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UNIVERSIDAD DEL CAUCA

VICERRECTORIA ACADEMICA

PROYECTO ACUERDO

ESTATUTO ACADÉMICO UNIVERSIDAD DEL CAUCA

COMITÉ CURRICULAR CENTRAL

Popayán, abril de 2011

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COMITÉ CURRICULAR CENTRAL

Álvaro Hurtado Tejada Juan Martín Velasco

Francisco Bohórquez Kenny Elizabeth Campo

Gloria Judith Castro María del Pilar Granados

Mabel Farfán Martínez

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TABLA DE CONTENIDO

CONSIDERACIONES PRELIMINARES ……………………………pag 4 CAPITULO I De los Principios…………………………………………………….pag.11 CAPITULO II El Sistema Académico……………………………………………..pag 13 CAPITULO III Los Niveles Educativos en la Educación Superior de la Universidad ………………………………………………………….pag 17 CAPITULO IV Del Currículo…...…………………………………………………….pag 17 CAPITULO V Los Programas Académicos……...………………………………pag 20 CAPITULO VI La Programación Académica……………………………………..pag 27 CAPITULO VII Medios y Recursos Educativos…………………………………..pag 28 CAPITULO VIII La Administración Curricular……………………………………..pag 29 CAPITULO IX La Autoevaluación y la Acreditación Institucional y de Programas ………………………………………………………………………….pag 31 CAPITULO X El Sistema de Información Académica…………………………pag. 32

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UNIVERSIDAD DEL CAUCA

PROYECTO DE ESTATUTO ACADÉMICO

CONSIDERACIONES PRELIMINARES Este documento es el resultado de un proceso que inició el Comité Curricular Central en diciembre de 2007 y culminó con un texto preliminar en junio de 2008. La versión que hoy se presenta a la comunidad universitaria integra el resultado de las deliberaciones del Comité Curricular Central y el Consejo de Investigaciones realizadas durante el segundo periodo académico de 2009 con el ánimo de construir puentes que posibiliten la interacción coordinada de los sistemas para el cumplimiento eficiente de sus funciones. Así mismo se adelantó la socialización del proyecto del estatuto académico en reuniones con los consejos de las nueve (9) facultades, en tres (3) sesiones ordinarias del Consejo Académico y a través del foro virtual de discusión en el portal Web Unicauca dispuesto desde septiembre de 2010. Como producto de esta estrategia de socialización se conocieron múltiples propuestas y observaciones las cuales se analizaron detenidamente al interior del Comité Curricular Central. Algunas de ellas fueron tenidas en cuenta en la presentación final del presente estatuto académico. Se vislumbra ya la necesidad de adelantar un proceso similar con los otros sistemas de Cultura y Bienestar y Administrativo. La Universidad del Cauca, como entidad pública de educación superior de carácter nacional, desde su compromiso social, promueve el desarrollo de las capacidades regionales, al tiempo que construye condiciones favorables de interacción con las dinámicas globales, que exigen unos lineamientos académicos acordes. El proyecto de Estatuto Académico de la Universidad se presenta como documento de trabajo para el análisis y discusión de la comunidad universitaria; la propuesta se inscribe en el marco de los fines, políticas y estrategias establecidos en el Proyecto Educativo Institucional –PEI-. La Universidad es una institución compleja que cumple o debe cumplir funciones de variado alcance y significación. Por ello, desde el punto de vista organizacional se asume la Teoría de Sistemas como una manera de aproximarse a las dinámicas que operan en ella.� Este Estatuto pretende servir como instrumento normativo de política universitaria para el cumplimiento de las funciones inherentes al sistema académico de la

� � Desde éste punto de vista la Universidad se concibe como una red de sistemas.

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Universidad en interrelación con los sistemas de investigación, innovación y desarrollo, de administración y de interacción social. La Universidad se entiende como una red conformada por cuatro sistemas: el Sistema Académico, el Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo, el Sistema de Interacción Social y el Sistema Administrativo.

El Sistema Académico tiene a su cargo la gestión y administración de los programas académicos de pregrado, posgrado, educación continuada y educación continua, en todas sus modalidades, así como la administración de los procesos educativos. El Sistema de Investigación, Desarrollo e Innovación de la Universidad del Cauca, por su carácter social y abierto, tiene como propósito consolidar la investigación como una función esencial de la institución, y contribuir a dinamizar las relaciones entre la comunidad universitaria y los demás actores sociales, para el reconocimiento, sistematización, profundización y ampliación de los saberes, conocimientos y prácticas científicas, humanísticas, tecnológicas y creaciones artísticas, con un sentido de compromiso social y ambiental. El Sistema de Interacción Social tiene a su cargo la gestión y administración de los proyectos y programas de articulación dialógica entre los saberes, problemas y demandas del entorno sociocultural, y las ideas, capacidades y posibilidades desarrollados en la Universidad. Abarca el diálogo tanto con los individuos como con las organizaciones sociales, la gestión y la administración de los contactos, interacciones, actividades llevados a cabo entre la Universidad y las comunidades e instituciones externas, la participación de la Universidad en acciones y procesos de desarrollo regional, así como los programas, medios y eventos de divulgación de la actividad Universitaria. El Sistema Administrativo provee los factores y las condiciones para que los demás sistemas realicen a cabalidad sus funciones. Tiene a su cargo la planeación, gestión, organización, control y evaluación del recurso humano, de los recursos financieros, locativos, de equipos, de materiales e insumos, de ambientes, de información y de procedimientos de la institución. Su preocupación se orienta a hacer viables, eficaces y eficientes las políticas y programas propuestos por los sistemas universitarios. Las funciones de cada sistema y los actores que participan en ellos se interrelacionan en red, de tal forma que solo es posible el funcionamiento adecuado de la Universidad mediante la operación organizada de todos ellos. En efecto, sin un cultivo y diálogo constante entre las disciplinas y los saberes, que incluye no sólo la sistematización para la educación, sino, por igual, la innovación y la investigación, la función académica quedará anquilosada. Pero, a

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su vez, si ese cultivo no está estrechamente ligado con el estado y condiciones del entorno social, la función investigativa e innovadora quedará completamente descontextualizada; y si ambos procesos no son adecuadamente soportados por un proceso administrativo coherente y coordinado, los logros serán magros y frustrantes. Pero la interacción no sólo queda a nivel de funciones. Es preciso que interactúen también, los actores. Por ejemplo, cualquier estudiante de pregrado en la Universidad debe incorporar en su currículo experiencias de tipo investigativo y de interacción social, pues es en la sociedad donde va a ejercer la profesión y la sociedad requiere de profesionales que enfrenten sus problemas con soluciones pertinentes y novedosas. Esta exigencia hace que los sistemas universitarios tengan forzosamente que interactuar en las etapas de planeación, ejecución, seguimiento y evaluación de los currículos. Lo propio se puede afirmar de los estudiantes de posgrado, quienes deben ejercer en la sociedad desde su formación en investigación. El Estatuto de cada uno de los sistemas señalará las interfaces, indicando el proceso o subproceso con el que interactúa, el tipo de interfaz (solicitud, orden, consulta, reporte, programa, producto, etc.) y la etapa, operación o actividad en la que se produce la respectiva interacción. A cada interfaz en un sistema debe corresponder la interfaz correlativa en el otro. Corresponde al Consejo Académico coordinar y monitorear esta interacción con el apoyo de los organismos asesores de cada uno de los sistemas. Para la socialización y discusión de la propuesta, se considera necesario explicitar los conceptos a partir de los cuales el Comité Curricular Central construye la propuesta: Educación: Se entiende por educación el proceso socio-cultural mediante el cual una persona, asistida por otra(s) persona(s) con la debida competencia, apropia, en diálogo, las culturas de los ámbitos a los que se integra, para contribuir a su mejoramiento. La educación tiene por objeto la inserción cultural (enculturación) como un todo, en tal sentido su objetivo no será exclusivamente la ciencia y la tecnología. La referencia a la persona recalca el papel social de la educación: el objeto de la educación es la persona, en tanto individuo que cumple un papel social. El término ámbito cultural reconoce el carácter multicultural de la sociedad, sus tensiones y dinámicas, por cuanto la sociedad no es monolítica ni grupal ni culturalmente, sino que se constituye por ámbitos culturales en interacción, desde el grupo familiar hasta lo global, pasando, entre otros, por lo comunitario, local, nacional e internacional; la educación debe concurrir en todos ellos. Finalmente, el concepto cultura se entiende aquí como el acervo colectivo acumulado y transmitido de maneras de ver, sentir, valorar, actuar y crear que tiene por objeto la satisfacción, en sociedad, de las aspiraciones humanas.

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En este contexto de ideas, la educación se comprende como un proceso de apropiación de las culturas a partir del diálogo. Un aspecto fundamental es el diálogo, entendido como construcción conjunta, que trasciende la acción comunicativa unilateral. Se recalca que la apropiación implica, en todo caso, un proceso de interpretación y de asunción crítica. Formación: La formación es plausible, desde y hacia la autonomía personal. Por ello, este concepto se refiere al grado de apropiación crítica de las culturas a partir de experiencias personales que incluyen la educación, sin que se agoten en ella. En efecto, existen múltiples experiencias por fuera del sistema educativo que pueden contribuir al proceso de formación. De ahí que el educando se pueda autoformar, pero no auto educar. Educación y formación no son, pues, sinónimos, aún cuando están estrechamente relacionados. Investigación: La investigación, tanto la sistemática, objeto de las maestrías, como la que busca el desplazamiento de las fronteras de los saberes -la religión, el arte, la filosofía, la ciencia y la tecnología-, objeto de los doctorados y los postdoctorados, se distingue de la innovación y el desarrollo, objeto de los pre-grados, así como de la exploración e indagación, objeto más propio de los niveles educativos primario, secundario y medio�. La creación en las artes forma parte del campo de la investigación. Programas: La Universidad debe trabajar por programas. Desarrolla programas académicos de pregrado –técnicos, tecnológicos y universitarios-; Postprofesionales -especialización, actualización y reprofesionalización-; Educación Investigativa -maestría, doctorado y post-doctorado-. De igual manera, trabajará programas de sistematización científico-tecnológica; investigación, innovación y desarrollo; creación artística; divulgación y socialización; participación profesional comunitaria. Sobre todos ellos, la Universidad debe definir políticas, objetivos y procesos.� Currículo: Se asume como el proceso de construcción social de experiencias (estudios, trabajos, prácticas, actitudes, actuaciones, expresiones, regulaciones, valoraciones, etc.), socialmente validado, mediante el cual se espera que el educando apropie críticamente la cultura asociada al nivel educativo en el que se encuentre. Competencia: El concepto de competencia surge de la necesidad de valorar, de una parte, el conjunto de los conocimientos apropiados (conocer), las habilidades y destrezas (hacer) desarrolladas por una persona en su complejidad, y de otra

� � Por sus orígenes y tradición, la Universidad, como institución occidental, ha estado ligada a las

diferentes formas y trayectorias de los saberes occidentales, tales como la religión, la filosofía, el arte, la ciencia y la tecnología. Sin embargo, la Universidad estará abierta a las investigaciones relacionadas con otros saberes específicos y comunitarios diferentes. � Es de advertir que en el momento actual sólo existen programas académicos; no existen los

programas restantes, aún cuando hay proyectos o actividades aisladas en algunos de ellos. Quizás este hecho sea una de las razones – más que la estructural orgánica – que explica muchos de los problemas del diagnóstico sobre el desempeño institucional.

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parte, la capacidad de emplearlas para responder a situaciones, resolver problemas e interactuar con su comunidad global (global - local). Implica una mirada a las condiciones de la persona y disposiciones con las que actúa, es decir, al componente actitudinal y valorativo (ser) que incide sobre los resultados de la acción. La competencia se entiende como la capacidad de integrar con idoneidad, responsabilidad y ética, conocimientos, actitudes, habilidades, valores y recursos (personales, grupales o físicos) en el abordaje y resolución de situaciones problemáticas de la realidad personal, social, ambiental o simbólica, acorde a las condiciones del contexto. Estructura universitaria: Esta propuesta se construye a partir de la estructura orgánica definida en el Estatuto General de la Universidad. No obstante, es conveniente revisar las funciones de los órganos de dirección y asesoría en concordancia con las funciones de los sub-sistemas. También es necesario suprimir algunos comités asesores, como los de Coordinación Curricular por Facultades, y articular otros en la Estructura General de la Universidad, como los Comités de Plan, bajo la denominación de Comités de Programa, con el fin de asegurar una efectiva y eficaz interrelación con otras instancias de asesoría y decisión en cada una de las Facultades y con los otros sistemas de la Universidad. El Consejo Académico y los Consejos de Facultad cumplen funciones de formulación de políticas y de asesoría administrativa. El problema actual es que la función de asesoría administrativa se ha convertido en función administrativa directa, además prioritaria, lo que relega la función de formulación de política académica a un segundo plano muy disminuido. Las Facultades deben ser entendidas desde una mirada histórica. La Universidad heredó el sistema francés napoleónico de carácter profesionalizante. Las Facultades estaban organizadas para dar enseñanza y expedir títulos profesionales: eran administradoras de programas académicos; cada Facultad, un programa. Su organización interna en Departamentos seguía la misma lógica. Los Departamentos estaban organizados por áreas disciplinares del programa académico respectivo. El modelo americano, que sirve de referencia para las Universidades tales como Los Andes, Valle y UIS, organiza las Facultades de manera disciplinar –Ciencias y Artes– y los Departamentos se encargan, de los programas académicos. Muchos profesores de la Universidad del Cauca provienen o han estudiado en universidades del exterior o del país que trabajan bajo el modelo americano. Esto hace que haya en la Universidad dos visiones en relación con la organización estructural. Es prioritario unificar la visión a partir de lo dispuesto en el Estatuto General: las Facultades administran programas y los Departamentos cultivan disciplinas. El hecho de coincidir el nombre de algunos Departamentos con el de programas académicos no debe llevar a confusión. Los Comités de Coordinación Curricular de las Facultades, rezago de la organización de las Facultades por programa, deben ser suprimidos de la

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Estructura de la Universidad para dar paso a los Comités de Programa, cuyo referente cercano son los Comités de Plan. Las funciones de autoevaluación y seguimiento a éstos asignadas, son sucedáneas o coetáneas de las funciones de planeación y ejecución del currículo, por lo cual todas ellas deben atribuirse a los Comités de Programa para evitar el fraccionamiento artificial de procesos cuya administración debe ser unitaria. Los Comités de Programa deben articularse formalmente a la Estructura de la Universidad para garantizar una relación normalizada con las instancias de la Facultad y con los demás sistemas de la Universidad. Se propone que se integren por el Coordinador, dos a cuatro profesores del programa, preferiblemente con título al que conduce el programa o programas afines, un estudiante y un egresado. No debe integrarse con representantes de los Departamentos como tales, pues la función de éstos no es administrativa. A los Departamentos corresponde cultivar las disciplinas y educar en ellas. El cultivo de las disciplinas comprende la asimilación del estado del arte de la respectiva disciplina, su contextualización a una región y sociedad específicas, la sistematización de los conocimientos, la investigación para aportar nuevos conocimientos y la socialización del conocimiento, que incluye la labor de docencia y por ende la didáctica de la disciplina. Aunque los Departamentos pueden sugerir modificaciones y participar en los procesos de cambio curricular, su tarea central no consiste en administrar programas ni tomar decisiones sobre los mismos, que será la función propia del Consejo de Facultad, a propuesta del Comité de Programa. Interacción Social: el sistema de interacción social se entiende como la estructura cuyo fundamento se basa en una tradición de relaciones entre la Universidad y las comunidades circundantes en diferentes ámbitos espaciales, que pretende propiciar el vínculo entre el Proyecto Educativo Institucional con los proyectos de vida de los universitarios, los planes de desarrollo de las comunidades y las posibilidades empresariales de la región, para participar activamente en la solución de problemáticas socialmente relevantes en lo local, lo departamental, lo regional, lo nacional y lo internacional. La necesidad de estructurar un Sistema de Interacción social sobre la base de relaciones de reciprocidad que favorezcan el reconocimiento de los diferentes actores sociales participantes, la circulación de recursos para fortalecer el vínculo Universidad y comunidades en los diferentes ámbitos espaciales, ha conducido a repensar la articulación del Sistema de Investigación, innovación y desarrollo y el de Interacción social, para superar la noción de proyección social, en la cual predomina el establecimiento de los aportes de la Universidad en una sola dirección, opacando la actividad de las comunidades, que cuentan con una riqueza invaluable en saberes surgidos de la cotidianidad y la tradición, los cuales se pierden en el anonimato por la desvinculación con los espacios dedicados a la sistematización de los mismos, en aras de la producción de conocimiento formalizado.

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El vínculo de la Universidad con el medio circundante permite el desarrollo del potencial humano de los diferentes estamentos que conforman la comunidad universitaria y de las comunidades mismas, a partir de las relaciones que se establecen con el contexto social desde principios de reciprocidad, solidaridad y respeto a la diferencia. Como lo plantea Tünnerman: “Un canal de doble vía, a través del cual la Universidad lleva a la sociedad su mensaje liberador y concientizador, a la vez que recoge las inquietudes y expresiones culturales de la comunidad para regresárselas racionalizadas, en un constante diálogo que requiere necesariamente dos interlocutores, ambos de gran importancia e interactuantes” (UNESCO 1998) Para ello es necesario generar una cultura de la planeación y la autoevaluación que permita la articulación de los diferentes sistemas en aras de la cualificación de los mismos; la urgencia de establecer pautas de seguimiento del impacto social de los programas y proyectos que posibiliten el acercamiento con el contexto circundante; la potenciación de los recursos con que cuenta la Universidad para estrechar las relaciones con las comunidades; la posibilidad de acercamientos con las comunidades locales, para propiciar ambientes de aprendizaje y desarrollo profesional que contribuyan al esbozo de soluciones de las necesidades de dichos contextos y la ampliación del compromiso de servicio de los diferentes estamentos de la comunidad universitaria, para repensar el proyecto de nación, desde la consolidación y el fortalecimiento de una intelectualidad comprometida con las necesidades del país.

ESTATUTO ACADÉMICO Acuerdo Número de 2008

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ACUERDO NÚMERO DE 2010 ( )

Por el cual se adopta el Estatuto Académico de la Universidad del

Cauca

EL CONSEJO SUPERIOR DE LA UNIVERSIDAD DEL CAUCA, en ejercicio de sus atribuciones legales y estatuarias, especialmente las conferidas en la Ley 30 de 1992

ACUERDA

ARTICULO 1. Adoptar el Estatuto Académico de la Universidad del Cauca. ARTICULO 2. El presente Estatuto establece los principios y regula los niveles, currículos y programas del Sistema Académico de la Universidad del Cauca y sus relaciones con los otros sistemas de la Universidad.

CAPÍTULO I DE LOS PRINCIPIOS

ARTÍCULO 3. Los programas académicos que ofrece la Universidad del Cauca tendrán como principios orientadores: a. Apropiación cultural: la Universidad concurre al proceso de formación de

los estudiantes mediante la educación, entendida como proceso socio-cultural de apropiación crítica y dialógica de las culturas en los diferentes ámbitos en los que aquellos se integran, para recrearlos y contribuir a su mejoramiento, transformándolos y transformándose.

b. Integración al entorno: la Universidad del Cauca tiene como propósito la

participación y la educación en la dinámica cultural - política, social, económica y simbólica - de su entorno inmediato. Por lo tanto, debe tener dominio de los avances en los saberes globales, para ajustarlos y adaptarlos a las condiciones, necesidades y aspiraciones de su contexto. Igualmente, debe descubrir y promocionar los avances y propuestas de dichos contextos para el beneficio global. Una preocupación especial de la Universidad es trabajar por la sostenibilidad y reconocimiento de la diversidad existente, así como por su integración en el contexto latinoamericano.

c. Formación: la Universidad ofrece ambientes que posibilitan a los

estudiantes estructurar y desarrollar sus proyectos de vida para actuar en contextos sociales y en armonía con el entorno. Igualmente, se pretende propiciar el desarrollo intelectual, emocional, estético, ético y


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físico del estudiante, con miras a favorecer y ampliar su horizonte profesional como ser humano y ciudadano.

d. Apertura y flexibilidad curricular: la Universidad ofrece experiencias y

actividades educativas para que sean escogidas por el estudiante de acuerdo con sus expectativas y deseos e intereses personales, disciplinares y profesionales.

e. Pertinencia cultural: el currículo de los programas académicos que

ofrece la Universidad se articula con las características y necesidades del medio, la dinámica social y el desarrollo individual en concordancia con los propósitos establecidos en el Proyecto Educativo institucional.

f. Interdisciplinariedad: la Universidad promueve espacios que posibiliten a sus estudiantes construir nuevos esquemas cognitivos y hacer rupturas del enclaustramiento disciplinar, al acercarse a los fenómenos sociales; en el desarrollo de los programas académicos se articulan coherentemente los conocimientos, métodos y técnicas procedentes de las diferentes disciplinas y campos de formación.

g. Calidad: los programas académicos que ofrece la Universidad del

Cauca realizan los fines y propósitos previstos en el PEI. Para ello la Universidad apunta a la disposición óptima y adecuada de experiencias, recursos, procesos y enfoques que permitan garantizar las mejores opciones de formación y desarrollo individual en el contexto social, simbólico, económico, político, científico y tecnológico. Para estos efectos, los procesos de autoevaluación y acreditación serán permanentes y tendrán como objetivo el logro de altos niveles de calidad.

h. Innovación constante: los currículos requieren renovarse continuamente

con visión crítica y reflexiva considerando los cambios permanentes de las problemáticas sociales y del entorno, el mundo del conocimiento, el desarrollo tecnológico, las transformaciones culturales y el mundo del trabajo, en pro de la pertinencia educativa, la idoneidad profesional y el bienestar social.

i. Eficiencia y eficacia en el uso de los recursos institucionales para el

desarrollo de las actividades académicas, investigativas, de interacción social, bienestar y administración general de la institución.

j. Internacionalización: La universidad promueve el intercambio cultural como oportunidad para ampliar la comprensión del mundo, de tal manera que el proceso educativo se pueda relacionar con las corrientes no locales del pensamiento, la generación mundial del conocimiento y el reconocimiento internacional de los títulos y planes de estudio.


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k. Idoneidad: los programas académicos de la Universidad promueven en los estudiantes una formación que los haga personas autónomas, ciudadanos responsables y profesionales competentes. La universidad debe garantizar las condiciones para que los estudiantes cumplan en su formación estos propósitos.

CAPÍTULO II EL SISTEMA ACADÉMICO

ARTÍCULO 4. Elementos del sistema académico. Los elementos del sistema académico de la Universidad del Cauca son: los actores académicos: profesores, estudiantes y egresados, los programas académicos, la administración académica, los ambientes educativos y los medios educativos. Los profesores guían y apoyan a los estudiantes en el proceso de apropiación de los saberes correspondientes al nivel educativo matriculado y en el cumplimiento adecuado de su currículo, y orientan los programas y la administración académica de los mismos. La actividad de los profesores se consignará en la hoja de labor profesoral. Los estudiantes, con la asistencia de los profesores, la guía de los programas y bajo la dirección de la administración académica, desarrollan el proceso formativo orientado por el currículo. Sus características personales y los logros de sus ejecutorias curriculares se registran en la hoja de vida del estudiante. Los programas académicos desarrollan la visión institucional del currículo y orientan a profesores, estudiantes y administración en el cabal cumplimiento del proceso educativo correspondiente. Los programas académicos se formulan y registran mediante el formato de programas académicos. La administración académica suministra el soporte logístico indispensable para llevar a cabo la formulación, ejecución y evaluación de los programas académicos. Los planes, políticas y actos administrativos se comunican y registran mediante los diferentes tipos de documentos administrativos. Los ambientes educativos proporcionan el entorno adecuado de educación y formación. Su descripción, conformación y evolución se registra en la hoja de ambientes. Los medios educativos ofrecen el soporte tecnológico que apoya la comunicación y apropiación de los saberes en el proceso educativo,


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adquiridos y mantenidos por el sistema administrativo; se asignan a las diferentes instancias académicas para su manejo y utilización institucional eficiente. Su ciclo de vida se registra en la hoja datos de medios. Los egresados participan en los procesos de la Universidad directamente o a través de sus representantes en los principales órganos directivos y académicos de la institución, en la deliberación de sus planes, programas y procesos misionales y en el fortalecimiento de las relaciones con el entorno. ARTÍCULO 5. Las funciones de los elementos del sistema académico. Las funciones de los diversos elementos del sistema son: Los profesores realizan las funciones de planeación, ejecución y evaluación de las actividades de docencia, asesoría, consulta, valoración, dirección y evaluación de trabajos y pruebas estudiantiles. Además, participan en la formulación, ejecución y evaluación de programas y proyectos institucionales de investigación, desarrollo e innovación y de interacción social, así como de cultivo y formación permanente en la(s) disciplina(s) de su asignación. Igualmente, pueden desempeñar mediante comisión, cargos en las diferentes instancias. A los estudiantes corresponde adelantar su proceso de formación y participan en la planeación, ejecución y evaluación de las actividades curriculares señaladas en los respetivos programas académicos y reglamentos, así como en las actividades administrativas de los diferentes organismos e instancias a los que son convocados. Los estudiantes también pueden tomar parte en los programas de los demás sistemas universitarios, según lo estipulen las normas y reglamentos institucionales. A los administradores compete la planeación, organización, ejecución, control y evaluación de los diferentes programas, así como velar por el uso y manejo adecuado del patrimonio y los diferentes recursos institucionales. ARTÍCULO 6. Los procesos del sistema académico En el sistema académico se realizan los siguientes procesos: En relación con los estudiantes, realiza procesos de convocatoria, inscripción, selección, matrícula, registro de actividades curriculares, evaluación, seguimiento, registro de calificación, registro de participación en eventos académicos, culturales y deportivos, concesión de estímulos, definición de situaciones académicas, procesos disciplinarios y procesos relacionados con el bienestar estudiantil. En relación con los profesores se realizan procesos de convocatoria, selección, vinculación, asignación de labor, participación en eventos


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académicos, reconocimiento de producción intelectual, definición de situaciones administrativas, evaluación, seguimiento, educación permanente, ingreso y promoción en el escalafón, concesión de estímulos, procesos disciplinarios y procesos de bienestar. En relación con los programas se realizan los siguientes procesos: indagación social de demanda, especificación, diseño y reforma, socialización de la propuesta, rediseño, ajustes, aprobación por las distintas instancias universitarias, registro, difusión y promoción, ejecución, evaluación, registro calificado y acreditación. Cada uno de los procesos enunciados en esta disposición relativos a estudiantes, profesores y programas comprende, a su vez, subprocesos que serán reglamentados por los Consejos Superior o Académico, según su competencia. ARTÍCULO 7. Los procedimientos del sistema académico: Asociado a cada proceso y subproceso académico se establecerá el respectivo procedimiento, los responsables del mismo, las condiciones para iniciar el proceso, las entradas (solicitudes, órdenes, formatos, etc.), los pasos (etapas, operaciones, actividades, etc.), las salidas (Resoluciones, Acuerdos, autorizaciones, registros, etc.), los análisis (resúmenes, tendencias, etc.), los reportes (informes, registros, etc.) y las autoevaluaciones correspondientes. Igualmente se especificarán las interfaces (consultas, avisos, notificaciones, etc.) entre los diferentes procesos. Los procesos y procedimientos se consignarán en el Manual que se desarrolle para tales fines. ARTÍCULO 8. La estructura académico-administrativa: Desde el punto de vista administrativo, los estudiantes están adscritos a las Facultades a través de la matrícula en los programas académicos. El responsable administrativo directo es el Decano. Las instancias superiores son el Consejo de Facultad, la Rectoría, el Consejo Académico y el Consejo Superior. Las Vicerrectorías son organismos de coordinación y asesoría para todas estas instancias, cumplen funciones delegadas de la Rectoría. Los profesores están adscritos a los Departamentos de las Facultades. Corresponde al Jefe de Departamento elaborar la propuesta de labor, hacer seguimiento y evaluar el desempeño del profesor. El responsable administrativo directo de los profesores es el Decano de la Facultad, con asesoría del Comité de Personal Docente de la Facultad. Las instancias superiores son el Consejo de Facultad, la Rectoría, el Consejo Académico y


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el Consejo Superior. El Comité de Personal Docente Central es un organismo asesor de estas instancias. Al Comité de Asignación y Reconocimiento de Puntaje le corresponden actualmente las funciones asignadas en el Decreto 1279 de 2002 y las normas que lo complementen o sustituyan. Los programas son administrados por las Facultades, con apoyo de la Coordinación de Programa y el Comité de Programa. La instancia decisoria primaria sobre los programas es el Consejo de Facultad. Instancias administrativas superiores son el Consejo Académico y el Consejo Superior, con apoyo de la Vicerrectoría Académica y el Comité Curricular Central. ARTÍCULO 9. Relaciones con los otros sistemas universitarios El sistema académico interactúa de diversas maneras con los sistemas de investigación, desarrollo e innovación, de interacción social, de cultura y bienestar y de administración, de tal manera que se logre una comprensión y funcionamiento de la Universidad como un sistema de elementos interdependientes. El sistema académico promueve cambios y reformas curriculares para incorporar los desarrollos y avances investigativos; por su parte, el sistema de investigaciones nutre y permite el desarrollo de las disciplinas y saberes propios de los programas académicos que gestiona el sistema académico. De igual manera, la investigación de cara al contexto social, local, nacional e internacional, demanda del sistema académico la pertinencia de sus programas y su renovada actualización. El sistema académico a través de sus actores y programas interactúa con la sociedad en la que se inscribe, promoviendo programas pertinentes e interdisciplinarios que respondan a las necesidades del contexto y que busquen resolver los problemas que la realidad demanda, a través de la investigación, desarrollo e innovación y de la interacción social.

El sistema académico requiere para su desarrollo integral condiciones que fomenten el bienestar de la comunidad universitaria y las expresiones culturales, funciones que son inherentes al Sistema de Cultura y Bienestar.

Finalmente, el sistema administrativo vela por garantizar la estabilidad, integridad, aseguramiento y desarrollo de la vida Universitaria, y da soporte a la sostenibilidad de todos los sistemas.


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CAPÍTULO III LOS NIVELES EDUCATIVOS EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR DE LA

UNIVERSIDAD

ARTÍCULO 10. Desde el punto de vista del sistema educativo nacional en la Universidad del Cauca se distinguen los siguientes niveles: El nivel de técnico profesional atiende aquellos programas que tienen su objeto de dedicación en el dominio científico-tecnológico de equipos o procesos específicos. El nivel de tecnólogo profesional atiende aquellos programas que tienen por objeto de estudio las tecnologías, es decir, las formas sistemáticas diferenciadas de utilización de determinados principios físicos o lógicos para resolver problemas técnicos. El nivel de profesional universitario atiende aquellos programas que tienen por objeto de estudio y ocupación la solución de problemas dentro de un determinado ámbito social o sector económico. El nivel de especialista atiende aquellos programas que tienen por objeto la profundización en uno de los aspectos o componentes de la respectiva profesión. El nivel de maestría atiende aquellos programas que tienen por objeto la profundización investigativa teórico-sistemática de un saber o una de sus ramas. El nivel de doctorado atiende aquellos programas que tienen por objeto la investigación tendiente a la generación de nuevos saberes.

CAPÍTULO IV DEL CURRÍCULO

ARTÍCULO 11. El currículo es el proceso de construcción dialógica de experiencias (estudios, trabajos, prácticas, actitudes, actuaciones, expresiones, regulaciones, valoraciones, etc.), socialmente validado, mediante el cual se espera que el educando apropie críticamente la cultura asociada al nivel educativo en el que se inscribe. El currículo comprende tanto el ‘modelo’ o referencia social del educando, como las diferentes vivencias que experimenta orientadas a su apropiación cultural.


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Los programas académicos, en consecuencia, deben contener experiencias políticas, sociales, económicas y simbólicas que propicien la participación del educando en la vida cultural de la sociedad, tanto local como global. Para tal propósito, la Universidad se relaciona con organismos que permitan y fomenten el ejercicio democrático del poder (postulaciones, elecciones, discusiones, votaciones, normas, jerarquías, partidos, etc.), al mismo tiempo que fomenten la pertenencia -educativa- a corporaciones y organizaciones tanto dentro como fuera de la Universidad. Así mismo, la Universidad propicia la interacción, la sociabilidad y la convivencia pacífica; para ello posibilita la constitución de organizaciones de tipo social, tales como las de género, étnicas, ambientales, deportivas, gremiales, comunitarias, etc., al mismo tiempo que favorece la interacción con organizaciones sociales extrauniversitarias. En el aspecto económico, la Universidad posibilita la relación institucional, como entidad o de personas, con instituciones económicas extrauniversitarias. Finalmente, en el aspecto simbólico la Universidad permite y fomenta la constitución de asociaciones y grupos de expresión cultural de todo tipo, lingüística, científica, tecnológica, técnica, artística, folklórica, religiosa, filosófica, etc., que faciliten e incentiven la creación simbólica frente a las vivencias, los problemas y las necesidades sociales.

ARTÍCULO 12. La Universidad promoverá y garantizará el ofrecimiento de espacios y ambientes diversos, que favorezcan el proceso de formación del estudiante en los principios constitucionales, los valores democráticos, la convivencia ciudadana, la protección del ambiente, los principios éticos fundamentales de las profesiones y la sociedad, el buen uso de la lengua materna y la utilización de lenguas nativas y extranjeras, en concordancia con el P. E. I., las normas estatutarias, la Constitución Política y la Ley. ARTÍCULO 13. Dimensiones curriculares. De acuerdo con los objetivos y propósitos de la educación superior, se distinguen las siguientes dimensiones curriculares: cultural, científico-tecnológica, sectorial, de problemática social y de innovación e investigación. Estas dimensiones son comunes a los currículos de los programas académicos que ofrece la Universidad en sus diferentes niveles, pero guardan la especificidad referida a los propósitos de formación en cada nivel.


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ARTÍCULO 14. Actividades curriculares Los currículos universitarios se realizan mediante actividades curriculares, tales como clases, exposiciones, conversatorios, lecturas, elaboración de trabajos, participación en grupos temáticos, participación en eventos, etc., que pueden estar agrupadas en forma ascendente, en asignaturas, unidades temáticas, módulos y áreas, dentro de las dimensiones señaladas. Las asignaturas pueden utilizar diferentes metodologías como clases magistrales, seminarios, laboratorios, prácticas, pasantías, trabajos de grado, etc. El entrelazamiento de estas agrupaciones desde el punto de vista de la formación profesional constituye la malla curricular. ARTÍCULO 15. Los créditos académicos La Universidad asume el crédito académico como medida temporal del trabajo estudiantil que equivale a una dedicación de 48 horas de su tiempo. La planeación, preparación, ejecución y evaluación de las actividades curriculares en el marco de este sistema exigen diferentes tiempos de dedicación, tanto del profesor como del estudiante, aspecto que ha de ser tenido en cuenta para establecer el número de créditos en los programas. Cada programa deberá establecer y justificar los tiempos de dedicación del estudiante en cada una de las actividades curriculares que componen el currículo, teniendo en cuenta la necesidad estimada de tiempo para la preparación, la ejecución y la consolidación de la actividad. Igualmente, la Universidad definirá una política que correlacione los tiempos de dedicación de los profesores con los créditos académicos asignados a las actividades curriculares de los programas. Los programas deberán definir los medios educativos y espacios físicos requeridos para el desarrollo del trabajo de los estudiantes en condiciones que le hagan competente en función de los propósitos de formación establecidos en el programa. ARTÍCULO 16. Estrategias didácticas Las estrategias didácticas son las orientaciones generales y específicas de acción que definen y siguen los profesores universitarios para llevar a cabo la aproximación de los estudiantes al conocimiento y la producción de saberes contextualizados, de acuerdo con los planes de estudio establecidos para cada programa en los diferentes niveles de formación, con la pretensión de hacer realidad las articulación de los sistemas académico, de investigación, desarrollo e innovación, y de interacción social.


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CAPÍTULO V LOS PROGRAMAS ACADÉMICOS

ARTÍCULO 17. Clasificación de los programas La función educativa de la Universidad se cumple a través de programas académicos. Los programas son: formales, o conducentes a título; de educación continuada, o post-título; y de educación continua, o abiertos. Teniendo en cuenta su modalidad, los programas académicos son: presenciales, basados en métodos que implican la interacción cara a cara del profesor y el estudiante; virtuales, basados en tecnologías de Internet, que emulan la presencialidad; a distancia, basados en tecnologías de información y comunicación no presenciales diferentes a Internet, ni virtuales y mixtos, que usan métodos de uno u otro tipo. Según los niveles que cubran, los programas son de pregrado o de posgrado. ARTÍCULO 18. Programas de pregrado El objetivo de la educación universitaria de pregrado son las profesiones. Su propósito es la aplicación de conocimientos científico-tecnológicos a la solución de los problemas sociales sectoriales. La educación de pregrado es superior en cuanto se basa en un tratamiento riguroso de fundamentación profesional. Todo conocimiento profesional lo es en cuanto se expresa y aplica científicamente. ARTÍCULO 19. Títulos Según el nivel, los programas de pregrado pueden conducir a títulos de técnico profesional, tecnólogo profesional y profesional universitario. ARTÍCULO 20. Dimensiones curriculares De acuerdo con los objetivos y propósitos de la educación superior, concretamente, de la educación profesional, en los programas de pregrado se distinguen las siguientes dimensiones curriculares, sin perjuicio de las normas legales que rigen esta materia. a. Dimensión Cultural: su propósito es aportar al estudiante elementos que le posibiliten atribuir sentido y reinventar el mundo y su propia vida, desde el reconocimiento de la interacción y la tensión entre instituciones y subjetividades; esta dimensión se materializa mediante actividades para el


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estudio y la práctica de las diferentes expresiones que conforman la tradición y la identidad de las sociedades en las que el estudiante convive. b. Dimensión Científico-tecnológica: su propósito es introducir al estudiante en los principios, leyes, medidas, metodologías, procedimientos y demás elementos de algunas de las ciencias y las tecnologías que ha formulado y practicado la cultura humana. Se pretende que el estudiante tome contacto con la forma en que se hace ciencia y tecnología actualmente, a partir de un caso, tema o problema. Uno de los propósitos de esta dimensión es aproximar a los estudiantes a la manera como se abordan los saberes a nivel de maestrías y doctorados, ofreciendo un espectro amplio de actividades que atiendan sus preferencias e intereses. c. Dimensión Sectorial: su propósito es introducir al estudiante en el contexto del sistema cultural propio del campo profesional al que se refiere el programa académico, así como de sus fundamentos, lenguaje, problemáticas e implicaciones sociales.

En la dimensión sectorial se distinguen los siguientes componentes: Histórico: su propósito es introducir al estudiante en el análisis y comprensión de los aspectos significativos en el desarrollo de la profesión a lo largo del tiempo. El de Fundamentación: su propósito es introducir al estudiante en conceptos que constituyen las bases indispensables para su formación profesional. El Nuclear: su propósito es abarcar los temas y aspectos inherentes a la profesión, y el Complementario: cuyo propósito es la profundización de los conocimientos elegidos por el estudiante para ampliar su perspectiva profesional, a la vez que crear las interfaces indispensables para la interacción con otras profesiones o actividades relacionadas. d. Dimensión de Problemática Social: su propósito es posibilitar al estudiante la apropiación de discursos y prácticas de la profesión (entramados conceptuales y metodológicos) al reinterpretar problemas, en los que desarrolle capacidad crítica, compromiso y responsabilidad al articular el conocimiento académico y las necesidades sociales; es introducir al estudiante en los espacios, formas y problemas que constituyen el contexto en el que se ejerce hoy en día en nuestro medio la profesión respectiva, a fin de lograr la necesaria interacción Educación-Sociedad. Esta dimensión se realiza en un espacio curricular interdisciplinario e interprofesional, dada la complejidad de los problemas. e. Dimensión de Innovación e Investigación Aplicada: su propósito es introducir al estudiante, a partir de la dimensión anterior, en los problemas no solucionados de la práctica y la teoría disciplinaria y en las formas de proponer y encontrar soluciones innovadoras a los mismos a fin de contribuir al avance del conocimiento (artístico, filosófico, humanístico, científico-tecnológico) y a la solución de las necesidades sociales


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insatisfechas desde la respectiva profesión. El énfasis investigativo en los programas de educación superior de pregrado se orienta hacia la innovación y el desarrollo.

ARTÍCULO 21. Flexibilidad e interdisciplinariedad en las dimensiones curriculares

La flexibilidad refiere a la posibilidad de permitir al estudiante diferentes vías de movilidad dentro del currículo establecido institucionalmente. La flexibilidad curricular tiene por objeto crear espacios para los intereses y preferencias personales de los estudiantes dentro de los programas académicos y permitir, así, una moderada diversificación profesional, que enriquece su ejercicio. La flexibilidad curricular está presente especialmente en las dimensiones no sectoriales; en la dimensión sectorial, hasta tanto lo permitan la viabilidad profesoral, económica y técnica. La interdisciplinariedad hace referencia a la existencia de currículos abiertos que permitan el diálogo de profesores y estudiantes con otras disciplinas y formas de comprensión del mundo, así como a la posibilidad de conformar y consolidar comunidades académicas en los diferentes espacios institucionales. ARTÍCULO 22. Duración y créditos Los programas académicos universitarios tendrán una duración referencial promedio de diez (10) períodos académicos semestrales; los programas tecnológicos, de seis (6). Como política, la Universidad del Cauca no ofrecerá programas técnicos, salvo aquellos que se ofrezcan por ciclos. Un período académico semestral consta de 16 semanas de actividad curricular diferente a la evaluativa. Los programas universitarios de pregrado se planificarán sobre máximo 160 créditos y los tecnológicos sobre ochenta y cuatro (84) créditos. Los programas académicos universitarios presenciales podrán exigir como requisito de grado la realización de un trabajo de grado en sus distintas modalidades. Por su especificidad debidamente justificada, algunos de los programas académicos de la Universidad podrán modificar el patrón de referencia establecido. Los programas académicos deben especificar de acuerdo con su proyecto educativo el número de créditos, los contenidos, las metodologías, la


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dedicación profesoral requerida, los procesos de evaluación, los medios y recursos educativos para cada actividad curricular. Corresponde al profesorado en cada período hacer la planeación detallada de las actividades. Dado que el sistema de créditos no ofrece una medida del tipo ni de la profundidad de contenido, la Universidad establecerá diferencias entre créditos obtenidos en diversos niveles educativos en función de los objetivos de formación. Esto no obsta para que, en casos especiales, debidamente sustentados, pueda autorizarse tal homologación. Por las mismas razones, los objetivos profesionales, los créditos obtenidos en actividades curriculares de programas académicos de profesiones diferentes, aún sean del mismo nivel o subnivel educativo, en las dimensiones sectorial y de innovación/investigación no son necesariamente homologables. Las actividades curriculares de las dimensiones cultural, científico-tecnológica y problemática social, por sus objetivos, serán homologables. Será función de los Comités de Programa hacer el estudio de la viabilidad de homologación de créditos cuando se presente el caso de movilidad estudiantil. Para garantizar la movilidad interna los programas tecnológicos de la Universidad deberán establecer los criterios de homologación de créditos hacia los programas universitarios pertinentes de la misma Universidad. ARTÍCULO 23. Sobre la competencia profesional La competencia profesional implica la demostración certificada de la adecuada especificación, formulación, análisis de alternativas y solución científico-tecnológica de problemas contextualizados del campo profesional específico. La competencia profesional se considera integrada por dimensiones correspondientes con las dimensiones del currículo. La competencia en las diferentes dimensiones se concreta en aspectos específicos de la estructura curricular. Los programas académicos deberán especificar los aspectos de la competencia profesional que cada dimensión curricular debe enfocar, desarrollar y evaluar. La concesión del título profesional certifica que el estudiante ha cumplido con todas las exigencias requeridas para demostrar la adquisición de conocimientos, criterios de acción y habilidades prácticas para desempeñar


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la profesión y, por tanto, acredita al estudiante como profesional competente. ARTÍCULO 24. Programas de pregrado por ciclos Los programas de pregrado podrán establecer en casos específicos la formación por ciclos, la cual podrá contemplar la obtención encadenada de los títulos de técnico profesional, de tecnólogo profesional y de profesional universitario con el cumplimiento adecuado de los requisitos correspondientes a cada uno de los niveles. Dada la diferente naturaleza de los propósitos profesionales de cada nivel, el encadenamiento de los programas por ciclos no debe ser ni lineal ni excluyente. El nivel de tecnólogo profesional posibilita el acceso a programas profesionales universitarios afines. La formación por ciclos debe estipular las condiciones bajo las cuales los diferentes tecnólogos profesionales pueden acceder a ellos. ARTÍCULO 25. Programas de postgrado Los programas de postgrado son post-profesionales y de educación investigativa. Los programas de postgrado pueden conducir a los títulos de especialista, magíster y doctor. ARTÍCULO 26. Programas post-profesionales Se entienden como tales los que se orientan a la profundización o ampliación de la educación profesional. Son ellos: los programas de educación continuada, los programas de especialización y los programas de reprofesionalización. ARTÍCULO 27. Programas de educación continuada Los programas de educación continuada tienen por objeto actualizar periódicamente a los egresados en temas de su interés profesional. Tienen como requisito, por tanto, la obtención de un título profesional cualquiera. Cuando el temario del programa sea muy específico, puede contemplar la exigencia de un título particular. Sin embargo, el propósito general de estos programas debe estar abierto a los intereses de todos los profesionales. El tipo de programa básico para esta educación son los diplomados. Sin embargo, pueden también ofrecerse en forma de curso o cursos aislados, seminarios, ciclo de conferencias, etc.


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Estos programas serán administrados por las Facultades, con apoyo en los Comités de Programas o de Comités ad hoc. ARTÍCULO 28. Programas de especialización

Las especializaciones tienen como propósito la profundización en un campo específico de la profesión y el perfeccionamiento de la misma.

Los programas de especialización deberán tener entre 26 y 30 créditos académicos distribuidos en dos periodos académicos, con excepción de las especialidades en ciencias de la salud que se regirán por disposiciones especiales. ARTÍCULO 29. Programas de reprofesionalización La Universidad podrá establecer programas de reprofesionalización, dirigidos a profesionales egresados que deseen obtener título profesional en una profesión diferente a la inicialmente elegida. Estos programas parten del reconocimiento de la formación alcanzada y tienen como propósito complementar la misma hacia la nueva profesión mediante planes específicamente diseñados para el caso. ARTÍCULO 30. Programas de educación investigativa Se consideran como tales los que están orientados a la sistematización e investigación de frontera en las disciplinas y/o saberes y a la formación de investigadores en ellos. Los programas de educación investigativa son de maestría o de doctorado. ARTÍCULO 31. Programas de maestría

Su objetivo es el desarrollo de competencia para la profundización investigativa teórico-sistemática de una disciplina o saber. Las maestrías

podrán ser de profundización o de investigación.

Los programas de maestría deberán tener entre 45 y 60 créditos académicos, distribuidos en un mínimo de 3 y un máximo de 4 periodos académicos. ARTÍCULO 32. Programas de doctorado El propósito del doctorado es la investigación tendiente a la generación o comprobación de nuevos saberes.


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Los programas de doctorado deberán tener entre 120 y 150 créditos académicos, distribuidos en un mínimo de 8 y un máximo de 10 periodos académicos.

ARTÍCULO 33. Programas de postdoctorado

Estos programas tienen por objeto posibilitar la consolidación y actualización de los conocimientos doctorales o un eventual redireccionamiento de la línea de investigación del candidato. Se llevarán a cabo por medio de estadías y desarrollo de proyectos de investigación junto a grupos de reconocida excelencia en el área de trabajo del candidato. ARTÍCULO 34. Títulos Según el nivel, los programas de posgrado pueden conducir a títulos de especialista, magíster y doctor. ARTÍCULO 35. Programas de educación continua Son programas abiertos a la sociedad en general y tienen por objeto facilitar a la(s) comunidad(es) la apropiación de los saberes culturales indispensables para su desenvolvimiento en la sociedad contemporánea. Estos programas serán justificados por las Facultades de acuerdo con los grupos o comunidades locales o regionales, instituciones públicas y privadas, y en general con actores y sectores sociales. La gestión y administración de estos programas será similar a la de los programas de educación continuada. ARTÍCULO 36. Programas a distancia Estos programas se basan fundamentalmente en el trabajo autónomo del estudiante con estrategias de comunicación soportadas mayoritariamente en tecnologías que no exigen la presencia física permanente; requieren de un diseño cuidadoso y detallado de los materiales y las ayudas didácticas que los acompañan, además de tutorías para la orientación, acompañamiento y retroalimentación. El proceso de creación de estos programas es igual al de los programas presenciales y son administrados por la Facultad, con apoyo del Centro de Educación Abierta y a Distancia. ARTÍCULO 37. Programas virtuales Son programas virtuales aquellos que se diseñan y ejecutan mediante tecnologías que emulan la presencialidad entre profesor y estudiante.


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El proceso de creación de estos programas es igual al de los programas presenciales y son administrados por la respectiva Facultad, con apoyo del Centro de Educación Abierta, Virtual y a Distancia. La Universidad definirá la política de adopción y difusión de este tipo de programas, mediante la definición de un programa especial de preparación del talento humano y de los recursos tecnológicos requeridos. Igualmente, definirá una política para incorporar el uso de las TICs en los programas presenciales, con conocimiento y supervisión de los respectivos Comités de Programa. ARTÍCULO 38. La descentralización y regionalización de programas. La Universidad podrá descentralizar y regionalizar sus programas, definiendo en cada caso las modalidades más adecuadas. Para ello establecerá políticas que aseguren su calidad, pertinencia y sostenibilidad. Los programas serán administrados por las Facultades, con el apoyo del Centro de Educación Abierta y a Distancia.

CAPÍTULO VI LA PROGRAMACIÓN ACADÉMICA

ARTÍCULO 39. Como criterio general, la programación académica será por semestres. Sin embargo, programas especiales, por consideraciones justificadas, pueden optar por períodos académicos diferentes a semestres. Corresponde al Consejo Académico establecer los calendarios generales para el funcionamiento de los programas de pregrado y postgrado y a los Consejos de Facultad definir la programación académica de los programas administrados, en concordancia con el calendario general definido por el Consejo Académico. PARÁGRAFO. En los períodos intersemestrales podrán programarse actividades académicas con base en las disposiciones vigentes y las que para tales efectos apruebe el Consejo Académico.


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ARTÍCULO 40. El semestre académico será de 22 semanas, distribuidas así: a. 2 semanas para actividades de planeación, matrícula y coordinación de

las actividades académicas. b. 16 semanas para actividades académicas de docencia. c. 2 semanas para la evaluación final de las actividades académicas d. 2 semanas para las actividades de evaluación y cierre administrativo del

semestre académico. PARÁGRAFO 1. Para efectos del cálculo del número de créditos, se tomarán las 16 semanas de actividades académicas de docencia.

CAPÍTULO VII MEDIOS Y RECURSOS EDUCATIVOS

ARTÍCULO 41. Medios educativos Los programas educativos en la Universidad ofrecen las condiciones para el acceso permanente a la información, experimentación y práctica profesional necesaria para adelantarlos en concordancia con su naturaleza, modalidad, estructura y complejidad. Entre los medios educativos empleados actualmente se hace uso de las diversas tecnologías de la información y las comunicaciones, las cuales son utilizadas para potenciar y posibilitar procesos de aprendizaje autónomo y colaborativo, en función del cumplimiento de los objetivos de los programas académicos; el fortalecimiento de los planes de estudio en las diferentes modalidades y el desarrollo de proyectos de investigación e interacción social establecidos en cada unidad académica. ARTÍCULO 42. Tecnologías de comunicación educativa Los métodos didácticos hacen uso de diversas tecnologías de la comunicación, que serán utilizados de manera combinada en función de los objetivos curriculares establecidos en cada programa. ARTÍCULO 43. Recursos didácticos La Universidad provee las condiciones adecuadas de infraestructura tales como bibliotecas, laboratorios, talleres, equipos de cómputo y software, que cuentan con una organización administrativa para coordinar los procesos de capacitación y formación permanente en el uso adecuado y equitativo de los recursos.


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ARTÍCULO 44. Administración de los medios educativos y recursos didácticos La adquisición de los medios educativos y recursos didácticos es función del sistema administrativo de la Universidad. Los Comités de Programa harán la solicitud de los mismos, de acuerdo con las necesidades académicas. La administración de los mismos será responsabilidad de las Facultades, de común acuerdo con los Coordinadores de Programa.

CAPÍTULO VIII LA ADMINISTRACIÓN CURRICULAR

ARTÍCULO 45. Los programas académicos de la Universidad seguirán un riguroso proceso de caracterización, estudio de demanda, diseño, formulación, discusión, aprobación, planeación, implementación, evaluación y prospección. Para la administración de los programas académicos se distinguen las siguientes etapas: diseño/formulación, aprobación y ejecución. Para cada una de estas etapas se establece un modelo organizativo de responsabilidades. ARTÍCULO 46. Etapa de diseño y formulación Sin perjuicio de disposiciones legales que rigen esta materia, la formulación de los programas educativos de la Universidad, en cualquiera de sus tipos y modalidades, debe abarcar, cuando menos, los siguientes aspectos: a. La denominación del programa; b. La clasificación del programa según su tipo y modalidad. c. La justificación del programa y de su modalidad. d. La población objetivo y su caracterización. e. Los objetivos de formación. f. Los aportes humanos y sociales del programa. g. El perfil o identidad del egresado del programa. h. Los requisitos de los aspirantes al programa. i. El currículo y el plan de asignaturas y demás actividades educativas,

sus requisitos y créditos académicos. j. La duración y programación temporal. k. Las estrategias y metodologías de enseñanza y de aprendizaje, las

formas de seguimiento y de evaluación de las diferentes actividades y del programa en su conjunto, así como los recursos necesarios para desarrollarlas.

l. La certificación a que conduce y los requisitos para su otorgamiento.


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m. Los sitios, jornadas y condiciones en que se ofrece. n. La factibilidad del programa, con indicación de la disponibilidad del

personal y de los recursos locativos, científicos, tecnológicos, económicos, financieros y sociales para su ofrecimiento y desarrollo.

o. El presupuesto y la financiación del programa. ARTÍCULO 47. Competencias de los organismos Compete al Consejo de Facultad estudiar la propuesta de los nuevos programas, proponer al Rector el Coordinador de Programa y los profesores que integrarán el Comité de Programa y los Comités ad-hoc para su construcción, si es del caso. Corresponde a los Comités de Programa participar en las tareas de diseño, gestión, evaluación y mejoramiento; estarán integrados por el Coordinador de Programa, quien lo preside, tres profesores designados por el Consejo de Facultad y un representante estudiantil. PARAGRAFO. Los aspectos particulares del proceso de creación y reforma de programas de maestría y doctorado se regularán por lo previsto en las normas reglamentarias. ARTÍCULO 48. Etapa de aprobación Compete a los Consejos de Facultad avalar las propuestas de creación o reformas de los programas de acuerdo con los lineamientos institucionales. Corresponde al Consejo Académico, recomendar la creación o aprobar las reformas a los programas de acuerdo con las políticas institucionales y del orden nacional en materia de educación superior. La creación y autorización del funcionamiento de los programas es competencia del Consejo Superior, previo concepto del Consejo Académico. ARTÍCULO 49. Etapa de ejecución Compete a los Decanos de Facultad, con la asesoría de los Coordinadores de Programa, la supervisión de la asignación y del desempeño del profesorado vinculado a los programas, la realización de todas las labores administrativas asociadas a la gestión de los estudiantes y la administración de los recursos de todo orden requeridos por los programas a su cargo, así como la rendición de reportes e informes periódicos asociados con su marcha.


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ARTÍCULO 50. Etapa de evaluación Compete al Comité de Programa el análisis y evaluación de calidad de cada uno de los factores y resultados del programa, así como la sugerencia a las autoridades correspondientes de políticas y acciones encaminadas a su aseguramiento. De su actuación y resultados hará reportes e informes periódicos.

CAPÍTULO IX LA AUTOEVALUACIÓN Y LA ACREDITACIÓN INSTITUCIONAL

Y DE PROGRAMAS ARTÍCULO 51. El Programa de Autoevaluación y Acreditación de Calidad Institucional y de programas académicos es inherente a las funciones educativas, investigativa, de interacción social, de cultura y bienestar y de gestión administrativa, en concordancia con el Proyecto Institucional de la Universidad. El Programa de Autoevaluación y Acreditación de Calidad Institucional y de programas académicos está definido por el conjunto de instancias, actividades, procesos y acciones, dirigidas a construir una cultura de la autoevaluación y el mejoramiento continuo en la búsqueda de calidad en las funciones universitarias. Son objetivos de este Programa contribuir a la creación y consolidación de una cultura de la calidad; fomentar la cultura de mejoramiento continuo; poner en marcha procesos de autoevaluación de la calidad de los programas académicos; informar oportunamente a la sociedad, al Estado, a la comunidad universitaria, a los sectores institucionales, a los sectores productivos, a la comunidad y a los usuarios del área de influencia, sobre la calidad y pertinencia de la Institución y de sus programas y procesos académicos; contribuir a consolidar el sistema de información en el marco de los procesos de rendición de cuentas al Estado, a la sociedad y a la comunidad académica, que de manera autónoma o legal se establezcan. Todos los programas académicos, de investigación, desarrollo e innovación, o de interacción social deberán incorporar estrategias y metodologías de autoevaluación de sus procesos y al menos cada año deberán presentar los resultados del proceso de autoevaluación e igualmente los planes de mejoramiento resultantes a las instancias respectivas.


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Los procesos de autoevaluación Institucional y de Programas serán obligatorios en las condiciones que defina el Consejo Superior Universitario.

CAPÍTULO X

EL SISTEMA DE INFORMACIÓN ACADÉMICA

ARTÍCULO 52. El sistema de información académica hace parte del Sistema de Información de la Universidad y puede especificarse recurriendo a los modelos señalados en el capítulo III del presente Estatuto. Su objetivo es facilitar la toma de decisiones y la secuencia de procesos en todas las instancias académicas. Debe contener toda la información necesaria para soportar los procesos y procedimientos señalados en la normativa universitaria. Igualmente, debe soportar los procesos de registro, toma de decisión, consulta e informes relacionados con entidades estatales, instituciones sociales y personas con las que interacciona el Sistema Académico de la Universidad. En particular, soporta el proceso de seguimiento e interacción con los egresados. Su desarrollo, mantenimiento y actualización será responsabilidad de la División de Sistemas de la Universidad.

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