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SE INIDLTIVI LO DOrilmiSOS

Priego de Córdoba, 6 de Noviembre de 1966 - Año XV - N.° 736 - Depósito Legal CO. 15 1958Redacción y Administración: Queipo de Llano, 8 - Director: José Luis Gámlz Valverde

La campiña cordobesa en la Historia Universal

LA DESAPARECIDA CIUDAD ROMANA DE ATEGUA,

JULIO CESAR Y LOS HIJOS DE POMPEYO

Quizá por oscuros designios de laHistoria, esta gran "Magistra Vitae"suele darle a los pueblos y lugaresmás apartados y apacibles inusita-das sospresas proyectándolos en elamplio campo de los acontecimientosuniversales. Tal le ocurrió a ese granpolígono que pudiéramos trazar enla campiña cordobesa tomando co-mo vértices las viejas ciudades deC o r d u b a, Córdoba actual, Ulia—Montemayor—, Montulia —Manti-lla—, la desaparecida Ategua y At-tubi —Espejo—, donde la poderosaRoma —en aquel momento crucialde su vida que fue la guerra frati-cida entre Julio César y los hijos dePompeyo— decidió los destinos de

su Imperio.

Dado el gran interés que al cum-plirse el II Milenario de tan tras-cendental acontecimiento ha desper-tado en los estudiosos historiadoresy arqueólogos españoles, entre losque destacan los ilustres académicoscordobeses don Rafael Castejón yMartínez de Arizala y don Juan Ber-

nier Luque, queremos con esta hu-

milde crónica llevar nuestra aporta-

ción a tan interesante Milenario, sa-

cando a colación los viejos escritos

que sobre el mismo ya hicieron his-

toriadores, un tanto olvidados, ocu-

pándose de ese hoy apasionante te-

ma de la desaparecida y desgracia-

da ciudad antigua de Ategua y la

guerra de César y los hijos de Pom-

peyo, en la que la misma tuvo des-

tacadísimo papel.

Por Antonio LOSADA CAMPOSDe la Real Academia de Córdoba

Parece ser que hubo un tanto deengaño cuando comunicaron a Césarque la conquista de Corduba seríauna simple escaramuza, ya que ésteen los primeros días de enero delaño 709 de la fundación de Roma y45 antes de la Era cristiana acele-raba su, paso por la Vía Augustaatravesando la Mancha y descolgan-do sus legiones por el paso de Des-peñaperros, en Sierra Morena, caíasobre la misma, en la que, por el con-trario, halló fuerte y organizada re-sistencia.

A pesar de que las huestes de loshijos de Pompeyo hallábanse partede ellas poniéndole apretado cerco aUlia —Montemayor—, las esforzadaslegiones que guarnecían a Cordubale dieron a César contundente res-puesta y el parón ante sus muros.Mientras tanto, Sexto levantó su si-tio a Ulia y volvió en ayuda deCneo, su hermano y compañero delucha contra el Dictador. Ello fuecausa de que César, convencido deque no le sería fácil la conquista dela ciudad y deseoso de llevar la lu-cha a campo abierto, se adentro enla campiña cordobesa atacando lahoy desaparecida ciudad de Ateguay a sus castillos próximos de As-pavia y Soricaria, situados en estra-tégicas alturas.

Llegados a este punto de la des-cripción de la lucha entre Julio Cé-sar y los hijos de Pompeyo, dejemosla misma a la autorizada pluma deiilustre historiador, don Aurelio Fer-nández Guerra y Orbe:

"César, que por entonces preferíadesconcertar a su adversario conmeras demostraciones, puso otra vezel campo delante de Córdoba. Sextopidió auxilio a su hermano, y hubo

de renunciar Cneo por completo al

acedia de Ulia —hoy Montemayor--,volviendo a Córdoba con todo suejército. Acamparon ambas huestesen las orillas opuestas del Guadal-quivir; y para privar César a suenemigo de comunicación con La ciu-dad empezó a levantar una trinche-ra en dirección del Puente. Con elfin de ganarlo empeñaron los dosejércitos varios combates, hasta queviendo César que iba a finalizar elmes de enero, y que era inútil que-rer atraer a los hermanos a una ba-talla campal, atravesó el Bétis y sedirigió contra la ciudad de Ategua—Teba la vieja—, cuatro leguas alSudeste de Córdoba y hacia el Oc-cidente de Castro del Río y en la de-recha del Guadajoz, plaza fortifica-da por Pompeyo".

"Tal movimiento parecía estrata-gema, encaminada, como las anterio-res, a sacar de su campo a los pom-peyanos. Más avisado Cneo de queel enemigo circundaba formalmentela plaza, partió a toda prisa con áni-mo de socorrerla; arrolló los pues-tos avanzados de los sitiadores yatravesando el río Salsa —Guadajozactual— acampó entre las ciudadesde Ategua y Attubi —Espejo—, co-menzando no mucho después la ex-pugnación de Castra Postumiana (1)—hoy ruinas en las alturas quedominan, al Norte de Espejo, el cor-tijo de Cabriñana—, punto elevadoy de importancia limitar, del que sehabía hecho dueño César oportuna-mente. Desde este día redujéronselos acontecimientos a la llegada deArgüecio, que trajo de Italia algunacaballería; a la defección de QuintoMarcio, tribuno de Pompeyo que sepasó a César ; a la sorpresa que cau-só el Dictador en los que salían deCórdoba con víveres y municionespara los pompeyanos; a la fortifi-cación que a orillas del Salsa levan-

Pasa a la Pág. 3

1`0444‘1111DaDEDICTO

Don Manuel Alférez Aguilera, Al-

calde-Presidente del Excmo. Ayun-

tamiento de esta Ciudad.

Hace saber : Que aprobado por laComisión Municipal Permanente deeste Excmo. Ayuntamiento, en sesióncelebrada el día 19 de Octubre últi-mo, el reparto de los sobrantes delos Presupuestos Extraordinarios delas obras de renovación del aceradoy bordillos de las calles: José Anto-nio, Queipo de Llano y primer tramode la calle José Antonio y Plaza delGeneralísimo, a los contribuyentespor las contribuciones especiales im-puestas por dichas obras, estará lanómina al cobro en la Depositaría,de este Ayuntamiento durante el mesde Noviembre del corriente año.

Lo que se hace público para cono-cimiento de los interesados.

Priego de Córdoba a 2 de Noviem-bre de 1966.—Manuel Alférez Agui-lera.

JUNTA LOCAL DE

ELECCIONES SINDICALES

PRIEGO DE CORDOBA

Hasta el próximo miércoles, día 9de Noviembre, se admiten en estaJunta, Héroes de Toledo, 28, solici-tudes para ser proclamado candidatoa Concejal por el Tercio de Repre-sentación Sindical, para lo cual serequieren las siguientes condiciones :

1.—Ser español, mayor de 23 añosy vecino del Municipio de Priego.

2.—Saber leer y escribir.3.—Figurar en los censos de en-

cuadramiento de la OrganizaciónSindical.

4.—Tener las debidas condicionesde idoneidad legal, moralidad y ap-titud profesional exigida para el des-empeño de cargos sindicales.

Para ser proclamado candidato poresta Junta, se requerirá, a más dereunir las condiciones anteriores, quese cumplan alguno de los siguientesrequisitos:

a) Ser propuesto por escrito pordos Procuradores en Cortes de re-presentación Sindical.

b) Ser propuesto por escrito, poracuerdo mayoritario de dos, Juntade Grupo, o por un grupo de encua-

La sociedad al habla

Viajeros

Regresaron a nuestra ciudad, des-pués de pasar unos días en la Resi-dencia de Banesto, en Estepona,nuestro querido amigo y Director deesta Sucursal del Banco Español deCrédito, don José Mesa y su distin-guida esposa.

De Málaga también ha regresadodoña Asunción Matilla Aguilera, es-posa de nuestro estimado amigo donJosé María Ruiz Aguilera.

Marchó a Madrid doña María Lui-sa Gámiz Ruiz-Amores de Povedano.

También ha estado unos días enPriego, regresando a su casa de Cór-doba, doña Carmen Ruiz-Amores Li-nares, viuda de Pedrajas, y sus hijos.

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drados que sea al mínimo la vigé-sima parte de la Entidad Sindical

correspondiente.

c) Desempeñar o haber desempe-ñado cargo electivo sindical sin ha-ber sido removido por faltas come-tidas en el ejercicio.

Lo que se hace público para gene-ral conocimiento.

Por Dios, España y su RevoluciónNacional-Sindicalista.

Priego de Córdoba a 1.° de No-viembre de 1966.—E1 Delegado Sin-dical Presidente, Pablo Gámiz Luque.

Enlace Arcos Jiménez-Madrid Luque

El pasado día 16 y en la IglesiaArciprestal de Nuestra Señora de laAsunción, se unieron matrimonial-mente nuestros queridos amigos donManuel Arcos Jiménez y la bella se-ñorita Amparo Madrid Luque.

La ceremonia tuvo lugar a las do-ce de la mañana, con misa de vela-ciones, y los contrayentes estuvieronapadrinados por don José Castro Al-calá y doña María Arcos Jiménez,hermanos del novio.

Testificaron el enlace, a efectos ci-viles, don Antonio Madrid Luque,hermano de la novia, y don RafaelCuyar Tutor, sirviéndose un ágapeespléndido en "El Rinconcillo" a losnumerosos invitados.

Nuestra enhorabuena a los jóvenesesposos y que sean muy felices.

Necrológicas

Doña Francisca Montes Ruiz-RuanoA los 82 años de edad y después

de recibir cristianamente los SantosSacramentos y la bendición de SuSantidad, rodeada de sús hijos e ín-timos, descansó en la paz del Señor,el domingo pasado, la respetable se-ñora doña Francisca Montes Ruiz-Ruano, viuda que fue de don TomásCarrillo Malagón.

El sepelio de su cadáver, en la ma-ñana del siguiente día a su falleci-miento, se vió muy presente de ami-gos que la acompañaron hasta el ce-menterio.

Descanse en paz y reciban el pé-same de ADARVE sus hijos Purifi-cación, Margarita, Rosario y Antonio,hijos políticos don José García Varo,don Antonio Jiménez Yévenes y do-ña Concepción Carrillo Carrillo; asícomo su hermana doña Angustias,nietos y demás familiares.

Doña Concepción Ramírez GarcíaEn Castil de Campos entregó su

alma a Dios, confortada con la re-cepción de los Santos Sacramentos ybendición de Su Santidad, rodeadade sus hijos, a los 82 años y en lanoche del 31 de Octubre, doña Con-cepción Ramírez García, viuda quefue de don Manuel Ruiz Jiménez.

Al entierro, en la tarde del día delos Santos, asistieron numerosas per-sonas de todas las clases sociales, nosólo de la aldea, sino de las demásy aún de Priego.

ADARVE envía su pésame mássentido a los hijos doña Rosaura ydoña Desideria, así como a los hijospolíticos don José María Luque Gar-cía, don Vicente García Molina y do-ña Francisca Luque García, viuda dedon Manuel Ruiz-Ramírez, nietos eíntimos de la familia, a la vez quesolicita de los lectores una oraciónpor su alma.

También vienen a aclarar un tan-to el viejo y discutido problema dela situación de la antigua Munda, ya poner de relieve que por lo menosla citada ciudad no tenía su ubica-ción dentro de las tierras cordobe-sas, como se quiso demostrar, puesal decir que "los hijos de Pompeyopasaron el río Genil y buscaron re-fugio en las plazas fuertes de Ursoy Munda", está claro que ésta halla-

Y como no es nuestro propósitosino limitarnos a aquella parte dela campiña cordobesa, cuyos avata-res históricos la situaron en uno delos vértices de la Historia Universal,sólo nos resta decir que al pasar loshijos de Pompeyo el Genil, lo hicie-ron por el único puente existentepor aquellas fechas y correspondien-te a la llamada Vía o Itinerario de

6 de Noviembre de 1966

A D A RV E Pág. 3

El Servicio a la ComunidadViene de la Pág. 1

La desaparecida ciudad...

tó Cneo; y por último, a las salidasque hicieron los de Ategua, de cu-yas resultas hubo algunas escaramu-zas insignificantes; hasta que el 18de febrero, habiendo ofrecido entre-garse los sitiados si se les respeta-ban las vidas, logró César enseño-rearse de la ciudad".

"Al día siguiente movió Pompeyohacia Attubi, sus estancias aproxi-mando también César las suyas; demodo que tan sólo el río Salso di-vidía ambos campamentos. Pasáron-se a César una partida de gente acaballo y algunos de infantería; loque irritó a Pompeyo en tales tér-minos que mandó degollar a setentay cuatro vecinos de Attubi, tildadosde afectos al enemigo. Cécar resol-vió acercarse más y a toda costa for-zar la línea del río. Los castillos deAspavia Soricaria —Duernas y Vi-llar de Dos Hermanas, al Ocaso yal Sur de Espejo respectivamente—fueron las más resistentes; bien queen el ejército pompeyano hubo decausar no poco desaliento el éxitodel único combate formal empeñadohasta entonces, delante de Soricaria,el día 5 de marzo".

"Ya conoció Pompeyo que no po-día sortenerse en los campos situa-dos entre el Guadalquivir y el Ge-nil; que debía pasar este río, bus-car mayor apoyo en las plazas fuer-tes de Urso y Munda; venir a Se-villa ; y en último término, comosucedió, acogerse a la escuadra dela que era Prefecto Varo, delantede Carteía, en la bahía de Gibral-tar. Sacó, pues, la guarnición déUcubí, cuidando primero de escribiry alentar a los ursonenses, y acam-pando en un olivar a la vista deAguilar de la Frontera —contra Ipa-grum in oliveto— (2), dirigióse porla carretera que conducía a la ma-rina. César marchó en su seguimien-to, no sin mandar antes poner fuegoal pueblo y atrincheramiento de Ucu-bi, que por eso se llamó ClaritasZulia; y pasando el Genil, se apo-deró de la también ciudad antiguaVentipo, la actual Casariche". (3).

Como ve el lector, los párrafosque hemos transcrito nos dan unacabal idea del lugar en que halla-base la vieja ciudad romana de Ate-gua, ya que nos describen con cla-ridad el asiento de la misma, así co-mo la situación de los castillos, nomuy lejos de ella, de Aspavia y So-ricaria, objeto de preocupación y es-tudio de nuestros arqueólogos, refe-renciados a la también ciudad ro-mana Ucubí, la actual y floreciente,airón en la campiña cordobesa, Es-pejo.

España, pasa por un pleno perío-do electoral. Hemos entrado ahoraen las elecciones municipales, y el

próximo domingo, los electores cabe-zas de familia van a elegir tres con-cejales que los represente en el Mu-nicipio, durante un período de seis

años.

Hemos de partir de una base : Es-paña, por obra y gracia del Movi-miento Nacional, ha cambiado la fazde las elecciones, y el sentido de lavida. Yo recuerdo siempre a este res-pecto aquella definición de José An-tonio sobre la Jefatura y que debíaestar esculpida en todas las oficinaspúblicas y en todas las mentes de losque van a un cargo, porque el cargoes una carga más que otra cosa; portanto, hemos de rechazar de plano atodo aquel que vaya a ocupar suconcejalía, con desidia, con desgana,a servir intereses mezquinos, a noentregarse con pasión al servicio dela comunidad, en este caso de la co-munidad prieguense.

Entrarás en el Municipio, amigocandidato, lleno de ilusión, con mu-chos amigos, preñado de esperanzas,y acaso salgas desilusionado, aban-donado por muchos y creyendo queno tienen arreglo las cosas.

Ni se puede ser demasiado opti-mista, ni el pesimismo puede invadiral que ocupa un cargo, porque enmás de una ocasión, tendrá que cla-varse como soldado agreste en me-dio de la sesión, cuando crea since-ramente que defiende a la justiciao al bien de su pueblo.

Por otro lado, el concejal no pue-de ser un apático, que va a la trá-gala una vez al mes al Municipio,sin saber nada de nada, sino que de-be conocer los antecedentes de losexpedientes, las solicitudes, las pro-puestas, y debe sopesar en todo mo-mento si el acuerdo que va a tomares en beneficio de Priego o, por elcontrario, si va encaminado a satis-facer la apetencia de una persona o

base muy allá del Genil, y tal vezdonde la sitúan muchos historiado-res, cerca o en los campos de la vie-ja Urso, hoy Osuna.

un grupo de presión ahora tan en

yoga.

Tres son las vertientes por dondese puede entrar en el Municipio. Porla vertiente de la familia, por la ver-tiente sindical, o por la cultural.

El concejal de la familia ha de en-tregarse con pasión a resolver losproblemas que afectan a la mismaen su variada gama de educación,abastos, aguas, colectores, comunica-ciones, etc. etc.

El sindical, ha de representar enel Municipio los intereses de las jun-tas sindicales a quienes representa,debe escucharlas, para que el ordeneconómico social del Ayuntamientosea acorde con los intereses de Prie-go en su industria, en su agricultu-ra, en su comercio, para que siendocada vez más prósperos estos secto-res, sea el pueblo más rico, y con éltodos sus habitantes sin distinción.

Y por último, los concejales repre-sentantes del último tercio son, co-mo la levadura municipal, para quela ciudad tenga alteza de miras, enaquello que eleva el espíritu, comola música, el arte, la danza, las be-llas artes en general, la conservacióndel patrimonio artístico, el fomentodel turismo, la belleza de plazas,fuentes y jardines, formando un to-do armónico para la prosperidad delpueblo.

Sería aconsejable, que a la g sesio-nes asistieran, si no todo el pueblo,sí los más caracterizados represen-tantes de los estamentos que eligenconcejales, para ver de su labor ypoder juzgar si los que fueron a lossillones rojos, lo hicieron para ser-vir a la comunidad prieguense, aúna costa de disgustos, trabaos o sin-sabores, o fueron para cubrir unafórmula cada tres años e movidospor motivos ajenos a lo que debe"guisarse" en el Ayuntamiento.

F. GARCIA MONTES

Antonino, que pasaba por Angellas—Villeta de Castillo Anzur— man-sión en este Itinerario que seguíapara Antiquaria —Antequera— elmismo que seguiría César en la per-secusión de los pompeyanos.

(1) Respetamos la opinión, pero cree-mos que Castra Postumiana, es Cas-tro del Río.

(2) Corrección hecha por los señoresFernández Guerra y Hübner de Is-palim por Ipagrum.

(3) Aureliano Fernández Guerra y Or-be. "Munda Pompeyana" —Dicta-men— Págs. 4 y siguientes.

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1

6 de bloviembre de 1966 ADARVE

Espeleología No todo muere en Otoño

Nuevamente el grupo está en el

campo, una vez más, en busca del

pasatiempo dominguero, tras la an-

siada cueva con que sueña todo ea-

peleólogo ; pero en esta ocasión, el

azar nos iba a deparar la fortuna de

no encontrarla, sí, ya se que resulta

un tanto paradógico el hacer esta

observación, ya que lo normal, al no

encontrar cueva, es el sufrir un te-

rrible desengaño. Pero no, si bien es

cierto que no se encontró la caver-

na, sí se díó en cambio con un inte-

resante yacimiento arqueológico, dig-

no de estudio. No es la primera vez

que se sale en busca de una cueva

sin que se encuentre; pero eso care-

ce de importancia, ya que lo que

siempre se intenta localizar, son hue-

llas, vestigios del hombre prehistóri-

co, y ésto, lo mismo se halla en el

interior de una caverna, en las altas

crestas de una montaña, en las lade-

ras, o en los fértiles 'valles regados

por algún arroyuelo y bañados por

el sol.

Precisamente en lo alto de una

montaña, entre riscos, pinos y olivos,

nos iba a deparar la suerte uno de

los más grandes descubrimientos de

nuestro Grupo. El hallazgo de seis

trozos de hojas de cuchillo de silex,

y una punta de flecha del mismo ma-

terial, además de una considerable

cantidad de fragmentos de cerámica

de muy diversas civilizaciones.

El hallazgo tuvo lugar muy cerca

de la Aldea de El Cañuelo, en un

terreno denominado "Cerro de la Me-

sa". No debió distinguirse por su ori-

ginalidad el que le dió tal nombre,

pues es una auténtica mesa, una

gran meseta, elevada sobre la citada

Aldea, unos cien metros. En ella,

existen en gran profusión concavi-

dades pétreas, que nos hicieron su-

poner la existencia de grandes cue-

vas, o al menos, abrigos que pudie-

ran haber sido habitados en tiempos

remotos. En estas concavidades pue-

den observarse gran cantidad de

conchas y caparazones, que vienen

a confirmar la teoría de la existen-

cia del enorme lago penibético en la

Era Secundaria.El hallazgo de estas armas de pie-

dra, viene a demostrar la habitabili-

dad de esta zona en la época Neolíti-

ca, aproximadamente unos 5.000 años

antes de Jesucristo. Huesos encon-

trados en este mismo lugar, en avan-

zado estado de fosilización, y recu-

biertos de una considerable capa de

caliza, parecen confirmar tal hipóte-

sis, así como de la abundancia de ce-

rámica podemos deducir la existen-

cia de un poblado antiguo, ignorado

hasta el momento.

De todas formas, el descubrimien-

to es ya de por sí un gran éxito. En

futuras expediciones, intentaremos

encontrar relación con otros pobla-

dos antiguos y localizar, si ello es po-

sible, el origen de la cerámica de es-

te habitat. En esta zona en la que

de forma tan visible se nos muestra

la existencia del hombre primitivo

en el suelo de nuestro pueblo.

R. GONZALEZ VILCHEZ

El morir poco a poco es imagen del

Otoño

El Otoño es triste por antonoma-sia. Hace conjunción de vida dóndey cuándo la acción confiada aguar-da indolente su final.

Es perezoso el Otoño. Abúlico. Lle-no de restos de un ayer y no obs-tante, prometedor.

Ya los árboles amarillean en suverde follaje, como gigantescas pa-letas sin pinceles y con tonos mati-zados por la misma inexistencia. Yalos parques y jardines de las peque-ñas ciudades y grandes urbes, vanasimilando su soledad temprana co-mo augurio de triste abandono anteel frío y las nieves del invierno. Ya,van quedando aislados y envejecidospor otro año más, los cómodos y ase-quibles bancos de las plazas a cuyapiedra iría hoy, y acogedora en otrotiempo, se condena al silencio y lahumillación proporcionada por losperros callejeros y sin embargo, notodo va muriendo en el Otoño. Unresquicio queda vigente; la espe-ranza.

Esa esperanza de un día tibio desol que atraerá indefectiblemente aparejas de enamorados amantes dela soledad en su desgranar eterno deeternas palabras, viejas como elmundo, pero increíblemente nuevascada día.

Esa alegría pueril de chiquillos re-voltosos y llenos de vitalidad queaguardan con impaciencia el momen-to adecuado para gozar de libertady amplitud de espacio, condenadospor obra y gracia del progreso a laprisión estrecha de un piso.

Esa mínima expansión, del an-ciano perdido ya en el declive desus recuerdos que alienta la ilusiónde una conversación trivial si sequiere pero efectiva, con el vecinocasual de banco o paseo.

El Otoño, estación martilleada entodo yunque de poeta y escritor, es-tablece su línea divisoria firme yabstracto ; allí el verano ardiente ybullanguero, en el que suelen mo-verse los hombres sin fijeza ni obse-sión, arrollados por la misma euforiadel momento estival; aquí el invier-no, enjuto y altivo como un hidalgocastellano en liza, dispuesto en todoinstante a defender su integridad.

No. No todo muere en Otoño; lashojas al caer dejan las ramas des-nudas, expuestas a las inclemenciasdel tiempo, a la indiferencia del ca-minante, pero queda la esperanza deun volver a nacer, de surgir algomás tarde con renovados bríos yfuerza porque la savia no muere;queda latiendo en cada tronco, encada mente.

Es ley de vida; ¡bendita ley quese alimenta de esperanzas!

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Todos los domingos

e o 13-a r díaGibraltar, roca de inarmonía

y un simulacro de honra,

un grito de rebeldía

y una espera larga... en sombra.

‘6 de Noviembre de 969 ADARVE Pág. 7

Quisiera FUEGO CELESTE

Quisiera ser todo

cuanto te rodea

para contemplarte

siempre muy de cerca.

En tus lindos trajes

broche, lazo y seda

que te aprisionase

tu figura esbelta;

el libro que a solas

te anima y recrea;

la pluma que escribe

tus dichas secretas;

anillo en tu dedo;

en tu pelo, peina

y en tu suave brazo

vistosa pulsera;

el céfiro alegre

que tu rostro besa;

la luz que ilumina

tu frente serena...

y hasta la penumbra

de tu alcoba, inquieta,

que, como una esclava

de tu bella imagen,

con hondo silencio

por tu sueño vela;

Raíces de fibra hispana

claman a los que en un día

soslayar supieron leyes

de honor y de valentía.

Dicen que el inglés es firme

en deberes y condiciones...

¿no será un subterfugio

de cobardías y traiciones?

perfume en tu aliento

también ser quisiera;

carmín de tus labios,

negrura en tus cejas,

y en lindos collares

cual los de una Reina

el mayor tesoro

de vistosas perlas

que te •acariciasen

con ternura inmensa.

Todo cuanto digo

siento tan de veras

que si tú a mis frases

fiel correspondieras

con AMOR tan pura

cual el que me anega

yo te digo, niña,

niña de mis penas

prodigio en mis sueños

faro en mis tinieblas,

que no me cambiase

por nadie en la tierra.

JULIAN CANTERO ARCOS

¡Qué ya está bien! presumir

de jactancia y tradición

cuando defienden "su hombría"

atacando al español.

Y al español no hay humano

que ofenda en su integridad,

que es un león libertado

sin leyes de "homoxesualidad"

El mundo debiera ver

en esta simple faceta

del "varonil" y estirado inglés

al "valor" haciendo calceta.

¡ Qué nefacta aberración

en el mundo de hoy día

que no olvida un, corazón

el ataque por cobardía!

AFRICA PEDRAZA

Un beso, que es azul...

Un beso, cual reflejo de la luna

plateada

que en el mar de las estrellas

encienden una vela rubia

movida por la más bella.

Un beso, como la flor

abierta en la noche suave

al contacto de las músicas

diluidas en el éter

por el viento que divierte

en los juegos de las musas.

¡ Con un beso de ilusión

ardería mi corazón!

II

Un beso, que es azul...

Al juntar labios azules de manzana

con mi inquieto corazón

ya los cielos no vería,

ni los broches de platino,

ni los golfos en las nubes ...

Más el cielo, en tus ojos

virgíneos luminoso,

entraría en mi corazón.

Y mi alma no pudiera

ni ser verde ni ser blanca

porque mía no sería...

Estaría con tu dulzura

con acento de candor

en tu aliento, que es de musa,

y en el fondo de tu alma.

MANUEL CHACON-C.

La fuente y el adarve que hay en Priego

ID E O F=* T I C A

j Me quejaré a vuestro padre: Además de ser gemelos.sois impertinentes !

El ilustre escritor sevillano donJosé Montoto, ha recogido esta in-teresante glosa de su reciente viajea nuestra ciudad en el periódico desu digna dirección "El Correo deAndalucía", del que gustosamente lotranscribimos.

santuario nos hizo apetecer subirhasta él. Curioso el santuario, delque hablaba ayer , La iglesia es deuna nave. No es grande. El altar,que es de mármol, es muy bello.

El camarín es amplio. En él hayuna imagen que sustituye a la dela Patrona cuando ésta, como aho-ra, está en el pueblo, de donde su-birá el próximo día 9, Hay, comoes frecuente hallar en los santua-rios, exvotos y cuadros de un ar-te ingenuo en el que representanescenas de favores alcanzados.Hay retratos también; muchas fo-tografías de personas que mues-tran su gratitud a la Señora pormedio de esta ofrenda.

El camino hasta Priego es pinto-resco. La carretera se encuentrabordeada de alegres caseríos y fes-toneada de huertos con frutales,entre los que descuellan membri-llos cargados de fruto. A la llega-da a Priego nos sorprende la her-

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mosura de sus calles y de su ca-serío. Pueblo rico, ofrece al viaje-ro muestras de su pujanza en edi-ficios, tiendas y paseos. Todo elque llega a Priego, lo primero quebusca es la Fuente del Rey. Bienmerece el viaje la tal fuente. Ellaen sí, y el paraje en el que estáemplazada. Es uno de los paseosmás lindos y más originales quejamás contemplé. ¡Y qué hermo-sura de agua!

No te vengas sin ver El Adarve,me dijeron. Y hasta El Adarve fui-mos. Una entre plaza y parque dearbolado frondoso y bellas floresnos conduce hasta él. Desde su ba-randal es un encanto lo que se di-visa. Un paisaje risueño y pinto-resco. Por El Adarve adelante he-mos seguido hasta el final de él.Luego hemos ido a la fronteraiglesia de la Asunción, templo her-moso en verdad. Es el centro deun lindísimo barrio de calles es-trechitas muy limpias y muy blan-cas y con muchas macetas de flo-res en las fachadas, El barrio esun trasunto de Arcos de la Fron-tera o de Vejer, pero sin las lade-ras pronunciadas que hay en aque-llos pueblos. Yo me quedé encan-tado de aquel barrio.

La iglesia de la Virgen de la Au-rora, muy devota y cuidada, tienelinda portada. También algunas ca-sas blasonadas tienen hermoso as-pecto.

Atardecido ya he salido de Prie-go contento de haber visto lo quevi, y dispuesto a ir a Espejo al díasiguiente.

JOSÉ MONTOTO

Los alrededores de Cabra son co-mo en sus obras los describe donJuan Valera : floridos, pintorescos,cruzados de alamedas, de huertasy de acequias. Si a tan bello con-junto le buscamos un centro, éstehemos de encontrarlo en la Fuen-te del Río. Aquel lugar ameno seencuentra limitado por elevada sie-rra que de pronto se yergue , Esuna inmensa peña que se alza ver-tical tapizada de verde enredadera.En sus huecos anidan los palomosy en una cavidad, y desde ella, pre-side una devota imagen de la Vir-gen tallada en blanco mármol.

Nace al pie de la peña un vene-ro abundante, cuyo caudal se dis-tribuye en varios canalillos sobrelos que han tendido breves puen-tes. Es sitio encantador para eldescanso, para que el alma gocede una serenidad y una paz dulcey grata. Desde lugar tan bello pu-simos rumbo a Priego , aunque, apoco, una desviación que lleva al