division b, volume ii: the history of the jewish people / חטיבה ב, כרך שני: תולדות...
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World Union of Jewish Studies / האיגוד העולמי למדעי היהדות
/ לקראת מפה של בתי-הכנסת בספרד HACIA UN MAPA DE SINAGOGAS ESPAÑOLAS Author(s): JOSE LUIS LACAVE and חוסה לואיס לקווהSource: Proceedings of the World Congress of Jewish Studies / דברי הקונגרס העולמי למדעיחטיבה ב, / DIVISION B, VOLUME II: THE HISTORY OF THE JEWISH PEOPLE ,היהדות, כרך יכרך שני: תולדות עם ישראלpp. 107-112 תשמ"ט / 1989Published by: World Union of Jewish Studies / האיגוד העולמי למדעי היהדותStable URL: http://www.jstor.org/stable/23535621 .
Accessed: 15/06/2014 12:23
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HACIA UN MAPA DE SINAGOGAS ESPANOLAS
JOSE LUIS LACAVE
En 1955 el Prof. Cantera publicaba su benemerito libro Sinagogas
espanolas . En el reunla las noticias que pudo recoger acerca de las
sinagogas que un dia se levantaron, o que aün se levantan, en 118
poblaciones espanolas. A partir de este libro se han venido confec
cionando desde entonces los mapas de las sinagogas de Sefarad, el
primero de los cuales se incluia en el propio volumen.
2 Cantera nos dice en su introducciön que su interes principal al
escribir el libro se concretaba en el estudio de la sinagoga de Cor
3 doba y de la sinagoga toledana del Tränsito . Pero que le habia pa
recido ütil "completar dicha investigacion con someras indicacio
nes de cuanto con referenda a otras sinagogas espanolas existentes
todavia por excepciön 0, desgraciadamente, hoy desaparecidas, hemos
logrado recoger".
Asi pues, al considerar esta parte de su trabajo como un mero
ahadido, Cantera no se preocupö de hacer distinciones entre las no
ticias que aportaba y asi en el libro se combinan las procedentes de
la documentaciön publicada hasta entonces con las que procedentes de
tradiciones locales llegaron a oidos del autor.
Y en cuanto a las procedentes de la documentaciön, Cantera se Ii
mitaba en muchos casos a recoger 10 que los documentos decian de las
sinagogas, sin preocuparse de indagar su posible localizaciön. Mien
tras que respecto a las noticias procedentes de la tradiciön, se
limitö a recoger las que buenamente le habian llegado por diversos
medios, sin emprender, en realidad, casi ninguna büsqueda. Tampoco
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JOSE LUIS LACAVE
se esforzö por combinar la tradiciön con la documentaciön. Por ejem
plo, en bastantes ocasiones, se limita a senalar que existe documen
taciön segun la cual en tal poblacidn hubo sinagoga; pero sin bus
car en esa poblacidn si existia alguna tradiciön que permitiera
avanzar en la localizacion de la sinagoga. En realidad, en su Intro
duccion viene a decir que esa labor la deja para futuros investiga
dores.
Como deciamos al principio, a la hora de confeccionar mapas de
sinagogas espanolas todo 10 que se ha hecho hasta hoy ha sido apro
vechar la labor de Cantera. Pero desde la apariciön de su libro
han pasado mäs de treinta anos y en ese tiempo se ha avanzado de
modo considerable tanto en la publicaciön de nueva documentaciön
como en los medios de que dispone la investigacion para indagar tra
diciones locales. Creo que es ya tiempo de plantearse la confecciön
de un nuevo mapa mäs en consonancia con nuestros conocimientos ac
tuales y, sobre todo, con nuestras posibilidades de conocimiento.
Por esta razon, me voy a permitir aqui exponer algunas ideas so
bre como habria que confeccionar hoy dia un mapa de sinagogas espa
nolas.
En primer lugar nos referiremos a 10s trabajos que deben llevar
se a cabo para llegar a la confecciön del mapa. Luego nos referire
mos a las distinciones que deben hacerse a la hora de senalar en el
mapa las sinagogas.
Es obvio que 10 primero serxa recoger la documentaciön referente
a sinagogas. Partiendo de la obra de Cantera, anadir la documentaciön 4
publicada posteriormente . Y digo publicada, porque se trataria de
confeccionar el mapa mäs perfecto posible en este momento, el cual,
sin duda alguna, serfa mejorado, incluso muy mejorado, dentro de
unos cuantos anos. Plantearse una busqueda exhaustiva de este tipo de
documentos en 10s numerosos archivos nacionales, locales, notariales
0 eclesiästicos nos conduciria, en mi opinion, a posponer indifini
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HACIA UN MAPA DE SINAGOGAS ESPANOLAS
damente la confeccion del mapa.
Mäs hacedera es la otra labor, a mi juicio, necesaria: Recoger
las tradiciones locales referentes a sinagogas. Aqui habria que em
pezar por examinar 10 mäs exhaustivamente posible las obras de his
toria local. Personalmente hemos podido comprobar que en muchas de
estas obras -especialmente en las publicadas en el periodo 1880-1930
y asimismo en las que han aparecido en los Ultimos diez anos- se de
dican algunas päginas a los judios de la poblaciön correspondiente y
en ellas suele recogerse la tradicion, generalmente bien arraigada,
referente a la localizacion de la sinagoga.
Por otro lado, habria que recorrer, en busca de esas tradiciones,
todas aquelias poblaciones espanolas de las que nos consta por la
documentation que tuvieron juderia, especialmente las que figuran co
mo aljama. Esta labor la hemos emprendido personalmente en este afio
de 1989 y podemos ya decir, por ejemplo, que son bastantes las pobla
ciones que conservan una "calle de la Sinagoga", con 10 que ello sig
nifica para la localizacion. Son bastantes tambien 10s pueblos y ciu
dades donde se nos ha senalado un edificio tenido por sinagoga se
gun la tradicion local, generalmente bien conocida por toda la po
blacion y transmitida de generacion en generacion.
Pondremos aqui el ejemplo mäs llamativo de 10 que acabamos de
decir. Se trata de un caso que ya conocio Cantera en los Ultimos anos
5 de su vida y que hemos tenido ocasion de comprobar en una visita rea
lizada en el mes de junio. En la hoy pequena poblacion de Amusco, muy
cerca de Palencia, existe en la Plaza central del pueblo un cafe pom
posamente titulado "Cafe La Sinagoga". Para los vecinos de Amusco
no cabe ninguna duda de que 10 que ahora es sotano del cafe y estä
dedicado a salon de banquetes es la sinagoga, pues asi se ha dicho
y sabido de siempre en el pueblo. Se trata de un esplendido salon
de unos 15 m. de largo por 9 m. de ancho, con muros de piedra que
sostienen bövedas de cruceria. Desde luego, despues de verlo, a mi
no me cabe ninguna duda de que alii estamos ante una sinagoga y,
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JOSE LUIS LACAVE
por tanto, de que la tradiciön nos revela en este caso la verdad.
Vengamos ahora a la confecciön del mapa en si. Es indudable que
no todas las noticias que tenemos de sinagogas en Sefarad son del
mismo caräcter. Por 10 tanto, al senalar en el mapa las sinagogas
hemos de hacer diversas distinciones, que en mi opinion serian las
siguientes:
Un primer grupo 10 formarian aquellas sinagogas que hoy siguen
en pie y que pueden visitarse como tales sinagogas, aunque con vito
la de museos. Desgraciadamente por ahora son solo tres, aunque mag
nxficas y famosisimas: la de Cordoba y las toledanas llamadas del
Transito y de Santa Maria la Bianca.
Un segundo grupo 10 constituirian las sinagogas que un dia fue
ron convertidas en iglesias y que aun siguen en esta funcion. Aun
cuando han sufrido modificaciones y adiciones en su adaptacion cris
tiana y en el transcurso de los siglos, todavia conservan la estruc
tura de cuando eran sinagogas. Los ejemplos mäs conocidos de este gru
po son la iglesia sevillana de Santa Maria la Bianca y la segoviana
del Corpus Christi. Un nuevo ejemplo, präcticamente desconocido y
que a mi juicio conserva la estructura sinagogal mejor que las ci
tadas, es la iglesia del Santo Cristo de Santiago de la ciudad ara
gonesa de Carinena.
Un tercer grupo 10 formarian aquellas sinagogas de las que solo
se conservan vestigios arqueoldgicos. Es el caso, por ejemplo, de
las sinagogas de Trujillo y Teruel, que tuve la fortuna de hallar en 0
anos pasados , y tambien de Sagunto, Miranda de Ebro y unas cuantas
mäs.
De aquellas sinagogas de las que reaimente ya no queda nada en
pie, habrxa que distinguir en primer lugar las sinagogas que estan do
cumentadas y que la investigacion ha logrado localizar a traves de
los documentos. Quiero decir que ha logrado fijar el lugar exacto
-calle tal, numero tal, por ejemplo- en que estuvo dentro de la ciudad.
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HACIA UN MAPA DE SINAGOGAS ESPAfjOLAS
Ejemplos de esto hay bastantes; por citar alguno: Barcelona, Zarago
za y Caceres.
Luego habria que distinguir aquellas sinagogas que estän documen
tadas y que no estän localizadas -en el sentido expuesto- a traves de
los documentos, pero que si 10 estän por la tradicion local. Ejemplos
en este caso tenemos en Leon, en Agreda y en Ciudad Real.
Aparte de los grupos ya citados, habria que formar otro con las
sinagogas de las que, estando perfectamente documentadas, carecemos
totalmente de localizaciön. Aqui los ejemplos son muy numerosos: Ar
nedo, Barbastro, Calahorra, Lerida, Pamplona y un largo etcetera.
Finalmente estarian aquellas sinagogas que hasta hoy no estän
documentadas, es decir que hasta ahora no ha aparecido ningun docu
mento que nos de noticia de ellas, pero que cuentan con tradicion
local. Generalmente la tradicion no solo nos habla de la existencia
de una sinagoga, sino que la localiza, fija el edificio o el lugar
donde estuvo. Pero tambien aqui cabria distinguir entre aquellas po
blaciones donde se senala un edificio concreto todavia existente: ,
como ocurre, por ejemplo, en Yepes, Medina de Pomar o Cehegin, y
aquellas otras en que la tradicion se manifiesta conservando una
"calle de la Sinagoga" -a menudo, una calle corta-, de 10 cual hay
bastantes ejemplos: La Coruna, Herväs, Onda, Lebrija....
Todavia podria afinarse mäs en las distinciones, pero creemos
que con las que aqui sugerimos podria resultar un mapa de sinagogas
espanolas suficiente para cubrir las exigencias habituales. Lo que
no obsta, naturalmente, para que acojamos con sumo gusto las suge
rencias que otros investigadores quieran hacer.
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JOSE LUIS LACAVE
NOTAS
1 Francisco Cantera Burgos, Sinagogas espanolas, con especial estu
dip de la de Cordoba y la toledana de el Transito, Madrid,
C.S.I.C., 1955. Se ha hecho una reimpresidn: Madrid, C.S.I.C.,
1984.
2 P. VIII.
3 En realidad, aunque fuera ese su propösito inicial, el resultado
final incluxa tambien en ese estudio especial la otra sinagoga
toledana que aun se puede visitar como tal sinagoga, la llamada
de Santa Maria la Bianca.
4 Lo ultimo que conozco es el articulo de Encarnacion Marin Padilla,
"Nuevos datos sobre sinagogas y un cementerio judio en Aragon",
Sefarad XLVIII (1988) 426-8. En el se aporta documentacidn sobre
sinagogas que existieron en las siguientes poblaciones aragonesas:
Alagon, Urrea, Belchite, Illueca y Arändiga.
5 Dio cuenta de ello en su trabajo "La administracion judia del du
que de Näjera en la aljama palentina de Amusco" publicado en Homma
ge a Georges Vajda, ed. G. Nahon et Ch. Touati (Louvain, 1980) pp.
309-21.
Di cuenta de ello en Sefarad XL (1980) 215 ss. (Trujillo) y
Sefarad XXXIX (1979) 109-11 (Teruel)
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