20° dom. t. ord., ciclo 'a' (2)
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Mt 15, 21-28
Jesús y la mujer cananea
XX Domingo Ordinario
Ciclo ‘A’
21. “Jesús se marchó y se retiró al país de Tiro y Sidón.
22.Entonces una mujer cananea,
saliendo de aquellos
lugares…
se puso a gritarle…
«Ten compasión de mí, Señor,
Mi hija tiene un demoniomuy malo».
¡Hijo de David!
23. Él no le respondió nada.
Entonces los discípulos se le acercaron a
decirle: «Atiéndela, que viene detrás
gritando».
24. Él les contestó:
«Sólo me han enviado
a las ovejas descarriadas de Israel».
25. Ella los alcanzó y se postró ante Él, y le pidió:
«¡Señor, Socórreme!
».
26. Él le contestó:
«No está bien echar a los perros el pan de los hijos».
Pero ella repuso:
27.«Tienes razón, Señor;
pero también los perros se comen las
migajas que caen de la mesa de los amos».
28. Jesús le respondió:
«Mujer, ¡Qué grande es tu fe! Que se cumpla lo que
deseas».
En aquel momento quedó curada su hija.
La aparente indiferencia del Señor
no la alejó ,
Le pidió lo que tanto le preocupaba .
Sino que creció su confianza.
¿Confiamos en Jesús?
¿Qué actitud tenemos ante su aparente
silencio?
No desconfiemos de Él …
No nos desanimemos … si no nos responde de
inmediato.
Siempre nos escucha …
Quiere que le confiemos nuestras
preocupaciones…
Padre Bueno:
Aumenta nuestra fe para que vivamos seguros contigo
y en lo tuyo ...
Tú comprendes lo que nos sucede mejor que nadie ...
Que crezca nuestra confianza en Ti.
No permitas que el dolor
nos aleje de tu amor
Nuestras necesidades son tantas y Tú las
conoces.
ni que vayamos por caminos equivocados …
Sólo Tú
Ámbito Misionero
¡Aumenta nuestra fe! ¡Amén!
nos ayudas ahora
y siempre…
y nadie más que Tú…