dulces suenos - robert bloch

Upload: igna-chia

Post on 28-Feb-2018

357 views

Category:

Documents


25 download

TRANSCRIPT

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    1/270

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    2/270

    Robert Bloch (1917-1994) empez a publicar muy joven, a los 18 aos, y

    enseguida se convirti en autor cotizado de las pginas de las revistas de

    gnero ms importantes de Norteamrica y del Reino Unido, y en especial de

    la mtica Weird Tales, adems de colaborar asiduamente en la radio, en la

    televisin y en el cine, donde gan fama universal gracias: a la adaptacinque hizo Alfred Hitchcock de su novela Psicosis.

    Discpulo de Lovecraft en sus primeros aos, pronto desarroll un estilo

    propio que no tardara en hacer escueta no solo entre los escritores pulp,

    sino entre los periodistas de sucesos.

    Su indiscutible talento llam la atencin tanto de Lovecraft como de August

    Derleth, que edit sus primeros libros en la clebre editorial Arkham House,

    donde apareci por primera vez, en 1960, la presente coleccin de cuentos:Dulces sueos

    Las quince Historias que integran el presente volumen nos revelan a Robert

    Bloch no slo como maestro del terror, sino como cronista de la Amrica

    profunda, una Amrica brutal, terrorfica, demoledora, haciendo de la fantasa

    un vehculo con el que transitar humorsticamente (o macabramente) por

    los riscos del gnero, fiel siempre a su tesis: la realidad es infinitamente ms

    terrorfica que la ficcin; un loco es mucho temible que el ms cruel de los

    vampiros de la tradicin literaria.

    Hay aqu, claro est, historias de vampiros y de fantasmas, como hay

    historias de alucinados y de inocentes que matan. E historias de nios

    perversos y de adultos adnicos no menos perversos La gran virtud de

    estos cuentos radica en que al final no sabemos quin es ms temible, si el

    vampiro con toda su tradicin cultural y libresca, o el inocente que mata

    precisamente porque quiere ser bondadoso. Como dijo Bloch en una nota de

    1993, para una recopilacin de sus cuentos: Espero que devoren ustedes

    estos cuentos antes de que ellos les devoren a ustedes.

    www.lectulandia.com - Pgina 2

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    3/270

    Robert Bloch

    Dulces sueos15 historias macabras

    Valdemar: Gtica - 61

    ePub r1.0

    orhi 29.04.16

    www.lectulandia.com - Pgina 3

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    4/270

    Ttulo original:Pleasant DreamsRobert Bloch, 1994Traduccin: Jos Luis Moreno-RuizPrlogo: Antonio Jos NavarroIlustracion de cubierta: Hugo Simberg /El jardn de la muerte (1896)

    Editor digital: orhi

    ePub base r1.2

    www.lectulandia.com - Pgina 4

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    5/270

    INTRODUCCIN

    ROBERT BLOCH:MS ALL DEL MOTEL BATES

    Antonio Jos Navarro

    De qu tengo miedo? De la gente, de los animales, de los insectos, de losmicroorganismos, de los accidentes, de los desastres naturales, de los desastresartificiales, de la guerra, del fuego, del deterioro fsico, de la enfermedad, de lavida y de la muerte.

    Robert Bloch-

    1. La tremenda popularidad que, a lo largo de sesenta aos de constante laborliteraria, alcanz Robert (Albert) Bloch, se apag como una vela el da en que falleciel escritor, vctima de un cncer, el 24 de septiembre de 1994. A partir de ese luctuosohecho, sus novelas, cuentos y ensayos, sus trabajos para radio, cine y televisin,cayeron en el ms penoso de los olvidos. Quiz porque intua tamaa ingratitud porparte de las nuevas generaciones de editores y lectores quienes, con enormetorpeza, rendan pleitesa a Stephen King, Dean R. Koontz o Peter Straub, unaspocas semanas antes de su muerte, Bloch, autor de relatos tan atractivos comoMadre de serpientes (Mother of Serpents, 1936) o El aprendiz de brujo (The

    Sorcerers Apprentice, 1949), se permiti un ltimo toque de humor negro, rasgopersonal siempre presente en su obra: public un artculo en la revista Omnidondeanunciaba, con absoluta solemnidad, el paso que la naturaleza le obligara a dar enbreve.

    Sin embargo, y no sin cierta irona, lo peor que le ocurri a Robert Bloch no fuesemejante desdnpost mortem, sino que una de sus novelas de horror ms clebres,Psicosis(Psycho, 1959), la adaptara al cine nada menos que Alfred Hitchcock. Unamujer desnuda bajo la ducha. Una sombra tras las cortinas. Un grito. El cuchillo que

    hiere el excitante cuerpo femenino una y otra vez. La sangre fluyendo lentamente porel desage La vertical y amenazadora mansin gtica, recortada sobre uninquietante cielo nocturno salpicado de espesas nubes grises; el perturbador yhorizontal Motel Bates, con su letrero luminoso anunciando habitaciones libresPsicosis, la pelcula, se convirti en un clsico de la Historia del Cine, en una obra dereferencia plagiada una y mil veces incluso por el propio Bloch: cf. El caso deLucy Harbin(Strait-Jacket, William Castle, 1964), y cuyos hallazgos narrativos yestticos derivaron en un manoseado clich hitchcockiano, no blochiano pido

    disculpas por el chirriante neologismo, como ponen en evidencia dos de los msdivertidos exploitsde Brian de Palma, Vestida para matar (Dressedto Kill, 1980) yDoble cuerpo (Body Double,1984). En definitiva, a partir de ese momento, mgico y

    www.lectulandia.com - Pgina 5

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    6/270

    aciago a un mismo tiempo, Robert Bloch se qued atrapado en el Motel Bates.Y lo ms llamativo de todo este asunto es que la novela inspiradora del film no

    figura entre las mejores obras de su autor. Sobre este particular, Franois Truffaut y elmismsimo Alfred Hitchcock comentaban[1]: Encontr la novela vergonzosamentetrucada. En el libro se leen cosas como sta: Norman fue a sentarse al lado de su

    anciana madre y sostuvieron una conversacin. Este convencionalismo de lanarracin molesta mucho. El film est contado con mayor lealtad y uno se da cuentade ello cuando lo vuelve a ver (Truffaut); creo que lo nico que me gust y medecidi a hacer la pelcula era la instantaneidad del asesinato en la ducha; es algocompletamente inesperado y, por ello, me sent interesado (Hitchcock). Por su parte,Bloch explicaba: Estoy absolutamente encantado con la adaptacin. Como sabes,generalmente se toma el ttulo del libro y ste se cambia radicalmente. Pero en estecaso, el noventa por ciento de mi libro est ah. nicamente se han hecho un par de

    cambios drsticos. Primero, la juventud de Norman Bates, lo cual era necesariovisualmente. Si se hubiese presentado al personaje como un hombre de medianaedad, automticamente habra atrado todas las sospechas, todo el mundo hubieseintuido que l era el villano. Fue un truco brillante en este sentido. La otra cosa fueque eliminaron amplios fragmentos del libro. Pero el resto de los personajes, de losdecorados, de los acontecimientos, son iguales hasta la ltima lnea[2].

    2. Existe, pues, un Robert Bloch ms all del Motel Bates? A veces cuestacreerlo, ya que l mismo intent perpetuar el xito de Psicosis con sendascontinuaciones de su mtica novela. Psicosis II (Psycho II, 1982) sin vnculoalguno con la pelcula que, un ao ms tarde, rod el australiano Richard Franklincon guin de Tom Holland[3] es, segn Jess Palacios: Superior secuela aloriginalPsicosis() Bloch aprovecha los aos transcurridos para trazar un ingeniosoanlisis del mito del psicpata, as como una sabrosa stira sobre el mundo deHollywood que tan bien conoca[4]. Sin olvidarnos de Psycho House / Psycho III(1990), donde Bloch efecta una cida reflexin sobre el papel que juega la violenciaen nuestra sociedad, sugiriendo que el mundo exterior al sanatorio mental donde sehalla recluido Norman Bates est ms trastornado y es mucho ms peligroso que elpopular psicpata travestido. Como le revel el propio Bloch al especialista DouglasE. Winter, enPsycho Housela violencia se ha convertido en algo que no slo puedeser presentado en trminos auto-explicativos, justificativos sta es la naturalezahumana, es mi manera de ser, y eso es todo, sino que tambin es una droga.

    Y cuando te has inoculado la primera dosis, te das cuenta que necesitas ms[5].Esto nos permite afirmar que, por encima de legtimos intereses crematsticos[6],

    Robert Bloch fue un literato equipado con su correspondiente arsenal de obsesiones

    creativas. Obsesiones que, dicho sea de paso, se vieron en ocasiones afectadas por elcarcter de escritor meditico que Bloch conserv durante dcadas. sta es,indiscutiblemente, una de las facetas ms sugestivas de su trayectoria creativa, y que

    www.lectulandia.com - Pgina 6

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    7/270

    le dio a su obra una mayor presencia, adems de una reconocida modernidad,adelantndose a vedettes como Stephen King. Robert Bloch escribi cerca decuatrocientos relatos cortos solamente para Weird Tales, la inolvidable revistapulpgracias a la cual se inici en la profesin, public unos 66 relatos y veintidsnovelas, pero a la vez comprendi que en el siglo XXlo fantstico, lo terrorfico, no se

    limitara exclusivamente a la pgina impresa. Espoleado por tan perspicaz reflexin,en 1945 particip directamente en la dramatizacin radiofnica de treinta y nueverelatos de horror, la mayor parte suyos y publicados con anterioridad, en el programaStay Tuned for Terror. El programa se emita desde Chicago, y cada captuloduraba quince intensos minutos, tal y como lo recordaba Bloch en su artculo StayTunedfor Terror(1973), aparecido en el nmero de agosto de la revista Gothism[7].Tambin permiti que varios de sus relatos fueran adaptados por Bill Gaines y Al

    Feldstein para la popular compaa EC Comics[8]; ms concretamente, El

    homnculo (The Mannikin, 1937) El jorobado! (The Hunchback!, The Hauntof Fearn 4, noviembre/diciembre de 1950), La capa (The Cloak, 1939). Lamscara del horror (The Mask of Horror, The Vault of Horrorn 18, abril/mayo de1951), Enoch (id., 1946) Horror en el pantano! (Horror We? HowsBayou?, The Haunt of Fearn 17, enero/febrero de 1953), Frozen Fear (1946)Un fiambre muy sabroso! (Coid Cuts!, Shock SuspenStories n 5,octubre/noviembre de 1952) y Dulces para esa dulzura (Sweets to the Sweet,1947) Pap ha perdido la cabeza! (Daddy Lost His Head!, Vault of Horrorn

    19, junio/julio de 1951)[9]

    .Empero, la televisin confirm plenamente a Robert Bloch como autormeditico. Escribi media docena de captulos, de treinta minutos de duracin,para la teleserieAlfred Hitchcock Presents(1955), experiencia que repiti siete aosms tarde con The Alfred Hitchcock Hour(1962), para la que redact los libretos deveinte captulos ms. La serie Thriller (1960) fue su siguiente trabajo comoargumentista: Bloch firm unos quince captulos de una hora de duracin. Noobstante, su ms recordada vinculacin a la pequea pantalla es su labor en Laconquista del espacio (Star Trek),a lo largo de su primera poca, 1966-1967, para lacual escribi tres historias originales, What Are Little Girls Made Of?(20/10/1966), Catspaw (27/10/1967) y Wolfin the Fold (22/12/1967). Alresponsable de cuentos tan perturbadores como Black Lotus (1935) o Lamaldicin de los druidas {The Druidic Doom, 1936) solamente le restaba dar unpaso muy pequeo para contactar con el cine, lugar donde casi lleg a desarrollar unacarrera paralela a su actividad literaria. Probablemente era una manera de devolverleal cine todo lo que ste le haba dado: su misma existencia como escritor. No escasual, por tanto, que el joven Bloch se interesara por lo fantstico y lo terrorfico

    desde que, a la edad de nueve aos, descubriera a Lon Chaney en la versin muda deElfantasma de la pera (The Phantom of the Opera,Rupert Julin, 1925). Semejanterevelacin pronto se vera acompaada por la febril lectura de Edgar Allan Poe,

    www.lectulandia.com - Pgina 7

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    8/270

    Arthur Machen y de los relatos publicados en la revista Weird Tales, en especial,aquellos firmados por H. P. Lovecraft (1890-1937), con quien empez a cartearseapenas cumplidos los diecisis aos.

    3. La narrativapulpde Robert Bloch posee una personalidad adusta, lbrega, que

    casi infunde temor. Su arte nada tiene que ver con el estragado estilo de sus colegasmenos brillantes, adiestrados en la ley del mnimo esfuerzo. Por ejemplo, en La risadel vampiro (The Grinning Ghoul, 1936), Bloch mezcla con notable habilidad losMitos de Cthulhu con el vampirismo; en La casa del hacha (House of the Hatchet,1941) combina de manera brillante el cido retrato del hasto conyugal que domina auna pareja de clase media, con la aficin malsana por el cine de terror, la curiosidadpor los lugares supuestamente encantados, el crimen pasional y lo puramentesobrenatural; en Suyo afectsimo, Jack el Destripador (Yours Truly, Jack the Ripper,1943), trasplanta al tristemente clebre asesino de Whitechapel al Boston de los aoscuarenta, acosado por el hijo de una de las mujeres asesinadas por el Destripador en1888; en El murcilago es mi hermano (The Bat is My Brother, 1944), el propioescritor declar: Recientemente me pregunt: qu hara yo si fuera un vampiro?Pues salir fuera y morder para vivir; en The Skull of the Marquis de Sade(1945), Bloch transforma la calavera del Divino Marqus en un fetiche malfico quecontagia su iniquidad a todos aquellos rarosindividuos que la codician estudiososde lo extrao, contrabandistas de objetos esotricos y morbosos, amantes de lasantigedades raras[10]arrastrndolos al crimen y, por supuesto, al sadismoms atroz.Detrs de su juego macabro Bloch fue un autor muy proclive al humor,salpimentado con unas pizcas de soterrada mala uva, ligado a una indudablepredisposicin a lo grotesco y a una acusada tendencia a la frivolidad, al puroentertainment se esconda su fascinacin por la esfera de lo invisible, ya sea atravs de la mente de un psicpata o de la sbita irrupcin de un vampiro en nuestraaburrida vida cotidiana, o mediante la pervivencia, entre los pliegues de nuestracivilizada sociedad, de ciertas atvicas fuerzas malignas.

    Ahora bien, cuando Robert Bloch empieza a escribir para el cine, nace con l un

    apasionado del artificio, del Grand Guignol. Ttulos tan extraos como El gabineteCaligari (The Cabinet of Caligari,Roger Kay, 1962) que nada tiene que ver con elclsico del cine expresionista alemn dirigido por Robert Wiene en 1919,El gabinetedel Dr. Caligari (Das Kabinett des Dr. Caligari), en el cual una mujer conproblemas mentales es manipulada por un siniestro hipnotizador, o la ya citada Elcaso de Lucy Harbin, su primera colaboracin con el rey del gimmick, elrealizador y productor Wiliam Castle[11], en donde una mujer, Lucy Harbin (JoanCrawford), regresa a su hogar para enfrentarse a sus demonios, tras haber pasado

    veinte aos internada en un sanatorio mental por perpetrar un crimen pasional decapit con un hacha a su marido, son, entre otros, Films que ponen de relieve elgusto de Bloch por, parafraseando a la historiadora Agns Pierron, una explotacin

    www.lectulandia.com - Pgina 8

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    9/270

    melodramtica de la vesania con una curiosidad malsana, dolorosa, por todo elsufrimiento humano[12]. Incluso un thrillertlas caractersticas de The Night Walker(William Castle, 1964) al servicio de dos estrellas hollywoodienses en decadencia,Barbara Stanwyck y Robert Taylor goza de unas considerables dosis de efectismo,al igual que dos de sus ms aplaudidas colaboraciones con la productora inglesa

    Amicus Productions, especializada en cine de terror, La mansin de los crmenes(The House That Dripped Blood,Peter Duffell, 1970) y Refugio macabro (Asylum,Roy Ward Baker, 1972) cintas de sketchque ilustran conocidos relatos de Bloch,como Los maniques del horror (Mannikins of Horror, 1937) o Method forMurder (1962), en las cuales Robert Bloch se recrea, satisfecho, en los aspectosms truculentos e irrelevantes de la trama, en construir personajes demasiadoprevisibles, en sorprender al espectador con finales alambicados y retorcidos(twisted).

    4. Incluso sus ms acrrimos detractores reconocen que la mejor poca creativade Robert Bloch abarca su etapa como escritor pulp y, muy especialmente, suscolaboraciones para Weird Tales, revista que Bloch empez a leer, segn revel, en elverano de 1927[13], a la edad de diez aos. En Weird Talespublic su primer cuentode manera profesional, The Feast in the Abbey, en el nmero de enero de 1935, yall trabara amistad epistolar con la persona que ms iba a influir en su carrera esosprimeros aos, H. P. Lovecraft. Bien, he recibido toda la influencia posible deLovecraft confes Bloch. Es el hombre que ms admiro en el mundo de la

    literatura fantstica, despus de Edgar Allan Poe. Fue l quien me sugiri queescribiera, quien me empuj a escribir. Fue el responsable de mi trayectoria comoescritor. Y me gustara decir que Lovecraft es, probablemente, el ms poderosoinflujo formativo, aparte de mis padres, de toda mi vida. Nunca tuvimos un encuentropersonal, pero creo que lo conoc bastante bien a lo largo de los cinco aos quemantuvimos de correspondencia prosigue. Nunca fui a visitarlo a su ciudadnatal, Providence, debido a que, en aquellos das, yo viva muy lejos, en Wisconsin, ydurante los tiempos de la Depresin la gente no viajaba demasiado porque era caro y,adems, yo era muy joven para conducir un automvil (). Hasta 1945, que fuiinvitado a la primera World Fantasy Convention, no pis Providence. Entonces tuvela oportunidad de visitar su tumba, de pasear por las calles que frecuent y de vertodos los lugares donde ambient sus historias. Incluida la iglesia en la cual mipersonaje era asesinado en la historia que me dedic, concluye.

    El asesinato al que se refiere Robert Bloch bastante truculento, puesto que sualter egoen la ficcin, Robert Blake, cuya excesiva imaginacin y desequilibrio sevieron agravados por su descubrimiento de un culto satnico ya desaparecido,falleca victima de un shock, con el rostro contrado por una mueca de loco terror,

    asesinato, conviene destacarlo, ya legendario en los anales de la literatura de terroranglosajona del siglo XX, forma parte de un singular juego literario con el mismo H.P. Lovecraft de protagonista. En el nmero de Weird Tales correspondiente a

    www.lectulandia.com - Pgina 9

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    10/270

    septiembre de 1935, apareci un cuento de Bloch titulado El vampiro estelar (TheShambler from the Stars), protagonizado por un mstico de Providence (NuevaInglaterra) fcilmente identificable como Lovecraft que muere de modo horribledesangrado por una monstruosa entidad sobrenatural tras recitar unos conjurosdel libro mgico De Vermis Mysteriis. Antes de ofrecer el relato a la revista, Bloch

    pidi permiso a su maestro para matarle, a lo que ste accedi gentilmente porescrito: A quien corresponda: Certifico que Robert Bloch () queda plenamenteautorizado para retratar, matar, aniquilar, desintegrar, transfigurar, metamorfosear omaltratar al abajo firmante en el cuento titulado The Shambler from the Stars.Pero ah no finaliz el asunto. H. P. Lovecraft, contraviniendo su acrisolada fama dehombre serio, no dud en continuar la macabra humorada de Bloch, hacindolevctima, a su vez, de Azathot y sus abominables aclitos, bajo la identidad del escritorRobert Blake. El morador de las tinieblas (The Haunter of the Dark), ttulo del

    relato en cuestin, se public en el nmero de diciembre de 1936 en Weird Tales.Desaparecido Lovecraft, y como ltimo y emotivo homenaje, Robert Bloch concluyeste intercambio de siniestras fantasas con La sombra que huy del capitel (Theshadow from the Steeple, 1951). En esta ocasin, Lovecraft ya aparece como tal,imbricado en la narracin como amigo del fallecido Robert Blake y cronista de sumuerte.

    5. Deseoso de imitar a sus dolos entre los que se encontraba Seabury Quinn, elpadre literario del gran investigador de lo oculto Jules de Grandin. Robert Blochse integr de manera rauda y vehemente en lo que ms tarde se denominara elCrculo Lovecraft. Al igual que August Derleth, Donald Wandrei, Clark AshtonSmith y Frank Belknap Long, Bloch contribuy a los Mitos de Cthulhu con suspropios (falsos) libros versados en oscuros saberes ocultistas, todos ellos mulos delNecronomicnde Abdul Alhazred, comoLa Cbala de Saboth, elDaemonolorumy,principalmente, el ya mencionado De Vermis Mysteriislibro de arcana sabiduraesotrica, citado explcitamente por uno de los mayores admiradores de Bloch,Stephen King, en su relato Los Misterios del Gusano (Jerusalems Lot, 1978).Tambin fue el autor de narraciones de horror csmicocomo El Dios sin cara (The

    Faceless God, 1936), The Dark Demon (1936), The Brood of Bubastis (1937) ola tarda y sugestiva Cuaderno hallado en una casa deshabitada (Notebook Foundina Deserted House,1951).

    Empero, Bloch no slo escribi para Weird Tales relatos de inspiracinlovecraftiana. De hecho, su fidelidad a la revista, ms all de razones puramentesentimentales o de afinidades personales Weird Tales pagaba a un centavo porpalabra, mientras que otros pulps, como Love Stories o True Confessions, por nohablar de publicaciones como Collierso The Saturday Evening Post, pagaban entre 3

    y 5 centavos, se deba a la libertad de creacin que Farnsworth Wright (18881940), editor jefe de Weird Tales, daba a los colaboradores, lo cual no implicaba unamerma en la calidad exigida. Sola tener un ndice de devoluciones del 20%

    www.lectulandia.com - Pgina 10

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    11/270

    aclaraba Bloch. Aunque siempre se poda reciclar el material o venderlo a otrasrevistas. De cualquier forma, yo era un privilegiado. Escuchaba historias acerca de

    otros colegas con porcentajes mucho ms altos[14].Los cuentos que integran la presente antologa, Pleasant Dreams (Dulces

    sueos) yque fueron publicados por primera vez en forma de libro, en 1960, por

    August Derleth y su editorial Arkham House, de la que era director y propietario,son una muestra muy representativa del talento de Robert Bloch. Por ejemplo,Enoch (Enoch) Weird Tales, septiembre de 1946, Dulces para lo dulce(Sweets to the Sweet) Weird Tales, marzo de 1947, The Cheaters WeirdTales, noviembre de 1947, La gatera (Catnip) Weird Tales, marzo de 1948 yEl aprendiz de brujo (The Sorcerers Apprentic) Weird Tales, enero de 1949,corresponden a su ms fructfera etapa como escritor, espoleado por necesidadeseconmicas y vitales. Viv de la literatura pulpa lo largo del periodo entre 1935 y

    1942 explicaba Robert Bloch, simplemente porque en esa poca, para subsistir,se necesitaba nicamente entre cien y doscientos dlares al mes. Podas vivirdecentemente. Aunque si quera ganar ese dinero, incluso doscientos cincuentadlares al mes, tena que ser productivo y escribir unas veinticinco mil palabras.Quiz porque mucha de la gente a la que llamamos normal ganaba quince,dieciocho, veinte o veintids dlares a la semana como conductores de camin,contables en un almacn y en ocupaciones que no requeran un alto grado deespecializacin o de formacin. En 1942, mi mujer, que haba sufrido tuberculosis en

    la cadera, tuvo una recada. Necesitaba ms dinero para cubrir los gastos mdicos. En1943 naci mi hija. En consecuencia, eso tambin aument mis gastos. As que mefui a trabajar a una agencia de publicidad. Y lo hice convencido de que as podracontinuar con mi carrera. Y durante los siguientes once aos eso fue que lo hice,compaginar mis dos actividades. En 1953, dej mi trabajo porque mi esposa empeor.Nos trasladamos a su ciudad natal, pues en el caso de que quedara discapacitada, almenos tendra la compaa de sus familiares y amigos. Y entonces volv a dedicarmepor completo a escribir, y no he dejado de hacerlo desde entonces, concluye[15].

    En consecuencia, Robert Bloch vendera sus relatos a otras publicaciones pulp,las cuales le proporcionaban mejores ingresos, al tiempo que se labraba un nombredentro del sector. A The Hungry House Imagination, abril de 1951, TheDream Makers Beyond Fantasy Fiction, septiembre de 1953 y SleepingBeauty Swank, marzo de 1958, le seguiran sus trabajos para las revistas

    Fantasy & Science Fiction[16], I Kiss Your Shadow abril de 1956, The ProperSpirit marzo de 1957 y That Hell-Bound Train septiembre de 1958,adems de Fantastic Magazine[17], con The Lighthouse enero-febrero de 1953, Mr Steinway abril de 1954, Sweet Sixteen mayo de 1958 y

    Hungarian Rhapsody junio de 1958, firmas que pretendan recoger el testigode Weird Tales, que cerr sus puertas en 1954, tras doscientos setenta y nuevenmeros publicados.

    www.lectulandia.com - Pgina 11

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    12/270

    6. Gracias al apoyo de su amigo August Derleth, quien le insista en que nopasara su vida sin publicar un libro, Bloch recopil varios cuentos previamenteaparecidos en distintas revistas y, junto a un relato indito, The Opener of the Way,se los entreg a Derleth para su publicacin en Arkham House. The Opener of the

    Way (1945) fue la primera de las treinta y tres antologas de historias cortas queBloch public a partir de ese momento. Su segunda antologa para Arkham House,Dulces sueos caus un mayor impacto popular que la primera y le procur unsustancioso adelanto de 600 dlares que, junto a los 750 que la editorial Simon &Schuster le haba pagado por la novela Cra cuervos (The Dead Beat, 1960) publicada en Espaa por Plaza & Jans, en 1961, con traduccin de A. Rivero, leayudaran a subsistir todo un ao.

    Revisada hoy en da, Dulces sueos resulta todo un acontecimiento para elamante de la literatura fantstica y de terror. Sus relatos, giles, directos, envueltos enuna tenue atmsfera de malignidad, de perversin, nos ofrecen un sinfn de figuras,palabras e imgenes que la fantasa y el intelecto se esfuerzan en seguir. Intrigadospor esa variedad, aceptamos el juego que nos propone Robert Bloch, sin darnoscuenta que el autor, por un lado, nos empuja hacia el abismo con una sonrisa nosabemos si irnica o sdica, como castigo a nuestra enfermiza curiosidad o para solazdel avieso creador, mientras que, por otro, nos seala aquellos puntos negrosexistentes en el interior de nuestra ms ablica cotidianidad y, a veces, en el interiorde nuestras almas. As pues, en La gatera, un envanecido adolescente que

    imaginamos ataviado con apretados tejanos azules, pelo engominado y un cigarrillobarato en la comisura de los labios, residente junto a sus padres en un cmodobarrio de clase media, tiene la temeraria ocurrencia de provocar la muerte de unabruja que vive, sin molestar a nadie, cerca de su casa, y cuya mascota, un inquietantegato negro, preparar una terrible venganza En El aprendiz de brujo, lamanipulacin y engaos que sufre un desdichado disminuido psquico a manos deunos feriantes sin escrpulos un mago y su ayudante femenina, pareja en la vidareal, con graves problemas afectivos, desembocar en una mgica tragedia

    Pero la impresin ms fuerte que producen estos relatos es la de estar viendo unade esas viejas, perturbadoras, vigorosas pelculas de terror de serie B en contrastado,expresionista blanco y negro, que de vez en cuando se proyectan en filmotecas o seemiten por televisin. Tal vez por ello los cuentos que constituyen Dulces sueostoleran mal las citas, incluso su mero resumen argumental en una apresurada sinopsis.La densa textura narrativa de los mismos reposa especialmente en la facilidad deRobert Bloch para la representacin visual, para el apunte sarcstico, para laevocacin de detalles superfluos que, ms tarde, ganarn importancia, ejemplifican la

    labor de un escritor popular en el sentido ms noble del trmino, estimulancabalmente el placer siempre variado de la lectura. Desde el horror La casahambrienta a las historias puramente bizarrasDulces para lo dulce, desde

    www.lectulandia.com - Pgina 12

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    13/270

    la ciencia ficcin Tren infernal, que gan el premio Hugo de 1959 al mejor relatobreve o macabras revisiones de clsicos de la literatura infantil La belladurmiente. Dulces sueos confirma algo que ya sospechbamos: que RobertBloch es un clsico del gnero, ms all del Motel Bates.

    www.lectulandia.com - Pgina 13

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    14/270

    DULCES PARA LO DULCE

    (Sweets to the Sweet[18])

    IRMAno pareca una bruja.Era menuda y bien proporcionada, con el aspecto de un melocotn en almbar,

    con los ojos azules, con un fantstico cabello rubio ceniciento. Despus de todo, slotena ocho aos.

    Por qu joroba tanto esta nia? suspir miss Pall. Ser porque tiene esamana de decir que es una pequea bruja

    Sam Steever recost su gran espalda en la chirriante silla giratoria y dej caer susgrandes manos sobre su regazo. Su cara gorda de abogado era una mscarainexpresiva, pero realmente estaba angustiado.

    Una mujer como miss Pall no debera suspirar lloriqueante. Sus gafas grandes, sufina nariz respingona, las arrugas enrojecidas de sus prpados y su cabello duro se ledesordenaban por completo.

    Tranquilcese, por favor le rog Sam Steever tratando de ganrsela. Quizsi hablramos de todo esto tranquilamente

    No puedo! se lament miss Pall, de nuevo lloriqueante. Y no volver aesa casa. No puedo soportarlo. Adems, no hay nada que yo pueda hacer. Se trata de

    su hermano y la nia es la hija de su hermano. No es responsabilidad ma. Ya hetratado suficientemente de

    Ya s que lo ha intentado dijo Sam Steever sonriendo bondadoso, como simiss Pall fuera la presidenta de un jurado. La comprendo perfectamente Peroan no entiendo por qu est usted tan atacada, mi querida seora.

    Miss Pall se quit las gafas y enjug unas lgrimas de sus ojos con un paueloestampado de flores. Despus lo meti hecho una bola empapada en su bolso, cerr elbolso, se puso las gafas otra vez y se irgui tensa.

    De acuerdo, Mr. Steever dijo. Le dir cul fue la razn de que aceptara elempleo que me ofreci su hermano suspir antes de seguir diciendo: Acud aJohn Steever hace dos aos despus de leer un anuncio en el que peda un ama dellaves, como ya sabe usted. Cuando supe que adems tendra que hacerme cargo deuna hurfana de seis aos me asust, no saba nada de cmo cuidar nios.

    John tuvo contratada una niera durante seis aos asinti Sam Steever. Yasabe usted que la madre de Irma muri en el parto.

    Lo supe entonces y por eso acept dijo miss Pall muy peripuesta.

    Naturalmente, me volqu de todo corazn con aquella nia solitaria y maleducadaEstaba terriblemente sola, Mr. Steever; si la hubiera visto por los rincones de esa casatan grande, vieja y fea

    www.lectulandia.com - Pgina 14

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    15/270

    La vi respondi Sam Steever rpido, intentando atajarla. Y s muy biencunto ha hecho usted por Irma. Mi hermano tiende a la introspeccin, incluso en lascosas que ms directamente le afectan. l no comprende

    Su hermano es cruel dijo miss Pall con una vehemencia inslita. Cruel ymalvado. Aunque se trate de su hermano, le dir que no sera un buen padre para

    ningn nio. Cuando vine aqu, la nia tena los bracitos llenos de moratones, y lossigue teniendo Su hermano se quita el cinturn y

    Lo s Muchas veces he pensado que mi hermano no ha podido superar lamuerte de su esposa Por eso me alegr tanto de que la contratara a usted paracuidar de la nia, mi querida seora. Estoy seguro de que usted puede ayudarlamucho y controlar la situacin.

    Lo he intentado volvi a suspirar miss Pall. Bien sabe usted que lo heintentado. Nunca he levantado la mano contra esa nia en dos aos, por mucho que su

    hermano me haya recomendado que lo hiciera. Dele unas tortas a esa pequea bruja,todo lo que necesita es una buena paliza, suele decir l, y entonces la nia corre aesconderse tras de m y me pide que la proteja Pero nunca llora, Mr. SteeverPuede que no lo crea, pero le digo que nunca la he visto llorar.

    Sam Steever se senta vagamente irritado y un poco molesto. Deseaba que aquellavieja gallinota, sin embargo, dejara de crear problemas, as que sonri paraengatusarla.

    Bien, cul es realmente su problema, mi querida seora? pregunt.Cuando llegu a la casa todo fue bien. Nos entendamos perfectamente los tres.

    Comenc a ensear a leer a Irma, y realmente me sorprendi que aprendiera tanpronto y tan bien. Su hermano deca al principio que l tambin me ayudara aensear ms cosas a la nia, pero luego se pasaba el tiempo en la planta de arriba,tirado en un sof con un libro. Igual que ella, deca refirindose a Irma. Esapequea bruja mal nacida no juega con los dems nios S, es una pequea bruja.Eso deca, Mr. Steever, como si la nia fuese una especie de no s qu Pero lania era dulce, tranquila y tan guapa Quiere saber qu lea? Yo quise que leyera lomismo que yo haba ledo a su edad, pero nunca supuse Bien, no sabe usted cun

    chocante me result verla un da leyendo un volumen de la Enciclopedia Britnica.Qu lees, Irma?, le pregunt, y me mostr lo que lea. Era el artculo dedicado a labrujera Ve usted qu pensamientos tan morbosos ha inculcado su hermano a esapobre criatura? Le aseguro que siempre he hecho las cosas lo mejor que he podido.Le compr juguetes, pues ya sabe usted que no tena ni uno, ni siquiera una mueca.Y no saba jugar con ellos! Intent igualmente que conociera, que se interesara porlas dems nias del vecindario, y nada La verdad es que no la entendan y que Irmatampoco las entenda Incluso hubo algunas escenas que Los nios son crueles,

    ya lo sabemos. El caso es que el padre de Irma no quera que fuese al colegio. Era yoquien la enseaba esas pocas cosas que sabe Por ejemplo, a modelar el barro. AIrma le gustaba eso. Se poda pasar horas y horas modelando caras en barro. Para

    www.lectulandia.com - Pgina 15

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    16/270

    tener seis aos posea un talento realmente grande. Juntas hacamos muecas, para lasque yo cosa vestiditos Aquel primer ao fue realmente feliz, a pesar de todo, Mr.Steever. Sobre todo durante los meses en que su hermano estuvo fuera, enSudamrica Pero cuando regres Bueno, prefiero no hablar de eso

    Por favor intervino Sam Steever, comprenda que John no es un hombre

    feliz. La prdida de su esposa, despus el hundimiento de su negocio Y la bebidaQu le voy a decir que no sepa usted.

    Slo s que odia a Irma miss Pall se ech a llorar tras decirlo. La odia, s.En realidad quiere que Irma sea mala para poder castigarla. Si usted no imponedisciplina a esa pequea bruja tendr que hacerlo yo, me dice. Y sube la escalera, sequita el cinturn y azota a la pobre criatura Tiene usted que hacer algo, Mr.Steever, o de lo contrario me ver obligada a acudir a las autoridades.

    Sam Steever pens que aquella vieja loca podra ser capaz de cumplir su

    amenaza. El nico remedio, ms tacto, tratar de engatusarla como fuese.Bien, en cuanto a Irma comenz a decir.Ha cambiado mucho lo interrumpi miss Pall, sobre todo desde el regreso

    de su padre Ya no juega conmigo, incluso me mira casi con asco Es como sipensara que no la protejo suficientemente de ese hombre, Mr. Steever Y encimacree realmente que es una bruja.

    Loco. Estaba a punto de volverse loco. Sam Steever tena que hacer verdaderosesfuerzos para mantener el tipo, no paraba de moverse en su silla chirriante.

    No me mire as, Mr. Steever La nia seguramente le contar todo lo que yole he dicho, si va a visitarla.

    Sam Steever capt el reproche que haba en las palabras de aquella mujer, pero selimit a asentir con aire despreciativo.

    Mire, no hace mucho me dijo la nia que si su padre quera que fuese unabruja, lo sera Y creo que si no juega ya conmigo, ni quiere hacerlo con nadie, esporque est convencida de que las brujas no juegan. El ltimo Halloween me pidiuna escoba La verdad es que sera gracioso, si en el fondo no fuera todo tantrgico. Esta pobre nia est perdiendo la razn Pero hace unas semanas me

    sorprendi al pedirme que la llevara el domingo a la iglesia, lo que me hizo creer porun momento que cambiaba para bien. Quiero ver un bautizo, me dijo. Imagnese,una nia de ocho aos interesndose por el bautismo, algo sobre lo que haba ledobastante. Bien, fuimos a la iglesia e Irma se mostr todo lo dulce que realmente es,con su vestido azul nuevo, de mi mano todo el rato Me senta muy orgullosa deella, Mr. Steever, realmente orgullosa Pero una vez salimos de la iglesia volvi ameterse en su concha. De nuevo se pasaba el da vagando por la casa, leyendo,paseando por el jardn cuando empezaba a oscurecer y hablando en voz alta consigo

    misma Creo que su actitud se deba a que su hermano, Mr. Steever, se neg acomprarle una mascota. La nia le pidi un gato negro, y cuando l le pregunt porqu, le respondi: Porque todas las brujas tienen un gato negro. Entonces la

    www.lectulandia.com - Pgina 16

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    17/270

    condujo a la planta superior. No pude impedir que la golpeara, imagnese Tambinla golpe una noche en que se fue la luz y no encontramos las velas Su hermanodijo que la nia las haba robado Ya ve usted, acusar a una nia de ocho aos derobar velas se fue el principio del fin Y cuando encontr el cepillo para elpelo

    Quiere decir que tambin la golpea con el cepillo para el pelo?S. La nia admiti que lo haba cogido para peinar a su muecaPero no deca usted que no juega con muecas?Ella misma se hizo una Estoy segura de que la hizo ella misma, s Yo no la

    he visto No nos la ha enseado. Ni la lleva a la mesa para hablar con ella Es unamueca pequea, lo intuyo porque no se la ve cuando la lleva en sus brazos, y porquedijo que haba cogido el cepillo para peinarla cuando l le pregunt dnde estaba. Asu hermano, Mr. Steever, le dio un autntico ataque de locura, la verdad es que se

    haba pasado toda la maana en su habitacin, bebiendo sin parar. La nia le dijosonriente que ya poda peinarse con su cepillo para el pelo, y que ella misma se lotraera despus de peinar a su mueca Se levant, fue a su cuarto y regres con elcepillo, en el que observ que haba cabellos. Nada ms verlo, l se lo arrebat ycomenz a golpearla con el cepillo en los hombros, y en los brazos, y entonces miss Pall se hundi en su asiento, entre sollozos que le agitaban el pecho.

    Sam Steever se inclin sobre ella como un elefante sobre un canario herido.Eso es todo, Mr. Steever sigui un poco despus miss Pall. Tena que

    decrselo a usted. No volver a esa casa ni para recoger mis cosas No podrasoportar ni un momento ms ver cmo la golpea, ni comprobar que la nia no llora,sino que re y re y re mientras la golpea A veces he llegado a pensar querealmente es una bruja, la bruja en que la ha convertido su padre.

    SAMSteever levant el auricular. La llamada de telfono haba roto el silencio en que

    se hallaba tras la marcha de miss Pall.Hola, SamReconoci de inmediato la voz de su hermano, la voz de alguien que estaba

    bebido.S, John, dime.Supongo que ese viejo murcilago habr estado ah, soltando la lenguaSi te refieres a miss Pall, s, la he visto.No le prestes atencin. Puedo explicrtelo todo.Quieres que vaya a verte? Hace mucho que no te visito, hace mesesBueno, ahora mismo no Tengo una cita con el mdico esta tarde.Algo va mal?

    Me duele un brazo. Reumatismo o algo as. He debido de coger fro. Te llamarde nuevo maana y hablaremos sobre todo eso.

    De acuerdo.

    www.lectulandia.com - Pgina 17

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    18/270

    Pero John Steever no llam a su hermano al da siguiente. Fue Sam quien llam ala hora de la cena.

    Para su sorpresa, Irma descolg el telfono. Su voz suave son encantadora ydulce a odos de Sam.

    Pap est arriba, durmiendo No se encuentra bien.

    Vale, entonces no le llames Es su brazo?No, ahora es la espalda Va a ir al mdico otra vez.Dile que le llamar maana Eh Todo va bien, Irma? Est contigo miss

    Pall?No, se ha ido y estoy muy triste Es una estpida.Ya comprendo Llmame si necesitas algo, de acuerdo? Espero que tu pap

    se ponga bien pronto.Te llamar si necesito algo dijo Irma echndose a rer y colg el auricular.

    No haba risas la tarde siguiente, cuando John Steever llam a Sam a su despacho.Su voz era la de un hombre sobrio. Sobrio y dolorido.Sam, ven a verme, por el amor de Dios Me est ocurriendo algoQu te pasa?Tengo un dolor que me mata Tengo que verte cuanto antes.Estoy con un cliente, pero ir en cuanto acabe, ser cosa de unos minutos

    Por qu no llamas al mdico?Ese intil no puede ayudarme. Me mand unas pastillas para el brazo y ayer me

    dio las mismas para la espaldaNo te aliviaron?Al principio, s; desapareci el dolor, pero ahora lo siento de nuevo y ms

    fuerte Es un dolor que me oprime el pecho y no me deja respirar.Podra ser pleuresa Deberas llamar al mdico.No es pleuresa, ya me examin y dijo que no era eso Dice que mi pecho

    suena como un dlar S que no es nada orgnico, pero no puedo decirle la causareal

    La causa real?

    S, los alfileres Los alfileres que esa pequea bruja clava en su mueca Enel brazo, en la espalda Slo Dios sabe cmo lo hace

    John, no querrs decirVale ya de palabras! No me puedo mover de la cama por su culpa, estoy en sus

    manos No puedo levantarme y detenerla, ni quitarle su maldita mueca. Y lo peorde todo es que nadie me creera Pero te aseguro que se trata de la mueca que hizocon cera de velas y con los cabellos que tom de mi cepillo para el pelo S, ya sque es duro decirlo, pero esta nia es una pequea bruja Es una malvada. Sam,

    promteme que hars algo, lo que sea, para quitarle esa maldita mueca Qutasela,por favor

    www.lectulandia.com - Pgina 18

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    19/270

    MEDIAhora despus, a las cuatro y media de la tarde, Sam Steever llegaba a la casade su hermano.

    Irma le abri la puerta.A Sam le produjo un gran impacto verla all, sonriente e imperturbable, con su

    pelo rubio bien peinado que realzaba el valo delicioso de su carita. Era como unapequea mueca Una pequea mueca

    Hola, to Sam.Hola, Irma Tu pap me ha llamado, no te lo ha dicho? Dice que no se siente

    muy bienYa lo s. Pero est bien ahora. Est durmiendo.Algo sinti Sam Steever. Como si una gota de agua helada le recorriese la

    espalda.

    Que est durmiendo? pregunt con la voz algo quebrada. Arriba?Antes de que la nia pudiese abrir la boca para responder, ya estaba l subiendolos peldaos de la escalera que llevaba a la planta superior de la casa, para ir rpido ala habitacin de John.

    John estaba en la cama, dormido, slo dormido Sam Steveer vio que respirabanormalmente, pero as y todo se inclin sobre el pecho de su hermano paracomprobarlo. John tena el rostro en calma, relajado.

    A Sam se le evapor aquella gota helada que le recorra la espalda; sonri y sedijo que todo aquello era una tontera; respir profundamente y se dispuso a bajar.

    Mientras descenda por la escalera fue haciendo planes. Unas vacaciones de seismeses para su hermano, eso que llaman una cura. Y un orfanato para Irma; habaque darle a la nia la oportunidad de abandonar aquella casa tan vieja, todos esoslibros tan mrbidos

    Se detuvo en mitad de la escalera. Inclinndose sobre la balaustrada vio a Irma enel sof; pareca la nia una pequea bola blanca, de tan replegada sobre s mismacomo estaba. Hablaba con algo que tena en sus brazos, a lo que meca.

    As que aquello era su mueca

    Sam Steever sigui bajando los peldaos despacio, sin hacer ruido, y se dirigi aIrma.

    Hola dijo.La nia se levant de golpe. Cubri por completo con sus brazos aquello que

    acunaba. Sonri taimada y sorprendida apretndolo ms contra su pecho.Sam Steever pens que acabara metindose la mueca en el pecho, de tanto

    como la apretaba.Irma estaba de pie ante l, su cara era una mscara de inocencia. En la penumbra

    de la casa su cara pareca realmente una mscara. La mscara de una nia queocultaba Qu ocultaba?

    Pap est mejor, no? dijo Irma en voz baja.

    www.lectulandia.com - Pgina 19

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    20/270

    S, mucho mejor.Estaba segura de que se pondra bien.Pero me temo que va a tener que irse una temporada, para descansar

    Necesita un largo descanso.Una sonrisa ilumin la mscara.

    Bien dijo Irma.Claro que sigui diciendo Sam no vas a quedarte aqu sola Estaba

    pensando Quiz deberamos mandarte a un colegio, o a una casa en la queIrma se ech a rer.No tienes que preocuparte por m dijo recostndose de nuevo en el sof

    mientras Sam tomaba asiento frente a ella, muy cerca.Los brazos de la nia se abrieron con aquel movimiento y Sam Steever pudo ver

    entre ellos un par de piernecitas que descansaban en un codo de la pequea. Aquello

    tena puesto unos pantaloncitos y unos trocitos de piel a modo de zapatos.Qu tienes ah, Irma? Una mueca? pregunt Sam.Lentamente extendi la mano hacia ella.La nia se ech hacia atrs.No puedes verla dijo.Me gustara dijo Sam, miss Pall me dijo que hacas unas muecas muy

    bonitas.Miss Pall es una estpida. Y t tambin Lrgate.Por favor, Irma, djame verlaMientras hablaba, Sam intentaba por todos los medios ver aquello; lo consigui a

    medias, al moverse la nia para cubrir mejor su mueca con el cuerpo. Sam lleg aver una cabeza muy bien hecha, una cara muy blanca sobre la que caa algo de peloA pesar de lo fugaz de la visin, a pesar de la penumbra, consigui ver igualmenteunos ojos, una nariz, una barbilla, cosas que reconoci perfectamente.

    Tena que insistir.Dame esa mueca, Irma orden a la nia. S qu es S quin esPor unos momentos se borr de la cara de Irma la mscara y Sam Steever vio que

    aquel rostro desnudo de la nia expresaba miedo.Ella lo saba Saba que l lo saba.Pero de inmediato volvi a aparecer la mscara en su carita.Irma era una nia dulce, buena, aplicada que sonrea con ojos maliciosos.To Sam dijo rindose, eres tan tonto Esto no es una mueca de verdad.Qu es? inquiri l.Irma se ech a rer de nuevo mientras se ergua en el sof.Slo es un caramelo dijo.

    Un caramelo?Irma asinti. Luego, lentamente, se meti en la boca la cabeza de aquello.Y se lo comi.

    www.lectulandia.com - Pgina 20

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    21/270

    Arriba se dej sentir un grito desgarrador.Cuando Sam Steever subi aprisa la escalera, la pequea Irma, masticando an,

    sali por la puerta de la casa para perderse en la oscuridad incipiente.

    www.lectulandia.com - Pgina 21

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    22/270

    LOS HACEDORES DE SUEOS

    (The Dream-Makers[19])

    1

    ME he ganado el derecho de hacer ese trabajo. Es as de simple. No puedoquedarme fuera por culpa de la palabrera Hollywood es una ciudad enloquecida,llena de locos; y por eso ocurren aqu cosas realmente de locura. Yo puedo darleilacin a ese cuento y escribirlo.

    Pero haba un problema. No era un cuento, me haba ocurrido.Empecemos por el principio, conmigo al volante de mi coche aquella tarde y

    dejando Wilshire para dirigirme a un lugar llamado Restlawn. Tena un encargo; la

    revistaFildomquera hacer una serie dedicada a los grandes del cine de otro tiempo yyo era su hombre Su hombre hambriento.

    Pas la Miracle Mile y entr en Beverly Hills, dirigindome despacio a laautopista. No me iba a resultar difcil hacer aquel trabajo.

    Los grandes del cine de otro tiempo Eso me gustaba, la verdad. Saba cmohacerlo, husmeando un poco en la Casa del Actor y en la Central de Castings; nohaba ms que seguir por entre aquellas casas de una planta y los canalones ydesages de Main Street.

    All fue donde vivieron la mayor parte de los grandes del cine de otro tiempo.Hombres y mujeres que nacieron y crecieron con la industriahasta que la industria selos comi Pickford, Cooper, Gable y otros cuantos no tuvieron por qu lamentarse.Sobrevivieron. Se retiraron a salvo. Valentino, Chaney y Fairbanks tampoco tuvieronque lamentarse en exceso, pues murieron cuando estaban en la cumbre del xito.

    Pero qu fue de aquellos que no tuvieron la suerte de morir cuando estaban en lacumbre del xito, gentes como Griffith, Langdon y Barrymore, que tan amargo finaltuvieron? Y qu se ha hecho de esos que an no han muerto, como Sennet, Lloyd,Gish y alguna docena ms? A stos tambin hay que considerarlos grandes del cinede otro tiempo.

    Pensaba en ellos mientras giraba para salir de Wilshire, pasar por WestwoodVillage y meterme por unas calles estrechas. S, lo saba todo acerca de los grandesdel cine de otro tiempo. Lo saba todo de los premios que recibieron de la Academia,de los suntuosos banquetes, de las puertas que se les cerraban en las narices al dasiguiente Lo saba todo acerca de los humillantes papelitos que les dieron despusen pelculas de poca monta, lo saba todo acerca de las pomposamente llamadascolaboraciones especialesque hacan en otras pelculas, cosa que deca claramente

    hasta qu punto haban perdido su status.Podra resultarles doloroso que les entrevistara Y quiz a m me resultara

    igualmente doloroso hacer aquel trabajo.

    www.lectulandia.com - Pgina 22

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    23/270

    Pero un hombre tiene que comer Y tiene que soarPara m nunca haban sido grandes de otro tiempo slo por los sueos, pues stos

    se me haban ido treinta aos atrs, y sin embargo ellos, sus hacedores, vivan an enmis recuerdos.

    Bien, lo cierto es que mientras conduca en direccin a Santa Mnica me vi

    sumido en el recuerdo de uno de aquellos sueos O en una gran pesadilla.Fue un mircoles de una clida noche de otoo en Maywood, Illinois, del ao

    1925. La noche es un momento magnfico para los clmax, sobre todo si tienes ochoaos y vas al Lido solo, como un chico mayor. Al da siguiente haba clase en elcolegio, claro, pero haba prometido a mam no volver tarde y no quera ser malo.

    Tenas que recorrer ocho bloques para llegar al cine, ocho excitantes bloques atravs de la oscuridad del otoo, con el dinero para la entrada en tu mano derecha yuna moneda para comprar una piruleta en la mano izquierda.

    El Lido es un palacio. Guardan sus puertas columnas de mrmol muy altas, perono entras directamente. Primero vas a mirar las carteleras, pintadas a todo color lasgrandes y fotos en blanco y negro las pequeas. Ah est esa hermosa mujer con largamelena, ah est el hombre enmascarado Y aqu est la mujer en lo ms alto de unedificio junto a otro hombre vestido con uniforme militar. Ese hombre tienemostachos. Tiene que ser el hroe.

    Pero ah est de nuevo el hombre enmascarado, espindoles. No le puedes ver lacara. Est agazapado tras una gran estatua o algo as y los mira seguramente rabioso,lo ves incluso a pesar de su mscara. Seguro que est rabioso, s, seguro que lo est

    Son casi las siete y va a empezar la pelcula, as que vas a la taquilla y pides unaentrada a la bonita chica que la atiende; es una chica, adems, muy elegante. Tesonre, enreda en una mquina y te da el ticket. Vas a la entrada y alargas el ticket aun hombre que tambin te sonre. Vas luego a la barra donde venden dulces yrefrescos y compras tu piruleta. Luego te diriges a la sala y te sientas. Va a empezar lapelcula.

    Todo es maravilloso en el Lido, su vestbulo es espectacular. Alfombras rojas,butacas tapizadas tambin en rojo, una gran fuente con agua para beber a un lado,

    agua que sale continuamente, no como en casa, que tienes que abrir el grifo y luegocerrarlo.

    Pero mucho mejor es an la sala cuando se apagan las luces. Tienes por lo menosmil butacas para escoger dnde sentarte, todas muy bien tapizadas, blandas, cmodas.Cuando te recuestas en una te sientes como metido justo en medio de la pelcula, yves cabezas a ras de las butacas aqu y all, a derecha e izquierda, adelante y atrs, ymiras a ver si reconoces en alguna de ellas la de otro nio del colegio. Quieres que tevean en el cine solo, como un chico mayor Y despus miras hacia arriba, al techo,

    como si mirases al cielo.El Lido tiene en el techo un cielo tan azul como el que se ve fuera Un cielo

    lleno de estrellas! Y flanquean las butacas, en los pasillos, filas de estatuas contra la

    www.lectulandia.com - Pgina 23

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    24/270

    pared. Las estrellas del techo brillan cuando las luces estn encendidas Pero ahoradejas de mirarlas y escuchas

    Te acomodas lo mejor que puedes en tu mullida butaca, y miras de nuevo al cieloraso repleto de estrellas mientras te invade la msica que se escucha en la sala.Msica de un rgano maravillosamente tocado del que salen las notas de Valencia, de

    Blue Skies, deAvalon y esa cancin, Collegiate, que se escucha en The Freshman,la pelcula de Harold Lloyd.

    Ya se apagan las luces, salvo las pequeas que hay sobre las puertas indicando lasalida y las que flanquean el escenario; cesa la msica y se escucha algo parecido aun rumor, bajo y excitante Corre el teln, como por arte de magia; se apagan lasluces leves que hay a los lados del escenario y se ilumina la pantalla. Empieza lapelcula, todo lo invade ya su luz.

    La pantalla se llena de nombres que parecen escritos, uno bajo el otro, por las

    manos de chicos bromistas Suena de nuevo la msica del rgano, pero ms baja.Pierde inters. Lo que interesa ya es la proyeccin. Empiezan entonces los dibujos deFelix the Cat, y sale primero un ratoncillo y despus un tipo viejo, un granjero calvoy con barba. La parte ms divertida viene cuando el gato Flix lo empuja con la horcade apilar el heno y el tipo cae a una charca, y sale de all con un pez en la boca

    Pero la comedia que dan despus es mucho mejor. Ah est Billy Dooley vestidode marinero. Billy Dooley es uno de los ms grandes, mucho mejor que BobbyVernon y que Al St. John, aunque no tanto como Lloyd Hamilton, Larry Semon oLupino Lae Esta pelcula es realmente divertida y todo el mundo se re. BillyDooley salta por el aire y mueve los pies como si fueran alas tres veces, antes de caerde nuevo al suelo tranquilamente. Cmo harn eso?

    Suena al Final la msica, ha concluido la pelcula y se encienden unas lucesazules no ms de un minuto. Va a comenzar el largometraje, el que en realidadqueras ver. Intuyes, por la msica que suena y por esas luces azules que han estadoencendidas brevemente, que es una gran pelcula. Ah est el enmascarado; quiere ala chica para s, ha colgado a un tipo en una celda. La rapta y se la lleva al lugarsecreto donde duerme en un atad y toca el rgano. All est, tocando con la mscara

    puesta; la chica est a su lado; sabes qu va a hacer y esperas.Finalmente lo hace; ella le quita la mscara. La cara llena la pantalla, parece

    desbordar la pantalla e inundar la sala, no hay en el mundo nada ms que esa cara,apenas piel estragada sobre la calavera, una cara podrida, unos ojos hundidos con losque soars esa noche y muchas noches ms.

    se es el sueo que te provoc Lon ChaneyS, Lon Chaney creaba sueos muy reales por aquellos tiempos. Nunca ha habido

    otro monstruo como Chaney, nunca ha habido un villano tan arrogante como

    Strohein, nunca ha habido una herona tan adorable como Barbara La Marr, ni unhroe tan valiente como William S. Hart.

    Todo eso me haba llegado a la mente como desde un milln de aos atrs, para

    www.lectulandia.com - Pgina 24

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    25/270

    irse en un segundo, mientras conduca por la Caprice Drive. Luca el sol.Caa el sol sobre aquel lugar llamado Restlawn. Aparqu, sal del coche, llam al

    timbre.La mujer que abri la puerta vesta un uniforme almidonado. Tambin tena el

    pelo y los ojos almidonados. Y cara de sanatorio. Y voz de sanatorio.

    Disculpe, soy de la revistaFilmdomy vengo a ver a Mr. Franklin.Tiene cita con l?Llam por telfono esta maana.Habitacin 216, en la segunda planta.Sub por la escalera. Sub despacio, sin fijarme mucho, pensando en lo que haba

    supuesto que vera; una vez ms, mi sueo Esperaba ver a un hombre con elcabello completamente blanco sentado ante la ventana de su habitacin en aquelsanatorio. Mirando a travs de la ventana la calle palpitante y mirando de vez en

    cuando las fotos de unos cuantos muertos que colgaban de las paredes de suhabitacin, con dedicatorias tales como para Jeffrey Franklin, el mejor director delmundo. Firmadas por gente como Mickey Neilan, Mabel Normand, Lowell Shermany John Gilbert.

    Haba que suponerlos muertos de verdad, y a l viejo y enfermo? Segua siendopara muchos el mejor director de cine del mundo. Tanto para m como para otros, quenos gastbamos an el dinero para ver sus pelculas cuando las ponan en algn cine.Que no haba hecho ninguna pelcula desde el 29, porque despus se generaliz elcine sonoro? Y qu? Antes de eso haba sido un autntico hacedor de sueos.

    Veamos Eso haba ocurrido veinticuatro, casi veinticinco aos atrs Costabaimaginarlo an vivo. Debera ser tan viejo como Dios. Me resultaba tristeentrevistarlo, muy triste Pero un hombre tiene que comer.

    Llam levemente a su puerta de la habitacin 216. Una voz dijo: Adelante.Abr la puerta y entr. Y empez un nuevo sueo

    2

    ENun anuncio publicitario que haba visto un cuarto de siglo atrs, Jeffrey Franklinera un hombre alto y con el cabello negro, que fumaba en una muy elegantecachimba. Bien plantado, firme, saludable y fuerte, con su barbilla prepotente eincluso agresiva.

    Ver ahora a Jeffrey Franklin te provocaba un shock inevitable.Segua siendo un hombre alto y con el cabello negro, que fumaba en una muy

    elegante pipa. Bien plantado, firme, saludable y fuerte, con su barbilla prepotente e

    incluso agresiva.Aguard a que hablara, mirndole.Pase y sintese, pngase cmodo me invit.

    www.lectulandia.com - Pgina 25

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    26/270

    No resultaba difcil encontrarse cmodo all porque la 216 era una autntica suite.En realidad eran dos habitaciones en una, dormitorio y saln. Muy espaciosas las dos,sobre todo el saln.

    La cama no era la tpica de los hospitales, y nada all recordaba la habitacin deun hospital, esa incomodidad institucionalizada con sus muebles baratos e

    incmodos; por el contrario, me vi en medio de una decoracin sobria, masculina,que podramos llamar elegante ms que lujuriosa. No haba fotos dedicadas en lasparedes. Todo el ambiente de la suite era de este tiempo. Como el propio JeffreyFranklin.

    Quiere tomar algo?Aqu? pregunt extraado, pues no en vano estbamos en un sanatorio.l sonri.Soy un husped de pago, no un paciente Un poco de alcohol tonifica los

    nervios Impide que un hombre envejezca.Pues s parece que le haga a usted ese efecto dije para adularle, pero lsonri condescendiente.

    En ese mueble hay whisky y agua, de acuerdo?Muy bien.Y hablando de muebles, qu le ha parecido Frisbie?Quin?Miss Frisbie, el dragn que guarda las puertas de este lugar No le parece

    perfecta para el papel que desempea?Asent. Me senta realmente a gusto, incluso antes de que pusiera en mi mano el

    vaso.Me sent en un silln orejero y Jeffrey Franklin compuso una figura perfecta,

    incluso un tanto pagada de s misma, en el sof, frente a m. Era como uno de esosdistinguidos caballeros de otro tiempo, pero como mis pensamientos iban an msatrs, me pareca no slo un caballero distinguido y respetable, sino un hroe dignode Shakespeare. Cmo no iba a componer una figura bastante pagada de s misma?

    Record de golpe, sin embargo, por qu haba ido hasta all, lo que me hizo sentir

    embarazado una vez ms. l se dio cuenta. Posea una intuicin ms que reseable,sobre todo teniendo en cuenta su edad (Dios mo, cuntos aos tendra? Seguroque setenta, por lo menos. Todo aquel ambiente, l mismo, por supuesto, meimpresionaban sobremanera).

    No es fcil, verdad? dijo en voz baja, sonriendo.Qu no es fcil?

    Convertirse en un buitre[20]dijo alzando una mano. No quiero decir quehaga usted algo indigno, hijo S que se limita a trabajar, tiene que conseguir su

    historia Pero ya me gustara que me hubieran dado una moneda de veinticincocentavos por cada reportero que ha venido hasta aqu con la espada desenvainadapara revolver con ella en lo que queda de los ltimos veinte aos

    www.lectulandia.com - Pgina 26

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    27/270

    Lleva aqu tanto tiempo?Dijo que s con la cabeza.As es Casi desdeRevolution.Su ltima pelculaMi ltima pelcula El golpe definitivo lo dijo sin emocin alguna en la

    voz.PeroMe gusta estar aqu.Pero usted no est enfermo y, si me permite decirlo, no creo que est acabado,

    no lo parece Es ms, creo que podra volver tranquilamente al cine, supongo queno le faltaran contratos, y que

    Me gusta estar aqu.Fue an ms lejos.

    Mucho me temo dijo que no podr ofrecerle una historia lacrimgena,como tampoco lo son las de Walter Harland, o Peggy Dorr, o Danny Keene, o tantosotros de mis viejos camaradas Ninguno de nosotros ha desaparecido; tampocosomos reliquias venerables Le resultara en vano obtener de nosotros una solalgrima.

    Era mi turno de ir un poco ms all.Mr. Franklin, quiero dejar bien clara una cosa No pretendo escribir una

    historia lacrimgena. Voy a escribir acerca de lo que vea, nada ms. Crame, nada mealegra tanto como comprobar que est usted aqu simplemente porque le da la ganaNo voy a dejar que mis sueos interfieran en este trabajo.

    Sus sueos? dijo acrecentando su pose de caballero distinguido, poniendosus largas manos sobre las rodillas, enderezndose en su asiento, para mi satisfaccin,como quien puede parecer cualquier cosa menos un ancianito dispuesto siempre acontar sus aburridas historias. Qu quiere decir usted con eso de sus sueos?

    Se lo cont, o lo intent al menos Mi sueo acerca de Chaney en The Phantomof the Opera. El sueo acerca de Keaton en The General. Y segu bajando el telncon Robin Hood, con Charlie comindose el zapato, con Renee Adoree dando

    traspis ante el camin en The Big ParadeAs hasta revivir por lo menos mediocentenar de momentos memorables que golpeaban mi mente con un gran sentido derealidad como el que tuve en aquellos das de mi niez, cuando vi todas esaspelculas.

    Estuve hablando mucho rato. Acerca de las pelculas, de los actores, de losgrandes directores del cine mudo Acerca del efecto sensacional de la msica delrgano, de la autohipnosis a que llevaban los ttricos sonidos del rgano queambientaba las pelculas. Daba igual si haba estado solo o acompaado cuando vi

    todas aquellas pelculas, me admiraban igualmente. Con cuntos cientos, o miles, omillones de otros seres haba compartido aquella experiencia (todos nosotros, hoy,gentes en la edad mediana de sus vidas, algo difcil de aceptar), con cuntos compart

    www.lectulandia.com - Pgina 27

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    28/270

    las ilusiones de aquellos buenos tiempos cuando la pantalla de plata era realmenteplateada y brillaba con un extrao encantamiento.

    Trataba de figurarme, mientras hablaba, qu era lo que en verdad haba cambiado.Sera slo que ya no era un nio? No, porque haba vuelto a ver esas pelculas enrepetidas ocasiones, en cuanto haba un pase especial: Caligari, por supuesto; Zorro,

    Intolerance, docenas de otros ttulos Las ltimas secuencias de The Strong Man,tan graciosas; la escena de The Thiefen la que Doug hechiza y levanta del polvo a unejrcito es tambin un puro encantamiento.

    Bien, en cuanto a la admiracin, cul es la actitud hoy da de la radio, latelevisin, los ambientes artsticos ms o menos a la moda, en lo que a las viejascelebridades se refiere? Por qu se les rinde tan escaso tributo?

    Es que acaso la guerra, la posguerra, la nueva era del terror; es que acaso labomba atmica ha hecho algo ms que dividir el tomo; es que todo eso no ha

    servido ms que para arruinar los sueos?La materia de la que estn hechos los sueos dijo Franklin.Era, desde luego, un hombre con su repertorio cual es debido. Dijo eso con

    mucho nfasis, pero supe que lo deca con toda sinceridad.Me resulta extraa su especulacin sobre todo aquello musit ahora. No

    creo que nadie, salvo nosotros mismos, los protagonistas de aquel tiempo, hayamosnotado el cambio que se ha producido escrutaba mi mirada. Walter Harland yTom Humphrey, entre otros, an estn juntos y recuerdan Debera usted hablar conellos, si quiere hacer una serie de reportajes. An estn en bastante buena forma, apesar de su edad, le ser fcil dar con ellos.

    Aprovech la puerta que me abra.Creo que se ofendera si los tratara igual que a usted dije. Francamente, no

    podra contemplarlo a usted como a ellos Admito que esperabaEsto?Jeffrey Franklin se levant abruptamente y desapareci de mi vista, por as

    decirlo. En su lugar qued un viejo encorvado, tullido, seco y lleno de arrugas, conlos dedos como garras rascndose la barbilla tremolante. Record que, al fin y al

    cabo, haba sido actor adems de director, y que uno de sus trucos favoritos comodirector consista en interpretar ante sus actores todos los papeles de la pelcula, paraque supieran cmo hacerlos bien.

    Tras su representacin volvi a sentarse.Los aos no pasan en balde dijo. Todo acab para m conRevolution, mi

    nico error Una pelcula que hice en contra de la opinin de los dems. Y no heintentado que las cosas cambiaran desde entonces, como Walter, como Tom, comoPeggy y todos los dems Hubo una conspiracin, en cierto modo.

    Alert los odos, levant la cabeza, lo mir ms fijamente an; ola una historia entodo aquello.

    Una conspiracin? dije. S, he odo algn rumor; dicen que intentaron

    www.lectulandia.com - Pgina 28

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    29/270

    que usted abandonara el cine cuando lleg el sonido y los estudios hubieron dereorganizarse. Lo pusieron a usted realmente en una lista negra?

    Jeffrey Franklin hizo una cosa realmente extraa. Mir al techo y comprend queoa algo, ms que pensaba, antes de responder.

    Su respuesta, sin embargo, pareci de lo ms convencional.

    Lamento decepcionarle una vez ms dijo. Creo haberle dicho que nadienos forz a nada, sa es la verdad Comprubelo hablando con los otros. Todostuvieron ofertas para trabajar, un montn de ofertas. Muchos de ellos tenan laexperiencia suficiente como para adaptarse sin problemas al sonido. Otros, sinembargo, decidimos que haba llegado el momento de la retirada, sin ms, quiz porsentirnos fuera del juego Como ya le dije,Revolutionfracas, slo eso. Como otraspelculas fracasaron Lo que pasa es que hay gente que no sabe aceptar sus fracasos,ni sabe retirarse a tiempo.

    Se refiere a Gilbert, a Lew Cody y a Charles Ray, a gente as?Quiz Pero pensaba sobre todo en Roland Blade, Fay Terris, Matty RyanEra gracioso or aquellos nombres que ya se me haban olvidado mucho tiempo

    atrs.Roland Blade, cuyo nombre se haba hecho famoso junto a los de Navarro,

    LaRoque y Ricardo Cortez, haba llegado a hacer un par de pelculas sonoras y conello se acab su carrera. Fay Terris estuvo un tiempo en candelero, fue una especie dePola Negri americana; tambin hizo alguna pelcula sonora antes de morir en elincendio de su casa de la playa. Me costaba recordar a Ryan. Haba sido un tipo raro,un productor independiente, una especie de Thomas Ince Veamos Qu le pasrealmente? Fui recordando algunas cosas. Fue uno de los primeros entusiastas de laaviacin, como el primer esposo de Mary Astor Acab estrellndose; encontraronsu cuerpo partido en dos.

    Extrao. Todo era muy extrao. Casi todos ellos encontraron la muerte de formaviolenta. Me vinieron a la mente los nombres de media docena ms, todos de lamisma poca, todos muertos violentamente por los mismos aos. Algunos, mediantesuicidios cuanto menos misteriosos. Otros, muertos en incendios no menos extraos,

    o ahogados, o desaparecidos sin ms.Dira usted que alberg una especie de supersticin a propsito de la nueva

    era que supona el cine hablado? le pregunt.Franklin sonri.Un reportero, en todo momento se muestra usted como un reportero Lo suyo,

    claro est, es poner palabras en la boca de la gente Por favor, no me aplique esetruco efectista; en ningn momento he dicho o sugerido nada de lo que ustedinterpreta hizo una pausa y de nuevo vol su mirada hasta el techo antes de

    proseguir: Yo slo he querido decir que todos partamos del mismo punto cuandolleg el sonido y comenzaron a producirse los cambios en Hollywood. Todospartamos con la misma ventaja y con idntica desventaja en aquellos felices aos 20;

    www.lectulandia.com - Pgina 29

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    30/270

    habamos trabajado juntos y competido noblemente Quiz los buenos tiempos,nuestros buenos tiempos, haban pasado ya Me refiero a los directores, a lasestrellas del cine mudo Haba que seguir luchando por mantenerse en lo ms alto,haba que luchar tambin por adaptarse a unos cambios que afectaban de igualmanera a la vida personal de cada cual, lo que para muchos supuso una tragedia, pues

    haban decidido seguir donde estaban, seguir en Hollywood, como se decaentonces Recordar usted a Lloyd Hamilton, o habr odo hablar al menos de susfamosas fiestas Y habr odo hablar igualmente de Tom Mix y de su coche dediecisiete mil dlares Y habr odo hablar igualmente de lo que le pas al pobreWally Reid Arbuckle, ya muchos otros Pues bien, algunos, sin ms, decidimosapartarnos de todo aquello Lamento no poder ofrecerle una historia sensacional.

    Lo intent de nuevo.No dijo usted algo de ir contra los deseos de alguien, no dijo usted algo de una

    conspiracin?Jefifrey Franklin se levant de nuevo.Creo que me ha malinterpretado dijo. Me refera a nuestros deseos como

    grupo A nuestro deseo de abandonar el cine Y debo decirle que en realidad nohubo conspiracin alguna, era slo una manera de hablar Ahora, si me disculpaEstoy un poco cansado. Pero crame que he disfrutado mucho con la entrevista.

    Lo vea realmente cansado.No haba nada ms que hacer, pues, salvo estrecharnos la mano y dirigirse a la

    puerta. Le sonre. l volvi a mirar al techo.

    3

    ENTRen aquella pequea librera preguntndome si sera la direccin correcta.No haba nadie ms que el dependiente, un hombre de mediana edad, gafoso, que leaun libro sentado a la mesa del establecimiento. Lo apart de su vista al verme entrar.

    S? dijo.Busco a Walter Harland.El hombre se puso de pie. Era ms alto de lo que me haba parecido y menos

    viejo de lo que tambin me haba parecido. Se quit las gafas y sonri. Era,evidentemente, Walter Harland.

    Haba algo dramtico en tan simple revelacin. Y algo ms, algo vagamenteterrorfico. Era mucho ms joven de lo que debiera. Franklin tambin era ms joven,o lo aparentaba, como Harland, de lo que debiera Ambos, en realidad, estaban mso menos igual que en el ao 29, o el 30.

    Trat de apartar de m aquel pensamiento y olvidarme de aquella sensacinmientras me presentaba, le explicaba mi bsqueda y el trabajo que pretenda, y aludaa mi visita anterior a Jefifrey Franklin.

    www.lectulandia.com - Pgina 30

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    31/270

    Walter Harland asenta en silencio.Lo esperaba a usted me dijo al fin. Mr. Franklin me cont que le haba

    visitadoMe alegro de que Mr. Franklin se lo haya contado respond.Me miraba con los ojos entornados.

    No diga nada, no hace falta dije. Lo comprendo, aunque ese tipo de cosasno me parezcan de buen gusto, no me gustan los chismorreos, pero

    Me sonri de nuevo, invitndome a que tomara asiento. Proced a desarrollar conl la misma rutina que con Franklin. Le hice, prcticamente, las mismas preguntas.Ante sus respuestas, me pregunt si Franklin no le habra hecho llegar un guin conlo que deba de responder.

    En efecto, Harland haba recibido ofertas de trabajo cuando Franklin decididisolver su equipo. Pero tampoco l quiso seguir. S, haba ganado dinero suficiente

    como para vivir sin mayores problemas; se haba comprado aquella pequea libreray estaba contento. Haba descubierto que era mucho ms grato leer las intrigas yconspiraciones de otros que interpretarlas.

    Tena que hacer un esfuerzo ms, sin embargo.Qu hubo de aquella conspiracin, o conspiraciones? le pregunt. Corre

    por ah el rumor de que usted fue vctima de un complot que lo llev al ostracismoSera muy dramtico, muy apropiadamente dramtico, decir que Harland

    empalideci sbitamente. Pero se limit a encender un cigarrillo. Si hubo o no algunaalteracin dermatolgica en su piel, fue tan leve que ni la percib.

    No crea usted todo lo que oye por ah dijo hablando con gran seguridad,directo y claro. Esto no es una pelcula de serie B, ya sabe a qu me refiero Nosfuimos del cine porque haba llegado el momento de abandonar la pelcula, sin ms.Hablamos de ello, lamentndolo en cierto modo, pero sin mayor problema, con grantranquilidad Haba que dejarlo ya, nada ms.

    Pero usted estaba entonces en lo ms alto, era famoso y admirado, ganaba unmontn de dinero Quiz temi caerse desde la cspide de su fama y hacersepedazos? Fue eso?

    Exactamente pareci feliz ahora.Bien, estbamos en la pantalla de nuevo, cara a cara, plano contra plano. La

    verdad es que me hubiera gustado irme de all en ese preciso instante Pero unhombre tiene que comer As que mostr la mejor de mis sonrisas y lo mirdirectamente a los ojos.

    Ya he odo esa cancin un montn de veces le dije, pero no voy acomprarme el disco La verdad es que todas las notas me suenan a falso. Escuche,Mr. Harland; no quiero resultar ofensivo, pero me gustara hablar de hechos, slo de

    hechos. En los aos 20 usted fue un hombre famoso, muy famoso, una de las grandesestrellas del negocio No pretendo emitir un juicio sobre usted como actor, porsupuesto que no, pero puedo decir que era muy bueno, como se lo pareci entonces a

    www.lectulandia.com - Pgina 31

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    32/270

    mucha gente. Y lo dicen en muchos libros Usted disfrut de su fama, como tantosotros, y actuaba y actuaba porque adems le gustaba hacerlo Firmaba autgrafosSe fotografiaba posando con trajes de seda, acuda a los estrenos en su Rolls, lobesaban las admiradoras, tena amantes Iba a las proyecciones del Montmartre conmuchas de aquellas lobas hambrientas Pero era usted el que se las coma, no es

    verdad?Cloque un poco. Un buen actor siempre cloquea y se hincha ante los elogios.Supongo dijo. Pero nos hacemos viejos, es inevitable hacerse viejoMire, es como lo de Peter Pan; un actor en realidad no crece, aunque envejezca.

    Usted lo sabe, no se me haga de nuevas Nada puede apartar de su estupenda rutinaa un dolo de las matines como lo fue usted Nada, excepto, quiz, el miedo Unmiedo muy concreto a algo muy concreto. Vamos, dgame a qu tuvo usted miedo.

    Me sent orgulloso de mi repertorio, o de mi rutina de trabajo, porque pareci

    surtir efecto. Ahora respiraba Harland nervioso, callado durante un buen rato. Hablal fin.De acuerdo dijo suavemente, como entregado. Tuve miedo, mucho miedo,

    es cierto Recuerda usted las pelculas que protagonic? Aquellas secuenciasfantsticas, las peleas, las acrobacias que haca todo el repertorio de trucos deFairbanks, en fin. Pues me identificaba con aquello totalmente, me senta felizhacindolo Un da, sin embargo, fui al mdico para someterme a un chequeorutinario Se alarm, me hizo electrocardiogramas Imagnese el resultado. Micorazn fallaba. El mdico me recomend que comenzara a tomarme las cosas concalma si quera vivir ms.

    Por un momento me sent molesto conmigo mismo. Me dije que tena que ser msprecavido. Si yo representaba el papel de un interrogador, Walter Harlandrepresentaba el de un hombre enfermo del corazn. Observ que, tras hablar, mirabaal techo.

    Quiz haba all una mosca, zumbando. Pero otra cosa ocupaba mis pensamientos.No dije una palabra, sin embargo. Me limit a sacudir la cabeza.Harland se levant, evidentemente dispuesto a dar por concluido el guin que le

    haba escrito Franklin cuidadosamente. Abri las manos, no obstante, dubitativo.Quiere saberlo todo, no es as? me dijo con cierto abatimiento. No slo

    quiere hacer un reportaje, esto significa mucho ms para ustedAsent en silencio.Pues mucho me temo que no hay nada ms que decir me condujo a la puerta,

    pausadamente, ponindome una mano en el hombro. Le gusta leer?S.Pues lea Yo leo mucho desde hace veinte aos o ms Me interesan

    especialmente las obras de Charles Fort, lo conoce? Bien. Mire, Fort tiene una teoraacerca de los ciclos y de los hechos. Es un tanto spengleriano Dice, por ejemplo,que cuando lleg el tiempo de las mquinas de vapor la gente comenz a comportarse

    www.lectulandia.com - Pgina 32

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    33/270

    como una mquina de vapor. Nada pudo hacerse para evitar aquella aceleracinPero es que nada poda hacerse para retardarla Quiz nosotros hicimos lo quedebamos en el momento oportuno, sin ms.

    Ya en la calle, mir al cielo. Seguro que Walter Harland estaba sentado en sulibrera mirando al techo. Qu habra en aquel techo?

    4

    EL resto fue una especie de recorrido por un kindergarten Encontr a PcggyDorr en Pasadena. Danny Keene tena un barco en Balboa. Tom Humphrey trabajabaen su tienda, reparando aparatos de televisin, no muy lejos del mercado de abastos.

    Se imaginar el lector qu tipo de gente vi, cuando les vi Rostros

    excesivamente jvenes para su edad, respuestas evasivas, una historia cortada por elmismo patrn Y una mirada ausente en los ojos.

    En conjunto constituan un gran puzzle, un enigma. Las historias de detectives noson lo mo, por desgracia. Me encuentro desplazado en un tipo de historia que nopuedo escribir. Todo aquello, en fin, me iba conduciendo a un gran fiasco, eso metema.

    Dnde estaba el drama, la corazonada, el pathos, la msica de violn entrebambalinas? Todo pareca haberse acabado para ellos en 1930; la historia pareca, aun

    siendo actual, desarrollarse en la poca en la que todos ellos trabajaron en el cine.Cuando hacan literalmente las pelculas.Nadie pareca reparar en ello. O s?Esa posibilidad me golpe mientras conduca para entrevistarme con Tom

    Humphrey.Aqu haba una historia, por todos los santos, incluido entre ellos Louis B.

    Mayer!No haba slo un reportaje, o una serie de reportajes. Haba una pelcula!Cmo se congregaban para ver las pelculas de Jolson, la vida de Will Rogers,

    todas esas breves biografas filmadas! Por qu no hacer lo mismo con la vida deJefFrey Franklin? Una gran pelcula muda en glorioso tecnicolor, sin embargo; oWarnercolor; o Cinecolor Por qu no?

    Es verdad que la Twentieth haba hecho Hollywood Cavalcade, aunque unosveinte aos atrs Pero ah tena yo una historia. Llmenlo coincidencia, llmenlohado, llmenlo como quieran llamar a su pelcula soada. Nada de trabajar conimitadores, remedos o parlanchines; bastaba con la ayuda que supone el maquillajemoderno, la iluminacin actual. Poda hacerse la pelcula con el casting original

    interpretando sus papeles en la vida real.Todo muy natural. Todo perfectamente encajado. Rutilante. Ya imaginaba el

    lxico que utilizara el Varietypara elogiar la pelcula, que comenzaba a cobrar forma

    www.lectulandia.com - Pgina 33

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    34/270

    incluso antes de que me sentara a la mquina de escribir para hacer la sinopsis.Fue una buena sinopsis, y no lo digo porque fuese ma. Lo dijo Cy Charney,

    sentado en su oficina, fumndose dos cigarros mientras la lea evidentementecomplacido Me satisfizo enormemente que uno de los mejores agentes se volvieraloco con mi idea para hacer aquella pelcula.

    Puedo colocar esto maana mismo me dijo. Es absolutamente brillanteClaro que no tienes un nombre hecho, pero la historia es magnfica Creo que podrhacer que te lleves, a ver unos treinta o cuarenta de los grandes Quiz necesitesque te ayude a desarrollar la historia un guionista Contrata a uno, muchacho.

    Creo que estuve a punto de partirme el cuello de tanto asentir en silencio.Ponte en marcha me dijo Charney. Sal por ah, que yo me encargo, tengo

    buen ojo para estas historias.Sal de all; las cosas iban tan rpido que apenas poda dar crdito a lo que haba

    odo Pero la cosa no dependa de lo que oyese, sino del buen ojo de Mr. Charney.O de su buena mano.Y qu buena mano tena! Me llam veintisis horas ms tarde, exactamenteTodo arreglado me anunci. Freeman est entusiasmado, lo mismo que

    Jack. Puedo sacarle cincuenta de los grandes a cualquiera de ellos, dicindoles que elotro me ha hecho una buena oferta. Tendr el contrato en mi oficina antes de queacabe la semana, ya lo vers Lo tendrs para entonces?

    Qu debo tener?El reparto, muchacho; y el guin El viejo Franklin, Flarland y todos los

    dems Te tom la palabra con lo de que actuaran, eso que me dijiste de que estabandeseando volver a la factora Claro que tendrn que hacer alguna prueba, supongo,llevan mucho tiempo sin trabajar, pero estoy vendiendo la historia precisamenteporque la van a protagonizar ellos, vale? As que ten preparado pronto el reparto y elguin completo. Naturalmente, si necesitas que te acompae para presionar un poco alos viejos

    No creo que sea necesario le cort. Ya me las arreglar.Diles que no se preocupen de nada, que yo los representar dijo Charney.

    Ellos saben bien qu significa eso en esta ciudad. Sobre todo, dselo al viejo Franklin;no es la historia de su vida tal cual, pero seguro que se ve bien representado ahQuiz tengas que trabajar duro con l, eh? Pdele consejo.

    Lo har, trabajar con l.Colgu el telfono y me qued asombrado por lo que hice. Me sent y me puse a

    mirar al techo. La verdad es que no encontr all ninguna respuesta. Quiz no lahubiera para m.

    En cualquier caso, yo no era supersticioso. Puede que ah estuviese la respuesta,

    en que los actores son supersticiosos. Los actores son supersticiosos, s. Los actoressiempre estn en la pomada. Los actores son muy narcisos.

    Narcisos! Ya lo tena.

    www.lectulandia.com - Pgina 34

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    35/270

    Lo primero que hice fue enviar una copia de la sinopsis, bajo el rtulo dePERSONAL, a cada uno de los que haba entrevistado. Se la hice llegar por correo

    urgente con una carta. Ah tenan la sinopsis a desarrollar y una carta en la que decaa cada uno que era la oportunidad idnea para ofrecer al espectador una autnticarecreacin del arte de hacer pelculas en los viejos buenos tiempos. Insista yo (y

    esperaba convencerles con ello) en que una parte importante de los beneficios sedestinaran a una fundacin que velase por los grandes de aquellos viejos buenostiempos a los que la fortuna haba dado la espalda. Y tambin, en cada una deaquellas cartas, deca a cada uno, aunque de manera muy personalizada, que elrecipiente vaco del proyecto esperaba llenarse pronto con la enormidad de su talento.

    Sal a cerrar el trato con ellos veinticuatro horas despus de enviarles aquello.Primero me dirig a la librera de Walter Harland.

    Lo primero que not fue que no llevaba sus gafas. Y que vesta un traje elegante

    que nada tena que ver con la vestimenta para atraer o impresionar a un biblifilo. Untraje perfecto, elegante y bien cortado.Y bien? dije.Le felicito. Es tremendo No imagino cmo ha podido ocurrrsele esto a

    travs de unas pocas y breves entrevistas.No slo me ofreci una silla, sino que me rog que tomara asiento.Leer esto dijo mostrando mi sinopsis me ha hecho mucho bien, me ha

    rejuvenecido veinte aos.

    Realmente, parece tener usted veinte aos menos le dije con absolutasinceridad. Y eso es lo que dirn las nuevas generaciones de espectadores cuandolo vean en la pantalla.

    Suspir complacido.Danny y Tom me llamaron anoche. Y Lucas, lo recuerda? Aqul de los

    grandes cigarros que tiraba las bocas de riego de los bomberos, todo eso Todosestn encantados.

    Un leve ruido en la librera; un viejo que tremolaba como las hojas del otoo ytena voz de tenor y whisky. Y balaba.

    Walt dijo a Harland, no quiero interrumpirte, pero tengo que hablarte,dame un minuto.

    Claro, Tiny.Harland se levant para ir hasta el mostrador donde estaba la caja registradora. El

    hombrecillo le bal al odo. Harland abri la caja registradora, puls un SIN VENTAypuso algo en la mano de aquel hombrecillo.

    Ahora, disculpaClaro, Walt, claro Que Dios te bendiga y la hoja de otoo se larg.

    Perdone me dijo Harland sonriendo.No tiene por qu disculparse.S, debo pedirle perdn.

    www.lectulandia.com - Pgina 35

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    36/270

    Por qu?Es que no puedo hacerla. No podemos Su pelcula.PeroPagara por hacer la pelcula, sabe que me muero de ganas Y lo mismo les

    pasa a los dems, no crea que me ro de usted. Hacer esa pelcula sera vivir de

    nuevo No sabe cunto dara por ver mi nombre ah, por ensear a toda esa purrelade actores de mierda que hay ahora cmo se interpreta un papel

    Entonces?Era como si estuviese en el plato, actuando.Ya le dije que nos retiramos porque decidimos hacerlo, porque llegamos a un

    acuerdo para hacerlo todos a la vez Hubo una o dos excepciones, pero lo cierto esque desaparecieron pronto de la escena. Usted ignora lo que pas, pero puedeinvestigar por ah, seguro que encuentra a esas excepciones y se lo cuentan. Hubo

    alguien, a quien seguramente no conocer, que dio un pequeo trabajo a Franklin,nada, una comedia menor, un papelito de nada como actor Supuse que no ocurriranada, pero no fue as. Los dems no quisimos correr riesgos.

    Pero de qu riesgos me habla? pregunt. Esto puede ser un xitoredondo. Usted no perder nada, ninguno de ustedes tiene nada que perder y muchoque ganar.

    Agit la cabeza.Recuerda lo que le dije de los hombres y las mquinas de vapor? Bueno, pues

    nosotros somos gente que va y viene; y debemos mantenernos en el lugar que noscorresponde ahora sonri porque interpretaba el papel de un payaso. Puede ustedapostar lo que quiera, por otra parte, que no hay pelcula que pueda hacerse sin elviejo, y l nunca consentir en hacer la suya. Nunca.

    Me largu de la librera aprisa. Tena una razn para ello. Buscaba a la hoja delotoo. Ya saba quin era, Tiny Collins. Una vieja reliquia que jams haba sido ungran cmico, sin embargo. Un comparsa para Heinie Mann, Billy Bevan y JackDuffy.

    Lo record en la tienda, en aquella breve escena que protagoniz con Harland, y

    supe dnde lo encontrara. Estaba cuatro puertas ms abajo.Lo vi al fondo del bar, solo, con un whisky seco y una cerveza por toda compaa.

    Ahora no pareca tremolar; al fin y al cabo estaba de vuelta a casa.Hice uso de la frmula mgica.Es usted Tiny Collins? Le invito a un tragoOcurri entonces que me vinieron a la mente un montn de ttulos de pelculas en

    las que haba actuado. Ocurri tambin que fui capaz de tomarme unos cuantoswhiskies y unas cuantas cervezas. Ocurri entonces que lo tuve como anclado y lo

    pude llevar a lo que era mi idea particular de un puerto bien abrigado.Tiny era un tipo gracioso. Aun bebiendo mucho se mantena sobrio. Dej de

    soltar sentencias y se puso pensativo. Yo an no haba dicho nada de la pelcula, pero

    www.lectulandia.com - Pgina 36

  • 7/25/2019 Dulces Suenos - Robert Bloch

    37/270

    ya tena pensada una escena para l. En realidad esa escena no era otra cosa quededicarle un reportaje, sin ms. ramos amigos. Y a un amigo se le puede pedircualquier cosa, no?

    Vamos dije, qu pas con todos sus viejos compaeros? Por qu seretiraron cuando estaban en lo ms alto?

    Y me lo pregunta a m? He estado hacindome esa misma pregunta losltimos veinte aos. Por qu lo dejaron? Conmigo fue diferente. Yo qued fuera decombate, pero ellos no tenan razn para irse. Parece que lo decidieron a la vez.

    Lo s, Tiny, y no dejo de preguntarme por qu, no tiene sentido.No tuvo ningn sentido aadi Tiny. Se fueron, aunque tenan ofertas de

    trabajo. Ya me hubiera gustado a m estar en su pellejo! Yo no tena trabajo. Yo, TinyCollins, que haba trabajado con Turpin, con Fields, con un montn de gente

    Lo s, Tiny, lo s Tomemos otro trago.

    Bebimos y esper un poco antes de seguir preguntndole.Estoy seguro de que tiene alguna teora sobre aquello.Claro que tengo una teora me respondi. Varias teoras La primera, que

    estn muertos.Muertos?Claro. Hicieron una cosa de sas, cmo lo llaman? Un pacto suicida

    Cuando oyeron que Blade, Terris, Ryan, Todd y todos los dems se haban suicidado,decidieron hacer lo mismo. Llegaron a un acuerdo y se largaron todos a la vez.

    Empez a rerse, pero se vio interrumpido por un ataque de tos. Ped otra ronda.No estn muertos, Tiny.Cmo? Oh, claro que no Pero aparentan estarlo. No lo ha notado? Fjese

    en m Tengo la misma edad que Tom Humphrey, pero me parece que estoy algoms avejentado, compruebe usted mismo la diferencia. Yo soy una autntica ruina yl parece que acaba de rodar The Black Tiger, su ltima pelcula. Y lo mismo ocurrecon los otros. Parece que se hubieran acartonado nada ms hacer su ltima pelcula,como si hubieran muerto y alguien los hubiese embalsamado y echado a andar

    Me puse a pensar en su teora por unos instantes. Tambin consider la

    posibilidad de que la rutina de Tiny, a base de cervezas y whisky, le hubiera alteradosu capacidad de percepcin.

    Tiene alguna otra teora? le pregunt.Tiny me mir. Hubo de hacer un gran esfuerzo para hablar, pero al final lo

    consigui.S, ya le dije que tengo ms teoras Contar a alguien lo