zorro en la fábula-2

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García Gual, Carlos (1970) “El prestigio del zorro”, Emérita . García Gual (1970: 417) caliica al !u"do de la #$ula co!o “prag! e" su co"licto co"sta"te de “la luc&a por la 'ida”. El zorro es el “represe"ta"te si!$ lico de u"a co"ducta tica % po ca$alleresco de co!porta!ie"to, e" ciertos !o!e"tos de la edia o el s. - ///, por e+e!plo , el zorro aso!a su &#$il % caut ideas "ue'as "i es u" re'olucio"ario, "o. 2ier'e sie!pre al !#s u $e"eicio. 2u adecuaci " pr#ctica a las circu"sta"cias e+e!pliica u"a co"ducta, discuti$le desde el pu"to de 'ista de la !oral al uso, pero calii co"duce al ito.” 1 “El zorro es el perso"a+e a"i!al 3ue aparece e" !a%or "5!ero de # (1970: 416) a #$ula es de orige" $a$ilo"io, co" u"a pro$a$le asce"de"cia su! a"tecede"tes "o &a% !uestras de 3ue los a"i!ales posea" u"os rasgo se!e+a"tes a los de la #$ula griega (416). a pica griega ig"ora al zorro ” (419) a pri!era alusi " al se da e" el poe!a satírico Margites . uego, “ r3uíloco prese"ta las pri!eras #$ulas 3ue el zorro aparece, %a dei"ido por su i"telige"cia aguda % su & (419) E" 2e! "ides de !orgos, e" la tipología de las !u+eres: la zorra sa$iduría, 'aria$ilidad e i"ter s por la ga"a"cia. E" ;a$rio agrega el rasgo de <edro a5" &a$la de dolosa vulpes e" la #$ula de la zorra % las u'as. “2a$iduría puesta co" recue"cia al ser'icio del a#" de ga"a"cia dei"e" el !odo de ser del perso"a+e. > sus epíte desde r3uíloco, por !#s de oc&o siglos.” (4?0) ariedad, 'olu$ilidad: “se relacio"a" co" su superioridad !e"tal, ito e" sus e"cue"tros % co"lictos, % so" !oti'os de orgullo.” ( 'aria$le es, e" pri"cipio, co"traria a la &o"estidad % lealtad del aprecio por estas cualidades 3ue e+e!pliica el zorro, aparece u" !e"talidad, !#s $urguesa 3ue ca$alleresca, cu%o ideal es a"tes el 3ue la . a a!istad, la lealtad, la si"ceridad % el desi"ter s 3ue el "o$le de 'alorados e" el !u"do co"licti'o de la #$ula, cu%o realis!o es e 2i la !oral idealista rec&aza % caliica despecti'a!e"te los !edio "o ca$e duda 3ue, desde el pu"to de 'ista prag!#tico, el ito co!pe"sa la desapro$aci " de a3uella teoría !oral. Co" la asce"si " e" el sigl clase social, la $urguesía !erca"til % ciudada"a, se !a"iiesta el % el recurso a la astucia % la a!plitud de co"oci!ie"tos co!o !edi !ie"tras el &o"or i"!aculado del "o$le 'a 3ueda"do a u" lado. Es e de @lises so$re A%a .” (4?1) d+eti'os 3ue caracteriza" a la zorra ta!$i " so" característicos tragedia, se su$ra%a su or!a de ser recorda"do 3ue est# e!pare"ta 4??) Esta or!a de ser est# u"ida a la tra!pa % al e"ga=o. E"t er!es 3uie" tie"e estos rasgos. “@lises % er!es so" los & roes ar3uetípicos de u"a "ue'a !e"talid astucias % los co"'ierte e" !odelos ticos.” (4??) El epíteto , 3ue origi"aria!e"te sig"iica$a “e!$aucador” pa “pro'ec&oso, $ue"o para alca"zar ga"a"cias” (cita a or!a" B. ;ro 4?F) 1 García Gual, Carlos (1970) “El prestigio del zorro”, Emérita . pp. 417 416.

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Garca Gual (1970: 417) califica al mundo de la fbula como pragmtico y despiadado en su conflicto constante de la lucha por la vida

Garca Gual, Carlos (1970) El prestigio del zorro, Emrita.Garca Gual (1970: 417) califica al mundo de la fbula como pragmtico y despiadado en su conflicto constante de la lucha por la vida.

El zorro es el representante simblico de una conducta tica y poltica. Contra el ideal caballeresco de comportamiento, en ciertos momentos de la historia la baja Edad Media o el s. XVIII, por ejemplo-, el zorro asoma su hbil y cauteloso perfil. No trae ideas nuevas ni es un revolucionario, no. Sierve siempre al ms fuerte, en propio beneficio. Su adecuacin prctica a las circunstancias ejemplifica una conducta, discutible desde el punto de vista de la moral al uso, pero calificada de sabia, ya que conduce al xito.

El zorro es el personaje animal que aparece en mayor nmero de fbulas antiguas. (1970: 418)

La fbula es de origen babilonio, con una probable ascendencia sumeria. Pero en esos antecedentes no hay muestras de que los animales posean unos rasgos caractersticos, semejantes a los de la fbula griega (418).

La pica griega ignora al zorro (419) La primera alusin al se da en el poema satrico Margites. Luego, Arquloco presenta las primeras fbulas griegas en que el zorro aparece, ya definido por su inteligencia aguda y su habilidad diplomtica. (419)

En Semnides de Amorgos, en la tipologa de las mujeres: la zorra tiene como rasgos sabidura, variabilidad e inters por la ganancia.

En Babrio agrega el rasgo de Fedro an habla de dolosa vulpes en la fbula de la zorra y las uvas. Sabidura puesta con frecuencia al servicio del engao, variabilidad y afn de ganancia definen el modo de ser del personaje. Y sus eptetos se adaptan a l, desde Arquloco, por ms de ocho siglos. (420)

Variedad, volubilidad: se relacionan con su superioridad mental, le proporcionan el xito en sus encuentros y conflictos, y son motivos de orgullo. (421) Esta conducta variable es, en principio, contraria a la honestidad y lealtad del aristcrata. En el aprecio por estas cualidades que ejemplifica el zorro, aparece un rasgo de una nueva mentalidad, ms burguesa que caballeresca, cuyo ideal es antes el que la . La amistad, la lealtad, la sinceridad y el desinters que el noble deba ejercitar no son valorados en el mundo conflictivo de la fbula, cuyo realismo es en este punto mordaz. Si la moral idealista rechaza y califica despectivamente los medios de accin del zorro, no cabe duda que, desde el punto de vista pragmtico, el xito compensa la desaprobacin de aquella teora moral. Con la ascensin en el siglo VI de una nueva clase social, la burguesa mercantil y ciudadana, se manifiesta el inters por la ganancia, y el recurso a la astucia y la amplitud de conocimientos como medios para su obtencin, mientras el honor inmaculado del noble va quedando a un lado. Es el triunfo simblico de Ulises sobre yax. (421)

Adjetivos que caracterizan a la zorra tambin son caractersticos de Odiseo. En la tragedia, se subraya su forma de ser recordando que est emparentado con Ssifo. (421-422)

Esta forma de ser est unida a la trampa y al engao. Entre los dioses, es Hermes quien tiene estos rasgos.

Ulises y Hermes son los hroes arquetpicos de una nueva mentalidad, que gusta de sus astucias y los convierte en modelos ticos. (422)

El epteto , que originariamente significaba embaucador pas a significar provechoso, bueno para alcanzar ganancias (cita a Norman O. Brown, p. 61). (422-423)

La coleccin espica en prosa, en su austera concisin, prescinde de los adjetivos. Prefiere ejemplificar en la accin el modo de ser de sus personajes. (423)

No es preciso, sin embargo, que en todas las fbulas exprese el zorro su peculiar carcter; nos basta que lo haga en la mayora de los casos, para recoger en l un tipo caracterstico definido. (424)

Hbil psiclogo, se aprovecha de los defectos ajenos y sabe adular a los dems, como al cuervo (Ch. 165) y al ciervo (Ch. 199), para servirse de ellos. (424)

Frente al lobo se distingue por su habilidad y su cortesa. (424)

En ese mundo de la competencia de todos contra todos, de la lucha por la vida sin otras normas que las individuales de la fuerza y la astucia, en la ley de la selva, que escenifica la fbula, el zorro es el nico elemento dinmico y moderno. El nico digno de imitacin, ya que la fuerza no se aprende, pero s la sagacidad. (425)

En Aristfanes podemos ver la antigedad de la expresin raposear (Vesp. 1239-40), que encontramos en la fbula de El len, el zorro y el ciervo (Ch. 199). (425)

Oscilacin entre las valoraciones positiva y negativa de su conducta.Revisa la presencia en textos de Aristfanes (buen conocedor de fbulas) y la influencia de la fbula y de esta moral del zorro en dos pasajes de Pndaro. (pp. 425-429) Revisa tambin Teognis (430)La contradiccin entre repulsa de la doblez y el engao, que la fbula hace desde un punto de vista moral, y el reconocimiento de que el individuo artero y falaz alcanza el triunfo y obra inteligentemente, la encontramos en otros pensadores del s. VI a. C. (430)

Cita largamente a Bowra (1968: 119), al referirse a Teognis en su poca, cuando ste recomienda a Cirno adaptarse al entorno. En un espritu similar acenta la necesidad insoslayable de dinero, la de halagar al enemigo ante la cara, la de dirigirle palabras blandas. En todo ello se perciben los signos de la decadencia de una sociedadd que iba perdiendo su integridad en medio de circunstancias adversas y ya no crea en la posibilidad de practicar lo que exiga antao el honor (cita de Bowra) (pp. 430-431)Hay pocas histricas como el s. VI antes de C.- en las que, al enfrentarse las clases sociales, se operan en la sociedad cambios revolucionarios, en los que las viejas normas de conducta resultan intiles para controlar el comportamiento de los individuos. Entonces es el turno de accin para el audaz y experimentado realista que sabe plegarse y adaptarse a los nuevos tiempos, deshacerse de las viejas normas y servirse de los dems para sus fines. Es el turno del zorro. (p. 431)Ve repetida esta situacin en la Baja Edad Media y en el siglo XVIII, en que aparece el ejemplo prctico y poltico del zorro en fabliaux y fbulas.Trminos griegos que interesan:

gananciainteresado, que cuida sus intereses; astutovariedad, diversidad; flexibilidad, habilidad; astucia, artificio; bordado; tono variado de un discurso, de un instrumento

Garca Gual, Carlos (1970) El prestigio del zorro, Emrita. pp. 417-418.