punt de libroNoviembre 2012

Nº 26Año V

ol

Y las reseñas de:Lo que no está escrito - Cerco a la República - Canciones de la gran derivaLeyenda - Donde se alzan los tronos - Baila, baila, baila - Entra en mi vida

La marca del meridianoPremio Planeta 2012

La vida imaginariaFinalista

Entrevistamos a Désirée Matas

autora deEl tercer estado

Punto de libro, noviembre 2012- 6 -

l lfría. Como ocurría con tercera rePúbLica, lo más inquietante de esta novela es que cuanto más invero-símiles parecen a primera vista los hechos narrados, más cuenta nos damos de que nuestros gobernantes podrían hacer barbaridades semejantes a las que se narran en esta novela de ficción.

Canciones de la gran derivaVicente Muñoz ÁlvarezEditorial Origami

De Vicente Muñoz Álvarez ya os presentamos un interesante li-bro de relatos, allá por el año 2009 -ver Punto de Libro nº 7-. Volve-mos a traer a nuestras páginas a este autor todoterreno, pero ahora con una obra poética, canciones de La gran deriva. Este poema-rio que acaba de reeditarse fue el primero que publicó su autor. Han pasado desde entonces trece años. Trece son, también, los poemas que se han añadido a los que se incluían en la primera edición. El resultado es una obra que sorprende, además de por sus cualidades literarias, por su absoluta vigencia.

La poesía de Vicente Muñoz Álvarez se aferra a la realidad, a la calle, a las miserias personales, socia-les y universales. Y lo hace con rotundidad expresi-va, con atrevimiento y desparpajo. Con esos mimbres nos ofrece en este volumen más de cincuenta poemas. Poemas que hablan de esperanza, de desesperanza; de tiempos pasados que aún siendo malos, eran mejores. Poemas que denuncian -o quizá solo exponen- lo ab-surdo de la mercancía que nos quieren vender como vida, y la pasmosa facilidad con que compramos esa mentira. Algunos de estos poemas hablan de violen-cia individual, cruel y visceral; un tipo de violencia que encontrábamos también en el libro de relatos que citábamos antes. En otros poemas la violencia de la que se habla es más genérica, más impersonal, pero más sádica: la ejercida por un tipo de vida, por una sociedad de la que somos rehenes, o quizá huéspedes acomodados y complacientes.

El viaje que vivimos al deslizarnos por estos poe-mas es un continuo ir y venir de lo individual a lo colectivo. De los miedos de un niño a los miedos de toda una sociedad; de la esperanza de una pareja de enamorados, de su optimismo decidido, al desencan-to de toda una generación que carece de trabajo, de oportunidades y de futuro. Pero en ese viaje se vis-lumbra cada cierto tiempo, en el horizonte, una es-peranza a la que el autor no renuncia, y que es una

obligación tanto como una necesidad.

El lector avanza entre estos poemas ayudado por el ritmo que el autor imprime en sus versos. Negándo-se a las métricas encorsetadas, encuentra una libertad que agiliza la lectura sin renunciar nunca al ritmo, a la musicalidad que convierte cada poema en una can-ción sin estribillos monótonos. Pero esa fachada ama-ble, esa melodía que ayuda a avanzar de un poema al siguiente, no esconde las crudas realidades con las que nos acabamos topando y que nos dejan anclados en algunos poemas, que nos obligan a cerrar el libro durante unos minutos para digerir cada idea.

Quizá sea cierto -como dice el propio autor en uno de sus versos- que escribir poemas como este en una sociedad como la nuestra sea terrorismo de estado. Pero si así es, se trata en todo caso de un terrorismo sin violencia, cuya única potencial víctima es nuestro conformismo.

LeyendaDavid Lynn GolemonLa Factoría de Ideas

David Lynn Golemon es el autor de una saga de novelas en torno a una organización secreta denomi-nada Evento. Los rasgos comunes a esta saga son la intriga, el es-pionaje y la acción. Se acaba de publicar en castellano la segunda novela de esta serie, Leyenda, que puede leerse independientemente de evento, la obra con la que se inició la saga y que ya reseñamos en el número 20 de esta revista.

El grupo Evento se dedica a investigar misterios, leyendas y mitos que no hayan sido resueltos. Pero su objetivo no es solo la investigación histórica y la resolución de enigmas. Con frecuencia la mayoría de descubrimientos que realiza el grupo atañen a ame-nazas que pueden poner en peligro la paz mundial y hasta la existencia humana. Su misión es controlar y neutralizar dichas manazas. El grupo lo forman los mejores profesionales de muy diversas disciplinas. En sus filas hay eminentes científicos, brillantes in-formáticos, historiadores insignes y, por supuesto, militares de elite. Su existencia es tan secreta que pasa desapercibida al FBI o a la CIA, y trabaja bajo las ór-denes directas del presidente de los Estados Unidos. Jack Collins, el responsable de seguridad del grupo evento, es el principal protagonista de la saga y, por lo tanto, de Leyenda. En esta ocasión el grupo deberá

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Punto de libro, noviembre 2012- 7 -

l l linvestigar la desaparición de una expedición al Ama-zonas. Lo que en principio era una expedición cientí-fica en la que participaban principalmente estudiantes universitarios, pronto se revela como una misión para encontrar el secreto de El Dorado. La leyenda cuenta que en ese emplazamiento mítico y nunca localizado habría grandes cantidades del metal precioso. Pero una serie de indicios preocupan al grupo Evento. La expedición al Amazonas de Hernando Padilla en el siglo XVI dejó documentos que hacen sospechar que el oro no sería lo único que esconde el mítico lugar. Los miembros del equipo de Jack Collins descubrirán ciertas conexiones con unos sucesos que ocurrieron durante la Segunda Guerra Mundial en Okinawa que les harán sospechar de que alguien va detrás de las verdaderas riquezas de El Dorado. Y, además, con muy malas intenciones.

Leyenda nos hará viajar desde Japón hasta Brasil, pasando por los Estados Unidos y hasta por Madrid. En la trama se mezclan conquistadores de la época del Descubrimiento, intrigas papales para salvaguardar los secretos de El Dorado, traiciones políticas, juego sucio, y, sobre todo, varios frentes rivales que buscan un mismo objetivo: controlar algo que les daría un extraordinario poder y una ventaja táctica irreversi-ble ante cualquier conflicto bélico en el que pudieran participar o, quizá, provocar. Aunque Leyenda -como otros libros de la saga- se base en un hecho históri-co como punto de partida, la novela trata libremente el mito, creando una historia de ficción no sujeta a ninguna limitación. La obra de Golemon es funda-mentalmente novela de aventuras, al viejo estilo en el que lo importante es la acción y la adrenalina co-rriendo por el torrente sanguíneo del lector. Leyenda es una larga novela que, sin embargo, se devora con gran facilidad. La acción continua, las situaciones de peligro, las persecuciones, tiroteos y operaciones mi-litares a pequeña escala convierten a Leyenda en pura novela de acción, en una versión moderna y actualiza-da de las grandes novelas de aventuras de la literatura clásica.

Las obras de Golemon evocan a la imaginación de Verne, la fantasía de Crichton, y el suspense de For-syth, pero con un estilo propio que impregna su saga sobre el grupo Evento. Sus obras serán, sin duda, del agrado de los lectores que busquen en un libro emo-ción, imaginación y aventuras.

Donde se alzan los tronosÁngeles CasoPlaneta

En Ángeles Caso se da la curiosa circunstancia de

que ha sido primero finalista y des-pués ganadora del Premio Planeta. Se hizo con el premio en 2009 con contra eL viento, quince años después de que su primera novela, eL Peso de Las sombras, quedase finalista. La última obra de esta asturiana es una magnífica novela con base histórica que nada tiene que envidiar a las que le otorgaron los mencionados puestos de honor.

La novela, aunque breve, recorre los primeros ca-torce años de reinado de Felipe V. La elección de este periodo, que coincide casi exactamente con la Guerra de Sucesión, no tiene que ver con este conflicto, sino con la persona que acompañó al rey durante esos años ofreciéndole sus consejos pero también influyendo poderosamente en sus decisiones: Anne Marie de la Trémoïlle, la Princesa de los Ursinos. El relato se ini-cia en los últimos días del reinado de Carlos II, que se sabe próximo a la muerte sin que haya podido dejar un heredero directo al trono. Pese a nombrar como su-cesor a su sobrino-nieto, el Duque de Anjou, la estabi-lidad de la corona está en entredicho. La juventud del Duque, que comenzará su reinado como Felipe V con apenas 17 años de edad, y la negativa del emperador Leopoldo a reconocer al nuevo rey, ya que considera-ba que ese derecho lo ostentaba su hijo, el archiduque Carlos de Austria, no son buenos augurios, por lo que Luis XIV, abuelo del nuevo rey, decide encargar a la Princesa de los Ursinos que acompañe al rey a su cor-te, y le aconseje y guíe en sus nuevas funciones.

La Princesa de los Ursinos -Mariana en la novela-, mujer bregada en intrigas palaciegas y tratos más o menos diplomáticos aceptará el encargo, convirtién-dose casi en una madre para el joven rey y para su esposa, María Luisa Gabriela de Saboya. Su influen-cia sobre el monarca hará que prácticamente todos los asuntos de la corona pasen por sus manos. Con tanto poder concentrado en una persona ajena, en principio, a la corona, no tardarán en surgirle enemigos dentro y fuera de palacio, lo que unido a la larga Guerra de Secesión hará que Mariana viva continuamente pen-diente de las intrigas, traiciones y juegos de poder de ministros, consejeros, papas y reyes.

donde se aLzan Los tronos es un acertado retablo en el que asistiremos a los primeros años de reina-do de Felipe V y a la influencia que en él tuvo una mujer fuerte y decidida, Anne Marie. Un relato lle-no de información real, de datos y hechos históricos que siempre viene bien recordar o descubrir. Pero la obra de Ángeles Caso es, ante todo, una novela. Y

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