evaluación de la educación ambiental como herramienta de

62
Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de Conservación: el caso de los anfibios endémicos de Mehuín, Chile Patrocinante: Wara Marcelo Proyecto de Trabajo de Titulación como parte de los requisitos para optar al título de Ingeniero en Conservación de Recursos Naturales ARACELY ALLISON SOTO SILVA VALDIVIA 2015

Upload: others

Post on 07-Jul-2022

3 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de Conservación: el caso de los anfibios endémicos de Mehuín,

Chile

Patrocinante: Wara Marcelo

Proyecto de Trabajo de Titulación como parte

de los requisitos para optar al título de Ingeniero en Conservación de Recursos Naturales

ARACELY ALLISON SOTO SILVA

VALDIVIA 2015

Page 2: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

Índice de Materias Páginas i Calificación del Comité de Titulación i ii Agradecimientos ii iii Dedicatoria iii iv Resumen iv 1 INTRODUCCIÓN 1 2 MARCO TEÓRICO 3 2.1 La Educación ambiental como estrategia para la conservación de la

-

3 biodiversidad

2.2 Conservación de anfibios 4 2.3 La Educación ambiental como estrategia para la conservación de anfibios 6 en Mehuín

3 METODOLOGÍA 8 3.1 Área de estudio 8 3.2 Escuela y grupos focales de este estudio

9 3.3 Diseño de estudio 9 3.3.1 Percepción sobre anfibios 9 3.3.2 Evaluación de la efectividad del proyecto de educación ambiental

10 3.4 Análisis de datos 13 3.4.1 Encuesta de Percepción 13 3.4.2 Análisis de Conocimiento y Valoración 13 4 RESULTADOS 14 4.1 Percepción sobre anfibios

14 4.1.1 Preferencia de las personas hacia ciertas especies de animales 14 4.1.2 Mitos y verdades sobre las ranas 15 4.1.3 Reconocimiento de especies 16 4.1.4 Conservación de anfibios

16 4.2 Evaluación de la efectividad del proyecto de educación ambiental 17 4.2.1 Conocimiento sobre anfibios

17 4.2.1.1 Aspectos biológicos 17 4.2.1.2 Diversidad y reconocimiento de especies 18 4.2.1.3 Mitos

20 4.2.1.4 Dibujos 22 4.2.2 Valoración de anfibios 23

Page 3: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

5 DISCUSIÓN 24 6 CONCLUSIONES 32 7 REFERENCIAS 34 Anexos 39

Page 4: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

i

Calificación del Comité de Titulación

Nota

Patrocinante: Sra. Wara Marcelo V 61

Informante: Sr. Iván Díaz Romero 65

Informante: Sr. Alberto Tacón 61

El Patrocinante acredita que el presente Trabajo de Titulación cumple con los requisitos de contenido y

de forma contemplados en el Reglamento de Titulación de la Escuela. Del mismo modo, acredita que

en el presente documento han sido consideradas las sugerencias y modificaciones propuestas por los

demás integrantes del Comité de Titulación.

Wara Marcelo

Page 5: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

ii

Agradecimientos

Quisiera agradecer a mis padres y a mi familia por el apoyo que me han brindado durante todos estos

años.

A Wara, mi profesor patrocinante por la paciencia, el apoyo y la constancia, en la realización de este

trabajo de titulación, de verdad muchas gracias.

A las personas que trabajaron en el desarrollo del proyecto, Paula, Camilo, Angel, Pame, Toto, Fredy, y

muchos otros compañeros que sin su ayuda no hubiera sido posible realizar tan lindo proyecto.

Al director del Liceo Politécnico Pesquero de Mehuín por habernos permitido trabajar en su comunidad

escolar, a los profesores y a la sra Patricia por toda la colaboración.

Y en especial quiero agradecer a don Isaac Nahuelpan, por habernos permitido realizar la salida a

terreno con los niños en su predio, y por acompañarnos a vivir esa pequeña aventura.

Page 6: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

iii

Dedicatoria

A mi padre quien desde pequeña me inculcó el amor por la naturaleza

"Ella está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré ¿Para qué sirve la utopía? Para eso sirve: para caminar"

Eduardo Galeano.

Page 7: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

iv

Resumen

La educación ambiental es una herramienta fundamental para la conservación de la biodiversidad, que

busca promover la sensibilidad ambiental, formación de conocimientos, actitudes y comportamientos

favorables hacia el medio ambiente y el mundo natural. El establecimiento de programas de educación

ambiental en la educación básica puede actuar como base sobre la cual construir planes de

conservación a largo plazo en la sociedad.

Los anfibios son uno de los grupos de vertebrados más amenazados a nivel global, en Chile esto no es

la excepción. Particularmente en la localidad de Mehuín, Región de los Ríos, encontramos dos especies

de anfibios altamente amenazados; Insuetuphrynus acarpicus y Eupsophus migueli. Si bien las

amenazas a su conservación son múltiples, la destrucción del hábitat por usos no adecuados del

territorio es una de las más importantes.

En la localidad de Mehuín, la educación ambiental podría representar una importante herramienta para

lograr la conservación de los anfibios en el largo plazo. Sin embargo, en Chile son pocos los programas

de educación ambiental que se han enfocado en anfibios, y aún menos los estudios desarrollados que

evalúan la efectividad de los programas de educación ambiental. Por ello, el objetivo de este trabajo fue

evaluar la efectividad de un proyecto de educación ambiental para la conservación de anfibios en la

localidad de Mehuín. Para determinar la efectividad del proyecto, se realizó un análisis comparativo

entre el inicio y el final del proyecto en dos grupos de niños entre 3º y 6º básico; un primer grupo que

recibió talleres de educación ambiental y un segundo grupo de niños que no recibió talleres de

educación ambiental. Los resultados de este estudio indican que efectivamente se generan cambios en

el conocimiento que tienen los niños sobre los anfibios luego de participar de un proyecto de educación

ambiental. En menor medida se generaron cambios en la valoración hacia los anfibios. Este estudio

puede servir como base para futuros programas de educación ambiental.

Palabras claves: conocimiento, valoración, evaluación de proyectos de educación ambiental,

percepciones, anfibios.

Page 8: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

1

1. INTRODUCCIÓN

Los actuales problemas de conservación son el resultado de múltiples factores, los cuales van más

allá del uso de una sola disciplina. Por ello, el éxito de un programa de conservación requiere de la

participación de una gran gama de acciones y disciplinas que interactúen en conjunto.

Una de las disciplinas más importantes es la educación ambiental, la cual busca promover la

sensibilidad ambiental, la formación de actitudes, conocimientos y valores favorables hacia la

conservación del medio ambiente. Personas y comunidades ambientalmente sensibles podrían tener

voluntad de acceder a más información, capacitación y sobre todo a un manejo responsable de la flora y

fauna de su entorno, permitiendo el éxito de programas y políticas ambientales en el largo plazo. Por

ello, los programas de educación ambiental aparecen como una herramienta que permite fomentar el

interés y desarrollar actitudes favorables hacia la conservación de la naturaleza. Sin embargo muchos

de los programas de educación ambiental se centran en especies de animales carismáticos,

representados mayoritariamente por mamíferos o aves, esto podría influir en que las personas apoyen

más la conservación de estas especies por motivos estéticos o porque son más “adorables”, dejando de

lado otras especies amenazadas, o no vinculando especies con ecosistemas y servicios ambientales, lo

cual podría no tener un efecto mayor en conservación. Para desarrollar un buen programa de educación

ambiental se debe conocer lo que las personas piensan, creen o sienten sobre el tema a tratar, y conocer

lo que les interesa aprender, incorporando esta información en el diseño del programa de educación.

También se debe evaluar los efectos de los programas de educación ambiental, midiendo los cambios

en el conocimiento, valoración y actitudes que presentan los participantes luego de la realización del

programa, para así definir su efectividad, mejorarlos y perfeccionarlos con el paso del tiempo. Sin

embargo, las evaluaciones de los programas de educación ambiental son escasas, y las experiencias

positivas no necesariamente se dan a conocer o se replican en distintos medios.

A nivel global, uno de los grupos animales más amenazados de extinción son los anfibios, con más

de un tercio de las especies del mundo bajo algún grado o bajo la categoría de amenazada. Las causas

de la disminución de las poblaciones de anfibios son múltiples, tales como la contaminación, especies

invasoras, cambio climático y enfermedades, siendo una de las más importantes la destrucción del

hábitat. A pesar de lo anterior, los anfibios no han sido muy abordados por programas de educación

ambiental.

Page 9: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

2

En Chile, los anfibios son el grupo de vertebrados con mayores niveles de endemismo; casi el 70%

de las especies son endémicas y están asociadas a hábitats bien específicos. Un caso extremo ocurre en

la localidad de Mehuín (39° 26’ S), en una zona costera cubiertas de bosques templados lluviosos en el

sur de Chile. En Mehuín existen dos especies de anfibios endémicos de la localidad y altamente

amenazados: la rana verde de Mehuín (Insuetophrynus acarpicus, Familia Rhinodermatidae) y la rana

de hojarasca de Mehuín (Eupsophus migueli, Familia Alsodidae). Ambas especies viven en quebradas

cercanas a las comunidades rurales. Por ello, es muy importante realizar programas de educación

ambiental en la localidad de Mehuín con el fin de promover la sensibilidad, formación de

conocimientos y actitudes favorables hacia la conservación de los anfibios de esta zona. Así, los

programas de educación ambiental se basan en la hipótesis que la generación de un mayor aprecio por

el mundo natural, promoverá un cambio de actitudes y valores permitiendo la conservación en el largo

plazo. En este trabajo de titulación, se desarrolló una actividad de educación ambiental en la localidad

de Mehuín, y se buscó evaluar la efectividad de un programa de educación ambiental en el cambio de

conocimiento y valoración de anfibios por parte de la comunidad.

El presente Trabajo de Titulación II tiene como objetivo general

i. Evaluar la efectividad de un proyecto de educación ambiental para la conservación de

anfibios en la localidad de Mehuín, Chile.

Objetivos específicos

i. Evaluar la percepción que posee la comunidad escolar de Mehuín hacia los anfibios.

ii. Realizar actividades de educación ambiental con estudiantes de 5° y 6° año básico del Liceo

Politécnico Pesquero de Mehuín.

iii. Evaluar cómo varían el conocimiento y valoración de anfibios en un grupo de niños que

tuvieron actividades de educación ambiental respecto a un grupo de niños que no tuvieron

actividades de educación ambiental.

iv. Proponer los lineamientos para el diseño de un programa de educación ambiental para la

conservación de anfibios del Sitio Prioritario Mehuín – Río Lingue en base a los resultados

de un proyecto piloto.

Page 10: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

3

2. MARCO TEÓRICO

2.1 La Educación ambiental como estrategia para la conservación de la biodiversidad

La educación ambiental es una corriente de pensamiento y acción, de alcance internacional, que

adquiere gran auge a partir de los años 70 cuando la destrucción de los hábitats naturales y la

degradación de la calidad ambiental empiezan a ser considerados como problemas sociales (Ministerio

del Medio Ambiente de España, 1999).

En su esencia, la educación ambiental se esfuerza por involucrar a la ciudadanía en nuevas formas

de pensar y actuar en, con y para el medio ambiente, contribuyendo a generar una población más

alfabetizada ambientalmente (Carleton-Hug & Hug 2010). En este contexto dicha disciplina busca

promover la sensibilidad ambiental, la formación de conocimientos, actitudes, aptitudes y

comportamientos favorables hacia la conservación de los recursos naturales (Hernández, 2012). La

educación ambiental juega un papel importante, ya que mediante ella es posible construir y reconstruir

las ideologías, percepciones, actitudes y acciones de respeto hacia la vida, que permitan a su vez un

respeto hacia los ecosistemas del planeta (Barraza & Ceja-Adame 2011). Es por esto que los programas

de educación ambiental, tanto para niños o para adultos, son una herramienta de conservación esencial

para aumentar el interés y las actitudes positivas hacia la naturaleza y la conservación (Noss 1997, Orr

1999, Ewert et al. 2005, citado por Root-Bernstein & Armesto, 2013). Además, estos programas

permiten transmitir información e involucrar a la gente en una relación de primera mano con la

naturaleza, ya sea a través de actividades prácticas en las escuelas, actividades con la comunidad, o

publicidad (Jacobson et al. 2006).

El establecimiento temprano de programas de educación ambiental puede proporcionar una base

sobre la cual pueden ser construidos los planes de conservación a largo plazo (Trewhella et al. 2005).

Sin embargo, muchos programas de educación ambiental se centran principalmente en animales

carismáticos, casi exclusivamente representados por mamíferos y aves, recibiendo

desproporcionadamente más atención y financiamiento para la conservación que otros grupos

taxonómicos. Este sesgo podría ser consecuencia del apoyo que tienen estas especies carismáticas por

parte de la gente por motivos estéticos o porque son especies más afines a los humanos (Ward et al.

1998, Gunnthorsdottir 2001, Tisdell et al. 2006, Maresova & Frynta 2007, López et al. 2007, citado por

Ballouard et al. 2012). Una de las formas para corregir este sesgo es ir actualizando la educación

Page 11: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

4

biológica y ambiental de los niños (Feinsinger 1987, Kellert 1996, Ehrlich & Pringle 2008, citado por

Ballouard, 2012).

Otro punto importante de mencionar es la escasez de evaluaciones en los programas de educación

ambiental (Carleton-Hug & Hug, 2010). Esto se observa por ejemplo en el trabajo que realizó O’Neill

(2007), en el cual revisó las auditorías a 37 proyectos de conservación de la biodiversidad

implementados por grandes organizaciones internacionales, tales como el Fondo Mundial para la

Naturaleza (WWF) y The Nature Conservancy (TNC), los que incluyen componentes de educación

ambiental, y en dónde menos de un tercio incluía sistemas formales para evaluar la eficacia y el

impacto de dichos proyectos (Carleton – Hug & Hug, 2010).

La evaluación de los programas de educación ambiental pueden proporcionar información sobre el

valor de un programa, ofrecer una oportunidad para recibir retroalimentación y mejora de los

programas, ampliar nuestra comprensión del proceso de desarrollo del programa, y generar los

fundamentos sobre sus beneficios (Jacobson, 1991). Además, proporciona una herramienta sistemática

para medir los cambios en el conocimiento, valores, actitudes, conductas y apoyo del público a través

del tiempo (Engels & Jacobson, 2007).

Un buen programa de educación ambiental puede ser un espacio de interacción de los diferentes

actores sociales, articulando vivencias y logrando aprendizajes significativos, que permiten documentar

y rescatar conocimientos y tradiciones locales que vinculan a la comunidad con las especies presentes

en su entorno (Pedal, 2010). En este contexto el estudio de las percepciones humanas para conocer lo

que los seres humanos saben, piensan, sienten, y cuál es su preocupación hacia el ambiente es

fundamental para la elaboración de programas de educación y conservación; así como para lograr

propuestas metodológicas basadas en los intereses y en las necesidades de las comunidades humanas

(Barraza & Ceja-Adame, 2003; Barraza, 2005). Este reto educativo es enorme ya que los

conocimientos y las percepciones que se tienen de la naturaleza son diferentes en los diversos grupos

sociales (Barahona & Almeida, 2006).

2.2 Conservación de anfibios

El mundo enfrenta una crisis de extinción y declinación de poblaciones de anfibios sin precedentes

Gascon et al. 2007). La tasa de extinción del grupo es 211 veces mayor que la tasa natural de extinción

(McCallum 2007), y un tercio de las especies vivientes están actualmente clasificadas como

amenazadas de extinción (Soto-Azat & Cunningham 2012). Las causas del declive que sufren los

Page 12: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

5

anfibios son principalmente la destrucción y alteración del hábitat, enfermedades emergentes, especies

invasoras, efectos del cambio climático y contaminación (Soto-Azat & Valenzuela Sánchez 2012).

Una situación similar ocurre en Chile. El país posee un total de 63 especies de anfibios nativos

descritos a la fecha, los que se encuentran reunidos en siete familias (Lobos et.al 2013). Una de las

características sobresalientes de los anfibios chilenos es su alto nivel de endemismo (Méndez & Correa

2008). A nivel mundial, Chile está considerado dentro de los 20 países con más altos porcentajes de

endemismo en anfibios (Arroyo et al. 1999) con porcentajes cercanos al 70%, y superando a países

como Brasil o India, poseedores de la mayor diversidad de anfibios en el planeta (Rabanal & Nuñez

2009). En Chile, la mayor riqueza de especies de anfibios y el mayor número de endemismos se

concentra en la Cordillera de la Costa del centro sur. En esta región existen dos casos de extrema rareza

y amenaza: el caso de las especies Insuetophrynus acarpicus (Barrio 1970) y Eupsophus migueli

(Formas 1978), que son conocidas en su localidad tipo, y en un par de quebradas costeras entre Mehuín

y Queule alrededor de los 39° 25’S. Ambas especies presentan problemas de conservación.

Insuetophrynus acarpicus, también conocida como la rana verde de Mehuín, está categorizada como

En Peligro Crítico según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, mientras que

Eupsophus migueli (rana de hojarasca de Mehuín) se encuentra categorizada como En Peligro (UICN

2015).

La zona donde habitan estas especies ha sido definida por el Gobierno regional y por el Ministerio

del Medio Ambiente como un sitio prioritario para la conservación, denominado Sitio Prioritario

Mehuín - Río Lingue. Este sitio de conservación forma parte de la Cordillera de la Costa Valdiviana, y

es una de los áreas importantes dentro de la batracofauna chilena, debido a la diversidad de taxas

existentes (posiblemente 13 especies) (anexo 1) y al alto porcentaje de endemismo que presenta (Nuñez

et al. 2012). Las principales amenazas que presentan los ecosistemas de Mehuín – Río Lingue son la

pérdida y alteración de los hábitats producto de la expansión agrícola y forestal. Las plantaciones

industriales de Pinus spp. y Eucalyptus spp. han sustituido sistemas naturales de alta biodiversidad por

monocultivos artificiales con mínima biodiversidad (Armesto et al. 1992). A su vez, la introducción de

ganadería, el drenaje, y la contaminación de los ríos está generando una pérdida irreversible del hábitat

original (Nuñez et al. 2012).

El programa de conservación EDGE (Evolutionarily Distinct and Globally Endangered) de la

Sociedad Zoológica de Londres, es la única iniciativa global de conservación, enfocada a especies

amenazadas que representan una cantidad significativa de historia evolutiva única (Soto-Azat &

Page 13: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

6

Valenzuela-Sánchez 2012). Dicho programa genera un ranking con los cien anfibios que requieren más

priorización de conservación en el mundo. En este contexto Insuetophrynus acarpicus se encuentra en

el número 24 de la lista. Cabe mencionar que actualmente I. acarpicus y E. migueli no se encuentra en

ningún área protegida, como tampoco cuentan con algún plan y/o programa de conservación.

Para conservar estas especies es necesaria una aproximación multidisciplinaria y de largo plazo

(Kessler et al. 1998). La educación ambiental puede jugar un rol muy importante, al crear conciencia

pública de lo especial y único que existe en esta localidad, facilitando la colaboración para realizar

estudios e intervenciones directas en favor de estas especies con respaldo de los actores locales

(Hoffman & Armesto 2008). (Hernández 2012).

2.3 La Educación ambiental como estrategia para la conservación de anfibios en Mehuín

Muchos de los impactos que afectan a los anfibios podrían evitarse o corregirse a partir de

modificaciones en las actitudes de las personas (Cairo et. al 2010). Según Gibbons (2003, citado por

Cairo et al. 2010) la mejor manera de lograr un cambio de actitud en una sociedad respecto de los

anfibios sería a través de esfuerzos educativos. Este autor propone además que la toma de conciencia

pública conducirá indirectamente a una mayor protección del ambiente en general y de hábitats

valiosos para las especies silvestres. Un ejemplo de esto es una acción de conservación de anfibios en

Taiwán, donde el agricultor educado dejó de usar agroquímicos en su campo, y cuando la población de

ranas locales se encontró en aumento, el agricultor también se convirtió en seguidor de un estilo de vida

orgánica y estaba orgulloso de las ranas locales que habitan en su tierra (Lin et al. 2008). Así, el

programa generó un vínculo entre los agricultores y las ranas, favoreciendo la conservación de las

especies en el largo plazo.

Los programas de educación ambiental sobre anfibios si bien son escasos, buscan desarrollar

cambios en el conocimiento y actitudes favorables hacia los anfibios. Por ejemplo el Programa de

Conservación de Anfibios para estudiantes de escuela primaria realizado en Baden-Württemberg,

Alemania, evaluó aspectos cognitivos y emocionales en los niños y mostró que los estudiantes que

participaron de una acción de conservación se desempeñaron significativamente mejor en el

conocimiento sobre anfibios que los estudiantes que no participaron de la actividad. Los alumnos

también expresaron cambios emocionales, aumentando el interés y bienestar, y disminuyendo la ira, la

ansiedad y el aburrimiento (Randler et al.2005).

Page 14: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

7

Otro ejemplo es el proyecto desarrollado en Eslovenia por Tomazic (2008) con estudiantes de

séptimo grado, donde los resultados señalan que los estudiantes que tuvieron experiencias directas

anteriores con anfibios, en general reportan una actitud más positiva hacia ellos. Sin embargo,

independientemente de si tenían alguna experiencia previa con ellos, el uso de animales vivos en el

aula tuvo un efecto importante en las actitudes de los estudiantes hacia las especies. Los estudiantes

que participaron del trabajo práctico con animales vivos en el aula y que han tenido una experiencia

directa anterior mostraron un mayor nivel de conocimiento y retención del conocimiento.

En Chile también se han realizado algunos proyectos de educación ambiental sobre anfibios, como

por ejemplo el proyecto “Indagando formas, colores y cantos de nuestros anfibios” realizado por la

Organización No Gubernamental Aumen, durante el año 2011 en la región de Aysén (45° 24’S). En

este proyecto las actividades de valoración permitieron que los niños aumentaran su conocimiento

acerca de la biología y ecología de los anfibios, y el estudio de la comunicación de estos animales a

través de sus cantos. Esta iniciativa fue el punto de partida para que actualmente tres jóvenes que

participaron del proyecto sean los responsables del trabajo en terreno del plan de monitoreo de Alsodes

coppingeri en su localidad, y de otros proyectos relacionados con la difusión, educación y conservación

de los anfibios de la Región de Aysén.

Otro ejemplo de un proyecto de educación ambiental sobre anfibios desarrollado en Chile es el

proyecto “Educación Ambiental y Puesta en Valor para la Conservación de anuros alto andinos de la

región Tarapacá” ejecutado por la Fundación de Estudios para la Conservación y Manejo Sustentable

de Biodiversidad (ECOMABI), el que tuvo como resultado ampliar el conocimiento sobre los anfibios

de la región, lograr la sensibilización del entorno local acerca de la importancia de los anfibios, su

apreciación y la necesidad de su conservación. Sin embargo, ninguno de estos proyectos evaluó los

resultados de las actividades de educación ambiental. En el caso del sitio prioritario Mehuín - Río

Lingue, no se han realizado actividades de educación ambiental enfocadas en anfibios, a pesar de tener

especies únicas en el mundo.

Page 15: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

8

3. METODOLOGÍA

3.1 Área de estudio

El estudio se realizó en la localidad de Mehuín (39° 26’ S y 73° 12’ W), ubicado a 70 kilómetros al

norte de Valdivia, XIV Región de los Ríos. Mehuín posee una población de aproximadamente 1.135

habitantes (censo 2002) y constituye uno de los principales centros poblados del área costera en la

comuna de San José de la Mariquina (GORE, 2009). A su vez en los alrededores de Mehuín existen una

serie de comunidades y pequeñas localidades donde habitan fundamentalmente población de

ascendencia indígena (Hermosilla, 2010). Según el censo de 2002 las principales actividades

económicas que se desarrollan en Mehuín corresponden al comercio (25,2%) seguido de la pesca

artesanal (23,6%). Esta zona presenta un clima templado lluvioso con influencia oceánica, se

caracteriza por altas precipitaciones y temperaturas moderadas, con una amplitud térmica diaria de

11°C (Smith et al. 2005).

Figura 1. Área de estudio.

Page 16: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

9

3.2 Escuela y grupos focales de este estudio

La localidad de Mehuín cuenta con un solo establecimiento educacional de tipo municipal (Liceo

Politécnico de Mehuín), el cual imparte enseñanza básica y media. La comunidad escolar está

conformada por 23 docentes y 175 estudiantes (26 alumnos de enseñanza pre básica, 66 alumnos de

enseñanza básica y 83 alumnos de enseñanza media). Los estudiantes pertenecen y viven en su mayoría

en la comunidad de Mehuín, o en los alrededores cercanos, siendo un gran porcentaje de los alumnos

de descendencia indígena. Mientras que la mayoría de los profesores viven en la localidad de San José

de la Mariquina y/o Valdivia y viajan todos los días a Mehuín. Solo un profesor vive en la localidad de

Mehuín (comunicación personal de la secretaría del establecimiento).

Debido a la baja matricula anual de estudiantes, en promedio 11 alumnos por curso, la mayoría de

los cursos de enseñanza básica se encuentran combinados, por ejemplo 1° y 2° año básico comparten

una misma sala de clases, lo mismo ocurre con 3° y 4° año, y con 5° y 6° año básico. Por lo tanto para

este estudio es importante mencionar que el establecimiento educacional no cuenta con cursos

paralelos.

3.3 Diseño de estudio

Como primer paso, se realizó una encuesta a estudiantes de enseñanza básica y profesores para

determinar la percepción hacia los anfibios. Posteriormente se ejecutó un proyecto de educación

ambiental con un conjunto menor de estudiantes, en donde la mitad de los estudiantes tuvieron

experiencias de sala y campo y la otra mitad no tuvo participación en las actividades del proyecto. Una

vez finalizadas las actividades, se realizaron encuestas y dibujos para analizar la adquisición de

conocimiento y valoración de los anfibios, contrastando los resultados antes y después del proyecto y la

interacción con y sin actividades.

3.3.1 Percepción sobre anfibios

Para evaluar la percepción de la comunidad escolar acerca de los anfibios se realizó una encuesta

sobre las preferencias, actitudes y conocimientos que presentan las personas frente a este grupo de

animales, como primer paso en la elaboración de un programa de educación ambiental que responda a

los intereses y necesidades educativas locales.

La encuesta estuvo dirigida a dos grupos focales: a) alumnos de enseñanza básica de 3°, 4°, 5°, 6°,

7° y 8° año básico y b) profesores del establecimiento educacional. Los cuestionarios se aplicaron

Page 17: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

10

durante el mes de septiembre del 2014 a los estudiantes (n=57), antes de iniciar el proyecto piloto de

EA, y durante el mes de noviembre a los profesores (n=10), completando 67 encuestas entre ambos

grupos focales.

La encuesta consistía en 10 preguntas, cuyas posibles respuestas se presentaban en forma de

alternativas, verdadero y falso y respuestas abiertas (ver encuesta en anexo 2).

3.3.2 Evaluación de la efectividad del proyecto de educación ambiental

Con apoyo de la Dirección de Asuntos Estudiantiles (DAE) de la Universidad Austral de Chile se

desarrolló el proyecto titulado “Anfibios, Naturaleza y Cultura”, el cual consistió en la realización de

actividades de educación ambiental sobre anfibios con alumnos de 5° y 6° año básico, (total = 15

alumnos). Las actividades se desarrollaron mediante talleres tanto en aula como en terreno impartidos

en cinco sesiones entre los meses de septiembre y noviembre del 2014 (ver detalle de actividades en

cuadro 1). La duración de cada sesión en aula contempló dos horas pedagógicas, correspondientes a 90

minutos, mientras que la salida a terreno se realizó en una jornada de 4 horas. El programa incluyó

actividades para los distintos estilos de aprendizaje de los niños (visual, auditivo y táctil o kinestésico).

Cuadro 1. Detalle de las actividades realizadas en el proyecto de educación ambiental “Anfibios,

Naturaleza y Cultura”.

Nombre taller Fecha Objetivo y breve descripción del taller

“Los anfibios, un mundo nuevo

por conocer”

23 de septiembre Taller de carácter introductorio en el que se

trataron temas relativos a las principales

características de los anfibios, tales como el

hábitat en el que viven, principales formas de

reproducción, y diversidad de anfibios de la

cordillera de la costa valdiviana. Además de

hablar acerca de los mitos que existen sobre

las ranas, y de las principales amenazas hacia

su conservación.

“Jugando descubro el ciclo de

vida de los anfibios”

30 de septiembre Taller cuyo objetivo fue dar a conocer el ciclo

de vida de los anfibios. El taller consistió en

una parte teórica, complementada con una

parte práctica en la que se realizó un juego en

Page 18: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

11

el cual los niños debían armar el ciclo de vida

de una rana por medio de piezas que se

encontraban escondidas en distintos sitios del

liceo, a la cual llegaban por medio de pistas

que se les entregaban.

“Conociendo la morfología de

los anfibios a través de la

papiroflexia”

14 de octubre Se realizó una charla sobre las principales

características morfológicas y anatómicas de

los anfibios, tales como el número de dedos

que tienen en las patas, su sistema respiratorio,

etc. Luego los niños armaron un origami de

algunas especies de ranas de la cordillera de la

costa valdiviana, tales como la rana verde de

Mehuín (I. acarpicus), la rana de hojarasca de

Mehuín (E. migueli), la rana grande de

hojarasca (Eupsophus vertebralis) y la rana

jaspeada (Batrachyla. antartandica). Dicho

material educativo fue diseñado especialmente

para esta actividad (anexo 3 y 4).

“Presentación obra teatral

Ranas de la Cordillera de la

Costa Valdiviana: juego,

observo y aprendo”

21 de octubre Se presentó una obra de títeres, cuyo objetivo

principal fue dar a conocer la diversidad de

anfibios del Sitio Prioritario Mehuín – Río

Lingue, los cantos de estas especies, los

hábitats que utilizan, y se colocó énfasis en el

significado de la palabra endemismo. La obra

narraba la historia de Julito, una pequeña

ranita que descubre el mundo de los anfibios a

través de un viaje por la cordillera de la costa

valdiviana que lo lleva hasta Mehuín, este

viaje le permite descubrir otras especies de

ranas tan importantes y singulares como él.

Salida a terreno 11 de noviembre Para promover el interés y descubrimiento de

los anfibios que habitan en el Sitio Prioritario

Page 19: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

12

Mehuín – Río Lingue, se realizó una campaña

de terreno a la comunidad indígena de Villa

Nahuel (anexo 5). Para ello, primero se realizó

una charla sobre cuidado del hábitat y posibles

lugares donde encontrar anfibios. En esta

actividad se formaron cinco grupos guiados

por dos estudiantes de la Universidad Austral

de Chile. Una de las personas de cada grupo

tomó registro en una ficha en la cual se

especificó la especie y el hábitat donde fue

encontrado el individuo.

Para determinar si las actividades de educación ambiental influyen en el conocimiento y

valoración de anfibios por parte de los niños, se realizó un análisis comparativo antes y después del

proyecto en dos grupos de niños. Un grupo (5° y 6° básico) que asistió a los talleres de educación

ambiental y un segundo grupo de niños que no asistió a los talleres de educación ambiental. Fue

imposible tener dos grupos de comparación idénticos, ya que en el Liceo no hay cursos paralelos y éste

es el único establecimiento educacional de la localidad. Por lo tanto se eligió al grupo sin actividades

de educación ambiental a los niños de 3° y 4° año básico (n=22 alumnos), para que ambos grupos

fueran lo más similares posibles.

Para cada grupo de niños (con y sin actividades de educación ambiental) se evaluó el

conocimiento y valoración de los anfibios al inicio del proyecto y al finalizar el proyecto.

Como “conocimiento” definimos a la información incorporada en los mecanismos de

razonamiento de las personas. Los datos de “conocimiento” fueron recolectados por medio de

encuestas y dibujos (ver encuesta en anexo 6). La encuesta incluía preguntas abiertas y cerradas acerca

de la biología, diversidad y reconocimiento de este grupo de vertebrados, mientras que los dibujos

trataban sobre “las ranas y su hábitat”. En estas ilustraciones se analizaron dos puntos: a) si la rana

dibujada representaba una rana “real” o “idealizada” (tipo dibujo animado); b) si el hábitat donde se

encuentra la rana también es “idealizado” o no.

Page 20: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

13

Como “valoración” definimos la apreciación e importancia que las personas le dan a los objetos.

Los datos de valoración fueron recolectados a través de una encuesta tipo likert, en donde los niños

responden ciertos enunciados (afirmativos y negativos) en el cual expresan su grado de acuerdo o

desacuerdo frente a cada ítem mediante una escala que va de 1 (muy en desacuerdo) a 5 (muy de

acuerdo), La encuesta incluyó enunciados de valores culturales, éticos, intrínsecos (ver encuesta en

anexo 7).

Las encuestas (para medir el conocimiento y para medir la valoración) fueron contestadas por

ambos grupos de niños antes del inicio del proyecto en el mes de septiembre del 2014 e

inmediatamente finalizado el proyecto en el mes de noviembre del 2014. El dibujo “las ranas y su

hábitat” también se repitió antes y después del proyecto para ambos grupos de niños.

3.4 Análisis de datos

3.4.1 Encuesta de Percepción

Los resultados de la encuesta de percepción, realizada a la comunidad escolar, se analizaron con

estadística descriptiva. En seis de las diez preguntas de la encuesta fue necesario analizar por separado

las respuestas de los profesores de las respuestas de los niños. Esto se realizó en aquellas preguntas

donde se observó mayor diferencia en el tipo de respuestas.

3.4.2 Análisis de Conocimiento y Valoración

Para el análisis de los resultados de la encuesta de conocimiento primero se transformaron las

respuestas abiertas a categorías. Por ejemplo las respuestas a la pregunta ¿dónde viven las ranas? se

agruparon en 5 categorías diferentes y lo mismo se hizo para las otras preguntas abiertas. Para el

análisis de los dibujos, se tomaron en cuenta dos elementos: el hábitat de la rana y la especie de rana

dibujada. Estos resultados se categorizaron como: rana “real” v/s rana “idealizada” y hábitat “real” v/s

hábitat “idealizado”.

Todas las respuestas categorizadas de las encuestas de conocimiento, valoración, como de los

dibujos fueron transformadas a datos cuantitativos; es decir, a cada respuesta se le dio un valor

numérico (por ejemplo de 1 a 5 en el caso del hábitat de las ranas, ya que se tenían 5 categorías).Para

determinar si existen diferencias significativas en las respuestas de los niños antes y después de los

talleres de educación se realizó una prueba t de Student pareado para las respuestas de ambos grupos de

niños (el que recibió actividades de EA, y el que no recibió actividades de EA). Esta prueba se realizó

Page 21: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

14

para las encuestas y para los dibujos. Este tipo de prueba estadística se usa para comparar los

promedios de dos muestras pareadas. La prueba se emplea en diseños previos y posteriores sobre los

mismos individuos. En este caso sólo incluimos en el análisis de los datos a los alumnos que

respondieron las encuestas y realizaron los dibujos tanto antes y después de las actividades. Por lo que

se excluyeron aquellas encuestas y/o dibujos que fueron realizados en solo una ocasión (solo antes o

solo después de las actividades). Para la prueba estadística se estableció como nivel de significancia de

p < 0,05.

4. RESULTADOS

4.1 Percepción sobre anfibios

Los resultados previos al desarrollo del programa de educación ambiental muestran preferencia de

las personas por especies carismáticas, con numerosos mitos negativos sobre los anfibios, cierta

capacidad de reconocer anfibios y desconocimiento sobre los problemas generales de conservación que

afectan a la biodiversidad, particularmente a la de anfibios.

4.1.1 Preferencia de las personas hacia ciertas especies de animales.

Al analizar la preferencia de las personas sobre seis especies de animales que se entregaron como

alternativa (gráfico 1), el 48,4% de las personas elige en primer lugar de preferencia el puma (Puma

concolor) y el 32,8% de las personas elige como primera preferencia a la mariposa. Por el contrario el

40,6% y 32,8% de los niños eligen en última preferencia la araña y la culebra respectivamente. Por otra

parte, la rana no se encuentra ni entre los animales más preferidos, ni entre los menos preferidos. El

mayor porcentaje de personas (31,3%) la coloca en el cuarto lugar de preferencia.

Page 22: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

15

Gráfico 1. Resultados de la pregunta “Ordena estos animales del 1 al 6 según tu preferencia” (1 =

mayor preferencia; 6 = menor preferencia). N=67.

Por otra parte, al analizar las respuestas de las personas respecto a su preferencia (frente a 6

alternativas) de tener ciertas especies de animales como mascotas, el 53,7% de las personas prefieren el

gato y el 44,8% prefieren al loro, mientras que la culebra y la rana se encuentran en el último lugar con

un 7,5% de preferencia cada una.

4.1.2 Mitos y verdades sobre las ranas

Al consultar si conocían algún mito o leyenda sobre las ranas, la totalidad de los encuestados

señaló no conocer ningún mito o leyenda. Sin embargo, cuando se les preguntó si las ranas habitan en

lugares sucios, tales como aguas servidas y basurales, el 56,14% de los niños respondió que la

afirmación era verdadera, mientras que el 43,86% contestó que era falsa. En cambio el 100% de los

profesores respondió que dicho enunciado es falso.

De la misma manera, cuando se les preguntó si las ranas provocan enfermedades a la piel, tales

como verrugas, la mayoría de los niños (89,47%) respondió que la afirmación era verdadera, mientras

que la minoría (10,53%) contestó que era falso. Por otro lado los profesores respondieron

mayoritariamente (90%) que esto es falso.

0

20

40

60

80

100

primer segundo tercero cuarto quinto sexto

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

Lugar de preferencia

araña

culebra

rana

picaflor

mariposa

puma

Page 23: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

16

4.1.3 Reconocimiento de especies

Cuando se les preguntó si conocían alguna rana del lugar dónde viven el 85,96% de los niños

señaló que sí conocían ranas de su localidad y tan solo el 14,04% de los niños dijo que no conocía. En

contraparte el 60% de los profesores mencionó no conocer ranas de la localidad de Mehuín, mientras

que el 40% dijo que sí conocía. En cuanto a dónde han visto ranas, las personas que sí han visto

respondieron que las han encontrado en el patio de su casa, en la piscina y en el patio del colegio, y en

el cerro.

En cuanto a si conocían o habían visto algunas de las especies que se les mostraron en imágenes, la

rana más conocida fue Pleurodema thaul (41,79%), seguido de Eupsophus migueli (40,30%),

Batrachyla antartandica (35,82%), y la especie tropical Agalychnis callidryas (29,85%). En cambio la

rana menos reconocida fue Insuetophrynus acarpicus (19,40%).

4.1.4 Conservación de anfibios

Al consultar “Los científicos señalan que las ranas están desapareciendo ¿crees tú que esto

representa algún problema?”, el 77,19% de los niños mencionó que sí sería un problema, y entre sus

argumentos hacían mención a que las ranas cumplen un rol en el ecosistema (27,78%), se afectaría la

cadena alimenticia (11,11%), y que ellas tienen un valor intrínseco de existir (9,26%) (anexo 8). Por

otra parte el 100% de los profesores estuvo de acuerdo con que si las ranas desaparecieran esto sería un

problema y entre sus argumentos señalaban principalmente que afectaría a la cadena alimenticia (50%),

y que cumplen un rol en el ecosistema (30%) (anexo 9). En cambio, los niños que respondieron que no

sería un problema (19,30%) argumentaron por ejemplo que no aportan al medio ambiente, porque son

asquerosas o porque han visto muchas ranas en el patio de su casa.

Ninguno de los encuestados había participado de alguna actividad de educación ambiental

relacionada con ranas. Cuando se les preguntó si les interesaba participar, el 84,21% de los niños

mencionó que sí les interesaba participar de alguna actividad, solo el 7,02% dijo que no le interesaba

participar. Caso contrario ocurre con los profesores, donde el 50% dijo que no le interesaba participar, y

tan solo el 20% mencionó que si le interesaba. El 30% restante, no respondió o no sabía.

Respecto a qué les gustaría aprender sobre las ranas el 44,93% de los niños dijo que le interesaba

saber aspectos sobre la historia natural de los anfibios, como por ejemplo qué y cómo se alimentan,

cómo se reproducen y dónde, cómo y cuánto viven. El 21,74% de los niños les gustaría aprender

Page 24: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

17

aspectos sobre la morfología y fisiología de las ranas, como por ejemplo qué tamaño pueden tener,

cuánto mide su lengua, cómo y por qué saltan o cómo respiran, escuchan y ven. Al 11,59% de los niños

les interesan otros aspectos de las ranas, como por ejemplo (su origen evolutivo, y su función e

importancia en la naturaleza). Al 3,80% de los niños les gustaría dilucidar las creencias que existen

sobre las ranas (ej. Contagio de verrugas) y el 4,35% de los niños no quiere aprender nada o responde

que no sabe.

En el caso de los profesores, al 40% le gustaría aprender acerca de la función e importancia de los

anfibios, la diversidad de ranas o su origen evolutivo. El 20% respondió que le gustaría conocer

aspectos sobre historia natural de los anfibios, principalmente acerca de su reproducción, y el 30%

respondió que no le interesa saber nada más sobre las ranas.

4.2 Evaluación de la efectividad del proyecto de educación ambiental

4.2.1 Conocimiento sobre anfibios

4.2.1.1 Aspectos biológicos

Al analizar el conocimiento sobre aspectos de biología general de anfibios en el grupo de niños

con actividades de educación ambiental, encontramos que sólo existen diferencias significativas en las

respuestas de los niños antes y después de las actividades al consultarles sobre el hábitat donde viven

los anfibios (t = -2,41; p = 0,02 ver anexo 10).

Antes de las actividades de educación ambiental (de ahora en adelante EA) el 53.8% de los niños

respondió que las ranas sólo viven en cuerpos de agua poco profundos (ej. Pantanos, charcos, esteros,

pozas, estanques). Luego de las actividades de EA el 61,5% de los niños dicen que las ranas viven en

cuerpos de agua poco profundos y también en hábitats sin agua (ej. en la tierra, debajo de piedras y

troncos, en el bosque) (anexo 11).

En cambio, para el grupo de niños que no recibió actividades de EA el 31,3% señaló en la primera

encuesta (antes de las actividades de EA) que las ranas viven sólo en cuerpos de agua poco profundos,

respuesta similar a la obtenida en la encuesta post- EA, donde el 37,5% siguió respondiendo que las

ranas sólo viven en cuerpos de agua poco profundos (anexo 12).

No se encontraron diferencias significativas en las respuestas entre el antes y después de ambos

grupos de niños (con y sin educación ambiental) al consultarles sobre el ciclo de vida de las ranas. En

el grupo de niños con actividades de EA, el 92,3% ordenó de manera correcta las distintas etapas del

Page 25: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

18

ciclo de vida de una rana antes de las actividades, y el 100% después de las actividades. En el grupo de

niños sin actividades de EA el 87,50% lo hizo de forma correcta antes y el 93,75% después. Al

consultar si las ranas ponen huevos, encontramos diferencias significativas (t = 2,09; p = 0,03; ver

anexo 10) entre el antes y el después de las actividades en el grupo de niños sin actividades de EA. En

el antes el 62,50% afirma que las ranas sí ponen huevos. En el después el 87,50% señaló que sí ponen

huevos. En el grupo con actividades de EA, también aumenta el número de niños que indican que las

ranas ponen huevos, pero este aumento no es significativo (84,6% antes y 100% después).

4.2.1.2 Diversidad y reconocimiento de especies

Respecto al conocimiento de la diversidad de anfibios que hay en Chile, no se observaron

diferencias significativas en las respuestas del antes y después de las actividades de EA en ninguno de

los dos grupos de niños (ver anexo 10). En el grupo con actividades de EA, la mayoría de los niños

(61,54%) tiene una estimación correcta de cuántas especies de ranas viven en Chile (alternativa 50 a 70

especies) al inicio del programa. Un tercio de los niños tiene una sobreestimación de la diversidad de

anfibios (alternativa 300 a 500 especies) y una minoría tiene una subestimación de la diversidad de

anfibios (alternativa 5 a 10 especies). No existió un cambio en estas cifras luego de las actividades de

EA.

Para el grupo sin actividades de EA, en el antes, la mayoría de los niños (37,50%) tiene una

sobreestimación de la diversidad de anfibios y un cuarto estima correctamente el número de especies de

ranas en Chile. Estas cifras varían en el después, donde el 56,25% de los niños indican la alternativa

correcta.

También se analizó el conocimiento que tienen los niños acerca de las especies de ranas que viven

en Mehuín. Para esto tenían que identificar visualmente si es que las especies que se mostraron con

imágenes vivían en su localidad o no. Para el grupo de niños sin actividades de EA, la especie más

reconocida fue el sapito de cuatro ojos (Pleurodema thaul), seguido por la rana de hojarasca de Mehuín

(Eupsophus migueli). Las especies menos reconocidas fueron la rana verde de ojos rojos (Agalychnis

callidryas) y la rana verde de Mehuín (Insuetophrynus acarpicus). Por otra parte, encontramos que sólo

existen diferencias significativas entre el antes y después de las actividades en el grupo sin EA para el

sapito de cuatro ojos (Pleurodema thaul) (t=-2,23, p=0,02). En el tratamiento antes, el 93,75% de los

niños indica que si vive en la localidad de Mehuín, mientras que en el después sólo el 68,75% de los

niños indica que si vive en Mehuín (gráfico 2). No hay diferencias significativas entre el antes y

Page 26: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

19

después para las otras cuatro especies: rana de hojarasca de Mehuín (E. migueli), rana verde de Mehuín

(I. acarpicus), la rana de antifaz (B. taeniata) y la rana verde de ojos rojos (A. callidryas).

Gráfico 2. Resultados de la pregunta “¿Cuáles de estas especies de ranas piensas que viven en

Mehuín?”. Respuestas del grupo sin actividades de educación ambiental. (* p< 0,05).

En el grupo de niños con actividades de EA, hay diferencias significativas en el porcentaje de

reconocimiento entre el antes y el después de las especies I. acarpicus, E. migueli y P. thaul. En el

antes las especies que presentan mayores porcentajes de reconocimiento son B. taeniata (61,54%) y E.

migueli (53,85%), mientras que las especies con menor porcentajes de reconocimiento son I. acarpicus

(7,69%) y A. callidryas (7,69%). Estos resultados cambian drásticamente después de las actividades de

EA y las especies endémicas I. acarpicus y E. migueli son reconocidas por la totalidad de los niños

(gráfico 3).

0

20

40

60

80

100

Ranaverde deMehuín

Ranaverde de

ojos rojos

Sapito decuatroojos

Ranita deantifaz

Rana dehojarasca

deMehuín

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

Especie de anfibio

Antes sinactividadesEA

DespuéssinactividadesEA

*

Page 27: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

20

Gráfico 3. Resultados de la pregunta “¿Cuáles de estas especies de ranas piensas que viven en

Mehuín?”. Respuestas del grupo con actividades de educación ambiental. (* p< 0,05).

Por otra parte cuando se les preguntó si saben si hay ranas que son sólo del lugar donde viven, para

el grupo sin actividades de EA, en el antes el 50% señaló que no sabía, en el después el 76,92% dice

que no sabía. Para el grupo con actividades de EA, en el antes, el 56,25% dice que no sabía, en el

después el 92,31% dice que sí sabe (anexo 13).

4.2.1.3 Mitos

También se consultó a los niños sobre la creencia en ciertos mitos que existen sobre los anfibios.

En particular se les preguntó si las ranas habitan en lugares sucios, tales como cuerpos de agua servida,

basurales, etc. y si las ranas provocan enfermedades a la piel tales como verrugas. Para ambas

preguntas hubo diferencias significativas entre el antes y después para el grupo de niños con

actividades de EA. No se encontraron diferencias significativas entre el antes y después para el grupo

de niños sin actividades de EA (ver anexo 10).

En el grupo de niños con actividades de EA, el 38,46% señaló que las ranas habitan en lugares

sucios. Sin embargo luego de las actividades sólo el 7,69% señala que esto es verdadero (gráfico 4).

Las respuestas del grupo sin actividades de EA no son contrastantes. En el antes el 68,75% afirma

que las ranas habitan en lugares sucios. En el después el 81,25% indica que esta afirmación es

verdadera (gráfico 4).

0

20

40

60

80

100

Ranaverde deMehuín

Ranaverde deojos rojos

Sapito decuatroojos

Ranita deantifaz

Rana dehojarasca

deMehuín

Porc

enta

je d

e re

spue

sta

Especie de anfibio

Antes conactividadesEA

DespuésconactividadesEA

*

* *

Page 28: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

21

Gráfico 4. Resultados de la pregunta “¿Las ranas habitan en lugares sucios, tales como charcas con

aguas servidas, basurales, etc.?” (* p< 0,05).

Respecto al mito de que las ranas provocan enfermedades a la piel tales como verrugas, para el

grupo con actividades de EA el 100% señala antes que esta afirmación es verdadera (gráfico 5). Sin

embargo en el después tan sólo el 7,69% señala que esto es verdadero. Las respuestas del grupo de

niños sin actividades de EA no varían mayormente en el antes y después. En ambos test más del 80%

de los niños indican que las ranas provocan enfermedades a la piel.

Gráfico 5. Resultados de la pregunta “¿Las ranas provocan enfermedades a la piel tales como

verrugas?” (* p< 0,05).

0

20

40

60

80

100

sinactividades

sinactividades

conactividades

conactividades

Antes Después Antes Después

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

V

F

sinresponder

*

0

20

40

60

80

100

sinactividades

sinactividades

conactividades

conactividades

Antes Después Antes Después

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

V

F

sinresponder

*

Page 29: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

22

4.2.1.4 Dibujos

En el caso de los dibujos para el hábitat de la rana no hubo diferencias significativas en el grupo

sin actividades (t = -1,00; p = 0,17). En el antes el 100% de los niños dibujó un hábitat idealizado de la

rana, en el después, la mayoría (93,33%) seguía dibujando un hábitat idealizado de la rana (ver dibujos

en anexo 14 y 15). En cambio se observaron diferencias significativas entre el antes y el después para

el grupo con actividades (t = -3,92; p = < 0,01). En el antes, un 75% de los niños dibujó un hábitat

idealizado de la rana (ver dibujos en anexo 16 y 17), mientras que en el después sólo un 16,67% sigue

dibujando un hábitat idealizado (gráfico 6).

Gráfico 6. Resultados de los dibujos “Las ranas y su hábitat”. Respuestas del grupo sin actividades de

EA y del grupo con actividades de EA. (* p< 0,05).

En cuanto a la especie de rana dibujada por los niños no hubo diferencia significativa para ninguno

de los dos grupos (gráfico 7). En el caso del grupo sin actividades en el antes un 53,33% dibujó una

especie de rana “idealizada” y en el después un 60% también dibujó una rana “real” (t = 1,00; p =

0,17). Sin embargo para el grupo con actividades un 33,33% dibujó una rana “idealizada” en el antes,

porcentaje que disminuyó a un 16,67% en el después. (t = -1,48; p = 0,08)

0

20

40

60

80

100

Sinactividades

Sinactividades

Conactividades

Conactividades

Antes Después Antes Después

Porc

enta

je d

e di

bujo

s

Hábitat Idealizado

Hábitat Real

*

Page 30: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

23

Gráfico 7. Resultado de los dibujos “Las ranas y su hábitat”. Respuestas del grupo sin actividades de

EA y del grupo con actividades de EA.

4.2.2 Valoración de anfibios

Ambos grupos de niños presentaron una alta valoración con respecto a ciertas afirmaciones tales

como “Cuidar el bosque nativo es muy importante”, “Hay que cuidar los animales que viven en el

bosque”, “Me preocupa el cuidado del medio ambiente” y “Es importante proteger el lugar donde

habitan las ranas” antes de las actividades de EA (anexo 18 y 19). Además se observa que ambos

grupos presentan también una alta valoración en afirmaciones como “Es interesante descubrir donde

viven las ranas” y “Es interesante conocer los colores de las ranas”.

Sin embargo, para el grupo de niños con actividades de EA, hubo diferencias significativas entre el

antes y el después para tres de los quince enunciados (ver anexo 19): “Es útil conocer las ranas que

viven en mi localidad”; “Es importante cuidar las ranas” y “Los cantos de las ranas son desagradables”.

Para los dos primeros enunciados las respuestas varían de “de acuerdo” en el antes a un “muy de

acuerdo” en el después. Y para el tercero las respuestas varían de “en desacuerdo” antes a un “muy en

desacuerdo” después. Se observa que hay una mayor diferencia en las medias entre el antes y el

después en comparación con la diferencia de las medias del grupo sin actividades.

0

20

40

60

80

100

Sinactividades

Sinactividades

Conactividades

Conactividades

Antes Después Antes Después

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

EspecieIdealizada

EspecieReal

Page 31: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

24

5. DISCUSIÓN

Los resultados de este estudio muestran que efectivamente se generan cambios en el conocimiento

y valoración de anfibios en los niños de la localidad de Mehuín, luego de participar en un proyecto de

educación ambiental. Los mayores cambios fueron en el grado de conocimientos y en menor medida se

observaron cambios en la valoración que tienen los niños sobre este grupo de vertebrados.

Percepción local sobre anfibios

Los resultados sobre las percepciones que tiene la comunidad escolar de Mehuín acerca de los

anfibios nos muestran que las ranas no se encuentran ni entre los animales más preferidos ni entre los

menos preferidos por los encuestados. Los animales más preferidos fueron especies más carismáticas y

de aspecto más “atractivo”, como el puma y la mariposa. Los menos preferidos fueron la araña y la

serpiente. Esto concuerda con estudios similares en otras partes del mundo. Por ejemplo Schlegel &

Rupf (2010) muestran que las aves y los mamíferos son más apreciados que los reptiles, insectos

(excluyendo las mariposas) y los anfibios por parte de los niños suizos. Estos autores señalan que las

percepciones y afinidad hacia ciertos grupos de animales tienen estrecha relación con la apariencia. Las

preferencias por los animales también pueden estar influenciados por su presentación en medios de

comunicación masivos, ya que en la televisión se muestran principalmente especies exóticas y

carismáticas (Ballourd et al. 2011).

Por otra parte, algunos investigadores (Schlegel & Rupf 2009, Cairos et al. 2010) apoyan la teoría

de que los anfibios evocan sentimientos de disgusto y/o son considerados como portadores de

enfermedades, por lo que ciertos mitos pueden desencadenar en una valoración negativa hacia ellos.

Esto coincide en parte con nuestros resultados, pues casi el 90% de los niños creyeron en el mito que

tocar ranas provoca la aparición de verrugas. Sin embargo al consultar si les da miedo tomar una rana,

las respuestas fueron muy dispares. Podría ser también que el afecto o aversión hacia una especie

dependa de su imagen simbólica, que se ha generado en el tiempo, influenciado por las culturas y

tradiciones. Esto es interesante ya que para la cultura mapuche los anfibios son reconocidos como

gnecos o espíritus dueños y protectores de las aguas, ya que habitan en las cercanías de los hualves

(pantanos) lugares donde se concentran plantas medicinales (Mera & Lobos, 2008). Pero

sorprendentemente al consultar a los niños si es que conocían alguna historia, mito o leyenda sobre los

anfibios no se obtuvo ninguna respuesta, tomando en cuenta que un gran porcentaje de los niños

encuestados son de descendencia indígena.

Page 32: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

25

No obstante aunque las ranas no se encuentran entre los animales más preferidos por la comunidad

escolar de Mehuín, sí hay una conciencia ambiental sobre los anfibios, pues el 80% de los encuestados

creen que la desaparición de los anfibios sería un problema. Existe por parte de los niños una

valoración positiva hacia los anfibios, que se refleja en su aspecto utilitario (actitud utilitaria, Kellert

1985), principalmente en el rol que cumplen en el ecosistema, y porque forman parte de la cadena

alimenticia.

Existen diferencias en algunas respuestas entre los niños y los profesores. Por ejemplo, la mayoría

de los niños contestaron que sí han visto ranas en su localidad, caso contrario ocurre con los profesores.

Esto se puede deber a que la gran mayoría de los docentes no viven en la localidad de Mehuín, sólo uno

de los 23 profesores vive en Mehuín. También se observan diferencias acerca de lo que les interesaría

aprender sobre las ranas, por ejemplo los niños prefieren saber más sobre aspectos de historia natural

(ej. de qué se alimentan, donde viven, cómo se reproducen), y de morfología y fisiología (ej. tamaño,

cómo saltan, cómo respiran) mientras que a los profesores les interesa saber sobre la función e

importancia de los anfibios, diversidad de ranas o su origen evolutivo. Estas diferencias se pueden

deber a que ambos grupos presentan una notoria diferencia etaria y al conocimiento preexistente que

tienen sobre los anfibios.

Se interpreta como un rasgo favorable que la mayoría de los niños quiera participar en talleres de

educación ambiental sobre anfibios, lo cual favorece cualquier futura intervención que se quiera

realizar. Situación distinta ocurre con los profesores ya que la mayoría no presenta interés en participar

de dichos talleres. Estas diferencias se pueden deber al interés innato que presentan los niños por los

animales, el cual es más alto en estudiantes de primaria, y cambia significativamente después del

quinto y sexto año de escolaridad pues el interés por los animales va cambiando (Kellert, 1985, Löwe,

1987). Pero la falta de interés también puede deberse a las precarias condiciones materiales, sociales y

de salud en las que deben trabajar una gran mayoría de los profesores de nuestro país (Robalino &

Körner, 2005).

En cuanto al reconocimiento de especies, la rana verde de Mehuín es la menos reconocida. Esto se

puede deber a que es una especie difícil de observar, debido a que habita en ambientes muy particulares

y se mimetiza muy bien con su entorno.

Page 33: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

26

Efectividad del Proyecto de Educación Ambiental

En general se observó que el grupo de niños con actividades de EA presentó cambios

significativos en el conocimiento sobre anfibios en el corto plazo. Es decir que el proyecto de

educación ambiental generó diferencias en las respuestas de los niños participantes, entre el inicio del

proyecto e inmediatamente finalizado el proyecto. Principalmente en el conocimiento del hábitat de las

ranas, el concepto de endemismo, el reconocimiento de algunas especies (Insuetophrynus acarpicus y

Eupsophus migueli), y la creencia en los mitos que existen sobre las ranas.

A pesar de que no se evaluó como influyeron las distintas actividades realizadas en la adquisición

de los conocimientos, creemos que parte de las diferencias en el conocimiento pueden deberse a las

actividades que se hicieron en terreno. En la salida a terreno los niños pudieron observar en vivo el

hábitat de las ranas, además tuvieron la experiencia directa de observar las dos ranas endémicas de

Mehuín (Insuetophrynus acarpicus y Eupsophus migueli), las que antes del proyecto no eran

mayormente reconocidas por los niños. La experiencia al aire libre tendría entonces una importancia en

el posterior reconocimiento de especies, así como en el conocimiento sobre los hábitats de las ranas. La

importancia de las actividades de educación ambiental al aire libre es un tema documentado (estudios

de caso en Bogner, 1998, Randler et al. 2005, Llanos, 2013), incluso para trabajar con organismos poco

populares como las culebras (Ballouard et al. 2012). Por ejemplo Cachelin et al. (2009) y Llanos (2013)

en sus investigaciones señalan que los participantes que tuvieron salidas a terreno demostraron una

mayor comprensión cognitiva que los participantes que estuvieron solo en el aula. Sin embargo

plantean que las actividades al aire libre deben estar acompañadas de actividades previas en el aula,

para un mejor aprovechamiento de estas.

Por otro lado es importante mencionar que los niños, tanto del grupo con actividades de EA, como

del grupo sin actividades de EA, comúnmente ven ranas en su localidad y esto no es algo raro para

ellos, ya que por ejemplo muchos mencionaron haber visto ranas en el patio y en la piscina del colegio,

así como también en el patio de su casa, y en el cerro. Lo que sucede es que algunas especies, tal como

Insuetophrynus acarpicus son especies más difíciles de ver, debido a que habitan en arroyos muy

particulares.

También hubo respuestas de los niños con actividades de EA, que no presentan diferencias entre el

antes y el después. No se encontraron diferencias significativas en el conocimiento sobre el ciclo de

vida de las ranas, la diversidad de especies que hay en Chile, y el reconocimiento de las especies

Page 34: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

27

Batrachyla taeniata y Agalychnis callydrias. No se encontraron diferencias en el conocimiento sobre el

ciclo de vida debido a que la mayoría de los alumnos ya poseían un conocimiento acertado acerca del

ciclo de vida de las ranas antes de las actividades de EA. En cuanto al conocimiento sobre la diversidad

de especies que hay en Chile no se generaron diferencias significativas en las respuestas, ya que

probablemente este es un dato no muy importante de recordar para los niños, es sólo un dato numérico

fácil de olvidar. En cuanto al reconocimiento de la especies Batrachyla taeniata no hubo diferencias

significativas ya que posiblemente influyó que el énfasis en el reconocimiento de especies se colocara

en las dos ranas endémicas de Mehuín. Por otra parte Agalychnis callydrias es una especie que habita

en las selvas tropicales (es la única de las cinco especies colocadas en las fichas que no se encuentra en

Mehuín, ni en Chile). Esto hace corroborar la idea de que los niños sí han visto las ranas de su

localidad, por lo que gran parte de los niños desde un inicio reconocía que esta es una especie que no se

encuentra en Chile, lo que siguió siendo afirmado en el después.

Respecto a la valoración de anfibios se apreciaron diferencias significativas para solo tres de los

quince enunciados. Esto se debe principalmente a que desde un inicio los niños poseían una alta

valoración sobre los anfibios. En cuanto a las tres afirmaciones que obtuvieron diferencias

significativas (“Es útil conocer las ranas que viven en mi localidad”; “Es importante cuidar las ranas” y

“Los cantos de las ranas son desagradables”), estas diferencias se pueden deber a que en el desarrollo

del proyecto de educación ambiental, se enfatizó en la importancia de conocer las especies de anfibios

que viven en la localidad de Mehuín, así como en la importancia de su conservación y en las amenazas

que las afectan. Por otro lado, con respecto a los cantos de las ranas, se observaron diferencias

significativas, ya que los cantos se mostraron tanto en la presentación de la diversidad de especies de

anfibios, y se volvieron a presentar en la obra de títeres, donde cada personaje de anfibio mostraba su

canto al presentarse. El canto de las ranas es otra forma de conocer a los anfibios, ya no tan solo a

través de forma visual, (colores, formas, tamaños), sino también utilizando el sentido de la audición, el

que muchas veces no es muy reforzado o utilizado cuando queremos hablar de biodiversidad, y solo

utilizamos la vista como sentido capaz de lograr un cambio en el aprendizaje de los niños. Además

debemos tomar en cuenta que la encuesta likert solo permite optar por cinco opciones.

En cuanto al grupo de niños que no tuvo actividades de EA, se esperaba que éstos no presentaran

grandes cambios de conocimiento y valoración de anfibios entre el antes y después. Sin embargo esto

no ocurrió del todo así, ya que se observaron diferencias significativas en algunas respuestas acerca del

conocimiento de anfibios. Caso similar ocurre en el trabajo de Randler et al. (2005) en donde compara

Page 35: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

28

aspectos cognitivos en dos grupos de niños (uno que participo de actividades al aire libre y otro grupo

que no participó), y en donde observó cambios significativos en algunas de las respuestas del grupo

control respecto del grupo experimental. En este estudio se observaron diferencias significativas en tres

de las trece preguntas acerca del conocimiento de anfibios para el grupo sin actividades. Dos de las tres

respuestas con diferencias significativas (para las pregunta “¿Sabes si hay ranas que son solo del lugar

dónde vives?” y al reconocimiento de la especie Pleurodema thaul) corresponden al aumento de

respuestas incorrectas en el después. Solo una respuesta la que correspondía a si las ranas colocan

huevos, obtuvo un aumento en la respuesta correcta.

Sin embargo es importante recalcar que no se observaron diferencias significativas en la

valoración de anfibios para el grupo sin actividades

Metodologías del proyecto educativo

Durante el desarrollo del proyecto se trató de evitar que casi todo los que aprendieran los niños

fuera mediante recepción memorística. Por lo contrario, se trató de generar experiencias significativas,

ya sea por la vía del descubrimiento o de la recepción. Entonces respecto a las metodologías y al

material didáctico escogido para desarrollar las actividades de EA, creemos importante mencionar que

los origamis tuvieron una buena acogida por parte de los niños, ya que fueron ellos mismos los que

armaron su ranita de papel, permitiendo además trabajar la motricidad fina. De manera informal, los

niños nos hicieron saber que les gustó la actividad de los origamis y la de títeres.

Sería interesante para trabajos futuros hacer una evaluación del proceso del proyecto educativo. Es

decir cuáles metodologías y/o materiales didácticos son más significativos en el aprendizaje y cómo

influyen en la generación de conocimientos, habilidades y actitudes ambientales.

Instrumentos de evaluación

En forma global, los resultados que se obtienen de las evaluaciones de un proyecto de educación

ambiental dependen bastante de los instrumentos de evaluación empleados. Por ejemplo, un posible

defecto de los instrumentos de evaluación es que no exista una correspondencia entre lo que se quiere

medir y lo que se mide realmente. Otros problemas son la tendencia de las personas a responder para

satisfacer las expectativas del encuestador y la dificultad del lenguaje para que todos perciban,

entiendan e interpreten exactamente lo mismo cuando leen la frase de un cuestionario (Manassero et al.

2002). Para tratar de minimizar estos posibles factores que influyen en los resultados, generalmente se

Page 36: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

29

hace una validación del instrumento de evaluación antes de aplicarlo, que en este trabajo de tesis no se

hizo. Y observamos que algunas preguntas no fueron totalmente comprendidas por los niños y tuvieron

que ser explicadas verbalmente al momento de tomar la encuesta. Por lo tanto creemos que en futuras

evaluaciones es importante validar los instrumentos de evaluación antes de aplicarlos.

Pero cabe mencionar que en este trabajo los dibujos actuaron como un instrumento de evaluación

que permitió observar principalmente cambios acerca de cómo ven los niños el hábitat de las ranas.

Pudiendo observar que en un inicio muchos dibujan un hábitat idealizado de la especie, el que en el

después para el grupo con actividades de EA cambia significativamente (ver dibujos en anexo 13 y 14).

Es aquí donde observamos que el dibujo puede actuar como una herramienta complementaria a la

encuesta escrita, lo que a su vez enriquece la evaluación. Siendo ésta una forma más entretenida y fácil

de abordar por los niños que el solo hecho de responder una pregunta a través de la escritura. Por lo que

se recomienda en futuros estudios utilizar más de un instrumento de evaluación, como en este caso son

los dibujos.

Además se observó que casi no existen cambios en los dibujos realizados en el antes y después

para el grupo sin actividades. Barraza (2006) en su investigación en materia de educación para la

conservación de tortugas y orquídeas obtiene información valiosa a partir de dibujos infantiles

realizado por niños mexicanos. Y señala que si bien el análisis del dibujo ha sido un instrumento de

evaluación muy poco utilizado en las ciencias ambientales, su aplicación ha revelado ser una

importante herramienta cualitativa para evaluar conocimientos, percepciones y actitudes ambientales en

la población.

Implicancias de estos resultados

En este proyecto piloto trabajamos con un grupo de vertebrados que no ha sido muy abordado en

proyectos de educación ambiental, si bien son uno de los grupos de animales más amenazados a nivel

global. Trabajamos además en una localidad donde habitan especies de anfibios con altas categorías de

amenazas como Insuetophrynus acarpicus y Eupsophus migueli. Por lo que iniciativas como estas

cobran importancia cuando permiten a la comunidad tener un contacto de primera mano con la fauna

local, más aun cuando son especies tan desconocidas y difíciles de observar. Estas iniciativas permiten

además sensibilizar a las personas acerca de la importancia de la conservación de estas especies y del

patrimonio natural que poseen.

Page 37: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

30

Algo muy importante de mencionar es que este tipo de proyectos pueden ser desarrollados a partir

de intervenciones en las escuelas, como centro donde confluyen diversos actores sociales. Si bien en

este estudio se evaluaron los cambios en el conocimiento y valoración de anfibios por parte de los

niños, hubo distintos actores sociales que de forma indirecta también participaron en el desarrollo del

proyecto, tales como el director del liceo, la secretaria y algunos profesores. Además de forma

extraoficial algunos apoderados nos hicieron saber que notaban a sus hijos muy entusiasmados en la

participación del proyecto, y que los niños estaban más atentos cuando veían y/o escuchaban cantar a

los anfibios. De la misma forma, cuando se requirió realizar la salida a terreno con los niños, esto fue

posible gracias al apoyo y autorización de don Isaac Nahuelpan, el que nos permitió realizar la salida a

terreno en Villa Nahuel, específicamente en terrenos de su propiedad. Particularmente esta salida a

terreno fue muy interesante, ya que encontramos en el arroyo un individuo de I. acarpicus, especie que

no estaba documentada en ese arroyo, lo cual fue una agradable sorpresa, ya que permitió que los niños

pudieran conocer la especie, así como que don Isaac pudiera conocerla y saber que en su predio

habitaban las dos ranitas endémicas de Mehuín. Por lo tanto mucho de lo que podamos lograr en

materia de educación ambiental y/o de conservación de la biodiversidad tiene que ver directamente con

las relaciones que se generan entre las personas. Las que hacen posible o no los cambios que

necesitamos generar.

Otro de los aspectos relevantes de mencionar es la importancia de realizar proyectos de educación

ambiental en zonas rurales, ya que por un lado muchos proyectos de educación ambiental son

desarrollados en ciudades o en áreas urbanas, lugares de más fácil y rápido acceso. Y además las zonas

rurales son las zonas que más están sufriendo el cambio de uso de suelo, una de las principales

amenazas y causas de la declinación global de anfibios.

Por otra parte los resultados de este estudio pueden servir como base para futuros programas de

educación ambiental para la conservación de especies de anfibios en Mehuín, tales como el que se

quiere realizar a futuro, que consiste en un proyecto de conservación para el Sitio Prioritario Mehuín –

Río Lingue, el cual será financiado por el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF).

Finalmente la evaluación de programas de educación ambiental nos permite obtener información

acerca de la efectividad de un programa. Proporciona información acerca de lo que fue significativo

para los niños, y lo que no. Y entrega información sobre cómo podemos mejorar futuros programas. En

este contexto, es importante mencionar que en Chile casi no se realizan evaluaciones de programas de

Page 38: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

31

educación ambiental. Por lo que es un área que no ha sido muy interiorizada y que posee grandes

desafíos para ser abordada.

Lineamientos para un futuro programa de educación ambiental para la conservación de anfibios

En base a los resultados obtenidos y a la experiencia de realizar este trabajo, proponemos

lineamientos para un futuro programa de educación ambiental para la conservación de anfibios de

Mehuín. Proponemos que estos programas deben vincular las percepciones que poseen las personas con

las temáticas a abordar en el programa de educación ambiental y adecuarse al contexto local en el que

viven las personas. Por ejemplo cuando sabemos lo que a las personas les interesa conocer sobre las

ranas, podemos utilizar esta información para diseñar programas que se adapten más a lo que las

personas quieren saber, que a lo que el educador pretende imponer.

Cuando sabemos por ejemplo el lugar dónde las personas han visto las especies de ranas, podemos

usar esta información para identificar cuáles son las potenciales especies que ellos han observado

mayormente y planificar salidas a terreno que contemplen lugares donde habiten estas especies. Así

como también visitar distintos tipos de ambientes donde habitan las ranas, ya sea ambientes de bosque,

arroyos, humedales, etc, dando a conocer la variedad de hábitat en las que viven los anfibios. Así como

también dar a conocer las especies de ranas que las personas todavía no conocen.

Proponemos que es importante realizar salidas a terreno en el entorno local, y que no es necesario

ir muy lejos o recorrer grandes distancias para aprender de biodiversidad. Podemos realizar salidas a

terreno en lugares cercanos, como Villa Nahuel, tomando en cuenta que muchos de los niños que

asisten al colegio viven en ese sector de Mehuín. Y podemos realizar pequeñas exploraciones en el

patio del colegio, que es uno de los lugares más mencionados por los niños a la hora de preguntarles

dónde han visto ranas.

Sugerimos vincular activamente a los padres de los niños en el desarrollo del programa de

educación ambiental y a los profesores, ya que tanto los padres y los profesores son figuras de

referencia para los niños. Y también creemos importante motivar a los profesores, pues son los que

manifestaron tener menos interés en participar de un programa de educación ambiental y son las

personas que están menos involucradas con ese territorio, ya que la mayoría proviene de otros lugares.

Por otra parte es importante la utilización de material didáctico novedoso para los niños, por lo que

constantemente debemos estar innovando en la creación de material educativo. Debemos jugar con

Page 39: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

32

nuestra imaginación y crear desde lo que no hay, podemos utilizar nuevas técnicas. Así como estimular

el uso de los sentidos, no tan solo el visual, sino también el auditivo y el tacto.

Es importante mencionar que muchas veces creemos que el que los niños aprendan el nombre

científico de una especie o aspectos muy específicos de la biología de un animal son temas muy

importantes que los niños deben recordar, cuando en realidad lo que importa es generar experiencias

significativas en el aprendizaje de los niños, que es finalmente lo que les queda en su memoria. Por lo

que los esfuerzos deben estar centrados en generar experiencias nuevas.

Proponemos además que se realicen evaluaciones acerca del proceso del desarrollo del programa y

también evaluaciones sobre cuáles fueron las actividades que más le gustaron a los participantes del

programa de educación ambiental.

Y finalmente creemos que los programas de educación ambiental deben desarrollarse a largo

plazo, ya que los niños demuestran interés en participar de una continuidad del programa y esperan que

no sea un programa que nunca más se va a repetir. De ahí la importancia de la continuidad de los

programas de educación ambiental para que realmente sean efectivos en el tiempo y permitan generar

lazos entre la comunidad educativa y los otros actores sociales de la localidad de Mehuín.

6. CONCLUSIONES

Este proyecto de educación ambiental generó cambios en los conocimientos que tienen los

estudiantes sobre los anfibios y en menor medida se observaron cambios en la valoración que tienen

sobre este grupo de vertebrados.

Las percepciones que posee la comunidad escolar de Mehuín sobre los anfibios nos permite

obtener información valiosa acerca de lo que las personas creen y piensan sobre este grupo de

animales. Esta información es importante a la hora de proponer lineamientos para futuros programas de

educación ambiental para la conservación de anfibios en Mehuín, ya que permite proponer programas

que se acerquen más a lo que las personas quieren o les interesa aprender, que a lo que el educador

ambiental quiere imponer. Además de poder proponer programas de educación ambiental que se

acerquen más a una realidad y a un contexto local.

La evaluación de programas de educación ambiental nos permite obtener información sobre la

efectividad y valor de un programa, nos proporciona información sobre lo que fue significativo en el

aprendizaje de los niños, y nos señala qué podemos mejorar en el diseño de futuros programas. En este

Page 40: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

33

contexto, es importante señalar que en nuestro país es muy poco lo que se hace en materia de

evaluación de programas de educación ambiental, es más casi no se hace. Por lo que es un área que no

ha sido muy interiorizada y que posee grandes desafíos para ser abordada.

Proponemos que para futuros programas de educación ambiental para la conservación de anfibios

en Mehuín se tomen en cuenta las percepciones locales, así como la utilización de métodos de

evaluación de programas de educación ambiental y por sobre todo la realización de actividades al aire

libre.

Finalmente no debemos olvidar que lo más importante cuando llevamos a cabo un proyecto de

educación ambiental es generar experiencias significativas en las personas, para que puedan ser

recordadas en el tiempo.

Page 41: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

34

7. REFERENCIAS

Armesto J, Smith-Ramírez C, León P, Arroyo M. 1992. Biodiversidad y Conservación del Bosque

templado en Chile. Revista Ambiente y Desarrollo. 4:19-24.

Arroyo M, Rozzi R, Simonetti P, Sallaberry M. 1999. Biodiversidad amenazada. Las ecorregiones

terrestres prioritarias del mundo. CIMEX SA, México. 161-171.

Ballouard J, Brischoux F, & Bonnet X. 2011. Children prioritize virtual exotic biodiversity over local

biodiversity. PLoS One, 6 (8): e23152.

Ballouard J, Provost G, Barré D, & Bonnet X. 2012. Influence of a field trip on the attitude of

schoolchildren toward unpopular organisms: an experience with snakes. Journal of

Herpetology, 46 (3): 423-428.

Barahona A. & Almeida-Leñero L. 2006. Educación para la Conservación. Universidad Autónoma de

México. 422 p.

Barraza L. 2006. Educar para conservar: un ejemplo en la investigación socioambiental. En Barahona,

A, y Almeida-Leñero L. (Coord.), Educación para la Conservación. Universidad Nacional

Autónoma de México. p. 237-254.

Barraza L, & Ceja M. 2011. La planeación y la realización de la educación ambiental. Sánchez et al.

Temas sobre conservación de vertebrados silvestres de México. México, 351-371.

Bogner F. 1998. The influence of short-term outdoor ecology education on long-term variables of

environmental perspective. The Journal of Environmental Education, 29 (4): 17-29.

Cachelin A, Paisley K, & Blanchard A. 2009. Using the significant life experience framework to

inform program evaluation: The nature conservancy's wings & water wetlands education

program. The Journal of Environmental Education, 40 (2): 2-14.

Cairo S, Zalba S, & Nebbia A. 2010. Representaciones sociales acerca de los anfibios en pastizales de

Argentina. Su importancia para la conservación. Interciencia, 35 (12): 891-896.

Carleton-Hug A, & Hug J. 2010. Challenges and opportunities for evaluating environmental education

programs. Evaluation and program planning, 33 (2): 159-164.

Page 42: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

35

Engels C & Jacobson S. 2007. Evaluating long-term effects of the Golden Lion Tamarin environmental

education program in Brazil. The Journal of Environmental Education, 38 (3): 3-14.

Gascon C, Collins J, Moore R, Church D, McKay J, Mendelson J III. 2007. Amphibian Conservation

Action Plan. IUCN/SSC Amphibian Specialist Group. Gland, Switzerland and Cambridge, UK.

GORE Los Ríos. 2009. Informe Diagnostico Macrozonificación de Uso del Borde Costero. Región de

Los Ríos. Gobierno Regional.

Hermosilla M. 2010. Un asunto entre privados: El caso Celco – Mehuín y la construcción de problemas

públicos (1995 – 2010). Tesis Magister en Política y Gobierno. Concepción, Chile. Facultad de

Ciencias Jurídicas, Universidad de Concepción. 138 p.

Hernández L. 2012. Modelo de Educación ambiental para la conservación de recursos naturales: Una

propuesta para el Parque Nacional Volcán Poas, Costa Rica. Revista Biocenosis. 26:1-2.

Hernández L, Wong G, Mena Y, Arguedas S. 2010. Educación ambiental como estrategia para la

conservación de fauna silvestre en la península de Osa, Costa Rica. Revista Biocenocis. 24:1-2.

Hoffmann A, J Armesto. 2008. Ecología, conocer la casa de todos. Instituto de ecología y

biodiversidad. Editorial Biblioteca Americana. 181 p.

Jacobson S, McDuff M, & Monroe M. 2006. Conservation education and outreach techniques. Oxford:

New York.

Jacobson S. 1991. Evaluation model for developing, implementing, and assessing conservation

education programs: examples from Belize and Costa Rica. Environmental Management, 15

(2): 143-150.

Kellert S. 1985. Attitudes toward animals: Age-related development among children. In Advances in

Animal Welfare Science 1984. Springer Netherlands. 43-60.

Kessler W, Csányi S, & Field R. 1998. International trends in university education for wildlife

conservation and management. Wildlife Society Bulletin, 26: 927-936.

Llanos M. 2013. Importancia de la experiencia al aire libre en el conocimiento y valoración de la flora

y fauna local por niños de enseñanza básica en la ciudad de Valdivia, Chile. Tesis Ingeniero en

Page 43: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

36

Conservación de Recursos Naturales. Valdivia, Chile. Facultad de Ciencias Forestales y

Recursos Naturales, Universidad Austral de Chile. 35 p.

Lin H, Cheng L, Chen P, & Chang M. 2008. Involving local communities in amphibian conservation:

Taipei frog Rana taipehensis as an example. International Zoo Yearbook, 42 (1): 90-98.

Lobos G, Vidal M, Correa C, Labra A, Díaz - Páez H, Charrier A, Rabanal F, Díaz S & Tala C. 2013.

Anfibios de Chile, un desafío para la conservación. Ministerio del Medio Ambiente, Fundación

Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias de la Universidad de Chile y Red Chilena de

Herpetología. Santiago. 104 p.

Manassero M., María A. & Vásquez AA. 2002. Instrumentos y métodos para la evaluación de las

actitudes relacionadas con la ciencia, la tecnología y la sociedad. Enseñanza de las ciencias 20

(1): 15-27.

Mahecha A. La educación ambiental, los saberes locales y el sentido de lo público: dos estudios de

caso en el Departamento del Atlántico. Trabajo de Grado para optar al título de Magíster en

Medio Ambiente y Desarrollo. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Ciencias

Económicas – Instituto de Estudios Ambientales (IDEA). 2009. Bogotá. 105 p.

McCallum M. 2007. Amphibian decline or extinction? Current declines dwarf background extinction

rate. Journal of Herpetology 41 (3): 483–491.

Mera R & Lobos G. 2008. Anfibios y reptiles en el imaginario cultural de Chile. Pp. 31-50. En: Vidal

MA y A Labra (eds). Herpetología de Chile. Science Verlag Ediciones.

Ministerio del Medio Ambiente. Libro Blanco de la Educación Ambiental en España. 1999. Comisión

Temática de Educación Ambiental.

Nuñez J, Contreras C, Alarcón L. 2012. Investigación científica y alianzas estratégicas para la

conservación de los anfibios de los bosques templados de Chile. Instituto de Investigaciones en

Biodiversidad y Medioambiente (INIBIOMA), Consejo Nacional de Investigaciones Científicas

y Técnicas (CONICET). Universidad Nacional del Comahue (UNCO). 8 p.

O’Neill E. 2007. Conservation Audits: Auditing Process Lessons Learned, 2003–2007: Conservations

Measures Partnership.

Page 44: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

37

PEDAL (Para una Educación Ambiental Local). 2010. Guía para una Educación ambiental local.

Ministerio del Medio Ambiente. Chile

Rabanal F, Nuñez J. 2009. Anfibios de los Bosques Templados de Chile. Valdivia, Chile. Universidad

Austral de Chile.

Randler C, Ilg A, & Kern, J. 2005. Cognitive and emotional evaluation of an amphibian conservation

program for elementary school students. The Journal of Environmental Education, 37 (1): 43-

52.

Robalino M. & Körner A. 2005. Condiciones de trabajo y salud docente: estudios de caso en Argentina,

Chile, Ecuador, Mexico, Perú y Uruguay. Oficina Regional de Educación de la UNESCO para

América Latina y el Caribe. Santiago, Chile.

Root-Bernstein M, & Armesto J. 2013. Selection and implementation of a flagship fleet in a locally

undervalued region of high endemicity. Ambio, 42 (6): 776-787.

Schlegel J, & Rupf, R. 2010. Attitudes towards potential animal flagship species in nature

conservation: a survey among students of different educational institutions. Journal for Nature

Conservation, 18 (4): 278-290.

Smith C, Armesto J, Valdovinos C. 2005. Historia, biodiversidad y ecología de los bosques costeros de

Chile. Editorial Universitaria, Santiago de Chile. 37-49p.

Soto-Azat C & Cunningham A. 2012. Chytridiomicosis de los anfibios – perspectiva global y local, en

Soto-Azat C & A Valenzuela-Sánchez. Conservación de anfibios de Chile. Universidad

Nacional Andrés Bello, Santiago, Chile.

Soto-Azat C, & Valenzuela-Sánchez A. 2012. Conservación de anfibios y programa EDGE, en Soto-

Azat C & A Valenzuela-Sánchez. Conservación de anfibios de Chile. Universidad Nacional

Andrés Bello, Santiago, Chile.

Tomažič I. 2008. The influence of direct experience on students’ attitudes to, and knowledge about

amphibians. Acta Biologica Slovenica, 51 (1): 39-49.

Trewhella W, Rodriguez-Clark K, Corp N, Entwistle A., Garrett, S. R. T., Granek E, & Sewall, B.

2005. Environmental education as a component of multidisciplinary conservation programs:

Page 45: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

38

lessons from conservation initiatives for critically endangered fruit bats in the western Indian

Ocean. Conservation Biology, 19 (1): 75-85.

Page 46: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

39

Anexos

Anexo 1. Especies de anfibios presentes en la Región de los Ríos. Los estados de conservación están basados en la UICN, donde CR = En Peligro Crítico, EN = En Peligro, VU = Vulnerable, NT = Casi Amenazada y LC= Preocupación menor, DD = Datos Insuficientes.

Familia Género Especie Estado de Conservación

Potencial Mehuín-

Río Lingue

Alsodidae Alsodes Alsodes norae DD Alsodidae Alsodes Alsodes valdiviensis DD Alsodidae Eupsophus Eupsophus altor DD Alsodidae Eupsophus Eupsophus migueli * EN x

Alsodidae Eupsophus Eupsophus roseus NT x Alsodidae Eupsophus Eupsophus vertebralis NT x Batrachylidae Batrachyla Batrachyla antartandica LC x Batrachylidae Batrachyla Batrachyla leptopus LC x Batrachylidae Batrachyla Batrachyla taeniata LC x Batrachylidae Hylorina Hylorina sylvatica LC x Bufonidae Nannophryne Nannophryne variegata LC

Bufonidae Rhinella Rhinella rubropunctata VU x Calyptocephalellidae Calyptocephalella Calyptocephalella gayi VU x Calyptocephalellidae Telmatobufo Telmatobufo australis VU x Leptodactylidae Pleurodema Pleurodema thaul LC x Rhinodermatidae Insuetophrynus Insuetophrynus acarpicus * CR x Rhinodermatidae Rhinoderma Rhinoderma darwinii VU x

* especies endémicas y presentes en el Sitio Prioritario Mehuín - Río Lingue.

Page 47: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

40

Anexo 2. Encuesta de Percepción aplicada a estudiantes de 3° a 8° básico y a profesores.

1) Ordena estos animales del 1 al 6 según tu preferencia (n° 1 mayor preferencia).

puma mariposa rana culebra picaflor araña

2) Los científicos señalan que las ranas están desapareciendo ¿Tú crees que esto es un problema? Sí No ¿Por qué?

3) ¿Conoces alguna rana del lugar dónde vives? Sí No ¿Dónde la encontraste?

4) ¿Has visto o conoces alguna de estas ranas? Ficha 1 Ficha 2 Ficha 3 Ficha 4 Ficha 5

5) ¿Qué te gustaría saber sobre las ranas?

6) ¿Has participado de alguna actividad de educación ambiental relacionada con ranas? Sí No

Page 48: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

41

¿Te gustaría participar?

7) ¿Conoces algún mito o leyenda sobre las ranas? ¿Cuál?

8) De los siguientes animales ¿cuál (es) tendrías como mascota? gato tortuga rana pez culebra loro

9) ¿Las ranas habitan en lugares sucios, tales como charcas con aguas servidas, basurales, etc.? Verdadero Falso

10) ¿Las ranas provocan enfermedades a la piel tales como verrugas?

Verdadero Falso

Page 49: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

42

Anexo 3. Material didáctico utilizado en el taller “Conociendo la morfología de los anfibios a través de

la papiroflexia”. Origami de la rana grande de hojarasca.

Page 50: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

43

Anexo 4. Fotografía de los origamis armados por los niños.

Page 51: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

44

Anexo 5. Imagen de Mehuín (Punto amarillo indica ubicación del Liceo Politécnico Pesquero de Mehuín; Punto rojo indica ubicación del lugar donde se realizó la salida a terreno en Villa Nahuel).

Fotografías de la salida a terreno a Villa Nahuel.

Page 52: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

45

Anexo 6. Encuesta de Conocimiento aplicada a estudiantes de 3°, 4°, 5° y 6° año básico.

1) ¿Dónde viven las ranas?

2) ¿Cómo es el ciclo de vida de una rana? Ordena los dibujos del 1 al 5

3) ¿Las ranas ponen huevos?

4) ¿Cuántas especies de ranas crees que viven en Chile?

5 a 10 especies 50 a 70 especies 300 a 500 especies

5) ¿Cuáles de estas especies de ranas piensas que viven en Mehuín?

Ficha 1 Ficha 2 Ficha 3 Ficha 4 Ficha 5

6) ¿Sabes si hay ranas que son solo del lugar dónde vives?

Page 53: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

46

7) Las ranas habitan en lugares sucios, tales como charcas con aguas servidas, basurales, etc.

Verdadero Falso

8) Las ranas provocan enfermedades a la piel tales como verrugas

Verdadero Falso

Page 54: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

47

Anexo 7. Encuesta de Valoración tipo Likert aplicada a estudiantes de 3°, 4°, 5° y 6° año básico.

Rellena el cuadro con una X según tu grado de acuerdo o desacuerdo con las afirmaciones.

Afirmaciones Muy en desacuerdo

En desacuerdo

Indeciso De acuerdo

Muy de acuerdo

Cuidar el bosque nativo es muy importante

Es interesante descubrir donde viven las ranas

Hay que cuidar los animales que viven en el bosque

No me gustaría tomar una rana porque me dan miedo

Me preocupa el cuidado del medio ambiente

Es útil conocer las ranas que viven en mi localidad

La naturaleza tiene pocos lugares interesantes por conocer

Es importante cuidar las ranas Los lugares donde hay ranas son lugares desagradables

Es desagradable tomar una rana Es interesante conocer los animales que viven en el bosque

No hay que preocuparse por la contaminación de los esteros

Es importante proteger el lugar donde habitan las ranas

Los cantos de las ranas son desagradables

Es interesante conocer los colores de las ranas

Page 55: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

48

Anexo 8. Gráfico de la pregunta “Los científicos señalan que las ranas están desapareciendo ¿crees tú que esto representa algún problema?, ¿por qué?”. Gráfico para las respuestas de los niños que señalaron que sí sería un problema. Los valores se expresan en porcentajes.

Anexo 9. Gráfico de la pregunta “Los científicos señalan que las ranas están desapareciendo ¿crees tú que esto representa algún problema?, ¿por qué?”. Gráfico para las respuestas de los profesores que señalaron que sí sería un problema. Los valores se expresan en porcentajes.

11,11

27,78

9,263,70

3,70

12,96

12,96

Cadena alimenticia

Rol en el ecosistema(funcion)Valor intinsico deexistirOtros

Porque sí

No sé

No responde

50

30

10

10 Cadena alimenticia

Rol en el ecosistema(funcion)

Otros

No responde

Page 56: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

49

Anexo 10. Conocimiento de los niños del grupo sin actividades (comparación antes y después) n = 15, y conocimiento del grupo con actividades (comparación antes y después) n = 12.

Pregunta Grupo sin actividades Grupo con actividades

Estadístico t P Estadístico t P ¿Dónde viven las ranas? -0,49 0,32 -2,41 0,02* ¿Cómo es el ciclo de vida de una rana? -1 0,17 -1 0,17

¿Las ranas ponen huevos? 2,09 0,03* 1,39 0,1

¿Las ranas habitan en lugares sucios? 1,14 0,14 -1,76 0,05*

¿Las ranas provocan enfermedades a la piel?

-12 < 0,001* 0 0,5 ¿Cuántas especies de ranas crees que viven en Chile? 0 0,5 -0,24 0,41

¿Cuáles de estas especies de ranas piensas que viven en Mehuín?

Rana verde de ojos rojos -0,56 0,29 -1 0,17 Sapito de cuatro ojos -2,24 0,02* 2,13 0,03* Ranita de antifaz 1,38 0,09 -0,43 0,34 Rana de hojarasca de Mehuín 0,81 0,22 3,21 < 0,01* Rana verde de Mehuín -1,38 0,09 12 < 0,001*

¿Sabes si hay ranas que son solo del lugar dónde vives?

5,5 < 0,001* -1,96 0,03* Nota: * indica diferencias estadísticamente significativas en el conocimiento de los niños (test de t pareado).

Page 57: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

50

Anexo 11. Gráfico de la pregunta “¿Dónde viven las ranas?” Respuestas del grupo con actividades de

EA. (* p< 0,05).

Anexo 12. Gráfico de la pregunta “¿Dónde viven las ranas?” Respuestas del grupo sin actividades de

EA.

0

20

40

60

Cuerposde agua

pocoprofundos

Cuerposde agua

profundo

Cuerposde agua

sucia

Hábitat sinagua

Otros/ Nosé

Cuerposde agua

pocoprofundosy Cuerposde agua

sucia

Cuerposde agua

pocoprofundosy Hábitatsin agua

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

Hábitat de la rana

antes con actividades después con actividades

*

0

20

40

60

Cuerpos deagua pocoprofundos

Cuerpos deagua

profundo

Cuerpos deagua sucia

Hábitat sinagua

Otros/ Nosé

Cuerpos deagua pocoprofundosy Cuerposde agua

sucia

Cuerpos deagua pocoprofundosy Hábitatsin agua

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

Hábitat de la rana

antes sin actividades después sin actividades

Page 58: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

51

Anexo 13. Gráfico de la pregunta “¿Sabes si hay ranas que son solo del lugar dónde vives?”.

Respuestas del grupo sin actividades de EA y del grupo con actividades de EA. (* p< 0,05).

Anexo 14. Ejemplo de un dibujo realizado por un niño del grupo sin actividades. Dibujo del antes.

0

20

40

60

80

100

sin actividades sin actividades con actividades con actividades

Antes Después Antes Después

Porc

enta

je d

e re

spue

stas

si no no sé/no responde

**

Page 59: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

52

Anexo 15. Ejemplo de un dibujo realizado por el mismo niño del grupo sin actividades. Dibujo del

después.

Anexo 16. Ejemplo de un dibujo realizado por un niño del grupo con actividades. Dibujo del antes.

Page 60: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

53

Anexo 17. Ejemplo de un dibujo realizado por el mismo niño del grupo con actividades. Dibujo del

después.

Page 61: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

54

Anexo 18. Valoración de los niños del grupo sin actividades (comparación antes y después) n = 12.

Afirmación Clasificación

Media

P Estadístico t

Diferencias en las

medias Antes

sin actividades EA

Después sin actividades

EA Cuidar el bosque nativo es muy importante ético 4,75 4,92 0,17 -1,00 0,17

Es interesante descubrir donde viven las ranas científico 4,08 4,42 0,15 -1,08 0,33 Hay que cuidar los animales que viven en el bosque ético 4,75 4,92 0,17 -1,00 0,17 No me gustaría tomar una rana porque me dan miedo cultural 2,92 2,75 0,35 0,39 -0,17 Me preocupa el cuidado del medio ambiente ético 4,83 4,58 0,10 1,39 -0,25 Es útil conocer las ranas que viven en mi localidad científico 3,58 3,92 0,25 -0,69 0,33 La naturaleza tiene pocos lugares interesantes por conocer recreación 2,67 3,25 0,15 -1,07 0,58 Es importante cuidar las ranas ético 3,67 4,25 0,14 -1,13 0,58 Los lugares donde hay ranas son lugares desagradables recreación 3,50 3,08 0,20 0,86 -0,42 Es desagradable tomar una rana cultural 3,33 3,17 0,35 0,39 -0,17 Es interesante conocer los animales que viven en el bosque científico 4,50 4,50 0,50 0,00 0,00 No hay que preocuparse por la contaminación de los esteros ético 1,92 2,08 0,28 -0,62 0,17 Es importante proteger el lugar donde habitan las ranas ético 4,25 4,08 0,33 0,46 -0,17 Los cantos de las ranas son desagradables cultural 3,25 3,00 0,14 1,15 -0,25 Es interesante conocer los colores de las ranas científico 4,33 4,00 0,18 0,94 -0,33

Nota: * indica diferencias estadísticamente significativas en la valoración de los niños (test de t pareado).

Page 62: Evaluación de la Educación Ambiental como Herramienta de

55

Anexo 19. Valoración de los niños del grupo con actividades (comparación antes y después) n = 10.

Afirmación Clasificación

Media

P Estadístico t

Diferencias en las

medias Antes

con actividades EA

Después con actividades

EA Cuidar el bosque nativo es muy importante ético 4,60 5,00 0,08 -1,50 0,40 Es interesante descubrir donde viven las ranas científico 4,20 4,20 0,50 0,00 0,00 Hay que cuidar los animales que viven en el bosque ético 4,50 4,90 0,11 -1,31 0,40 No me gustaría tomar una rana porque me dan miedo cultural 2,10 1,90 0,35 0,39 -0,20 Me preocupa el cuidado del medio ambiente ético 4,60 4,70 0,30 -0,56 0,10 Es útil conocer las ranas que viven en mi localidad científico 4,10 4,90 0,03* -2,23 0,80 La naturaleza tiene pocos lugares interesantes por conocer recreación 1,90 2,30 0,28 -0,60 0,40 Es importante cuidar las ranas ético 3,90 4,70 < 0,002* -4,00 0,80 Los lugares donde hay ranas son lugares desagradables recreación 2,40 1,70 0,12 1,25 -0,70 Es desagradable tomar una rana cultural 1,90 1,40 0,09 1,46 -0,50 Es interesante conocer los animales que viven en el bosque científico 4,30 4,70 0,19 -0,94 0,40 No hay que preocuparse por la contaminación de los esteros ético 1,30 1,60 0,20 -0,90 0,30 Es importante proteger el lugar donde habitan las ranas ético 4,40 4,90 0,09 -1,46 0,50 Los cantos de las ranas son desagradables cultural 2,20 1,20 0,05* 1,79 -1,00 Es interesante conocer los colores de las ranas científico 4,30 4,80 0,09 -1,46 0,50

Nota: * indica diferencias estadísticamente significativas en la valoración de los niños (test de t pareado).