d e supone r q u e con t inúe desempeñando su ca rgo en Sitj condiciones e n las cuales se le coloca, p r e s t a n u n g r a n servicio á la nac ión conte­n iendo con su ejemplo el n e g r 9 pesimismo insp i rador de la funes ta creencia de que en es te pa í s no quedan y a carac te res enérg i ­cos y viriles capaces de d ignas y ser ias r e ­soluciones.

N i es m e n o r el servicio p r e s t ado á iaa ideas conservadoras y al p a r t i d o conserva­dor, que todo el m u n d o verá desde a h o r a r ep resen tado p o r ellos y n o p o r ese gab ine ­t e de cortesanos^de la H u e r t a . E l pres t ig io a lcanzado en la lucha p o r u n a causa j u s t a y mora l i zadora r ecae rá sobre t o d o e r n u ­meroso e lemento de ese pa r t ido , identifica­do con los dignís imos ñmc iona r io s dimi-t en tes , y da rá p r o n t o á la colect ividad así r emozada y robus tec ida n u e v a savia y v ida nueva .

De la descomposición hor r ib le que la m a n o del Sr. Cánovas es tá Uevando á todas las esferas de la v ida púb l i ca se Ubra, p o r la conduc ta del Sr . Vü lave rde y sus amigos, lo más est imable del p a r t i d o conservador . Se ha p rocu rado envolverles en l a m a r e a de impopula r idad y despres t ig io e n que todo va Sumergiéndose. S u en te reza y r ec t i t ud los h a n sEdvado. ¿Qué m a y o r satisfacción p a ­r a eU.os?

Bien h a n podido y a conocer el efecto profundo y lisonjero causado en el án imo ae todas las clases sociales. Ayer el Sr . Yi -Uaverde a l salir del minis ter io e ra sa ludado p o r todas pa r t e s como u n t r iunfador . S u ca­sa era anoche vis i tada p o r mu l t i t ud de p e r ­sonas que acud ían á demos t ra r l e su a p r o ­bación y sus s impat ías . L o s d ipu tados con­servadores , en BU inmensa mayor í a , lo m a ­nifiestan su adhesión.

E l - p a r t i d o conservador salió a y e r de l gob ie rno con los funcionarios dimitentes^ n a d a de cuan to de h o y más suceda le se ra imputab le . E n el pode r sólo q u e d a n e lemen­tos advenedizos y ru inas .

LOS QUE SE QUEDAN

E l cerebro de Nabucodonosor n o p u d o tes is t i r el peso de su soberbia . E l re la to b í ­blico es b a s t a n t e conocido p a r a que lo rep i ­t amos aquí . Mas se nos figura que el señor Cánovas va p o r 0I c a m m o de Nabucódo-Jiosor.

¡Heconocer él que se equivocó en la cri­sis de Noviembre del año pasado! ¡Nunca! ¿Padece po r ello el in te rés púbKco? ¡Que pa ­dezca y h a s t a que se h a ^ a pedazos! ¿Se (quebranta y descompone el p a r t i d o conser-yador? ¡Que se a g u a n t e ! ¿ P a r a que es tán el

f )aís y el pa r t ido , sino p a r a sat isfacer las vo-untar iedades «del m o n s t r u o de la edad p r e ­

sente?* ¿Se va el Sr. Vi i laverde p o r n o consent i r

e n que p e r m a n e z c a n impunes las enormida­des cometidas en el A y u n t a m i e n t o de Ma-^ d ? (Que se vaya, él lo sus t i tu i rá con cual­qu ie r Danvi la! . ¿Dimite e l m a r q u é s de Cubas p o r no ha -

^cerse solidario de u n a conduc ta que a lenta-tÁ á cuantos h a n conver t ido el Ayunfcamien-jto de Madr id en a lgo peo r que u n p u d r i d e ­ro? ¡Que dimita; él le busca ra tiu sucesor de í a misma m a d e r a del que h a dado a l señor ^Viilaverde! ^^ ¡La opinión pública! E l l a desprecia... ¿ i i en t ras n o la oye r u g i r en las calles. Los

' g a n d e s in tereses de l a nac ión y de l a m o -aiarquía, ¿qué son de lan te de los empeños de su amor propio?

Así, en ese es tado m e n t a l va el Sr . Cáno-.Xa,a des t ruyéndolo todo , y más que n a d a su J)ropia repu tac ión . U u amigo ve rdade ro le aconsejar ía que conservase á lo menoa loa

, res tos que a u n se h a l l a n en p ie , con u n a larudente r e t i r ada .

'( ¡Cómo va quedando su figura his tór ica! p a sincex'a compasión. Y todav ía , si aquel la ¿ o parece peor , es p o r q u e se l a c o m p a r a con las de sus compañeros de g a b i n e t e .

•;iFuera del Sr . Oos-Gayón, que es u n a espe­cie do familiar, y del Sr . Concha Cas t añeda , « jue t ieoe la imper turbab i l idadde las momias , 'el único e jemplar de la hues te conservadora es el flamante minis t ro Sr . Danvi la . E l du-•que de T e t u á n es u n deser to r l iberal , el gé -•iieral B e r a n g e r u n radica l e r r a n t e , el señor .Jjinares E i v a s u n converso de los líltimos , i iempos, el Sr . E o m e r o Eob ledo u n refor-jxiista. ¿Dónde está el pa r t i do conservador? • •-•>Y ese gab ine t e así const i tuido, p a r a p r o ­l o n g a r su a r r a s t r a d a exis tencia t iene que pasa r po r todo , h a s t a p o r la pobre comedia que se quiere e n s a y a r e n el a s u n t o de la Memoria del Sr . D a t o ; comedia an tes si lba­d a que vista.

; • ¡Destino fatal! E s t a s i tuación acabará á «ilbidos. ,

LO QUE NO SE HA VISTO JAífiÁS

' 'J E l Sr. Cánovas explotó grandemei^te p a r a sus fines polí t icos los escándalos del rsáyimtamiento de Madr id en l a época fusio-.pista . E l Si% Cánovas so util izó de l a des-jUnión de a lgunos e lementos l iberales . E s t a ,<Je3unión y aquellos escándalos mot iva ron f& crisis po r la cual el Sr . Cánovas fué en-'fcargado de la pres idencia del Consejo. S in embargo , n i los escándalos n i la desunión

j fueroa entonces lo que son en la ac tual idad. ' , | í í a y Tin rasero^ p a r a m e d i r ' l o s aconteoi-¡ipaientos de las si tuaciones l iberales y o t ro ^ a r a las si tuaciones cauovistas? \; E l Sr. Cánovas se cons idera seguro , po r -

t) ere© quo h a l l egado á i n f u n S r miedo t ando de te rminados elí^mentos de l Esté.-/ j«F <íse *« »teey« Á fexi4 ¿g£»« ÍJW»-^

b ien que esos e lementos y que el pa í s en te ­r o no conocen su j u e g o , y n o le apHcan el caüfioativo que merece A

' E l Sr . Cánovas, que dejó en descubier to & l a r e ina r e g e n t e en la cues t ión de l viaje á Granada ; que acaba de dejar de igua l suer­t e á la corona en la concesión de ios indul­tos , e n t a b l a u n plei to oon s u prop io par t i ­do, cuyos elemei^tos máa e&uQS man t i enen la u r g e n t e neces idad de mora l i za r el Aymi-t a m i e n t o de Madr id , y oon la pr i sa , que es el mejor r ecur so d e las sorpresas , hace que la corona resuelva á su favor a l acep ta r sti cand ida to al minis ter io vacan t e . ¿Es así como cumple sus deberes de min i s t ro cons­t i tuc ional el Sr . Cánovas? ¿De esa m a n e r a a t r a e spbre sí t odas las responsabi l idades a n t e la opinión?

- E l S f . Cánovas, qu« ]grQvoca las m a y o r e s dificultades po r n o sacrificar sus empeños de a m o r propio , sus vo lun ta r iedades , sus ca­pr ichos , luego m i s el oonfiicto viene quiere q;;e, j ) a r a salvarlo, sacrifiquen otro^s lo más j;p'6Qia^,.Qoiyi^yapg£%Jte.IfOLÍ^^ t i r , e x i f i a a l Sr . Villaverd© que sacnfioase sÚ digpidad, al Sr . D a t o que sacrificase su ser iedad y su porven i r , a l m a r q u é s de Cubas que sacnfioase su a l t a repu tac ión . ¿Es de es ta suer te como en t i ende sus obligaciones de jefe de gob ie rno y de p a r t i d o el Sr . Cá­novas?

Aqu í hemos visto m u c h a s aber rac iones . T a m a ñ a s como és tas n o las h a b í a m o s visto j a m á s . '

i EL WABQUES DE CUBASI

T a m b i é n h a dimit ido el alcalde do Ma­dr id . L a s g r andes esperanza^ que es té su­frido vecindar io h a b í a pues to e n la ges t ión de este h o m b r e d ignís imo, p robo , in te l igen­te , enérgico y activo, h a n sido def raudadas p o r u n a to rpe y desa ten tada polí t ica. L o s abusos contenidos p o r él, volverán con m á s fuerza como cenagosas aguas de p a n t a n o que h a n r o t o el d ique.

E r a demasiada fo r tuna l a que nos haTbía depa rado u n alcalde como el que . el p u e h l o madr i l eño deseaba h a c í a t a n t o s años .

L a ob ra e m p r e n d i d a con t a n t o va lo r y en te reza p o r e l señor m a r q u é s de Cubas vendrá á t i e r r a apenas a p a r t a d a de ella la v igorosa m a n o que l a l evan taba ; pe ro l a figura del i lus t re pa t r ic io q u e d a r á más ele­vada que nunca , p o r q u e su sal ida del Con­sejo munic ipa l es n o menos d i g n a y nob le que su e n t r a d a .

D e igua l m o d o qixedará e n el án imo de todos el consuelo de s a b e r q u e los carac te ­res viriles y abnegados n o h a n desaparecido de e s t a t i e r r a de Castilla.

L o s jo rna le ros , p o r cuyo sus ten to y ocu­pac ión en los t r i s tes días del inv ie rno t a n t o se a fanaba el marqués de Cubas; los pobres vendedores ambu lan te s , á quienes el im­pues to m e r m a SUB míseras gananc ias , y que p o r el alcalde dimisionario i ban á ser redi­midos de t a l g ravamen ; las numerosa s cla­ses de con tados recursos , que los hub ie ran vis to a u m e n t a d o s oon l a supres ión de los abusos qtie en g r a n p a r t e los devoran; los vecinos todos , que a ime laban j )or l a purifi­cación de los asun tos del Municipio, lamen­t a r á n la pé rd ida sufrida; pe ro siem;pre aca­riciarán la e spe ranza de volver a l g ú n día á ver en la presidencia del Ayun tamien to al p a t r i o t a ins igne á quien su rec ta conciencia y su elevada d ign idad n o le h a n consent ido seguir en las condiciones en que se p re t en ­d ía colocarlo.

E e c i b a el señor m a r q u é s de Cubas, cuya eficaz ges t ión s iempre tuvo nues t ro modes­to apoyo, n u e s t r o saludo y nues t ro aplanso, no menos sincero, p o r su ú l t imo dignísimo acto, que l evan ta los corazones lo mismo que los l evan ta ron sus i 'esoluciones enérgi­cas en el Municipio. H a y u n a satisfacción no igua lada p o r n i n g u n a _ o t r a satisfacción t e ­r r ena : la de hace r el bien; el señor marqués de Cubas t e n d r á e n ella su mejor recom­pensa .

H a y o t r a satisfacción: l a de expresar la g r a t i t u d á quien hace el bien. E s t a es la que cor responde a h o r a al noble pueblo de Ma­dr id . ,...,. .:..,„..,,,..,

MISCELÁNEA POLÍTICA

DÍSPAHATEJOE CRÍTERÍO Se nos h a escapado u n a e r r a t a en el t í t u ­

lo; n o le Uaman a l a crisis d i spa ra t e de cri­ter io , sino d ispar idad, pero.. .

«En ocasiones, d e n t r o do los g r a n d e s e r rores , se enc ie r r an las grcipdes verdades» h a dicho u n o dé esos no tab les pensadores de los que descubre D . Manuel Becer ra , p o r lo menos dos cada m a ñ a n a . '

Y m u y bien, pud i e r a ocur r i r que dei;itro de n u e s t r a e r r a t a hub i e r a u n a verdad, y que se t r a t a s e aqu í de u n d i spa ra te más e.i el cr i ter io de D . Anton io .

*** L o p r imer i to quo h a dicho el p r e s iden t e

del Consejo a l Sr . Vii laverde, ea que h a c e fal ta oir á ciertos concejales.

¿Les pa rece á us tedes que n o se les h a oido?

P u e s bien a l to h a n g r i t a d o . L a p r u e b a es que h a n escandal izado á

todo el m u n d o .

L o segundo es más curioso todav ía , h a mani fes tado el Sr . Cánovas (La Correspon­dencia dixit):

«Que no hay en el asunto motivo alguno de urgencia.»

Vamos , el Sr . Cánovas n o t i ene p r i sa . L o s concejales t ampoco , como que le di­

cen al machi to : —Mira, no corras que no hiiy pr i sa . E l Sr . Viüaverdo h a dicho:

—Yo sí t e n g o pr isa , de m o d o quQ h&sta más ver.

Los madrileíios: ¡Qué lás t ima que el ca rgo (ó la ca rga) de

vecino de Madr id sea t a n dififcil de dimit i r!

^ E n seguida de decir estas cosas el. señor Cánovas, p l ag i ando a l personaje de u n d ra ­m a célebre, añad ió :

— A h o r a vamos á obra r . Y según afirma^un per iódico, «El for. Cánovas se puso al h a b l a p o r t e ­

léfono con el Sr. Danvi la y le ofreció l a car­tera, de Gobernación.»

E s o es, nos pa rece bien. E n c a r g a r u n min is t ro p o r teléfono. N a d a , como quien enca rga u n queso .

*** I n m e d i a t a m e n t e le .faé servido a l Sr . Cá­

novas ©1 min i s t ro ped ido p o r teléfono, j así,

de l a m a n o s e m a r o h a r o a p o r los t r igos» á j u r a r

L a ú n i c a adve r t enc ia q t i e , s e g ú n n o ­t ic ias , hizo el Sr . Cánovas a l Sr . Danv i l a fué la de que en sus discursea n o fuera t a n lar ­g o como d e cos tumbre ; es to es, que n o d ie ra c u e n t a de las cosas como o t r a s veces.

*** Al saber l a not ic ia d e la dimisión del se­

ñ o r Vü lave rde , d u r a n t e a l g u n a s ho ra s se d a b a p o r seguro el s iguiente n o m b r a m i e n t o :

Minis t ro de la Gobernac ión : D . Alber to Bosch y F u s t e g u e r a » .

E n medio d e t o d a s e s t a s n o t a s t r i s t e s p a r a el gobie rno , M Estandarte v iene máa con ten to que u n a s cas tañue las .

V e r á n us tedes : «No son I08 conaeryadores como fueron, son

y serán sus adversarios los fusionistaa, eí?tre qjiienes cada hombre es ana Opinión, cada perso­nalidad una aspiración, y todas ellas una rebe­lión constante contra el jefe que no tiene carác­ter ni acierto para dirigir eVpartido. , _ ^ . p i e a t r a £ . 3 f t , , j 3 , g i M » - a p Í 3 M M ^ ^ loB fasionisrtas, suponiendo itnaginanoS OJSMB-tos personales y crisis inveroaímiles, la polítioa sería, levantada y provechosa del gobierno.»

Ole ya. «Con los gobiernos conservadores no mandan

las personas, sino los principios; no se imponen las pasiones, sino las conveniencias del país.»

¡Qué desengaño cuando el colega vuelva en sí de la p í t i m a minis ter ia l , y vea lo ocu­r r ido!

LOS ESCÁLALOS PEl PANAli

(POK T E L E G E A P O ) ( D B NÜBSTBO OOHilEaPONSAt.)

París 30 (10,15 noche) Mag- l s t rade is « u e p r o t e s t a n

Los magistrados no ooultan au displicencia por la ingerencia do loa diputados en la cuestión del Panamá. El presidente del tribunal de apela­ción califica de anárquica la intervención del Parlamento en las funciones judiciales.

E l fiscal general d» la república, Mr. Ques-nay de Beaurepaire, aatá fañoso y ante un gru­po de letrados ha declarada hoy en el Palacio da Justicia que el consejero Mv. Pr inet debió ca­llarse, respetando el secreto profesional y negar­se á comparecer ante la comisión informadora.

También ha manifestado el fiscal que le ha molestado mucho el discurso de Mr. Brisscn^ y que ha escrito 4 este político invocando eJ. prm-cipio do la separación da poderes, fundada en el derecho páblico.

—Caere—ha díoho—defendiendo loa derechos de la magisti-atura y del foro y reoha7.ando cual­quiera ingerencia Je la comisión parlamentaria en los dominios de la justicia.

Se añade que Mr. Quesnay de Beaurepaire, leo'os de presentar la dimisión de su cargo, aguar­dará á que le destituyan, porque así podrá vana­gloriarse de haberprocedido como un defensor de la independencia de los tribunales.

C e n s u r a s Ae l o s s o n a d o r e s Hoy han celebrado una reunión los senado­

res que figuran en los grupos de la izquierda, y han censurado La tardanza 4e la magistratura en incoar la persecución contra los explotadores de los accionistas y obligacionistas del Panamá,

No aprueban, sin embargo, el nombramiento da la comisión parlamentaria, porque su acción lia de producir l a confusión de poderes, quo 1-93 reuniaoa califican de perturbadora y revofuoio-naria,

HítseTas r e v e l a c i o n e s Entre tanto la comisión informadora daba au­

diencia, á pesar da no haberse resuelto, ni estar , en vías de resolverse hoy la crisis ministeriaL 1

Ha comparecido ol perito que insijeccionó los libros de la Compañía universal del canal de Pa­namá.

Ha declarado que hasta 1888 la empresa ha­bía empleado 600 millones de francos en traba­jos para abrir el Canal, lOO en pagar gastos de administración y 300 en cubrir loa llamados gas­tos de emisión.

Todos loa periódicos, sin distinción de colo­res, recibieron dinero, oegún su importancia y circulación obtuvieron sumas más ó menos con­siderables.

La cuota mínima fué da 7.500 francos, y la máxima de 125.000.

Además fueron distribddos 1.250.000 francos entre varias personas influyentes.

Estas indicaciones han causado profunda im­presión en la opinión pública.

l i » c o r r n p c i é n c o i a p r o l b a d a Después de terminar su declaración el perito,

se leyó la espoñtán^, de Mr. Thiórrec, garan­to de la conocida oas^de banca Thierrec y com­pañía.

Dice el banqaero_ Thierrec: «El barón de Eeinach me envió un cheque de

3.390.000 francos, extendido en nombro de la Compañía del Canal de Panamá.

Él 17 de Julio de 1888 mi caja giró contra el Banco da Francia 26 cheques al portador, quo representaban la indicada suma.

Me obliga mi conciencia á declarar, si bian no he de revelar las firinas de los cheques sin pre­vio mandato de uh magistrado.

Lo que sí haré será presentar mis libros á un individuo da la comisión informadora para que sean examinados y el gobierno ordene inmedia­tamente quo se incaute de ellos iin juez.>

E n cuanto fué tei-minada la Jeotura, tres indi­viduos de la colisión parlamentaria se tr^.slada-roa á las oficinas de la casa Thiorroc, y registl-a-dos los libros, recogieron datos elocuentísimos y qua bastarán para aclarar lo sucedid^, si el Ban­co de Francia no so niega á revelar quién cobró 'os cheques.

Entre aquellos, cuyos números ha anotado la subcomisión, hay dos da nn millón do francos cada uno: los demás representan cantidades qué valían desde 5,000 á 16U.(XX) francos.

I j á « l é i n o s t r a c l ó n í í n a l E l ministro de Justicia dimisiónai'io, Mr. Bi-

card, ha ordenado ai fis-cal Mr. Quasnay da Beau­repaire que formule la demanda de incautación da los Lbros.

La comisión parlamentaria confía en que ma­ñana quedarán aclaradas las cuestiones sobre que está llamada á informar.—A.

* * P A E Í S 30.—Mi'.RosfiígnoI, perito calígrafo que

examinó loa Hbros de la empresa del Panamá, ha dado á la comisión infamadora importantes de^ talles sobre las sumas distribuidas por dicha ero-presa á los periódicos; pero añadiendo que duran­te su esaman no encontró en dichos libros ningún nombre de hombres políticos.—Fabra,

obispo de Sión fué su anciana madre, que con ademán tembloroso incHnó la cabeza besando el anillo.

La escena fuá verdaderamente hermosa; el nuevo prelado, nopudiendo sobreponerse á la in­tensa y legítima amoción que le invadía, levantó del suslo a su madre y la recibió en Sus brazos con delirante efusión.

Hijo y madre lloraron largo rato abrazados y una escena BemejaBte ocurrió al bendecir á los fieles, entre los cuales estaban loa hermanos del Sr. Cardona. _

Éste, á quien apadrinó el duque de Medina Sidonia en representación de la reina regetite, recibió los plácemes más sincaros de la familia real. Su primer acto fué el da enviar un telegra­ma da adhesión y profundo amor al Santo Padre.

E n seguida regresó á la iglesia del Buen Su­ceso en un coche de Palacio y acompañado del duque de Medina Sidonia, . Las campanas del templo acogieron C09 ale­gre repique la llegada del prelado, que pronun­ciará su primer sermón como vicario general castrense éñ la fiesta que el día de Santa Bárba­ra celebrarán loa artillsros en la iglesia de San tíerónimo.

E L OBISPO _DE PALACIO I i » c o n s a s r r a c i d n

Se celebró ayer con inusitada pompa ea la capilla de Palacio, siendo consagrante oí nuncio da Su Santidad, asistido de los prelados da Ta-masao y de Huesca.

La familia real asistió desde su tribuna á la solemne ceremonia.

Celebrada la idisa do consagración, que fué rezada^ y cantado un Te JDeum, el nuevo obispo recorrió proceaionalment^ la capilla bendiciendo á los fieles.

Después abrazó á los prelados que asistieron al acto y dio á besar e} gijiUo á los invitados.

L» primera serson&fUo sa arrodilló á&t «I

iagr acaánTuso" l a oasulte. y ^ p a a e f r í q ú í s i m o temo de Alfonso VI , bordado oon perlas y sedas d© colores. _ _ _ _ _ _ _ „ . « „ _ _

WevM ájél disb IMINISTROI ¡WINiSTROI

A las seis y inedia salió del Consejo el Br. Cánovas, do tmiforme, dirigiéndose á. Pa­lacio, donde H'i »e enfoatraba «{Sr. Danvila.

(De La Época),

íEl íVao, 1» banda do Isabel ID jA vestirme! Estas cosas como le gustan á Cánovas, ensd-

gnidita, cuanto antas mejor, ¡A ver tm coche! ¡Cochero, muy dapriaa á Palaciol ¡Paras cerca

dé la puerta del Príncipe!

Llegado allí, miró á todas partas; el coche del presidenta no estaba.

Cada treinta segundos una consulta al reloj, cada minuto un suspiro de impaciencia, cada cuarto de hora mil canas más.

Así corrieron las agujas del cronómetro d_esde las cinco y cuarto á las seis y media.

¿Qué ocurriría? ¡Aún le costaba sudar, ea Noviembre! 1¡1 des­

asosiego le producía irresistible hoi-migueb; éste se convirtió en picor; hubo momentos que creía que se rascaba en el hueso.

Allí metido en e) modesto simón, rozando el frac coa la mugrienta gutapercha, láu frac!, lla­mado á tocar muy pronto magníficos brocatélejs, vetustos tapices, sedas riquísimas,

«Basta ya de cal sup l i c io —Cochero, acércate a la puerta.

A un portero: —Dígame Vd, ¿Ha venido el Sr. Cánovas? —No, señor. —¿No ha enviado recado alguno para el Sr..« —Nada hamos recibido,

¡Al fin! esa miniatura do trueno prolongado quo hace el rodar de un buen coche en nuestro mal empadrado anunció la llegada del presidft&te del Consejo.

—Ha venido uzté antez que yo, —Siempre me he adelantado á los deseos de

usted. —Vamoz, vamon i. ivLvece. —Dos horas há qtte no hago otra cosa.

Los anarquistas do X^rez Sentencia secreta '"

(POR TELÉGEAFO) ^' (PE NUESTBO 0(mBESfONSAIi)

Jerez 30 (d,4S noche) E l consejo de guerra se reunió á las nueve

do la mañana de_ hoy y ha eatado deliberando hasta las seis y cincuenta y cinco da la tarde.]

Me ha sido impósiblo averiguar nada [acerca del fallo, porque los miombroa del consejo guar­dan impenetrable silencio respecto á este asunto.

Después da pronunciada la sentencia, la cau­sa instruida contra los anarquistas ha sido con­ducida al domicilio del juess custodiada' por sol­dados.

La sentencia ha sido comunicada esta noche al capitán general de Sevilla.

Si el Sr. OoaUo la aprueba, será comunicada á loa reos esta misma semana; en caso contrario, pasará la sentencia al Tribunal Supremo de Q-ue-* r ra y Marina.

Los anarquistas preses ©sUn impacientes por conocer la sentencia.

La fantasía popular exagera, por lo mismo que nada se sabe, la importancia del fallo.

Sa dice quo la sentencia no está conforme con la acusación fiscal y que resulta condenado á po­nas graves mayor número de reos que los pedi­dos en la acusación.

Excuso decir que estos rumorea están oom-

Ínetamente destituidos de fundamento, porque os individuos del tribunal están reservadísimos.

La tranquilidad en Jerez ea completa.— Quero, _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _

.•/ -•w-^''" l i » c n e s t i ó u d e l d i » ^ í ' "'* '*'" La del pan fué ayer la cuestión del día en to­

das las casas de Madrid: absorbió por completo la atención feínenina, á la cual no interesaba la crisis ministerial sino en forma muy secundaria.

E l panadero fué aguardadq con gran impá» ciencia, pu,ea había mucha cúrioaidaa por Cono­cer los nuevos panecillos.

Da todo hubo al verlos: sorpresas y decep­ciones.

_ Las bizcochadas, panes bajos y demás pane­cillos del llamado candeal ó español parecieron generalmente muchísimo más grandes que de or. diñarlo: como presagiábamos, representaban ta­ñer casi doble tamaño.

Pero en el pan francés, y sobretodo en las francesillas, el aumento do .tamaño no era tan vi­sible, ni mucho menos.

Esto dio lugar á que muchas familias reposa­ran el pan en casa ó en las tiendas do nltrafiaarj-nos, pues ea las tahonas no énti'a en nuestíás costumbres el hacerlo r6p63ar,.y el resultado fué descubrir deficiencias bastante numerosas, prin­cipalmente en las últimas clases citadas,

Lo chistoso del caso és que puesta ya á com­probar, la gente empezó á ver los pesos que la habían dado el carnicero, el pescadero, etc., y por casualidad salía un peso exacto: siempre fal­taba una cantidad nada daspreciabla da gramos.

Precisa reconocer que la innovación en el fraccionamiento del pan no ha sido en general recibida con e.ntusiasmo, por las razones que apuntamos ayer.

Las clases pobres y las familiaa quo tienen muchos niños y en las cuales el panecillo peque­ño, de 10 céntimos, resolvía ql problema, eran las que mayor descontento mostraban por la supre­sión de aqnal tipo da pan, qua los obliga á dar á los chicos—quo diría El Corí-eo—panecillos de 14 céntimos,

Todo el mundo se consolaba, sin embargo, en la confianza de que no tardaría en venir la baja da pre.cio, con la cual resultaría el vecindario co­miendo bastante más pan y por el mismo dinero que antes.

liAS f a l t a s d e «ye i* En materia de enmienda los tahonero» no tie­

nen ni el punto de ootttrioióa do cíao h a h k Don Juan TeáoxíSr

Ayer mismo, aguardando la visita de los \ nientés de alcalde, se corrieron muchísimos c . ellos en no correrse en el paso. iTendrlan cert í , dumbre de que los tenientes de alcalde del Ayuíft tamiento actual no habían de meterse con e l lo | |

Como hemos dicho, numerosas familias óbse# varón faltas de peso tan considerables, que so í j ^ taban á la simple vista.

Además, los panecillos largos n i la» fraBÍÉ^ sillas llevaban el sello que m^segii las Ordaa«|p zas. .';^; f- ! !

E l teniente alcalde del diátítlfí do Buena^ i l . ta, Sr. yillanova, cUmpHendo á conciencia su oM bar, visitó las tahonas de su demarcación y P U ^ decomisar panecillos con faltas de 30 á 60 gramos. ' i

En estos últimos los tahoneros ae hablan qiftM dado con 240 gramos por kilo, es decir, que i » baban al púbHco cerca de 14 céntimos por k | | l$ gramo. , Por esta cuenta resulta el pan á los 70 oáat mos de marras, que es la cuenta que desde hii< muchos meses se vienen haciendo los tahonero^

Los señores tahoneros culpables de estás fa tas fueron multados con 60 pesetas cada uno, además se dio cuenta del hecho al juzgado.-

Esperamos que, como diaponen las Ordena^ zas, serán cerradas las fábricas de esto,-» ind«^ tríales á la tercera falta que cometan, sin p e q t ció de entregarlos á los tribunales., _ ' • _ E l marqués de Arenzana también tuvo 0 0 # sión do imponer multas. El Sr. Binoón, q ue ísp^?# mente visitó varías tahonas, dijo que había eifi oontrado d pan en regla. :

y los demás tenientes de alcalde no hioiew»! máa míe averiguar si dejaba la alealdia el ma jñ qués de Cubas, que es lo que interesa á nueatre i simpáticos y populares ediles. '

U n a t r e t a < A las autoridades—si es que las tenemos l»|ñ|

—y al vecindario debemos poner sobre avisó qf una treta inventad» por el ingenio de los tohfe ñeros, y cuya existencia pudo comprobarse (k?Nn

En loa despachos públicos tienen una oiaM de pan, que pudiera llamarse de muestra, oon éJ peso exacto y los requisitos quo exigen las op fé^ nanzas. [)'

y para el reparto á domicilio elaboran oiífc clase, bastante mermada de peso. f

Gomólos tenientes de alcalde hacen, por-Tá general, sus visitas á los despaehos,^ so les esoM pa el pan destinado al reparto á domiciiio, que M el falto, y que los fetjíceros se apresuran á saeai de la tahona en cnanto sala del horno.

UN LEGADO ORIGINAL

Dice anoche un perióiico que una señora <ia0 fué dentista muy Conocida y anunciada, y que h# muerto, ha dnjado por herederos á loíi condua» toras de una do las empi-esas de tranvías do Má-» drid en pago á la amabilidad con que la ayadAf ban á bajar del cocha.

• No hay x)ara' qué hacer misterio sobre la 3i» funta, que fuá doña Polonia S;uiz, dentií>u do o4 ' mará nada menos que de Muley el Abbp.s.

Figúrese el lector el regocijo con quo babrAt^ acogido los conductores el Kogalo y el gut to ooft que comerán algún tiempo del producto do I«A muelas que arrancó doña Polonia, lo cual VÍ«B« ¿ realizar el lema, do aquel otro, dentista que dp» cía:—yo soy un hombre quo come con la boca dé loa demás.

Añade el colega que da la noticia que alguno de los conductores afirma que ya conoció élqw» doña Polonia era señora de principios.

y puede añadir, dinero en mano, que de p ^ tres también.

Falta saber cmál ea la línea de tranví» (||;ii« goza de conductores con tan buena conductai

Para no subir, si es posible, más que en 41. La noticia hará por el pronto que se Aunt0t|¡

cen los conductores, cuando menos oon i í« flofir ras, por si alguna resulta Polonia,

y éso saldremos ganando los demás,

LA CONTRiBUCION INDUSTRIAL

E l c o m e r c i o e n n l s a d n Abierta información en el Círculo de la I 7 l d ^

Mercantil é Industrial con motivo de la publIcM ción del nuevo -reglamento da la contribución vm dustriaí, la junta directiva tiene acordado el noxm bramiento.de una comisión para Bu estadio; peta habiéndose publicado en la Gaceta las nuevas 1 ^ rifas de dicha contribución, en las que no sÓlo ¿1 observan aumentos importantes en las cuotaffl sino también reformas trascendentales;- y lo qt i i es más, que dándolas afecto retroactivo se t r a t i a de plantear á partir desde 1." de Julip próaííiáf

EaMdo, dicha Sociedad cree de gran ogortunidiil aceruna excitación á los slniicas de I03 g r «

míos para que éstos reúnan inmediatamente'i sus ooTMniadés con el fin de hacerles cbnooet w lea reformas, y en su vista expongan al presideflj te do dicho Cfrcttlo, sin pérdida d^ tieijípo, 1 ^ .objeciones que estimen convenientes para p94< l entablar laá oportUnaíi recla&jicwiios B,^^ entablar las oportunas reclamjicwnes ai j t | poderes pább'cos antes que finaho'o el plazo l é lado ea el citado real decreto.

EXPOSICIÓN DOiLLAS ARTESQ MAS TnmojOB

A las extensas listas que ayer pubJicamoiMl nemÓB que añadir las recompensas siguionteSí .,f

KSCnltni'» ^y' Menciones honoríficas.~Gl»va,e6, P . X a w

Adela Ginós, P . Gibert, Ckrhonell. Cjuej vOi Ji£fttt|j

Francisco. S e c c i ó n háftívaí

Primeras medaUas^lWÚ, Cari Marr, «Ee* to.»—1614, Francoia Jíímband^ «L» oración Schamyl antes do % Ba;tallí^.»^1589, Auga^ Leonhardi, «Arroyo en la riíOntáaa.^*^1605, í chard von Poschinger, «Calle cerca de Muíiioi

Segundas ni«dams.-^lH%,^8ím von Bártelí «Aguardando.»—1,548, j . Bergmaai», « B O Í T ' gos.»—1.5.64, Édmund GrUtzuer, «Probando fino.*—1.669, Híirmánn Hartwioh, «Láv^ndei del lago dé Oarda.s—1.592, Joaef M^ati*gzo¡tj «Retíáto.s-^1.622, O, Seiler, «La sorpresa.}, 1.608, Jok León Raab, «Las de Oanaáns toftM do),—1.571, Antón Hess, «Busto da S. M. el re^ D. Luis I de Baviera» (en mármoH.—1.620, Q% briel Seidl, «Villa del profesor Leubach.» ¿

Terceras medaíías.—l.&áO, Edmuad B l a n m «Padre nuestro.»—1.660, Frajaeois Bisenhü» «Guardián atento.»—1.666, Niool Qysis, «reregrtf nación.»—1.578, Hugo Kauffmaun, «Postilloiajl —1.582, Gotthard Kübl, «La iglesia de San J u a n de Munich.»—1.629, I*. A. BeKgmann, «El pía,* tor.»—1.644, LundezA. Andersen, «Paisaje, dé invierno.»—1.658, Conrad Eilers, «Cazador e r a porro.*—1,645, Max Bareaíánger, «Jobo Chaú^ bors» (agua fuerte}.—1.607, señorita Doiús B a a » «Retrato» (copia dó Benibrandt).-^1.597, Féo^Jí von MUler, «Indio» (estatua en bronco), ' '

Menciones honoriMas. — Bv^Ung, Fr5sc''*9 Hartmann, Hocker, fíofmberg, Hummol, Kelleí Kúní , Mayer, Noez, Puhóhiy, Rex, Rotta, Spria^" Stuhlmüller, Voelmy, Wunech, Oarstens, Gji ger, Heine^ Petera, Willroidar.Harburger, M,i¡ thaler, W m d jjr Seidl.

S e c c i ó n f r a n c e s a • ' ' Primeras medallas, — Alberto Aublet, « 1 *

marqueaíta.9—Eugenio Boudin, «Barcas á 1^ j S Ia.»-Emmanuel Damoye,-Ob arles Mácb«rd.<Ría trato al pastel de Mad. Julos Machard.j—i^milg Renard, «Retrato,»—BimifioRonouf, «Un náufr» go.>—Alfredo Brune.| Debainos, Aguafaer t* íPoxting day.»—Louis M. Bourgeo's, «RetrfkM en yeso de Mad. y. d» 8.» —Imbert Noel (L0U19J «Bañista,» estátíia en mármol. ^ ;f

Segundas, medallas, — Camilo Bollangtierj «AÍsor adormecido.»—Claadío Botirgoun.ler, i\M

Íial4»—MfredoBramtot|<.EU «« á<} d^ mtm

Page 2: el imparcial

*• . ' » ^ ^

^ K-Santiago Lemattd, «Santa Maeia 3£agdcctena<> >*-Á.lejan(iro •Na?».!,' «Valí* T del Sena.»—Víctor í rouve , «'Monje tezando en el issEdín de su c«l-a».>--Leóa-Eu6l, «Camino del iBoTino.»-^lfred Sjjiith, «Después del chubasco,»—Al^andro ÍLa-nois, «El jar rode vinojí—Anatolio Marouet d» Vasselot, «Busto en mármol de la viawnaeaa de Sombreuil.» , -, ,. T.

. Terceras «leiíaüZas.—Mad. Uranio Colm Li-líour, «Un curso de dibnjoA—Pablo Langloie, € p n coleg«»»-^Satiardo ^Jtenaír, 4Interi&r de UB» ^éec«i ' ia i»~Alíredo Paria, «Un veteranc^T^r ^ranpisco Sallé, « Arrio en el conciEo de Ni-'iea.» , • • „ '

Mmmim ioJíoríjfoas.—Señorita dona Marga-jrila íA-rosa, «M baño.»—Maueelo de Aubepine, •iSsolaYOSí»

t o n S^ss'KO coiaaESRONaAii-)

PaPÍsaO 0O,45¡B«5l»)

Eata mañana lia comenzado Mr. Brisson sus «©aferencias i o n i o s hombres políticos para pre-farar la focmadión de nuevo ministerio. Hay g^nien supone: au9 hará oficios de capitán Araña, tratando de poner de acuerdo á los hombres que J^azgTie¡eai condiciones de.daseiapeñar unacar-4efa, y (yie Eo ae reservará ninguna con objeto d« continuar ggnsgidiendo -la,eamisión de iaforma-iCJéa parlamentaria y preparándose para ocupar fa presidencia de l a república, áq-ue e n l 8 ^ as-pitó. , . ' ,. _. J

Mr. Brisson ha-comenzado por aoHcitar élj ©onourso de ios .ministros dimisionarios, y eape-' Sái^lmente del de .la Gu6iTa,íMr. de I'reyomét, y • del de Negocios extranjenos,HT. Bibot. Secnee |M» las gestiones del preardente da l a comisión; iipormador« no han dado .resultado, y que tal w*% resigne el enqar^o y sea llamado por el pre­sidente de la república el éjftninistro Mr. Bour-geois.

'San e l M'ií&«iO Esta tarde ha estado Mr. Brisson en él pala­

cio del Elíseo, á fin de dar cuenta del resultado de sus trabajos á Mr. Gamot.

La noticiad©la visita habastado .par» cpie se d i 6 Í a ^ nuevo ,gobi@rno ma constituido ¡y para

Saf> se continxiase ponietídb « i dicñlación candi-ataraa forjadas á G-apricho^

La verdad es ^ue hasta ahora no hay rainis-tftjáo; que ^ , Brisson .guarda ía mSfe profunda aí^ierva aceroa del resultado de sus gestiones, y q^ue el presidente de la república aguardará has­ta la madrugada para conocer la resolución défi-mtiva de Mr. Brisson, quien solamente acftptá el j ^^e t i do por no d ^ i r a r a Mr. Oarnofc, segiín di-.«Mi los amigos'ds aquél.—A.

LO DEL OENrm? MÍUTAR S o r p r e s a , J a l e o y d i o r ü í í o a e s

Püira la mayoría de las gelí'¿es, incluso las que parecían hallarse al tanto de los asuntos del (Jen-liío militar, era cofea indudablt» ]a elección del ge-¿eiral Bermúdez Ileina para la presidencia de amella sociedad.

Así se había dicho en todas partes y efa esas condiciones aceptó el exmínístro de la u-tieTa la presentación de su candidatura, como le pedía la Tunta directiva del citado centro. • Pero llegado el momento de la elección, resul­

tó, cpn universal sorpresa, que había otro candi­dato, el general Borrero, y que'tíus huestes se ha­llaban tan bien dispuestas que su aspecto era el de dar un grave disgusto á los bermndistas.

A las die? de la noche empSKÓ lá lueha, es de-icir la votación, rica en incjideiftes y protestas, y atm duraba Cíf«;a de las enatro de la madrugada.

A esa hora resultó el general Borrero elegido 5i5r 40 votos de mayoría.

E l general Serrano había abandonado la pre­sidencia.

Varios jefes de ínarina y de las arma* espe­ciales presentaron una proposición declarando íttnlala votación por excédei' gínñinéSfo de votos d e y e votantes: á ese eXtl-emo Se .había 'llegado.

Pero los triunfadores ss impusieron y la pro-elamaoión del general Borrero quedó hecha.

Dimitió casi toda la junta directiva. Ocupándose de lo sucedido dice El Clamar,

periódico qiie, aunque sospechoso de parcialidad en la materia, tiene motivos jíétra hallarse bien enterado.

«Debemos correr un velo sobre ciertos inci­dentes ocurridos en la elección de anoche que revisten tal gravedad, q-cte no ¿os atrevemos á ^tamparloff en nuieetras Columnas, pero loque 8Í podemos asegurar es que en la lucha entabla­da anoche ea el Circulo militar, no ha habido X'B^^eedores y vencidos, por la sencilla razón de gue todos pertoneeon á la categoría de estos úl-i(íimos, y buena prueba de ello es, que según in­formes autovizaaos, no h«n de pa-sar ocho días «|a que hayan des&pareeiJo dé las listas de so-¿jos todos los jefes y oficiales del ejército que no itertenecen á las annas que se llaman gene-n^es.»

Seria de lamentar ese nuevo antagonismo.

^ \t$'m^ rae» w^jf-

cvrdtHt vae<M^6hm d4Sl»adaaKff& ^ i n a e t ^n tA eii kiá'bxindis añüBriorw, y BSS& cegii sus «alistó­l a s j^k%iras la abra é¡fi^Jur|á9 por <l l geimfos»i' manto €fllmplst^tÉ^ a,Jléa9»an& l a asnilísinw prd-;i&aesta, de preifisis.

Todos 003 individuos d«l Jurado despedirán mafiana en la estación del Norte á> su ilustre compafieño Mr. Bonnat.

A la diligencia de nuestros reportera deb®-moá él poder ptÉMicar lioy un exteacto cmnplido l e loe datos más irtereasfit^i (jue eontíene la lleraaria redaelüada ^pw el Sr. Dato, sobre la ad-üiinistración del Aytlntemiento de Madrid.

B n e l j l e i t o entablado entra la opinión y el gobierno, no hay argumento de fuer¿a tan tre­menda contra ío iecho ayer como los párrafos que vamos 4 trascribir. Después de leídos se OOBaprende la hpnroaa .retiradra deLSr. Villaver-de, laa dimigiomes do Iss Srés. Da:to y Santoyo, la negativa del marqués de Gubas á continuar un swo día en el Stunicipio con los presentes concejales y cuanto significa indignación contra los que después dB conocerlas e'stiman sin im­portancia las monstruosidades realizadas en el Ayuntamiento.

I^a Memojáa es acüsación:y sentencia, todo en ima pieza: tan graves asa los cargos que fonnu-Ift: de modo tan Bné^jgico síflfem a la v ís ta la in­moralidad, el desorden y él Sctropeflo más cínico jde las leyes.

Prestipu»stoS de bufia que se saldan con 4 mülonesy medio de .pesetas de-déficit, reunidos ,de otros en que el déficit llagará áiS miíCnes j niedia; compras d e terrenos gar valor de dos mi­ñones de peSíítas, hechas 'Bin autorización del Ayuntamiento y con la agcavante de "establecer preferencia para s u pago; l.(XX) reales diarios pagados en limpiessas i o r getrvicios áuo no se prestan; prelaciones arbitrarias en los pagos, principalmente de «ai^ropiaoiones, donde las can­tidades son grandes y ^or lo'tanto dan margen á la gratitud; contratas importantes prorrogadas

or la tílcita y sin anuncio de subasta aun cuan­

t a triple alianza y f rancia (Por tetígraft)

P A R Í S 30.—Xe Journal de hoy publica un cúi

SiíSso documento que dice ser traducción literal el tratado de renovación de la triple alianza.

En el artículo 4." de dicha traducción, se declara que Austria y Alemania reconocen den-íiitivamente el derecho y k situaeión politiea de Í Joima como capital del reino itaUano. ; Por ol articulo 7." se determinan las condicio­nes y el concurso que cade «na- de las partes aliadas deben pi'ostarSe.

, E a oaéo de guerra entre Alemania y .Rusia, Italia moviüstaTÍa su ojémito sobre la "frontera írancosa y declararía la guerra á Francia, caso ^9 qao osta se adhiriese á la ca.úsa d« B.usi'a.

Si el conílicto «stallase per el contrario entro llttilia y FranBÍa, Alemania obraría en las mis* pascondicionííS k que esti't obligada Italia, ' • Los restante* articulc>s dsd tratado se liwiitm ^ sancionar la alianza defensiva entre las nació­o s contratantes) íulianaa que debe couvortirso ea eifonsiva cuando las circunstancias de peligro p^ra cada una de ellas lo acrousejen.

P A H Í S 3D.-^Ba la Gámura austríaca de Irts di-••^utados 96 suscitó ayer un vivo é interesante in­cidente.

Discirtiaage ios pi-esuj^aesto», y un diputado Mltisemita aprovechó la circunstancia, al hablar centra los mismos, para aludir á la situación ac­tual do Francia»

Dijo que la república f r ane l a está á merced ifle los israelitas, atacándola ea términos muy •tii&lentos.

El presidente de la Cámara llamó al oi'den al •«rfldor, en medio de los aplausos de los min'-dte-^iales. ^ Un telegrama de Vien?. «iñf-de- que, al tener •feeticiadelaeOíifticío, el emperador de Austria **^"1^só su indignación por haberse proferido en

I Cámara palabras ofensivas a ^f—Fcfbrcu

una nación ami-

^ ^ .i^'

ette. •. 'Wi^f*t*-

Iffím. f.tvb

BANQUETE _DE ARTISTAS Anoche se verificó en Lardhy el banquete

y&residido por el señor ministro de Fomonto, con Oue, s>gún costumbre, pone fin el Jurado de la jGxpasición de Bellas Artos á sus tareas.

Inició los brindis el Sr. Alvaroz Capra. Le si­guió Mr. Bonnat, jurado de la sección francesa, fue con sentidas palabras recordó los principios

e su carrera artística en Madrid, y los pi'ofeso-í^es de la escuela de San ITernando, que, como á iues t ros grandes artista-s, le guiaron en sus pii-meras enseñanzas. Habló se-ucilla y noblemente, y trajo sin querer á la memoria díe todos los la-áós naturales que unen á su patria con España. •Sns palabr*B recordaban esos passijes en qiie Tiotor Hugo bascaba «1 abolengo de su «enio 11-jerario en nuestra gran lifcei-atara. Siffuicle dcaí Ijuis Madrazo, como representante de Baviera.

E l Sr. Díea Macuso, oem© presidente del J a -*fedo, pronunció un brindis tan oportuao eomo /#locaenie, y j>or -último éí a? . Linares JUSTOS hiáo gala de sus singulares dotes oratorias al resumit-toa todos fo. su Iffiadia. eariñoaiaimo-parA el serte y^toa artistas; dedicó á. los" representaa'tes ©k-im^isrod üraaaa d« »grad«cimroato por sa con*

do pedia ésta la comisión; suministros de 10.000 duros cobrados por partidas de 500 pesetas por el favorecido para evitar una subasta que mer-ma^B Sus ganancias; transferencias de 100.000 pesetas á los seis ídías d* aprobados los presu­puestos, para engrosar el dinero deatinableá los «iuspectores» y «capataces» de que tanto se ha hablado; arriendos -de easa« a u n alquiler 'tan alto, que con la renta de un par de -años podría comprarse laáííiía;«3roedieates cuyai^-envio i los tribunales se pide; faítBs declaradas é iiidis(Ail-pables 4 la ley en porción de casos.

5Paíl :e3 en Bíí&VB ¡par-o significativo óompíÉidio! la Memoria. :

í leaqui losda*o8 quecontienei:

Slttaacléu ¡Se la ífaclCHaa mwntcí^al en IS dé Oe«mt£'e 4e iSdS

De los doBumentos que 'se aeompañan á la Memoria resulta qíie de las S3;493i6l9 .pesetas 92 céntimos ©álci&das cómo ingresos, iban re-candadas &22f,008.y ;gastfldds .9.934.757.

Según la Memoria, desde 10 de Julio de 1891 hasta 20 de Oolubre del 92; ha gastado e l Ayun­tamiento ea vías wiblieas 2.©14.793,-26 pesetas.

Haccnotar el >Sr. Dato les ^ieíeetos d;e Orga­nización de esíe ramo; aconipaffia una relación d-e jornaleros, en la que aparecen como •inspectores y celador en muchos mdiviíi'üos (creemos que pasan de cuarenta) respectó de los cuales no ha podido comprobars&=si|^íe«tabanj ©íl efecto, algún ser­vicio. Manifiesta que en el presupuesto no hay tales e&rgea de inaíweflores y eeladores, y entien­de que para esclarecer ©tfte asunto debe confiar­se la iñvestigaeiótt álos tribunales de justicia.

DeauffiOia«l abuso de que los Ooao^jales de le-.gados ^6 servicios eofltrataroa á^»piMas y sin acuerdo ael Ayuntamiento suministros de verda­dera importancia que «o pa'Saban por el tamiz de la stíbaata, á pesar de ser niuy superiores á 2.(X)0 pesetas, pues sólo á seis industriales se les han pagado desde Juljo del 91 per eses suminis­tros 175.908 pesetas en puertas fraccionadas en cantidades inferiores á 500. Hace notar que uno de los proveedores que ha suministrado géneros por víílOr de laás de SO.OdOjpesetaisen-un año, és de pr«fésióaj<wnate-o y tiene designado uii re­presentante o apoderado cerca del Ayuntamien­to, es decir, que ea un testaferro.

w)bj«t5'8 •«le l á íCiWel-eiB Únese á la Memoria un informe del Sr. Oar-

derera sobre medición y valoración de las obras, resultanSO qite haa esstado ptóxiataiíitente pese­tas 338.0(K). Se ponenen duda la necesidad y ven-.tajas de las reformas. -

Ji!l*toaé<í» fflel toa*'ett «e eoe&es tol • • ftetlro

É á la s'ubjista do esté servicio^ como én casi todas las ¡fel Ayü^fainiento, se'f^lto á láley, á jui­cio del Sr. Dato. Despiiós.de sabásiádas y rema­tadas las obras se rescindió la contrata. En el ex­pedienté no consta nada más, y sin embargo es. •evidente que las obras se &an hecho sin subasta y sin acuerdo del Ayuntamiento.

, ' ¿.Quién la decretó? Sxpe&lentes de la x-ssairte üel Cardenal

CSsaieros Propone q;Ue se active ft y 3*esuelvan estos e&-

•pediesteSi de tesi que- tóareíe resultar que. un con­cejal, atribuyéndose facultades que no le eoinpe-tíoB y abusafldo d* las propias, ordenó variacio­nes de la rasante de aquella calle y dispuso que los'operarios de la Villa ejecuiaran obras ea una propiedad paítiéíilar.

©osiíra-ta d© í>4eAra .iwwi'tMa Denuncia el heelíode que estaimpoit-taote con­

trata se haga ppm'r(^«do por ía tácita desde 1." de Julio último, sin que el Ayuata'iniento anun­ciase la subasta, Ue obstante nabar expr-asado la jieeesidad de hacerlo la _ ©omisión, reapeotiva'en Dieiembra del año anteiiar.

Heoonoce que los Ayuntamientos que se kan sucedido donde'1:986iiaa hecho igual despre.cio de lasi -disíposieione» de la ley de ©tisanche en punto á.exgropia&ion.6S^ confirmando cuanto dijo el Sr. Aguilera en su Memoria de 1889 sobre este punto. _Eiogia al Sr. Rodríguez San Pedro por habar intentado cumplir aqueila le-y, y dice qnc entre los acreedores del Ayuntamiento por el precio dB los terrenos ocupados para vías pú­blicas, debían s'er preferidos para el pago los más antigaos, atendiendo á la fecha de incoa­ción de los expedientes 6_ á la de ocnpaoión de los t&rranos. Pero en tan importante materia no se observan reglas conocidas, y la prelaciónde los pagos se establece arbitrariamente.

líslaciona con minuciosidad los heahos del ex­pediente de expropÍaci6.a de terrenos de los he­rederos de 'G-orálvez, á los que .so han compra­do terrenos por valor de dos millonas de p&íte-tas, otorgilnoose la -eseritura de pago, sin qne d Ayuntamiento Imhiere acordado pagarlos, sin qme tas fincas vmididas estuvieran inscritas en el re­gistro de la_ Propiedad' á nombre de los vendedores, y eatableoiéndose á favor de éstus una prefirex-ciet para elpagO_ total de loa dos millones en el caso de que antea de trascurrir lois plazos fijados , á su efecto, se hiciera por el Ayuntamiento alr gana operación de crédito.

Bs de notar que cuando en 1886, k raíz del . acuerdo del Ayuntamiento., relativo á la medi­ción y precio de los terrenos, recunió en alzada ante el gobernador la As-oeiación de propietarios, el alcsaloB de aquella époí;a iaformó. diciendo que el Ayuntamiento no había acordado pagar los terrenos, sino simplemente aprobar sus medi-das y tasación. En vista de este infqrme se des­estimó el recurso de la Aeociación de propieta­rios; de manera qae se paga una cosa que está protestada sin nuevo acuerdo del Ayuntamiento.

Se censura duramente la gestión del Ayunta­miento respecte d'e higiene y alumbrado.

En el de limpieza se hacen notar las gravísi­mas faltas de material oonsignadas en el acta le­vantada por el Sr. Santoyo, y se pide pase el asunto á los tribuKales, pues estaban cobrando ¡eeroade mil reaises diarios por servicios que,no «» prestan.

Festejos. S e isdifioa de dispendiosa, incierta y desordenada tínda la gestión referente á este ponto. ,.

MDiicí»md:» Bmiile%al I OiB :A,yunfc*BM,9at&s tisnem el d e l » ' de rami-

fe 41 gobernador de la provincia el IB de Mari» de cada año los presupuestos que lían de regir t i 1>? do Julio iñguieut/d. £ 1 aotaal remitió los

dia3!69t'^93iaa:23 ñé 3mao ' ^ u a , . ^ s^suiuBa» e]%.ma«K:laliaentem|>old»)le ~qu%m golbarna^r lojS «at«aaas« y puii^ra coirregir jbw extealiimlia-ci:c^sÍKgals»que«q[uéll<» contu'ñeran,

i D n « prsesupwste» <Wa -SI al ^ s« devwran los gastos á 31.490.491 pesetas, y sólo se recau­daron 26.904.522. No obstante esta baja, en vez de reducirse ios fictos %n el proyeo*ó -Ser 92 al 93 en la proporción oorreBpondi'-nte á aque­llos ingresos, se elevaron á 33.493.519 pesetas, ^9lqítóae g.ae si la reeiaid?«i(^ no s i f t » feafaada eft*st^ ftjercioío y se miualiéne á í» ¿ t u r a del airtéricr, el áSñeüqueBe«i«vó e a M 4 9 2 ^ m s e -t»s 4.585.969 llegará en 92 al 93 á 6.588,997.

AUtetraclónes en l«» i»t'esir]^iBtest«é Para atender en parte á loa nuevos gastcw

del actual presupuesto, se habían Bleyado las cuetas de -vendedoMs ambulftnlieÉ, de propiete-rÍM -de kioskos y d© coneesioaarios de puestos de agua del Paseo del Dos 4© Mayo entre otros. E l Ayuntamiento, en sesiones de 6 de Jul io y 30 de Setiembre, acordó prescindir de ese aumento y volver á las cuotas delpresupuesto anterior,-in­fringiendo asi las disposiciones legales queteicen inalterables las partidas de los presupuestos ttiientras uo se refoi-HÍen por los medios señala­dos en la ley.

T ra s r c i - e i i c l aa i d » « rMf i to A las arbitrarias modificaciones introducidas

por el Ayuntaínierito'ea su presupuesto de ingre­sos, corresponden en orden al de gastos las no menos arbitrarias que sin autoriaaoión superior se han realizado por medio de injustificadas tras-íerenoias de crédito. A los seis días ds empegar á regir el presupueste d«l 92 al 93, sOlioitaron, ajanaos concejales .que con la urgencia que e l caso requería se aumentase en 205.36*7 pesetsw y 75 céntimos la cantidad destinada al pago de jor­nales, que era en lS91.al 92 de 474,895 pesetas, yea92al .93de;644.052. ^

-No bastando tan'considei^ble aumento, s©' ooasideró ui 'gentealos seis d iasde Ti^ir el ac­tual presupuesto auments^ las 6áí4.052 pesetas con 205.367.

E l Ayuntamiento aprobó la, urgencia de aque­lla moción y acudió al aumento, aunque limitán­dolo á I08i004 .pesetas y 75 céntimos.

Se relaciona también en lá Memoria otra tras-ferencia, acordada en 11 de Mayo del corriente año, de cerca de 700.000 pesetas para materiales de vías públicas, que se diatrívjergn de la canti­dad destinada al pago de ejercicios cerrados del 8 3 a l 9 L

C ^ n t á f r i l M a t l Sácese natar UB» diferencia entr« Ibs; aaiea-

tcffl de los libros y vari-sa errores eto la numeni-ci&n y serias xle los efectos públicos de|)ositaidt)s en la caja municipal, y se dice que, si bien éstas diferencias no aflteran el resultado en cuanto á las existenciks, evidencian la falta dé. formalidad con que se procedía ém lá practica de los ar­queos,

É s e a c l a s .^ -, Se habla de tm industrial que pbr Siiministros

esa este ramo coi»ó máa! de 4&fi00 prestas en cuentas inferiores á 500. Se censara elabandono de tan esenfeial servicio, que fea llagado basta el pttotó de q^te se destiaííSBn A haMt«eiSHííS pwra empleados del Aytmtaíni^te locales pagados por 'é?3*epaira escuelas, confésaad® ia jtuat*Isabér to­lerado el abuso ciiíando llegó á ooítocerle, por la imposibilidítd de reseiadir el ijontiwtO.

¿Para énándó es lá iatervención de los tribu­nales?

Los locales destilados 4 eswielás cuestan al ayuntamiento anuahaests 333.838'pesetas 75 céntimos.

Por los pisos segundos de la oaSa número 6, plaza de Paerta de Micros, 5.800 pesetas; dos cuartos.ba,io3 áp la, casa número €, carretera dé Andalweía, S.OtíJO; dos j^sóa segundos-casa núme-t% 14, Sííel-tadel Bayo, 4.B00.

C^lISH.t»OS Se hace constar que por varias causas la r«-

msdéÉCióÉ de 1-891 a 93, excedió en dosfcreátas cáneaenta y seis mil y pieo dB paletas k todas las recáudacióBes obtenidiis doade 1874 .'en cambio, «n el ejercicio aetuid la disíñinneión en lo qué iba de eieriisie basté, fia de Ofctubr^, alcan&iba á 388.894, comparada oSn igual tiempo del año anterior, á pesar ds haborla cuilculaúo un millón más.

Se haes notar que el visitador general de con­sumos nombrado -pov el Sr. Boscb en Abril ulti­mo, desempeñaba desde lebrero hasta la fecha de su nombramiento los modestos destinos de es­cribiente temporero con 4 pesetas diarias y ca­pataz eventaal de obreros con 3 pesetas en los días de trabajo.

Respecto álos expedientñ.s dedeíraudaoión por introducción fraudulenta do liialo y el de los cé­lebres pellejos de aceite, se hace una minueiosa relación y se propone se envíen á los tribunales de justicia.

Se hace notar que las cemisiones que por lá ley son iwrmaneñteg, han sido variadas á capri­cho por el Ayuntamiento. ,, Y por último, se hace notar la falta de celo de loi9 concéjsileá, por la poca asistencia á las sesio­nes, considerándose, según la ley, negUgéacia gravé.

KGOS DE SOCIEDAD A la reunióa que, jspmo todas las semanas, se

•TOítEeó el luft«i en ha Siterta «ofudieron mu-c h » damaff, qae íuefon amablemente recibidas por la señora de Cánovas del Castillo, pues B1 presidente del Consejo se encontraba en la Aca­demia de Jurisprudencia. Concurrieron las mar­quesas de Viana y Vadillo; condesas deTs r r e -ArtftB, Castañeda y Vilana; vizcondesa de Iruea-te; s&ora Pardo Bazáa y señüdtas de Oaicedo y de A ^ e l a .

La insigne autora del Nuevo, Tea,tro Crítico da'ba cuenta en chispeantes frases del ímprobo trabajo que acate de realizar examinando más de 4D0 sonetos del certamen anunciado en Eli IiGFAECiAL para opt&t á las LOOO pesetas <3on que el Sr. Vizoso ha querido premiar el mejor Soneto dedicado á enaltecer el desprendimiento de la católica reina Isabel I .

Como entre los 400 sonetos abunda míis lo mediano y lo malo que lo bueno, calcule el lector si será tarea meritoria el examsn de tan volumi­noso legajo, que ya la señora Pardo Bazán ha re­mitido a otro de los jueces encargados de dar su veredicto. Porciei'to que, según contaba una dis­tinguida señorita cuyo ta-illante ingenio es gala de nuestros salones, hallábase dicho ilustre lite­rato recluido en su despacho por el delicado es­tado de su salud, teniendo encima^ds su mesa el legajo consabido, dispuesto á seguir la tarea ini­ciada por la señora Pardo Bazán, cuando entró en la habitacipn el doctor que le asiste.

—gQué tiene Vd. ahí?—parece que hubo de pa^tintarle. : - —Cuatrocientos sanetOs— contestó B1 autor de t«,ntós oti-os notables,—que me dispongo á leer, si Vd. lo permite.

,. —'¿Y cómo quio-re Vd. ponerse bueno?—cuen­tan que le contestó el doctor, y por orden facul­tativa, y hasta que el enfermo se restablezca, fueron retirados los 400 sonetos anónimos,

*** Los señores condes de San Bernardo sientan

frecuentemente á su mesa álos amigos de au in­timidad, que amas de gozar de tan amable compa­ñía, tienen ocasión de admirar el arte incompara­ble que se revela en los .menores detalles del magnífico hotel que 'habitan dichos señores en el Paseó de la Castellana,

Nada tan delicioso como estos delicados ban­quetes que preside la bella condesa, animando la

! conversacióíi con las galas de su ingeni». En el centro de la mesa brota el agua de una fuente,

: que humedece con sus gotas las más delicadas fi«é8. El oaía se sirve en el hall, miígnfíica y c'on-fortable habitación poco conocida en España. Es un salón con techo de cristales esmerilados: alto friso de roble rodea las paredes, pintadas de ese colol" ladrillo que sirve de íbndo para los cuadros y que se emplea en las exposiciones; sobre el oscuro j7«r^ííe!t del pavimento se ©xtit.nden ricos lapices pérsicos; una gran chimenea de roblé ocu­pa #1 fondo dB kr habitaeión, en el otro frente una elegante balaustrada de mármol Manco corre á la altura de l piso principal. Muebles elegantísimos de iaosáioos vettecianos; arcones antiguoB, cuyas

• sol)6rbia3 tallas exhiben desnudos angelotes; cua­dros de pin-tores notables; en un caballote un cua­dro Andaluz de (rarcía llamos y cayendo sobre el dorado marco los alamares de una chaquetilla to­rera de Bocanegra y las florea y loa dorados agre-ifeatf&s do una capa de paseo; un biombo tunecino, álA'avés de cuya'delicada celosía se perciben _va-gaisante los objeto»; mesas de billar, de tre,sillo, de periódicos; plantas tropicales, y otros muchos obietos, iluminado todo por el resplandor de las lá«ipar»8 qu-e velan encajes y amortiguan tules.

Jhi aquella hermosa estancia las horas sedes-litój. i'ápidas, y es ya la media tocho cuando lois' fíívftfídos atraviesían las enarenadas caite» del parqufl del hotel de los condes de San Bernardo.

MojíTE'Osis"ro.

en el mes de Oc tubre . Constará , pues , d t (OCHO PACUNAS, y s u astajapa^ción cyida^.-^í s ima p.Gdrá, compet i r eon la de las más ai t í s t icas revis tas üiig-tTadas. • . •

O p o r t u n a m e n t e da remos detalles- de I09 origis.alfia l i terar ios y pictóricos c|ue com­p o n d r á n este número , qne lia de r e s u l t a r , ^ c vaci lamos en_ decir lo, el más no tab le de cuan tos del mis-mo genero ge háí i Lecho en E s p a ñ a .

E n t r e ot ros esci*itor©Sj he i í r a rán ol-^nú-mero Ütistrado de Er. I M P ^ B O I A L E N NOÍGHE.

BüElíA la señora P a r d o B a z á n y los señorea Eokega ray , Pé rez Gtaldóa, ÍTúñez de Are?; Selles, P icón, F e r r a r i , V'ital Áxa, Blanca Asenjo y T a b e a d a , v . , - /

Nos k a n favorecido CQÜ diversas compo-BÍeiones los r e n o m b r a d o s p in to res Sres. ü n -ceta , Muñoí! Degra in , Muñoz Lucena , Este* b a n (D. Earictue),. Galofre, .Oüer y- otros .

Así los t raba jos dé los l i teratos como IOÍ.. d e ios p in to res serán todos originales, he­chos exp re samen te p a r a mies t ro 'numero , j ded icados a l especial a sun to que le inotiva,

* * , •

Todos los siscriío.res de EL IM-PAROIÁL, incluso íos que só.suscri­ban durante el mes de Diciembre;, re­cibirán GRATIS este número extra­ordinario.

sac.-

%mm TMMJLJ'EL Wi£!E« ( D E N U E S T I Í O S CCaKESPONSAIiES) " .

Londres 30 g,S¿ tarde) Es ta mañana se ha reunido en Portsmouth el

consejó de guerra llamadc á fallar en el proceso incoado contra el capitán Hastinga y el coman­dante Dicksoa del acorazado fibrotí, que varó en las inmediaciones del í^errol.

Los dos procesados haJi sido absueltos sonto-; dos los proüimciamiéntos favorables.

Se ha demostrado que la carta dol puerto del Ferrol, empleada á bordo de tos buques ingleses, 63 de hace Un siglo y contiene muchos etrote-a.-— Moore.

E l P e r a m^gnometa l t a i t a Nueva York 30 (5,20 tar^>

Telegramas de Lima, recibidos por la vía de Panamá, anuncian que el gobierno de la repúbli­ca del Pe ra ha, pubücado un decreto, estebleeien-do la moneda de oro como la única legal del Es­tado, limitáado la acuñación de plata á cuatro millones de soles y fiiando el máximum legal de moneda d* plata por habitante en veinte dollars. —United Press.

MI «M4uattlas» Ferrol 30 (t2,5 tarde)

E l clipper escuela de guardias marinas Nan-tilus acaba de zarpar de este puerto para empren­der viíye de circunnavegación.—Itivas.

© t r o p e t a r d o Rsus 3Q (Í2,3i0 tartís)

En la_ madrugada de h«v estaUó ua pstardo de dinamita en loa bajos de la casa donde se ha­lla establecido el caíéEspa&ol.

E l petardo produjo daños materiales de alguna consideración, pero no causó desgracias perso-

ropa.—Montepío civil, de la letra R

A GOB^RAR Olases pasivas

. Los individuos que tienen consignado el pago de SuB haberes en la pagadixría dé la junta pue-Séfi presentarse á pferCibir la meiiBáalidad co­rriente, de las doce de la mañana á la.s cuatro de lá tarde, en los días y por el orden que á conti­nuación íse oxpi^san:

l)ía 1." de Didembre.—Oapitanes.—Tonientos y alféreces.—Marina.—Montepío civil, de la le­tra D á la Ll.

l)ia 2.—Montepío militar de la letra M á la Q. —Coroneles. —Oesantcs. — Exclaustrados. — Se-caestro».—Romune-ratoiias.

Día 3.—Oomandantos.—Plana mayor de .jefes y brigadieres.^Montepío civil, da la letra A á 1»G.

Di"» 5.—Montepío militar, de la letra E. á la Z. —Tenientes coronólos.—Montepío civil, de la le­tra M á la Q.

Dia 6 . - T : á k Z.

Día 7.—Montero militar de la letra A á la Ll. —Jubilados.

Día 9.—Superviveneias.. — Eosidentes en el extranjero.—Alta»; todas las nóminas sin distia^ ción.

Día 10.—Retenciones. C u j a «1© tJitFaMissr

Mañana dará jíviocipio por la Inspecorón el .pago do asigaaoioB-es de señores .jefas, oñoiales y tropa de los distritos militares de Ultramar, en los días que á continuación se expresan, y de ttaa. á cuatro de la tarde:

Día 2 . -Le t ra8 P, Q, B, S, T, U, Y, Z. Día S . -Le t ras A, B, O, D, E, P, (1, H . Día 5 . -L6tras I, J, L, Ll, M, N, O. Día 6.—Incidencias.

f&eTi,»ta d e c sn i i s i a r i® La revista de comisario del pre.3Gnt6 mes de

•Diciembre la pasarán las clases milita-res que no foriimn, cuerpo, resident&s_ en esta corte, en el or­den que se exx>resa á continuación:

' Loa ssüorea jefes y oliciales en comisión acti­va del ser^doio, jefes y oficiales de administra­ción militar en situación de reemplazo y los se­ñores pen,3Íonistas d© las crneas do San Pernan-db y Síin Hísrmenegildo, el día 3, dé una á cuatro 'de "la tavde, ante el comisario D. Julián López San« y en la Comisaría de trasportes, calle do la Encarnación, ni'tm. 14, bajo.

Loa señores jefes y oficiales ea situación de reemplazo y ans asimilados, á excepción de los de administración militar, los transeúntes de to­das clases, incluso los que desempeñen oomi.sio-nes ó disfruten licencias, las partidas sueltas, y los pertenecientes á las escalas de reserva que tengan su reaide-noia en esta corte y no se hallen afectos á alguna-s de las zonas de la misma, los

2 y í!, de doce á cuatro de la tarde, ante el en el mismo local

La detonación fué tan grande que alarmóiau-chiaimo al vecindario.

Se igaora quién sea el autor del atantr.do, y no Si© sospecha qué móviles pudieron impulsarlo para cometerlo.-Jt7 corresponsal.

E l Aysis i t í ia i iea í® fie Crea"»!!» fiareHa 30(8 rseelie) ;

Se comenta desfavorablem.=!nto _ H anoi-mali-dad de la gestión de este Ayuntamiento.

Sa ha repartido profusamente una hoja que contiene la opinión de la prensa, toda contra-ría al alcalde y á la maj'oría del Municipio^— Martell. •

( D E IÍA AGENCIA FABBA)

t i S In-sisigrración «s»l®s ffistaies U n t a o s W A S H I N G T O N 30.—La comisióii del Senado

que entiende eB._ el .<íSunto de eiuigraciones ha acordado prohibir ¿atas por espacio de un año so pretexto Ae la epidemia colérica.

SeTíís las « a ®rí f t í i t« P A B Í S 30.—LOS dsspaoliea do Svtmanía dicen

que están c®,yendo gr&ndés nevadas en la Molda­via hasta el punto de que an _mucbo_3 distritos ha sido prftfíiso suapaader la circulaoióa ds Ca-.rruajes y muplear los trineos.

S«ifiwSwr r®5í«i^S»#® liOMA 30.—El Senado,no ha reooH»oiái9 ift ap­

titud del ííueTo «enador ísv. 25uo(»aps, a*abrad# por la coroma; " »

: ífe • í*. wm í«.iffl©ra qtí», aeufsíi m^io^Ti-^ • hecho.

di;is misario D. Mariano Tejero y qae loa aateriores.

I»as.5vas €le Fll.lgiMi9.s( E n la caja del ministerio de Ultramar, todos

lo« días laborabfo.s, desdo el 2 al 12 del corriente y de una á cuatro de la tarde, se pagará la men­sualidad de Noviembre próximo pasado, _á las clases pasivas de las lalas Filipinas qua tienen coiieediáo el derecho apercibir sus habere;} en aquella; lialiiéüdoae vexiíioadoel giro con el que-bil-jifco ds Í3.['3o por 100.

SEGGÍQN DE NQTÍGÍAS Reuniones y sociedades: Esta noche celebrará la sección de derechf

político de la re>al Academia de Jurisprudencia au primara sesión, leyeiido una Memoria sobre . «El Jurado» el Sr. Villar y Peralta. .

—A las ocho y inedia de la noche celebrará • boy .junta general la Sociedad de obreros foirta,». ñeros, gasistas y broncistas en ía calle dé Jardi- • nes, fiíto. 20, segundo.

—«El agua como elemento de vida y de oivi» liz-ición» feíó el temra srabre nus discurrió anoche • en el Oentiro Instructivo del Obrero el distingui­do doctor D. Amallo Jimeno. La conferencia fué notable por su erudición y amenidad y el públi­co la escuchó con visible complacencia y aplau-, dio con cajor al ConíSTeúcia,nté.

—.Sabiendo llegado á Madrid Mr. iQ^orges Spiel, encargado de formar el catálogo ilustrado de la Exposición universal de Chicago, el Círcu­lo de Bellas Artes invita á sus compañeros, sean • ó no socios, residan ó no en Madrid, á que inme^. diatamente háganla inaciipoión de sus obras des-, tinadas á la referida Exposición, figuren ó no ee

. la actual de Madrid, así como á que mandón au­torización escrita para fotografiar las obras que deseen hacer figurar en el referido catáloM,

La secretaría d e i referido Circulo, Libertad, M, se pone á dispíosición de los artistas y á ella han de dirigirse los que deseen saber cnanto se-relaciona con la siíócióa de Bellas Artes en la Exposición aeOhicaffOi. . .

—La cátedra del Ateneo estaba anoche ocu­pada por u n publicó numérelo.

Después que el digno catedrático excedente de la Central, Sr. PleriiaS y Hurtado, expuse' como presidente dé la sección de Ciencias Mora los y Políticas el programa del nuevo curso, leyó-el Sr. Puyo!, secretario primero, su Memoria, acerca ds «La vida política en España», trabajo, en que con pluma experta traza un cuadro elo-. cuente de nuestras costumbres pilíticas.

La concurrencia asintió en numerosas veces á las afirmaciones del Sr. Piiyol, premiándole aí concluir leí lectura con espontanea salva de aplaus'ós,

En la consulta pública de enfermedades de I0.3 ojos de las Oasas do Socorro de J3«enavista y la Jjatina á cargo del médico oculista doctor Peña, se han prae%icado mil treinta- y dos curap, se han hecho cuarenta y ocho operaciones y gra-diíado la vista para el Uso de'gaf'M á iniorpos, présbibs-is y operados de catarata á veintidós per­sonas en el mes próximo pasado.

Se ha pedido al presidente del Tribunal Su­premo autoriaaoióa para copiar y publicar lo ac­tuado en loa juicios^ de faltes promovidos en el juzgado del Hospicio.

Entre otros detalles parece _ que se trata de conocer por qué dura un juicio de faltas Once meses sin llegar á la sentencia.

Los miaistroa del Perú y de CostaRic-a estu-%deron ayer en Palacio con el fin de invitar 4 líi reina é infanta Isabel á la recepción que da.í'áB eata noche los representantes do América en el Palacio de la-s Exposiciones .Históficaa.

La reina mc-jtró su pesar por no poder a,ais* tir á la fiesta.

Llevará su representación la infanta I.tabeL Ayer se hicieron los preparativos necesarios

.en los salones. Cerno la recepción es de etiquat», las señoras irán desootadas y los caballeros d& uniforme ó de frac. •

A la persona que nos eavió 25 pesetas para-socorrer á una familia que carezca de recu.rso3 por enfermedad, ó_falta de,tra,_bajo, podemos de­cir que con dicha limosna ha sido socorrida doña li . L., viuda con cuatro hijas que se haiiaa en íi ma5^or necesidad, y vive en San Vicente Alta, 38i

Encuéntrase en Madiid- para-estudiar los có* dices hebtbos que hay en la Exposición d6_ arte retrospectivo, el emiuent» historiador y biisliót grafo de los Judíos españoles, doctor Kayserliug, que ha hecho el viaje coa tal objeto desde Buda-Pesth. _ _ _ _ _ _ _ _

El vapor-correo Lafayette, procedente de Ve-racruz, Habana y Coruña, iia llegado á Santan­der ayer á las ocho d'e ia mañana.

La sesión que celebró ayer la Diputación pro­vincial fuá poco interesante.

Aprobados varios diotámanes de las comisio-nea do Beneficencia y personal, 110 sin_ largo tiro­teo de frasos entre varios señores diputados, y aceptada una proposición del Sr. Yáñaz, relati-ya á la nece-siiiad de nombrar varios agentes de co­misionados de apremio mediante dctOTmiaadaa condiciones, acabó la saaión sin otros iaoideateá que lamentar.

en Sevilla

kí fmi. i i«-i8iia ))

mmm .ÜILE ILIUTBIO Kl g r a n d e éxi to conseguido con el nú-

laero i lus t rado que dedic«,mos a l Centenar io de Colón nos h a an imado á repe t i r ' aquella ten ta t iva , uni&ndo á a r t í cu los y poesías de los más notab les l i t e ra tos dibujos or igina­les de p in tores célebres.

S iguiendo el ejemplo de los mejores p e ­riódicos de I n g l a t e r r a y F r a n c i a vamos á dedicar á la fiesta famil iar de Hoche -Buena un' núm«ro i lus t rado , o en p a p e l de

lujo, oen fo tog rabados de la m a y o r par feo-

eióa.

Se encuantra snferuio, do á Cortea Sr. Cano y CÜÍ

el diputa-co.

g^rá do DOBiiB TAMAÑO del aue publioamoa

El nuevo templo protostaata que debía inau­gurarse hoy en la callo de la Beíieficencia, y en el qiie debía pronunciar su discurso el famoso P . Jacinto, tendrá que esparar para ser abierto.

Parece que las autoridades han negado él pormiso para la inauguración, fandándose en qua el edificio no ha sido todavía examinado por los ai-quiteotos municipales.

La Gaceta de. hoy publica un real decreto da indulto y otro de Hacienda, disponiendo se pu­bliquen los escalafones de los^ empleados activos y cesantes dependientes de dicho miniaterio.

El Ayuntamiento no pudo celebrar sesión ayer por falta de número da concejales.

Hemos ©ido asegurar que sea cambio^ da opi-niÓB, ó quehaya haoid..o mala interpretación en e>! asunto, es el caso qua el decreto para la adquisi­ción de armamento y cartuchería .no contendrá cláusula ninguaa qua cree derechos exclusivos á favor de ninguna casa constructora.

Mucho celebraríamos que esta noticia resulta­se cierta, y que la industria española pueda en­t rar en el concurso si se encuentra con aliento^ y medios para ello,

JLa í©.a»i3orat4ii.'a do a y e r Máxima'...... • l l íni ína. . 0,G _

Según los partes recibidos de las capitales ayer no llovió en ninguna d© ellas.

IiQs suGSBOs ft® aysie En la calle del Ángel, número 19, guardil l^

trató de suicidarse una joven de veintidós mm ílamada Pía üceiay, tomando una disolución # l ü é f o i - b a . - ;- ' - - • ' • • •• ;• , .. •',

Desj ué* d« reoibir los auxilios d« la oiefiOlA

Page 3: el imparcial

ñU TKm M i 1iMPAE3gIAL Nám^ 9«4?S m& In Cas» (Is Soeorro, p««¿ eor grskvd estado al H©*pital- l ' i avineial,

Bíoe«*©(VUo JA jovoM baWa «atado Laata ayer dd sma «*e llaves en la casa número 6 de la calle d»I>oa raclro,,y que el caballero á qjMca. servía paaaJí'eatólasa propósito d» cerrar el cuarto y teasladaras á la Coruña.

Sin embargo, al inteiTogarla el juez de guar­nía ST, P iaee de León, declaró que el vera© con­trariada en sus amores la había impulsado i atentar centra su vida.

—A Im cinco d« la t^rde 8» cometió en la ca­li» del Glátel, num. 4, guardilla un robo, e«nsis-ísnte.en 10 pesetas, siefce sortita» de oro con,bri-llante%s3ia pares d© peadieafces de oro con to­pacios y diamantes, ciloierfcosd© plata y ropas.

Líos ladronea aprovecharoai la ausencia de los inquilinois- paira fracturar la puerta y llevarse-lo ^ue déjame» (atado.

—AíteA 6»eJ8 de la tarde hubo un incendio 'de Wróasa itapartancia en la calle del Acuerdo, nú­mero 24, cusi«rto bajo.

—A las siete de la tarde un niño de cuatro afios llamado José Fernández, 4 quien, sus padres tetbían,dejado sdo en la calle del Gimo, núm." 2, p s o cn'arto, sé acercó á una vela (jue estaba en­cendida, y prendiendo en sus vestidos, éstos ar­dieron rápidamente, ocasionándole graves que-laadürafi; ;

LA P i ü T I M OEL Hiü

Podríamos ea concreto dar cuenta del resul-t |(dodé lossiiCMospolítieos de ayer con soloíe-¿íoduoir el primer párrafo que, con el «úsmo ti­tuló que hoy, dábamos en esta misma sección.

Todo solía realizado segán anunciamos: Vi-Bayerde, Dato, Santoyo, el marqués de Cubas, lof, elementos (jwe en el ga^ierno representaban g». fiwalájtSfñte r4 t«idencia 3ó la moralidad admi-fiistraM'^'y-'tM oiimpHfflia^je.de la le t ,han di-ñutido, y con ellos otros que, como los dras . Oáf-éeaaíf y Arrázola, entienden qlle de este lado, eS decir del lado de los que es vas , está la raaóa y la justicia.

•i Terminábamos el párrafo de ayer diciendo: «nañaftaá estas horas níTestarán en sus respeo^-^jyós'puestos los Sres. Villaverde, Dato, Santoyo yjaarq-uásdéCubas;» y 6£6ctiVíi.mente, & estas ñoras todos han salido, pero por la puerta gran-# t á tambar batiente, como s«lea loB^^e cum-P é a coa'str deber. '-.=

Veamos cómo han sucedido las cosas. C0£tf«3^8iicias pfolimiii&x'és

El Sr. Cánovas del Oastillo, que y» desde an­teayer sabía que el Sr. Villaverde estaba resuel­to 4 dimitir, había celebrado durante la mañana de ayer-varias conferencias, preparatorias, como después veremos, de la so^lución que á la crisis se había de dar en el Constipo.

L» principal de estas ctinferencias fué 1* cele­brada con S. M. la reina, á la cüal expuse la si­tuación tal como en a(j[uel momento se encontra­ba, dando cuenta además de las gestiones hechas durante el día para resolver la crisis, y anuncián­dola sin duda el nombre del candidato.

Antes ^ celebrarse el Consejo llamó la atea-dón que entrara en la presidencia el Sr. Havarro Eeter ter , citado por el Sr. Cánovas.

PeiTb esta conferencia nada tuvo que ver con lá crisis.,

El 'Sr. Cánovas llamó alSr . Navarro Eéverter l)ára consultar algunos detalles sobre el eiñprés-tito en.proyecto y la modiácación de 1» ley de t s -sorerigs.

S o faltaba quien creyera que el- namamiento del&r. ífavaiTo Reverter estaba relacionado con lá alcaldía de Mftdf id.

.También eí general Martínez Campos confe-FiMíció en el ministerio de Estado con el duque de Tetüán, sin duda para comunicarle íustrüc-eiíMig.a.pserca de la actitud que debía observar en el Cí^íisejo!, puea al Consejo marchó directamente el señor ministro de Estado.

A la» tvm y Inedia llegó el presidente del Consejó á S4 despachó ofíciaí, y poCo después fueron Ifegando los demás ministro», excepción hecha d«l de Üitramaír gue había escrito al se-ior Cánovas dioiéndole que le era imposible asis­tir poy ee»tin«ar fuertemrente acatarrado, pero que aceptaba por buena la reseltición que adop­tara el Gobierno.

Al entarar los ministros en Consejo, se mani-fertaron muy reservados acerca d é l a cuestión muniioi^al,. limitándose á dar noticia» de asuntos insignificantes de sus respectivos departamentos ünicameateel Sf, Villaverdemanifestó que lle­vaba de nuevo la Memoria acerca del Aynnta-aietttíi ds Madrid,, acompafiada de todos los com-BPobantes, por si por É^gníca se ponían en duda ms hechos graves en la misma consignados.

En eíecté^ un» vez reunidos los ministréis, las cosas pasaron de la siguiente manera: . ElSrv Cánovas, usando la frase da costum-Bf» y coiíio'si todos no» eatuviesen ya en el secre-

—¿Quién t rae algo? ' —Yo—contesté enseguida el 8r. Villaverd*.

• —Pites hable Vd. Y el Sr. Villaverde se exiwesó en estos ó pa­

t é e l a s términos! —Kitigu.Hod« ustedes ignora la diferencia de

CMteno |ue—respecto á la api-eciación defe Me-íísorift i«e48otad» por el Sk: Dstto—existe enti-e el ^ « presndeate del Consejo y el ministro de la €fob;^rri£tcíóü.

Biitiende eí so-fior presidente aue en este SSuiitp,en V3Z da suspender enseguida al Ayun-timioHto y enviar á los tribunales lo» espedien­te» q^ue en la Memoria aptiíecen con caracteres dé grav&dad, ptoiiedsn trámites dilatorios, como « e l de enviar la Memoria a l Consejo de JEstado y formal' pti-o expeiient© ó una segimda parte fflel aotual antes de tomar una determinación eje-ctttiva, que es lo que se ha hecho en casos análo-gpg pieóedentes.

_ Y como yo entiendo que d.'tda esta discrepan­cia con ol presidente del Consejo, procede aban-áonarmi puesto, para resolver el conflicto pre­sento' mi dimisión con el caraotsr de irrevo­cable.

El Sr. Cánovas contestó: No es precisamente la diferencia de criterio entre el Sr. Villaverde y yo la que origina esta crisis; es que Vd, tiene acerca- del asunto una impresión que yo creía haber djísvanecido convenciéndole á Vd. de lo ©ontrario, paro-coma veo que no, queda desde laego aceptada la dimisión y ya he puesto los medios necesarios para sustituir á Vd.

—Contando con esto -replicó el 'Sr. Villaverde, —ti-aigo también la dimisión del subsecretario de ©obemación, Sr. Dato. ^ ^ J a presentó al presidente; pero como St ae-t(>r>illaverde había de ir á Palacio á despedir­se de la rema, convinieron en que él mismo lle-vafría á la fií-fea el decreto admitiendo la dimisión citada.

A las cinco abandonó el Consejo el Sr. Villa-Verde, dicieádo sin ningún género de reservas á

los pcríodiatas jf áipatados q«« había, en la esca­lera (le la Presidencia» que ac.ahába dü dejar su dimisión mi ízanos del pr.jsiclento^ y que su ->ali-d_a del ^obieino no aigniíícaba nínijuna disJen-cia política, sino una discrepancia Je carácter ad-mimatratívo en la forma de apreciar la resolu­ción que había de adoptarse con el Áyunlaxnien-to de Madrid.

—Yo entendía—maniíestó—qna después délos hechos graves consignados y comprobados en la Memoria de loa Sres. Dato y Bantayo, na cabía ningún procedimiento dilatorio, sino la suspen­sión inmediata, no de todos los concejales, como equivocadamente se ha dicho, sino dé aquellos contra loa cuales resultan cargos que deben mo­tivar su separación.

. E l presid-ente del Conseio—afíadió—ontiande, •por el contrario, que lo que procede es enviar el asunto al Consejo de Estado, y ante esta dispari­dad de opiniones he hecho lo único que podía y debía hacer.

Desdé el palacio de la presidencia se dirigió el Sr. Vüiaverde al_ministorio de la Gobérnacrón acompañado do varios periodistas.

En el camino fué detenido varias veces por muchas personas de su intimidad, que sospethan-, do lo qu® había ocurrido se acercaron á felicitar­le, y á todas dio el Sr. Villaverde la explicación antedicha, expresándose por cierto Con una gran corrección, y negando cuantas hipótesis se ha­cían respecto á su actitud futara._

El trayecto de la presidencia á Goberna­ción puede decirse que fué para el Sr. Villaverde un paseo triunfal por las'muestras da respeto y. consideración que recibió.

Pero donde recibió una verdadera y entusias­ta ovación fué al entrar en el ministerio.

Másde cien diputados'de la mayoría y otros muchísimos hombres políticos le recibieron con felicitaciones, cariñosos saludos y apretados abrazos.

—¡Así se cae!—decían unos. —Más vale caer que transigir con la inmora­

lidad'—decían otros. ,. - -—¿A dónde se nos lleva?—exclamaba alguno.

—Podemos resignarnos á morir, pero no á morir deshonrad 0€-poMtioaiaente. ; B l Sr. Villaverde agradeció á todos sus mani-féstíboiones de afecto y de entusiasmo, y calmó también las actitudes de los más belicosos.

T1xelti»~ai Consejo Después que" se retiró el Br.VilTáTerda, I<ÍO

ministros, ningunp „de lo?, cuales háhíá tenido una píilabra dé déféiéa psd» átt c<ínií)añéí'o dimi-sio'nario, Manifestaron entonce^ su sentimiento .de que el Sr .Vií láverdé sé hubiese aferrado á süidea de dimitir «oí* unctciMstión íafi MlciM; y en efecto, por Conducto de los periodistas minis­teriales, álos cuales llamó el or. Cánovas para darles la oráóUv snpaaós qu» el presidente del Consejo dabft aé lá isrisi» la explica-cióh si­guiente:

«El Sr. OkmtM éntíéjíde qué m Sé ptiede Suspender á 1<)B eoiicé|aíe# sin oirleSf como se oye á Cualqníer éSoríbienté d* &. 0O reales, á quien se forma expediente; y tenienác además en cttenta que si bien hasta aquí sé lia-seguido el procediifiieirta contrariono debe íipiic4p86le al Ay'üfltamietetC d » k capitel dé Iís|)aH% ;p#(opuS(), jr así lo acordó el CfenaejC, q«é s* nombre tm de­legado, que será probablemente el futuro subse­cretario dé Qt>be*i).áoióa, para que abra un expe­dienta adminisfratfvíi'en el cuál sea:noidoslo® descargOfit de lo» concejales qdntr» los ctiales re­salten inCulpíteiOíi.*», y qttS d-esnJuóüf áé llenar es­te reíjxíisito 6n HH Jplazc» suífcáíiSimd dé tres días, se remita el expediente al Óofisiefjo de Bsfcado pa­ra que proponga lo que proceda en el térínino de oiroá tires.»

El nuevo ministro Y en esto nim hallábataoi^ eaaado pc^ el nsia-

m& coiídncto anterior nos comunicafoii que el nuevo ministro de la Gobernación ara el Sr. Dan-vila.

Lo q ue había pasado «rA lo siguiente: El Sr. €M»ova9, con esos alardes de autoridad

que le distingwen ©H OCSSÍOTISS, dijo á loa minis-tr09f

—Señ&íegí yo ya tengo ministro do la Gober­nación, el Sr, Danvilai, al cual he contultado es­ta manan» y he cfbteaidosa aceptación. Ya ee lo coüiUBiquó también á S. í í . larema, y ahora se lo anuncio á ustedsiS pcn.' ai tienen alguna obsíerva-Ción qu© haceiv

—Ninguna—repitieron casi & coro los minis­tros.

—Pttea entonce»—añadió el Sr. Cánovas,—voy á avisarle que vaya á Palacio á j'iirar y á preve­nir también á S. M. la r©iaaé .

Y asi se hizo, ***

Antes de que terminara el Conseio fué llama­do telefónicamente el señor alcalde de Madrid, quien se presentó poco después ©n la Presiden-di¿,-SÍendo recibido al punto por el Sr. Cánovas, con el que celebró una larga conferencia, en la cñal el presidente rogó ai marqués de Cubu» que continuase .al frente da la alcaldía de Ma­drid.

E l señor paarquós de Cubas salió muy serio de la Preaidtócia, y cuando lo preguntaron si era alcalde contesto enseñando el bastón; pera na­da más.

A Falaoio Foco después d© salir de la Presidencia el se­

ñor marqués de Cuba» salió del Cons to el señor Cánovas, d© uniforme, dirigiéndose á Palacio; donde ya se eacentrate» el Sr. Danvito,

Anunciados á 8. M., entraron en la real cáma­ra, y el Si". Danvila prestó el oportuno jura­mento como ministro de la córoíta.

Después firmó la reina los decretos admitien­do la dimisión al Sr. Fernández Villaverde y nombrando al Sr. Danvila.

Al acto del juramento no ha tenido_ para qué asistir ©1 ministro de Gracia y Justicia, porque éste sólo recibe el de los presidentes dal Con­sajo.

La regente recomendó, como de coatunibi-e, al nuevo ministro de la Gobernación querprocurase evitar todo lo posible las cesantías, para no cau­sar disgustos y perjuicios á lo» pobres em­pleados.

También, pocof; momentos antes del Sir. Dan­vila, fué á Psuacio el Sr. Villaverde á despedirse de la reina y á llevar á la firma el decretoi admi­tiendo la dimisión a,\ Sr. Dato.

E l eXminstrodé la Gobernación habló poco con la regente, pero sí lo bastante para escuchar de sus labios frases de elogio y simpatía, <;anto para él cómo para el Sr. Dato, por la honrada gestión que habían hecho en el ministerio.

A ejercer Desde Palacio se dirigió el Sr, Danvila al mi­

nisterio de la Gobernación, para tomar posesión de su cargo.

Diúsola enseguida el Sr. Villaverde, presen­tándole los principales fanoionarioa del ministe­rio, de los cuales hizo grandes elogios.

El primer funcionario público que habló con el nuevo ministro fué el Sr. Santoyo, que lepra-sentó escrita la dimisión do s^ cargo.

Tómala el Sr. Danvila diciendo que sentía que se precipitara tanto en dimitir.

E l gobefwador da Pontevedr» Sr. Lorit*, que se hallaba en el ministario para despedirse del vSr. Villaverde, anunció titalnén BU dimisión, pero ei Hr. Villa vtsrde mismo le ro^ó que la reti­rara, pues sería dar carácter político á una crisis qwe no te tenía.

El Sr. Villaverde se despidió afectuesamenta de las personas que había cfu el ministerio, reci­biendo de todas ellas inequívocas muestras d© ^timación j afecto.

Los periodistas no escasearon al Sr. Villa-verde los elogios por las bondades que siempre lea dispensó y á las cuales quedaban mny agra­decidos.

Estos testimonios de consideración fueron contestados con otros muy expresivos del señor Villaverde para los representantes d© la prensa y la prensa toda, á la que dedicó frases muy dignas.

Trámites de la cris is Dijimos ayer que se indicaba al Sr. Sánchez

Bedoya para,sastibuir al Sr. Villaverde ©n el mi­nisterio de la CTObefnación, pero añadíamos que dudábamos de que aceptstra, puea conociendo su carAoter, era de esperar que no pasas© por doáde el Sr. Villaverde no había creído j-usto paaar.

Así ha sucedido ©íécbivament«. ;^ ,E1 Sr. Cánovas le oíreoió la cartera, paro al señor Bedoya maniíoístó que, á pesar de los de­seos que da servir á su partido tenía, no creía oportuno aceptar tal puesto, dado el motivo por el cual lo d(^jaba el Sr. Villaverde.

. Pensóse entonces en llevar al Sr. Sánchez Be­doya á Eo mentó, haciendo que pasase á Gober­nación ©1 Sr. Linares Rivas; pero los conserva­dores de aholengo s© opusieron, diciendo que se­ria un contrasentido el hecho de llevar a l minis­terio que más diíectanient© representa la políti­ca á un ministro que es el último ingresado en el partido conservador.

Estas consideraciones le hicieron desistir de sus propósitos al Sr. Cánovas, el cual se acordó ©ntortoes del Sr. Daüvila, y teniendo confianza en que éste, por amistad personal, no rehusaría el oírecimiento, le hizo ministro de la Gobernajcióü.

En casa del Sr. ViHatrerde No se limitaron los amigos del exminiátto de

la Gobernación á darle las pruebas de afecto qu« antes hemos mencionado.

Anoche, y sin citación d© ninguna esíWcíe, se ílirigieron á e a s a á d Sr. Villaverde muchísimo» <iJntttados de la mayoría á felicitarle por sú áoto.

SegTu>w)fltite pasarían do a«ti*!iWSoB diputa­dos aludidos,-reooiáfttirlo entre otro» éiJlíDsr si­guientes sefioíf-es: • , . - , '

Dato, Maguiro, Liniers, Apáfioió, Borfáno, LandéchO, Alqtiibla, Béína>, ÍSálláálí, ' Rasacós, Cortezo. San Román, Cor zana, San Simón, Por-tago, Jrigtieroa (marqués de), Santa Cruz (don íráriciscoj. Botella, Toreno, Hernáüdez, (D, A.), Teodoro González!, Cábestainy, Gil y Gil, Nido, É.nÍ2 del Árbol, Luanco, Lema, Allende Salazar, Guillelmi, Arrázola, Villaverde (D. E.).

Eepetinios que no recordamos más y qtte ten-di-íamos mucho guato en comunicar al público los nombres de todos los qtte concnf rieron á casa del exministro.

£1 alcalde Vanas hnn sido todas las súplicas hechas Al

s©flor marqaés ú© Cubas para que continúe «n la alcaldía d© Madrid,

Guando el Sr. Cánovas s© lo proimso en la Presidencia, le contestó qn» «él no es nombr» & quiea se le proponen esas cosas.»

Después, al salir del despacho del Sr. ViUa-verdé, cuando sé despidió de él, alguno» 1« di­jeron:

—^¿Sig^« Vái «n la alcaldía?—y él coBtftsté: —No 8» por qué han á» creer Vd*. qae yo no

Bsy un homor© serio. Y es verdad, lo es. Le prometieron dar todos los medios d« ad­

ministrar como e» debido; no s» los dan, y se va. De resgreso 4 las cuatro y cuarto en ©I Aynü-

i-aMiiento, el marqués i© Cubas procedió, como úl­timo día de m.©3, á las ©iteraciones de arqueo.

Preguntándole por su dimisión, so ha limita­do á decir: «Velemos si este e» el último aí-queo.»

Los concejales, entre tanto, en los dif«r©nt68 salones do la casaj departían amigables y son-rieatea con los periodistas que tienen coatumbr© de asistir al Ayuntamiento, en la creencia dd que no les alcanzará ninguna dísposieiÓB, guberna--tiva.

Duíante la noche, el señor marqaés de- Guhas conferenció con el Sr. Dato, á quien felicitó por sü salida, vio al gobernador y á fftras varias per­sonas, y por último, el mismo general Martínez Campos le visitó en el Ayuntamiento, rogándola que no dimitiese, pero nada alcanzó.

A las doce de 1» noche llevó su dimisión al Sr. Danvila, con carácter de irrevocable.

E l Sr. Danvila no quiso recibirla, rogándo­le se la Helase al Sr. Cánovas, lo cual hará hoy el soñor marqués do Cubas, á las ocho de lá ma­ñana.

Tan pronto como anoche ea el Círculo Mer­cantil se tuvo noticia d© la dimisión del señor ViUaverd© y la posibilidad de presentarla tam­bién el señor marqués de Cubas, se acercnroií gran número de socios a l a presidencia de dicho Círculo solicitando que inmeJiatamonteuna co­misión del expresado centro pasara á visitar al señor alcalde con objeto do conocer su resolución y reiterarle el apoyo-de a s clases mercantiles, que con tanto gusto habían visto 1» c a m p : ^ moralizadora por él emprendida.

Seguidamente se nombró la comisión, la cual se personó en casa del señor mai-qués, habiendo tenido el sentimiento de no hallarle.

También se hablaba de una manifestación d© la industria y el comercio, en honor del señor marqués de Cubas, y como censura al gobierno.

Otras dlmisiojaes

uM*«w«fftión iprfitíea, i« ^arataei «u «4 í'^riameilr t» y wfflteit-tFan éí y los que con él appwá&n Ik cuestióíi de) mismo modo á ítevmt da la stJneión propuesta por ei Sr. ViUaverd®.

TSL Sr. Sasra^sta El jefe dal.partido liberal aprecia esta criáis

como una d© las más graves por que pueda pasar un partido.

Dice qu© d© las varias solaciones qna hubiera podido tener, el Sr. Ciinovas ha escogido la paor. Añade qu© d© ©Ha resulta que el Sr. Cánovae,-que ya había pei-dido la autoiúdad política, se ha dejado arrebatar ahora la bandera de la morali­dad, y, por último, que con su conducta compro-mat© la paz, la» instituciones y la nación.

liOS romerlstas Se mostraban en público muy satisfechos da

la victoria obtenida, pero en la liitimidád confe­saban que en efecto esta victoria, como la d© Pi­rro, puede serlos fatal.

El Sr. Romero Robledo pasó el día en k cama. , •

Hoy s© levantará y mañana saldrá de su ca­sa, pero ni en el Parlamento ni en parte alguna, se propone sostener más batallas.

* _ E l domingo por la tarda se verificará en al

Círculo liberal una reunión, con objeto d© pro­veer algunos cargos'de la jnnta directiva.

A esta reunión asistirá el Sr. Sagas ta con ob­jeto de saludar á sus amigos.

No hará discurso alguno hasta ©1 lunes, que sa celebrará la reunión de las minorías.

*** El jefa del partido liberal, Sr. Sagasta, recibió

ayer una carta del jefe superior de Palacio señor duque d« Medina-Sidoma, manifestándole en nombre de la reina que la augusta señora había sentido mucho no recibirla ayer mismo, á causa de haber tenido que asistir á la consagración del nuevo obispo de Sión, y que tendrá especial gus­to en recibirla hoy después del Consejo da mi-nistroa.

El señor duque participa, por su parta, al se­ñor Sagasta que la hora más a propósito para su recepción por la reina aera dar cuatro-á, cinco da la tarda.

*** El nuevo ministro d« «i Gi-otoi-iie. .Wi« »-«)v ibii

anoche á última hora & los periodistas, á cuya clase, dijo, ha tosido la honra de pateneeer. _ ¡

ytaniíoatA sus propósitos da hacer-cttmplír la ley, explicó, como ya lo había heobo rf-ST, CSEáo-vaa, el;-pro«adÍ!aK«at»4|tt0 «e^tta d« SBSAÍV an ú espediente manicipal, repülaado qne Tos conce­jales pueden ir en al término d© tras días al mi­nisterio, á contestar los cargos qna les haga en la Memoria, y que en otros tres días rasslyará el Consejo de Erstado.

Terminó diciendo qtie ao habí» »ecretos m aquel ministerio, pTias todo ee b a r í c6n la mayor claridad*

Asiseok

m marqiié» Aé k Babsñiti, contiticúa méjc^tA" do, sin que hayadasaparecido tódüviala grave­dad de su astado.

A¡féí hasta quito stfatdrse & comer cob s« íft-niilia.

Por la tarda, haciéndole coonpañfa él general Martínez Campos, instóle ést« d que tomara una taza de café, cuyo uso lé recoisiaattaB los mé­dicos.

—Más me cuesta jpasar asta brabaj* qu» tomar tin reducto—dyo el marqtiés, y apuró un sorbo,

—Vamosi adelamÉa-exclamó ft» interlocutor. Y tras otro sorbo, separó la taüa «1 géüérú

Concha, diciendo: —Capitulo.

rwi'i'i r'iirii> m ' I'II'I'M'.PIU iivi i'; i j.iiiw

SECCIOM DE ESPECTÁGÜISS

Oon motivo dtf haber siAo dacktirada ta ^ 1 % ) t tacnIaAa.€!oxi ( !epeion patrosa senapftJAlf arma de Infantería, la Sociedad de Artistas É^6^ ñoles ofrece á los individuos de dicha aAua y á la vez á los señores suscritores ae este periódico, una copia de la celebro pintura de Murilío, ©XÍSÍ tente hoy en ©1 Louvre de París, rapresáftiiandé la F « r i » l m a C o n c e v c i o n , bajo las espeoia,* les cond£oion9.>( qu© se detallan en ©1 anuncio (|u« se publica ©n la 4.* página da ©ste número.

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ALZA

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Cambios sobre el eiebranjero

También el Sr. Cárdenas, gobernador civil da Madrid, ha dimitido su cargo.

No estaba tan obligado ni tan comprometido á hacerlo como los demás dimitonftes, pero dado el aspecto de la cuestión, y vista la irrevocable resolución del alcalde, después de una larga con­ferencia celebrada con óst-e, presentó su dimisión con el carácter de irrevocable.

Así mismo ha dimitidoel Sr, Arrázola, direc­tor general de Comunicaciones, si bien dicho se­ñor seguirá desempeñando su cargo, é interina­mente la subsecretaría de (lobernación, hasta qiie el nuevo subsecretario, Sr. Oíüna,regresad© Bruselas, donde se halla en la conforonoia mone­taria,

M Sr. Silvdla Dado lo grave de la cri^iis—al parecer resuel­

ta ayer,— creimo^ oportuno conocer el pensa­miento y la actitud del Sr. Silvela, el cual nos hizo el honor de maniícsi-.arnofiíjuo aprobaba por completo la conducta del Sr. Villaverde; que es­taba á su lado en absoluto; que entendía que en la Memoria había cosas muy graves, que debían ser estudiadas por los tribunales, ^ que no comprendía cómo ahora so seguía distinto procodimieato qno oí sí^gnido por el par­tido conservador en otra oci^sióc en uu caso aaá-iogo. _ _ • _

Por líltimo, manifesi-O que, como esta no es

La ©mpr©sa del Español se ha visto precisada ásuspeuder las raprosentaciones del drama trá­gico Nerón por la indisposición do la primera ac­triz señora Centrara», la cual, usa vez restable­cida da la misma, volvOrá á/ encargarse d©l papel de la expresada obra.

La dirección artística, deseosa d© dar alguna variedad al espectáculo, ha dispuesto para esta noche poner en escena la bonita comedia en tros actos de D. Enrique Gaspar titulada La levita y para final la pieza JJCÍS tres rosas.

En el teatro de la Comedia sa varifieará el lu­nes el estreno de la obra do B t J o s é E c h a ^ í a y tituínda Mariana.

La demanda de localidades es extraordinaria Anoche obtuvo «B éxito «n el teatro Circo de

Parish el primer barítono íSr. Bueso en La gm-rra santa.

La interpretación fué buena por todos los ar­tistas, y en especial porlaaseñoras Naya y Espí, y los £w68. Llorat, Talaver» y Barrenas.

La obra ha sido bien presentada, y esta ñocha se dará de ©lía la seguníarepresentación.

L a empresa del Príncipe Alfonso dará la pri­mara representacióií de ía reprisso del dra^aa d© gran espectáculo Paif^i/a ©1 próximo sá­bado.

En esta obra tomará parte un. numeroso cuerpo da baila y más d© doscientos coíaparsís, y será puesta en ©seena coa todo ©1 Ityo y apara­to qno la misma exige.

Mañana sa verificará en ©} teatro da la Zar­zuela una gran fonoión extraordinaria y fuera d© abono á beneficio de los autores del apropósito Fraternidad.

Se pondrán ©n escena las piezas ©n un acto El loco de la guardilla, Ün pleito y Fraternidad. En asta cantará.la jota el Sr. Bargas.

La banda militar mexicana hará su despedida del público madrileño en esta función.

Hoy se celebrará on este teatro ©1 debut del celebra ilusionisiía Sig, Anastasi, acabando sus trabajos con la cámara oscura.

Esta noche sa pondrá en escena la preciosa zarzuela El relámpago.

En el teatro] Martín se estrenará el sábado próxima una extravagancia cómica titulada La vieja. cJiocIía.

J a i Alai .—El partido jugado ayer tarde en este frontón entre Beloqui y Tanclilero contra Irún y Chiquito de Abandó resulté escaso da emociones y de poco interés, á pasar da la combi­nación de estos cuatros simpáticos jugadores.

El momio so dio por los encarnados (Trun y Chiquito), y cuando estos se apuntaban el tanto 50, JOS azules sólo llegaron á 21.

El público pidió se jugase otro, y la empresa, siempre deferente, organizó un partido á 20 tan­tos entre los pelotaris Jjuia Araquistain y Ana-eleto Salazar contra Machín y Cosme Echeverría, que ganaron estos últimos por dos tantos.

Esta tardo, á las dos y tres cuartos, se verifi­cará un gran partido, á 50 tantos, entra los aplau­didos jugadores Saturnino Echeverría (Macha-cho) y Gabriel Pedi-ós, colorados, contra Joaquia Arbelaiz (Zurdo do Homaiii), Cosme Echeverría y Anacleto Salazar, azules, á sacar d« los siete cuadros.

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B o l s a d « I ' a r í s .—Día 30.— TeltgranW de la Ageñeia Fabra.—FonáoB franceses: tíes^fior ciento, 99y3&—Cuatro y modio por ciento, 10o,15 —Gc(ftEfoli<fe.dos inglesesj 97 Sptí, _ ,

Fondos'espaüoles: cuatro por ciento estartor, 63/)0.—Obligaciones do Cuba, 461,50. _

Üítím-a hora: cuatro por ciento exterior espa^ ñcl, 63 3l32. ^ , „„ „ ,

Siol-sa d o HiO-at-i'»».—Día 30.— lemm-m delaAijenda F^Í-V/X.—(Jlausm-a de la .Bolsa»* hoy: cuatro por ciento e.^terior español, b3J ¡ l .

B o l s a d a fiíu«a»s A.tí*o3.—Día •¿O.—Tcii-grama de la Agenci» Fabvíi.—Ptaoio del oro en el día d© ayer, 279 ll'J.

SEGCiON BELIGtOSA SIXTOS OEI. DÍI . — Santa Natalia, viada de Snu

AtWta, mártir; y el beato íldniundr» Oampión y com­pañeros liiártires.

CULTOS.—So gana,ol jubileo do Ciiaranta Horas ou la Dueña Dieh», y baljr*. nli*a inaycSr A laa cliox j ; ino-dia, ypor la tara» et novenario de Santa Bípiana, predicando el Sr. Belda.

fiaiTABd r.A, 0»<tt» 08 MiSfi.—•STnestra Seftura a-, la Almndona en su parrofijiivi ó dol Consiolo o» Saif IjUJg.

ESPEGTÁCÜLOTPABA HOY. T.EA.1'E0 RKA.L.—A las ocho.—Pniscién 98 ( i

abono.—Turno i."—-(.rli UgímoUi. ESPAÑOL—A la» oclio y modia.—Tum i6n 50 do

abono.—Turwu par.—íSTovón.—Las tros rosas. OOMEDIA.—Ala» ooUoy media.—;3.* sorie.—sTur-

no 2.°—El hoiubro de mundo. ZAKZaEI^A.—A las ocho y nr.adia.—Kl raliünp.i-

go.—Intermedios por el oeUbio ilusión«í-.», soüui-

LÁ.&A.— X Iw ooho y rao lia.—8." s*ria. — Tuv-00 1." pav.—Jil cascabel al gato.—AudicicSn dol ío-nógrafo.—Su excelencia.—Los hugonote»,—Autticióji del fon6graíb.—(Ssgundoaoto do Los hugtmabíB.)

APOtiO.—A las ooho y Tvtodw^-JJOS aparosido.?.— Laa campanadas.—La m.%c-,oarií!i..—IJ,T. c¡<»a-iiia..

ESLAVA.—A las ooho y modiá.—¡IVoros fofasta-ros!—Kl affioaiio.—líl gran capitin.—L-i concsrracVi.

ÍBATEO-OIRCÜ Di!i PA aiSU.—A las oclso y tvu • cuartos,—La guorra aimU.

MAUTIN.-Alasochoy ni&lia.—L'ihij.idií su yni--no.—¡El loco!-La aluic.iicila del 3."—ÍSegnndo HO! ' de la misma.)—Bailo al final ilo ovia ayto.

KOMBA.—A las ocUo y inedia.-lias dofje y msíl: • y serano.—-Los alojado'.—La."? P9.nipn.n3das.—D? Mr. • di'id á París.—Baile al ñnaida cada coto po? las lio; manas Moreno. . , „ . , , "

'JKATRO 1>B FANTOCtlKS ((.ilorLOtA d-í RUbaoV —Punciones todos los días doada l.i-i tr-js.ie la tarJ > hasta las once de la nocho.

¡iJosedeuiietveiilos orifiinule» q^naas not remitan.

MADIirD.-1892 Imp. da «EL líí?AR3IAL» á cargo dj Angal tsarei»

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Page 4: el imparcial

' ' • M '-' II ' . . '. ' ÍJ'^«m

Séifiív iilTS

BÚL6TIN DEL MSTílTO AWT Enfermedades del pecho

Bronquitis, catarros crónieoa, tuberculosis y tisis pulinonaK son estas un grupo de enferme-¿ades que trata el Instituto áe\ Dr. Audetcon una «ompetencia sin "emplo en loa anales de la for­tuna y el acierto profesional.

Tales tratamientos, que han dilatado extensa-inente los dominios de la fama del ilustre inven­tor de las Pildoras Antisépticas, han adquirido y a carta de-naturaleza, y se han impuesto por BU bondad indudable, después de un rudísimo periodo de pruebay de controversia, en el que han quedado bien aquilatados sus méritos. Los trata­mientos del Jnstütito Médico-Celular y Antüépti-co de Madrid en las enfermedades del pecho, son racionales y comprobadas al par por la experien­cia de muchos años en millares UQ enfermos; uo tienen, pues, semejanza alguna con la terapéuti­ca empírica usada de ordinario en «staa aíeccio-nes.

Así se comprende que el director del referido Instituto, el sabio Dr. Audet, hajra sido objeto de tan numerosas y valiosas distinciones por parte de los centros científicos del extranjero, que no descuidan, como suele decirse de ordinario, el ínovimieuto científico de nuestra patria.

El Insiituto Médico del Dr. ^««/«í cuenta^ con Bn numeroso y bien elegido personal científico, que ha llegado á dominar todas las especialida­des, imprimiéndolas un vigoroso empuje, sin per-doifapor eso el importantísimo y esencial criterio do la unidad orgánica, de la que tan fácilmente «uelen olvidarse los especialistas. Esto se cqm-

grende, porque en dicho Instii:uto todos trabajan ajo una sola dirección, que tiene siempre pre­

sentes las grandes síntesis que jamás deben ol-TÍdarse; esa dirección es la que realiza la unifica­ción de los trabajos individuales y les dá su ver­dadero valor.

De este modo hase llegado i una verdadera Yevohutión en el tratamiento de las enfermedades y, últimameate, en las de índole nerviosa. El éxi­to di^l Avtinermoso Soward, remedio heriico con­cebido por el Dr. Audet, como resultado del es­tudio de la célula nerviosa, ha recordado aquella verdadera apoteosis que acompañó á. la atiavición ¿e las Pildoras Antisépticas.

Más tardo han venido á enriquecer la tera­péutica moderna otros preparados de acción ea-caz ó indudable, los cuales se anuncian í^cuen-temente bajo la garantía del popijl"' «i""*'""' .

Existe un grupo impor^-'^lsimo de aíeccio-nes, cuyo estuaio^->-*f^iento ha sido constan-teTnento <J«M"*' ' ^W P°^' '•^ medicina secular, co­mo 8 íuera. deprimente el tratamiento dé las eiiíccioiies de cualquier órgano de la economía; referímonos á la impotencia y enfermedades si­milares, respecto á las cuales suelen vivir en un desconocimiento casi absoluto hasta los prácti­cos eminentes, confiando la curación de ellas á manos extrañas al arte médico.

Este ha sido uno de los asuntos á que viene consagrando preferente atención el Instituto del Dr. Audet; por cierto que con aplauso general por cuanto son de dominio público curaciones verdaderamente dignas de la mayor estima por la calidad de las personas (jue han recobrado los. bienes naturales á la condición de hombre. La misión humanitaria bien acreditada del Institu­to del Dr. Audet hizo que se fijara pronto y pro­fundizase hasta el dominio esta clase de enfer­medades secretas, cuyas consecuencias no pue­den ser mas desesperantes para el individuo y para la sociedad, ya que acaírean la locuía ó el fiuicidia

El fruto de esos pacienzudosjcontinuados trabajos ha sido levantar del empirismo en que ya cía todo lo concerniente é. tales afecciones, creando un tratamiento sencillo y sistemático por etapas sucesivas, q ue vence los casos más desesperados. (El Instituto regala folletos ex­plicativos de esta doctrina.)

Las noticias, informaciones, pruebas y funda­mentos racionales de su doctrina médica han si­do objeto de perseverantes predicaciones y pro­pagandas á fin de que llegasen á oidos de todos. Hoy día son conocidos en todas las farmacias el itimosoFluidoVital, las OotasViriles, los Glóbulos Vitales ylüBPerlasdel Serrallo, causando derecho laij doctrinas y los remedios, siendo admitidas, aplaudidas, respetadas y recomendadas, preco-üizándoee unas y otros universalmente.

ISl Inatituio.del Dr. Aud3tti.sMsp.cxaaa.h8 y representantes médicos en las principales pobla­ciones de Kspafia y extranjero que sou los adep­tos de la facultad, los cuales en su inmensa ma­yoría son miembroa de la Academia Jnternmio-nal de Ciencias Médicas, en donde se define el dogma; un periódico bisemanal. El Mundo Médi-co, difunde por todas partes la bondad de la doc­trina y mantiene la polémica, de donde se dedu­ce que la gran familia audetana reconoce cual pontífice máximo de la Escuela al Dr . Audet.

En los últimos aiúmexos del órgano oficial del Instituto del Dr. Audet, hallamos dos artículos, encabezados por dos cartas, los que extractamos por las ideas que en ellos palpitan.

En el primero de dichos_ artículos se testimo­nia el resultado del tratamiento del referido 7MS-tituto en un caso de reumatismo (enfermedad tan generalizada), y en el segundo, al par que se ates­tigua una curación, se pone de relieve la grati­tud de un enfermo ante la murmuración, la des­cortesía, la envidia y la maledicencia.

Clínica del Dr. Audet

TüSTIMOHIOS Bioseco 31 de Octubre de 1892.

Señor dootor Audet. Madrid.

Muy señor.mío: Le participo coa gran satis-facción.que los dolores que me aquejan en los carribios atmosféricos han cedido macho; también observo más agilidad en mis movimientos, tanto, que confío curarme.

Quince días antes de terminar los medicamen­tos que obran en mi poder, me dirá Vd. lá canti­dad que he de enviarle para que ordene la re­misión de las nuevas prescripciones necesarias para mi completo restablecimiento.

Disponga Vd. de su agradecidísimo seguro servidor q. b. s. m.,

SALVADoa GONZÁLEZ.

La anterior epístola muestra claramente las dos fases que presenta la curación del reumatis­mo por los procedimientos del Instituto Médico Celular en loa casos de reumatismo inveterado, resistente á todas las ordinarias_ medicaciones. Tiao i<».aoocpo,Hoi¿» del cuadro sintomático, tan aflictivo pai-a el enfermo, proseguimos la medi­cación para obtener la desaparición de la llama-dii diátesis reumática, es decir, do J » «looTriada nutrición oolular.

Aceptada, como lo ©ató esta desviación nutri­tiva como patogenésica del reumatismo, es indu­dable que las explosiones de éste, los ataques ocasionados poruña infección (iaíeooión que pue­de S6r_variada, la blenorrágica inclusive), serán facilisimamente provocados si no corregimos el terreno en que esas iafecciones se desenvuelveí;, si no separamos la causa minoris resistentiae.

Esta corrección nutritiva es inmensamente superior á todas las preservaciones vulgares ó científicas contra el frío ó los cambios de tempe­ratura; estas son totalmente inocentes, y de esto modo vemos su falta de óxito_ con las explosio­nes frecuentísimas de reumatismo articular agu­do en verano (4D por 100 de los casos anuales), y los frecuentes casos en que la enfermedad se burla de todas las precauciones acumuladas y de las previsiones de muchos años.

í o r otra parte, este régimen higiénico terro­rista, en que el enfermo tiene que estar siemj)re ojo avizor contra el peligro, hace decaer rápida­mente el organismo y engendra un verdadero estado melancólico, que suele serde funestísimas consecuencias. • -

Esto es lo que évitaii las medicaciones del Institpto, medicacioíies que, cuando han sido fielmente seguidas, evitan casi siempre las reci­divas. El enfermo, después de su uso, quédase como si no hubiera recibido con la herencia el germen fatal de su afección, como si se hubiera pasado una esponja por los íargos años durante ios que fue incubándose y creciendo la predispo­sición-reumática.

De aquí nacen las incontrastables ventajas de los tratamientos exclusivos del Instituto, el éxito que han tenido en todas partes y el aplau­so con que han sido recibidos por la opinión im­parcial pública y científica.

Sr. Doctor Audet, Muy señor mío y amigo: Tomo la pluma para

manifestarle qué hace do» meses se me conclW-yeron las pildoras que "Vd. ma preacribiá, iadi-oándome que me durarían dos meses, como efec­tivamente es lo que me han durado. Además, la pomada también está concluyéndose, y como quiera que estoy mucho mejor, con este motivo, y hasta que todo se concluya, no le he escrito i usted hasta ahora, ifSira que si tengo que tomar la misma medicina, dispouga Vd. se me remita la que necesite.

Como Vd. sabe, yo donde tengo mi mayor pa­decimiento, aunque ya es cosa corta, es en las piernas; ya no me resudan nada, ni me forman osas caspillas que sabe Vd. le decía me formaban; pero ahora, desde que concluí de tomarlas pildo­ras, lia'ce unos días se me hau presentado algu­nas manchas, aunque poca-», eu varias partes del cuerpo, y por eso vengo en conocimiento de que todavía no está acabada de purificar la sangre. Yo estoy muy robusto, cómo may bien, y todo me gusta; daenno bien, tengo el vientre natural; tanta mejoría noto en mi cuerpo, que con el favor de Dios y la ijjteligencia de los hombrea, pienso muy pronto pasar á esa á darle á Vd. las gracias.

Encontrándose en ésta, ahora en la actuali­dad, unos señores de esa, que son de la casa don-da yo le dirijo á Vd. el cobro, en conversación de mi mucha mejoría, me dicen que en esa de' Ma­drid dicen sus contrarios de Vd. precisamente que el Doctor Aud:t no es nada más que un charlatán; pero yo les he hecho la contra, porque las pruebas son las que acreditan al hombre, por­que en este pueblo, en los que Vd. ha interveni­do, á todos los ha dejado buenos; tanto, que los hombres se han convencido del hecho de la ver­dad; uno de ellos, que se encuentra enfermo hace dos años, dice que enseguida va 4 pasar á que usted lo medicine.

Sin más por hoy, páselo Vd. bien con su fa­milia y mande como guste & este su amigo que le desea felicidades,

ANTONIO COFEADK.

Villanueva de San Carlos, 29 Octubre 1892.

Es conocido de todos que aquellas antiguas agrupaciones de las dermatosis, tomando como base la diátesis, de que eran consecuencia, des­aparecieron con el gran impulso que por la pri­mera época de Virchow tomaron los estudios anatomo-patológicos. Estos introdujeron un par­ticularismo anárquico, que ha sido corregido, aunque insuficientemente, por el gran desarrollo de las teorías microbianas y por lareaociónop»» '»<!<» '>'>,el sentido de la restanracióa «í» lás an­tiguas diáteBiS. Esta h» sido í« bauciera del Ins­tituto Médico-Cólálar en el concreto asunto de las dermatosis.

La medioación usual en las enfermedades de la piel, atribuiblea á ésa vaga entidad llamada herpetismo. suele reducirse á un tratamiento ar-senical ó tónico interno y otro externo, que pu­diera llamarse antiséptico, y que en la mayoría de los casos son soluciones de ácido saiicilieo, su­blimado, etc. En el tratamiento interno vese una aproximación al verdadero criterio científico de la patogenia, de las llamadas dermatosis h e p á ­ticas. Efectivamente, el tratamiento usual por los arsenicales dirígese, sin ningún género de duda, á corregir la desviación nutritiva; de no ser esta la idea fundamental del tratamiento in­terno en el herpetismo, hay que confesar que es totalmente empírico y vulgar tal tratamiento.

Ahondando más en la glnSsis de tales derma­tosis, reconociendo el parentesco de esa diátesis con el artritísmo, con el reuma, con la diabetes, con la litiasis, vese más claramente su verdade­ra naturaleza y génesis. Consisten todas estas afecciones en trastornos y desequilibrios en el contingente y calidad de los materiales de asi­milación y desasimilación, desequilibriosf que »e realizan en la unidad orgánica y vital llamada célula, por causas que no hemos de detallar aho­ra concretamente, ya que las hemos expuesto ál detalle en anteriores reflexiones y trabajos.

Habrá, pues, de ser condición indispensable en el tratamiento de las dermatosis dichas la de corregir el desnivel nutritivoj la de volver al balance celular ordinario y íisiológioo, porque sin alcanzar este resultado, sólo sintomática­mente podríamos tratarlas, es decir, no podría-moa curarlas. Esto no quiere decir que se tengan .por inútiles medicaciones que llenan una indi­cación especial en ciertos casos. Muy al contra­rio; nuestra^ brújala constante es el occasio prcs-ceps. Pero si hemos de hablar con alBiin espíritu de generalización, la única conclusión verdada-

rtmente científica á qne podemos llegar será U antes indicada, y el único guía seguro para el tratamiento racional será el apuntado. Cuando do estas conclusiones se pasó al determinismo terapéutico, el Instituto Médico-Celular, antes d e l a n z a r á la publicidad la terapéutica de las dermatosis herpéticas, comprobó experimental-meute sus resultados, que superaron á las espe­ranzas concebidas.

La medicación del Instituto no ha sido, pues, fruto exclusivo de vigilias intelectuales y de hi­pótesis más ó menos ingeniosamente concebi­das, sino que ha recibido la sanción indispensa­ble de la experiencia. Esta medicación consta do' dos partes: el tratamiento interno, constituido por modificadores de la nutrición celular, y el tratamiento local, que no es indispensable en muchos casos, pero que en otros puede llenar in­dicaciones de importancia. Hay que advercir que los enfermos nerpéticos que llegan á consul­tarnos suelen ser de diátesis inveterada, con ma­nifestaciones cutáneas múltiples y persistentes y con el organismo deteriorado por loa trata­mientos varios y contradictorios á que se han so­metido. A veces llegan ya con las lesiones visce­rales de la diátesis, con esas bronquitis crónicas desesperantes y eternas que no tienen fin. Claro «s que en estas circunstancias el tratamiento peca de largo, pero sa corrigen, aunque lenta­mente, todas las manifestaciones.»

La actividad del Instituto del Dr. Audet en este sentido es vertiginosa y continua, porque inmensa es la ciencia é ilimitado, por tanto, el camino que recorrer, aplicando siempre el Insti­tuto su criterio especial siatétíco.

Ahora entérense nuestros lectores del si­guiente indicador terapéutico, el cual ofrece toda ' clase de garantías. Autoridad de un médico es­pañol de ciencia y fama y fundador de una Es­cuela Médica; proparacióu exacta y escrupulosa, según fórmula facultativa, por la Farmacia Cen­tral (Carmen, 41, Madrid); economía en los pre-, cios; facilidad de adquisición (se manda por el correo) y BONDAD Y EFICACIA dispendiosamen­te comprobada de todos los productos, á los cua­les 89 acompañan las debidas instrucciones para su administración y uso.

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Enfermos de los nervios El A n t l ü e r T l ^ s o I S o w a r d es el más po­

deroso tónico conocido del sistema nervioso y el regulador más inofensivo de sus trastornos fun­cionales. Está indicado para curar vahidos, hipo­condría, dolores, neuralgias, jaquecas, gastralgias (dolor de estómago), insomnio, vértigos¡ mareos, desvanecimientos, dolores de cabeza, debilidad cere­bral; del oido y de la vista; asma, palpitaciones nerviosas, dolores que preceden ó acompañan á las reglas, histerismos, parálisis, flojedad, etc.—El enfermo que hace uso del A u t i n e r v i o s o H o -i ra i 'd . experimenta rápidamente tales resulta­dos que le dejan suspenso el juicio, al punto de no podar creer en loa efectos tan prontos y sor­prendentes del medicamento. Despiértase el ape­tito, si antes estaba decaído; regularízanse las di­gestiones, si antes eran difíciles y tumultuosas; al decaimiento profundo y á la falta dd energía en las determinaciones, sucódese el vigor y tal entereza do voluntad, que el individuo llega á creerse trasformado en otro.

So afirma la memoria, se robustece la inteli­gencia, el pensamiento adquiere mayor consis­tencia, vuelven las ideas con la nitidez y_ clari­dad apetecidas, y sin la niebla y confusión en que poco há veíalas envueltas; siéntese más po­tente la fuerza de las ideas y el discurrir agra­dable y fácil. A estas modificaciones úñense las de una más fácil respiración, la sensación de la tranquilidad y marcha normal del corazón, un Bueflo tranquilo, reposado y reparador, del que se sale cada día más fuarte, ájjil y activo. Pero estas profundas y rápidas rróAiñcftciqnes que in­troduce el medicamento en el organismo no pa-r a a ahí; continúan persistentes y progresivas hasta que hacen desaparecer toda huella de pa-

SiKt decimiento. nervioso. El A n t i n e r T i c s o ynrnrñ no contiena opio ni sus salee, ni brooai ros, ni calmantes. Los individuos ou,vo sisten ^ nervioso se halla en constante tensión porlai condiciones especiales do la vid»_ moderóla, la i lachas, satisfacciones sensuales, vida rebosaoi^ de placeres, preocupaciones, ansias de glotia/ de riquezas, escritores, políticos, jugadores, bo! sistaa, etc., bailarán el Seguro de su salud, dé s f tranquilidad y de su vida en el A t t t t n e r T l o i * H o w a r d . 4 pesetas caja.

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B l o n o r r a s T i a , fluí o», g r o n o r r c a , 8:<¡>t# mílUnv-antíblenorrágico Ir el. 4 pesetas fraaoflt

Impotencia El importantísimo F l M Í d o V i t a l (5 p o s *

tas), « o t a s f l r l l e s (6 pesetas), Cí^ié&Hlof V i t a l e s (25 pesetas) y las P e r l a s d e l 8 ^ | r r a l l o (40 pesetas), son los únicos remediré bien informados por la razón sana de un penl^f dor ilustré, para curar, sin riesgo y con la i n ^ yor solidez, la Impotencia, Derrames seminales r demás desarreglos genitales, por abusos ó vejea Han alcanzado en Exposiciones Internacionalef medalla, diploma é insignias de honor. Estos eíf pecíficos poseen diversos grados de energía q-á* rativa, y deben emplearse en gradación asce% dente. Son tónicos vigorosos y potentes del si^* tema nervioso, al cual devuelven la plenitud d » sus feícultades. Estos- madicainmdosoitrarán, m^ euando se hayan ensayado otros remedios sin r^ sultade positivo. ^ „ , m

S í B l l s : AntisifilUico Con:pey (pildoras y Ja­rabe Antisifilitico: cada uno 4 pesetas. í.

IDeitticióra: Denticina Saint-Maríe.'PtQ-'íQd^ la aparicición de las denticiones, pi-oporcionantó rápido bienestar á los tiernos enfermitos. 3 ]gá* setas caja. -A

IBstómagro: Estomacal Maitre. (4 pesetis) y Robín (3 pesetas). . f

O í d o : Aceite Neubert. Hace sumamente nf^ bles los tejidos del oído; desobstruye el cond | : | | to; disuelve el cerumen. No ea cáustico m corrij^ sivo; procura limpieza y desinfección. Cura loft estados catarrales y sorderas inooteradas no reV feribles á lesiones gravea. 4 pesetas frasco. .-

Hay, además, tratamientos especiales c o n t ^ la obeaidad (gordura), cáncer (sin operar), diab|» tes, afecciones del corazón, matriz, vojiga, higWí do, bilis, riñouea, parálisis, y en suma, para foi das las enfermedades oróuicas, á las que únioft* mente se dedica el Instituto deí Dr. Audet.

A n o t a r ; El Dr. Audet ha trasladado su d|jff pacho y gabinetes á la calle de Alcalá, 72 d i^ pilcado, junto al Banco de España, frente al mi*-nisterio de la Guerra.

Manera de adquirir los remedios Loa productos antes citados que recomienda,

el Instituto del Dr. Audet, so hallan de venta (>^ todas las buenas farmacias de España, yespe»-cialmente en los puntos siguientes: Madrid, but*-men, 41 ; Barcelona, Eernaado V i l , 7; Lérid^ Carmen, 26; Zaragoza, Ríos Hermanos, Coso, y-Galiáo, Jáima 1,1'9; San Sebastián^ Pl. Guipúzcoa^, 1; •J^aíema, í%rmacia San Antonio; Sevilla, Far-f-macia de la Campana; Iluelva, Andrés Míirtineaj: Cádiz, Matute Hermanosj Almería, Fernández^ Vitoria, Martínez, Pl . Vieja; Santander, Molino y Díaz; Murcia, Ruiz Seiqner, Martínez y. Parran^ Cartagena, Abad; Cáceres, Oastel; Badajoz, no* mero; Soria, Ruiz Leria; León, Mermo ó hiiot Oviedo, Oeñal y h."; Córdoba, Fuentes h."; Mala,^ ya. Canales; Granada, San Jerónimo^ 13; Gima» lieal. Saúco; (hiadcdajara, Bartolomé; VaUadohd^ por mayor, Victoria, 18 y Orates, 33; Lugo, Varet la; Burgos, Escolar, Mira y Barriooanal; B%loa<k Barandiaran y O."; Alicante, Gadea; PalenaM Fuentes; Logroño, Fernández; Pamplona, Néí grillos; Salamanca, Fuente»; TervM, Bayo; y ú^ más corresponsales del Institt^to Audet en prot vincias.

¡¡¡ALTO, VIMCÜLTOKESÜ! A c a t a de p u b l i c a r s e l a 3 . ' e d i c i ó n d e l a t a n b u s c a d a o b r a

E l T e s o r o d e l a I n d u s t r i a , c o n los ú l t i m o s a d e l a n t o s p a ­r a l a f ab r i cac ión , c u r a c i ó n y c o n s e r v a c i ó n d e los v i n o s , e l i nodo de a u m e n t a r l a p r o d u c c i ó n y las r e g l a s necesa r i a s p a -

^^ r a o b t o n e r los v i n o s m á s se lec tos . P r e c i o 7 p t s . p o r cor reo 8 T ^ F»S>r¡c!M!i<?Ji l ie v i i s ag ' r e s n a t u r a l e s y a v í i f l c l a l e s .

Cervezas , easeosas , j a r a b e s y fi-utaa o l i ampagn izadas , p r i ­m e r a e d i c i ó n , c o n g r a b a d o s . P r e c i o , 7 , p t a s . , p o r c o r r e o 8.

f a b r l c a c i i f n rá¡i>lda d e 80 c lases de inmejorg,blea a g u a r ­d i e n t e s e n f r ió y p o r d e s t i l a c i ó n , des in fecc ión da los d e « r u j o ó v i n a z a y e l a b o r a c i ó n d e t o d a c l a se de a g u a r d i e n t e s «speoia los , 2.* ed i c ión i l u s t r a d a c o n g r a b a d o s . P r e c i o , 10 p t a s . Coi'tificado á p r o v i n c i a s , 11 p taa . So r e m i t e n m a n d a n -c o s u impoi ' t e e n l i b r a n z a s ó se l los a l a u t o r D . J o s é C o r t é s y A z n a r , p r o v e e d o r do la, E e a l Casa , ca l le d e l A v e M a r i u ,

AL EJERCITO

I d u p l i c a d o , ba jo , M a d r i d .

MAJLA REAL INGLESA IJos magn í f i co s v a p o r e s - c o r r e o s d e é s t a , l a m ¿ 8 a n t i g u a

l i n e a , t i e n e n s a l i d a s d é l a P e n í n s u l a p a r a l a A m é r i o a d e l S u r ©n fechas d e t e r m i n a d a s , da V i g o , O p o r t o (Leixoes) y L i s ­b o a . Cada v a p o r l l e v a l u z e l éc t r ioa y t o d o s los a d e l a n t o s a n o d e r n o s , c o m o t a m b i é n m ó d i c o , c a m a r e r a , c o c i n e r o s y t r i a d o s e s p a ñ o l e s y p o r t u g u e s e s , o f rec iendo l a s m a y o r e s « o m o d i d a d o s á, l o s pasa j e ros . E l T Í n o g r a t i s . E x c e l e n t e s O p o r t u n i d a d e s p a r a v i a j e s de r e c r e o y p a r a s a l u d .

S a l i d a s p a r a e l B r a s i l y K i o d e l a P l a t a

?e V i g o , 3 ,17 y 81 D i c i e m b r e ; c o n s i g n a t a r i o , E . D a r á n , e O p o r t o (Le ixoes ) , 4 D i c i e m b r e y 1." E n e r o ; c o n s i g n a t a ­

r i o s , s e ñ o r e s 'W. C. T a i t y C o m p a ñ í a . D e L i s b o a , 5 ,19Dio ien ib re y 2 E n e r o ; c o n s i g n a t a r i o K n o w -

le s E a w e s y O . ' P a r a m á s d e t a l l e s , d i r i g i r s e á loa r e p r e s e n t a n t e s d e l a

Í Jompañfá e n M a d r i d , Si-es. P r e s e r y O.*, Sa l e sa s , 4 , t e l é ­f o n o 4 .1áa

HERPES f ' d e m á s e n f e r m e d a d e s d e l a p i e l . C u r a n s e e n p o c o s d i a s

i n q u e j a m á s s e r e p r o d u z c a n , p o r m e d i o de v a j w r e s m e d i o a -in6»*osos . C e n t r o Médioo E s p a ñ o l . C a b a l l e r o d e C t r a c l a , V, p r i n c i p a l .

Admlnistraeión tiúm. 6 . - 2 5 , Atocha, 25. —Madrid. E l A d m o r . D . M . P é r e z r e m i t o i m p r e s a s g r a t i s , ba se s pa -

Ía fac i l i t a r env íos . Se r e m i t e n y a p a t a 10 y á l D i c i e m b r e , á O y 5 j j ts . , a s i c o m o á 50 p e s e t a s p a r » e l e x t r a o r d i n a r i o

ífan sorteo de Navidad Bodegas y desíiferías de Duran H. "Vinos p u r o s do m e s a á d o m i c i l i o desde S p t a s . a r r o b a ,

¿. l l eassac l io C e i s t r a l , AjTanal, 3 6

Pastiüas rusas del Dr. Casíeflá R e m e d i o eUcax c o n t r a l a t o s . D e v e n t a , f a r m a c i a d e

| a j j i u d a de P u e n t e , D e s e n g a ñ o , 10, y "Vicente Diaz , F u e n -c a r r a l , 120. Ex í j a se el se l lo d e l D r . S á n c h e z Cabezudo e n iftdas las p r epa rac iones del Dr . Cas t e l l ó .

ffar» Eeífc-SaSng, Toses , Branqn i t t« , K a l d e Garsanta^ l iomad 'ao y Tisis Inc ip ien te aíngaü remedio

puede comparoree «i 0é'J(l

tlm\ i8 Mí Ssl Dr. Apr, i fil cufil Tie«i< Biernio desde I iam m u c h o t i empo e l e x p c c t o r s u í a JMisiüuo m&a popular y mía etieaz en el campo de l a Fai-ma«ia, y

. . , . ->-• rtcibepordoíjaieía l¡^Kr-~r-; .^n,^ 1* rcoomendacfóa

ji*.r«__ gg j ^ Faoaltad Mé-dica. C a l m a Is membrana Inflama-liü, desaloja las mu-cosidadei irritan. tes, es un paliativo para 1A tea y des-cíitíáa al esrermo. Como medicina ca. Bcra park iodo caá» imprevisto, el Ver.. toral de CereiS dcJ Dr. Ayer ¡,

la Palma,^ TPvts tüMa y cnr»

. . . , . . , , . < • • • garrotillo, Ja tos ff:tma, inal fle garlan}»; y p»ra todaa las afccslonos palmonaiss 4 "ne ertan tan eujetoí loe jorenea ee inapreciable. Ninguna familiü,,

ara sa seguridad, puede estarse sia el Ii'ectoral do Cereza del )/. Ayer.

t PrspíraíoporJl Dr. J. C. ATISB y Cti.,l/¡ven,iTm.,t:.X!.A, S ** , u> nuden loi FtrmacSUieoí y Tinficaotei en JteüiciM». ^•'

s@

lo» mejora» qno sa fabrican soalogde i Ffrtwsy y B.»-4& AlqáJá, iS, (Equfístíva)

á los suscritores de EL t^PABClAL y ai EJERCITO I^a SOCI^BAB BE A1I,TISTAS SBFA^OI^iES, con motivo

de haber sido declarada la I'MWACUIMA'DA C O Ü ^ C E P C I O H patroua general del Anua d@ iBfanteria, ofxece & los señores suscritores de este diario, y en part icular ú los individuos qiiQ forman dicho cuerpo, una magniñca copia de la célebre p in tura de MüB.ILIi!0, representando la

E s t e c n a d r o es s e g u r a m e n t e e l m e i o r d e e n a n t e s p o s e e e l J j o n v r e d e P a r í s . L a a d q u i ­r i ó e l g o b i e r n o I m p e r i a l f r ancés e n 19 d e M a y o d e 1852, d e l a g a l e r í a d e l m a r i s c a l S o u l t , p o r l a e n o r m e s u m a d e

„ 615.300 FRANCOS M U E I L p O a s o m b r ó á s u s i g l o c u a n d o e s p u s o e l c u a d r o d e l a I n m a c u l a d a Conc6pcií>n,

l a m á s p o é t i c a r e p r e s e n t a c i ó n de l a R e i n a do los c ie los . J a m á s p i n t o r a l g u n o h a s ab ido t r a s l a d a r a l l i e n z o vina i m a g e n q u e s i n t e t i z a r a l a v e n e r a c i ó n , el a r d o r q u e s i e n t o e l m u n ­do c a t ó l i c o p o r l a e n c a r n a c i ó n p u r í s i m a de l a v i r t u d y d e l a b o n d a d .

O b r a s de t a n t a m a g n i t u d n o se r e a l i z a n s ino po..' u n g e n i o q u e m e r e z c a l a p a l m a e n ol a r t e r e l i g i o s o y q u e e s t é d o t a d o p o r u n s e n t i m i e n t o s u b l i m e q u e h a g a a b s t r a c c i ó n d e l m u n d o m a t e r i a l .

Y e n efecto , M U K I L L O so e n c e r r a b a ni eses y m e s e s s i n c o m u n i c a r s o c o n a l m a v i ­v i e n t e . Solo , se t r a s l a d a b a e n é x t a s i s a r t í s t i co - r e l i g io sos , á l a s m a n s i o n e s ce le s t e s , t r a s ­l a d a n d o a l l i enzo s u s a r r o b a d o r a s v i s i o n e s .

Y h é a q u í c o m o e l a r t e do M U B . I L L O es m a r a v i l l o s o , p i n t o r e s c o é i m a g i n a r i o e n l a e x p r e s i ó n m á s s u a v e : l a d e n s a s o m b r a de l a s t i n i e b l a s d e l m u n d o y los e t é r e o s f u l g o r e s d e l c ie lo ; l a g r a c i a , l a be l l eza esbejfca y p u r a d e l o s i m p o n d e r a b l e s se ra f ines q u e r o d e a n y a d o r a n ét, l a Concepc ión , t o d o s los a c c i d e n t e s de l a l u z , y a e m a n e mi l ag rosamen t - e de los c ie los , y a d i m a n e de l a s t r o r e y , d e r r a m á n d o s e p o r l a t i e r r a y m a t i z a n d o l a s figuras. T o d o es p a r a M U E I L L O de l d o m i n i o de l a r t e ; ¿y c o m o no? E l v e r e v o l o t e a r e n t o r b e l l i n o d o ­nosos g r u p o s de n i ñ o s r a d i a n t e s , q u e su g e n i o c o n v i e r t e e n á n g e l e s ; é l los h a c e v e r on e l a i r e como l l u v i a de q u e r u b i n e s , los cua l e s , m á s l eves q u e l a s n u b e s , g i r a n , se a g r u p a n , s u b e n y b a i a n , se c r u z a n y e n t r e l a z a n , se l l a m a n c o u l a s o n r i s a , s e d a n l a s m a n o s y t e j e n a l e g r e s y v i s to sa s g-uirnaldas p a r a o f recer las á l a V i r g e n .

E s t a concepc ión , p i n t a d a m a g i s t r a l m e n t e a l l i enzo , por e l i n m o r t í i l M U R U j L O , y t r a s ­l a d a d a á l a o leograf ía p o r l a a c r e d i t a d a S O C I E D A D D E A I I T I S 1 ' ' A 8 E S P A Ñ O L E S , e s l a •que se ofrece á los souores ausc r i t o r e s de 6st« d i a r i o y á los i n d i v i d u o s q u e f o r m a n el a r m a do ^ Infan te r ía p o r l a i n s i g n i f i c a n t e c a n t i d a d de 3,50 pese t a s e j e m p l a r , s i e m p r e q u e se a c o m ­p a ñ e e l a d j a n t o c u p ó n , á p e s a r d e sor u n a o b r a do p r i m e r o r d e n y t e n e r 89 c e n t í m e t r o s do a l t o p o r 62 de a n c h o .

LA INiVíACULADA CONCEPCIÓN (de Mürillo) SOCIEDAD DE ARTISTAS ESPAÑOLES , ejemplares.

^presentantes: Sres. Simón y Comp.", Calle Infantas, 18, Librería. Madrid.

ifrisT:e,irccio:^ES Cór te se e l c u p ó n y a c o m p a ñ a n d o p e s e t a s S '50 se e n t r e g a r á i t n e j e m p l a r d e 1.a I n m a ­

c u l a d a Conce i»c l4 i i , de Muri l lOj e n l a c a l l e I n f a n t a s , 18, M a d r i d . E s i n d i s p e n s a b l e l a p r e s e n t a c i ó n d e l a d j u n t o c u p ó n p a r a a d q u i r i r e s t a p r e c i o s a o l eo ­

g r a f í a . L o s s e ñ o r e s s u s c r i t o r e s d e fue ra d e e s t a c a p i t a l q u e de seen a d q u i r i r l a o l eog ra f í a q u e

of recemos , d e b e n h a c e r l a r e c o g e r e n casa d e l r e p r e s e n t a n t e q u e i n d i c a e l c u p ó n , y d e n o ser les pos ib le , p u e d e n d i r i ^ r s e á los S re s . E o l d o s y C o m p a ñ í a j E s c u d i l l e r s , 30, B a r c e l o n a , i n c l u y e n d o bajo sob re cer t i f icado 4 ' 3 0 j u e s e t a s e n l e t r a d e fáci l c o b r o ó d e l g i r o m u t u o o se l los do correo , y les sorá e n v i a d a f r a n c a de p o r t o , do e m b a l a j e y cer t i f icada . Se s u p l i c a q u e el n o m b r o y d i r ecc ión sean b i e n i n t e l i g i b l e s .

N O T x l . A los s e ñ o r e s oficiales d e l e j é r c i t o se l e s e n t r e g a r á 6 eu'^ ' iará 4 i g u a l p r e c i o a u n q u e se p r e s e n l e u ó l a p i d a n s in c u p ó n .

Cura todas las Enfermedades que resul tan de Vicios de la sangre, como Eaoráfwlaa» Ecsetna, Sarlaais, Herpes, Li<¡wen, Xntpétisso, Gota, Bewmatistno,

e u r a los accidentes slíIUticos an t iguos ó robcMeB : Vlceras, Tumores, Gomag^ EocostoBts, asi como el íínfattsmo, la ISsepofuloea y la Tubeycntosa.

En VasU, Cüsa X. Z > s m B S , ;°°,3.02,-rue l a i c b e l i e a , S"ila SOT Y£A8-LAFF£(rt£{JII, f es toia liS ritmOui

REVOLUCIÓN W^dí: Máquina d e c o s e r á dob l e p e s ­p u n t e , s i s t e m a s S i n g e r - W h i -l e c o m b i n a d o s , c o n t o J o s s u ^ í tgcesor ios y d i spues t a ¿ fun­c iona r . P r e c i o : 2 5 p e s e t a s ,

-•-«wi^miMiiiwHBaí»—' e m b a l a g a y p o r t e g r a t i s h a s t ^ l a e s t ac ión q u e s e d e s e e . Remi t i r $u impor t a a l h a c e * e l i iedidq a l Dr. do l a Agenc ia Meroaa t i l é I n d u s t r i a í , R a m b l a q e Ca t a luña , 128.-r-Borcelóiia.

Dinero en el día á pa s ivos , i n a m o v i b l e s F . O. de l N o r t e y e m p l e a d o s d e l E s t a d o , a l 2, 3 y ' 4 p OtO. E s ­co r i a l , 6,2.» d.* 10 a l a y e & 7

Se a r r i e n d a n l o s p a u t a s de la dehesa de Valdegatos,

en término de Loeohes. Da­rán razón, Arco d§ Sauta

Hotel S e v e n d e , 10.804 p ies e n

10.000 d u r o s . L i s t a . iO.

P lílal»i£(»elonos c o n ú s i n . .P l aza Callt io, 19, 2.» i zq . "

II I i n o n e U a nrgfe i i t e s K I e -/ 4 r i a s , a r m a r i o s l u n a , a lco­b a map ló , p i a n o . G a r m e n i O p l

A i í n o n e < l a , s a l o u Jirnft>iitc-t e a l c o b a , d e s p a c h o y co ­

m e d o r . M u ñ o z T o r r e r o s , 2°

Operaciones sobre renta francesa. C o n 5 0 0 p t a s . 1.500 te. d e r e n t a .

» 1.000 » 3 .000 » » N u e v o s i s t e m a se r io y d ÍKio de conf ianza , q u e h a p r o -

d n c i d o de 12 A 15 p o r 100 a l m e s es tos ú l t i m o s años . C i r ­c u l a r g r a t i s . D i r i g i r s e al C o n i p t o i r d e B a n c a y C o m i s i ó n 30, f a u b o u r g M o n t m a r t i o , P a r í s .

Sociedad Gral. de Embaisamamlentos C e n t r o Ben<'f ico d e CrIst<Sll>aI C o M n

Fuencarral, 87, Madrid.—Teléfoyio 818. C o n ser í ' io io pe rmvmonte , p r e s t a a s i s t e n c i a M é d i o o - P a r -

m a c e ú t i o a p o r a b o n o do 5 p t a s . m e n s i j a l e s á f a m i l i a s q u e n o e x c e d a n de 7 p e r s o n a s . E m b a l s a m a u n c a d á v e r d e n t r o d e M a d r i d á su s abonadofi p o r 500 p t a s . E m b a l s a m a e n p r o v i n ­c ias á p r e c i o s e<!onómieos. P l d u n s o R e g l a m e n t o s .

8 t , l - ' U E l V C A R K A I i , 8 »

MATÍAS LÓPEZ S l a d r i d - E s c o r l i c l

L o s c h o c o l a t e s , cafés y sopas c o l o n i a l e s d e e s t a casa s o n los m e j o r e s q u e se p r e s e n t a n e n l o s m e r c a d o s — P r e m i a d o s c o n 4 0 m e d a l l a s . D o v e n t a e n t o d o s l o s e s t a b l e o i m i e a t o s de u l t r a m a r i n o s de E s p a ñ a . Of ic inas ; P a l m a a l t a , 8. D e p ó s i t o C e n t r a l : M o n t e r a , 2 5

Ab o g r a d o , n o t a s o b r e s a ­l i e n t e , so l te ro , j o v e n , y

d a n d o g a r a n t í a s , se ofrece a d m i n i s t r a d o r ó c a r g o a n á ­l o g o . B u e n o s i n fo rmes . L i s ­t a de c o r r e o s . P . C. c é d u l a 65

Sobrinos do Guinea Carretas27y 2878!!.° 142 X'od«s l o s d i a s n a c T O p o s t r e . (i 3 p e s e t a s e l r u e d l o k i l o .

Co m p r a d e alhi)^ja«i p o d r e -r i a fina, p l a t i n o y g a l o -

nos . V e n t a de m e t a l e s fiaos p r e p a r a d o s . 4 , Za ragoza , 4.

Venta de casa e n e s t a c o r t e . R a z ó n , L u -c h a n a , 3 , 4 °de 9á. 11 m a ñ a n a

Sillas de cuero r e p u j a d o , n a d i a c o m p r e s i n v e r a n t e s e s t a casa espec ia l . J a c o m e t r o z o , 41!, t a p i c e r í a .

"MTIORTLIS" 23 años e spec ia l i s t a e n sífi­

l i s , v e n é r e o , e s t e r i l i dad é i m ­p o t e n c i a . C a r r e t a s , ti9, p rn! .

BIEN y BARATO vayan 4 la 6RAN SASTRERÍA DE

ESCUDERO YMAVARRETE

l ü , p l a x a d e l Ass^vt^l, 15 (frente á Jispr.x y Mtna)

Pi a n o ©xt raJ i . i e rOiUrse s u v e n t a . M a d e r a , 49, p r a l .

••Bu.ii!a 3 BMixo.f, -D ' p s p I -ioixqU(j op iíaucatjQ -HQ

Xe sogojyi/iio osuápf j •ta.i -op-Btnrauou £. s«[ td uoo

vqraioarra zh^r

A l m o n e d a m o l o c U n r i o c a ­sa , comedor , Vav,, 15, 1."

A l m o n e d a do isneI>l€S y p i a n o s , p r o c e d e n t e s d e

p r é s t a m o s . Cruji, 87 y 39, %"

Sombréeos s e ñ o r a ; mode los d e 15 á 6 0 p t s

ENCAJES HILO J u e g o de c a m a , 10 v a r a s , 3 ptg. I t o d r i g a o z . P z a . Á n g e l 8

Préstamos p o r p a p e l e t a s d e l M o n t e , se d a t o d o su v a l o r , p r é s t a m o s sobro m u e b l e s , p i a n o s , a r -m o n i u m s , a l h a j a s , v a l o r e s d e l E.stado y pó l i z a s de p r é s ­t a m o d e l M o n t e y B a n c o de E s p a ñ a . C r a z , 87 y 89, p r i m s . p j j | . ^ v e s t i r con e l e g a n c i a i d i d y p rec ios m u y b a ­r a t o s , C o r r e d e r a Baja , 5.

Lo c a l p a r a v a < i u c r i a c o n l ioonoia , so a l q u i l a . G u -

tenbo.-g, lía ( A t o c h a ) .

P l a ñ o s o v e n d o b a r a t o . E g u i l a z , 10, 1." i z q u i e r d a .

Troie<;o d e i a c a » . So v e n ­de P z a . S M a r c i a l 5 de 9 A 2

Ga b i n e t e c x t . c o n <$ siss . Car.» S. J e r ó n i m o 31, 3° iz

U n c a b a l l e r o d«!jeanl<)iul-l a r g a b i n e t e a m u e b l a d o

oon ó s i n a s i s t enc ia . Di r ig i r ­se por ca r t a , l i s t a do c o r r e o s

Ü . C( • • • P . Ü. c é d u l a n ú m . 91.797.

En 3 .000 i s t s . i n l t i i d d e s u ^ v a l o r m a t e r i a l oon s u p r i ­

v i l e g i o fijo do o t ro t a n t o , se v e n d e f a r m a c i a e n e s t a c o r t e . Cor redora , 19, d r o g u e r í a .

ñ I m o u e d a c i rg-ente d e a <t M á : n o so a d m i t e n p r e n d a ­r o s . P l a z a M a t u t e , 7, p o r t e r í a i n f o r m a r á n .

A l m o n e d a n j i i c b i e s l i^fo . J u e g o s a l c o b a p a l o r o s a y

p a l o s a n t o l I o r t ' ' 2 1 y 23 ,p l . i z .

Ga b i a e í e c o n a lcobaáa&de-pend ion to , p a r a 1 ó 2 oaba-

llevop. r i o r t a l e z a , 6 8 , 1 . "

Li c e n c i a d o , « l e s e a s e r s u s ­t i t u t o . N u ñ o z do Balboa ,

43, va(*^ueria.

Pí^ '»l>lí.acioi¡cs e c o n ó m i ­cas . A d u a n a , 19,2."

A l i n o n e d a m u e b l e s , c e j a c a u d a l e s . P o n t o j os , 1, p l d*

Ca b a i i e r o e x t r a r > | e r o , d e ­sea g a b i n e t e a m u e b l a d o

c o n c h i m e n e a ó e s tu fa , e n b u e n a fami l i a . D i r i g i r s e , l i s ­t a d e co r r eos n . " 4.S12.

Ga b i n e t e c o n a l e o l t a , c o n ó nía. Tímessa í^i^át

r a p c i ' s o n a q u o d o s e ü o b t e n e r u n 30 p o r 100 de benef ic io a l c a p i t a l , eo looado e n p e q u e ­ñ a s o p e r a c i o n e s á s u n o m ­bro , b i e n gjarant ido, sog i i r i -d a d do r e i n t e g r o m e n s u a l , m u v poca m o l e s t i a , y n a d a d e fa rsa , 19 años do p r á c t i c a . P l a z a S a n t o D o m i n g o , 9 ,1 . ° d e r e c h a , S r . B a r r i o s .

H o s p e d a j e d e s d o -í p t a s . P u e n c a r r a l , 34, fonda .

Garbanzos í snós d o C a s l i i S a

Clases finas. G a r a n t i z a d a s , desde 7 p t a s . a iToba h a s t a Uá M a g d a l e n a , 24 , a lmacé i i . T o -lé fuco 829.

Sífilis, ¥enéreo, C u r a c i ó n a s e g u r a d a d e 12

& 8 y G á 8. S a n M i g u e l , 7 , 1 °

Al m o n e d a m u e b l e s p o r a u s e n c i a . T u r c o , 8, b . "

¿liMGéndsoissodspiíia Brasero sin tufo

S u p e r i o r p a r a bra.sero», h e c t o l i t r o p t a s . 3,75; 1^2 2. N(j se e x p e n d e m á s q u e e n e s t a casa cok i n g l é s q t a l . 3,25

H e r s n o s l I I a , SS

E e m o n t o i r o s d e n i k e l , l e g í t i m o g a ­r a n t i z a d o ( n o 89

•(«?ipono a m a r r l l o n t o 9 | n i n e g r o ) , á 15 p e -

4^„ ( .Ms6 ta f i . Uu a ñ o g a -^^üéjy r a n t i a . Pálxr ica d e

re lo je s , F u c n c a r s r K l , SS ,

Almorranas Se c u r a n c o n l a a c r e d i t a d »

poiiaada do l a f a r m a c i a de l a L a t i n a , d e J . S o p ü l v e d a , T o ­l edo , 02. B o t e , i p t a . Se r e ­m i t e á p r o v i n c i a s p o r 1,50. G a r a n t i z a l.i p r o c e d e n c i a d e es t a p o m a d a la, e t i q u e t a q u e c u b r e l a t a p a de l t a r r o .

Q Í I ' Í P P Í f t Q g a b l u o t e » O i L L l l i u i A p , desdo 25 d u ­r o s . Mesas m i n i s t r a s cedro y p a l o s a n t o . Libei- tad 6, t i e n d a

A y c v & ¡ a s s l e t o d e l a t a r ­de 86 e f e c t u ó e l e n l a c e

m a t r i m o n i a l de l 8:. D . M a ­r i a n o C a b a l l e r o Sánchez c o n l a s e ñ o r i t a d o ñ a Jose fa H e ­r r e r o G a r c í a , los oua ios e m ­p r e n d e n s u viajo A C a d i í , a c o m p a ñ a d o s dé los p a d r i -n o s y madre ,& los q u e desea­m o s b u e n v ia je y felii*Siad,

Al i iuo i t eda p o r d«fnael<Sm S a n V i c e n t e ba,ja,60,2.° íz

CR%at d o v e n t n : 8.®00 y 1 0 . 0 0 0 J s u n a V g l v o r d é 3 3 9 .

So b r o cocSaes reíSfiBíadO. D i n e r o T" -Ba l l e s t a , 11 ch*

Po r l i n | > o s l f e i i i d a d t í s i c a so cede u n a b u e n a y ac r e ­

d i t ada f a rmac ia . K a z ¿ n , d o n G a b r i e l iáopúlvoda, Púoa ' r , 8 sog-undo.

nj ipl f f r á 10 cunta , g a l e r í a ^ UUnLLI t b a s t o n o s jKira po r -t ier- j , c u n a s , s a m a s da m a d e ­r a y o t ' os m u e b l e s . J a s ó m e -t rozo , 26.

a r a t i i i - a e n s i l l e r í a s y Muebles . M . ¿ ó r n a n o s , 3 . B

E: it f á s n l l l a , é o m i d a , r o p a 8 y 9 r s . M o n t e r a , 10, 4 ."

Venta hoteles • V o l u n t a r i a . G e n o v a , 13.

P a s e o Cas t e l l ana , 30. S u p e ­r i o r e s a n t e c e d e n t e s , n o t a r í a , Sr . Gonzá lez . Desongaf io , 1 ,

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SE VENDEí^ y comp<í* nen oon verdadera g a r a ^ tía y á mitad de preci(|^ S a ! , 3 y 4 , relojería (ca» si esquina á la de Postase

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ÍÍAI.EÍS » E l . . \

ORINA Cura sin sondar ni opsrá D i l a t a c i ó n de l a s osíreobi , ees , r o t a r a y e x p e l i o i ó n d los cá l cu los ( m a l d e p i s d r y a r e n i l l a s . C a r a r á p i d a d c a t a r r o do l a v e j i g a , inor-t i n e n c i a , p r ó s t a t a , o r i n á t _ . b i a cou posos b l a n c o s ó rojoi„ S a l e s KocEi 7 p t a s . V a n (ÍW r r e o p o r l ibranssa ó sellbjfc. ü a l m a n t e l u s t a n t A i i o o a*r los do lores y a t a q u e s . C o s " s u l t a g r a t i s d e 3 á 7 y y<j( c a r t a los fo ra s t e ros . G a b i n i i . t e M é í l l c o S T o r t e - A n i c r l ^ a f n o . M o n t e r a , 3 3 , 1 . " M a d r i j j ,

a b i n e t e o x t . b u e n s'elfVlfit c ío ; 9 y 10 r s .P rec j l ados íTv

MíssrafiW Si í i l i s , v e n é r e o , e t c . » e 7 < R 10 y « á 8 . Tftoledo, 1 0 . tfi¿

" l a l e s venéreóC, C u r a c i ó n p r o n t a . , D Q 7 ».

8 y 6 á i o . f | r T ü Á y , 0 , m I m o n e d a H ^ ¿ ^ n t e , d t ^ ^ m o s d i a s , h a y ó o l g a d t í í | k ,

ohoube r sUy y j i a n o . ^%a M a r c o s , 26, p r a l , j

TI fíj Fm e3P!?í5i°S*) *¿*i° é^Ptt] ^^ Correo, .2, pottg!

P O a b l ñ e t e y ' ^ c ó b a «^'i

i s iu . V i c t o r i a , 3 , 3° j a f l ^

Teatro Bsál/p I l aoe t i f a l t a d o s btt6ltó¿.

b u t a c a s , b u e n s i t i o á t ü í ^ p » ' p r i m e r o , i, t u r n o gn to ro ó w m e d i o . K á z ó n , B a r q u i l l o , 1 * p o r t e r í a . ...-.^

RUS do dob le fe lpa , o í a t e y marc%. de l OSO; l o m e j o r q u e sé f^ b r i o a , t r a j e 5 p t a s . A r t í o u l ó g e x c l u s i v o » p a r a c a b a l l e f » e n r o p a b l a n c a y géneros"íyf p u n t o á p r e c i o s 4 o s c ó á p 9 ^ dos p o r s u b a r a t u r a . . ! j

0aiiia£s©lfi4. Gíiibelalde y Urrii

O A L L (fronte

D E A T O C H A , á l a do R e l a t o r e s !

T r a j e s d e J a t e a d e s d e 15 g í fe C a z a d o r a s " » 8 ' '% P a n t a l o n e s » 4 i' T r a j e s á m e d i d a » 20 . P a n t a l o n e s p a á a ? 6,5{^' C a p a s » l a ';,,j_ T r a j e s da c h i c o > 8 ;í/' B o t a s p . " S r a . t S ' 5 t

» » c a b a l l e r o » 6 ¿¿s Z a p a t o s d e n i ñ o p O í t ^ B o r c e g u í e s f u e r t e s 7 i B r o d e q t i i u e s caza [» 9 , 5 ^

l ü n m l l l a d e r o , 19, B a a a i t f armacia ,y?

P o r a u s e n t a r s e s u dneijfe 89 Venda l a A n í l g n » d e LJM E O C H A e n l a I s l a de m&-P e r n a n d o (Cádiz). Despat í f io d e 45 á 50.000 rea les . P í f iOÍ* 60.000 r s . a l cgutaffo ó á plffl Z08 s o n garaa í t la . Xfeform.9rft