fuegos que encienden otros fuegos

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Roberto Costa Prats nunca sospechó hacia dónde lo l levaría el camino que había escogido. Confiado en su amor primero, ese Dios que lo seducía en Jesús, tomó en sus manos una organización socia l a punto de cerrar y convenció a l Tío Paco de que el futuro exist ía . Jesui tas los dos y formados bajo la consigna de hacer el bien más universa l posib le, pusieron las bases del Hogar de Cristo que hoy presentamos.

Y así comenzó la primera aventura, en una ciudad que hace tres décadas bri l laba por la ausencia de viviendas y gozaba de la triste celebridad de ser la tercera ciudad del mundo con mayor défici t habi taciona l . Sin embargo con el paso de los años y en medio de la crisis estructura l la t inoamericana, percibimos que las casas que producíamos corrían el riesgo de convert i rse en ataúdes pues las fami l ias que las habi taban no ten ían trabajo, n i sa lud, n i educación . Bien pod ían morirse de hambre y enfermedades bajo el techo de la “casa cura” de Hogar de Cristo y… ¡aqu í no pasó nada!

Era necesario gati l lar un punto de quiebre, comenzar a entendernos de otra manera. Fue a l l í cuando comenzamos a pensar en otras propuestas desde y con la población, y a pergeñar nuestras primeras aproximaciones a aquel lo que l laman “Desarrol lo”. Los pobres nos enseñaron a ver el mundo de otra manera y a comprender que las respuestas a sus problemas eran más consistentes si el los part icipaban del d iseño de las soluciones, de los programas y proyectos. Y así , poco a poco, dejaron de ser “beneficiarias” para convert i rse en socias de nuestro proyecto, a entendernos todos como personas en busca de la recuperación de nuestra plena ciudadanía y la rest i tución de nuestros derechos.

En esta aventura nos ha pasado de todo. Apreciados por a lgunos y est igmatizados por otros, va loramos ser signo de contradicción y tener cada vez mayor claridad en lo que buscamos y queremos. Pero no es en estas l íneas de presentación donde les contaremos de esto. Quisiéramos que sea usted mismo, amable lector, quien se forme una idea de quiénes somos y nos dé una mano con su crí t ica, con su corrección fraterna, con su apoyo. Bienvenidas pues y bienvenidos, a esta memoria inst i tuciona l del Hogar de Cristo.

aventura

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Durante los ú l t imos meses hemos vivido en Hogar en Cristo una febri l act ividad en torno a esta publ icación que hoy tenemos en las manos. Después de tantos años de trabajo necesi tábamos una Memoria Inst i tuciona l que nos ayudara a mirar atrás, reconociendo aciertos, errores y que nos catapu l tara por nuevos horizontes en esta ardua pero grat i ficante labor de ser “instrumento en las manos de Dios” para l levar su amor y misericordia a los pobres y olvidados de este mundo. Desde esta ambiciosa perspect iva, Germán, nuestro voluntario chi leno, animado por Ani ta , l íder del Proceso de Desarrol lo Inst i tuciona l , y apoyado decid idamente por Mel issa y Gabriela , se dio a la tarea de recabar la información para presentar el primer borrador. Verónica, Jéssica, Ruth , Ja ime, I ta l ia y Patricia se encargaron, conjuntamente con sus equipos de colaboradores, de ofrecer la información requerida sobre sus procesos.

Necesi tábamos, entonces, una mirada colect iva sobre el texto in icia l : varias jornadas de lectura, aná l isis y ref lexión de Ani ta , Lucho, Gissel la , Eduardo y Bethsaida, con el mismo Germán, y la concebida distribución de responsabi l idades fueron moldeando una redacción fina l que quería apartarse del esquema ríg ido que impone una Memoria Inst i tuciona l . Buscábamos a lgo que nos motivara y animara, a ustedes y a nosotros mismos, colaboradores tota les de Hogar de Cristo, para encender ese amor apasionado a Cristo Jesús, seguir lo y reconocerlo en los más pobres, vu lnerables y exclu idos.

Daniel y Adriana se dieron a la si lenciosa obra del d iseño. Concebir una maqueta, desempolvar los archivos fotográficos que tenemos, muchas de cuyas fotos son obra de colaboradores que ya no están con nosotros, hacer cuadros y gráficos, largas horas frente a la panta l la del computador para entregar a ustedes un l ibro ági l , fresco y agradable a l mirar y a l leer. A lex, fotógrafo y voluntario esporádico desde España, nos entregó numerosas fotograf ías de excelente ca lor y va lor art íst ico.

Deseábamos dar también espacio a hombres y mujeres que conforman este gran colect ivo que es Hogar de Cristo. Máximo Baque, Ana Sant iago, Rosa Cata l ina Armijos, Gina Granados y nuestro siempre risueño y gran colaborador Roger Arosemena se apuntaron con sus test imonios.

Pero estábamos a mi tad del camino. Un esfuerzo de esta magni tud demandaba ingentes recursos económicos y no los ten íamos disponib les. Mari lú, Mariela , Patricia y El izabeth, in tegrantes del Proceso de

sueño colectivo

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Proyectos Naciona les e In ternaciona les, entraron en acción, apoyadas también por nuestro Proceso de Compras y Adquisiciones, con Cristh ian a la cabeza. Cartas, l lamadas, visi tas, motivaciones dieron resu l tado: Paci ficard, Delcorp, Servicios Berl ín , In taco, Maint, El Universo, Cnel , Banco Bol ivariano, Etern i t, Novopan, Fybeca, Fundación Telefónica, Estudio Juríd ico J iménez-Carbo, Torbay, Rodriguez & Asociados y Fundación Dale dijeron sí , apoyamos este hermoso esfuerzo. Grafipren acogió también esta in iciat iva y, a precio especia l , se comprometió a publ icarla con excelente ca l idad y presentación .

¿Y para la portada? Habíamos acordado que queríamos un mensaje sugerente y acorde con nuestros principios y valores. Qué mejor que expresar a l l í lo que queremos ser y por lo cua l damos lo mejor de cada uno de nosotros: ser fuegos que encendemos otros fuegos. Imágenes que hablaran por sí solas fue el desaf ío planteado a Arcadio para la sesión fotográfica que hubo que repeti r para quedar sat isfechos con bri l lo, expresiones, encuadres, etc. José, Ju l io, Gi lda, A l icia , Karla , David, Lucas y Patricia , Coordinadora del Voluntariado, aceptaron part icipar en la producción .

No podemos dejar pasar este momento sin resa l tar el apoyo constante de Antonio, Arzobispo de Guayaqui l , y Gi lberto, Provincia l de la Compañía de Jesús en Ecuador, y de los antecesores de ambos. Bueno es recordar también el trabajo de José de Ycaza, Presidente del Directorio durante 25 años, y de José Tamariz, Presidente actua l desde hace 12 años ya.

Sólo me resta darle gracias a Dios por este maravi l loso Equipo de Hogar de Cristo y pedir sus bendiciones sobre todos, todas y cada uno de el los y el las, así como para todas sus fami l ias.

Eduardo Vega L., s .j .Director Genera l

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palabras iniciales

Hogar de Cristo fue el nombre con el cual el jesuita Alberto Hurtado fundó en Chi le en el año 1944 una de las insti tución sociales más importantes de Latinoamérica, con la única intención de brindar un hogar digno a cientos de personas que vivían en la cal le, producto de las injusticias de una sociedad deshonesta en su fe e inequitativa en sus progresos.

Este diagnóst ico crí t ico de una sociedad “catól ica” insensib le ante las condiciones de vida infrahumanas de las grandes mayorías, fue una verdad incómoda para la sociedad chi lena del Padre Hurtado y para todas las sociedades de nuestra región .

La sociedad lat inoamericana ha contra ído una

deuda socia l que ni los Estados ni los ciudadanos han sido capaces de sufragar, haciendo necesaria la aparición de inst i tuciones no gubernamenta les que han hecho de el la su fundamento y nos recuerdan que nuestras ca l les están l lenas de injust icias y necesidades.

Fue en 1971 cuando el padre Francisco García S.J. fundó en Guayaqui l Hogar de Cristo, permitiendo la visibi l ización de las miserables condiciones de vida de tantas hermanas y hermanos y de sus demandas insatisfechas, en especial en el acceso a la vivienda y el reconocimiento como ciudadanos. Han sido treinta y nueve años de avances y retrocesos, pero de convicción firme de estar contribuyendo al mejoramiento de la cal idad de vida de mi les de compatriotas.

Tanta agua pasada bajo el puente nos l leva ahora a hacer una pausa para poder hacer nuestra la consigna de que “solo se puede hablar de futuro si se ha contribuido con el pasado” y examinar qué tanto hemos hecho propios los aprendizajes y oportunidades que presenta el transcurrir del tiempo y el cambio de los contextos sociales.

De ahí que esta publ icación nazca como un espacio de conmemoración y reflexión abierto, dispuesto a inaugurar un lugar de diálogo y encuentro entre lectores de distintos sectores de nuestra sociedad. Con motivo de nuestros próximos 40 años de vida, buscamos aquí recorrer, junto a usted, los logros y aprendizajes de todos estos años.

El l ibro está compuesto por cuatro apartados,

pensados para ser leídos de forma secuencial , aunque de igual manera podrían ser abordados de forma independiente. En el capítu lo uno, “39 años de servicio a los más pobres” se retratan los aspectos más relevantes de HdC, presentando la compleja red de actores, proyectos, ideales, colaboradores, enfoques, l íneas de trabajo, etc. que conforman nuestro actuar diario.

El dos, “Dónde y con quiénes” aborda información clave para entender la real idad ecuatoriana y, en part icu lar, la rea l idad de las personas con que trabajamos a lo largo del l i tora l y en la peri feria Noroeste de la ciudad de Guayaqui l . También en este capí tu lo se abre un espacio para retratar las condiciones de vida de las socias de Hogar de Cristo, y recoger su h istoria y opin ión sobre dist in tos temas de in terés.

En el tercero, “Qué hemos logrado en los ú l t imos

tres años” hacemos una radiograf ía de lo real izado en este período de trabajo precedente a esta publ icación, mostrando los logros, impactos y aprendizajes de nuestras áreas de trabajo y de los mayores proyectos e hitos de este período.

Finalmente, el cuarto, “A encender otros fuegos”

establece las nuevas l íneas de acción insti tucional y las apuestas en prospecto, destacándose los principales aciertos de este año de trabajo y las reflexiones que nos permitirán crecer hacia el futuro.

¡Án imo y gracias por su cercan ía y sol idaridad!

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uno

No resu l ta fáci l retratar en pocas páginas nuestro accionar como Obra Socia l Ignaciana, caracterizada por reconocer a Cristo en el más pobre y trabajar denodadamente en la transformación de la sociedad ecuatoriana por caminos de mayor justicia y sol idaridad. Son casi 40 años de historia, con aciertos y di ficu l tades,

de modo que vale la pena recoger en ésta, nuestra memoria inst i tuciona l , las múl t ip les contribuciones que Hogar de Cristo ha real izado entre los sectores más exclu idos y vu lnerados de nuestra sociedad. Invi tamos a nuestros lectores a tener una visión panorámica de lo que somos y hacemos.

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39 años de servicio a los más pobres

NUESTRA IDENTIDAD

Somos una inst i tución no gubernamenta l , p lura l ista y sin ánimo de lucro, d irig ida por la Compañía de Jesús, que a comienzos de los años 70 nace con la in tención de garant izar una vivienda digna a los más pobres de la costa ecuatoriana.

Formamos un equipo de colaboradores con víncu lo labora l , pero también somos voluntarios y , además, prolongamos nuestro trabajo y estamos presentes en aquel las personas que de a lguna u otra manera se sol idarizan con nuestro accionar en beneficio de las personas en si tuación de pobreza, vu lnerabi l idad y exclusión .

Hoy, treinta y nueve años después, nos hemos convert ido en una de las Organizaciones No Gubernamenta les (ONG) más reconocidas y de a l ta credibi l idad en el pa ís, dedicada enteramente a la promoción del Desarrol lo Humano Local , faci l i tando procesos e in iciat ivas en Vivienda Socia l y Hábi tat, Microcrédi tos, Economía Popu lar y Sol idaria , Sa lud, Educación, Principios y Valores, Capaci tación Técnico-artesanal , Seguridad A l imentaria y Prevención de Violencia In trafami l iar.

A l igua l que en cualquier otra organización socia l , el proceso de crecimiento y ampl iación de cobertura experimentada por Hogar de Cristo no ha estado exento de dificu l tades, errores, aciertos y apuestas. Para constru ir una inst i tución socia l sustentable y confiable en el t iempo vamos, prudente pero audazmente, rompiendo paradigmas y poniendo en práct ica nuestra capacidad de innovación . También hemos tenido que estar atentos a lo que ocurre en el entorno, adecuándonos a nuevos contextos y sumando a diversos actores en torno a un ideal o sueño colect ivo. Soñamos con crear una plataforma para un desarrol lo humano loca l que permi ta garant izar la real apl icación de los derechos, especia lmente los económicos, socia les, cu l tura les y ambienta les, la part icipación en la toma de decisiones y el fomento de una ciudadanía act iva.

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ONuestra Misión

Somos una organización socia l d irig ida por la Compañía de Jesús. Faci l i tamos procesos de Desarrol lo Humano Sustentable desde y con las personas en mayor si tuación de pobreza, vu lnerabi l idad o exclusión del l i tora l ecuatoriano.

Trabajamos promoviendo el rescate de su dignidad, principios y valores personales

Misión, Visión y Valores

Nuestra Visión

Estamos contribuyendo a la rest i tución de los derechos de las personas en mayor si tuación de pobreza, vu lnerabi l idad o

Nuestros Valores

Amor preferencia l a los más pobres, vu lnerables y exclu idos.Part icipación como valor fundamenta l para la toma de decisiones y real ización de nuestro trabajo.Sol idaridad como expresión del amor preferencia l .Honest idad y transparencia .Humi ldad y respeto.Austeridad en la admin istración de los recursos encomendados.

y cu l tura les, así como la recuperación de su plena ciudadanía .

Impu lsamos a las organizaciones socia les y comunidades de base a asumir su ident idad y el progresivo control de su propio dest ino, trabajando en equipo, con colaboradores y voluntarios comprometidos, motivados, capaci tados, con míst ica de servicio y sent ido ecuménico.

exclusión, incid iendo en transformaciones estructura les hacia una sociedad más justa, equi tat iva e incluyente en el Ecuador.

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39 años de servicio a los más pobres

Hogar de Cristo en Ecuador es la materia l ización de aquel gran l lamado socia l que ya a comienzos de los años 40 inci taba a reconocer Cristo en el pobre doliente, en aquel maltratado y olvidado por una sociedad excluyente.

Esta gran in tu ición desarrol lada A lberto Hurtado en Chi le, producto de su atenta contemplación del Evangel io y de la real idad socia l que vivía , es retomada después por los Obispos en la I I I Conferencia Genera l del Episcopado Lat inoamericano en Puebla de los Ángeles en 1979.

Así , A lberto Hurtado, jesui ta , canonizado en 2005 por su vida consagrada en el amor a Cristo Jesús encarnado en los pobres, crea en 1944 el Hogar de Cristo en Chi le, inst i tución que servirá de inspiración para muchas otras obras socia les de la región que se irán fundando en los años posteriores.

Grandes apóstoles jesui tas co-mo Josse van der Rest, desde Chi le, y Francisco García J iménez en Ecuador se dieron cuenta, años más tarde, que la fa l ta de una vivienda digna const i tu ía uno de los más graves problemas en los sectores marginados de la gran Guayaqui l que, producto de la migración campo-ciudad,

se agolpaban en las peri ferias urbanas. Y sueñan con dar una contribución en la búsqueda de soluciones.

Este sueño se materia l iza en Ecuador en el año 1971 con la creación de la Corporación de Viviendas Hogar de Cristo, reto fue asumido por el sacerdote jesui ta español Francisco García, cariñosamente conocido como “Tío Paco”, con la colaboración del mismo Josse, fundador asimismo del Servicio Lat inoamericano, Africano y Asiát ico de Vivienda Popular (SELAVIP). Desde esa fecha en adelante, Hogar de Cristo comenzará a ser un lugar de referencia para los más pobres, quienes encontrarán en él una oportun idad para poder acceder a una vivienda y otros servicios.

Los invi tamos a acompañarnos en este recorrido por estos 39 años de historia inst i tuciona l . En el la podemos claramente ident i f icar dos etapas o momentos claves, l iderados por dos jesui tas que han estampado su huel la , y hay una tercera etapa de cambio inst i tuciona l que está naciendo bajo el l iderazgo del también jesui ta , Eduardo Vega Lozano. “A lgo nuevo está naciendo en Hogar de Cristo” no se cansa de repeti r, con su fuerte acento español , el Hermano Roberto Costa Prats.

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Conocí a “Tío Paco”

Tío Paco ha inf lu ído en mi vida como ninguna otra persona. Él ha sido mi maestro enseñándome a amar a los pobres y a Ia pobreza. Tío Paco me enseñó a ver en los pobres a l mismo Cristo. Me mostró el camino que quería San Ignacio para todo Jesui ta: “ser contemplat ivo en la acción, ser hombre de oración, fidel idad y amor a la Ig lesia y a la Compañía y , de una manera muy especia l , a la devoción a Ia Virgen María por medio del Santo Rosario. En una palabra, Tío Paco ha sido para mí “el gran gurú” que, sobre todo, enseña más con el ejemplo que con las palabras: un hombre con experiencia de Dios.

Los principios fueron para mí muy duros, pues me in icié con el desastre cl imát ico de la “Corriente de El N iño”, de los años 82-83. Tío Paco fue el que me dió ánimo para seguir en la lucha en pro de los Sin-Hogar. Otro hecho que marcó las vidas de Tío Paco y mía y de la marcha de Viviendas Hogar de Cristo fue nuestro encuentro con las Hermanas Clarisas. Nos l lamaron para que les construyéramos su ”Monasterio” de madera y caña, pues no ten ían hogar: eran monjas Sin-Hogar y sin plata . En un principio les contestamos que NO, pero la perseverancia pudo más que nosotros, l legamos

a un acuerdo y en corto t iempo le constru imos un monasterio

con todas las dependencias imprescindib les para la

buena marcha de esta Orden con temp l a t i va . Las Clarisas rezan, nosotros

trabajamos y los Sin-Hogar disfrutan de un techo.

Dios me regaló la gracia de haber venido a l Ecuador, haber conocido a Tío Paco, ser su amigo y de haber podido trabajar, codo a codo, con él en beneficio de los más pobres.

Roberto Costa

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Durante estos trein ta años que Roberto ha l iderado Hogar de Cristo se ha l lamado “el afortunado”. Considera que es “afortunado” porque Dios le sacó de su patria y de su fami l ia para dest inarlo a trabajar con los más pobres, exclu idos y vu lnerables en Ecuador.

Aqu í encontró la piedra preciosa y el tesoro escondido. Los pobres lo evangel izaron y en cada uno de el los vio a l mismo Cristo. No hay duda que estas tres décadas de servicio y entrega han sido las más fel ices de su vida haciendo fel ices a los demás. Ha sido una aventura de a l to riesgo trabajando codo a codo con Dios. Los resu l tados de esta aventura se cuentan por cientos de mi les.

Roberto, con mucha humi ldad, reconoce que sólo ha sido un instrumento en manos de Dios. Cree que dif íci lmente habría logrado servir a tantas fami l ias sin el maravi l loso equipo de ta lentos humanos que lo ha apoyado. A todo este equipo, con cariño y grat i tud, ha dedicado públ icamente los diversos

reconocimientos que ha recibido, como el reciente Premio Isabel La Catól ica del Rey de España.

Como verdadero hijo de Dios, ha sabido dar paso a un nuevo compañero jesui ta para que tome la posta y cont inúe tan monumenta l obra. Ahora vuelve a su t ierra nata l para, desde al l í , seguir apoyando la labor de Viviendas Hogar de Cristo. La tarea encomendada no es nada fáci l porque debe “sacar agua de pozos secos” como él bien señala, pero sabemos de su amor por los pobres de Ecuador.

Si Roberto se considera “afortunado” nosotros también hemos sido “afortunados” y damos gracias a Dios por haberlo tenido tres décadas en Ecuador, por haber trabajado junto a él compart iendo sueños y ocupaciones. El mayor legado que nos deja son sus enseñanzas y vivencias de amor y servicio.

Roberto, muchos éxi tos en tu nueva misión, que el Señor te acompañe siempre y sabes que estás en nuestras oraciones. Gracias, gracias, gracias.

Ta lentos Humanos de Hogar de Cristo

El Afortunado

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Los comienzos: 1971 - 1981

Es esta una década de nacimiento de la inst i tución, el 6 de octubre de 1971 , en manos del sacerdote jesui ta Francisco García J iménez, S.J . , fundador y primer director de la organización .

El “Tío Paco”, orienta el trabajo esencial-

mente a la entrega de viviendas donadas a los SIN-TECHO más desfavorecidos, víctimas de incendios o desastres naturales.

Durante todo este período Hogar de Cristo cuenta con un aserrío en Gua-

Este período de nuestro acontecer inst i tuciona l está fuertemente marcado por el l iderazgo y obra del Hermano Roberto Costa Prats, S.J . , quien asume la dirección de Hogar de Cristo por jubi lación de Tío Paco. Este jesui ta , también español , se convert i rá en el l íder por cerca de 28 años.

Su clara orientación hacia los más pobres y su compromiso tota l con la causa de los S IN-HOGAR, l levó a que la inst i tución in tensi ficara su trabajo en esta l ínea y que entre 1982 y 1992 se construyera el proyecto de autoconstrucción y ayuda mutua denominado Hogar de Nazareth . Este plan de vivienda urbana, infraestructura, servicios y promoción del desarrol lo in tegra l de la comunidad resu l tó pionero en su t iempo.

A part i r de 1993 se consol ida tota lmente la labor de Hogar de Cristo en materia de acceso a la vivienda popular, obteniendo el reconocimiento in ternaciona l por esta importante labor. Baste decir que en 1996 Naciones Unidas otorga a Hogar de Cristo el premio World Habi tat Award, a través de la Bui ld ing and Socia l Housing Foundation de Ing laterra, a l mejor proyecto de vivienda popular, y el 20 de abri l de 1999 el Congreso Naciona l otorga la medal la “A l Méri to” a l padre Francisco García J iménez, fundador de

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Hogar de Cristo, por su inmensa labor por los S IN-TECHO, a través de las viviendas de madera y caña.

En el año 1997 Viviendas Hogar de Cristo se ve forzado a crecer, insta lando nuevas fábricas en Esmera ldas y Manabí , para socorrer con un techo a las 14.000 fami l ias damnificadas por la presencia del fenómeno El N iño. La producción diaria de casas se incrementa de 35 a 50, a lcanzando las 1 .000 casas mensuales. En los años sucesivos se cont inúa ampl iando la cobertura geográfica a las loca l idades de Quin indé, Quevedo, Babahoyo, Libertad, Dau le, Durán, Machala, Yaguachi , Playas, El Guabo, Santa Rosa, Portoviejo, Manta, Chone y J ipijapa, es decir, nos insertamos en el l i tora l ecuatoriano.

El primer Plan Estratégico Inst i tuciona l se real iza en el año 2001 , y éste posibi l i ta la conformación de una verdadera red de servicios y oportun idades como Microcrédi tos, Educación, Sa lud, Protección Socia l , etc. En el año 2007 se real iza una revisión del Plan Estratégico y se materia l iza así un nuevo modelo de gest ión que reformula el marco conceptua l , art icu la y rediseña los procesos en Macroprocesos, revisa procedimientos y funciones, permi t iendo el d iseño de una nueva estructura organizat iva, ta l cua l se presenta más adelante.

Crecimiento y consol idación: 1982 - 2009

39 años de servicio a los más pobres

yaqui l que produce un promedio de 100 casas mensuales.

Hay que resa l tar el cariño con el cua l Tío Paco entregaba, personalmente, las casas donadas a las fami l ias pobres de las zonas margina les de Guayaqui l .

De a l l í hemos heredado en Guayaqui l el nombre de “Casa Cura” y también una imagen inst i tuciona l paterna l ista que tra-tamos de ir cambiando.

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Más a l lá del test imonio que podrían ofrecer cada una de las personas que han emprendido un proceso de desarrol lo con nosotros, Hogar de Cristo cuenta con una importante l ista de reconocimientos, tanto a nivel naciona l como internaciona l , que val idan el impacto e importancia que su trabajo ha tenido a l servicio de los más necesi tados.

Un reconocimiento a nuestra historia

Desde octubre del año 2009 el sacerdote jesui ta Eduardo Vega Lozano, nuevo Director Genera l , t iene el gran reto de hacer real idad la misión y visión inst i tuciona l .

1996

1999

Premio World Habi tad Awards otorgado por Naciones Unidas, a través de la Bui ld ing and Socia l Housing Foundation de Ing laterra, a l mejor proyecto de vivienda popular.

Mención honorí fica entregada por el Ingeniero Juan José Pons, Presidente de Honorable Congreso Naciona l , en ceremonia efectuada en el Sa lón de los Presidentes del Congreso Naciona l .

2001Mención de Honor entregada por la Cámara de la Construcción de Guayaqui l en reconocimiento a los 30 años de trabajo a favor de los S IN TECHO más necesi tados.

2006Reconocimiento “A la Excelencia Empresaria l ” otorgado por el B ID a l Programa de Banca Comunal por su destacada labor de servicio a los más necesi tados de la Costa Ecuatoriana.

2006Condecoración con la orden “Dr. A lejo Lascano Bahamonde” a la persona del Hermano Roberto Costa, otorgada por el Min isterio de Bienestar Socia l como reconocimiento a la labor sol idaria y humani taria .

2007 Premio “La Escu l tura del Importante” concedido por la Edi toria l Prensa Valenciana, edi tora de Levante - EMV.

2007Reconocimiento cívico del Municipio de Guayaqui l por la misión a l tru ista l levada a cabo en el lapso de 36 años, otorgado por el I . M . Concejo cantona l de Guayaqui l .

“Por sus frutos los conocerán” dice el Evangel io. Los 39 años de trabajo, entrega y servicio de Hogar de Cristo han sido reconocidos con los sigu ientes premios y condecoraciones:

No queremos conclu i r este capí tu lo de la h istoria de Hogar de Cristo sin antes agradecer a Tío Paco, quien desde Dios Padre sigue acompañándonos, y también a l Hermano Roberto Costa que hizo germinar la semi l la sembrada por nuestro fundador.

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sumándonos a iniciativas

globales y nacionales

En un mundo global las contribuciones que se hacen a nivel loca l , deben ser entroncadas con aquel los esfuerzos que se hacen a nivel naciona l y supranaciona l . Más que defin i r d irectrices y enfoques propios pensamos necesario sumarnos a los esfuerzos g lobales que trabajan por el fomento del desarrol lo humano sustentable.

En este sent ido Hogar de Cristo busca contribu ir, desde una perspect iva loca l , a l a lcance de las “Metas del Mi len io” y a l cumpl imiento del “Pacto Global ”, como in iciat ivas mundia les, y a la real ización del Plan Naciona l del Buen Vivir, ya en el ámbi to del Ecuador, trabajando para el lo con una red de actores que se orientan bajo estos l ineamientos.

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Las Metas de Desarrol lo del Mi len io (MDM) y Principios del Pacto Global

Las 8 Metas de Desarrol lo del Mi len io fueron defin idas por Naciones Unidas y adoptadas por sus 189 Estados miembros el año 2000.

Erradicar la pobreza extrema y el hambre.

Lograr la enseñanza primaria universa l .

Promover la igua ldad entre los géneros y la autonomía de la mujer.

Reducir la morta l idad infant i l .

Mejorar la sa lud materna.

Combatir el VIH/S IDA, el pa ludismo y otras enfermedades.

Garant izar la sustentabi l idad del medio ambiente.

Fomentar una asociación mundia l para el desarrol lo.

El las buscan incid ir sustant ivamente en la ca l idad de vida de los más desposeídos, promoviendo el a lcance de logros concretos en ocho áreas del desarrol lo para el año 2015.

Estas metas son:

Por su parte el Pacto Global , como instrumento promovido por Naciones Unidas de l ibre adhesión

para empresas, sind icatos y organizaciones de la sociedad civi l , establece como Principios:

Las empresas deben apoyar y respetar la protección de los derechos humanos

fundamenta les reconocidos in ternaciona lmente, dentro de su ámbi to de inf luencia .

Las empresas deben asegurarse de no ser cómpl ices en la vu lneración de los

derechos humanos.

Apoyar los principios de l ibertad de asociación sind ica l y el derecho a la negociación

colect iva.

El iminar el trabajo forzoso y obl igatorio.

Abol i r cua lquier forma de trabajo infant i l .

E l iminar la discriminación en materia de empleo y ocupación .

Apoyar el enfoque prevent ivo frente a los retos medioambienta les.

Promover mayor responsabi l idad medioambienta l .

A lentar el desarrol lo y la di fusión de tecnolog ías respetuosas del medio ambiente.

Las empresas deberán trabajar contra la corrupción en todas sus formas, inclu idas

extorsión y crimina l idad.

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La adhesión voluntaria a estos 10 principios del Pacto Global por parte nuestra, es producto de la fi rme convicción de sumarnos a todos aquel los esfuerzos que apunten a l forta lecimiento de una sociedad más justa y democrát ica, buscando involucrar a las demás organizaciones que colaboran con nosotros.

Aunque nuestro aporte sea pequeño, Hogar de Cristo está posibi l i tando que Ecuador avance en el cumpl imiento de estas metas y principios, a l trabajar de manera mul t icausa l sobre los orígenes de la exclusión y la pobreza.

El Plan Naciona l del Buen Vivir 2009-2013, impu lsado por el Gobierno Naciona l del Ecuador, contempla 10 principios y 12 objet ivos que buscan “ la sat isfacción de las necesidades, la consecución de una cal idad de vida y muerte digna, el amar y ser amado, y el f lorecimiento sa ludable de todos y todas, en paz y armonía con la natura leza y la prolongación indefin ida de las cu l turas humanas”.

El Buen Vivir “presupone tener tiempo l ibre para la contemplación y la emancipación, y que las l ibertades, oportunidades, capacidades

y potencia l idades reales de los ind ividuos se ampl íen y f lorezcan de modo que permi tan lograr simu l táneamente aquel lo que la sociedad, los terri torios, las diversas ident idades colect ivas y cada uno -visto como universa l y part icu lar a la vez- va lora como objeto de vida deseable (tanto materia l como subjet ivamente y sin producir n ingún t ipo de dominación a otro)”.

La misión y visión de Hogar de Cristo, por tanto, no sólo están a l ineadas a estas grandes metas in ternaciona les y naciona les sino que contribuyen directamente a la erradicación de la pobreza y el hambre, mejoramiento de la ca l idad de vida, rest i tución de derechos, educación y desarrol lo, sa lud, capaci tación, economía popular y sol idaria , igua ldad de género, autonomía de la mujer, erradicación del trabajo infant i l , protección socia l , sustentabi l idad del medio ambiente, lucha contra la corrupción, entre otros.

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Hogar de Cristo no sólo t iene presencia en la ciudad de Guayaqui l .

A lo largo de nuestra historia hemos trabajado por expandir nuestros servicios y mensaje a toda la costa ecuatoriana a fin de poder estar más cercanos a las fami l ias más necesi tadas.

Este esfuerzo responde además a una manera efect iva de descentra l izar los recursos, las oportun idades y las decisiones, rompiendo la

39 años de servicio a los más pobres

ESTAMOS EN EL

LITORAL ECUATORIANO

lóg ica de centra l ización de recursos en las grandes ciudades.

Queremos ser faci l i tadores de procesos de búsqueda de mejoramiento de la ca l idad de vida tanto en áreas urbanas como rura les.

Nuestra misión debe extenderse a todas las loca l idades pobres del pa ís . Presentamos a cont inuación el mapa de loca l ización de nuestras acciones en la costa ecuatoriana.

BABAHOYO

En el mes de junio de 1999, El Hno. Roberto contactó a l Obispo deBabahoyo, Jesús Ramón Mtz. de Ezquerecocha, para que Hogar de

Cristo atendiese a las fami l ias más necesi tadas. Gracias a la gest ión del Sr. Obispo se contactó a l A lca lde del Municipio de Babahoyo, Ing. Ju l io

Touma Baci l io, quien dio en comodato el terreno donde insta lar nuestras oficinas. In iciamos labores el 18 de ju l io de 1999 en la ca l le Humberto Campi ,

entre Malecón y García Moreno conocido ant iguamente como el Camal . En el fenómeno del N iño que afectó a toda la Provincia de Los R íos, pudimos brindar una respuesta rápida donando cientos de casas emergentes de caña y madera,

con una medida de 6 x 6.

Nos hemos dado a conocer en toda la Provincia de Los R íos, art icu lándonos con la Diócesis, Despachos Parroquia les de Ig lesias, Municipa l idades y

Dirigentes parroquia les urbanos y rura les, con Organismos no gubernamenta les y Gubernamenta les, e Inst i tuciones Privadas.

Somos 13 ta lentos con míst ica de servicio a los más necesi tados en los procesos de Vivienda y Microcrédi tos.

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DAULE

Estamos en esta loca l idad desde el 30 de Mayo del año 2000. Se hizo la Inauguración de las Insta laciones de este Proceso Desconcentrado en los loca les de la Vicaria de Daule, a l lado de la Cooperat iva Sal i tre Limi tada, en donde funcionamos hasta la actua l idad, gracias a l convenio de Comodato que celebraron el Vicario de Daule Mons. Helmut Nagorziansky y el Director Genera l de Hogar de Cristo.

Desde esa fecha hemos atendido en vivienda a más de 8.000 fami l ias de Daule y los sectores vecinos, y a través del Microcrédi to a 3.000 socias de estos mismos sectores.

Actua lmente trabajamos en Daule 13 Ta lentos.

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ESMERALDAS

Nacimos en el mes de noviembre de 1998, inaugurando la segunda planta de producción en el pa ís, con el apoyo del Sr. Obispo de Esmera ldas, Mons. Arel lano, y gracias a PetroEcuador, que en sol idaridad con los más pobres de la Provincia Verde nos cedió en comodato el terreno que hoy ocupamos.

Desde entonces hemos atendido a doce mil familias en la Provincia. Un proyecto para elevar las condiciones de vida en el sector Rio Teaone en el 2008 nos permi t ió in iciar la experiencia de Banca Comunal en este sector.

En nuestras oficinas de la Catedra l atendemos ventas y cartera. En la vía a la Refinería se encuentra la planta donde se producen los productos semielaborados que enviamos a Guayaqui l para la producción de las casas de madera y caña. Contamos en la actua l idad con sesenta y cuatro Talentos, contentos de part icipar en esta hermosa obra.

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LIBERTAD

Llegamos a la pen ínsu la de Santa Elena un 8 de noviembre de 1999, gracias a la gest ión del padre Mariano Merchán Serrano. Hemos entregado nuestras viviendas en 3 cantones peninsu lares: Santa Elena, Libertad y Sal inas.

En el año 2002 in iciamos el proceso de Economía Popu lar y Sol idaria . Contamos en la actua l idad con 2.000 socias en viviendas y 1 .800 socias en Banca Comunal , lo cua l es posib le gracias a un equipo de 13 ta lentos profundamente ident i ficados con los más pobres y con la Inst i tución, con míst ica de trabajo y a l tamente capaci tados.

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MACHALA

El 5 de Junio de 1999 fue creada la oficina de Machala para atender esta ciudad, l legando actua lmente a los cantones de Pasaje, Santa Rosa (donde tenemos una agencia), el Guabo (agencia) y Tenguel , promocionando e impu lsando un hábi tat sa ludable para los más pobres, exclu idos y vu lnerables de nuestra sociedad, l legando actua lmente a 2.353 fami l ias. El 2 de Noviembre de 2009 in iciamos una nueva etapa ya que nos trasladamos a nuestra nueva sede con insta laciones más ampl ias para poder servir de una manera más cómoda y eficiente a nuestras socias. Somos un equipo de 7 Talentos comprometidos con la gran labor de faci l i tar un proceso que mejore la ca l idad de vida de la población con la que trabajamos.

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PORTOVIEJO

Iniciamos trabajos en Octubre de 1997 gracias a la Arquid iócesis de Portoviejo, en ese entonces representada por Monseñor José Mario de Jesús Ruiz Navas. En esta Planta de Producción se apl icaron los mismos patrones de producción y admin istrat ivos de Guayaqui l .

Actua lmente funciona la planta con dos galpones: uno en donde se encuentran las máquinas y las formaletas para producir las viviendas y el otro que sirve para a lmacenamiento de materia prima, así mismo un edificio en donde actua lmente funcionan l a s oficinas admin istrat ivas, de Ventas y Cartera. En Junio de 2008 a petición del Monseñor Vol to l in i , actua l Arzobispo de Portoviejo, nuestra Corporación retomó la Admin istración de la Planta y las oficinas en Portoviejo, Manta, J ipijapa y Chone, posicionándose como referente para la ca l idad de vida de las fami l ias en mayor si tuación de pobreza y vu lnerabi l idad.

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QUEVEDO

Comenzamos un 23 de Noviembre del 2001 y las primeras 12 casas l legaron un 31 de enero de 2002. A l poco t iempo ya ten íamos presencia en otros cantones como Valencia, Buena Fe y Mocache, y comenzamos a fabricar las casas en un ta l ler en la Cooperat iva 20 de Febrero a l lado de la ig lesia Beata Mercedes de Jesús Mol ina y en Quevedo por esos t iempos entregamos viviendas en los sigu ientes sectores: 20 de Febrero, Pantano, Venus, Pi ta l , Ba ldra Mina, Playa Grande, Desqui te, Santa Rosa, 15 Noviembre, San Cami lo, Nuevo Amanecer.

Gracias a l P. Mart ín Areta nos independizamos de Babahoyo el 2003 y sol ici tamos a l Gobierno Vasco una ayuda para la construcción de una planta y oficinas en Quevedo. Esto se dio en el año 2005 pero sólo dos años después nos aprobaron el proyecto y contamos ahora con la nueva planta de producción y oficinas, donde nuestras socias son muy bien atendidas.

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Esta franja recorre el pa ís de norte a sur y t iene un largo de más de 900 kms. y un ancho aproximado de 300 kms. En el la se encuentran a lgunas de las ciudades más importantes del pa ís, como Guayaqui l , Esmera ldas, Machala, Portoviejo, Manta, entre otras.

Esta región presenta una gran variedad de paisajes, ecosistemas y recursos. Sin embargo

comparte ciertas estructuras que reproducen las condiciones de desigua ldad que afectan a todo el pa ís, evidenciando a l tos índ ices de pobreza, vu lnerabi l idad, anafa lbet ismo y ausencia de servicios básicos. A su vez es un área geográfica especia lmente procl ive a sufri r catástrofes cl imát icas, en especia l inundaciones, como fruto de las abundantes l luvias que caracterizan esta zona del pa ís .

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nuestro equipo de trabajo

En Hogar de Cristo cada miembro del equipo es considerado un “TALENTO” y no un “recurso”. Las personas que conformamos la Corporación no somos valoradas solamente en función de la labor que real izamos sino en todo nuestro potencia l , creat ividad y proact ividad para establecer otro t ipo de aportes, relaciones e ideas.

Buscamos generar un proceso de desarrol lo de capacidades en cada uno de nuestros Talentos Humanos. Primordia lmente promovemos la vocación socia l y la míst ica de servicio, el espíri tu crí t ico y el compromiso ante la real idad socia l , la di fusión de principios y valores, el respeto por la di ferencia, la formación de espacios de part icipación, entre otros.

Dado que somos una Obra Socia l d irig ida por la Compañía de Jesús, siempre procuramos que nuestros ta lentos no sólo se sientan formando parte de un equipo sino también que servimos, sin importar las responsabi l idades que tengamos, a las personas en si tuación de pobreza, vu lnerabi l idad y exclusión .

Es una vocación de servicio y sol idaridad con los más pobres, que nos debe l levar a sent i rnos como “un fuego que enciende otros fuegos” y que se une a otras luces que buscan romper las t in ieblas de la enorme oscuridad socia l que nos rodea.

La plant i l la de Hogar de Cristo está in tegrada por 346 Talentos Humanos distribu idos a lo largo de quince vt loca l idades en la costa ecuatoriana. Entre el los se cuenta con una ampl ia diversidad de personas, profesiona les de diversos rubros, gente vincu lada a la ig lesia , a la Compañía de Jesús, Técnicos y Técnicas, Promotores de base, Promotoras comuni tarias, obreros ca l i f icados, jóvenes en cal idad de pasantes, voluntarios y voluntarias, etc.

De esta diversidad nace un óptimo funcionamiento en los diversos espacios de actuación de Hogar de Cristo y un rico in tercambio de ideas, visiones, saberes. La heterogeneidad se transforma en un valor que buscamos a l in terior de nuestra organización, promoviendo instancias de encuentro para que ésta pueda ser aprovechada.

Gestión de Talentos Humanos

Para la gest ión de todos los temas relat ivos a Talentos Humanos, Hogar de Cristo cuenta con un Proceso de Talentos Humanos, que procura sat isfacer las diversas necesidades que surgen en este ámbi to, considerando aspectos de formación in tegra l , recreación y bienestar socia l . Para el lo se cuenta con herramientas ta les como técnicas de motivación, estudios sa laria les, mejoramiento de cl ima labora l a través del trabajo en equipo, acompañamiento espiri tua l , opción de postu lación a dist in tos beneficios y servicios, etc.

Pol í t icas de Talentos HumanosLas pol í t icas del Proceso de Talentos Humanos

son revisadas periódicamente y actua l izadas en función de las necesidades organizaciona les y de los cambios en los contextos. Estas pol í t icas, más que estructuras normativas ríg idas, son marcos de referencia para el cu idado de nuestros Talentos.

Act ividades de Integración

Con el fin de propiciar un mejor cl ima labora l , Hogar de Cristo promueve anualmente, siempre atendiendo a sus posibi l idades presupuestarias, ciertas instancias de in tegración entre los Talentos Humanos y sus fami l ias. Así podemos mencionar Ol impiadas deport ivas, celebración del D ía de la Madre y el Padre, Fiesta de Navidad y Fin de año, Convivencia de Semana Santa, Ta l leres de motivación .

Equidad de GéneroEn relación a las característ icas de los ta lentos

humanos, nos sat isface contar con una paridad de género, producto de una pol í t ica de equidad en esta l ínea. También hay que destacar que contamos con un elevado número de personal con contrato fijo, hecho que denota nuestra preocupación por ofrecer fuentes de trabajo estables y con todas las garant ías socia les promovidas por la ley .

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Sexo Colaboradores %

171 49.1%

177 50.9%

Tipo de Contrato Colaboradores %

Contrato Fijo 329 94.5%

Contrato Eventual 14 4.0%

Contrato Parcial 5 1.5%

Gobierno Corporativo

Nuestro gobierno corporat ivo está compuesto por di ferentes miembros e instancias, buscando garant izar que las a l tas decisiones estén basadas en el consenso y en la del iberación ref lexiva. Esto

a su vez genera procesos de contra loría y de rendición oportuna de cuentas, haciendo más trasparente la admin istración y plani ficación presupuestaria .

Hombres

MujeresU

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GobiernoCorporativo

ProcesosEstratégicos

MacroprocesosGeneradores

de Valor

ProcesosHabilitantes y

de Control

DirecciónSocial

DirecciónGeneral

Directorio

ObrasCiviles

ViviendaSocial y Hábitat

DesarrolloComunitario

EconomíaPopular y Solidaria

ContabilidadServicios

Generales yMantenimiento

SistemasSeguridad y

Salud en el trabajo

Polít

icas

Gen

eral

es

ResponsabilidadSocial

Proyectos de Cooperación

Gestión delTalentoHumano

Gestión delConocimiento

DirecciónAdministrativa

Financiera

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Voluntariado

Hogar de Cristo es un espacio de encuentro para el conocimiento de dist in tas real idades socia les, contribuyendo a la ruptura de barreras que impiden el avance hacia una sociedad más equi tat iva y democrát ica. Estas barreras son const i tu idas y reforzadas por preju icios, estereotipos y miedos que se di funden en una sociedad que carece de espacios de encuentro y de instancias de reconocimiento del otro, más a l lá del mero víncu lo contractua l y ut i l i tario.

Por eso en Hogar de Cristo se promueven instancias de voluntariado apoyadas en el beneficio y compromiso mutuo y en una verdadera comunión con la real idad del otro. No nos conformamos con un voluntario misericordioso, de fi lantropía y caridad que nacen del dar a l otro lo que nos sobra. Tampoco con un voluntariado vistoso y ostentoso que haga de la pobreza un objeto de consumo experiencia l , a l est i lo de “turismo socia l ” donde quienes asisten lo hacen motivados por lo curioso o por lo dist in to. Mucho menos promovemos un voluntariado que transforme la pobreza en una sat isfacción para el ego y para quienes quieran sacar ut i l idad de este hecho.

Buscamos por el contrario un voluntariado

humano, sincero y comprometido con acciones que contribuyan de manera sostenida a cambiar las condiciones socia les que reproducen la pobreza y exclusión .

Queremos un voluntariado que reconstruya el

débi l lazo socia l entre grupos, que con capacidad crí t ica desmit i f ique los preju icios socia les que aumentan las brechas de desigua ldad y que encarne con su ejemplo el mensaje de amor a Cristo en el que sufre promovido en el evangel io.

Este t ipo de voluntariado puede ejercerse de

dist in tas maneras, son muchas las instancias y opciones que promovemos para el lo. Queremos que todos los que deseen, desde sus dist in tas posiciones y posibi l idades, puedan vivenciar esta experiencia . A lgunos t ipos de voluntariado que hemos promovido durante estos años son:

Voluntariado Fami l iar: Se brinda la oportun idad para que las fami l ias

que lo deseen puedan part icipar de la compra y armado de casas u otras act ividades socia les en beneficio de las fami l ias en extrema pobreza. De esta manera se permi te un diá logo y contacto entre real idades que posibi l i ten la construcción de lazos de cooperación y reciprocidad en el futuro.

Voluntariado de Colegiosy Universidades:

Con este t ipo de voluntariado la idea es que estudiantes, de diversos colegios y universidades, puedan abrir sus real idades a l involucrarse en proyectos socia les de desarrol lo que los pongan de cara con la pobreza del pa ís . Se procura que los voluntarios se comprometan con estas real idades y puedan jugar un papel decisivo en el las.

Voluntariado Comuni tario: Este voluntariado nace de la sol idaridad de

nuestras socias pertenecientes a los programas de

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banca comunal y sa lud. Estas socias, ident i f icadas por su in terés y l iderazgo, reciben capaci taciones en temas de sa lud y nutrición . Una vez capaci tadas son responsables de contactar con las fami l ias de sus comunidades y compart i r los conocimientos que el las recibieron de Hogar de Cristo. El Voluntariado Comuni tario de Hogar de Cristo trabaja en dos áreas: Brigadas médicas y Apoyo a la Comunidad. “El conocimiento no es sólo ind ividua l sino que con él se busca constru ir socia lmente la real idad a través del conocimiento colect ivo, de relaciones, l iderazgos, capacidad de representar e incid ir en la toma de decisiones que nos afectan a todos y todas”

Voluntariado Residente: Voluntarias y voluntarios residentes son aquel los

que vienen de otros pa íses a real izar un trabajo socia l en nuestra organización por un mín imo de seis meses. Hogar de Cristo les brinda las faci l idades necesarias para que su experiencia sea provechosa. Este t ipo de voluntariado se ha visto favorecido por las buenas a l ianzas conseguidas con agencias de cooperación in ternaciona les como el caso de América Sol idaria en Chi le y Voluntariado Pedro Arrupe - Volpa - de España.

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A cont inuación se observan a lgunas estad íst icas sobre voluntariado para los años 2007, 2008 y 2009, donde se puede apreciar un importante incremento entre los años 2007 y 2008 para después observar

MOVIM IENTO DE VOLUNTARIOS 2007 2008 2009

Voluntarios Extranjeros 51 53 44

Voluntarias Comuni tarias 20 40 14

Voluntariado Fami l iar 10 10 10

Voluntarios de Colegiosy Universidades 1 .052 1 .774 1 . 1 1 1

Casas constru idas por Voluntarios 182 349 244

Aporte de Voluntariospara construcción de viviendas $ 3.640 $ 6.980 $ 5.500

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un descenso en el año 2009, lo que evidencia la necesidad de forta lecer aún más el trabajo de este Proceso.

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alianzas y grupos de interés

Hogar de Cristo no es una inst i tución ais lada en

la lucha por una sociedad más justa y humana. Son

cientos las inst i tuciones de menor y mayor tamaño, que d ía a d ía reman hacia este

propósi to.

Por otra parte tenemos la convicción de que no somos expertos n i pioneros en todo

lo que real izamos y que necesi tamos de un trabajo

colaborat ivo y sinérgico para lograr mayores impactos.

Por el lo siempre hemos buscado establecer a l ianzas con otras inst i tuciones a fin de sumar fuerzas y ampl iar la red de oportun idades de

nuestras socias.

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Algunas de las a l ianzas que actua lmente mantenemos y según nuestras dist in tas áreas de trabajo son:

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Al ianza DescripciónSALUD

Min isterio de Salud

Proporciona vacunas para menores de cuatro años, mujeres embarazadas, adolescentes; así como vacunas para Tétano y Fiebre Amari l la .

HdC forma parte del “Sistema In tegrado de Vig i lancia, A l imentación Naciona l ” y del “Programa Naciona l de A l imentación y Nutrición”.

Facu l tad de Psicolog ía - Universidad de Guayaqui l A tención psicológica gratu i ta a nuestras socias.

Sociedad de Lucha contra el Cáncer (SOLCA)

Asesoramiento en la real ización de brigadas médicas y en la toma de exámenes para la ident i ficación de cáncer.

Hospi ta l Universi tario de Guayaqui l

Descuento a socias que necesi tan tener un tratamiento especia l izado. Toma de pruebas y asesoría genera l .

Fundación VIHDA Ofrece pruebas rápidas para detectar el VIH y capaci tación a voluntarias de sa lud.

Red de Dispensarios Médicos de la Arquid iócesis Apoyo en materia de capaci taciones.

VIVIENDA

Convenio de Responsabi l idad Socia l Empresaria l con el Club Rotario R ío Guayas

Creación del proyecto de Viviendas Fami l ias Sol idarias cuyo objet ivo es rest i tu i r a las fami l ias más pobres de la costa ecuatoriana el derecho a una vivienda digna y mejorar sus condiciones de vida, poniendo así en práct ica la Responsabi l idad Socia l Empresaria l .

Contrato Socia l por la Vivienda - CSV

Colect ivo in tegrado por organizaciones socia les, organizaciones no gubernamenta les, centros de invest igación, ent idades de microcrédi to, promotores privados de vivienda popular e ind ividuos cuya trayectoria ha sido la vivienda popular y cuyo objet ivo común es incid ir en la construcción de una pol í t ica públ ica de la vivienda y del hábi tat.

Un iversidad Pol i técnica de Madrid, Universidad Catól ica de Guayaqui l y Hogar de Cristo

Proyecto de formación in teruniversi taria de excelencia para faci l i tar la transferencia de conocimientos de docencia de pre y postgrado en materia de Habi tabi l idad Básica, propiciando la creación de una cátedra Unesco de “Habi tabi l idad Básica”, en la Universidad Catól ica de Guayaqui l .

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M ICROCRÉDITO

Red de desarrol lo comuni tario Nueva Prosperina

Generar mecanismos de art icu lación de productos y servicios en la zona de la Perimetra l Noroeste de Guayaqui l .

Red GrameenAsociaciones de finanzas sol idarias a nivel in ternaciona l que faci l i tan crédi tos a mujeres en si tuación de pobreza y vu lnerabi l idad con un enfoque de desarrol lo.

Dirección Provincia l de Educación

Colaboración compart ida para el funcionamiento del Colegio Compensatorio Hogar de Cristo.

Asignación de part idas para escuelas de la Perimetra l Noroeste de Guayaqui l que apoya Hogar de Cristo.

Municipio de Guayaqui l Convenio para el trabajo en centros educativos de la zona Noroeste de Guayaqui l .

Entrega de recursos y asesoría .

Servicio Ecuatoriano de Capaci tación (SECAP)

Entrega de cursos de capaci tación en oficios a nuestras socias.

Posibi l idad de establecer un centro de formación permanente en a l ianza con el SECAP en nuestras dependencias.

Plan In ternacional Capaci tación de voluntarios en temas de sa lud y asesorías en otro t ipo de materia .

Fe y A legría Organización jesui ta que ofrece educación gratu i ta a los n iños y n iñas que l legan a la Casa de Acogida.

Pastora l de Mujeres de la Arquid iócesis de Guayaqui l

Apoyar a la organización de a lgunos grupos de mujeres formados en las comunidades de la zona Perimetra l .

EDUCACIÓN Y FORMACIÓN

PASTORAL

VULNERABILIDAD Y EXCLUSIÓN

Red Nacional de Casas de Acogida

Cooperación e in tercambio de experiencia .Forta lecimiento de convenios, a l ianzas y acuerdos.

Inst i tu to de la N iñez y la Fami l ia (INFA)

Colaboración con Casa de Acogida en casos que requieren protección especia l .

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ORoger ArosemenaVicepresidente del Directorio

“De Hogar de Cristo he aprendido a ver el rostro de Jesús en el prój imo, y en especia l en el exclu ido y marginado por nuestra sociedad, que la verdadera fel icidad consiste en dar y no en recibir, y que Nuestro Señor, que es amor infin i to, nunca desampara ni abandona a l que lo necesi ta . Hogar de Cristo es una obra que reconforta el espíri tu”.

Anna Santiago Voluntaria Española

“Hace un año y medio viajé de vuel ta a Barcelona después de haber trabajado durante dos años como voluntaria en Hogar de Cristo en sus oficinas de Guayaqui l .

Siempre he pensado que hay experiencias que te marcan y que cambian tu forma de enfrentar la vida, y mi estad ía en Ecuador fue sin dudas una de esas experiencias, porque ya no lo veo como un pa ís lejano, sino con rostros, con nombres y apel l idos, con unos paisajes y una manera de entender la vida que quedó insta lada en mi corazón.

Hogar de Cristo tuvo mucho que ver en esto ya que me permi t ió trabajar durante dos años en el programa de Apoyo Escolar, donde pude meterme a fondo en las comunidades y en las escuelas, trabajar d ía a d ía por esas mujeres y esos niños que tan solo requieren una pequeña oportun idad. Agradezco a Hogar de Cristo porque me brindó el espacio y la confianza para real izar mis capacidades y ponerlas a l servicio de los demás.

Ahora sigo luchando por la paz y la just icia , por el amor y la l ibertad. Por lo pronto sigo en el t ipo de trabajo que me l lena: estar cerca de la gente que necesi ta una mano, a quien me gusta acompañar. Ahora me doy más cuenta de que para servir hay que amar y, para eso, hay que conocer”.

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Grupos de Interés

Este término es entendido como cualquier grupo o individuo que pueda afectar o ser afectado por el logro de los propósi tos de una organización . Los grupos de in terés incluyen a empleados, cl ientes, proveedores, accionistas, bancos, ambienta l istas,

gobierno u otros. Por lo tanto, son de gran ut i l idad para la plani ficación estratégica de una inst i tución, como Hogar de Cristo, que persigue un bien de in terés naciona l como es la erradicación de la pobreza.

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Máximo Baque“Don Baque”Talento Humano, Mantenimiento

“Trabajo en Hogar de Cristo desde septiembre del 2008, hace ya dos años, y realmente le doy gracias a Dios por el maravi l loso trabajo que me ha dado. Yo l legué a trabajar aqu í para hacer unos arreglos tempora les, pero me fu i quedando y ganándome un espacio en el corazón de mis compañeros. Ahora trabajo en el equipo de mantenimiento y cumplo una jornada labora l de 06:30 a 16:30, en la que debo hacer dist in tas labores.

Lo que más me gusta de la inst i tución es el trato humano que recibo por parte de mis jefes y compañeros de trabajo, todos son muy buenas personas. Además me gusta la labor que la inst i tución real iza con las socias ya que me siento contento de poder aportar un poco en eso.

Para mí Hogar de Cristo es una inst i tución única y sueño con

trabajar toda mi vida en el la , pues ofrece oportun idades reales de desarrol lo y por eso yo estoy siempre 100% comprometido a real izar bien mi trabajo”.

Hogar de Cristo ha orientado esfuerzos hacia el forta lecimiento permanente de los grupos de in terés enfocados a privi leg iar su ca l idad de vida, preservar el ecosistema, adaptar los productos y servicios a las necesidades de nuestros socios, impu lsando su desarrol lo y el de la comunidad.

En esta l ínea se ha hecho un

trabajo importante por recoger las apreciaciones y aportes de nuestros grupos de in terés. Su contribución es val iosa para conocer lo que piensan y aspiran de nuestra Inst i tución . En función de eso, incorporamos sus aspiraciones a nuevos productos, servicios o estrategias que, en el corto, mediano y largo plazo sat isfagan ta les in tereses. Conocer sus in tereses y expectat ivas también nos ayuda a la ident i ficación de nuevas oportun idades de crecimiento conjunto como también mi t igar, prevenir y el iminar potencia les riesgos.

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El Modelo de Gest ión es el marco que orienta nuestra forma de pensar, decid ir y actuar, haciendo posib le que nuestro accionar sea coherente con

Nuestro Modelo de Gest ión t iene 3 componentes: un marco para pensar, un marco para decid ir y un marco para actuar.

1 . Un Marco para Pensar:

Nuestra misión, visión, objet ivos, va lores y l íneas de acción se inspiran en tres horizontes que a l imentan nuestra concepción de la real idad y la forma en que actuamos en el la . De el los se desprenden conceptos claves que dan soporte a nuestro trabajo.Estas tres grandes l íneas inspiraciona les son: Vida Plena Enseñanzas socia les de la Ig lesia Espiri tua l idad Ignaciana

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NUESTRO MODELO DE GESTIÓN

el proyecto inst i tuciona l defin ido colect ivamente en nuestra misión y visión .

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¿Vida plena o desarrol lo?

Hemos pasado demasiados años en América Lat ina con muchos proyectos y poco desarrol lo. Los resu l tados no son a lentadores. Las acciones emprendidas no fueron el fruto de un anál isis que involucrase a las poblaciones a que iban dirig idos. En la mayoría de los casos a los especia l istas no se les ocurrió preguntar a la gente qué era lo que necesi taban. Los “expertos” que ocuparon cargos clave - en los Min isterios - diseñaron la agenda del desarrol lo más conveniente… ¡para ciertos organismos mul t i la tera les! Muchas ONG, por su parte, reprodujeron con escasa cri t icidad los paradigmas en boga sobre el desarrol lo.

El paradigma del desarrol lo apl icado al “Tercer Mundo” es de una simpleza escalofriante: para que haya desarrol lo debe haber crecimiento económico y éste se obtiene a través de mayor industria l ización . Las unidades de medida son el Producto Bruto In terno (PBI) y el ingreso per cápi ta . La perspect iva del desarrol lo es macroeconómica: el ind icador es el crecimiento cuant i ta t ivo de los objetos producidos. La economía está en el centro.

El ser humano deviene, en este modelo, en un objet ivo secundario. Lo que importa en defin i t iva son los objetos y la capacidad de adquiri r los. Por el lo la pobreza se “mide” según los ingresos económicos y no de acuerdo a la sat isfacción de las necesidades humanas fundamenta les.

Los resu l tados de este paradigma, aderezado con las maromas del sistema financiero in ternaciona l , son aterradores. A l mismo t iempo que mi l mi l lones de personas están muriendo de hambre, otras mi l mi l lones sufren de obesidad por exceso de consumo. Nunca el ser humano ha contado con tantos n i tan buenos recursos para acabar con las enfermedades y el hambre, pero no es el ser humano lo que importa sino la economía.

“Según la FAO el mundo necesi taría 30 mi l mi l lones de dólares a l año para luchar contra el hambre, recursos que signi fican apenas sólo una fracción de los 1 .100 mi l lones de dólares aprobados por el G-20 para hacer frente a la recesión mundia l ”.

¿Qué es entonces ser “desarrol lado”? ¿Parecernos a aquel primer mundo que ha hecho de nuestro planeta una experiencia insustentable derrochando recursos, destruyendo especies, subvalorando cu l turas enteras? ¿No sería mejor hablar de Vida Plena y que cada pueblo construya su propio camino hacia el la? ¿Y en vez de elaborar un Plan de Desarrol lo, hacer de Plan de Vida Plena?

En Hogar de Cristo venimos l levando a cabo desde hace a lgunos años un proceso de ref lexión acerca de esta Vida Plena. Frente a todos aquel los modelos que de una u otra manera no ubican a l ser humano al centro de todo esfuerzo, afi rmamos que el “desarrol lo” t iene que ver con las personas y no sólo con los objetos. Por tanto, el propósi to esencia l de toda propuesta de desarrol lo será procurar la adecuada sat isfacción de la mayor parte de las necesidades humanas fundamenta les, con la fina l idad de ampl iar las opciones, capacidades, oportun idades y l ibertades de las personas.

El desarrol lo se trata, en defin i t iva, de rest i tu i r los derechos de las personas para que todos tengan vida y vida en abundancia .

Esto lo hacemos desde una perspect iva loca l , desarrol lando estrategias terri toria les basadas en el aprovechamiento pleno del potencia l de las comunidades loca les, con la adecuada inserción de otros apoyos y recursos estratégicos que vienen de fuera. De esta manera procuramos la dinamización sostenib le del terri torio y la sociedad loca l , mediante el empoderamiento de los principa les actores socia les, económicos y pol í t icos loca les. Una dinamización que garant ice la sustentabi l idad de las in iciat ivas aún después de terminadas.

Esta es nuestra apuesta de Vida Plena, el motor conceptua l detrás de cada proyecto que ejecutamos, y que junto con la enseñanza socia l de la ig lesia y la espiri tua l idad ignaciana const i tuyen el marco para pensar de nuestro Modelo de Gest ión .

1 . CEPAT- IHU, “E l contexto de la cris is civi l izaciona l ”, Curi t iba , 2010.

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La pobreza y las pobrezas

El concepto tradiciona l de pobreza es l imi tado y restring ido, puesto que se refiere exclusivamente a la si tuación de aquel las personas que pueden clasi ficarse por debajo de un determinado umbra l de ingreso. La noción es estrictamente economicista .

Sugerimos no hablar de pobreza, sino de pobrezas. De hecho, cua lquier necesidad humana fundamenta l que no es adecuadamente sat isfecha revela una pobreza humana. La pobreza de subsistencia (debido a a l imentación y abrigo insuficientes); de protección (debido a sistemas de sa lud ineficientes, a la vio lencia, la carrera armamentista, etc.) ; de afecto (debido a l autori tarismo, la opresión, las relaciones de explotación con el medio ambiente natura l , etc.) ; de entendimiento (debido a la deficiente ca l idad de la educación); de part icipación (debido a la marginación y discriminación de mujeres, n iños y minorías); de ident idad (debido a la imposición de valores extraños a cu l turas loca les y regiona les, emigración forzada, exi l io pol í t ico, etc.) y así sucesivamente.

Pero las pobrezas no son sólo pobrezas. Son mucho más que eso. Cada pobreza genera patolog ías, toda vez que rebasa l ími tes crí t icos de in tensidad y duración . Esta es una observación medular que conviene i lustrar.”

Fragmento del l ibro: “Desarro l lo a Esca la Humana”, Manfred Max-Neef. 1993.

Ed . Nordan-Comunidad, Montevideo, Uruguay.

¿De qué “DESARROLLO” hablamos?

¿Qué es ca l idad de vida para un niño waorani del Parque Naciona l Yasun í , y qué es ca l idad de vida para un niño urbano de un barrio acomodado?

¿Qué es ser “desarrol lado”? El paradigma dominante de “desarrol lo”, herencia del darwin ismo y sinónimo de “modernidad” y “progreso”, ha implantado en el mundo una visión unid irecciona l de la h istoria . Es un paradigma en profunda crisis y , por el lo, seguir hablando de “desarrol lo” es a lgo que no termina de convencernos.

Dist in tas tradiciones, desde otras maneras de entender el mundo, se han referido más bien a l “Vivir Bien” (Aristóteles, ref lexiones sobre ét ica y pol í t ica), a la “Vida en Abundancia” (tradición judeo-crist iana), a l “Buen Vivir” (tradiciones andinas). ¿No sería mejor entonces buscar otro paradigma? En Hogar de Cristo hemos abierto el debate. ¡Bienvenidos sus comentarios!

Enseñanzas socia les de la Ig lesia Los primeros crist ianos aprendieron de su Maestro

que la fe exige la just icia . Una fe que no obra la just icia no es fe crist iana. Por el lo las primeras comunidades

entendieron muy bien que era necesario estar atentos a los “signos de los t iempos”, es decir, desarrol lar esa capacidad de “ leer” la real idad desde el plan de Dios: ¿será que esto que estamos viviendo es lo que Dios quiere que vivamos? y actuar en coherencia según ese plan . De esta manera la Ig lesia comenzó a producir un conjunto de orientaciones acerca de la vida pol í t ica, económica y socia l de los pueblos. Sus enfoques sobre estos temas son variados pues responden a t iempos dist in tos y cu l turas que han ido transformándose.

No obstante, desde fina les del Sig lo XIX los Papas han hecho un esfuerzo importante por art icu lar esta enseñanza, presentándola no como un sistema socia l , pol í t ico o económico a l ternat ivo a los ya existentes, n i como una propuesta técnica para solucionar problemas práct icos, sino como una propuesta desde la mora l d irig ida a l ser humano y por ende con dest ino universa l .

Espiri tua l idad IgnacianaSiendo Hogar de Cristo una obra socia l d irig ida

por jesui tas, y teniendo en cuenta que según sus Estatutos la l ínea socia l es responsabi l idad de la Compañía de Jesús, nuestra carta de navegación está dada por las Directrices que la Provincia

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Y para encarnar estas directrices, la Provincia de la Compañía de Jesús en Ecuador traza diez pol í t icas para toda Obra Socia l :

1) Trabajar en red uni ficando y complementando macroproyectos in tegra les y de impacto socia l , efect ivos en la transformación de estructuras.

2) Forta lecer la comunicación a l in terior del sector socia l y de sus áreas.

3) Real izar a l ianzas estratégicas con inst i tuciones de la Ig lesia , con nuestras obras socia les, con otras áreas apostól icas, con organizaciones de la sociedad civi l (naciona l e in ternaciona l), con los gobiernos loca les y con el Estado, para un mayor impacto socia l .

4) Lograr que cada obra desarrol le un proceso sistemático de diagnóst ico, plani ficación y evaluación, que incluya ind icadores de impacto socia l e incidencia pol í t ica para medir, evaluar y mejorar la consecución de sus objet ivos.

5) Reforzar las obras mediante la capaci tación y la evangel ización de nuestros colaboradores y voluntarios, y favorecer la formación in tegra l de l íderes para el servicio de la comunidad, desde una perspect iva ecuménica.

6) Promover la just icia a l in terior de nuestras obras (sa larios, relaciones labora les, etc.).

7) Acompañar a estudiantes jesui tas, colaboradores y voluntarios en sus experiencias de trabajo con los pobres y est imu lar su in terés por nuestro apostolado.

8) Fomentar la invest igación socia l en cada obra y la ref lexión conjunta en todo el sector socia l para a lcanzar un mayor impacto y cambios de estructuras en la sociedad.

9) Contribu ir a que todas las obras de la Compañía desarrol len a su modo la dimensión socia l inherente a nuestra misión .

10) Mantener programas asistencia les y socia les, pero tendiendo en ú l t imo término a la promoción de la persona y a l desarrol lo comuni tario.

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Ecuatoriana ha trazado para el Apostolado Socia l , entendiendo éste como toda act ividad que:

1) Está enraizada en su amor preferencia l por las personas en si tuación de pobreza y exclusión .

2) Concreta este amor preferencia l en una labor con estas personas y, en a lgunos casos, viviendo como el las.

3) Busca conseguir transformaciones estructura les hacia una sociedad más justa y fraterna, desde la perspect iva de las personas en si tuación de pobreza y exclusión .

4) Las considera siempre como sujetos de los cambios y no objetos de nuestra labor.

5) Se l leva a cabo loca lmente con una perspect iva y art icu lación cada vez más g lobal orientada de abajo hacia arriba.

6) Presupone un riguroso anál isis socia l y cu l tura l .

7) Se ejecuta genera lmente en equipo con una sensibi l idad inclusiva que trata de involucrar a otros jesui tas y la icos.

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Organigrama

Un Marco para Decid ir:

Para decid ir se necesi ta una estructura organizaciona l coherente con la misión y valores de la organización . Esta estructura debe ser lo suficientemente f lexib le para asumir los desaf íos de un objeto complejo y dinámico como la pobreza y lo suficientemente práct ica para evi tar burocracias y gastos innecesarios de recursos.

Por eso en Hogar de Cristo hemos desarrol lado una innovadora red de procesos que permi te gestar proyectos de vida de una forma horizonta l y cercana con las necesidades de los más pobres, asumiendo para el lo una estructura in terna clara e in tercomunicada.

Por “proceso” se ent iende un conjunto ordenado de fases sucesivas para producir un resu l tado especí fico con valor agregado. Por ejemplo, el proceso de adjudicar una casa a una socia de Hogar de Cristo.

A continuación se presenta el organigrama insti tucional tipo matricia l . En él se observan los f lujos de decisiones y la comunicación existente entre las dist in tas l íneas de trabajo. Este organigrama permi te una visión panorámica de cómo se estructura la red de servicios que hogar de Cristo propone para l levar a cabo su misión .

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PlanificaciónMantenimiento y Evualuación

Comunicación

Educación Vulnerabilidad y Exclusión Salud

Banca ComunalIniciativas

Económicas

Logística yAdquisiciones

Producción Ventas Cartera

Programas y Proyectos deCooperación

ResponsabilidadSocial

Gestión delTalento Humano,

Formación y Capacitación,

Pastoral y

Voluntariado

ObrasCiviles

ServiciosGenerales y

MantenimientoSistemas Contabilidad

Seguridad

y salud enel trabajo

Esmeraldas

Quevedo

Portoviejo

Babahoyo

Daule

Libertad

Machala

GERENCIADesarrollo

Comunitario

GERENCIADE VIVIENDA

Y HÁBITAT

GERENCIADESARROLLO

INSTITUCIONAL

DIRECCIONSOCIAL

DIRECCIONADM.

FINANC.

DIRECCIONGENERAL

Asistencia

Incidencia Política

Gestión del Conocimientoy Grupos de

interés

Contraloría

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MACROPROCESOS

Los Macroprocesos son las l íneas temáticas fundamenta les de nuestra gest ión, que a su vez agrupan varios procesos o áreas de trabajo. Cada uno de el los comprende las l íneas estratégicas g lobales y es, por consiguiente, elemento const i tu t ivo de la misión inst i tuciona l , apuntando al forta lecimiento de una Vida Plena, a la rest i tución de derechos y a l forta lecimiento de una ciudadanía act iva. En la Cadena de Valor de Hogar de Cristo se ident i f ican los Procesos Gobernantes, Procesos Estratégicos, Procesos Generadores de Valor y Procesos Habi l i tantes o de Soporte.

En un primer grupo tenemos a los Macroprocesos orientados a la generación de valor, es decir, a la creación y presentación de servicios y programas concretos que contribuyan a mejorar las condiciones de vida de nuestras socias.

Estos Macroprocesos de “Generación de valor” son:

•Eco n o m í aPo p u l a rySo l i d a ri a •Desa rro l l oCo m u n i ta ri o •Vivi e n d ayH á b i ta t

Luego contamos con los Procesos Estratégicos,

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agrupados en el macroproceso de Desarrol lo Inst i tuciona l que t iene como objet ivo forta lecer a la inst i tución y a sus grupos de in terés en el cumpl imiento e ident i f icación con la misión inst i tuciona l . Los procesos que lo componen son: Proyectos de Cooperación, Gest ión del Conocimiento, Responsabi l idad Socia l , Gest ión de los Talentos Humanos que, a su vez, incluye los procesos de Pastora l , Voluntariado, y Formación y Capaci tación .

Además de estos macro procesos existen los procesos gobernantes y los procesos de soporte o habi l i tantes. Por proceso gobernante entendemos aquel los centrados en l iderar la propuesta inst i tuciona l y en ejecutar la toma de decisiones pert inentes para el ópt imo funcionamiento organizaciona l . A su vez, por procesos de soportes o habi l i tantes entendemos aquel los de orientación in terna, que permi ten dar viabi l idad a las acciones de los otros procesos.

A cont inuación se presenta un mapa de los

procesos de la organización que i lustra la in terrelación que existe entre el los, graficando el va lor que le atribu imos a las relaciones bid irecciona les y a mantener una estructura horizonta l basada en el modelo de la “cadena de valor”

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Con este modelo de gest ión para la toma de decisiones y la organización de los procesos se puede comprender de mejor forma la estructura

in terna de Hogar de Cristo y su clara distribución de roles y responsabi l idades.

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Procesos generadores de valor Los procesos generadores de valor son aquel los

que permi ten tener una incidencia directa sobre las comunidades. Estos Procesos apuntan a l desarrol lo de dist in tos servicios que permi tan sat isfacer las necesidades fundamenta les y la rest i tución de derechos de los sectores más vu lnerados.

Cada área de trabajo está encabezada por una jefatura y por un equipo operat ivo que l leva a cabo la ejecución de los proyectos. Estos equipos de trabajo t ienen la tarea esencia l de plasmar los va lores organizaciona les y la misión en las act ividades diarias. Buscan también mantener un diá logo constante con las comunidades, el d irectorio y plana gerencia l .

Se presenta a cont inuación una pequeña descripción de estas áreas de trabajo de forma que el lector se fami l iarice con sus enfoques, metodolog ías y fundamentos, antes de conocer con mayor deta l le los resu l tados obtenidos en cada una de el las.

Educación y Capaci tación

Desde nuestra inst i tución la educación es concebida desde la perspect iva de rest i tución de derechos y de comunidad educativa. La educación es mucho más que el proceso de in teracción que se da en el in terior del au la escolar. Ésta incluye múl t ip les actores que inciden en el proceso educativo del n iño o la n iña, como la fami l ia , la infraestructura del recinto escolar, los maestros y las maestras, los actores comuni tarios, etc.

Es esta comunidad educativa la que en su conjunto deberá encargarse de promover act ividades que l leven a l mejoramiento de la ca l idad de la educación y a lograr el bienestar de los y las estudiantes. No descansando hasta garant izar una educación in tegra l , en constante cambio, innovación y desarrol lo.

Este trabajo, que apunta a la rest i tución de la educación como un derecho universa l e ina l ienable y que no vela sólo por la cobertura, pone sus esfuerzos en insta lar capacidades que permi tan incrementar de forma sostenib le una educación de ca l idad para los sectores pobres y exclu ídos.

Para la real ización de todo aquel lo el Proceso de Educación asumió en el 2009 las sigu ientes l íneas de trabajo:

• Co m u n i d a d Ed u ca t iva : Línea de trabajo que nace para promover act ividades que l leven a l mejoramiento de la ca l idad de la educación y del bienestar de los estudiantes bajo el enfoque recién descri to. Los programas emprendidos en esta l ínea son:

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Un Marco para Actuar:

Establecidas las l íneas orientadoras tanto en los n iveles conceptua les como organizaciona les, es pert inente el establecimiento de un Marco de Acción de los tópicos relevantes en cada uno de los marcos establecidos.

Por marco para actuar nos referimos a l planeamiento operat ivo, la determinación de act ividades, el aná l isis de priorización de los recursos a l ri tmo de implementación de las act ividades diseñadas.

Este conjunto de acciones const i tuyen una agenda que debe ser considerada en las fases de pre-operat ivas y de implementación del Marco Estratégico formulado año a año por Hogar de Cristo.

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Programa de Apoyo Escolar.Programa Escuelas Saludables. Programa de Desayuno Escolar para niños y n iñas.

•Exte nsi ó nEd u ca t iva : L ínea de acción abocada al trabajo sobre los procesos de escolarización, formación de docentes y adu l tos que inciden en el desarrol lo educativo.

Para esto se contó durante el 2009 con los sigu ientes proyectos:

Formación Docente. Formación de Adu l tos. Programa de Bachi l lerato. Programa de A l fabetización . Formación de Promotoras.

Fina lmente esta área de trabajo cuenta con una tercera l ínea que se orienta a dar cumpl imiento a la segunda gran responsabi l idad del área que es asumir

la coordinación de ta l leres y cursos de capaci tación y habi l i tación en conocimientos técnicos que permi tan mejorar las competencias de las socias para el emprendimiento de in iciat ivas económicas. Lo que en términos genera les se conoce como educación técnica, de ah í el nombre de esta l ínea.

• Ed u ca ci ó n Técn i ca : Esta l ínea nace con la in tención de brindar capaci taciones a las socias de los bancos de microcrédi to de Hogar de Cristo, así como también a otros part icu lares que estén in teresados en la adquisición de habi l idades técnico-artesanales que los hagan más competi t ivos a la hora de in tegrarse a l mercado de trabajo. Los dist in tos ta l leres se dictan en las insta laciones de Monte Sina í de Guayaqui l , y giran en torno a temas demandados por las propias socias, siendo corte y confección, peluquería , panadería y pastelería los más demandados durante el 2009.

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vulnerabilidad y

exclusión socialEntendemos la vu lnerabi l idad socia l como una

condición de riesgo que dificu l ta , inhabi l i ta o inva l ida de manera inmediata o en el futuro el desarrol lo de las capacidades humanas y su bienestar, siempre en un contexto socio-h istórico y cu l tura l determinado.

Existen muchas problemáticas que podrían ser inclu idas bajo este rótu lo, sin embargo centramos nuestros esfuerzos en dos de el las:

•Erra d i ca ci ó nyp reve n ci ó nd el avi o l e n ci ai n t ra fa m i l i a r,abordando sus causas y consecuencias.•Preve n ci ó nyt ra ta m i e n tod e lVI H .

Durante el año pasado trabajamos con:

•M uj e resq u evive nco nVi o l e n ci aI n t ra fa m i l i a r.•M uj e resq u evive nco nVI Hposi t ivo.•N i ñ os ,n i ñ a sya d o l esce n tesq u evive ne n si tuación de vio lencia in trafami l iar.• Soci a s a q u i e n es se l es d e tecta a l g ú n t i po d ecáncer.

Dentro de esta área de trabajo se real izan los sigu ientes programas tendientes a reducir las condiciones y factores que generan si tuaciones de vu lnerabi l idad y exclusión .

Programa de Acompañamiento en Violencia In trafami l iar

El objet ivo es faci l i tar el acceso legal y psicológico a las socias del Programa de microcrédi to a través del Fondo Sol idario, que el las han creado, para que puedan recibir apoyo ante cua lquier si tuación de vu lnerabi l idad o vio lencia in trafami l iar que estén viviendo.

Cuenta con los sigu ientes servicios:

• Orientación legal : Se brindan orientación legal gratu i ta a socias que requieran este servicio, con el fin de apoyarla y asesorarla en cualquier t ipo de conf l icto ind ividua l o colect ivo, contribuyendo a que hagan respetar sus derechos.

• Seguimiento de Procesos: Se refiere a aquel los casos en donde se consu l ta o se da in icio a un

proceso legal para rest i tu i r derechos. Dicho proceso recibe acompañamiento y seguimiento.

•A po y oPsi co l óg i co: Gracias a un convenio real izado con la Facu l tad de Psicolog ía de la Universidad de Guayaqui l , Hogar de Cristo brinda consu l tas psicológicas de manera gratu i ta a sus socias. Se da preferencia a mujeres que viven con VIH posi t ivo, n iños, n iñas y adolescentes que conviven en si tuación de vio lencia in trafami l iar o personas que t ienen cáncer.

También se cuenta con el apoyo de un psicólogo contratado por la Fundación Espí ri tu de Esperanza del Club Rotario.

Casa de Acogida para Mujeres Víct imas de la Violencia In trafami l iar

Este proyecto nace en el año 2009 con la ayuda y financiamiento del Min isterio de Inclusión Socia l (M IES), en el marco de un convenio de cooperación in terinst i tuciona l l lamado “Plan para erradicar la Violencia de Género” que impu lsa el Estado Ecuatoriano para garant izar a las mujeres, n iños, n iñas y adolescentes seguridad, paz, bienestar, tranqui l idad, vivir en mejores condiciones y desarrol lar sus proyectos de vida.

Nuestro centro cuenta con la infraestructura y el equipo humano necesario para brindar un apoyo mul t id iscip l inario a cada caso que contempla: atención médica, atención psicológica, asesoría juríd ica, refuerzo educativo para los h ijos y las h ijas.

Este proceso permi te reestructurar las a l teraciones psicosocia les que se derivan de episodios de vio lencia rei terados, y la rest i tución de los víncu los socio-afect ivos rotos por el abandono repent ino del hogar.

A l término del proceso se espera que las mujeres recobren su autoest ima, se puedan in tegrar a fuentes de empleo, refuercen sus víncu los fami l iares, y establezcan una ruptura efect iva con el agresor, en el caso de que éste mantenga su act i tud.

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SALUDEl área de Salud se in icia el año 2004 con la

in tención de garant izar el derecho a la sa lud en las comunidades marginadas de la ciudad de Guayaqui l . Para esto se apoya en los postu lados y principios de la Medicina fami l iar y comuni taria promovida como una importante área de actuación dentro del campo de la Atención Primaria de Salud.

La idea principa l de este enfoque es resolver en este nivel práct icamente el 90% de los problemas de sa lud, derivando a otros n iveles del sistema los problemas que sólo por su complej idad o requerimientos tecnológicos necesi ten otros recursos, evi tando así el congest ionamiento de hospi ta les y la movi l ización innecesaria de los ciudadanos y recursos.

Esta perspect iva se basa también en la atención

a l paciente y no a la enfermedad. Se considera a la fami l ia o a l entorno más inmediato del paciente como condicionantes del estado de sa lud, in troduciéndose una visión comuni taria de la medicina, donde la comunidad puede actuar como fuente de enfermedad o como medio terapéut ico, siendo el espacio desde donde se puede actuar con medidas prevent ivas y de promoción.

Para la implementación de esta mirada de sa lud Hogar de Cristo cuenta con la admin istración de cinco subcentros ubicados en la Perimetra l Noroeste de Guayaqui l , lo que le permi te una presencia en las comunidades más pobres y que no cuentan con la cercan ía de servicios públ icos de sa lud.

Invest igación y promoción:

Por invest igación y promoción entendemos dos grandes l íneas de la sa lud comuni taria que van más a l lá de la atención médica tradiciona l . Estos procesos buscan levantar información relevante para mejorar la sa lud in tegra l de las comunidades, insta lando herramientas y capacidades para la prevención .

Todos los agentes de la comunidad pueden incid ir posi t ivamente en el cu idado y educación, siendo por tanto la forma más sustentable y económica de combatir los problemas en sa lubridad.

Se incluyen los sigu ientes programas de acción:

• Preve n ci ó n d e VI H y o t ra s e n fe rm ed a d es d etrasmisión sexual .

• B ri g a d a s d e sa l u d e n d is t i n ta s co m u n i d a d esdel pa ís .

•Ca pa ci ta ci ó naa g e n tesco m u n i ta ri osd esa l u d .•Prog ra m a sd en u t ri ci ó n .•Prog ra m a sd eexá m e n esm éd i cos .

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El Proceso de Vivienda Socia l y Hábi tat es el nombre actua l de la l ínea de trabajo más ant igua de la organización, que se in icia a comienzos de los años 70 con la entrega de las primeras viviendas y el ideal de garant izar el acceso a la vivienda a los sectores más pobres del Ecuador.

En la actua l idad Hogar de Cristo cuenta con cuatro fábricas de producción y distribución de viviendas ubicadas estratégicamente en el Li tora l Ecuatoriano, a fin de garant izar la oferta a todos los sectores que lo demanden. Para la construcción de las casas se ut i l izan materia les autóctonos, como la madera, la caña de bambú y otros de innovación, para hacerlas más sustentables.

¿Cómo funciona nuestro programa?

El objet ivo de nuestro programa es ofrecer una vivienda transi toria a los sectores más pobres de la población, que contribuya a erradicar o reducir las condiciones de precariedad en que viven e incent ive el in icio de un proceso de mejoramiento que le permi ta superar sostenidamente su condición de pobreza.

Esta visión supone que por medio del acceso a la

vivienda se puede generar un proceso de cal idad de vida. El impacto del programa no se mide sólo porque la gente acceda o no a una casa sino por el proceso educativo y transformador que supone para una fami l ia de escasos recursos contar con un patrimonio, ser capaz de pagar responsablemente un crédi to para la vivienda, sat isfacer necesidades básicas fundamenta les, establecer relaciones de reciprocidad con organizaciones no gubernamenta les, entre otras.

Nuestro programa de vivienda no funciona bajo la lógica de una empresa inmobi l iaria que pone a la venta de los sectores más desfavorecidos opciones de casas accesib les a el los. Es, en real idad, mucho más que eso puesto que su fin ú l t imo no es la colocación de viviendas sino el impacto que sus viviendas t ienen en el mejoramiento de la ca l idad de vida de las fami l ias.

El programa de vivienda t iene como objet ivos transversa les:

•Co n t ri b u i ral ai nves t i g a ci ó nei n n ova ci ó nd en u eva sformas de hacer viviendas socia les para los más desposeídos. • Te n e r i n ci d e n ci a po l í t i ca n o só l o a l d e n u n ci a r e ldéfici t de vivienda y las miserables condiciones en que aún viven mi les de fami l ias vu lnerables sino también a contribu ir en la formulación de pol í t icas públ icas que garant icen este derecho. • A ct u a r d e i n m ed i a to e n ca so d e ca tá s t ro fesnatura les, poniendo su producción a disposición de cualquier cooperante.

• G a ra n t iza r po r m ed i o d e u n fo n d o d e so l i d a ri d a dla entrega de vivienda gratu i ta a casos crí t icos de extrema pobreza, donde de seguir así se pone en riesgo las condiciones mín imas para la vida.

Para dar cumpl imiento a estos postu lados y para garant izar que todas las fami l ias puedan acceder a nuestras viviendas, fue necesario el desarrol lo de un modelo de gest ión que incluyese un sistema equi tat ivo de subsid io o financiamiento credi t icio que les permi t iese a las fami l ias acceder a la vivienda y a la vez garant izar la sustentabi l idad económica del programa.

Asumir la vivienda como un derecho no impl ica, desde nuestras posibi l idades, transferir una vivienda de forma gratu i ta a quienes no poseen una, sino garant izar la posibi l idad de que todos puedan acce-der a un programa de vivienda independientemente de sus ingresos o condición socia l . Esto supone el desarrol lo de un modelo f lexib le, donde cada caso sea atendido de forma personal según su historia , requerimientos, recursos y posibi l idades.

Basado en esto hemos desarrol lado nuestro modelo que en términos operat ivos contempla cuatro etapas: Log íst ica y Adquisiciones, Producción, Ventas y Cartera.

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vivienda social y hábitat

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Vivienda de caña y madera con piso de tablas

Casa Modulada de 4.80 x 4.90mts. Base de punta les de madera:

Incluye: 3 ventanas. 1 puerta . Piso de tablas de madera. Techo de Ardex. 1 d ivisión in terior.

MODELOS DE VIVIENDAS

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Casa de Caña y Madera con piso mejorado

Casa Modulada de 4.80 x 4.80mts. Base de punta les de madera:

Incluye: 3 ventanas. 1 puerta . Piso de madera Novopan. Techo de Ardex. 1 d ivisión in terior.

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Casa con materia les a l ternat ivos: MDP tropica l de Novopan

Casa Modulada de 4.80 x 4.80mts. Base de punta les de madera, Paredes y pisos de Novopan

Incluye: 3 ventanas. 1 puerta . Piso de MDP Novopan. Techo de Ardex. 1 d ivisión in terior de MDP NOVOPAN

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Casa mixta: madera y cañacon cerramiento de cementoy unidad sani taria

Casa de madera y caña, piso tradiciona l . Punta l a l to de 3.20, ba lcón y escalera

Incluye: PLANTA ALTA Casa de madera y caña. PLANTA BAJA Contra piso y paredes de bloque y cemento. Mesón para cocina y lavadero de platos. Una unidad Sani taria con ducha, inodoro y lavamanos.

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Casa de estructura metá l icacon paredes de bloque y cemento

Tamaño: 6 x 6 mts.

Incluye: Estructura metá l ica de hierro negro. Materia les para paredes de bloque. Cubierta de Ardex. Puertas y Ventanas. Materia les para contrapiso.

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ECONOMÍA POPULAR Y SOLIDARIA

Este Proceso promueve enfoques, metodolog ías y recursos dest inados a establecer mejores condiciones en la generación de empleo, ingresos y desarrol lo económico para grupos vu lnerables asociados a Hogar de Cristo. Se fundamenta en acciones que promueven la cooperación, in tegración, sol idaridad y responsabi l idad socia l como aspectos determinantes de una nueva forma de relacionamiento económico. Permi te ampl iar y replantear las práct icas convenciona les de competencia, desintegración socia l y ausencia de oportun idades para los sectores exclu idos.

El concepto de economía sol idaria no puede ser reducido a una defin ición única pues nos remite a otra forma de concebir el víncu lo económico. Se valoriza el bienestar colect ivo, que el va lor de los productos sea acorde a l trabajo puesto en el los, el actuar colaborat ivo genera procesos de valor, la producción está en equi l ibrio con el medio ambiente, entre muchos otros elementos que podrían ayudar a si tuar las principios orientadores de este concepto.

Pero la economía sol idaria no es para nosotros un bien en sí mismo, sino un medio para promover formas más democráticas y equitativas de trabajo y consumo, permi-tiendo el desarrol lo de nuevas estrategias de generación de ingresos claves para la superación progresiva de la pobreza.

Buscamos a la vez redu-cir las condiciones de precariedad de in iciat ivas económicas informales y reforzar los víncu los aso-ciat ivos entre ind ividuos de un sector, en la medida en que la cooperación surge como un valor centra l que fomenta la ayuda mutua para la solución de problemas compart idos.

Estos elementos que a nivel d iscursivo parecieran

ser la solución para la superación de las condiciones de precariedad de los sectores más pobres, no se implementan fáci lmente y requieren un trabajo arduo

y cercano con las comunidades, ya que supone revert i r lógicas de comportamientos profundamente arra igadas y rest i tu i r o crear víncu los de confianza muchas veces inexistentes.

Objetivos del Proceso

• Fa ci l i ta r l a co ns t ru cci ó n d e re l a ci o n es eco n ó m i ca sy de mercado para lograr una equi tat iva in tegración de esfuerzos y distribución de resu l tados en las comunidades.

•M ej o ra rl osn ive l esd ep rod u ct ivi d a dyco m pe t i t ivi d a deconómica y socia l de las socias de Hogar de Cristo.• B usca r m eca n is m os só l i d os y pe rm a n e n tes d e

generación de ingreso y empleo.

L íneas de Acción

Para el cumpl imiento de estos objet ivos Hogar de Cristo ha diseñado desde el año 2002 a lgunas l íneas y programas de acción que han permi t ido constatar los beneficios de la economía sol idaria . Estas l íneas de acción podrían sistematizarse en dos:

•Ba n caCo m u n a l •I n i ci a t iva sEco n ó m i ca sA soci a t iva s

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Banca Comunal Nuestro programa de Microcrédi tos denominado

“Banca Comunal ” es uno de los programas de mayor éxi to a l in terior de nuestra organización, a l haber a lcanzado ampl ios n iveles de cobertura, a l to porcentaje de retorno en los crédi tos otorgados, con lo que se da sustentabi l idad a la in iciat iva y un importante impacto en la vida de muchas socias que han sido capaces de emprender con éxi to diversas in iciat ivas económicas.

Hasta el 31 de diciembre de 2009 son 173.687 los microcrédi tos otorgados, contribuyendo a promover

el desarrol lo económico de 17.735 fami l ias, que por diversos motivos han sido exclu idas de las ent idades credi t icias o bancarias, viendo restring idas sus posibi l idades de mejoramiento de la ca l idad de vida.

Nuestro programa de “Banca Comunal ” ha sido fundado bajo la Metodolog ía Grameen, una de las más reconocidas a nivel mundia l en materia de microcrédi tos, ya que ha sido capaz de revert i r con éxi to la idea tradiciona l bancaria de exig ir una garant ía como requisi to para la entrega del crédi to,

desmint iendo la fa lacia de que los pobres son malos pagadores.

La formación y el acompañamiento detrás de cada crédi to

El programa de banca comunal y la entrega de microcrédi tos no const i tuyen un fin sino un medio para faci l i tar procesos de cal idad de vida personal y comuni taria centrado en la rest i tución de dignidad, forta lecimiento de autoest ima, recuperación de confianza y reconocimiento de recursos y capacidades existentes. Sólo así se pueden superar

las barreras menta les, socia les o cu l tura les que pueden estar l imi tando una mejor ca l idad de vida.

El gran problema de la pobreza es que muchas veces t iene un correlato emociona l o espiri tua l , que se traduce en la pérdida de la confianza en sí mismo, de sent ido de vida, o de ganas de querer emprender procesos de vida plena. Ser pobre no solo es un estado de privación materia l sino de privación de est ímu los, refuerzos, y de est igma. Esto debe ser roto por medio de procesos de capaci tación y formación que entreguen herramientas concretas de autocuidado, l iderazgo y capaci tación, que permi tan rest i tu i r la confianza y est imu lar procesos de crecimiento como personas y comunidad.

Por eso en conjunto con la entrega del microcrédi to cada una de las socias recibe instancias de capaci tación y de acompañamiento, pudiendo acceder a cursos de formación en oficios técnicos que les permi ta potenciar sus in iciat ivas.

In iciat ivas Económicas Asociat ivas

Por in iciat ivas económicas asociat ivas entendemos la agrupación voluntaria de personas en torno a una in iciat iva económica común, con el fin de potenciar los esfuerzos ind ividua les e incrementar así las ut i l idades de cada uno de los miembros. Esto como consecuencia de un actuar en bloque que permi ta un mayor poder de negociación, la erradicación de práct icas competi t ivas y destruct ivas, la consecución de insumos a menor costo (compras a l por mayor) y la creación de víncu los de apoyo ante ciertas cont ingencias.

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PASTORALPastora l , ta l cua l se ha presentado en los diversos

cuadros inst i tuciona les, es considerado hoy en d ía como un proceso estratégico. Sin embargo hasta hace poco se lo concebía como un “proceso generador de valor”, de ah í que sea pert inente abordarlo brevemente en este punto sobre dichos procesos.

La Pastora l busca incent ivar y acompañar los procesos de ref lexión que dan sustento a l actuar de nuestra Inst i tución, guiando esta labor a nivel organizaciona l pero también en el acompañamiento personal de nuestros ta lentos humanos, socias, socios y sus comunidades.

Se trabaja así en la conformación de una comunidad fraterna que se reconoce en el otro y en el Evangel io, y que contribuye a l desarrol lo de una sociedad más justa, pací fica y humana.

El Objet ivo principa l del Proceso es Implementar el mensaje de Cristo y la Doctrina Socia l de la Ig lesia

en el ser y hacer de Hogar de Cristo.

Para el cumpl imiento de este objet ivo el trabajo de pastora l se organizaba en dos niveles:

•A dI n t ra :q u eco m p re n d í ae lt ra baj orea l iza d oa li n terior de la Corporación .

• A d Ext ra : q u e co m p re n d í a e l t ra baj o rea l iza d oen las zonas donde interactúa Hogar de Cristo.

A su vez en cada uno de estos n iveles se persegu ían dos grandes l íneas de trabajo:

• Fo m e n to y Desa rro l l o d e Va l o res: M ed i a n tela formulación de posiciones ante problemáticas y espacios de diá logo, acercamiento y ref lexión .

• A n i m a ci ó n y A co m pa ñ a m i e n to d e l a A cci ó nPastora l : Mediante la art icu lación, coordinación, repl icación y desarrol lo de in iciat ivas referentes a l trabajo de catequista .

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A estos beneficios en materia económica habría que sumarle todos los beneficios que estas práct icas pueden acarrear a nivel socia l , como mayor cercan ía entre vecinos, mayor ident idad y realce de las tradiciones loca les, mayor cuidado del medio ambiente, etc.

Para promover estas in iciat ivas, Hogar de Cristo se basa en el programa de banca comunal , y en el otorgamiento de crédi tos especia les para este t ipo de asociaciones. Para el lo Hogar de Cristo busca en las comunidades aquel los rubros que permi tan

art icu lar este t ipo de in iciat iva, e incent iva a sus miembros a real izarlas, prestando acompañamiento técnico y humano en todas las fases necesarias para asegurar un óptimo afianzamiento y un buen trabajo en equipo.

Se pone especia l énfasis en desarrol lar in iciat ivas

económicas asociat ivas en aquel los rubros que puedan signi ficar un beneficio para el reforzamiento de la ident idad loca l y para la reducción del impacto medio ambienta l .

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Proyecto Adveniat

Desde el año 2007 en el marco del proyecto “Agentes de Pastora l para una Ig lesia Part icipat iva y Sol idaria” financiado por Adveniat, el área de Pastora l ha colaborado en la formación de catequistas y de socias de Hogar de Cristo como l íderes para la organización de Comunidades Eclesia les de Base, en las Parroquias de la Zona Perimetra l Norte de Guayaqui l .

A n ivel de la catequesis se ha logrado la elaboración de un “plan de formación” en base a las necesidades de los catequistas y a las expectat ivas de los párrocos. Y ya en el segundo año de proyecto se ha dado cobertura a 7 parroquias del sector nor-occidenta l de la ciudad; formando a más de 200 catequistas, y real izando ta l leres con más de 150 socias, quienes de a poco se han ido empoderando y l iderando pequeñas experiencias de comunidad.

Hoy la Pastora l , concebida como proceso estratégico, se centra más bien en el trabajo con la comunidad, puesto que hacia el in terior de la inst i tución real iza su aporte como parte un proceso mayor l lamado “Gest ión de los Talentos Humanos”, donde se incluyen Pastora l , Voluntariado y Formación y Capaci tación .

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¿CÓMO NOS FINACIAMOS?

Somos una corporación sin fines de lucro, lo que bajo ningún punto de vista impl ica ser una organización defici taria y despreocupada de una estrategia financiera sól ida.

Por el contrario, trabajamos d ía a d ía por convert i rnos en una Obra socia l sustentable, innovadora y sól ida financieramente. Este esfuerzo ya nos dist ingue de muchas otras organización socia les, pues según un estudio del M IES (2009) de las 40.000 ONG que se encuentran registradas en

Estructura Financiera 2007 2008 2009

Activos 19,292,862 20,737,139 19,994,743Pasivos 4,987,557 6,804,844 5,303,028Patrimonio 14,305,305 13,932,295 14,691 ,715

Otro ind icador in teresante que permi te observar la sol idez de la inst i tución es la relación entre Act ivos

Años Razón de Sol idez

2007 3.872008 3.052009 3.77

Así también nos refiere cierta sol idez financiera en el contundente monto de los act ivos colocados en los dos programas de mayor envergadura inst i tuciona l :

Vivienda y Banca Comunal , que en su tota l idad

Años Cartera de Vivienda

2007 7,392,9682008 8,464,7422009 9,926,257

Número de Socias por Programa al fina l izar el año

Ecuador, apenas 22.000 hacen sus declaraciones a l Servicio de Rentas In ternas -SRI-. Y de estas, apenas 8.600 declaran tener Ingresos mayores a cero.

En el sigu iente cuadro se puede apreciar a lgunas ci fras del ba lance financiero audi tado que permi ten tener una perspect iva genera l de la estabi l idad inst i tuciona l en los tres ú l t imos años, destacando el aumento del patrimonio el año 2009 en comparación con sus dos antecesores.

representaron el 82% de los ingresos de la organización el año 2009. A l respecto se presentan a lgunos datos comparat ivos de los tres ú l t imos años.

Años Vivienda Microcrédi to

2007 40,611 12,5462008 36,257 16,2122009 36,021 14,459

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y Pasivos ref lejada en el sigu iente cuadro:

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Años Viviendas Concedidas Banca Comunal / Crédi tos Otorgados

2007 10,494 31 ,3252008 11 ,447 39,0942009 11 ,169 31 ,691

Años Vivienda Banca Comunal Valor de Viviendas Concedidas Montos Otorgados en Microcrédi tos

2007 6,282,782 5,363,7832008 8,462,608 7,325,5512009 9,148,539 7,133,298

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¿De dónde provienen nuestros recursos?

Corporación Hogar de Cristo financia sus programas mediante diversas formas de transferencias de capi ta les y recursos. También se financia mediante la rotación e inversión de sus propios act ivos. Esto le permi te una cierta autonomía, en la medida en que no existe un único cooperante que, dado su aporte, pueda determinar el rumbo de la organización .

Consol idar un plan de financiamiento diversi ficado, constante y con énfasis en la rotación de act ivos ha sido considerado priori tario para la organización . Veamos a cont inuación cómo se ref leja este esfuerzo.

Vivienda

Donaciones Nacionales e Internacionales

Banca Comunal

Salud

2%

75%

8%

15%

Cuadro de Ingresos HCaño 2009

La mayor parte de los ingresos de la Corporación se los obtiene de la adjudicación de viviendas a crédi to y la recuperación de éstos (75%) que representan las tres cuartas partes de los ingresos tota les.

También tenemos ingresos no operaciona les (15%), que incluyen las donaciones loca les y extranjeras; seguido de los recursos del programa de microcrédi tos correspondientes a l 8% del tota l de entradas, y fina lmente de sa lud con un 2%.

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OLos ingresos no operaciona les durante el 2009, correspondientes a l 15% del tota l de ingresos, se compusieron por donaciones loca les e in ternaciona les con $ 943.204.75 y $ 929.369.76 respect ivamente.

Los aportes in ternaciona les fueron en su mayoría dest inados a financiar proyectos especí ficos y

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De las donaciones loca les, por otra parte, aproximadamente la mi tad corresponde a proyectos financiados en a l ianzas con Inst i tuciones Públ icas y Privadas a nivel naciona l . Y el 54% restante fue obtenido por medio de diversos Programas de Captaciones entre los cua les tenemos:

1.400.000

1.200.000

1.000.000

800.000

600.000

400.000

200.000

0

Donaciones Locales Donaciones Internacionales

943.204,75 929.369,76

Sol idaridad Estudiant i lSocios ind ividua les

Donaciones esporádicasA l ianzas Especia les

Programa 1 + 1

Programas

provin ieron en principa lmente de grandes agencias de cooperación europeas, en especia l españolas. Esto gracias a la credibi l idad y solvencia inst i tuciona l y a la construcción de a l ianzas estratégicas con importantes ONG españolas, como “Vivienda Para los sin Techo”, “Medicusmundi”, “ Ingenieros para la Cooperación de Á lava” y “Entrecu l turas”.

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Donaciones Nacionales e Internacionales - 2009

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Durante el 2009, lo recaudado por Captaciones fue de $ 466.159, de los cua les el Programa 1 + 1 es el que más recursos obtuvo representando el 41% del tota l de Captaciones. Las Donaciones Esporádicas y las A l ianzas Especia les representan cada una el 27%.

Estas captaciones locales son distribuidas en los diferentes Programas de Hogar de Cristo, según el objetivo de cada campaña, las necesidades de los diferentes programas (Salud, Vivienda, Microcréditos o Educación) o necesidades específicas y urgentes de determinadas poblaciones.

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Los recursos obtenidos por los Socios Ind ividua les y el Programa de Sol idaridad Estudiant i l son los de menor representación ta l cua l es expuesto en el sigu iente cuadro:

En el 2009 el 68% de las Captaciones fue adjudicado al fondo de solidaridad en vivienda, el 23% a diversas actividades de salud y el 9% a proyectos de educación.

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Lo más val ioso de nuestra inst i tución es la gente que la compone, especia lmente nuestras socias que son la razón de exist i r de Hogar de Cristo. El las nos enseñan d ía a d ía cómo constru ir proyectos de vidas ín tegros, honestos, fel ices, en su genera l idad, pese a enfrentarse a diario a un mundo de privaciones, est igmatización e injust icias.

Este estado de privación y vu lneración de las condiciones básicas para vivir plenamente es conocido a menudo como “pobreza”. Pero este rótu lo sólo sirve de manera descript iva en tanto agrupa a un segmento de la población . Carece de toda ut i l idad anal í t ica y ref lexiva si es que, a part i r de él , no se cuest iona y se generan a lgunas hipótesis expl icat ivas que permi tan entender ta l fenómeno. ¿Por qué surge este fenómeno? ¿Cuáles son sus consecuencias? ¿Por qué la pobreza se mantiene casi en los mismos niveles a pesar de que todo el mundo suma esfuerzos para superarla?

Esta presentación inst i tuciona l no pretende ser un texto académico que anal iza el fenómeno de la pobreza, pero sí consideramos de gran importancia abordarlo sucintamente ya que casi la tota l idad de nuestros proyectos son ejecutados en áreas de elevados índ ices de pobreza. Nuestra misión radica entonces en el d iseño de estrategias innovadoras para la superación de estas real idades.

Siendo consecuentes con lo que decimos y pract icamos, hemos dest inado todo este capí tu lo a nuestras socias. No queremos hablar por el las sino que, en ejercicio de sus derechos, sean los mismos sujetos encasi l lados como “pobres” los que cuenten sobre sus condiciones, sueños y opin iones. Nadie sabe tanto sobre pobreza como quiénes viven en el la . Escuchar a los pobres es el mayor ejercicio que podemos hacer si queremos comprender sus real idades y aportar con estrategias para mejorar sus condiciones de vida.

Rosa Cata l ina Armijos Socia del programa

de Banca Comunal

La señora Rosa t iene 49 años y una larga trayectoria en nuestro programa de banca comunal , ha estado en él desde el año 2004 y actua lmente se encuentra en su decimoctavo ciclo de préstamo.

Para el la Hogar de Cristo ha sido una inst i tución de gran valor para su vida, ya que la ha ayudado a mejorar su si tuación económica y a desarrol larse como persona. “Para mí Hogar de Cristo es una buena inst i tución porque es sol idaria , siempre ayuda a las personas que más lo necesi tan y da muchas oportun idades de capaci tación . En mi caso Hogar de Cristo cambió mi vida, porque yo antes siempre andaba ca ída, y aqu í me han ayudado mora l y espiri tua lmente, me han ayudado a levantarme”.

Y es que la vida diaria de la señora Rosa no es fáci l , con dos hijas que mantener, un n ieto y una vivienda de caña de siete años de ant igüedad ubicada en una de las cooperat ivas las a lejadas de

la peri feria noroeste de Guayaqui l , las oportun idades de vincu lación a un empleo formal son pocas y no existen ind icios que permi tan insinuar un cambio en el corto y mediano plazo.

La señora Rosa sabe que vive en la margina l idad, donde la ayuda estata l no l lega y donde nadie hace mucho por ayudarlos. Carecen de agua, a lcantari l lado, conexión formal a l a lumbrado públ ico, transporte adecuado, ca l les, escuelas, etc. Llegó a vivir ah í hace 7 años, en busca de un terreno propio donde criar a sus h ijas, pero los elevados costos de la t ierra urbanizada le l levaron a comprar por $ 250 un solar de t ierra de 112 metros cuadrados en una de las tantas cooperat ivas organizadas informalmente en el sector noroeste de la ciudad.

El terreno en ese entonces era de lodo y las condiciones de vida eran aún mucho más precarias de lo que son hoy en d ía; de hecho la señora Rosa señala que gracias a las mejoras que poco a poco se han ido haciendo un solar en su sector cuesta hoy en d ía cerca de $ 2.500.

En estas condiciones de margina l idad, la exposición a diversos t ipos de riesgo es una si tuación cot id iana en la vida de la señora Rosa; ya ha sido víct ima de un asal to y asegura que le da mucho miedo sa l i r de su casa más a l lá de las 8 de la noche “el barrio se

DÓNDE Y CON QUIÉNES

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ha puesto muy pel igroso, de la placi ta pa’ l lá me da much ísimo miedo, ah í roban un montón. Y también se dan muchos casos de vio laciones y cosas por el est i lo”. Además el sector presenta a l tas tasas de morbi l idad y deterioro a la sa lud debido a la constante exposición a factores de riesgo como basura en las ca l les, aguas estancadas, mosqui tos, agua transportada en camiones, etc.

Con esas perspect ivas de vida, está claro que la señora Rosa no quiere que sus h ijos cont inúen viviendo ah í . “El los mismos quieren sacarme de ah í e ir a vivir a otra parte más cerca del centro”, lo que resu l taría lamentable puesto que toda la inversión que el la ha real izado en ese terreno y en mejorar su vivienda no sería aprovechada. Pero así son las opciones de movi l idad de la gente de dicho sector.

Sin n i siqu iera estar aún censado, la señora Rosa sabe que tardará mucho en que su terreno sea urbanizado; “ta l vez l legue a serlo pero eso será cuando yo me muera”, señala . Y su pensamiento no es descabel lado, con un crecimiento poblaciona l en ascenso y un municipio poco presente en esos sectores es di f íci l que la si tuación cambie pronto.

Pobreza en Ecuador Ecuador es un pa ís con una población est imada de

13.755.680 habi tantes, según datos de ju l io de 2007, con la más a l ta densidad poblaciona l de América del Sur, con a lrededor de 47 habi tantes por ki lómetro cuadrado. Esta población se distribuye de manera desigua l en un terri torio divid ido en cuatro grandes regiones terri toria les: Costa, Sierra, Oriente y Región Insu lar o Galápagos. Éstas, a su vez, están divid idas en unidades pol í t ico-admin istrat ivas l lamadas “Provincias”.

En tota l existen 24 provincias, de las cua les 6 se ubican en la Costa, 11 en la Sierra, 6 en la Amazonía u Oriente y 1 en la Región Insu lar. Solamente la Sierra y la Costa concentran más del 90% de la población, con una distribución casi homogénea entre las dos, aunque actua lmente es un poco mayor la población costeña.

La población ecuatoriana presenta aún las

característ icas y estructuras de un pa ís en proceso de crecimiento. Los esfuerzos apuntan hacia n iveles de mayor ca l idad de vida, debido a un sostenido crecimiento económico y una importante inversión socia l .

Si se mira un conjunto de indicadores de desarrol lo, in ternaciona lmente aceptados, se observa que Ecuador se si túa en la parte media inferior de los pa íses de la región lat inoamericana, mostrando avances signi ficat ivos en a lgunos de el los como en el índ ice de distribución de la riqueza (GIN I), pero niveles muy bajos en otros como en el número de población universi taria .

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I nd icadores Económicos

•Dea cu e rd oa li n g resope rcá p i ta ,e lBa n coM u n d i a lsi túa a Ecuador en el puesto 83 de su l ista con un ingreso anual per cápi ta de $ 8.808, a l poseer un PIB aproximado de $ 55.613.000.000. •Elsa l a ri om í n i m oa ct u a les$240d ó l a res .

I nd icadores Demográficos

•Elí n d i ced eCreci m i e n toa n u a ld el apo b l a ci o n a lfu e1 .5% entre los años 1990 - 2007 (UN ICEF 2007).•Lata sab ru tad en a ta l i d a dfu e21po rm i lh a b i ta n tes(UN ICEF 2007).

I nd icadores de Salud•Lata sad em o rta l i d a di n fa n t i ld em e n o resd e1a ñ oes 20 por mi l (UN ICEF 2007).•Laes pe ra nzad evi d aa lm o m e n tod en a ce resd e75 años (UN ICEF 2007).

Esta tabla nos ayuda a visua l izar a lgunos desaf íos importantes que deberá asumir el pa ís en las décadas venideras. Sin embargo, uno de los mayores desaf íos deberá ser reducir las a l tas tasas de pobreza e indigencia que aún persisten en el

pa ís y garant izar una mayor equidad en el acceso a los recursos y servicios entre las dist in tas regiones. Fáci lmente se aprecia, en la sigu iente tabla, que la región Amazónica a lcanza niveles de pobreza mucho mayores que los del resto del pa ís:

Método de

medición

SegúnConsumo

SegúnNBI

Tota l pa ísPobreza en la

CostaPobreza en la

SierraPobreza en la

Amazonía

Ind icadores de Educación

• La ta sa d e a l fa be t iza ci ó n d e l a po b l a ci ó n es 93%(UN ICEF 2007).• S ó l o e l 2.33% d e l a po b l a ci ó n d e l pa ís a cced e ala educación superior, muy por debajo de países como Cuba, Argent ina y Chi le que bordean el 40% (SENPLADES 2009). Otros• El Í n d i ce d e G I N I pa ra e l pa ís es d e 0.46 e n e laño 2007 lo que lo si túa en el puesto 26, levemente sobre Uruguay y Estados Unidos, pero debajo de países a l tamente desigua les como México, Argent ina y Chi le. • M ed i d o po r e l Í n d i ce d e Desa rro l l o H u m a n o (I D H)Ecuador se encuentra en el puesto número 80 con una puntuación de 0,806, comparable con el puntaje a lcanzado por pa íses como Perú, Colombia, Turqu ía, Líbano, entre otros (2008).

Fuente: (INEC, 2006).

DÓNDE Y CON QUIÉNES

76

Pobreza Indigencia Pobreza Indigencia Pobreza Indigencia Pobreza

38,3 % 12,8 % 40,3 % 10,8 % 33,7 % 12,2 % 59,7 % 39,6 %

45,8 % 51 ,4 % 36,9 % 71 ,0 %

Indigencia

Page 77: Fuegos que encienden otros fuegos

Pese a lo desalentador que en términos absolutos pueden resu l tar estos números, si se los visua l iza en perspect iva de comparación el panorama se torna más esperanzador. Entre los años 2000 y 2008 se observa una reducción pau lat ina, aunque inconstante, de los índ ices de pobreza e indigencia . Ta l como se observa en la sigu iente tabla, la variación en la tasa de pobreza entre los años 2000 y 2008 fue de 16,3 puntos porcentua les, mientras que el de la ind igencia fue de 8,5 puntos porcentua les.

Años

Pobreza 51 ,3 % 36,6 %

2004 2006

24 % 15 %

38,3 %

Indigencia

2000

12,8 %

2008

34,97%

15,49 %

Caracterización socio-económica de la Costa Ecuatoriana

La Costa Ecuatoriana es la región del pa ís donde se ubican los programas y servicios de nuestra inst i tución . Hogar de Cristo sólo se encuentra a lo largo de la Costa, careciendo de presencia sign i ficat iva en la región de la Sierra y la Amazonía . Esto se debe, en gran medida, a que nuestro t ipo de vivienda es idóneo para las condiciones y demandas de las comunidades costeñas, no así para las condiciones cl imát icas de la Sierra y otras regiones.

La población en la Costa se distribuye de manera heterogénea entre sus provincias. Se cuenta por ejemplo con la provincia más poblada del pa ís (Guayas con 3.309.034 habi tantes) y con otra que no supera los 400.000 habi tantes. Según el ú l t imo Censo del año 2001 la población de la Costa representaba un 50% de la población tota l del pa ís con 6.056.226 habi tantes.

Provincias de la Costasegún número de habi tantes

(2001)

Guayas 3.309.034

525.763 El Oro

ManabíLos R íos

Esmera ldas Tota l

1 .186.025650.178

385.2236.056.223

Fuente: (INFOPLAN. 2001)

Page 78: Fuegos que encienden otros fuegos

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S

I nd icadores

Años de escolaridadde las jefas de hogar

GuayasManabíLos R íos El OroEsmera ldas Tota l

Tasa de anal fabetismo femenino de mujeres mayores a 15 años

Hogares hacinados

Viviendas que poseen a lcantari l lado

Viviendas con servicio eléctrico

Tasa de morta l idad infant i l

Años promedios de escolaridad de la PEA femenina

5,6 5,4 5,4 6,8 6,4 5,9

11 ,9 % 10,9 % 12,6 % 7,4 % 5,9 % 9,1 %

20,5 % 20,2 % 16 % 19,9 % 16,5 % 19,4 %

30,5 % 18,6 % 28,2 % 39,4 % 56,6 % 34,6 %

75,6 % 81 ,2 % 81 ,4% 94 % 94,9 % 85,5 %

35,6 % 27 % 26,8 % 21 ,5 % 22,5 % 26,6 %

7,7 9,1 9,5 9,9 9,9 9,2

Esta población se caracteriza por concentrase en los primeros segmentos etarios, es decir, es preponderantemente joven, con una edad media de 27 años (INEC, 2006), y con una paridad en cuanto a género. Otro hecho in teresante es que presenta muy baja tasa de población que se autodeclara como ind ígena con sólo el 0.9%, por debajo del promedio naciona l que se si túa en 7.1%. Por el contrario, es la región que presenta mayor población afrodescendiente, con un porcentaje de 8.1%, mayor

a l promedio naciona l que a lcanza el 5.5% Las provincias de la Costa, y en especia l el Guayas,

demuestran ser un importante motor económico para el pa ís . Su posición es estratégica tanto para el comercio, como para una gran diversidad de servicios y act ividades de producción . Sin embargo, otras provincias como El Oro y Los R íos viven aún de los cu l t ivos de diversos productos agrícolas, muchos de los cua les se exportan, como el banano y el cacao.

Fuente: INFOPLAN, con base en datos del Censo 2001 .

La discordancia entre desarrol lo socia l y crecimiento económico es un debate largamente abordado en la l i teratura pol í t ica del pa ís . Resu l ta di f íci l expl icar por qué un pa ís tan rico en recursos natura les es capaz de avanzar tan poco en materia de cal idad de vida y equidad socia l . Entre las razones expl icat ivas de este fenómeno se pueden enunciar las más variadas, entre el las: fuertes patrones de desigua ldad y acumulación de capi ta l en pocas manos como herencia del modelo tradiciona l de la “Hacienda”, a l tos n iveles de corrupción pol í t ica, mala ca l idad de las inst i tuciones educativas, mal manejo de la pol í t ica macroeconómica, dependencia de la

deuda externa, a l tos n iveles de endeudamiento, a l to índ ice de crecimiento poblaciona l , etc.

Es evidente que ninguna de estas razones expl ica

por sí sola el fenómeno, y que las causas de la pobreza y la exclusión en Ecuador deben buscarse en una entramada red de relaciones entre la que se conjugan factores económicos, pol í t icos, cu l tura les, sicobiológicos y ambienta les. Este l ibro no es el espacio para abordarlas en mayor deta l le, pero sí para advert i r que existen condiciones estructura les profundamente arra igadas que impedir ían un progreso hacia una vida plena.

Factores Expl icat ivos de Pobreza y Exclusión

DÓNDE Y CON QUIÉNES

78

Page 79: Fuegos que encienden otros fuegos

La explosión urbana y el fenómeno migratorio

Un fenómeno fundamenta l para comprender la formación de nuestros sectores donde tenemos presencia es el éxodo campo - ciudad que ha venido caracterizando a Ecuador desde hace a lgunas décadas. Este movimiento de migración in terna ha sido acompañado a la vez por un fuerte movimiento de migración externa, como se abordará más adelante.

Los resu l tados de este proceso son diversos, pero nos es part icu larmente in teresante uno que se refiere a l aumento signi ficat ivo de las áreas urbanas, con todos los desaf íos que esto impl ica, sobre todo por la ubicación de una enorme cant idad de personas poco cal i f icadas en las zonas peri féricas de las ciudades que carecen de toda plani ficación y servicios urbanos.

Ecuador es un pa ís mayori tariamente urbano con el 63,5% de su población viviendo en zonas urbanas (año 2005 - 2006), y se espera que este valor siga aumentando ya que se trata de un fenómeno en plena expansión . Por ejemplo, entre los años 1995 y 2006 la población urbana creció el 4,3%, con una tasa de crecimiento urbana promedio del 0,4% anual , ta l como se puede visua l izar en la tabla de fina l de página.

NACIONAL RURAL URBANA

1995 2006 1995 2006

10.748.750 13.278.359 4.379.533 40,7 4.842.721 36,4 6.369.217 59,2 8.435.533 63,5

1995 2006% % % %

Existe en el imaginario colect ivo la idea de que migrando a la ciudad se puede optar por mejores condiciones de vida, idea que según se demuestra a cont inuación es tota lmente coherente, porque a pesar de las di ficu l tades que se puedan encontrar en un in icio, la vida en las urbes exhibe menos niveles de pobreza e indigencia, mayores accesos a bienes de consumo, mayores y mejores ofertas educativas y labora les, etc.

De esto no se desprende que en las urbes exista un mayor grado de fel icidad humana, puesto que ésta pasa más bien por otras variables, como por ejemplo la capacidad individua l y colect iva de constru ir un sent ido de vida y gozar de las condiciones necesarias para l levarlo a cabo.

Page 80: Fuegos que encienden otros fuegos

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S

La tabla que presentamos a continuación muestran en términos cuantitativos algunos indicadores comparativos

Ind icadores

Población que ut i l iza teléfono celu lar

Población con conocimientors sobre el VIH

Población que ut i l iza in ternet

Población anal fabeta

Viviendas con problemas de hacinamiento

Viviendas sin agua potable

Naciona l Urbano Rura l

31 ,8% 46,8% 21 ,8%

7,2% 10,1% 1 ,9%

9,1% 4,9% 17,1%

29,8% 34,5% 19,4%

22% 20%

12% 38%

Viviendas sin energ ía eléctrica

Tamaño promedio del hogar

Hogares con jefatura femenina

3% 22%

4,1% 3,9% 4,4%

21% 23,5% 16,1%

Fuente: (INEC, 2006) y (Ru iz, S.)

M igración

Los movimientos migratorios son fenómenos socia les complejos, dadas sus múl t ip les formas de expresión, causas y consecuencias que pueden tener sobre los terri torios en que se producen. El Estado Ecuatoriano considera “movimiento migratorio” aquel los que se real izan entre cantones de una misma provincia, entre una parroquia rura l y una cabecera de un mismo cantón, entre cantones de dist in tas provincias, y entre pa íses. A grandes rasgos la migración se puede clasi ficar en in terna y hacia el exterior.

Muchos estudios se han centrado en anal izar los impactos de la migración hacia el exterior, olvidándose que a menudo existen también a l tos n iveles de migración in terna que presentan grandes desaf íos para las admin istraciones terri toria les y pol í t icas.

En el año 2006 se est imó que a lrededor del 14,9%

de la población de más de 10 años de edad había real izado un movimiento migratorio dentro del pa ís, es decir, a l rededor de 1 .515.620 personas. De este tota l , 1 .053.736 lo h izo desde una zona urbana y

entre campo - ciudad que permiten avalar nuestras afirmaciones:

461 .884 desde una zona rura l . Las principa les razones para in iciar estos procesos migratorios fueron el seguimiento de la fami l ia , con el 40,6% de los casos, y motivos económicos con el 30,3%.

Si se miran estos datos por región, vemos que sólo el 12.1% de las personas que residen en la Costa in iciaron una migración, siendo la región con menos migración del pa ís, toda vez que la Sierra presenta el 17.6% y la Amazonía el 17.4%. Si se observa a nivel de provincias se puede ver que Pich incha (Sierra) y Esmera ldas (Costa) son las que presentan mayor porcentaje de población migrante con 21 .7% y 21 .1% respect ivamente; y a su vez las provincias de Carchi (Sierra) y Manabí (Costa) son las que presentan menor migración con 10.1% y 10.8%.

De lo anterior se deduce que la Costa, pese a ser la región con menor migración in terna, presenta una gran dispersión entre sus provincias, a l poseer una de las provincias que presenta mayores porcentajes de migración y una de las que presenta menos. En la tabla se observan los porcentajes de las cinco provincias costeñas.

DÓNDE Y CON QUIÉNES

80

Page 81: Fuegos que encienden otros fuegos

Provincias

Manabí

Los R íos

Guayas

El Oro

Esmera ldas

Población

106.150 10,8%

310.708 11 ,3%

58.369 12,4%

73.313 13,4%

21 ,2%

Porcentaje

67.085

Fuente: (INEC, 2006)

En lo referente a la migración hacia el exterior, la “Encuesta de Condiciones de Vida” señala que a l menos 239.242 personas emigraron a l exterior por motivos labora les desde el año 2000, considerando sólo los casos de las personas que aún no han regresado, teniendo como principa les pa íses de dest ino España, con 58% de los casos, seguido por Estados Unidos, con el 24%, e I ta l ia , con 11 ,2%.

Peri ferias urbanas, el costo de la informal idad

Tanto la explosión urbana como los procesos de migración contribuyen a agravar uno de los mayores problemas de las ciudades lat inoamericanas: el acceso a l mercado del suelo, lo cua l impl ica que un número importante de personas se encuentren en a l tos n iveles de precariedad e incert idumbre.

Uno de los principa les motivos que impide el acceso a l mercado del suelo es su elevado costo, producto de una serie de factores entre los que cabe mencionar la especu lación financiera con terrenos vacíos, las a l tas tasas de segregación residencia l , la fa l ta de plani ficación urbana y la corrupción .

A lgunos estudios demuestran que en las peri ferias

de muchas de nuestras ciudades el precio del metro cuadrado de t ierra urbanizada por agentes privados puede variar entre $ 32 y $ 172 dólares, va lores que en términos absolutos se asemejan a los encontrados en el mundo “desarrol lado”, donde los ingresos per cápi ta son de 7 a 10 veces más a l tos. Esto muestra que la di ficu l tad de acceso a la t ierra urbana puede ser uno de los factores que contribuye a la pobreza (Smolka, M. y Mul lahy, L. 2007).

Además, este fenómeno al imenta un mercado informal de t ierra con consecuencias negativas para los asentamientos urbanos, puesto que agrupa a sectores pobres en áreas precarias, lejos de las redes de servicios, con un a l to costo de urbanización y con pocos medios de control y protección ciudadana.

Page 82: Fuegos que encienden otros fuegos

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S

La mayoría de las fami l ias de más bajos ingresos no escogen un asentamiento informal porque le brinde el mejor precio, sino simplemente porque con frecuencia sólo t ienen esa a l ternat iva. La “decisión” de adquiri r un lote informal es de todas maneras costosa: est imados obtenidos de una encuesta informal en diez grandes ciudades de América Lat ina muestran que el precio promedio de la t ierra en loteos comercia l izados i legalmente es de $ 27 dólares por metro cuadrado (Smolka, M. y Mul lahy, L. 2007).

A este costo habría que añadir le otros que

encarecen la vida de las fami l ias que moran en estos sectores informales, como por ejemplo mayor gasto en trasporte, pago elevado por el agua (trasportada por lo genera l en camiones cisternas), pago de extorsiones a cambio de protección en muchos sectores controlados por narcotraficantes, pandi l las, o parami l i tares, menores oportun idades de insertarse en el mercado labora l , de acceder a un crédi to, etc.

Sectores de Interacción

Por lugares de in teracción entendemos aquel las zonas donde hace presencia, de forma sostenida,

un Equipo de Hogar de Cristo con a l menos una propuesta, pudiendo evidenciarse ciertas mejoras en la ca l idad de vida de los grupos que deciden comprometerse con nuestro accionar. Hogar de Cristo t iene varios sectores donde colabora a lo largo de toda la Costa Ecuatoriana, lo que dificu l ta describir los sin caer en genera l idades que opaquen las riquezas y part icu laridades de cada lugar.

Sin embargo, para efectos anal í t icos se han agrupado en dos grandes clases de asentamientos:

•A se n ta m i e n tosu rba n ospe ri fé ri cosd el a sci u d a d esregiona les más importantes como Guayaqui l , Manta, Puerto Viejo, Esmera ldas.

•Secto resru ra l esa l ed a ñ osaes ta sci u d a d es .

Urbanos Peri féricos: Éstos se caracterizan por presentar a l tos grados de informal idad y precariedad, carecen por lo genera l de los servicios básicos de la ciudad, y nacen de la ocupación i legal de terrenos, transformados con frecuencia en “ loteos” informales por parte de “traficantes de t ierra” que hacen de esta act ividad un negocio, encareciendo el precio de las t ierras. A lgunos sectores con estas característ icas donde trabajamos son La Primavera y R ío Teaone en la ciudad de Esmera ldas, y la Perimetra l Noroeste en Guayaqui l .

DÓNDE Y CON QUIÉNES

Page 83: Fuegos que encienden otros fuegos

Rura les: Presentan índ ices de pobreza y precariedad aún más grandes que los sectores urbanos. Además, acceden en menor proporción a muchos servicios básicos como educación, sa lud, adquisición de bienes de consumo, entre otros. A pesar de estos inconvenientes, este t ipo de sectores parece presentar a lgunas ventajas como el uso agrícola del suelo, la exposición a menores niveles de contaminación y vio lencia, la existencia de mayores redes de sol idaridad entre vecinos, etc. El sector de “Comunas”, ubicado entre Guayaqui l y la Costa, a una hora de la capi ta l , es un claro ejemplo de este t ipo de asentamiento.

La Peri feria Noroeste de Guayaqui l

Ahondar en las característ icas de cada uno de los sectores de in teracción sobrepasa las pretensiones de este apartado, por lo que hemos decid ido abordar en profundidad el sector de mayor presencia de la inst i tución a nivel naciona l , ubicado en la Peri feria Noroeste de la ciudad de Guayaqui l , con la in tención de que el lector pueda adentrase en la real idad en que viven gran parte de nuestras socias, y los mú l t ip les desaf íos y problemas que motivan nuestro trabajo. La focal ización de nuestros esfuerzos en esta área no es a lgo reciente y responde a una perspect iva de sent ido fundamenta l para nosotros: se trata de la zona de la ciudad de mayor expansión, concentrando al to número de asentamientos informales no urbanizados y, por tanto, gravemente precarios. Y, como bien sabemos, precisamente nos orientamos a l servicio de las personas en si tuación de pobreza, vu lnerabi l idad y exclusión .

Guayaqui l se divide admin istrat ivamente en 74 sectores, que a su vez se agrupan en 16 parroquias urbanas, d ivisión admin istrat iva y juríd ica que permi te una mejor distribución de los recursos y regu laciones urbanas. El sector de nuestro in terés se ubica en la Parroquia de Pascales, una de las más recientes de la ciudad, puesto que hasta hace a lgún t iempo era considerada zona rura l .

Esta parroquia se compone, a su vez, de varios sectores que se han ido conformando como producto del mercado informal de t ierra y que dan acogida a gran parte de los inmigrantes que l legan a la ciudad. Este acelerado proceso se ha transformado en un gran negocio para

Page 84: Fuegos que encienden otros fuegos

El área que l lamamos Perimetra l Norte se compone de un sinnúmero de cooperat ivas o invasiones. Muchas de el las, sobre todo las más ant iguas, a ledañas a la Avenida Perimetra l , ya comienzan a desarrol lar procesos incipientes de urbanización con la conexión a la red de agua, a lcantari l lado, pavimentación de cal les, y la apertura

DÓNDE Y CON QUIÉNES

84

muchos “d irigentes” o “traficantes de t ierra” que desarrol lan verdaderas urbanizaciones informales por medio de la venta de solares de 7 u 8 por 15 metros a valores que osci lan entre $ 500 y $ 3.000 dólares, siendo el precio medio unos $ 1 .500.

Este mercado informal de t ierras sólo puede exist i r gracias a la compl icidad de las autoridades que también se benefician de estas práct icas puesto que son incapaces de brindar un acceso formal a la ciudad a este gran número de personas, pese a que se sabe que los costos de urbanización de un terri torio ya ocupado informalmente son mucho más a l tos y que en este proceso brotan, por lo genera l ,

una serie de problemas de t í tu los, como por ejemplo, el hecho de que cuando el municipio legal iza ese terreno, la fami l ia debe pagar nuevamente por el va lor de éste para poder tener las escri turas de propiedad.

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Perimetra l Noroeste

Page 85: Fuegos que encienden otros fuegos

de servicios públ icos, como dispensarios médicos y escuelas. Sin embargo, este proceso avanza mucho más lento que la construcción de nuevos asentamientos, pues según algunas estimaciones señalan que al menos unas 20.000 fami l ias l legaron a esta zona en los ú l t imos 6 años, por lo que la urbanización total del área podría tardar varias décadas.

Con la escasa presencia del gobierno naciona l y municipa l , se hace evidente que la demanda de servicios de estas poblaciones no puede ser cubierta y mucho menos garant izada como un derecho. Muchos niños y n iñas no cuentan con establecimientos educativos para asist i r, muchas mujeres no t ienen oportun idades laborables f lexib les a su condición de jefas de hogar, muchas personas de la tercera edad reclaman centros de sa lud cercanos, los jóvenes necesi tan áreas recreativas, entre muchas otras deficiencias. De ah í la importancia de hacernos presentes como inst i tución y de focal izar nuestros esfuerzos en estas áreas urbanas.

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Perfi l Socioeconómico

Para describir a lgunas de las condiciones de vida de estas comunidades se presentarán a lgunos ind icadores socia les que, comparados con los datos a nivel de Catón, nos permi ten observar las precarias condiciones de vida de estas comunidades.

Los datos se basan en la apl icación de la metodolog ía de Necesidades Básicas Insat isfechas - NBI - en el ú l t imo trimestre del año 2006. Según estos datos el 55,19% de los hogares del Cantón Guayaqui l presentaban todas sus necesidades básicas sat isfechas, mientras que el 44,81% presentaban una o más insat isfechas. Del tota l de

Población

Nueva Prosperina

Flor de Bast ión

El Fort ín

Cantón

No pobres(%)

3,99 96,01

1 ,42 98,58

0,85 99,15

44,81

Pobres(%)

55,19

Pobres no extremos

(%)

Pobresextremos

(%)

21 ,49

25,39

29,23

25,39

74,52

73,19

69,92

19,42

hogares con necesidades básicas insat isfechas, el 19,42% presentaban dos y más necesidades básicas insat isfechas, condición que los ubica como pobres extremos; en tanto que el 25,39% de los hogares del Cantón, a l presentar la fa l ta de sat isfacción en una sóla necesidad se los define como pobres no extremos.

Obsérvese lo que aparece si este mismo indicador lo apl icamos en Flor de Bast ión, El Fort ín y Nueva Prosperina, tres poblaciones emblemáticas de nuestro sector de trabajo en Guayaqui l .

Fuente: (Municipio de Guayaqui l e INEC, 2007)

Como se ve en el cuadro, la tasa de pobreza en estas comunidades es más del doble que en el resto del Cantón, pero más grave aún es que la tasa de pobreza extrema sea más de tres veces que en el resto de la población, encontrándose en esta condición 7 de cada 10 de hogares.

Estos elevados índ ices se expl ican en gran medida por la baja cal idad de las viviendas, las cua les en

su mayoría carecen de a lcantari l lado, agua y, en a lgunos casos, energ ía eléctrica. Sin embargo, como mostrarán los sigu ientes cuadros el problema no sólo radica en la mala ca l idad de la vivienda y los servicios urbanos, pues estos sectores muestran mayor precariedad que el resto del Cantón en casi todo los ind icadores socia les, ya sea que se trate de educación, sa lud, empleo, etc.

Población

Nueva Prosperina

Flor de Bast ión

El Fort ín

Cantón

Hogares con materia les

inadecuados(%)

40,7 44,2

40,7 36,8

35,1 31 ,4

9,38,7

6,7

21 ,8

3,9

6,1

18,3

14,1

13,7

9,5

28

28,7

7,9

19,5

39,4

43,2

35,5

16,7

Hogares con servicio de

el iminación de aguas

servidas inadecuado

(%)

Hogares con hacinamiento

(%)

Hogares con a l ta

dependecia económica

(%)

Hogares con anal fabetismo

(%)

Hogares con niños y n iñas

que no asisten a clases

(%)

Fuente: (Municipio de Guayaqui l e INEC, 2007)

DÓNDE Y CON QUIÉNES

86

Page 87: Fuegos que encienden otros fuegos

3,1

Población

Nueva Prosperina

Flor de Bast ión

El Fort ín

Población anal fabeta (15 a 25 años)

%

2,8 21 ,9

19,9

2,1 17,9

67,81

65,74

64,77

7,5

5,2

1 ,4

15,46

16,34

9,97

50,1

40,6

57,1

Población con

desnutrición crónica

(menores de 5 años)

%

Hogares con baja

capacidad económica

%

Población no vacunada y

conprevalencia

de EDA e IRA%

Población con condición étn ico-racia l

%

Hogares con fa l ta de

equipamiento%

Fuente: (Municipio de Guayaqui l e INEC, 2007)

Esto es lo que se conoce como vu lnerabi l idad y exclusión social: estar inserto en un ambiente que posee condiciones mucho más desfavorables que el resto de la sociedad de la cual se es parte y en donde los derechos fundamentales no son garantizados, dificultando el inicio de procesos de mejor calidad de vida y aumentando, con frecuencia, las condiciones de precariedad.

Este t ipo de conglomeraciones urbanas de personas que ostentan bajo niveles de capi ta l d i ficu l tan el forta lecimiento de redes de cooperación e in tegración, puesto que su informal idad aumenta las posibi l idades de conf l ictos y la insta lación de grupos del ict ivos que terminarán debi l i tando aún más el poco espacio públ ico existente. Por ejemplo, es común escuchar en el test imonio de muchas personas de estos sectores que ya no suelen sa l i r después de las 7 de la noche por miedo a ser víct imas de un del i to.

Los ú l t imos cuadros que nos gustaría mostrar se refieren a la precariedad que existe en torno a l empleo. Si se considera que la generación de ingresos es una de las mayores estrategias para la superación de la pobreza, está claro que en estos sectores hay un tremendo trabajo por real izar.

Page 88: Fuegos que encienden otros fuegos

D

O

S

Población

Nueva Prosperina

El Fort ín

Población que labora menos de 40 horas semanales

%

18,9 32,1

16,5 30,6

52,2

57,4

Población que recibe menos de 160 dólares a l

mes%

Población que trabaja

informalmente%

Según estas est imaciones, en estos sectores donde tenemos presencia prevalece el trabajo informal , que se caracteriza por ser precario, inconsistente y mal remunerado. Muchas de las personas que logran acceder a l mercado labora l deben conformarse con obtener sa larios precarios, por debajo del sa lario mín imo fijado en $ 240 dólares. Es terrib le saber que 3 de cada 10 personas reciben menos de $ 160 dólares a l mes, con los que deben sobrevivir el los y sus fami l ias.

Pero lo más a larmante se observa a l ana l izar la relación entre ingresos y egresos de los hogares del sector. Si estas estad íst icas ref lejan fielmente la

* In formal idad se refiere a las personas que laboran en negocios o establecimientos con menos de 10 trabajadores, siempre

que la empresa o negocio en la que rea l izan su act ividad no tenga registros contables n i se encuentre registrado con el RUC

(Registro Ún ico del Contribuyente). Fuente: (Mun icip io de Guayaqui l e INEC, 2007)

rea l idad, se está afi rmando que en promedio los hogares gastan más de lo que ganan, nada extraño para una sociedad de consumo que vive del crédi to y el endeudamiento. El problema, independientemente de que la relación sea negativa, radica en los a l tos va lores que ésta a lcanza. De hecho en dos sectores los hogares necesi tan un 55% más de su sa lario para escasamente a lcanzar la paridad ingresos - gastos, con lo que queda claro que estos hogares carecen de ahorros que les permi tan mejorar sus condiciones de vida y, por el contrario, viven un d ía a d ía que termina socavando aún más sus condiciones económicas.

Población

Nueva Prosperina

El Fort ín

Ingreso promedio de los

hogares

353.9 550.3

339.6 526.6

-55.5

-55.1

Gastos promedio de los

hogares

Relación Gastos/Ingresos

4,2

4,3

Número de miembros del

hogar

Nueva Prosperina 382.4 384.8 -0.6 4,2

Fuente: (Municipio de Guayaqui l e INEC, 2007)

Nuestras SociasSocio o socia se le l lama a todas las personas

que part icipan de forma regu lar en a lgún proyecto, in iciat iva o servicio de Hogar de Cristo.

La noción busca reemplazar el término beneficiario o beneficiaria puesto que éste con l leva una idea de relación unid irecciona l que se a leja de la perspect iva de beneficio mutuo existente en nuestras relaciones. Nuestro actuar está dirig ido desde y con las poblaciones vu lneradas, es decir, en función de sus capacidades, t iempos, requerimientos y aprendizajes.

Los socios y las socias que han pasado por

nuestra inst i tución son a lrededor de 340.000, en su mayoría mujeres, por lo que en adelante serán referidas como “nuestras socias”. Esta concentración de género se debe a que la mayor parte de las socias de la inst i tución (más del 90%) provienen de dos l íneas de servicio: el de “Banca Comunal ”, d irig ido exclusivamente para mujeres, y el de “Vivienda”, orientado casi exclusivamente para mujeres, puesto que aunque admite a lgunas excepciones, éstas no sobrepasan el 2%. Otros servicios, como salud y educación, presentan una mayor paridad de género, aunque también en el los predominan las mujeres.

DÓNDE Y CON QUIÉNES

88

Page 89: Fuegos que encienden otros fuegos

Del tota l de socias vigentes, el 40% se ubica en zonas rura les y un 60% en zonas urbanas. En relación a sus edades, éstas se encuentran desde los 16 años en adelante, sin embargo, se concentran entre 19 y 40 años. Según un estudio sobre las socias de vivienda del año 2002, el 44% de las encuestadas se ubicaba entre 21 y 30 años, mientras que un estudio real izado el 2010 en el programa de Banca Comunal si túa a l 38.5% de sus socias entre 30 y 40 años. De todas formas, más del 70% de las socias se si túa por debajo de los 40 años, lo que quiere decir que nuestras socias son relat ivamente jóvenes.

Aunque se carece de datos exactos, estudios real izados a l in terior de la inst i tución permi ten inferi r que a lrededor del 60% de las socias de la ciudad de Guayaqui l no nacieron en el la , y que sus fami l ias provienen, en un 90%, de a lguna Provincia de la Costa. Esto sign i fica que la migración es un fenómeno cercano a el las y que debe estar a la base de un anál isis socioeconómico de sus condiciones de vida.

A cont inuación se describen a lgunas característ icas de las condiciones de vida de nuestras socias, aunque éstas están lejos de representar la mul t ip l icidad de mundos de vida de la tota l idad de el las, puesto que se est imaron a part i r de una muestra relat ivamente pequeña y todos los casos pertenecen a l programa de Banca Comunal de la ciudad de Guayaqui l . En este sent ido más que una caracterización es una primera aproximación que debe ser complementada en el futuro con un estudio más in tegra l .

Caracterización de la vivienday el hogar

La gran mayoría de las mujeres que in tegraron este estudio residen en la Perimetra l Noroeste de Guayaqui l , zona que ya ha sido caracterizada previamente.

En este sent ido los datos que se presentan a cont inuación vienen a rat i ficar las precarias condiciones ya expresadas. En el primer cuadro se puede ver cómo un gran número de hogares carecen de servicios básicos como agua potable y a lcantari l lado puesto que se ubican en sectores no urbanizados, aunque sí t ienen a lgunos servicios como energ ía .

Page 90: Fuegos que encienden otros fuegos

D

O

S

Servicios que posee la vivienda

Agua Potable

Teléfono fijo

A lcantari l lado

Energ ía Eléctrica

S í

50,3 % 49,7 %

7,9 %

94,7 %

16,6 %

No

92,1 %5,3 %

83,4 %

Al consu l tar por el materia l preponderante de la vivienda, l lama la atención observar que éste es ladri l lo, por encima de la caña y la madera como se podría creer. Esto, más que un tema de cal idad, responde a un imaginario colect ivo que sobrevalora

el cemento y el ladri l lo (s ímbolo de progreso) por encima de la caña que representa una forma ancestra l de vivienda apta para las condiciones ambienta les de la costa.

¿Cuál es el materia l preponderante en su vivienda?

Ladri l los

Ladri l los y Maderas

Madera

Caña

49,7 %

9,3 %

27,2 %

4,6 %

Caña y Maderas

Otros

3,3 %

4,7 %

Por ú l t imo, a l consu l társeles sobre quién es el propietario de la vivienda donde viven, más de la mi tad señaló ser la dueña, y sólo el 14% constataron que es su marido el propietario de ésta. Es in teresante

percatar que ninguna de las encuestadas señaló ser arrendataria o vivir en la casa de a lguien ajeno a su fami l ia , fenómeno recurrente en los sectores más pobres.

¿Quién es el propietario de la casa donde vive?

Mis padres

Otro fami l iar

Mi marido

Soy la propietaria

7,3 %

14 %

66,7 %

5,3 %

Mi marido y yo 6,7 %

Respecto a la composición del hogar, nuestros estudios revelan que el número promedio de personas en el hogar osci la entre 4 y 5 miembros, que a lrededor del 40% de nuestras socias se declara

N ivel Educacional

El n ivel educativo de nuestras socias es relat ivamente bajo e incluso a lgunas de el las presentan anal fabetismo o anal fabetismo funciona l ,

DÓNDE Y CON QUIÉNES

90

Jefa de Hogar y que el promedio de hijos es 3.28, datos estad íst icamente mayores a los evidenciados a nivel naciona l .

lo cua l d i ficu l ta su desenvolvimiento en nuestros programas y representa un desaf ío importante para el futuro.

Page 91: Fuegos que encienden otros fuegos

¿Cuál fue el ú l t imo grado educaciona l que cursó?

Ninguno

Técnico Superior (completa e incompleta)

Primaria (completa e incompleta)

Secundaria (completa e incompleta)

2,7 %

40,7 %46 %

4 %

Universi taria 6,7 %

Act ividad Labora l y Si tuación Económica

Si consideramos que cerca del 40% de nuestras socias son jefas de hogar y muchas de el las madres sol teras, resu l ta centra l describir sus fuentes de ingresos y act ividades labora les, más aún si se considera que la inserción labora l y la generación de recursos es una de las mayores estrategias para la superación de la pobreza.

Lamentablemente los datos que se presentan a cont inuación sufren la distorsión de que fueron medidos en socias pertenecientes a l programa de Banca Comunal , por lo que todas se encuentran insertas en una act ividad económica, por muy pequeña que ésta sea. De todas formas permi ten observar a lgunas tendencias que, contrarrestadas con otros estudios nos aproximan a la real idad socia l de el las.

La primera constatación surge a l ana l izar el t ipo

de act ividad económica que real izan nuestras socias. El las se insertan en su mayoría a l mercado en tareas de servicio doméstico o en pequeños comercios, dos rubros precarios que no siempre les garant izan todos los beneficios de la legis lación labora l , part iendo por un sa lario mín imo establecido en $ 240 dólares.

Si bien a menudo en nuestro programa de Banca

Comunal se suele hablar de microempresarias, la rea l idad constata que la mayoría de el las más bien sólo son capaces de organizar negocios de subsistencia que les permi ten el d iario vivir. Esto presenta dos grandes desaf íos para los años venideros:

• D ive rsi fi ca r l os ru b ros d e i nve rsi ó n , tod a vez q u e,como muestra la tabla, el 70.4% va a servicios.

• D ise ñ a r m e tod o l og í a s q u e pe rm i ta n d a r u n sa l toa inversiones de mayor tamaño, permi t iendo a las socias una mayor capacidad de ahorro.

En la sigu iente tabla se aprecia que cerca de la mi tad de las encuestadas sólo a lcanza un nivel de educación primario (7 años), y que sólo a lrededor del 10% l lega a un nivel de educación superior.

Page 92: Fuegos que encienden otros fuegos

D

O

S

¿En qué rubro cal i f icaría la act ividad económica que real iza?

Producción

Otros (Servicios, artesan ías, turismo, etc)

Comercio

A l imentos

9,2 %

70,4 %

12 %

8,4 %

Otro problema que expl ica la precariedad de estas fuentes de ingreso, radica en que muchas mujeres se in tegran a el las sólo de forma parcia l puesto que también deben cumpl i r el rol de madres, jefas de hogar, esposas, h ijas, lo que se conoce como la doble jornada en los textos de género.

El gráfico que se exhibe a cont inuación muestra las horas diarias que las encuestadas dedican a su negocio. En él l lama la atención que el 25,5% le dedique a su act ividad labora l sólo entre 2 y 4 horas, seguido por quienes les dedican entre 4 y 6, con un 19,9% de los casos.

DÓNDE Y CON QUIÉNES

92

Page 93: Fuegos que encienden otros fuegos

Al indagar sobre los ingresos, se observa que nuestras socias encuestadas ganan en promedio $ 161 dólares a l mes, apenas el 67% del sa lario mín imo, lo que práct icamente les impide sacar adelante a sus fami l ias sin otras fuentes de ingresos. Una de estas fuentes adiciona les de ingreso corresponde, en el 42,8% de los casos, a un bono o subsid io entregado por parte del Estado de $ 35 dólares. Y la otra gran fuente de ingreso es el aporte de los demás miembros del hogar que según nuestras est imaciones a lcanzan los $ 215 dólares, lo que supone que la socia del programa no es la que aporta la mayor cant idad de recursos a l hogar.

Los ingresos tota les de los hogares muestran una ampl ia dispersión que se observa en su elevada desviación estándar (218), toda vez que hay hogares que ganan $ 50 dólares mientras otros bordean los $ 1 .000. Los ingresos promedios de los hogares que componen la muestra son de $ 338 dólares.

En función de estos ingresos se puede est imar el ingreso per cápi ta a l mes de las poblaciones encuestadas, el cua l se si túa en promedio en $ 73 dólares, $ 2.40 dólares por d ía, a lgo superior a l promedio est imado por otros estudios que si túa este valor entre $ 0.90 y $ 1 .6 dólares diarios.

Factores de Vulnerabi l idad

Teóricamente son muchos los factores de vu lnerabi l idad que pueden mermar los recursos de las poblaciones. Sin embargo, existe una paradoja del desarrol lo que demuestra que a mayores niveles de pobreza más expuesto se está a ser víct ima de fenómenos que te hagan aún más pobre. Esto nos motivó a querer cuant i ficar brevemente las frecuencias con que nuestras socias habían sido víct imas de un factor de vu lnerabi l idad como las catástrofes natura les, los del i tos graves y las enfermedades crónicas o discapacidades. Los resu l tado se expresan a cont inuación:

Factores de Vu lnerabi l idad

¿Usted o a lgún mirembro de su fami l ia padecen de a lguna enfermedad crónica o discapacidad?

¿Usted o a lgún miembro de su fami l ia ha sido víct ima de un del i to grave?

¿Ha sido víct ima de una catástrofe natura l?

S í

45,6 % 54,4 %

41 ,7 %

22,1 %

No

95,1 %

77,9 %

Page 94: Fuegos que encienden otros fuegos

D

O

S

Percepción de sí mismas

La autoest ima es por lo genera l un valor que puede verse debi l i tado por la exposición constante a factores de vu lnerabi l idad y por la negación sistemática a los bienes socia les que la gente pobre rara vez puede adquiri r. La pobreza ta l vez sea la más dura, puesto que la ident idad y el reconocimiento socia l se juegan por la adquisición de bienes de consumo, a l est i lo de “ser para tener” o para estar “adentro”, y no quedarse por fuera de un mundo que avanza a ri tmos agigantados.

Sin embargo, esta percepción ampl iamente di fundida encuentra in terpelaciones importantes en la

real idad, a l quedar evidenciado que la gente pobre muchas veces posee una gran confianza en sí misma, es posi t iva ante el futuro e incluso muestra niveles de fel icidad mucho mayores que los evidenciados en otras clases socia les.

Apoyados en una encuesta de autovaloración, los datos que se exhiben a cont inuación evidencian la posi t iva imagen que, en términos genera les, nuestras socias poseen de sí mismas, sobre todo cuando se trata de visua l izar el futuro que les podrán dar a sus h ijos.

¿Cuánta confianza t iene en sí misma?

BastantePocoMuy poco Medianamente Mucho

¿Cúanto cariño se t iene a sí misma?

¿Qué tan capaz se siente de emprender nuevos desaf íos en su vida?

¿Qué tan capaz se siente de darle un buen futuro a sus h ijos?

¿Qué tan capaz se siente de mejorar su si tuación económica?

¿Qué tan querida por sus fami l iares y amigos se siente?

¿Qué tan valorada siente que es su opin ión en su casa?

4,6 %

¿Qué tan respetada se siente en su barrio?

5,8 %

1 ,9 %

1 ,9 %

2,8 %

9,7 %

0,9 %

6,5 %

2,9 %

9,6 %

3,8 %

11 ,3 %

13,8 %

10,7 %

9,3 %

31 ,5 %

37,1 %

31 ,7 %

20,8 %

35,8 %

36,7 %

31 ,1 %

35,5 %

55,6 %

59 %

52,9 %

71 ,7 %

49,1 %

44 %

44,7 %

51 ,4 %

1 ,9 %

1 %

1 ,9 %

1 ,9 %

2,8 %

3,9 %

2,8 %

¿Qué tan fel iz se siente? 2,8 % 5,5 % 27,5 % 61 ,5 %2,8 %

Aunque su percepción sobre sí mismas y la vida no sea tan negativa como se pudiese imaginar, hay que estar conscientes de que a l 100% de el las les gustaría vivir fuera de la pobreza, poder acceder a

nuevas oportun idades, dejar de ver vu lnerados sus derechos y, sobre todo, poder ofrecerles mejores condiciones de vida a sus h ijos.

DÓNDE Y CON QUIÉNES

94

Page 95: Fuegos que encienden otros fuegos

Percepción sobre el barrio

Tan importante como conocer la percepción que t ienen sobre sí mismas, es importante conocer la percepción que las socias guardan respecto a sus barrios y a las personas con quienes conviven a diario.

Primer hecho in teresante de referir a l respecto es que sólo el 16.8% señaló tener una visión negativa de sus vecinos. Y mientras que el 83.2% restante mantiene una opin ión favorable, de hecho sorprende que el 50.5% de el las crea que sus vecinos “son un gran apoyo para mí y nos ayudamos mutuamente”, dada la crisis de los espacios públ icos, el ind ividua l ismo creciente, la inseguridad y otros f lagelos que merman la confianza en el otro.

A l preguntarles sobre si consideran que el barrio en que viven actua lmente es bueno para sus h ijos, el 59.8% señaló que sí , mientras que el 40.2% sostuvo que no. Para sustentar ta les percepciones, el 61 ,3% esgrimió que el barrio es bueno para sus h ijos porque es un barrio tranqui lo y de gente trabajadora, mientras que quienes señalaron que no era buen barrio el argumento preponderante fue que existen malos ejemplos, con el 80% de los casos.

A l preguntarles fina lmente cuá les son los peores problemas de su barrio, el 51 .4% de las encuestadas señaló que era la del incuencia, seguido por el abandono por parte del Estado, con el 33.3% de los casos. De ah í que Hogar de Cristo deba asumir en el futuro estrategias que le permi tan incid ir en estos temas.

Percepción sobre el futuro

Vale la pena destacar la posi t iva percepción que nuestras socias t ienen sobre el futuro. Esto puede deberse a que muchas de el las están emprendiendo procesos de pequeños negocios que les permi t i rán brindar mejores oportun idades a sus h ijos. Los porcentajes de percepción sobre el futuro quedan sin tet izados en la sigu iente tabla .

¿Cómo cree que estará en 5 años más?

Su vida

Su barrio

El pa ís

Posi t ivaMejor o

mucho mejor

96,4 %

85,3 %

50,4 %

NeutraIgua l que siempre

0,9 %

5,5 %

33 %

NegativaPeor o mucho

peor

2,7 %

9,1 %

15,6 %

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D

O

S

La encuesta permi te observar un fenómeno l lamativo: a medida que la esfera por la cua l se consu l ta es más ampl ia , la confianza de que estará mejor en el futuro disminuye. En este sent ido se puede deducir que existe una mayor confianza en las propias capacidades que en la de las personas que gobiernan o inciden en el pa ís . Sería in teresante determinar si rea lmente es posib le mejorar las condiciones de vida a nivel ind ividua l si las condiciones del pa ís no mejoran o incluso empeoran.

Anhelos A l indagar sobre los anhelos de nuestras socias

aparece un hecho que ya hemos venido destacando pero que requería ser confi rmado. En el 64,8% de los casos se destaca como principa l sueño “que los h ijos estudien en la universidad”. Éste es seguido, aunque rezagados, por los deseos de “tener mejor si tuación económica” (14.3%) y “poder tener la casa propia” (13.3%).

A l preguntarles qué programas o servicios les gustaría que brindara Hogar de Cristo, el 55.7% señaló que le gustaría que hubiera más programas educativos para sus h ijos e hijas, seguido por programas de desarrol lo en la comunidad (17%) y programas de capaci tación para mujeres (15.1%).

Percepción sobre Hogar de Cristo

Un ú l t imo í tem fue determinar cómo nuestras socias perciben la Inst i tución y qué imaginarios y conocimientos t ienen de el la . Una primera constatación a l respecto es que gran parte de el las no se enteró por un medio formal de comunicación, sino más bien por medio de un amigo o fami l iar. Ta l como se muestra en la sigu iente tabla, a l menos el 81% de los casos l legó a nuestra organización por esta vía y sólo un 18% lo h izo por medio de otra inst i tución .

¿Cómo se enteró de Hogar de Cristo?

Por un fami l iar

Por la prensa

Por un amigo

Por el municipio

18,1 %

63,8 %10,7 %

1 ,3 %

En la ig lesia 3,4 %

Otros 2,7 %

Una vez que la persona l lega a nuestra inst i tución es ind ispensable brindarle un buen trato de forma que se sienta parte de nuestro espíri tu inst i tuciona l . Por eso resu l ta a lentador saber que el 73.2% de las encuestadas cal i f icó como excelente el trato humano

recibido en Hogar de Cristo y el 22.3% lo ca l i f icó como bueno. Esto concuerda con la visión que nuestras socias t ienen de la inst i tución . A l preguntarles en qué piensan cuando oyen hablar de Hogar de Cristo, las respuestas fueron las sigu ientes:

Una inst i tución que ayuda a los más pobres

Una inst i tución que hace negocios con los más pobres

Una inst i tución que vende viviendas de caña

Una inst i tución que ayuda a las personas a ser mejores

36,1 %

1 ,9 %51 ,9 %

7,4 %

Una inst i tución de la ig lesia catól ica 2,8 %

Esto l leva a que el 86.8% de las encuestadas señale que “sí ” ha recomendado a Hogar de Cristo mientras que tan sólo el 13.2% no lo ha hecho.

Pero esto aún no es suficiente para a legrarnos por completo, debemos aún ser capaces de demostrar

la incidencia real de nuestras in iciat ivas en el mundo vi ta l de nuestras socias y en las condiciones socioeconómicas que las rodean, pues sólo de esta forma sabremos si estamos dando pasos ciertos en el complejo escenario de exclusión, vu lnerabi l idad y pobreza que este capí tu lo ha querido i lustrar.

DÓNDE Y CON QUIÉNES

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TRES

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T

R

E

S

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T

R

E

S

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

Comprometidos con la transparencia y la rendición de cuentas es necesario abordar en las sigu ientes páginas el panorama actua l de Hogar de Cristo en relación a estos temas con el fin de conocer los logros de cada una de las l íneas de acción y proyectos ejecutados desde nuestra inst i tución . Para el lo se optó por trabajar con ind icadores de gest ión y resu l tados que demuestren de forma clara y esquemática la eficiencia de cada uno de los procesos, así como también los logros e impactos que han tenido dentro de las comunidades. De esta forma se dispondrá, además, de cri terios de comparación entre dist in tos años de gest ión, permi t iendo observar los avances y di ficu l tades de la organización en el t iempo.

Este capí tu lo pretende ser una radiograf ía de lo real izado en estos tres ú l t imos años de trabajo, ref lejando de fiel manera los aciertos, d i ficu l tades y logros de este período, puesto que sólo se puede avanzar con certeza hacia el futuro si se da t iempo para reconocer las ra íces sembradas en el pasado.

El contexto de estos años de trabajo

Los períodos 2007, 2008 y 2009 no fueron seleccionados a leatoriamente sino por el contrario se el ig ieron del iberadamente porque en éstos se generaron importantes transformaciones, como resu l tado de años de expansión inst i tuciona l , pero, además, de equivocaciones que nos l levaron a una crisis financiera que, por su parte, nos obl igó a tomar medidas radica les para “poner la casa en orden”.

Antes de adentrarnos de l lenos en la gest ión de estos ú l t imos años, nos ha parecido importante describir los brevemente.

2007: Fue el año en que in iciamos la Plani ficación Prospect iva - Estratégica que hizo posib le el actua l Modelo de Gest ión . En este proceso ref lexionamos acerca de nuestra práct ica en el desarrol lo, d iscut imos lo que ésta debe signi ficar en una organización socia l d irig ida por la Compañía de Jesús y luego nos pusimos de acuerdo en los tres

marcos fundamenta les de nuestra organización: marcos para pensar, para decid ir y para actuar.

2008: Año de mucha formación y capaci tación a quienes tenemos mayores responsabi l idades de conducción en el Equipo de Hogar de Cristo con la in tención de posibi l i tar el enraizamiento del Modelo de Gest ión . Sin embargo, el peso de la inercia proveniente de los años anteriores, de los ant iguos paradigmas y formas de trabajar, const i tuyeron un óbice que dificu l tó notablemente los cambios propuestos. Una cierta fi losof ía de priorizar la resolución de los problemas cotid ianos y no darse t iempo para lo estratégico, no hizo posib le el d iseño del Plan Financiero que debía dar soporte a l nuevo Modelo de Gest ión .

2009: Como consecuencia de esto, comenzamos el año con una severa crisis de l iqu idez, que afectó la marcha de todas las l íneas y equipos de trabajo. El Directorio vio la necesidad de real izar una in terventoría con la in tención de contribu ir a estabi l izar las finanzas de la organización . Hacia fina les del año tomó las riendas el P. Eduardo Vega, S.J . , nuevo Director Genera l , rea l izando un golpe de t imón que adecuó la organización de manera que posibi l i tase una respuesta, desde sus posibi l idades reales, a las necesidades de quienes son nuestra razón de ser y exist i r.

Gest ión y logros de las l íneas de trabajo

Conociendo la si tuación en que se desarrol laron

las dist in tas l íneas de trabajo durante estos años, revisaremos los principa les logros y proyectos que se ejecutaron desde cada una de el las, in tentando ofrecer siempre una perspect iva comparat iva entre años que permi ta ver la evolución y cont inu idad del trabajo emprendido.

104

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T

R

E

S

Educación y capaci tación

Trabajamos la educación desde la perspect iva de rest i tución de derechos y de comunidad educativa, lo cua l ha supuesto la apertura de nuevas l íneas de trabajo, el d iseño de metodolog ías, la consol idación de los equipos y la ejecución de nuevos proyectos.

LÍNEAS DE TRABAJO

Comunidad Educativa

Mochi las y l ibros escolares entregados

Dinero en becas otorgadas

A lumnos y a lumnas becados

Escuelas beneficiadas

Escuelas reconstru idas en a l ianzas

$ 31 .324

1 .307

2.285

Educación Técnica

Charlas a socias de Banca Comunal

Personas capaci tadas en ta l leres técnico-artesanales

Tal leres dictados

Extensión Educativa

Profesores capaci tados

Adu l tos a l fabetizados

Promotoras capaci tadas

27

5

889

2007

33

50

32

57

1 .426

7.200

22

3

338

2008

3.484

24

150

44

21

682

380

14

3

275

2009

1 .859

14

400

44

24

$ 33.392 $ 18.202

Programas más destacados

El Proceso maneja una serie de programas que están teniendo una incidencia concreta en la real idad educativa de cientos de fami l ias. Éstos se ejecutan gracias a las redes de contacto y a l ianzas establecidas con diversas comunidades educativas y a l apoyo sostenido de muchas empresas y aportantes.

Esta sinergia entre comunidad, empresas y Hogar de Cristo ha dado como fruto los sigu ientes programas:

a) Programa de Apoyo Escolar

Se in ició en el año 2005 y buscamos incid ir en las comunidades educativas de sectores pobres mediante la transferencia de recursos directos, cubriendo el pago del 50% de la pensión educativa de niños y n iñas, así como la contratación de docentes en escuelas fisca les, que en su mayoría son unidocentes, especia lmente en las rura les.

Durante el año 2008 este programa apunta ló a 25

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T

R

E

S

escuelas, de las cua les ocho eran rura les - fisca les y 17 peri-urbanas, apoyando la educación de 1 .535 niños y n iñas.

También contamos con importantes a l iados estratégicos que permi ten l levar a cabo estas in iciat ivas, donde se destaca la ayuda de Ci t i Foundation por la entrega de recursos y recomendaciones para la distribución de los mismos.

b) Programa Escuelas Saludables

El concepto de “Escuelas Saludables” ha sido ut i l izado para describir las condiciones necesarias para que las escuelas garant icen un óptimo proceso de aprendizaje, ya que la ca l idad de las dependencias educativas t iene un impacto directo sobre los procesos pedagógicos.

Aún existen en Ecuador mi les de escuelas que no

a lcanzan estos cri terios y que operan d ía a d ía en si tuaciones de extrema precariedad, que impiden un buen desempeño de los docentes y a lumnos, condiciones que se agravan si nos adentramos en comunidades rura les o peri-urbanas donde la demanda por este t ipo de mejoras es realmente urgente.

Conscientes de este fenómeno hemos l iderado este programa de mejoramiento de infraestructura educativa desde el período lect ivo 2006 - 2007, contribuyendo en estos tres ú l t imos años a la mejora de cinco escuelas.

Trasformando real idades: Escuela “Ciudad de Israel ”

El 18 de junio de 2007 fue inaugurada la escuela comunitaria Ciudad de Israel ubicada en la comunidad Monte Sinaí, Perimetral Noroeste de Guayaquil, ofreciendo apoyo a esta iniciativa de la comunidad.

Colaboramos in icia lmente con materia l de baja cal idad (plást ico, caña y cartón) para la construcción de la escuela, con bancas y materia l d idáct ico, como también con la contratación de una maestra para trabajar en todos los grados.

Sin embargo, estas mejoras se vieron pronto afectadas a causa de la fuerza del invierno, ya que la escuela constru ida en caña se deterioró a ta l punto que no pod ía garant izar un espacio aceptable para el año siguiente.

A ra íz de este hecho se fi rmó una a l ianza con la empresa COTECNA para la reconstrucción de esta escuela con dos au las de estructura metá l ica y bloques, las cua les se inauguraron el 19 de marzo de 2008, contando con 60 alumnos.

Desde entonces la escuela Ciudad de Israel part icipa en nuestro programa de Apoyo Escolar recibiendo mochi las para los estudiantes becados, además de la entrega de textos escolares “Más Libros” y otros beneficios, entre los que se destacan:

•A po y oe nt rá m i tespa ral al eg a l iza ci ó nd el aescu e l a .

•Do ta ci ó nd ea g u a .

• Vi n cu l a ci ó n co n o t ra s I ns t i t u ci o n es q u e d esee ntrabajar en a lgún proyecto socia l .

•Ca pa ci ta ci ó nam a es t rose nte m a sped a g óg i cosydesarrol lo personal .

La escuela se sumó además a una completa red de programas de apoyo escolar que otorga becas escolares a 48 de los 70 niños matricu lados; a su vez el proyecto CITI FUNDATION entrega combos escolares y real iza ta l leres para padres de fami l ia , y el proyecto Fybeca brinda atención médica a los estudiantes, así como desayunos a base de leche de soya.

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

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Escuela “Ciudad de Israel ”

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c) Programa Desayuno escolar para niños y n iñas

Una buena nutrición es una condición necesaria para el desarrol lo de los procesos sico-biológicos impl icados en el aprendizaje. Por eso es deseable que las mismas inst i tuciones educativas aseguren una nutrición mín ima para cada alumno, pues no se sabe si éstos reciben la a l imentación adecuada en sus hogares. Desafortunadamente las precarias condiciones económicas de muchas escuelas impiden la promoción de estas in iciat ivas y no pueden garant izar que sus a lumnos estén teniendo una óptima a l imentación .

Con el apoyo de la Red Jesui ta (Colegio Javier),

in iciamos el primer proyecto en esta l ínea que permi t ió la entrega de desayunos, dos veces por semana, a 400 niños y n iñas de la Escuela Col inas del Sina í . De ah í en adelante hemos buscado reforzar este t ipo de in iciat ivas, encontrando, fina lmente en el año 2008, un proyecto sustentable que no sólo permi te la entrega de desayunos sino también la producción de éstos con un producto sano y nutri t ivo: “ la soya”. La historia y los logros de este proyecto, denominado “Vaca Mecánica”, se describen más adelante.

d) Programas de Educación Técnico-Artesanal

Los programas de formación técnico-artesanal están diseñados para capaci tar a hombres y mujeres en un oficio que les permi ta incrementar sus posibi l idades de inserción en el mercado labora l y mejorar sus ingresos.

Es una educación centrada no sólo en el desarrol lo de competencias blandas y personales, sino también en las competencias técnicas especí ficas del oficio en el que se esté capaci tando. Este doble eje de atención permi te un proceso de educación in tegra l donde se empodera a la persona para emprender o mejorar sus fuentes de ingreso.

Este t ipo de cursos ha estado l igado genera lmente a l programa de “Banca Comunal ” puesto que las mujeres que reciben un crédi to demandan instancias de capaci tación que les permi tan admin istrarlo de la mejor manera. Estos cursos son grupales y se real izan genera lmente en las dependencias de

nuestra inst i tución, t ienen una duración promedio de cuatro a seis meses, y normalmente los real izamos en a l ianza con otras inst i tuciones especia l izadas en la materia , como el Servicio Naciona l de Capaci taciones – SECAP - y el Colegio de Artesanos.

e) Programa de Formación de Docentes

Tiene como objet ivo mejorar las competencias pedagógicas de los maestros de escuelas pobres del pa ís, toda vez que, en muchos casos, éstos n i siqu iera cuentan con estudios formales de enseñanza, n i nada que cert i f ique sus competencias, y más bien dan clases movidos por la necesidad de cubrir la demanda educativa que existe en muchos sectores.

Test imonio“Mi nombre es Gina

Granados, soy docente hace cinco años en la escuela Rosa Elena Guerrero, ubicada en la Cooperat iva San Francisco, ki lómetro 16 y medio de la vía a Daule, gracias a l apoyo económico de Hogar de Cristo que l leva más de siete años trabajando con esta escuela .

Este centro educativo está ubicado en un lugar que carece de oferta educativa. De hecho tuvo que ser constru ida hace ocho años por los propios padres de fami l ia y funcionó financiada por el los hasta que fue reconocida por el Estado, entrando en un régimen fisca l . La escuela posee desde 1º hasta 7º año, y t iene problemas de infraestructura ya que sus sa las aún son de caña y poseen piso de t ierra.

Sin embargo su funcionamiento es fundamenta l para garant izar el acceso a la educación a niños y n iñas de la Cooperat iva San Francisco y de sectores a ledaños.

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

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Page 109: Fuegos que encienden otros fuegos

Actua lmente la escuela cuenta con 438 a lumnos, de los cua les 385 reciben becas por parte de Hogar de Cristo que, además, paga el sa lario de cuatro de los 10 docentes que trabajamos en el la , entre los que me incluyo.

Pero el apoyo de Hogar de Cristo ha ido mucho más a l lá de una mera colaboración económica, y para mí lo más importante ha sido poder recibir capaci tación por parte de el los. Yo comencé a trabajar como maestra más por vocación y amor a mi h ijo que por estudios; de hecho cuando empecé por primera vez como madre comuni taria en la primera escuel i ta a la que asist ía mi h ijo estaba estudiando ingeniería en sistemas.

Desde el primer año que entré a esta escuela, Hogar de Cristo me invi tó a part icipar de una capaci tación la cua l duró desde mayo hasta enero de 2006. En el la cu l t ivé nuevas destrezas, metodolog ías, capacidades e incent ivos, pero lo más importante fue que aprend í que cada niño demanda un proceso individua l , y que si éste no comprende no es porque sea incapaz sino porque ta l vez necesi ta de otras metodolog ías.

Esta capaci tación, junto con otras que recibí los años posteriores, me enseñaron también la importancia de trabajar con los padres y con toda la comunidad, además de ayudarme a mejorar la autoest ima y de incent ivarme a que siga desarrol lándome profesiona lmente; hace un par de años volví a la universidad, pero esta vez sí a estudiar lo que me gusta que es la pedagogía .

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f) Programa de Formación de Adu l tos

El programa de formación de adu l tos es la ú l t ima arista de un plan in tegra l de formación que ha sido estructurado bajo el concepto de comunidad educativa, puesto que el n ivel educaciona l de los padres t iene consecuencias en el aprendizaje de niños y n iñas, a l permi t i r reforzar instancias de estudio en el hogar y asegurar un seguimiento más cercano de lo que están aprendiendo.

Padres anal fabetos t ienen di ficu l tades para reforzar y est imu lar los procesos de aprendizaje de

Número de adu l tos egresados del Bachi l lerato

2007 2008 2009

84 167 240

VULNERABILIDAD Y EXCLUSIÓN SOCIAL

El proceso de vu lnerabi l idad y exclusión socia l , enfocado por ahora a combatir la vio lencia in trafami l iar y a promover la prevención y tratamiento del VIH , muestra un naciente desarrol lo que debe ir consol idándose con los años.

Los mayores logros obtenidos hasta ahora apuntan a consol idar un programa de prevención de la vio lencia in trafami l iar in tegra l para nuestras socias

sus h ijos e hijas y para establecer una del imi tación clara de roles con el los. Mucho de estos n iños y n iñas a l poseer mayores competencias socia les asumen funciones y deberes en discordancia con su edad que terminan obstruyendo su desarrol lo educativo.

Por esa razón hemos promovido un proyecto de formación de Adu l tos por medio de un completo programa de Bachi l lerato que ha permi t ido reforzar los conocimientos de los jefes de hogares, incid iendo indirectamente en el rendimiento escolar de los n iños.

a fin de garant izar una atención personal izada que permi ta actuar oportunamente ante este t ipo de hechos, buscando erradicar esta forma de vio lencia .

Para el lo contamos con servicios de orientación legal , seguimiento de procesos y apoyo psicológico completamente gratu i tos, los cua les tuvieron la sigu iente cobertura en estos ú l t imos tres años:

Servicio 2007 2008 2009

100 290 585Mujeres que recibieron orientación legal

100 128 38Mujeres que tuvieron un seguimiento de proceso

137 155 332Consu l tas de atención psicológica

Casa de Acogida de Guayaqui l

Ser la única casa de acogida operat iva de Guayaqui l y el Li tora l para mujeres víct imas de vio lencia in trafami l iar ya es un logro por sí mismo y una gran responsabi l idad. Financiada por el Min isterio de Inclusión Económica y Socia l (M IES), en el marco de un convenio de cooperación in terinst i tuciona l l lamado

“Plan para Erradicar la Violencia de Género”, esta in iciat iva, inaugurada oficia lmente en el año 2008, pretende ser un importante centro de rest i tución de derechos y motor de reinserción para aquel las mujeres y fami l ias que han sido víct imas de este f lagelo.

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

1 10

Page 111: Fuegos que encienden otros fuegos

Casa de Acogida Hogar de Cristo

Ubicación: Zona Noroeste de Guayaqui l .

Capacidad: 125 personas.

Fecha de in icio de funcionamiento: Abri l de 2009.

Equipo Técnico: 9 con sa lario y 3 voluntarias.

Act ividades: Centro de atención, protección y acogida a niños, n iñas, adolescentes y mujeres víct imas de vio lencia in trafami l iar, sexual y explotación sexual .

Servicios: Atención legal , sicológica, socia l , médica y educativa.

Fuentes de Financiamiento: Convenio M IES - Hogar de Cristo, otros aportes.

Presupuesto anual (2010): $ 153.662.11

Mujeres acogidas durante el 2009: 107 Mujeres (100 Casos)N iños acogidos durante el 2009: 109Niñas acogidas durante el 2009: 106Tota l : 322 personas

Un primer sondeo, a lgunos logros cuanti tat ivos:

• M á s d e l 80% d e l a s m uj e res h a n reci b i d o a te n ci ó n l eg a l ,

psicológica y médica.

•El80%seco m p ro m e teaseg u i rp rocesoste ra p éu t i cos .

• El 90% d e l a s m uj e res es ta b l ece u n p roceso l eg a l , co n ta n d o

con asesoría .

•58n i ñ os ,n i ñ a sya d o l esce n tesseh a ni n co rpo ra d oe nes pa ci os

comuni tarios.

•El99%d el osn i ñ os ,n i ñ a sya d o l esce n tesa sis te nal ag u a rd e rí a ,

escuela o colegio.

•El1 0 0%h asi d ova l o ra d oya te n d i d opo rm éd i cos .

• El 50% d e n i ñ os y n i ñ a s m a y o res d e ci n co a ñ os h a n si d o

valorados en el área psicológica, de sa lud y de educación .

• M a s d e l 50% posee n fi ch a s d e seg u i m i e n to (e n tod a s l a s

áreas: psicológica, sa lud, educación y socia l).

• La s m uj e res d e l a Ca sa d e A cog i d a h a n pa rt i ci pa d o e n t res

ta l leres de ocupación labora l .

•Pa ral a sa ct ivi d a d esco m p l e m e n ta ri a sco nl osn i ñ os ,n i ñ a syl a s

señoras se cuenta con el apoyo del voluntariado comuni tario,

de extranjeros y colegios, y de personas sensib les a l tema.

• Pa rt i ci pa ci ó n e n l a M esa d e G é n e ro co n é n fa sis e n vi o l e n ci a

i n trafami l iar en el Municipio de Guayaqui l .

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Testimonio10 de junio de 2010Guayaqui l , Ecuador

Yo vivía en Mi lagro con mis siete h ijos y tuve que venir a Guayaqui l escapando de mi expareja que acostumbraba a golpearme e insu l tarme poniendo en riesgo mi vida y la de los n iños.

La decisión no fue fáci l , pero el Inst i tu to Naciona l de la N iñez y la Fami l ia (INFA) me recomendó que me presentara en la Casa de Acogida de Hogar de Cristo donde me podrían admit i r con todas mis h ijas, a excepción de mi h ijo varón que t iene 17, puesto que ah í sólo acogen a hijos varones hasta los 12 años

Los primeros d ías no fueron nada fáci les, sobre todo por tener que separarme de mi h ijo. Otro problema fue acostumbrarme a convivir con otras fami l ias y a soportar los conf l ictos que a veces se dan entre el las. Eso fue lo más di f íci l sobre todo para mis h ijas que en un principio no querían estar aqu í .

Pero a medida que ha pasado el t iempo mis hijas y yo nos hemos ido acostumbrando, el las han

recibido mucho apoyo sobre todo para sus estudios, que para mí es a lgo muy importante.

Yo por otro lado he recibido mucha ayuda por parte de las profesiona les; el las

me han dado un apoyo que afuera de la Casa de Acogida nunca l legué a tener.

Estar aqu í me ha ayudado a ganar seguridad en mí misma y en mi fami l ia , me ha dado más herramientas para relacionarme con los demás y me ha proporcionado ayuda económica y refugio. Pese a el lo mi idea es estar aqu í sólo un t iempo más y luego poder sa l i r y rehacer mi vida.

Me siento fel iz porque la decisión de venir aqu í

ha sido importante en mi vida, sé que cuando sa lga voy a a lcanzar mis metas como conseguir un trabajo fijo, una casa para mis h ijos, seguir educándome y educándolas a el las. Siento seguridad en mí misma, me acuesto a dormir y puedo descansar tranqui la sin esperar que en medio de la noche l legue a lguien a mal tratarme.

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

Page 113: Fuegos que encienden otros fuegos

SALUDTal como se describ ía en el capí tu lo uno,

el área de sa lud cuenta con dos grandes l íneas de trabajo. Una relacionada a la medicina prevent iva y la otra l igada a la prestación de servicios, que t iene relación con las atenciones médicas real izadas en cada subcentro.

Pasemos a cont inuación a revisar a lgunos de los proyectos y act ividades real izadas en estas dos l íneas de trabajo.

Invest igación y promociónEn esta l ínea de trabajo, centrada

en levantar información relevante para mejorar la sa lud e insta lar herramientas y capacidades para la prevención de enfermedades, se ha puesto especia l énfasis en la real ización de controles médicos, garant izar la nutrición como un derecho y ofrecer capaci tación a agentes comuni tarios que logren di fundir sus conocimientos de prevención de enfermedades a l in terior de las comunidades.

El sigu iente cuadro muestra los logros cuant i ta t ivos de a lgunas de estas act ividades.

SALUD

Atención en Salud Comuni taria

Atenciones Odontológicas

Fami l ias que part iciparon en el programa de atención médica in tegra l en la Perimetra l Noreste

Mujeres que se real izaron el examen PAP

Varones que se real izaron el examen PSA

5.826

345

Capaci tación Comuni taria

Voluntarias Comuni tarias de Salud que seencuentran formadas

Mujeres que part iciparon en charlas de sa lud prevent iva

Voluntarias Comuni tarias de Salud

1 .930

350

2007

1 .002

1 .859

152

1 .546

2008

1 .250

670

2009

5.280 5.631

Brigadas Médicas real izadas

40

6 10 13

31 20

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Prevención de VIH y otras enfermedades de trasmisión sexual

La sa lud reproduct iva es otra temática que afecta directamente la ca l idad de vida de muchas mujeres en nuestros sectores de trabajo. La sexual idad responsable, la protección contra enfermedades de transmisión sexual , la distribución democrát ica de roles a l in terior del hogar, son derechos que deben

ser forta lecidos y garant izados independientemente de cualquier condición socia l .

En esta l ínea y siempre en concordancia con el mensaje de la Compañía de Jesús, Hogar de Cristo brinda charlas informativas y controles prevent ivos sobre el S IDA (VIH).

Programas 2007 2008 2009

350 1 .470 670Charlas real izadas

Controles de VIH real izados 800 1 .000 800

Programas de nutrición

La nutrición ha sido asumida como una l ínea de trabajo fundamenta l dentro del proceso de sa lud debido a los a l tos índ ices de desnutrición y obesidad que se observan en los sectores donde hacemos presencia . Estos desequi l ibrios nutriciona les se producen, en a lgunos casos, por carencia de recursos para una a l imentación adecuada, pero, en su gran mayoría , por desconocimiento y hábi tos a l iment icios impropios que deben ser transformados pau lat inamente mediantes programas educativos.

Para impu lsar este t ipo de programas concentramos la atención en dos lugares de atención: cinco consu l torios de sa lud y a lgunas escuelas de la Perimetra l Noroeste de la ciudad.

En los centros de sa lud se admin istra el Programa Naciona l de A l imentación y Nutrición (PANN), promovido por el Min isterio de Salud, que consiste en la entrega de “Mi papi l la” y “Mi bebida” para niños y n iñas menores de cinco años, madres embarazadas y lactantes, y que ayuda a garant izar el derecho a una a l imentación sa ludable en esta población .

Programa PANN 2007 2008 2009

5.913 9.260 8.322Suplemento a niños, n iñas y mujeres embarazadas

Para abordar el problema nutri t ivo en las escuelas, Hogar de Cristo emprendió el “Programa de Salud y Nutrición Escolar” con el cua l se ha logrado incid ir en

la nutrición de los estudiantes, y del cua l presentamos a lgunos resu l tados:

Programa de Salud y Nutrición Escolar 2008 2009

113N iños y n iñas que recibieron revisión médica (Control antropométrico, agudeza visua l y audi t iva)

N iños y n iñas que part iciparon del programa de hig iene bucal 113

N iños y n iñas que recibieron desayuno en las escuelas 400 1 .200

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

1 14

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Nutrición infant i l : derecho ina l ienable

Aunque el Club Rotario nos había donado una máquina para extraer leche del grano de soya, ésta sólo empieza a funcionar después de un diagnóst ico real izado por estudiantes de enfermería de la Universidad de Brigham Young, quienes real izaron exámenes médicos a 806 niños y n iñas de cuatro unidades educativas, ubicadas en la Perimetra l Noroeste, encontrando que 307 niños y n iñas ten ían problemas de desnutrición, es decir el 38,08%. Y más preocupante aún que en más del 57% de esos casos detectaron anemia grave.

Para dar respuesta a esta enorme y desafiante real idad, lanzamos, con ayuda de la Cadena de Farmacias FYBECA, un ambicioso Proyecto l lamado “Vaca Mecánica” cuyo objet ivo era asegurar, de forma efect iva, la producción, d istribución y consumo de al imentos hechos a base de soya, contribuyendo a la a l imentación de niños y n iñas. A través de la Campaña “Con tu vuel to ha vuel to la esperanza” recibimos la sol idaridad de mi les y mi les de ecuatorianos e hicimos real idad este sueño.

Contamos con la asesoría técnica de la EJE, Escuela de Jóvenes Emprendedores de la Pol i técnica Superior del Li tora l , quienes guiaron el proceso de insta lación y funcionamiento de las maquinarias, así como la capaci tación a l personal que produce la leche de soya y sus derivados.

Luego de un t iempo de in iciada la distribución de la leche de soya se real izaron otros controles médicos que demostraron que sólo 84, de los 307 niños, cont inuaban sufriendo de anemia.

Gest ión de los serviciosDurante estos años de trabajo, Hogar de

Cristo ha sido el primer referente en sa lud para mi les de fami l ias de los barrios noroccidenta les de la ciudad de Guayaqui l , gracias a la admin istración de sus siete subcentros de sa lud primaria, brindando atención médica genera l y servicios de laboratorio cl ín ico, además de una variada gama de programas de nutrición, vacunación, control de niños sanos y charlas prevent ivas.

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QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

2008 2009

Nueva Prosperina

Sergio Tora l

Las Iguanas

Balerio Estacio

Lomas de la Florida

Casa del Tigre

Los Mangos

Tota l

2007

4.823 4.5994.916

4.537 4.5915.596

4.572 4.3844.358

3.571 4.0684.220

2.291 3.2133.346

1 .946 2.2431 .760

26.404 28.15529.125

4.664 5.0584.929

Número de consu l tas por subcentro

2008 2009

LaboratorioÓrdenes de exámenes

Número de recetas vendidasFarmacia

Consu l taConsu l tas real izadas

2007

$ 25.286 $ 29.963$ 21 .145

9.297 10.5669.339

$ 33.439 $ 50.854$ 19.226

26.404 28.15529.658

$ 26.404 $ 31 .443$ 23.726

4.842 6.1954.852

Servicios ofrecidos en los subcentros

Ingresos por exámenes

Ingresos por recetas vendidas

Ingresos por consu l tas

Poyectos Inst i tución que Financia Lugares

Banco In teramericano de Desarrol lo

Sa lud In tegra l para Socias de Banca Comunal

Ayuntamiento de Sagunto

Ayuntamiento de Denia

MachalaSalud In tegra l para Socias de Banca Comunal

Sa lud In tegra l para Socias de Banca Comunal

Vía a la Costa, Taura, Puerto Inca, Durán, Playas, Morro, Puerto El Morro, Engabao

Machala

Ayuntamiento de Val ladol id

Sa lud In tegra l para Socias de Banca Comunal

Gobierno Vasco

Diputación de A l icante

QuevedoSalud In tegra l para Socias de Banca Comunal

Sa lud In tegra l para Socias de Banca Comunal Dau le

Dau le y Pedro Carbo

116

Otros Proyectos de Salud ejecutados a lo largo del l i tora l

Nuestro proceso de sa lud también se ha encargado de ejecutar proyectos en otras zonas terri toria les,

por medio de proyectos especí ficos de sa lud orientados a l forta lecimiento de las capacidades loca les. A lgunos de estos proyectos son:

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VIVIENDA SOCIAL Y HÁBITATGarant izar el acceso a una casa para los pobres

de Guayaqui l fue la concepción in icia l de nuestra organización, aunque con el t iempo esta visión se ha ampl iado y redefin ido en función de un Proceso de Cal idad de Vida. La vivienda sigue estando en el centro de nuestras operaciones porque estamos absolutamente comprometidos con la erradicación del défici t habi taciona l del pa ís que l imi ta las opciones de vida digna de tantas fami l ias.

Durante estos 39 años somos la inst i tución socia l pionera en la construcción de casas de caña y madera, y que ofrece una vivienda emergente a mi les de personas víct imas del desastre socia l que nos rodea. En este t iempo hemos colocado, a lo largo de la costa ecuatoriana, más de 170.000 unidades.

En el gráfico observamos que el porcentaje de colocación de viviendas ha crecido, en promedio, el 40,7% cada quinquenio, considerando los datos desde 1972 hasta la fecha.

En los ú l t imos años la tendencia mantiene su nivel creciente; así las colocaciones de 2009 superaron l igeramente a las de 2008 (0.42%), mientras que en el 2008 las entregas se incrementaron el 7.19% en comparación con las de 2007.

Las colocaciones se concentran en Guayaqui l con casi un 60% del tota l de casas, el 40% restante es repart ido entre las siete ciudades del l i tora l .

l(72-76)

ll(77-81)

lll(82-86)

lV(87-91)

V(92-96)

Vl(97-01)

Vll(02-06)

ll(07-011)

0

10.000

20.000

30.000

60.000

50.000

40.000

609 8292.873

8.12412.297

44.334

59.826

54.488

Unidades Colocadas por Quinquenio

* Para est imar el tota l de un idades colocadas a l fina l del ú l t imo

qu inquen io, se h izo una proyección a part i r de las viviendas entregadas

desde el in icio de d icho qu inquen io hasta la fecha de rea l ización del

gráfico (marzo de 2010).

Page 118: Fuegos que encienden otros fuegos

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QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

Número de viviendas entregadas por año y ciudad

COBERTURA

Guayaqui l

Dau le

Machala

Esmera ldas

Yaguachi

Babahoyo

2007 2008 2009

5.396 6.406 6.430

889 730 731

961 976 1 .118

837 759 806

422 448

751 641

Quevedo

Libertad

Manabí

618 623

597 569 354

46 173

Tota les 10.466 11 .277 11 .324

386

793

607

El aumento en número de viviendas adjudicadas conl leva a un incremento en el monto de ingresos por soluciones habitacionales, lo que garantiza la sustentabi l idad de la iniciativa y la posibi l idad de ampl iar las faci l idades de adquisición, así como la donación gratui ta de vivienda a los casos más necesitados. Si en el 2007 recabamos más de $ 5.9 mi l lones de

dólares por concepto de viviendas, esta cifra alcanzó los $ 8.3 mi l lones en el 2008, y en el 2009 la cifra ascendió a $ 9.13 mi l lones. No podemos olvidar que estos montos sólo ingresarán en su total idad a los tres años, tiempo que damos a nuestras socias para ir sufragando el valor de sus viviendas.

118

Guayaquil

Esmeraldas

Yaguachi

Quevedo

Babahoyo

Machala

Daule

57%

6%

4% 3% 2%5%

6%

7%

10%

Colocación de Viviendas por Zona2009

Page 119: Fuegos que encienden otros fuegos

Alcance del programa

Nuestro programa de vivienda es, sin duda, de a l to a lcance por la diversidad de personas que acceden a él , como también por la distribución geográfica de quienes ingresan a l mismo.

A l 31 de diciembre del 2009 se manten ían act ivas 36.021 socias en este programa a lo largo de todo el Li tora l Ecuatoriano, lo que representa unas acreencias vigentes de $ 11 .684.318 dólares.

2007 2008 20090

1.000

2.000

3.000

4.000

5.000

6.000

7.000

8.000

9.000

10.000

5.860.923

8.305.524

9.134.260

Valores para Soluciones Habitacionales

20.000

15.000

10.000

5.000

0

16.677

4.272

2.710 2.3403.280 3.265 2.155

1.202 120

Número de Socias de Vivienda - 2009Total Nacional: 36,021

Page 120: Fuegos que encienden otros fuegos

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QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

Existe el imaginario de que los pobres son irresponsables con sus obl igaciones económicas. Desde nuestra experiencia, en Vivienda y Banca Comunal , podemos afi rmar que los pobres son, por lo genera l , buenos pagadores y muestran un a l to compromiso con las inst i tuciones que les ofrecen apoyo. Brindarles la confianza de entregarles una

casa para que la vayan sufragando mes a mes fomenta el sent ido de responsabi l idad, el compromiso y la sat isfacción personal de sent i rse capaces de responder efect ivamente ante las obl igaciones contra ídas. El cuadro siguiente nos muestra la Tasa de recuperación de estas obl igaciones:

2007 2008 2009

78.66 % 78.27 % 80.99 %Tasa de recuperación de acreencias

Durante el t iempo que dura este proceso, tres años, incent ivamos a las socias para que part icipen de toda la red de servicios que ofrece nuestra inst i tución, contribuyendo así a l mejoramiento de la ca l idad de vida de nuestras socias y sus fami l ias que va mucho más a l lá de la obtención de una casa. Fondo Socia l de vivienda

Hogar de Cristo capta recursos para un Fondo Socia l dedicado a aquel los casos de extrema pobreza que no cuenten con los recursos necesarios para cubrir la tota l idad de los costos de la vivienda.

Este fondo subsid ia tota l o parcia lmente la vivienda, o condona las obl igaciones en casos crí t icos como:

Extrema pobreza. Enfermedad grave o inva l idez de a lgún miembro del hogar. Desastres natura les. Incendio. Muerte del t i tu lar.

E l Fondo Socia l ha contribu ido a garant izar una vivienda emergente a mi les de fami l ias que, dadas sus condiciones de extrema pobreza, veían privadas sus posibi l idades de mejorar en a lgo su ca l idad de vida.

Durante los tres ú l t imos años con este fondo hemos apoyado a un tota l de 6.155 fami l ias.

2007

Tota l

Año Número de viviendas asignadas por el Fondo Socia l

2008

2009

Monto de recursos donados

3.401

6.155

1 .603

1 .151

$ 357.683

$ 1 .225.774

$ 711 .000

$ 2.294.457

Para la asignación de estos subsid ios contamos con un equipo de detección, evaluación y seguimiento que anal iza uno por uno los casos, buscando también

la posibi l idad de vincu lar a la fami l ia a otros de nuestros programas.

120

Page 121: Fuegos que encienden otros fuegos

“Un lugar propio para vivir”

“Me siento contenta por la oportun idad que me da Hogar de Cristo. Antes a lqui laba un cuarto y pagarlo se me dificu l taba porque sufrimos con la enfermedad de mi esposo, a quien le dio un

derrame cerebra l .

Gracias a un amigo fu i a Hogar de Cristo, presenté mi necesidad y hoy me siento contenta porque me donaron una casa. Ahora tengo un lugar donde vivir, a pesar de ser una persona muy pobre, con dos hijos y un esposo con derrame cerebra l por mantener. Trabajo a veces cocinando para poder tener a lgo qué ofrecer a mis h ijos, pero me siento más tranqui la porque a l menos tenemos una casa propia”.

Martha Raquel Quiñones Torres

Comprometidos con la conservación del medio ambiente, hemos comenzado a promover y ut i l izar materia les de aglomerados en los pisos de las viviendas, elaborados por la empresa NOVOPAN del Ecuador S.A . , con el fin de reducir el volumen de madera ut i l izada en la construcción de éstas.

Durante el año 2009 logramos ut i l izar 25% menos de madera para los pisos de las viviendas a l reemplazarlos por aglomerados MDP. A su vez, innovamos con la creación de otros modelos de viviendas hechas casi en su tota l idad con materia les de aglomerados, como las 222 unidades producidas para la Organización “Un techo Para Mi Pa ís” (UTPMP), elaboradas bajo la norma de cal idad CTB-H-V-313.

En ese mismo año fabricamos también capi l las bajo el modelo “Novocaña”, que recupera la caña como elemento de construcción y decoración, permi t iendo la reducción del 40% de madera como materia prima.

Además logramos controlar el desperdicio a l 2.51% lo que produjo un signi ficat ivo ahorro en el uso de nuestra materia prima, debido a la apl icación de las especificaciones y niveles de producción establecidos por un Comité de Cal idad.

La decisión estratégica de ut i l izar productos de materia prima a l ternat ivos, que tengan un manejo sustentable en su origen, ha signi ficado un impacto posi t ivo sobre el medio ambiente, pues se han dejado de emplear aproximadamente 1 .143 metros cúbicos de madera como insumo y hemos favorecido a proveedores que t ienen la Responsabi l idad Socia l dentro de sus objet ivos estratégicos. Esto es sólo el comienzo de un proceso gradual que será prioridad en nuestra agenda para los próximos años.

Innovando en pro del Medio Ambiente

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QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

ECONOMÍA SOLIDARIA

En esta l ínea de trabajo, el programa “Banca Comunal ” es el que evidencia los mayores ind icadores de resu l tados e impactos. Desde su creación, en 2002, se han entregado 152.668 microcrédi tos, que cont inúan en crecimiento, año a año, lo que denota la trascendencia y acogida del Programa.

Este proyecto in ició con tan sólo 2.832 crédi tos, y siete años más tarde, en el 2009, logró la entrega de 31 .635, con crecimiento promedio del 32% anual (entre 2004 y 2008), un excelente registro para un programa de crédi tos enfocados a trabajar con quienes, por lo genera l , se les n iega el acceso a todo t ipo crédi to.

Como podemos apreciar en el cuadro, el programa experimenta una expansión gradual año tras año, sa lvo en 2009, debido a los ya mencionados problemas de l iqu idez que tuvimos.

Para lelamente a l crecimiento de los crédi tos otorgados, el capi ta l colocado también ha experimentado un fuerte incremento a lo largo de los ocho años de vigencia del Programa, mostrando una l igera disminución en el 2009. De todas formas, vemos una tendencia de crecimiento anual del 50% en promedio entre los años 2004 y 2008.

A su vez podemos observar un incremento del número de Bancos Comunales debido a la mayor cobertura en los sectores donde trabajamos. Si se observa el gráfico correspondiente, entre los años 2007 y 2009 el número de bancos creció el 12%, lo que nos ha l levado a forta lecer nuestros equipos de trabajo y ampl iar la programación de capaci tación, seguimiento y evaluación de los mismos.

2007 2008 2009

978 1 .327 1 .097Número de Bancos creados

122

2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009

0

5.000

10.000

15.000

20.000

25.000

30.000

35.000

40.000

2.832

9.838

13.900

21.060

23.947

31.325

39.094

31.635

Número de Créditos Otorgados

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Dónde se ubica nuestro programa

Nuestro programa de Banca Comunal se ha insta lado en varias loca l idades de la costa ecuatoriana, sigu iendo un patrón de cobertura simi lar a l proyecto de vivienda. La idea es que cada equipo del Li tora l pueda brindar este servicio, con el fin de fomentar el emprendimiento en todas las loca l idades, tanto urbanas como rura les.

2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 dic-09

8.000.000

0

1.000.000

2.000.000

3.000.000

4.000.000

5.000.000

6.000.000

7.000.000

240.165

977.235

1.524.350

2.635.270

3.651.630

5.363.783

7.325.5517.133.298

Créditos otorgados en Dólares

Recuperación de Crédi tosLos índ ices de recuperación y morosidad

de los crédi tos ofrecidos permi ten revelar la gest ión admin istrat iva del programa y ofrecen luces de sustentabi l idad en el t iempo, sobre todo en aquel los programas credi t icios que no basan sus sistemas de cobranza en la coerción o la amenaza, sino más bien en el compromiso, la confianza y el trabajo en equipo. Por eso es un orgu l lo para nuestra inst i tución haber mantenido a lo largo de toda la h istoria del programa (2002 - 2009) un promedio de recuperación anual del 99,35% y un promedio de morosidad anual del 0.82%.

2007 2008 2009

100 % 99,69 % 99,60 %Índice de recuperación de crédi tos

0,12 % 1 ,61 % 1 ,62 %Tasa de morosidad

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I ncent ivando la Cul tura del Ahorro

Otro ind icador que nos permi te medir los logros del programa es el porcentaje de ahorro de las socias, toda vez que un aumento de éste puede signi ficar un cambio cua l i ta t ivo en la forma de concebir la admin istración y plani ficación de los recursos, lo cua l ampl ía las posibi l idades de sa l i r de forma gradual de la pobreza.

Nuestras estrategias por in tensi ficar la cu l tura del ahorro ya han tenido impacto, ta l cua l se adelantó en el capí tu lo uno, puesto que el porcentaje de ahorro pasó de 9.44%, a fina les de 2002, a 12.99% en el año 2009, proporción que es l igeramente mayor a l n ivel promedio de ahorro en los ú l t imos cinco años.

Luego de la ca ída en el porcentaje de recuperación de crédi tos en el año 2008 y el aumento de la morosidad, fue necesario dinamizar la in iciat iva y mejorar las metodolog ías de trabajo, otorgando

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

124

0%

2%

4%

6%

8%

10%

12%

14%

2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009

9,44

8,19

11,19

12,6612,06

11,54

12,3512,99

Porcentaje de Ahorro

mayores f lexibi l idades, seguimiento y dedicación a cada uno de los casos, posibi l i tando que 2009 cerrara con buenos ind icadores, como los que observamos en la tabla .

Page 125: Fuegos que encienden otros fuegos

Número de crédi tos

Ahorro

Número de socias vigente

Recuperación de cartera

31 .691

14.459

99.60 %

$ 926.791 dólares

Monto de crédi tos $ 7.133.298 dólares

Cifras 2009

DESARROLLO INSTITUCIONAL El Proceso de Desarrol lo Inst i tuciona l incluye

los procesos estratégicos que contribuyen a l forta lecimiento de la organización, entre los que se encuentran Comunicación Socia l , Proyectos y Captaciones.

Cada uno de estos Procesos es de gran importancia para nosotros, puesto que nos permi ten forta lecer la relación de Hogar de Cristo con su medio y con los diversos grupos de in terés.

Destacamos a lgunos objet ivos transversa les a estos Procesos:

•H a ce rvisi b l esl a sco n d i ci o n esd evi d ad en u es t ra ssocias y sus fami l ias.•Pro p i ci a re la n á l isisyl are f l exi ó nso b rep ro b l e m á t i ca sy pol í t icas socia les que afectan la vida de nuestras socias y sus fami l ias. •Ca p ta rn u eva sfu e n tesd ei n g resos . •Fo rta l ece rl ai m a g e ni ns t i t u ci o n a l .•S is te m a t iza ryd i fu n d i rl ai n fo rm a ci ó nl eva n ta d apo rlas l íneas de trabajo.• G e n e ra r a l i a nza s es t ra tég i ca s q u e co n t ri b u y a n a lcumpl imiento de la misión .

A cont inuación se exponen sucintamente los logros e indicadores más relevantes de estos Procesos en los tres ú l t imos años, a fin de que el lector pueda hacerse una idea genera l del trabajo que se real iza en el los y su evolución durante este período.

Comunicación Socia l

El Proceso de Comunicación Socia l ha sido un pi lar fundamenta l para afianzar la imagen corporat iva y visibi l izar la real idad socia l de los sectores donde trabajamos, lo cua l ha permi t ido atraer nuevos recursos, consol idar a lgunas a l ianzas y comprometer con nuestra misión a diversos actores de la real idad naciona l .

Nuestros mensajes están contextua l izados en hechos reales l lamados a despertar la conciencia socia l a través del aná l isis y la ref lexión, convocando e inci tando a la part icipación act iva de nuestros

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grupos de in terés en el involucramiento y trabajo para la construcción de una sociedad más justa .

Siendo la comunicación socia l una l ínea que impu lsa la in tegración y la relación de los actores socia les y los ta lentos humanos que laboran en la inst i tución, en el 2008 consideramos fundamenta l que se estableciera un Proceso de Comunicaciones como al iado estratégico para nuestros Macroprocesos, y se desvincu la del Proceso de Captaciones para brindar soporte con herramientas comunicaciona les a nivel inst i tuciona l .

Act ividades de Forta lecimiento

Las act ividades del Equipo de Comunicación fueron las sigu ientes:

• Bo l e t í n i n fo rm a t ivo: Ó rg a n o o fi ci a l d e H og a rde Cristo, edi tado cada dos meses y se distribu ía a todos los socios y socias. El t i raje era de 1 .000 ejemplares y su impresión era hecha de manera gratu i ta por Impresores y Asociados.

• Pre nsa escri ta , te l evisi ó n y ra d i o: S u p rod u cci ó ncorresponde a los medios de comunicación masiva, los mismos que se gu ían por nuestros bolet ines de prensa y los recorridos que hacemos con los periodistas por los sectores más pobres, faci l i tando su contacto con nuestros grupos de in terés para que la opin ión públ ica pueda tener acceso, lo más directo posib le, a las necesidades y aspiraciones de estos grupos. N i la prensa escri ta n i la televisión reciben pago alguno por las notas de Hogar de Cristo que entregan a l públ ico.

• M o n i to reo i n fo rm a t ivo: Co n es ta a ct ivi d a dmantenemos informados a cuantos t ienen responsabi l idades en nuestra organización y a nuestros grupos de in terés sobre los hechos not iciosos del pa ís que se relacionan con nuestra act ividad, así como las reseñas, not icias, art ícu los o publ icaciones que se generan en los medios masivos a propósi to de Hogar de Cristo.

• Red iseño e i m plemen tación de la Pág i na enIn ternet: Hemos diseñado una página de al ta cal idad y contenidos como una de las principales estrategias de posicionamiento y de difusión insti tucional . En esta completa página se pueden leer de manera sintetizada algunos de los contenidos de esta publ icación. La dirección es: www.hogardecristo.org.ec

• D ise ñ o d e l Bo l e t í n I n fo rm a t ivo Vi rt u a l cu y olanzamiento fue en abri l de 2010.

Resu l tadosMás que logros cuant i ta t ivos el mayor aporte del

proceso de comunicación lo podemos sistematizar

en haber conseguido posicionar a nuestra inst i tución a nivel naciona l , en gran medida gracias a la ampl ia cobertura de información, apoyo y respaldo a las act ividades socia les real izadas por Hogar de Cristo. En este sent ido, sólo nos cabe agradecer a los medios de comunicación socia l a n ivel naciona l e in ternaciona l : radio, televisión y prensa escri ta que pract ican un periodismo socia lmente responsable, que dan cabida a los di ferentes actores socia les, especia lmente a aquel los que carecen de poder y buscan una oportun idad para ser escuchados e inclu idos en una sociedad que aspira a mayores grados de equidad e in tegración socia l .

PROYECTOSDesde este Proceso se elabora, hace seguimiento

y rinde cuentas sobre proyectos socia les presentados a agencias de cooperación naciona les e in ternaciona les. Su principa l labor es captar recursos por este medio, permi t iendo la sustentabi l idad de los dist in tos procesos generadores de valor.

El Equipo de Proyectos está en el corazón mismo del quehacer organizaciona l y es la segunda fuente de ingresos para la organización después del programa de viviendas, con un fondo de captación promedio anual de $ 1 .679.135. Estos montos van directamente para la ejecución de act ividades, siendo admin istrados por las l íneas de trabajo.

Los proyectos adjudicados durante los años que comprende esta publ icación fueron dest inados principa lmente a las áreas de Banca Comunal , Vivienda, Formación, Capaci tación y Salud, fomentando la promoción de derechos, el forta lecimiento de la ciudadanía, así como capaci taciones en diversos ámbi tos para las poblaciones donde tenemos presencia, en especia l aquel las ubicadas en la zona Noroeste de Guayaqui l .

Todos nuestros proyectos son propuestos con base en nuestra misión y capacidades reales de ejecución, privi leg iándose aquel los orientados a l fomento de procesos de mejoramiento de la ca l idad de vida, así como aquel los que se puedan entrelazar con otros proyectos ya ejecutados, permi t iendo una cont inu idad y sinergia que hagan sustentables los progresos obtenidos.

En este sent ido, trabajamos con dos cri terios de focal ización: hacia ciertas temáticas demandadas por la población, por ejemplo, Banca Comunal , Vivienda, Apoyo Escolar, entre otros, y dirig idos hacia ciertos sectores geográficos donde ya tenemos redes socia les act ivas y un trabajo de larga duración .

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

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Page 127: Fuegos que encienden otros fuegos

Lo anterior no impl ica que no nos in teresemos por explorar nuevas l íneas de trabajo, por el contrario, uno de los desaf íos asumidos por la organización para los próximos años consiste en impu lsar nuevos caminos de trabajo que complementen los ya existentes y que nos permi tan captar nuevos fondos, porque como se aprecia a cont inuación los ingresos por proyectos han disminu ido signi ficat ivamente en los ú l t imos años.

2007 2008

$ 2.863.616 $ 1 .600.067Ingresos por proyectos

14 9Proyectos ejecutados

2008

$ 573.722

6

Este descenso se debe principa lmente a tres variables:

• Red u cci ó n si g n i fi ca t iva d e l eq u i po, po r m o t ivosde económicos.

• Re t i ra d a d e m u ch a s a g e n ci a s d e coo pe ra ci ó n ,debido a l progreso socia l del pa ís y a las crisis financieras en los pa íses cooperantes.

•A use n ci ad eca tá s t ro fesn a t u ra l ese ne lpa ís .

Estas variables impl ican un desaf ío para el Proceso que ha sabido rediseñar sus estrategias para invert i r esta tendencia hacia la baja, permi t iendo seguir dotando de recursos e in iciat ivas a los equipos de trabajo para así seguir superando las di f íci les condiciones de vidas que aún deben enfrentar mi l lones de fami l ias ecuatorianas.

Gestionando la informacióny el conocimiento

Contar con una información fidedigna, oportuna y creíb le es fundamenta l para toda organización en especia l para aquel las que trabajan con poblaciones heterogéneas, vu lneradas y móvi les.

Por el lo creamos la unidad de “Gest ión del Conocimiento” un Proceso encargado de real izar estudios sobre las áreas en las cua les podemos in teractuar, sobre resu l tados e impactos de los programas ejecutados, sobre posib les nuevas l íneas de acción, demandas de las poblaciones afectadas y procesos in ternos de la organización . Sin embargo, por la crisis económica vivida durante el año 2009 este proceso quedó suspendido tempora lmente.

Dada la importancia de este Proceso durante este ú l t imo año se han buscado estrategias para mantener act ivas las contribuciones in iciadas, siendo una de las prioridades para los años venideros volver a establecer un equipo de trabajo en esta l ínea

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Formando A l ianzas La postu lación a proyectos de cooperación

in ternaciona l requiere de un complejo entramado de comunicaciones y relaciones entre las agencias cooperantes y las organizaciones ejecutoras. Para Hogar de Cristo el víncu lo que se debe establecer entre estas dos inst i tuciones, no debe ser exclusivamente funciona l y de in tercambio económico, sino, por el contrario, permi t i r que el cooperante part icipe de los procesos de transformación socia l que financia y que conozca de cerca los beneficios que éstos acarrean.

Para el lo nos hemos esforzado por establecer a l ianzas con Organizaciones No Gubernamenta les ubicadas en los pa íses de los cooperantes, de modo que éstas puedan mediar de forma eficiente en cualquier si tuación que lo demande.

En España, pa ís de donde viene la mayor cant idad de los proyectos de cooperación que ejecutamos, se trabajó mano a mano con la Organización “Vivienda para los Sin Techo” y con otras de gran importancia como es el caso de “Entrecu l turas”.

Estas a l ianzas nos permi ten postu lar a variados proyectos, garant izar a los cooperantes mayor respaldo inst i tuciona l y , fina lmente, retribu ir una mayor cant idad de fondos a programas de mejoramiento de la ca l idad de vida con poblaciones en extrema pobreza. Captaciones

Este equipo de trabajo t iene como responsabi l idad conseguir recursos de empresas y personas natura les por medio de un proceso de concienciación y “fidel ización” con nuestra obra, lo cua l pasa por formar conciencia de lo importante que resu l ta el aporte de múl t ip les actores para la superación de la pobreza y, en especia l , el rol preponderante que puede jugar el mundo privado en esta in iciat iva.

Estas val iosas contribuciones propuestas y

di fundidas bajo el concepto de “Responsabi l idad Socia l Empresaria l ”, demuestran cómo a través de estrategias bien pensadas se puede lograr un beneficio mutuo para las dos partes, logrando un involucramiento real de la empresa y sus empleados con los sectores más desfavorecidos de la sociedad.

Para apoyar este in tercambio se ha diseñado una serie de programas, entre los cua les se destacan:

Uno + Uno: Aporte mensual y voluntario que

se descuenta a las personas que conforman una empresa, vía rol de pago; se le denomina uno + uno

porque la inst i tución aporta el mismo valor captado entre sus colaboradores.

Sol idaridad Estudiant i l : Orientado a recaudar fondos mensuales entre estudiantes de diferentes colegios y el ingreso se dest ina a pagar becas de niños de escasos recursos, así como a capaci tación de profesores de las escuelas con las que trabajamos.

Socios Ind ividua les: Personas que real izan un

aporte económico que se descuenta mensualmente vía tarjeta de crédi to. El monto mín imo de aporte es de $ 3 dólares y el descuento se real iza de manera mensual .

También se denominan Socios Ind ividua les aquel las empresas que deseen aportar a nuestra obra sin necesidad de involucrar a sus colaboradores.

A l ianzas Especia les: Programa dirig ido a aquel las empresas que desean apoyar a lgún proyecto socia l especí fico o cualquiera de nuestras l íneas de trabajo.

Donaciones Esporádicas: Pensado para empresas o personas natura les que deciden aportar a nuestra inst i tución por medio de una donación única.

Como consecuencia de las gest iones de Captaciones, se desarrol laron entre los años 2007 y 2009 una serie de act ividades que contribuyeron directamente a mejorar las condiciones de vida de las personas más vu lneradas, entre las que se destacan:

2007• A po y o co n d o n a ci o n es y su bsi d i os pa rci a l es d eviviendas a 1 .603 fami l ias de escasos recursos a lo largo de todo el l i tora l .• Ce rca d e 2.30 0 pe rso n a s e n t re m uj e res , n i ñ os yniñas fueron favorecidos por las donaciones de los productos de varias empresas. •2.450n i ñ osyn i ñ a sco m p l e ta ro nsua ñ od ees t u d i osgracias a l programa de apoyo escolar y becas parcia les que empresas y unidades educativas forta lecen con su aporte mensual .• Se e n t reg a ro n m á s d e 1 .140 co nj u n tos d e m och i l ae implementos escolares.

2008• A m ed i a d os d e es te a ñ o co n l a Ca d e n a d eFarmacias Fybeca se in icia la implementación de la planta procesadora de leche de soya, que dará origen a l exi toso programa de la “Vaca Mecánica”. • Pi n t u ra s Có n d o r e n t reg ó u n eq u iva l e n te a 1 5viviendas, beneficiando a igua l nuúmero de fami l ias

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

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que sobreviven en extrema pobreza, y no sólo donaron las casas sino que un grupo de empresarios y colaboradores de esta empresa decid ieron compart i r y part icipar de la experiencia del armado de las viviendas entregadas.

2009•LaAsa m bleaN aciona lConsti tu yen tea portó$66.137.41dólares a inicios de ese año, beneficiando así a 97 fami l ias con subsidios parcia les y totales para sus viviendas.

Nuestras A l ianzas Especia les Las a l ianzas especia les const i tuyen una de las

formas más loables de “Responsabi l idad Socia l Empresaria l ” pues van más a l lá de un compromiso meramente económico, a l d iseñarse en conjunto las estrategias de trabajo y a l exig irse el involucramiento de los miembros de las empresas con las fami l ias de los sectores donde trabajamos. Destacamos a cont inuación nuestras a l ianzas especia les más importantes:

FYBECA

“Con tu vuel to ha vuel to mi esperanza”, campaña que está con nosotros desde el año 2005, y que consiste en invi tar a los cl ientes de las di ferentes farmacias Fybeca a donar el vuel to de su compra. Con este aporte a lo largo de 3 años logramos entregar viviendas a las fami l ias más necesi tadas de la costa ecuatoriana.

A mediados del año 2008 Fybeca decide derivar sus fondos a otros proyectos de Hogar de Cristo, y es ah í donde nace la idea de insta lar una planta procesadora de leche de soya que permi t ió l legar, durante el 2009, con colación escolar a 1 .200 niños y n iñas de las escuelas ubicada en los sectores de la Perimetra l Noroeste, contribuyendo así a disminu ir en un a l to porcentaje la desnutrición infant i l .

PACIFICARDEsta empresa colaboró por varios años desde

el programa 1+1 . Sin embargo, en una muestra de compromiso y generosidad se plantearon ir más a l lá y ayudar a amort iguar las devastadoras secuelas que dejó la época inverna l del año 2008, y un grupo de ejecut ivos decid ió entregar un equiva lente a 110 casas para aquel las fami l ias que lo perdieron todo.

Siguiendo en sin ton ía con la inmensa cant idad de necesidades de muchos sectores del pa ís, durante el año 2009 la compañía decid ió trabajar en el plano educativo, apoyando a la Escuela Sebi tas, e in iciaron

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campañas in ternas orientadas a la recolección de ropa y a l imentos para los n iños y n iñas de esta escuela y otras, como Ciudad de Cata luña y el Futuro de Carl i tos, las cua les también fueron beneficiadas con la entrega de út i les escolares para ese período lect ivo.

JOHNSON WAX DEL ECUADOR

Teniendo como motor principa l la preocupación por los n iños y n iñas en si tuación de vu lnerabi l idad, la empresa sostuvo reuniones con nosotros para ver cómo canal izar su ayuda. Sin embargo, el problema quedó resuel to después de una visi ta real izada a los sectores de la Perimetra l Noroeste de Guayaqui l , donde miembros de la empresa quedaron impresionados con las condiciones de precariedad

de la Escuel i ta Sebitas. Su compromiso con la escuela fue total , comprometiéndose con “ la reconstrucción de ésta” con un presupuesto de $ 75.000.00 dólares.

En Abri l del año 2010 se entregó la obra, inaugurándose una escuela idónea para recibir a los n iños y n iñas del sector. Pero el compromiso de el los no termina, y actua lmente estudia dest inar un presupuesto de más de $ 100.000 dólares para incremento de au las de la misma escuela, la creación de un ta l ler para niños especia les y la implementación de áreas recreativas.

Fina lmente, destacamos a lgunos datos que permi ten vis lumbrar la gest ión g lobal del proceso y la cant idad de recursos captados por esta área:

4 2

$ 309.695 $ 466.072

Número de colaboradores del Programa 1 + 1 68 62

Tota l de fondos provenientes del Programa 1 + 1

$ 106.158 $ 146.208Tota l de fondos provenientes del Programa de A l ianzas Especia les

$146.942 $ 172.262

Número de A l ianzas Especia les

Tota l de fondos recaudados

2007 2008

4

$ 466.159

76

$ 128.151

$ 190.064

2009

QUÉ HEMOS LOGRADO.. .

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CUATRO

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Algo nuevo está naciendo en Hogar de Cristo repet ía incesantemente nuestro siempre querido y gratamente recordado Roberto. En efecto, hace años y desde el in terior mismo del Equipo de colaboradores y colaboradoras se ven ían gestando cambios e innovaciones que necesi taban respaldo y canal ización para que pudieran af lorar l ibremente. Y como todo cambio o relevo supone también renovación, desde la Dirección Genera l se ha venido generando espacios para que esas aspiraciones y deseos, muchas veces contenidos, puedan i luminar todo nuestro accionar, manteniéndonos siempre fieles a l espíri tu y amor primigenio de Hogar de Cristo, el servicio a los más pobres, vu lnerables y exclu idos, a las orientaciones para el apostolado socia l de la Compañía de Jesús y a las enseñanzas socia les del Magisterio de la Ig lesia .

Y hemos comenzado a soñar. Mas como decía Dom Hélder Câmara, el Obispo brasi lero “de los pobres”, “Cuando sueñas solo, sólo es un sueño;

Cuest ionar para innovar

Cuest ionarse a sí mismo con un examen profundo de las motivaciones y

modos de actuar fue, sin duda, uno de los mayores legados de Ignacio de

Loyola a todos los que quisiesen ser parte de su mín ima Compañía de Jesús,

puesto que sólo así es posib le cu l t ivar la ind i ferencia, la f lexibi l idad y el ingenio

que se requieren para proceder de la mejor forma en un mundo cambiante

y desafiante.

“No podemos seguir dando respuesta a los problemas de hoy con las

respuestas del ayer”

Pedro Arrupe, ant iguo Superior Genera l de la Compañía de Jesús

“Cuando ten íamos todas las respuestas, nos cambiaron las preguntas”

Ind ígenas Aymara, Región Andina

cuando sueñas con otros, es el comienzo de la real idad”. Sueños colect ivos, decisiones por consenso, d iscern imiento apostól ico común, comienzan a vis lumbrarse y a tomar asiento, para quedarse, en nuestra cu l tura inst i tuciona l .

Somos una organización viva e innovadora, l lena de ganas de trasformar estos 39 años de experiencia en conocimientos fért i les para el d iseño de nuevos enfoques y métodos de acción . Estamos en búsqueda, no nos conformamos con los resu l tados a lcanzados y tenemos conciencia de la gran brecha existente entre la real idad y nuestra visión inst i tuciona l . Hay que seguir trabajando más y de mejor forma para contribu ir a superar, de manera defin i t iva, las estructuras socia les y cu l tura les que reproducen la exclusión y pobreza.

Este ú l t imo capí tu lo es también una invi tación a seguir confiando en nosotros y a encontrar nuevas formas de a l ianzas que permi tan concret izar estas nuevas in iciat ivas.

Estamos viviendo, en Hogar de Cristo, un período de transición y cambios, debidos no sólo a las nuevas orientaciones que se están imprimiendo desde el Equipo de Dirección sino también a los signos de agotamiento de un modelo de gest ión que dio excelentes frutos en su t iempo pero que

necesi tábamos reestructurar. Hemos desarrol lado varias jornadas de revisión de la Planeación Estratégica, inclu ida la Plani ficación Financiera, gracias a l apoyo del Banco de In teramericano de Desarrol lo - BID - y a la Consu l toría de Vicente Urrut ia , las cua les han sido un espacio fért i l para la ref lexión y

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los aprendizajes necesarios para encarar el futuro.

Queremos resa l tar, sin demeri tar otras l íneas que han ido surgiendo en la Planeación Estratégica, dos claras orientaciones que, esperamos, marquen el actuar de nuestra inst i tución en los años venideros: la primera, relacionada con nuestra ident idad y pertenencia a la Compañía de Jesús; la segunda, inspiradora de nuestro quehacer y centrada en el enfoque de rest i tución de derechos.

DESDE LA COMPAÑÍA DE JESÚSLa Congregación Genera l 35, autoridad máxima de

la Compañía de Jesús, celebrada en Roma durante los meses de enero, febrero y marzo de 2008, ha retomado en el Decreto 2° la expresión de A lberto Hurtado, fundador de Hogar de Cristo en Chi le e inspirador de nuestra obra, “un fuego que enciende otros fuegos” para expresar nuestra ident idad como jesui tas y la de nuestras obras. Igua lmente, ha establecido en el Decreto 3°, rat i ficando lo expresado por Congregaciones anteriores, que en este mundo global la misión de todos los jesui tas es “servir la fe, promover la just icia y dia logar con la cu l tura y otras rel ig iones a la luz del mandato apostól ico de establecer relaciones justas con Dios, con los demás y con la creación”.

Las tres íesFieles a este espíri tu y buscando encarnarlo en

su modo de proceder, los Centros Socia les de la Compañía de Jesús han establecido tres íes como característ icas claves que determinan la ident idad de éstos: inserción, invest igación e incidencia .

En una lectura atenta y medi tada del mencionado Decreto 3°, “Desaf íos para nuestra misión hoy - Enviados a las fronteras”, encontramos la riqueza de cada una de estas íes.

Inserción en el mundo de los pobres: En el número 27, el cuerpo de la Compañía expresa: “Nuestro compromiso de ayudar a establecer relaciones justas nos invi ta a mirar el mundo desde la perspect iva de los pobres y marginados, aprendiendo de el los, actuando con el los y a su favor”. Y termina recordándonos que el Santo Padre en su discurso a la Congregación Genera l “nos invi ta a renovar nuestra misión ‘entre los pobres y por los pobres’”.

I nvest igación: Así mismo el apostolado in telectua l y de invest igación nos ofrece “nuevos modos de entender en profundidad los diversos mecanismos

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e interconexiones de los problemas actua les”, afi rma en el numera l 28.

Incidencia: Como directriz también para nuestro apostolado, la Congregación Genera l establece: “La complej idad de los problemas que encaramos y la riqueza de las oportun idades que se nos ofrecen piden que nos comprometamos en tender puentes entre ricos y pobres, estableciendo víncu los en el terreno de la incidencia pol í t ica para la colaboración entre aquel los que detentan el poder pol í t ico y aquel los que encuentran di ficu l tad en hacer oí r sus in tereses”. Ya tendremos oportun idad más adelante de retomar el tema y comenzar a esbozar de qué manera queremos abordarlo en Hogar de Cristo.

Ana l izando todas estas característ icas, humi ldemente hemos de reconocer que estamos lejos de ser un Centro Socia l de la Compañía, y hacemos esfuerzos ingentes para l legar a ser, por ahora, una Obra Socia l , ten iendo siempre como horizonte este ideal .

Cu l t ivando el l iderazgo al est i lo jesui taTodo grupo humano con un mín imo de organización,

y por supuesto de l iderazgo, genera una manera propia de actuar frente a los otros y a l mundo, cambiante frente a las circunstancias pero fiel en sus ra íces.

Chris Lowney, conocedor del modo de proceder de la Compañía de Jesús, se pregunta sobre qué hizo posib le que la Compañía que en 1540 fundaron diez hombres sin capi ta l , n i plan de negocios, l legase a ser la más inf luyente del mundo. ¿Cómo fue esto posib le? ¿Por qué triunfaron y siguen triunfando los jesui tas, cuando tantas otras compañías y organizaciones hace t iempo cayeron derrotadas? Por su est i lo de l iderazgo, se responde y así lo escribe en el año 2003 en su l ibro “El Liderazgo a l est i lo de los Jesui tas”.

Este fue el secreto de su éxi to, según Lowney, quien reconoce que lo que separa a los ganadores de los perdedores, es el l iderazgo. Las organizaciones ganadoras son aquel las cuyos colaboradores pueden asumir riesgos e innovar, trabajar armónicamente en equipo y motivar a sus colegas, capaces de hacer frente a l cambio y, además, impu lsarlo.

Todos somos l íderes y toda nuestra vida está l lena de oportun idades de l iderazgo. Podemos ser l íderes en todo lo que hacemos: en el trabajo y en la vida diaria , cuando enseñamos y cuando aprendemos de los demás. La fórmula de éxi to para abordar las oportun idades del mundo real con estrategias de l iderazgo, decía Ignacio de Loyola, es la sigu iente:

“trabaja como si el éxi to dependiera de tu propio esfuerzo, pero conf ía como si todo dependiera de Dios”.

¿Pero cuá les son los componentes del l iderazgo a l est i lo de los Jesui tas? ¿Cuáles son las característ icas que hacen destacar a estos l íderes? ¿Cuáles son por tanto las virtudes que nos esforzaremos en cu l t ivar en nuestros ta lentos humanos? Aqu í una pequeña sín tesis de lo que Lowney l lama los cuatro secretos de los jesui tas:

1) Conocerse a sí mismoSólo quien se atreve a conocerse a sí mismo y

reconocer sus propias l imi taciones, puede superarlas y buscar enérgicamente lo que quiere. Los Ejercicios, una semana de in tensa concentración in terior, son precisamente para eso: tomar consciencia de sí mismo y ordenar la vida, entendiéndose como alguien que está en permanente construcción y búsqueda de lo que Dios propone para su vida. Una semana que los jesui tas hacen cada año para revi ta l izar su compromiso centra l y evaluar su rendimiento durante el año anterior. Además, los jesui tas se forman el hábi to de cont inuo aprendizaje y de medi tación diaria sobre sus act ividades. Estas técnicas siguen siendo pert inentes hoy, precisamente porque se diseñaron para que los ind ividuos muy ocupados “ref lexionen sobre la marcha”. La invest igación moderna sugiere que el cociente in telectua l y las habi l idades técnicas son mucho menos importantes para un l iderazgo de éxi to que un maduro conocimiento de uno mismo.

2) IngenioLos l íderes se ubican y ayudan a los demás a

ubicarse en un mundo cambiante. Exploran nuevas ideas, métodos y cu l turas en vez de mantenerse a la defensiva ante lo que pueda esperarles a la vuel ta de la esquina. Afi rmándose en principios no negociables, cu l t ivan la “ind i ferencia” que les permi te adaptarse sin temor. Los ejercicios espiri tua les infunden “ind i ferencia”, o sea, desapego a lugares y posesiones, porque lo contrario puede dar por resu l tado indebida resistencia a l movimiento y a l cambio. Un l íder t iene que despojarse de hábi tos arra igados, preju icios, preferencias cu l tura les y abandonar esa act i tud de “así es como lo hemos hecho siempre”. Las creencias básicas no son negociables. El l íder se adapta confiadamente a los nuevos entornos, sabiendo qué es y qué no es negociable.

3) AmorLos l íderes se enfrentan a l mundo l lenos de

confianza, con un sent ido claro de su propio valer

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como individuos dotados de ta lentos, d ignidad y potencia l para dirig i r. Encuentran esos mismos atributos en otras personas y se comprometen resuel tamente a honrar y l iberar el potencia l que perciben en sí mismos y en los demás. Crean ambientes rodeados y act ivados por la lea l tad, el afecto y el apoyo mutuo. Sus equipos están unidos por lazos de afecto y lea l tad, no minados por tra iciones ni crí t icas. Los ind ividuos dan lo mejor de sí cuando se los respeta, se los est ima y conf ía en el los a lguien que genuinamente se in terese por su bienestar. Loyola no ten ía miedo de l lamar a este conjunto de act i tudes: “amor”.

4) HeroísmoLos l íderes imaginan un futuro inspirador y se

esfuerzan por darle forma, en vez de permanecer pasivos a la espera de lo que tra iga el futuro. No existe un botón eléctrico para motivar; o, más bien, sí hay una especie de botón, pero está en el in terior de cada uno. Sólo el ind ividuo puede motivarse a sí mismo. La consigna es simple: “Magis” que equiva le a Más. Se trata de buscar la más a l ta ca l idad, poner el esfuerzo tota l del equipo a l servicio de a lgo que es más grande que cualquier ind ividuo.

Resumiendo: ¿Cómo l legan los ind ividuos a ser l íderes hoy? Conociéndose a sí mismos. Innovando para ubicarse en un mundo cambiante. Amando al prój imo. Apuntando muy a l to y más lejos. No son cuatro técnicas sino cuatro principios. Su poder real no reside en la simple suma de sus partes sino en lo que resu l ta cuando esos cuatro principios se refuerzan recíprocamente en una vida in tegrada.

Ahora, ¿cómo lograr este est i lo de l iderazgo en Hogar de Cristo? Hay ya un camino recorrido que debemos forta lecer, compart iendo con los colaboradores y las colaboradoras nuestra espiri tua l idad, cuya fuente y esencia son los Ejercicios Espiri tua les, a fin de profundizar en el sent ido de una visión común y en la unidad de la misión, ta l como expresa la misma Congregación Genera l 35 en el Decreto 6°, “Colaboración en el corazón de la misión”

Incidencia Pol í t icaLa Incidencia Pol í t ica es un proceso donde se replantean las relaciones de poder entre la sociedad y el Estado, proponiendo espacios donde la poblaciónmás vu lnerable part icipa con voz y voto en espacios públ icos, tanto para exponer sus demandas como para forta lecer los procesos organizat ivos. En defin i t iva lo que se pretende es que a través de el la los ciudadanos, actores socia les, económicos e inst i tuciona les, part icipen o inf luyan en la formulación, gest ión y control de pol í t icas públ icas, privadas

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o gremia les. Es una forma de generar cambios estructura les en las condiciones económicas, pol í t icas, socia les y cu l tura les que producen tanta pobreza, vu lnerabi l idad y exclusión .

Tender puentes, nuevo modode hacer pol í t ica

Luis Távara Mart ín , Di rector Socia l

Hace a lgo más de un año los jesui tas l legaron a una sorprendente decisión: la Compañía de Jesús debe comprometerse a “tender puentes entre ricos y pobres, estableciendo víncu los en el terreno de la incidencia pol í t ica”.

¿Qué pensaría de esto San Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía? ¿Qué dir ía a los jesui tas de hoy? Este santo, capaz de encontrar a Dios en todas las cosas, vio claramente con sus compañeros la necesidad de “ l legar a las personas si tuadas en las fronteras y en el centro de la sociedad” . Es decir que entend ía que no se pueden solucionar los grandes problemas de la humanidad a l margen de la pol í t ica .

En otras palabras, aquel lo que hoy conocemos como “incidencia pol í t ica”, era a lgo claramente procurado por San Ignacio y luego por la Compañía de Jesús, con la sigu iente in tención: transformar las estructuras socia les, pol í t icas, económicas, así como la cu l tura que generan injust icia y exclusión . ¿Dónde se ven estas estructuras? Pues en las pol í t icas públ icas, en las leyes, en las práct icas de las ent idades públ icas y privadas, en las ideas que las sost ienen, en las act i tudes, en las relaciones de poder.

Hoy, cuando nuestros Obispos lat inoamericanos nos dicen que vivimos en injustas estructuras de pecado que producen ricos cada vez más ricos a costa de pobres cada vez más pobres , t iene sent ido este asunto ignaciano de la incidencia, que signi fica, en lo fundamenta l , la estrategia de “tender puentes entre ricos y pobres, estableciendo víncu los en el terreno de la incidencia pol í t ica, para la colaboración entre aquel los que detentan el poder pol í t ico y aquel los que se encuentran en di ficu l tad de hacer oí r sus in tereses” .

Pero ¿qué t iene que ver esto con nuestra ident idad de crist ianos? ¿Y cómo podríamos tender esos puentes, siendo real istas?

De repente nos sorprenderá enterarnos que el Papa Benedicto XVI ha manifestado en diversas ocasiones la necesidad y la urgencia de un compromiso renovado de los catól icos en la vida pol í t ica .

Hace apenas un mes que se reunió en Roma el Pont i ficio Consejo para los Laicos para tratar el tema: “Test igos de Cristo en la comunidad pol í t ica”. Como dir ía el viejo cánt ico, “ la Ig lesia en marcha está, a un mundo nuevo vamos ya”. La in iciat iva tomada por los jesui tas reenfocando la acción pol í t ica como incidencia, como tender puentes que pongan en contacto a los pobres y exclu idos con los que t ienen el poder pol í t ico, coincide con la preocupación del Vaticano para que los la icos y la icas se comprometan con la acción pol í t ica .

Tender esos puentes, en real idad, se trata de reforzar la capacidad de las personas para part icipar y decid ir. Se trata de empoderar, es decir, de abrir canales de part icipación a los pobres, vu lnerables y exclu idos, en las decisiones que les afectan. De crear ciudadanía, de generar inst i tuciones y relaciones más responsables y equi tat ivas. Se trata de reconci l iar a quienes se encuentran enfrentados. Se trata de dejar el viejo caniba l ismo al que estamos tan acostumbrados en pol í t ica, para hacer surgir en nuestros corazones el deseo profundo por el bien común, para todas y para todos.

1 Dicho por los propios Jesu i tas en su Congregación Genera l 35,

Nº 15

2 Ver documentos de los Obispos la t inoamericanos en Medel l í n ,

Puebla , Santo Domingo, Aparecida.

3 Congregación Genera l 35, Decreto 3, N° 28.

4 Comunicado del Pont i f ic io Consejo para los La icos, del 20 de

mayo 2010, en Roma, durante su XXIV Asamblea Plenaria sobre el

tema: “Test igos de Cristo en la comunidad pol í t ica”.

Trabajo en RedesAsí como necesi tamos tender puentes para

conseguir transformaciones estructura les, es importante también que unamos esfuerzos, corazones y voluntades en torno a quienes más sufren, buscando no sólo caminar con el los hacia mejores condiciones para sus proyectos de vida sino procurando también a l iviar las di f íci les si tuaciones que padecen.

En estos primeros pasos que estamos dando, queremos vincu larnos especia lmente con el trabajo socia l de los jesui tas, y lo estamos haciendo con nuestra part icipación en la Red de Centros Socia les de la Compañía de Jesús en América Lat ina y el Caribe, haciendo parte también del Programa de Incidencia Pol í t ica .

Estamos preocupándonos así mismo por el establecimiento de A l ianzas con Inst i tuciones Públ icas y Privadas que nos permi tan optimizar no

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simplemente los recursos económicos sino también la magni tud y el impacto de nuestras acciones. A l ianzas con ent idades del Estado en áreas sensib les como educación, sa lud, erradicación de la vio lencia fami l iar, inclusión económica y socia l nos han permi t ido ampl iar la cobertura de nuestros servicios y comprometer a l Estado en el cumpl imiento de sus deberes const i tuciona les.

A n ivel de a l ianzas con ent idades del ámbi to privado, muchas de el las han sido ya expuestas en apartados anteriores y otras están fraguándose o en proceso de consol idación . Sin embargo, hoy queremos destacar la que hemos establecido para la Cena de Pan y Vino.

Tomando como ejemplo la que se desarrol la en Hogar de Cristo en Chi le, que ya l legó a su vigésima edición, hemos adaptado a nuestra real idad esta in iciat iva que busca recabar fondos para servir a

las personas en extrema si tuación de vu lnerabi l idad. Son insuficientes los recursos ante tanta necesidad y dolor, sin embargo ya vamos para nuestra tercera real ización . Hemos querido impu lsar el compromiso ét ico y crist iano de sol idaridad con quienes más sufren bajo el lema “encender una luz en medio de la oscuridad socia l es sol idaridad” que nos invi ta a ref lexionar y actuar en concordancia . Para el lo themos hecho una a l ianza con Crédi tos Económicos que, bajo el sent ido de Responsabi l idad Socia l Empresaria l , ha decid ido apoyar ingentemente este esfuerzo. Y estamos abierto a otras a l ianzas en este ámbi to o en otros simi lares. No podemos dejar de mencionar la gran acogida que estamos recibiendo en éste y otros empeños, y agradecemos de corazón todos los apoyos, conscientes de que lo que “hagamos con uno de estos más pequeños, lo hacemos con el Señor”.

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DESDE LA RESTITUCIÓN DE DERECHOS

Para nosotros como Hogar de Cristo, sigu iendo las directrices de la Congregación Genera l 35, “ser enviados a las fronteras” sign i fica si tuarse en los lugares de mayor vu lnerabi l idad y pobreza, en donde se agolpa un gran número de personas exclu idas tota lmente de los beneficios y servicios de nuestra sociedad. Estas fronteras se contradicen con las bel las const i tuciones naciona les y tratados in ternaciona les que garant izan derechos “un iversa les” e “ina l ienables” a todas las personas, pues sabemos que en la real idad de nuestros pa íses estas declaraciones aún están lejos ser real idad.

Surge, entonces, la necesidad de si tuarnos desde el “enfoque de derechos”, que signi fica estar dispuesto a desarrol lar todo t ipo de estrategias que apunten a la rest i tución y universa l ización de éstos, muchas veces de manera directa y otras de manera indirecta, como voz de los oprimidos, asumiendo el desaf ío de no descansar hasta ver rest i tu idos todos los derechos de quienes viven en nuestro pa ís .

Asumir un enfoque de derechos signi fica un cambio cua l i ta t ivo, ya que no se trabaja por sat isfacer una necesidad determinada (vivienda, sa lud, a l imentación), sino por devolver un derecho que toda persona debiese estar ya disfrutando. En este sent ido, se deja de hacer asistencia l ismo y se entra a hacer just icia , a cuest ionar las estructuras socia les profundas que impiden que estos derechos se materia l icen. Nuestro accionar deja de just i f icarse en un bien mora l o a l tru ista y pasa a just i f icarse en un deber ser, en un trabajo de rest i tución de una deuda.

Colocarnos desde esta perspect iva nos ha permi t ido visua l izar nuevas l íneas de acción, que han dado paso a importantes proyectos fundamenta les para quienes históricamente han sido exclu idos de los bienes de la sociedad y, por ende, vu lnerados en sus derechos. Enumeramos sólo a lgunas l íneas para no hacernos tediosos y dejar temas pendientes para futuras ref lexiones y anál isis .

Derecho a la A l imentaciónEl derecho a la a l imentación es un derecho humano

fundamenta l , asociado directa y priori tariamente a l derecho a la vida, pero también a otros derechos como la sa lud, el trabajo, etc. , ten iendo en cuenta que los derechos civi les, cu l tura les, económicos, pol í t icos, socia les y ambienta les se consideran in terdependientes, in terrelacionados, ind ivisib les y de igua l importancia . No se trata sólo de no padecer hambre, sino más bien del derecho de toda persona

a tener la capacidad de acceder en todo momento a a l imentos sanos, suficientes y adecuados para l levar una vida sa ludable y act iva; es decir, para disfrutar un “buen vivir”.

E l derecho a la a l imentación es a lgo más que una declaración de principios, acuerdos y tratados. Actua lmente casi todo el mundo está lejos de garant izar este derecho a todos sus habi tantes y la si tuación de hambre es cada vez más a larmante: cerca de nueve mi l lones de personas, entre el la seis mi l lones de niños menores de cinco años, mueren prematuramente cada año como consecuencia de la fa l ta de a l imentos.

El hambre no termina y, a pesar de ser una de las Metas del Mi len io erradicar el hambre, la desnutrición avanza, la sa lud humana se deteriora como consecuencia de una a l imentación precaria que no es adecuada ni suficiente. En nuestro pa ís el problema de acceso a una a l imentación de cal idad, como derecho, sigue sin estar resuel to para importantes sectores, debido, en gran medida, a la inestabi l idad económica que produce a l tos n iveles de desempleo, inf lación y bajos sa larios, haciendo que el poder adquisi t ivo real de las fami l ias disminuya drást icamente. Sólo en el año 2009, la reducción de puestos de trabajo perjudicó a 220.600 personas y la inf lación cerró en el 4,31%. El sa lario mín imo, a su vez, si bien percibió un incremento del 9,2% ubicándose en $ 240 en el año 2010, no a lcanza para la mantención de fami l ias numerosas de más de 4 miembros como las existentes en nuestros sectores de trabajo, y más teniendo en cuenta que el INEC (Inst i tu to Naciona l de Estad íst icas y Censo) ubica la canasta básica de productos en $ 528,90 dólares.

Esto podría expl icar, por ejemplo, por qué según un estudio de nuestro programa de sa lud el 70% de menores de doce años padece algún grado de desnutrición y sus condiciones a l iment icias son preocupantes. La muestra evidencia además que el 56% de niños en edad escolar padece de desnutrición y el 22% presenta anemias graves.

Como respuesta a esta necesidad evidente, aunque no siempre percatada por las poblaciones afectadas, nace en febrero del 2010 la in iciat iva t i tu lada “La Canasta de Rosi ta” con el objeto de aportar en el cubrimiento de las necesidades básicas a l iment icias de nuestros grupos de in terés, en especia l las de nuestras socias y sus fami l ias.

La propuesta se sustenta en la implementación de un modelo de comercia l ización asociat ivo de productos de cal idad, cant idad y precio justo, que no busca la generación de ut i l idades sino el cubrimiento

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de los costos de operación y que se acople a las necesidades y demandas de las fami l ias. El objet ivo principa l de la in iciat iva, que todavía se encuentra en fase in icia l y de ajustes, es “rest i tu i r el derecho a la sa lud y a la a l imentación sana, segura y soberana de las fami l ias de las socias, colaboradores y voluntarios de Hogar de Cristo, especia lmente en la zona noroeste de Guayaqui l y sectores más vu lnerables de la ciudad”.

Queremos destacar también aqu í la gran in iciat iva de la Arquid iócesis de Guayaqui l , la Asociación Crist iana de Empresarios - ACE - y de la Cámara de Comercio de crear un Banco de A l imentos en Guayaqui l que brinde la posibi l idad a organizaciones comuni tarias de tener acceso a a l imentos sanos y económicos para la nutrición de personas en si tuación de pobreza y vu lnerabi l idad.

Derecho a tener un futuro - Jóvenes Emprendedores

Desde el enfoque de derechos, los y las jóvenes son concebidos como actores estratégicos y garantes de ciudadanía, con capacidades y derechos para in tervenir protagónicamente en su presente, constru ir democrát ica y part icipat ivamente su ca l idad de vida y aportar a l bienestar colect ivo. Para el lo es ind ispensable garant izarles las condiciones y oportun idades necesarias para su in tegración plena en la sociedad: que quién desee estudiar encuentre las condiciones para hacerlo, que quien quiera trabajar no sea discriminado y goce de todas las garant ías labora les, que quien quiera expresar su vocación musica l no sea discriminado por su vest imenta, etc.

Sin embargo, las condiciones de vida de mi les de jóvenes de nuestros barrios populares y margina les de Guayaqui l y de todo el l i tora l ecuatoriano nos recuerdan a menudo que estas oportun idades están lejos de garant izarse y que, por el contrario, la pobreza, la fa l ta de oportun idades, el abandono de padres y madres, el frecuente mal trato en el seno de las fami l ias, la discriminación y la exclusión socia l , la necesidad de trabajar desde temprana edad para contribu ir a l escaso ingreso fami l iar, son factores que más bien terminan obstacu l izando el desarrol lo de la personal idad y ext inguiendo esta etapa de la vida.

A lgunas ci fras evidencian que incluso éste sería el segmento poblaciona l más abandonado por la oferta públ ica y con escasas oportun idades de acceder a formas incipientes de autosustento, toda una contradicción con aquel la visón pol í t ica de los jóvenes como el futuro de la patria . Según el INEC, la población adolescente (entre 10 y 17 años) es

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al tamente vu lnerable: de los 2.150.000 existentes en Ecuador, el 38% trabaja, 54% estudia y el 9% no real iza n inguna act ividad. Y del grupo que se encuentra trabajando, el 3% de el los vive y trabaja en las ca l les.

Por eso, desde Febrero del 2008 se in iciaron a lgunas negociaciones para poner en marcha un programa dirig ido a “jóvenes emprendedores” que estuviesen in teresados en in iciar pequeñas in iciat ivas económicas, bajo el auspicio de la Xunta de Gal icia y Entrecu l turas. Este proceso de 19 meses de duración fue dirig ido a 100 jóvenes, hombres y mujeres entre 16 y 25 años que vivieran en las comunidades de la Perimetra l Norte de Guayaqui l , esperando que 50 de el los y el las hubieran generado 50 fuentes de autoempleo, a través de las microempresas en el sexto mes de in icio del proyecto.

ImplementaciónEl proyecto se coordina desde las oficinas de la

inst i tución, bajo la supervisión de dos profesiona les

y una voluntaria , e incluye un proceso in tegra l de acompañamiento desde el primer d ía de trabajo. El proyecto está estructurado en varias etapas y los y las jóvenes que deseen part icipar en él t ienen que pasar por cada una de el las. Estas etapas son:

1) Convocatoria .2) Selección .3) Capaci tación .4) Caja de Herramientas.5) Adjudicación de Crédi tos.6) Acompañamiento (Seguimiento a l Proyecto de Vida y a l pequeño negocio).

A lgunos indicadoresEl proyecto ha tenido buena acogida entre los y

las jóvenes del sector, y hasta el momento presenta buenos ind icadores de gest ión y resu l tados, a pesar de pagar el precio de ser una experiencia pi loto donde hemos tenido que aprender sobre la marcha.

A cont inuación presentamos a lgunos ind icadores económicos del programa:

Hasta el mes de Ju l io, la tasa de morosidad era de 9,65% pero con tendencia a la baja. A esas fecha había sólo 14 jóvenes que se encontraban en morosidad de los 55 que estaban act ivos, y de todos el los solamente 4 manifestaron no querer un segundo ciclo por ingresar a un trabajo formal , de lo que se deduce el a l to grado de aceptación que ha tenido la propuesta.

El desaf ío ahora es transformar este proyecto pi loto en un programa inst i tuciona l , incorporándolo directamente a l Programa de Banca Comunal y asegurar su sustentabi l idad financiera. Es crucia l rest i tu i r el derecho de estos jóvenes y posicionarlos como actores fundamenta les dentro de la sociedad.

Parámetro

Jóvenes con crédi to

Jóvenes sin crédi to

Crédi tos por otorgar

Valores por recuperar

Montos colocados

Número de Promotores

Morosidad

Tota l

40

4

15

$ 1 .597.35

9.65%

$ 16.550

1er. Grupo

8

3

3

$ 466.60

7.91%

$ 5.900

2do. Grupo

6

1

3

$ 543.25

15.75%

$ 3.450

Por entregar

15

$ 3.550

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Los niños y n iñas t ienen derecho a una infancia segura, fel iz y real izada. No obstante, aquel los n iños y n iñas que viven en si tuación de riesgo socia l pasan por real idades que difieren de lo que precisan.

¿Qué pasa con los n iños, n iñas y adolescentes que se encuentran en esta si tuación y cuyos derechos son vu lnerados? Sin duda alguna sufren una doble desventaja por las fuertes correlaciones que hay entre la pobreza, el sufrimiento y la tragedia que envuelve sus vidas.

Los derechos a la infancia son mundia lmente reconocidos y forman parte de todo estado democrát ico. Estos derechos son ina l ienables e irrenunciables. Así lo consagran la Declaración y Convención de los Derechos de la N iñez. En Ecuador existen muchas instancias art icu ladas que han sido creadas, así como pol í t icas de Estado para velar por el cumpl imiento de estos derechos; así tenemos a l INFA como organismo rector de pol í t icas dirig idas a los n iños, n iñas y adolescentes. También existe a nivel de Gobierno Local (Municipio) el Consejo Cantonal de la N iñez y Adolescencia, como instancia para promover el cumpl imiento de pol í t icas socia les y de protección . Lamentablemente, en la práct ica, estos derechos se ven sistemáticamente vu lnerados, poniendo en grave detrimento el desarrol lo de la n iñez y adolescencia ecuatoriana.

Trabajo infant i l en ci frasEl trabajo infant i l se presenta como uno de los

mayores f lagelos en materia de vu lneración de los derechos de la infancia . He aquí a lgunas ci fras naciona les que revelan la problemática:

• 662.664 n i ñ os , n i ñ a s y a d o l esce n tes , e n t re 5 y 17años, están en si tuación de trabajo infant i l en el pa ís .

•El45%d et ra baj oi n fa n t i lsee n cu e n t rae ne lg ru pode edades entre 15 a 17 años, el 31% entre 12 y 14 años y el 25% entre 5 y 11 años.

•De lto ta ld en i ñ os ,n i ñ a sya d o l esce n test ra baj a d o resel 65.28% asisten a clases y el 34.72% no asisten . Las razones para su inasistencia: el 53% por fa l ta de recursos económicos y el 24% por trabajo. Comparando los datos INEC 2001 con los del 2006 se observa una disminución del trabajo infant i l aunque insuficiente. De 779.000 casos en el 2001 se reduce a 662.664 en el 2006 siempre hablando de niñas, n iños y adolescentes de entre los 5 y 17 años.

Juntos para prevenir y erradicar el Trabajo Infant i l pel igroso en el pa ís

Para combatir esta problemática, el programa Proniño de Fundación Telefónica – Movistar y Corporación Viviendas de Hogar de Cristo in iciaron en diciembre de 2009 el proyecto A l to Impacto con el objet ivo de apoyar un proceso naciona l de prevención y erradicación del trabajo infant i l , especia lmente en lo que respecta a trabajos pel igrosos en el sector urbano, según lo establece el art ícu lo 3, l i tera l d, del Convenio 182 de la OIT:

d) el trabajo que, por su natura leza o por las condiciones en que se l leva a cabo, es probable que dañe la sa lud, la seguridad o la mora l idad de los n iños.

Corporación Viviendas Hogar de Cristo, organización comprometida con el desarrol lo humano sustentable, forta leció su eje educativo a l asumir este nuevo reto propuesto por Fundación Telefónica para conseguir el desarrol lo socio-educativo de los n iños, n iñas y adolescentes trabajadores, a través de becas de sostenimiento educativo, modal idades de horario extendido, refuerzo escolar, incorporación de las Tecnolog ías de la Información y Comunicación (TIC) en las au las y desarrol lo de campamentos vacaciona les.

Implementación del proyectoLa meta naciona l que Fundación Telefónica se ha

planteado para el año 2010 es de 33.000 niños, n iñas y adolescentes. Mediante convenio de colaboración in terinst i tuciona l Hogar de Cristo asumió el compromiso de real izar un proceso de prevención y erradicación del trabajo infant i l pel igroso con 6.400 niños, n iñas y adolescentes. Para la implementación del proyecto Hogar de Cristo ha conformado un equipo de 15 promotores de campo, un supervisor técnico, un asistente pedagógico, una asistente admin istrat iva, una coordinadora, un anal ista de proyectos y apoyo de acuerdo a los requerimientos de una sicóloga y una abogada.

Los 6.400 niños, n iñas y adolescentes han sido focal izados en 21 escuelas y 3 colegios de la zona Noroeste de Guayaqui l y de a lgunas comunidades rura les ubicadas en el ki lómetro 30 vía la Costa. En el proyecto part icipan actua lmente niños y n iñas de 5 a 12 años y de 13 a 17 años, con una inversión anual de $ 613.457.50.

144

Derecho a la Infancia: Proyecto “A l to Impacto” Fundación Telefónica - Movistar y Hogar de Cristo.

Page 145: Fuegos que encienden otros fuegos

En este cuadro nos referimos a primeros resu l tados porque se trata del primer año de implementación del proyecto. La erradicación del trabajo infant i l es un proceso a largo plazo a l igua l que la a l ianza Hogar de Cristo - Fundación Telefónica; por lo tanto, consideramos que la incidencia rea l de este proyecto la podremos medir y socia l izar dentro de un par de años.

Los niños y n iñas son el futuro de la Patria , S Í . Esta afi rmación debe ser asumida por todos y todas con mucha responsabi l idad. Fel ici tamos a Fundación Telefónica por actuar de manera responsable y agradecemos la confianza que ha deposi tado en Hogar de Cristo para ejecutar planes y proyectos educativos especia les a favor de nuestros n iños y n iñas de zonas de exclusión socia l y en riesgo de trabajo infant i l .

145

Componentes y primeros resu l tados del proyecto

COMPONENTES

Escolarización

6.400 niños, n iñas y adolescentes permanecen en

el sistema educativo a través de una estrategia

de apoyo escolar (Becas, út i les escolares, atención

médica, apoyo psicólogico).

Educación Complementaria

2.143 N iños, n iñas de 17 escuelas, desarrol lan

destrezas, habi l idades y conocimientos, mejorando

así su desempeño en escolar, a través de su

part icipación en act ividades de refuerzo escolar.

Transformación de patrones

cu l tura les

5.000 niños, n iñas y adolescentes conocen

sobre sus derechos y part icipan en act ividades

recreativas y campamentos vacaciona les, logrando

que se mantengan fuera del trabajo infant i l .

RESULTADOS

Page 146: Fuegos que encienden otros fuegos

Derecho a la Vivienda yal Hábi tat Sa ludables

Una vez ha pasado el efecto inmediato de un desastre natura l , y pensemos en terremotos, inundaciones, avalanchas, incendios de grandes proporciones, una de las preocupaciones de autoridades, organismos de socorro y personas de buena voluntad es brindar un refugio o a lbergue a las víct imas que han sobrevivido a la catástrofe. Podríamos decir que a lo largo de estos 39 años de existencia Hogar de Cristo ha estado ofreciendo, con sus casas de madera y caña, un a lbergue a mi les de personas víct imas del desastre socia l que los obl iga a migrar o a desplazarse, forzadamente en la mayoría de los casos, a la peri feria de las grandes ciudades en búsqueda de oportun idades.

Y así como posteriormente a los desastres naturales, para continuar con el sími l , se trazan planes y proyectos para la reconstrucción, entre muchos otros aspectos, de un hábitat digno para todas las víctimas, en Hogar de Cristo siempre hemos no sólo guardado la esperanza sino también hecho esfuerzos para que nuestras socias y sus fami l ias tengan una vivienda mejor. Hemos visto y compartido la alegría de muchas fami l ias cuando, con sus ahorros y sacrificios, logran tener un hábitat mejor.

Durante los dos ú l t imos años, con el apoyo económico del Ayuntamiento de Gand ía y la colaboración de la organización española “Vivienda para los sin techo”, estamos dando en fi rme los pasos para la const i tución de un “Banco de Materia les” en Guayaqui l . Queremos que éste sea un “colector de sol idaridad socia l ” que permi ta a las empresas productoras y comercia l izadoras de materia les de construcción y a las mismas constructoras apoyar decid idamente los esfuerzos que vienen haciendo muchas fami l ias para ir mejorando progresivamente su vivienda a part i r del a lbergue o refugio que les ha faci l i tado Hogar de Cristo. También pueden asociarse a esta in iciat iva todas aquel las personas que deseen contribu ir con su sol idaridad para que muchas fami l ias en si tuación de pobreza, vu lnerabi l idad y exclusión puedan disfrutar de este derecho fundamenta l .

Queda pendiente la tarea de trabajar por el hábi tat sa ludable, tema que se viene trabajando en el Contrato Socia l por la Vivienda, colect ivo del cua l hacemos parte y desde donde hacemos un l lamado a organismos gubernamenta les e inst i tuciones de la sociedad civi l para que trabajemos juntos en el mejoramiento de las condiciones de los asentamientos informales que encontramos en nuestro pa ís .

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Para terminarSólo nos resta decir que solos no podemos hacer real idad todos estos sueños. La cosecha es abundante y los recolectores pocos, le decía el Señor a sus discípu los. Si aún no lo has hecho, ¿quieres unirte a esta aventura? ¿Quieres ser un fuego que enciende otros fuegos? Hay muchas formas de colaborar, te invi tamos a unirte a nosotros.

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14.691.175

ACTIVOActivo Corriente

Caja - Bancos

Hogar de CristoBalance General Consolidado Auditadoal 31 de Diciembre del 2009

InversionesCuentas por CobrarInventarioPagos AnticipadosOtros Activos

8.907.000505.200328.333

7.428.941633.050

4.9986.479

Activo FijoActivo Fijo TangibleDepreciación Acumulada

5.689.1057.121.496

-1.432.392

Activo DiferidoActivo IntangibleAmortización Acumulada de Intangibles

11.304123.323-112.019

Otros ActivosInversionesCuentas por Cobrar a largo plazo

4.680.7705.351

4.675.419

Total Activo 19.288.179

PASIVOPasivo Corriente

Obligaciones LaboralesObligaciones TributariasCuentas por Pagar ProveedoresCuentas por Pagar ClientesCuentas por Pagar InstitucionesAnticipo de Clientes

3.134.754159.74010.466

604.5071.050.316

519.468154.876

Cuentas por Pagar Proyectos 635.380

Otros PasivosObligaciones a Largo PlazoReservas

1.461.709989.241472.468

Total Pasivo 4.596.464

PATRIMONIO

Fondo RotatorioExcedente del Presente Ejercicio

12.674.5531.413.825

603.337

Patrimonio Acumulado

Total PatrimonioTotal Pasivo + Patrimonio 19.288.179

INGRESOS OPERACIONALESVivienda y Hábitat

Hogar de CristoEstado de Ingresos y Egresos Auditadoal 31 de Diciembre del 2009

Banca ComunalPromoción y SaludHacienda

Costo de Venta

10.353.5799.249.816

972.613122.790

8.3616.150.360

GASTOS OPERACIONALESGastos Administrativos

Gastos de Personal

4.173.0644.035.2432.866.402

Mantenimiento y ReparacionesCombustible y Lubricantes

69.62519.875

Servicios BásicosImpuestos

101.86121.015

Servicios ExternosGastos VariosDepreciaciones y AmortizacionesCuentas Incobrables

260.410194.277173.502328.278

Gastos GeneralesImpuestos

24.34918

Gastos Varios 24.331

Gastos de DistribuciónGastos de Distribución

305305

EXCEDENTE OPERACIONAL 30.154

Ingresos no Operacionales

Donaciones Locales

1.887.13214.613

870.541Donaciones InternacionalesOtros Ingresos

929.37072.608

Intereses Ganados

Gastos no OperacionalesGastos FinancierosDonaciones Fondo Social

1.313.94941.065

787.612Donaciones Proyectos 456.913Otros Egresos 28.359

Excedente no Operacional 573.183

RESULTADO DEL EJERCICIO 603.337

*El excedente no operacional corresponde a proyectos en fase de ejecución

Page 151: Fuegos que encienden otros fuegos

HOGAR DE CRISTOASAMBLEA

Mons. Antonio Arregui (Presidente Nato)Gilberto Freire S.J. (Vicepresidente Nato)Dra. Norma Plaza de García (Secretaria)Ing. Jaime Aguirre Sra. Elena Arias de Portes Econ. Xavier Chávez Estrada Ing. Mario Dongarrá Arq. Alberto Falquez Sra. Bernadita Hidalgo Dr. Telmo Fernández Ing. Feliciano González Ing. Andrea León Ab. María Pilar de Jarrín Dr. Fernando Mancero Ing. Juan Martínez Illingworth Ing. Beatriz de Plaza Don Mario Quiñones Chiriboga Econ. Ercilia Abad de Paez Ing. Alfredo Mancheno Orellana Arq. Jorge Morán Ubidia Econ. José Ycaza Coronel Dr. Eduardo Viteri Ing. Javier Castillo Jurado Ab. María Josefa Coronel Prof. Anastacio Gallego

DIRECTORIOPresidente: Ing. José Tamariz CrespoVicepresidente: Abg. Roger ArosemenaPadre Provincial: Gilberto Freire S.J.Delegado de la Compañía de Jesús: Fernando Ponce S.J.Directores:Ing. Antonio VallarinoIng. Héctor PlazaIng. Jairo CamargoIng. Gilberto BurbanoEco. Juan Carlos SalameAbg. David CastroAbg. Antonio SotomayorDra. Kathya MurrietaSíndica: Abg. María GilerDirector General: Eduardo Vega Lozano S.J. Director Social: Luis Távara Directora Administrativa Financiera: Bethsaida Hidalgo

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TALENTOS HUMANOS

Equipo de Dirección

P. Eduardo Vega LozanoLuis TávaraBethsaida HidalgoCarmen Barredo OchoaJenny Castañeda Portilla

Comunicación Social

Gissella Rodríguez YcazaDaniel Saltos BonillaAdriana Pérez Cañote

Contraloría

Denisse Encalada ChalénMaría Elena Merizalde PinargoteGabriel Granados Chóez

Comité Ejecutivo

P. Eduardo Vega LozanoLuis TávaraBethsaida HidalgoAnita Mariño Paredes

MACROPROCESOS GENERADORES DE VALOR

Vivienda Social y HábitatJaime Jaramillo Castillo

Jaime Jaramillo CastilloMario Franco VelozPatricia Ordoñez ChecaDenisse Encalada Chalén

Logística

Cristian Mendieta MaldonadoSegundo Sánchez NavarroJuan Bajaña OrtegaCarlos Leon GollaKaren Zambrano CuevaByron Herrera AllaucaJaime Muñiz AyerveLuis Vera ZambranoWilliam Baque LinoManuel Barre RezabalaJuan Carrillo MartínezAlex Montaño MarinezFrank Narvaez NúñezJuan Pincay OviedoÁngel Pineda PanezoMarcelo Quintero RuízRonald Zambrano OrtizPablo Angulo CancioÁngel Angulo Márquez

Carlos Arias SaavedraJuan Carlos Arroyo RodríguezAdolfo Aveiga RodríguezFreddy Castillo ReascoDavid Erazo CadenaGreison Espinoza CasierraAlberto Jama QuinteroFrancisco Loor AndradeEdison Méndez LastraLuis Mosquera CabezasLuis Muñoz CanchingreJuan Gabriel Ordoñez MontañoYurlin Ortiz MedinaMiltón Portocarrero AriasErick Quisilema PereaCristhian Rivera CastilloHarry Rodríguez YépezJosé Wila AraujoVíctor Zambrano Zambrano

Lupo Coloma PonceDuquerman Estacio GonzalezFranklin Hernández SánchezLuis Jama SolMarco Martínez MartínezFranklin Mite LindaoJose Padilla CaicedoLivington Villavicencio VeraCristobal Colon Macias BrionesLuis Tenorio Castillo Alfonso Quinonez Panezo Carlos Cajas HidalgoSegundo Quizhpi Loja Nicolas Serrano Muentes

Carmen Barredo OchoaJenny Castañeda Portilla

26 de octubre de 2010

Page 153: Fuegos que encienden otros fuegos

Poducción

Manuel Viteri CancioRoxana Fabara SorianoJorge Asunción CheleJaime Chavarría PincayLeavington Dumes AriasJesús Matute GarcíaEdgar Ordoñez PalaciosSergio Sevillano Zambrano

Wilter Cagua ChemeJorge Acosta AlvaradoEdison Adrián RodríguezRafael Alarcón GarcíaDalton Arias MedinaCésar Escobar OrtizRonal Fajardo Triviño

Jhonny Mite MiteCelso Palacios CasqueteMilton Perero SuárezWaldir Pérez VarasPedro Solarte RoldánJosé Vera DomínguezFrancisco Cujilí Rodríguez

Ventas

Denisse Avilés GómezMaría Cusme VeraAlex Ciurliza DíazPatricia Peñafiel MartínezKlidaly Muñoz ZambranoNella Robalino LozanoJairo Chóez ChóezLaura Coello Acosta

Verónica Espinoza NaranjoGustavo Len CampusanoBertha Pintag YantalemaYanina Palma ErazoVirginia Vergara MonserrateFreddy Yépez GarcésAurora Zamora VillaltaClara Marca Bermeo

Henry Mora LeonesIrma Espinoza RuízJorge Mora RomeroFaustino Coello AnchundiaFelipe Estrada Ayoví

Cartera

Luis Moyota GuanoAlicia Andrade CedeñoEmma Baque ToalaShirley Paguay RodríguezMercedes Peralta CedeñoHenry Alvarez MiteMiriam Miranda AvilésJavier Bajaña MendozaInés Bravo AlayGrace Chequer BajañaGina Estrada MontenegroRoxana Guamán España

Ana Huayamave VelezEulalia Macías TumbacoSofía Medina FarrosMarielisa Menoscal BarahonaNarcisa Moreira MirandaVictor Padilla PinelaViviana Tagle BohórquezMariana de Jesús TocaRubí Vargas VargasAngela Vera GallardoJulio Vera SolísMaría Yandún Gonzalez

José Cabal CastroManuel Erazo VelezKarla Lindao MoreiraSoraya Morocho MeroJuliana Pino SoledispaBella Román RonquilloEvelyn Salazar MaldonadoHaide Yungan Lazo

Equidad Social y Economía Popular y Solidaria

Banca Comunal

Jessica Ochoa Aguilar - Giovanny Vera Hernández

Eduardo Arzuve DelgadoMariana Hidalgo ChacónMaritza Nieves VerdezotoSara Reyes ChevezVíctor Almeida BajañaEloina Gonzalez BatallaGregoria Bustamante Coque

Nelly Chuquimarca EncaladaLaura Huayamabe BeltránElsa León DíazElva QuindeKarina Lindao FloresAlexandra Montes RonquilloOlga Sancan Salazar

Consuelo Valarezo NúñezEsther Zumba QuitoDaniel Guarnizo HidalgoJéssica Insuaste Lucín

Promoción en Salud

Verónica Rosales TrujilloDolores Chiriguayo GómezManolo Quimís MuñozDoris Domínguez Valencia

Mary Reyes MiñoMariana Chávez ParralesShirley Rivera BarretoAmanda Collantes Ponce

María Reyes Del ValleSara Basantes PiscoBethsabe Machuca SantosBrenilda Rosas Vallejo

Patricia Ordóñez Checa

Page 154: Fuegos que encienden otros fuegos

Educación

Italia Palacios BurgosMarjorie Madrid SalvatierraViviana Sellán Guerrero

Proyectos Especiales

Gabriel SuárezAlexis VeraCarlos AnguloJuan Carlos RoseroDoris ChachiplantaCelia OrtizNarcisa RubioPatricia OchoaMaría del Carmen LainezÁngela MoránAndrea JaramilloVíctor GarcíaMini BustoJorge Oña

María Eugenia BaldaMarianela HolguínFabricio BazurtoGabriel SuárezHamilton FlorViviana SellamMarjorie MadridVerónica ZambranoEvelyn CerezoCarolina LaraFelipe RiveraJosé GarcíaItalia PalaciosAlex Peña

Jorge DelgadoDaniel CastroCésar PérezGabriel GarcíaJoao BorborEnrique AlvaradoDavid OrdóñezBrígida MestanzaSilvia ZúñigaLady Coello Jennifer Ortiz

MACROPROCESO DE DESARROLLO INSTITUCIONALAnita Mariño Paredes

Proyectos de Cooperación Nacional e InternacionalPatricia De La Cruz ApoloRubén Matías ApolinarioAngélica Pacalla Palate

Washington Piguave MéndezMariela Chóez IcazaElizabeth Alarcón Pantoja

Patricia Martínez BurbanoMarilú Werner Huppert

Talentos Humanos

Mario Franco VelozAna Franco Herrera

María Guamán LalanguiGilda Marcillo Sancán

Sarita Martínez QuintoFranklin Plúa Guamán

Pastoral

Juan Carlos Rosero Quintero

VoluntariadoPatricia Moreira Delgado

Formación y Capacitación

Ruth Bermeo Pesántez

Casa de Acogida - CEM - Alto Impacto (Erradicación del Trabajo Infantil) - Vaca Mecánica - Misión - Misereor - Jóvenes Emprendedores

PROCESOS HABILITANTES

Asesoría JurídicaCristhian Farfán Benites

Page 155: Fuegos que encienden otros fuegos

ContabilidadCarlos Orellana MoraJulio Dávila Mendoza

Verónica Ordóñez TimmClaudia Terán Álamos

Wendy Velasco PuyolSara Delgado Balladares

TesoreríaMilton Sampedro PeñaGloria Yanza Gaibor

Valeria Vera BarahonaMary Mosquera Grefa

Inés Velasco Quiñonez

SistemasMaría Ramírez ZeasRonald Cantos Morán

Carlos Uruchima CampoverdeCésar Cuenca Tinoco

Servicios GeneralesEduardo Robles OrtizCarmen Aranda EscobarHugo Noriega CáceresJulio Pallo PeñaLuis Quiñonez PeñaTeólfilo Vasquez ManzavaMáximo Baque Soledispa

Nicolás Sumba Nacipucha

Rolando Plúas MiteEdgar Barrezueta JaramilloDavid Montaño QuiñonezManuel Vera RodríguezBenito Villón QuimíSegundo González EscobarRosendo Morán Sellán

Juan Moreira UriarteFranklin Pérez GómezHéctor García PachecoNieves Triana AyalaPedro Yaual Paladines

PROCESOS DESCONCENTRADOS

Esmeraldas

María Méndez CaicedoAlex Guevara ValenciaMarjorie Mero MadrigalLevi Montes QuinteroLeonardo Quiñonez MosqueraAlbaro Valle BermúdezErnesto Vargas MinaByron Herrera AllaucaPablo Angulo CancioÁngel Angulo MárquesCarlos Arias SaavedraJuan Arroyo RodríguezAdolfo Aveiga RodríguezFreddy Castillo ReascoDavid Erazo CadenaGreison Espinoza CasierraAlberto Jama QuinteroFrancisco Loor AndradeEdison Méndez LastraLuis Mosquera CabezasLuis Muñoz CanchigreJuan Ordóñez MontañoYurlin Ortiz Medina

Milton Portocarrero AriasErick Quisilema PereaCristhian Rivera CastilloHarry Rodríguez YépezJosé Wila AraujoJosé Zambrano ZambranoCristóbal Macías BrionesAlfonso Quiñonez PanezoLuis Tenorio CastilloErika España TenorioHenry Gamez BoneElías Panchana VillamarPedro Quiñonez CevallosJefferson Satizabal TorresGustavo Timarán VillamarínGermán Trujillo AnapaCésar Bolaños CastroJackson Mojarrango OrtizCarlos Molina NavarreteJosé Mosquera BautistaÓscar Ortiz AnguloJackson Torres QuinteroLeonardo Araujo Contreras

Jefferson Santillán EduardesGerardo Zambrano OlivesJorge Andrade FarinangoCarlos Cabezas GóngoraHipson Córtez GarcésEddy Escalante VillamarGutenber González EscobarMary Mosquera GrefaMari Figueroa AriasJéssica Hidalgo BautistaKaren Quiñonez RodríguezIsabel Saavedra QuiñónezNancy Camacho YánezKaterine León CamachoInés Velasco Quiñónez

PortoviejoKaren Pincay CadenaPerla Tumbaco Zambrano

Ramón Bravo DemeraJosé Intriago Vélez

Vicente Suárez GómezMaría Macías Sornoza

Marcel Jama - Carmen Méndez

Page 156: Fuegos que encienden otros fuegos

QuevedoIngrid Mora BustosMiryan CedeñoEsmeralda Pisco Vélez

Angélica Valero MacasLaura Vera MoraSandra Palomino Aroca

Olga Castro PachecoDigna Guatumillo TapiaLorena Moreno Riquero

BabahoyoDoris Naranjo ChávezHéctor Valverde OchoaRita Alencastro MoncerrateGary Almeida Manobanda

Jonathan Burgos DelgadoÁngel Contreras CruzJéssica Crespo SantillánKatiuska Muñoz Murillo

Ruth Arias IbarraWilmintong SalvatierraSilvia Muñoz Jimenez

DauleCarlos Peñafiel SarcoAlexis Pin AlvaradoDanny Barzola BrionesJackson Coloma ZambranoJosé Jaramillo Rivas

Ulises Tomalá CastilloEdgar Villegas RonquilloEliana Méndez MantuanoMónica Plúas TroyaMaría Veliz Arreaga

Rosendo Morán SellánKarina Moreno JimenezJenny Mosquera CastroIrma Serna Silva

LibertadMartha Tigrero VeraHugo Heras VeraPatricia Rodríguez PereroJuan Suárez MuñozJorge De La Rosa Vera

Erick Prócel SolórzanoLuis Nieto CruzMaría Bernardino LucinDiego Carchi PezoMayra Intriago Macías

José Quiroz OviedoZaira Vera TumbacoMarjorie Chóez Cuz

MachalaJorge Sánchez MedinaEriccson Calderón QuimisJonathan Sanabria Fray

Celina Ortega EspinozaCelia Suárez MartínezGilberto Ramirez Flores

Margarita Durán Loayza

PlayasFreddy Cajas BohórquezGina Crespín QuindeCristopher Cruz Jaime

Mercedes Arévalo DelgadoBetti Mite InigaZoila Valdivieso Plaza

Noris Zambrano Zambrano

DuránPeter Moncada JaramilloAna Arranza FrancoJovanny Quimí Quimí

Patricia Baidal MacíasCecilia García LópezMarlyn Quevedo Sánchez

Silvia Quiroz Morán

Yaguachi

Xavier Baquero Montes Juana Delgado Piza Shirley Pincay Parrales

Hacienda San JoséWilson Ruíz Ibarra

Page 157: Fuegos que encienden otros fuegos

Voluntarios ExtranjerosFabiola Olmos VargasGerman Díaz UrrutiaMaría Neira SandovaRosa Elena Araya MandiolaMaité LarroyFelix EchandíaLucas AlvarezCarlos Campos NuñezElena Amilibia MunarrizMario Fernandez Garcia

Page 158: Fuegos que encienden otros fuegos

3 MAFPVAJECUADOR (BIG COLA)ALMACENES BOYACÁALMACENES TÍAANGLO AUTOMOTRIZMAPFRE - ATLASAMCORANTONIO PINO YCAZAAMANCO PLASTIGAMAAQUAMAR S.A.AUTOLASAAUTORIDAD PORTUARIA DE GUAYAQUIL BANCO BOLIVARIANOBIC DEL ECUADORBRENNTAGCALBAQ-CALJARSACÁMARA DE COMERCIOCECUAMAQCERVECERÍA NACIONALCLUBES ROTARIOS DE GUAYAQUILCOBALSACONTECONCORPEICORPELSACOVERSACRÉDITOS ECONÓMICOSDELCORP-FERTIANDINOCONFIANZA CIA. DE SEGUROSDE MARURIDICRESADIMEVARECUATORIANO SUIZOECUAVISAEDIMCAEDITORES NACIONALESEICAELÉCTRICA GUAYAQUILELECTROQUILEL UNIVERSOEXPOPLAZAFANAPISAFYBECCAFUNDACIÓN MARIANA DE JESÚSFUNDACIÓN TERMINAL TERRESTREGAMA TVGÉNESIS GRANASA

GRUPO BERLÍN HELADOSAHIDROSAHISPANA DE SEGUROSHORMIGONES HÉRCULESIMPORTADORA LA CAROLINAINPROELINALECSAINTACOINST. PARTICULAR ABDÓN CALDERÓNIVAN BOHMANJOHNSON WAXJUNTA DE BENEFICENCIA DE GUAYAQUILLICEO PANAMERICANOMAINTMAFRICOMARGLOBALNORLOP THOMPSONNUTECOFFSET ABADPACIFICARDPDVSAPINTURAS UNIDASPOLIMALLA-POLIGROUPPLASTIEMPAQUESPRICE WATERHOUSEPRILABSAPROQUIMSAPROYECTAREGISTRO MERCÁNTIL DE GUAYAQUILRESIQUIMREYSACRIVAS HERRERARTSROOFTECR Y C (CONÁUTICA)SEGUROS LA UNIÓNSENEFELDERSERVIENTREGASOCIOS INDIVIDUALESSOLUBLES INSTANTÁNEOSSUMESATELEMAZONASTRANSOCEÁNICATRASELECUNIVISAURBALANDVOPAK ECUADOR

APORTANTES NACIONALES

Page 159: Fuegos que encienden otros fuegos

APORTANTES INTERNACIONALES

ADGENTESADVENIATAIETIAISSAANESVADAYUNTAMIENTO ALBERICAYUNTAMIENTO ALCORCÓNAYUNTAMIENTO ALICANTEAYUNTAMIENTO ALMOINESAYUNTAMIENTO DENIAAYUNTAMIENTO GANDÍAAYUNTAMIENTO IBIAYUNTAMIENTO MADRIDAYUNTAMIENTO MELIANAAYUNTAMIENTO OLIVAAYUNTAMIENTO SAGUNTOAYUNTAMIENTO SUECAAYUNTAMIENTO TORRENTAYUNTAMIENTO VALLADOLIDAYUNTAMIENTO VILLALBABANCO INTERAMERICANO DE DESARROLLO -BIDBOYE FOUNDATIONCARCAIXENTCARITAS DIOCESANA DE VALENCIACITI FOUNDATIONCONFERENCIA EPISCOPAL ITALIANACORPORACION ANDINA DE FOMENTO -CAFDIPUTACIÓN DE ALAVADIPUTACIÓN DE VALENCIA

ENTRECULTURASFACSIFIONNUALA GRIFFINFONDO CANADÁ INICIATIVAS LOCALESFONDO RIOJANOFUNDACIÓN BARCELÓFUNDACIÓN HERESFUNDACIÓN MANO AMIGAFUNDACIÓN REPSOL YPFFUNDACIÓN TELEFÓNICA MOVISTARFUNDACIÓN VICGENERALITAT VALENCIANAGOBIERNO VASCOGREENDALE FOUNDATIONIGLESIA PRESBITERIANA EE.UU.INGENIEROS PARA LA COOPERACIÓN DE ÁLAVAINTERMON-OXFAMJUNTA CASTILLA Y LEÓNMEDICUSMUNDIMISEREORMOVIMENT ESCOLTAOCSIROTARY INTERNATIONALSECRETARIADO MISIONES VALENCIASELAVIPSWISSCONTACTVIVIENDAS PARA LOS SIN TECHOXUNTA GALICIAZARRIAN BARRI

Page 160: Fuegos que encienden otros fuegos

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Octubre 2010

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