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INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL ESCUELA SUPERIOR DE CÓMPUTO SECRETARÍA DE INVESTIGACIÓN Y POSGRADO PROYECTO DE INVESTIGACIÓN EDUCATIVA NOMBRE DEL PROYECTO: LAS COMPETENCIAS PEDAGÓGICAS DE LOS MAESTROS DE LA ESCUELA SUPERIOR DE CÓMPUTIO (ESCOM) CLAVE: 20080807 INVESTIGADOR/DIRECTOR: GUILLERMO MÁRQUEZ ARREGUÍN ENERO 2009

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INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL ESCUELA SUPERIOR DE CÓMPUTO

SECRETARÍA DE INVESTIGACIÓN Y POSGRADO

PROYECTO DE INVESTIGACIÓN EDUCATIVA NOMBRE DEL PROYECTO: LAS COMPETENCIAS PEDAGÓGICAS DE LOS MAESTROS DE LA ESCUELA SUPERIOR DE CÓMPUTIO (ESCOM) CLAVE: 20080807 INVESTIGADOR/DIRECTOR: GUILLERMO MÁRQUEZ ARREGUÍN

ENERO 2009

LAS COMPETENCIAS PEDAGÓGICAS DE LOS MAESTROS DE LA

ESCUELA SUPERIOR DE CÓMPUTIO (ESCOM) CONTENIDO:

1. INTRODUCIÓN 2. INVESTIGACIÓN GENERAL 3. PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN. HIPÓTESIS 4. IMPORTANCIA DEL ESTUDIO PROPUESTO 5. MARCO TEÓRICO 6. DISEÑO Y METODOLOGÍA 7. INSTRUMENTO DE EVALUACIÓN 8. ANÁLISIS Y PRESENTACIÓN DE DATOS 9. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Introducción Hoy en día ya no es suficiente que los docentes de la Educación Superior centren su acción pedagógica en facilitar la adquisición de conocimientos de las asignaturas que imparten. Es indispensable que los maestros trasciendan los propósitos exclusivamente disciplinares y apoyen de manera integral la formación de los jóvenes. Es necesaria una comprensión de la función del docente que vaya más allá de las prácticas tradicionales de enseñanza en el salón de clases. El trabajo de los docentes, a partir de un enfoque en competencias, permitirá que los estudiantes adquieran las competencias genéricas que expresa el Perfil de Egreso de las diferentes profesiones, con lo cual se alcanzarán los objetivos fundamentales. El Perfil del Docente está constituido por un conjunto de competencias que integran conocimientos, habilidades y actitudes que el docente pone en juego para generar ambientes de aprendizaje para que los estudiantes desplieguen las competencias genéricas. Dicho de otra manera, estas “competencias formulan las cualidades individuales, de carácter ético, académico, profesional y social que debe reunir el docente”1

A falta de análisis de las competencias y de los recursos que ellas exigen, algunas formaciones iniciales de docentes se hacen cargo sólo de una parte muy débil de los recursos requeridos, limitándose al dominio de los saberes que hay que enseñar y de algunos principios pedagógicos y didácticos generales. Es tiempo de identificar el conjunto de las competencias y de los

recursos que obran en las prácticas profesionales y escoger de manera estratégica las que importa comenzar a construir en la formación profesional de practicantes reflexivos. 1 Philippe Perrenoud. Diez nuevas competencias para enseñar. Barcelona: Graó, No. 196, 2004. 1. Investigación general. Origen del término competencia El término “competencia” no es una palabra novedosa o de uso reciente. Se ha utilizado desde hace varios años. Su raíz etimológica proviene del griego “agon y agonistes “, significa quien competía y luchaba para ganar en las pruebas olímpicas; esa era una agonía. En el teatro griego el protagonista es el personaje principal sobre quien giraba toda la acción y en forma análoga podemos pensar que la educación centrada en la construcción y reconstrucción de competencias debe buscar formar protagonistas dentro de una comunidad (Gallego, 1999) También encontramos el origen del término competencia en el verbo latino “competere” (ir al encuentro una cosa de otra, encontrarse) para pasar también a acepciones como “responder a, corresponder” “estar en buen estado” “ser suficiente”, dando lugar a los adjetivos “competens-entis” (participio presente de competo) en la línea de competente, conveniente, apropiado para; y los sustantivos “competio-onis” competición en juicio y “competitor-oris” competidor, concurrente,rival. Desde el siglo XV nos encontramos con dos verbos en castellano “competir” y “competer” que proviniendo del mismo verbo latino (“competere”) se diferencian significativamente, pero a su vez entrañan semánticamente el ámbito de la competencia: 1. “Competer”: pertenecer o incumbir, dando lugar al sustantivo competencia y al adjetivo competente (apto, adecuado).

2. “Competir”: pugnar, rivalizar, dando lugar también al sustantivo competencia, competitividad, y al adjetivo competitivo. Sea como fuere, en ambos casos, el sustantivo competencia es común, lo que añade dificultad y genera equívocos. (Tejada, 1999) Acepciones del término competencia. El término competencias ha sido introducido en diferentes campos y con distintos significados, de esta forma se tienen diversas acepciones en nuestra lengua. Por ejemplo, en el ámbito deportivo, desde la antigüedad hasta nuestros días, se habla de competencias atléticas en sus diferentes categorías; en economía y más específicamente en la dinámica del mercado, haciendo referencia a la relación entre oferta y demanda de productos o servicios, es común escuchar que en el mercado existe mucha competencia; en el campo jurídico el término competencia generalmente se usa para hacer énfasis a las funciones de un determinado organismo o entidad quien ejerce autoridad y tiene un campo de acción determinado dentro del cual debe de ejercer sus funciones, por lo que a menudo escuchamos “…es competencia del funcionario ejercer su autoridad correspondiente…”. En lo que se refiere al ámbito empresarial El término “Competencia” lo introduce David McClelland, célebre psicólogo de la Universidad de Harvard, experto en teoría de la motivación. Este autor, ante la evidencia de que los mejores expedientes, conocimientos y destrezas no garantizaban el éxito profesional, se propuso encontrar una alternativa a las pruebas tradicionales de aptitud e inteligencia que, conllevara a una medición más profunda que denominó “Competencia”. Definiéndola como una característica subyacente de una persona que le permite tener un desempeño superior en un empleo, puesto o situación dada. Y es así que en 1973 publica “Evaluar la competencia en lugar de la inteligencia” documento en el cual presentaba las competencias como aquello que realmente causa un rendimiento superior en el trabajo. (Hay Group, 2006). A partir de los años 80 ante los cambios ocurridos en el ámbito laboral, ha sido cada vez más frecuente la utilización del término “competencia”. En el campo laboral se entiende por competencia la capacidad física e intelectual que posee una persona para realizar correctamente un trabajo o una tarea determinada. Cabe mencionar que la formación de la noción de competencia en el dominio de la formación profesional y en el campo de la enseñanza escolar, es un hecho presente en los discursos educativos desde hace aproximadamente 20 años a la fecha. En este proyecto hablaremos de manera muy somera de las competencias en el campo laboral y en forma más extensa de las competencias en el contexto educativo específicamente en lo que se refiere a la docencia. 2. Preguntas de investigación, Hipótesis ¿Cuáles son las competencias de los maestros de la ESCOM?

¿Se cuenta con las competencias mínimas requeridas para impartir clases a nivel superior? Hipótesis: Los maestros de la ESCOM si cuenta con las competencias necesarias para impartir clases a nivel suprior. 3. Importancia del estudio propuesto. Cada vez resulta más limitada y de poca utilidad la descripción de un puesto a partir del análisis tradicional de tareas, basada en la observación de tiempos y movimientos. Esta técnica ha dejado de ser funcional para determinar cómo se logran objetivos complejos y dinámicos. Es necesario que el análisis de competencias requeridas incluya situaciones y variables que reflejen el alcance o extensión del aprendizaje, como son la resolución de situaciones imprevistas, la comunicación, el trabajo en equipo, la inteligencia emocional; así como la relación de todas estas capacidades con la especialidad técnica, ya que esto determina la profundidad del aprendizaje Definición Es el proceso que se sigue para establecer, a partir de una actividad de trabajo, las competencias que se ponen en juego con el fin de desempeñar tal actividad, en forma excelente. La cobertura de la identificación puede ir desde el puesto de trabajo hasta un concepto más amplio de área ocupacional o ámbito de trabajo. Modelos Los modelos de instrumentación de la competencia laboral que existen a nivel mundial son múltiples, según el enfoque que se quiera dar al aprendizaje del personal y la posición que ocupa la persona en la estructura de mando y responsabilidades de la organización. Pueden coexistir varios enfoques a la vez en la organización, sin que esto afecte negativamente la coherencia como sistema. Los modelos existentes se pueden clasificar en tres clases:

a) Funcionalista b) Conductista c) Constructivista. (Mertens)

a) Modelo Funcional La aproximación funcional refiere a desempeños o resultados concretos y predefinidos que la persona debe demostrar, derivados de un análisis de las

funciones que componen el proceso productivo. Generalmente se usa este modelo a nivel operativo y se circunscribe a aspectos técnicos. Las evidencias que modelos de este tipo piden son: de producto; los resultados de las observaciones de la ejecución de una operación; y, de conocimientos asociados. Por ejemplo en la industria del vestido, una evidencia de producto es el ensamble de una pieza con dobleces, botones y que cumple con la calidad en el acabado; una evidencia de desempeño es la observación en el manejo de la máquina y del orden y limpieza que la operadora mantiene en su lugar de trabajo; una evidencia de conocimiento es la identificación de las partes de la máquina de coser y sus funciones, y la explicación de cómo asegurar la calidad en su puesto de trabajo. b) Modelo Conductista El modelo conductista se centra en identificar las capacidades de fondo de la persona que conlleva a desempeños superiores en la organización. Generalmente se aplica a los niveles directivos en la organización y se circunscribe a las capacidades que le hacen destacar ante circunstancias no predefinidas. Por ejemplo, capacidad analítica, toma de decisiones, liderazgo, comunicación efectiva de objetivos, creatividad, adaptabilidad. En este caso los desempeños a demostrar por la persona no se derivan de los procesos de la organización sino de un análisis de las capacidades de fondo de las personas que se han destacado en las organizaciones. Por ejemplo, capacidades a demostrar en Liderazgo pueden ser: a) Plantear objetivos claros; b) Estimular y dar dirección a equipos de trabajo; c) Tomar responsabilidad y adjudicar sus acciones; d) Identificar las fortalezas de otros y delegar tareas adecuadamente; entre otras. c) Modelo Constructivista En el modelo constructivista no se define a priori las competencias del personal, sino las construye a partir del análisis y proceso de solución de problemas y disfunciones que se presentan en la organización. En esta perspectiva, las competencias están ligadas a los procesos en la organización: es el desarrollo de las competencias y la mejora de los procesos. Por ejemplo, en una empresa se hace conciencia entre el personal directivo y operativo, que no se tienen definidas rutinas de mantenimiento preventivo, ni las técnicas para el predictivo. A la vez que se diseñan éstas rutinas y técnicas, las competencias del personal implicadas van emergiendo. Desde ésta perspectiva no interesa identificar como competencia las capacidades existentes y predeterminadas, sino las que emergen en los procesos de mejora. En los siguientes artículos nos ocuparemos de la Técnica de Incidentes Críticos y posteriormente de las Metodologías de Identificación. 4. Marco Teórico

En la actualidad es importante definir algunos conceptos de competencia, sin olvidar a los organismos involucrados, quiene apoyan a las escuelas de nivel superior para el desarrollo de sus docentes, así como de los alumnos. Es entonces pues, que definiremos el concepto de competencias de diferentes enfoques. Tanto en el ámbito educativo como en el contexto profesional se identifica a una persona como competente por su capacidad para realizar una tarea de manera inteligente, en diversos contextos. En general, se afirma que una competencia es el conjunto de comportamientos socio-afectivos y habilidades cognoscitivas, psicológicas, sensoriales y motoras que permiten llevar a cabo adecuadamente una función, una actividad o una tarea. Por lo tanto, las competencias describen comportamientos integrados por habilidades cognoscitivas, disposiciones socio-afectivas, destrezas motoras e informaciones que permiten llevar a cabo adecuadamente una función, actividad o tarea. (Québec, Canadá). Acepciones del término competencia. El término competencias ha sido introducido en diferentes campos y con distintos significados, de esta forma se tienen diversas acepciones en nuestra lengua. Por ejemplo, en el ámbito deportivo, desde la antigüedad hasta nuestros días, se habla de competencias atléticas en sus diferentes categorías; en economía y más específicamente en la dinámica del mercado, haciendo referencia a la relación entre oferta y demanda de productos o servicios, es común escuchar que en el mercado existe mucha competencia; en el campo jurídico el término competencia generalmente se usa para hacer énfasis a las funciones de un determinado organismo o entidad quien ejerce autoridad y tiene un campo de acción determinado dentro del cual debe de ejercer sus funciones, por lo que a menudo escuchamos “…es competencia del funcionario ejercer su autoridad correspondiente…”. En lo que se refiere al ámbito empresarial El término “Competencia” lo introduce David McClelland, célebre psicólogo de la Universidad de Harvard, experto en teoría de la motivación. Este autor, ante la evidencia de que los mejores expedientes, conocimientos y destrezas no garantizaban el éxito profesional, se propuso encontrar una alternativa a las pruebas tradicionales de aptitud e inteligencia que, conllevara a una medición más profunda que denominó “Competencia”. Definiéndola como una característica subyacente de una persona que le permite tener un desempeño superior en un empleo, puesto o situación dada. Y es así que en 1973 publica “Evaluar la competencia en lugar de la inteligencia” documento en el cual presentaba las competencias

como aquello que realmente causa un rendimiento superior en el trabajo. (Hay Group, 2006). En este proyecto hablaremos de manera muy somera de las competencias en el campo laboral y en forma más extensa de las competencias en el contexto educativo específicamente en lo que se refiere a la docencia. Conceptos de competencia. Revisando la literatura que hay acerca del tema de “competencias”, nos percatamos que no es sencillo acotar este término y es casi imposible proporcionar solamente una definición. Podemos afirmar que existen tantas definiciones como autores hay en el tema. Aunado a ello, también es importante destacar que en cada definición se incluyen otros conceptos como capacidad, cualificación, aptitud, destreza, habilidad, -por mencionar algunos-, que por sí mismos también resultan, en la mayoría de los casos, ambiguos o incluyen dificultades semánticas. Al margen de la problemática antes descrita, a continuación se citan sólo algunas de las definiciones existentes. En general, se afirma que una competencia es el conjunto de comportamientos socio-afectivos y habilidades cognoscitivas, psicológicas, sensoriales y motoras que permiten llevar a cabo adecuadamente una función, una actividad o una tarea. El siguiente cuadro comparativo pretende describir algunas definiciones de diferentes organismos nacionales e internacionales:

4.1 Cuadro comparativo Definiciones de competencias

AUTOR DEFINICIÓN DE COMPETENCIA

Spencer y Spencer (1993)

"una característica subyacente de un individuo, que está causalmente relacionada con un rendimiento efectivo o superior en una situación o trabajo, definido en términos de un criterio"

Woodruffe (1993)

"Una dimensión de conductas abiertas y manifiestas, que le permiten a una persona rendir eficientemente".

Aptitud de un individuo para desempeñar una función productiva en diferentes contextos y con base en

Consejo de Normalización y Certificación de Competencia Laboral (CONOCER, 1997)

los requerimientos de calidad esperados. Esta aptitud se logrará con la adquisición y desarrollo de conocimientos, habilidades y capacidades que son expresadas en el saber, en el hacer y en saber - hacer.

J. Tejada Fernández, (1999.)

la competencia se refiere a las funciones, tareas y roles de un profesional -incumbencia- para desarrollar adecuada e idóneamente su puesto de trabajo -suficiencia- que son resultado y objeto de un proceso de capacitación y cualificación.

Lasnier (2000)

Saber complejo resultado de la integración de la modificación y adecuación de las capacidades, cualidades (que pueden ser del orden cognitivo, afectivo psicomotor social ) y de conocimiento utilizados eficazmente en situaciones que tengan un carácter común (situaciones similares no generalizable a cualquier situación)

Perrenoud (2002) “Capacidad de actuar de manera eficaz en un tipo definido de situación, capacidad que se apoya en conocimientos pero no se reduce a ellos”

UNESCO (1999)

“Conjunto de comportamientos socioafectivos y habilidades cognoscitivas, psicológicas, sensoriales y motoras que permiten llevar a cabo adecuadamente, una función, una actividad o una tarea”

OCDE.

Capacidad para responder a las demandas y llevar a cabo tareas. Cada competencia se construye a través de la combinación de habilidades cognitivas y prácticas, conocimiento (incluyendo el conocimiento tácito), motivación, valores, actitudes, emociones y otros componentes sociales y conductuales.

Gonzci (2001)

Una compleja estructura de atributos necesarios para el desempeño de situaciones específicas.

Bayatzis

Es una característica subyacente de una persona que esta casualmente relacionada con una actuación exitosa en un puesto de trabajo: las competencias, pueden consistir en motivos, rasgos de carácter, conceptos de uno mismo, actitudes o valores.

Diccionario de la Real Academia.

Del latín competencia, confrontar competente, pericia, aptitud, idoneidad para hacer algo, o intervenir en un asunto determinado.

Informe final proyecto TUNING América Latina (2004-2007)

“Conjunto de conocimientos, habilidades y destrezas, tanto específicas como transversales que debe reunir un titulado para satisfacer plenamente las exigencias de los contextos sociales. Fomentar las competencias es el objetivo de los programas educativos. Las competencias son capacidades que la persona desarrolla en forma gradual y a lo largo de todo el proceso educativo y son evaluadas en diferentes etapas. Pueden estar divididas en competencias relacionadas con la formación profesional en general (competencias genéricas) y con un área de conocimiento (específicas de un campo de estudio)

Fuente: Elaboración propia, con base en la bibliografía consultada. Como se puede apreciar, las definiciones presentadas anteriormente tienen algunos elementos en común, y lejos de contradecirse se complementan. Después de conocer – de acuerdo a los autores antes mencionados – los elementos medulares que conforman el concepto de “competencia”, para efectos de este trabajo definimos competencia como “el conjunto de características personales: conocimientos, actitudes, valores y habilidades, que al ponerlos en práctica dan lugar a un comportamiento asociado directamente con un excelente desempeño y por ende con buenos resultados. Las competencias se pueden identificar, definir, observar y evaluar” Características de las competencias

En función del análisis de las definiciones antes presentadas se puede concluir que las competencias:

1. No sólo se reducen al conjunto de conocimientos, de habilidades y de destrezas que una persona posee para realizar un trabajo, también incluye la ejecución o acción. Es decir, la competencia no reside en los recursos (capacidades) sino en la movilización misma de los recursos para la resolución de problemas.

2. Se ponen de manifiesto o se pueden observar cuando se ejecuta una tarea o se realiza un trabajo.

3. Están relacionadas directamente con la ejecución exitosa en una actividad y por tanto con el rendimiento laboral o de cualquier otra índole.

4. Pueden ser generalizables a más de una actividad. 5. Se pueden observar y se pueden medir en función de estándares

establecidos. 6. Son multidimensionales y por tanto complejas, porque cubren:

conocimientos, habilidades y actitudes. 7. Son integrativas, puesto que las dimensiones: conocimientos,

habilidades y actitudes son movilizadas para cumplir con un objetivo. 8. Se trata de una serie de variables alternativas que están asociadas al

rendimiento óptimo y eficaz en el desempeño del trabajo. 9. Tienen un carácter dinámico, porque se pueden adquirir a lo largo de

toda la vida. 10. Son flexibles y adaptativas. Están en función de la evolución de las

tareas y empleos. 11. Las competencias se vuelven cada vez más determinantes como

inversión y valor importante para los individuos, como para las sociedades.

¿Cuántas competencias existen?

Actualmente, el número de competencias "existentes" puede ser muy variado y amplio. Sólo por citar algunos ejemplos: Levy-Leboyer (1996) presenta seis diferentes listas. Ansorena Cao (1996) incluye 50 Competencias conductuales. Woodruffe (1993) plantea nueve competencias genéricas, lo que significa que hay muchas otras específicas. El Diccionario de Competencias de Hay McBer (Spencer y Spencer, 1993) incluye 20 Competencias en su lista básica, ordenadas por conglomerados, y nueve adicionales denominadas Competencias Únicas. Barnhart (1996) incluye 37 competencias básicas en siete categorías. En todas esas listas hay competencias que tienen el mismo nombre para el mismo concepto, pero también hay algunas que, siendo similares, reciben nombre diferentes (solución de problemas en lugar de toma de decisiones). Igualmente, algunas competencias son agrupadas de maneras diferentes (Orientación al Cliente puede ir en Apoyo y Servicio Humano). Esto hace que el número de Competencias a definir pueda llegar a ser muy grande, precisamente por el hecho de que las Competencias están ligadas al contexto específico en que se pone de manifiesto en el trabajo, lo que significa, que cada organización puede tener conjuntos de Competencias diferentes, asumiendo que tienen similitudes entre ellas.

Ahora bien, hablando de competencias, existen principalmente dos perspectivas metodológicas con propósitos diferentes: la educativa o curricular y la gerencial (utilizada para medir el desempeño). En este proyecto abordaremos sólo la primera. Por lo que es importante mencionar que la perspectiva educativa o curricular define la competencia como la aptitud para desempeñar idóneamente un oficio u ocupación además de estar alineada con el enfoque de certificación de competencias, en donde sólo hay dos valores, es decir se es competente o no. Las competencias docentes Es conocido que todas las sociedades del mundo se enfrentan a vertiginosos cambios sociales, económicos y tecnológicos; que dan lugar a una transformación en nuestra forma de vida. Las características de la sociedad actual exigen nuevas funciones a los docentes. El profesor de este siglo, entre otras características, deberá tener una actitud abierta al cambio y a los múltiples acontecimientos e informaciones que se generan a su alrededor. Deberá transformarse en un administrador del conocimiento y en sus manos está realizar la selección de lo que aprenderán los alumnos, con base en las necesidades y requerimientos de la sociedad actual. Es importante destacar que el profesor representa un pilar fundamental en la educación, por lo que previo a la identificación y definición de las competencias que habrá de asumir, es indispensable definir el papel básico de la función docente. Papel básico de la actividad docente. Escolano (1996) tomado de Fernández (s.f) en una primera aproximación define la profesión docente en torno a tres papeles básicos:

a) Papel técnico, que permite identificar a los docentes como expertos habilitados para guiar el aprendizaje de los alumnos conforme a determinadas reglas metódicas de reconocida solvencia. Este papel ha ido incorporando algunas otras funciones como las relacionadas con la tutoría, la gestión didáctica y la innovación. Su identidad se define por una tarea de claro matiz tecnológico el cual sugiere que el profesor sea un ingeniero en la instrucción.

b) El segundo papel se asocia a los aspectos éticos y socializadores de la profesión. El docente es un agente de primer orden en el proceso de socialización metódica de los menores en el tejido social. Los valores, actitudes y otras pautas de conducta que exhibe o vehicula constituyen un marco de referencia normativo para las personas en formación.

c) El tercer papel del profesor se vincula a la satisfacción de las necesidades de autorrealización de los individuos en formación y de sus demandas de bienestar. Este papel enlaza con algunas tradiciones bien enraizadas en el mundo pedagógico, como las que enfatizan el papel del docente como preceptor, partenaire o terapeuta.

Por otro lado, Marqués (2000) es quizá uno de los autores que presenta una de las listas más completas en relación a las funciones que habrá de realizar el personal docente:

Diagnóstico de necesidades. Conocer al alumnado conocer tanto las características individuales (conocimientos, desarrollo cognitivo y emocional, intereses, experiencia, historial...) como las características grupales (coherencia, relaciones, afinidades, experiencia de trabajo en grupo...). Teniendo en cuenta las características y las exigencias legales y sociales. Preparar las clases. Organización y gestión de situaciones mediadas de aprendizaje con estrategias didácticas que consideren la realización de actividades de aprendizaje (individuales y cooperativas) de gran potencial didáctico y que consideren las características de los estudiantes. Planificar cursos. Diseño del currículum: objetivos, contenidos, actividades, recursos, evaluación. En algunos casos puede ser conveniente prever distintos niveles en el logro de los objetivos. Diseñar estrategias de enseñanza y aprendizaje. Preparar estrategias didácticas que promuevan el aprendizaje y contribuyan al desarrollo personal y social de los estudiantes. Estas estrategias deberán incluir actividades motivadoras, significativas, colaborativas, globalizadoras y aplicadas, considerando también la aplicación de las TIC. Promover el aprendizaje autónomo. Facilitar la comprensión de los contenidos básicos y fomentar el autoaprendizaje. Encaminar a los estudiantes hacia el aprendizaje autónomo y promover la utilización autónoma de los conocimientos adquiridos, con lo que aumentará su motivación al descubrir su aplicabilidad. Diseñar entornos de aprendizaje que consideren la utilización de los medios de comunicación y los nuevos instrumentos informáticos y telemáticos (TIC), aprovechando su valor informativo, comunicativo y motivador. Así preparará oportunidades de aprendizaje para sus alumnos. Buscar y preparar materiales para los alumnos, aprovechar todos los lenguajes. Elegir los materiales que se emplearán, el momento de hacerlo y la forma de utilización, cuidando de los aspectos organizativos de las clases (evitar un uso descontextualizado de los materiales didácticos). Estructurar los materiales de acuerdo con los conocimientos previos de los alumnos (si es necesario establecer niveles). Utilizar los diversos lenguajes disponibles. Incorporar a los contenidos de la asignatura las aportaciones de los lenguajes icónicos, la multimedialidad, la estructuración hiupertextual de la información... Conviene aporvechar todos los lenguajes para potenciar los aprendizajes de los estudiantes.

Motivar al alumnado. Mantener un buen clima relacional, afectivo que proporcione niveles elevados de confianza y seguridad. Despertar el interés de los estudiantes (el deseo de aprender) hacia los objetivos y contenidos de la asignatura (establecer relaciones con sus experiencias vitales, con la utilidad que obtendrán...). Y mantenerlo. Gestionar el desarrollo de las clases manteniendo el orden- Mantener las disciplina y el orden en clase (normas, horarios...). Las normas pueden ser tan abiertas como se considere oportuno, pero deben cumplirse. Proporcionar información. Constituir una fuente de información para los alumnos, pero no la única (presentación de los aspectos más importantes de los temas, sus posibles aplicaciones prácticas, sus relaciones con otros temas conocidos...). Sugerir la consulta de otras fuentes alternativas. Indicar fuentes de información, materiales didácticos y recursos diversos. Proponer actividades de aprendizaje y orientar su realización. Durante el desarrollo de las actividades observar el trabajo de los estudiantes y actuar como dinamizador y asesor. Actuar como consultor para aclarar dudas de contenidos y metodología, aprovechar sus errores para promover nuevos aprendizajes. Fomentar la participación de los estudiantes. - Fomentar la participación de los estudiantes en todas las actividades: hacer preguntas, trabajar en grupo, hacer presentaciones públicas. Orientar el desarrollo de las habilidades expresivas y comunicativas de los estudiantes Asesorar en el uso de recursos. Asesorar en el uso eficaz y eficiente de herramientas tecnológicas para la búsqueda y recuperación de la información. Evaluar. - Evaluar los aprendizajes de los estudiantes (evaluación formativa y sumativa). Aprovechar las posibilidades de las TIC para realizar alguna de las actividades de evaluación y fomentar la autoevaluación por parte de los estudiantes. Evaluar las propias intervenciones docentes, para introducir mejoras. Ofrecer tutoría y ejemplo. Hacer un seguimiento de los aprendizajes tanto presencial como telemático. Ser ejemplo de actuación y portador de valores. Actuar como ejemplo para los estudiantes: en la manera de hacer las cosas, en las actitudes y valores (entusiasmo, responsabilidad en el trabajo...) Investigar en el aula con los estudiantes, desarrollo profesional continuado. Experimentar en el aula, buscando nuevas estrategias didácticas y nuevas posibilidades de utilización de los materiales didácticos Asesorar en el uso eficaz y eficiente de herramientas tecnológicas para la búsqueda y recuperación de la información. Salir de la rutina, arriesgarse para mejorar los aprendizajes de los estudiantes.

Formación continua. Participar en cursos para estar al día en lo que respecta a la materia de la asignatura y también para mejorar las habilidades didácticas y mantener contacto con otros colegas. Colaboración en la gestión del centro. Realizar los trámites burocráticos que conlleva la docencia: control de asistencia, boletines de notas, actas... El enfoque por competencias. El enfoque por competencias constituye un nuevo paradigma en la educación. Representa retos importantes para la docencia y especialmente en el proceso enseñanza-aprendizaje. Este enfoque representa un parteaguas en el campo de la educación. Implica pasar de un modelo educativo tradicional centrado en la enseñanza a un modelo centrado en el aprendizaje dando lugar a nuevas metodologías y nuevos roles docentes. Ahora el profesor asumirá el papel de facilitador o tutor del proceso de aprendizaje, es decir debe ser capaz de preparar oportunidades de aprendizaje para sus alumnos. Poner al alcance de estos los elementos y herramientas necesarias para que ellos mismos vayan construyendo su propio conocimiento. Por lo que se requiere romper con las antiguas prácticas, formas de ser, de pensar y de sentir en las que se concebía que la función de la escuela era sólo transmitir conocimientos predominantemente teóricos sin darle énfasis a su vinculación y aplicación práctica. En este sentido (Fernández, s.f) afirma “No podemos seguir considerando a los docentes como almacenes del saber y por lo tanto dispensadores omnipotentes del conocimiento” Se pretende lograr una formación encaminada a responder a las necesidades del mundo real vinculando educación y mercado laboral. Procurando una educación integral que abarque aspectos cognitivos, procedimentales y actitudinales. Tal como afirma (Aristimuño, 2005) “El enfoque por competencias modifica los puntos de vista convencionales sobre la forma de aprender y de enseñar, pues el aspecto central no es la acumulación primaria de conocimientos, sino el desarrollo de las posibilidades que posee cualquier individuo, mediante fórmulas de saber y de hacer contextualizadas” Cabe mencionar que la educación basada en competencias posee diferentes enfoques, y su selección, según Tobón (2006) va a depender del modelo pedagógico institucional, de las políticas, reglamentos y lineamientos institucionales así como del contexto sociocultural en el que se desarrolla la práctica educativa. De esta forma el autor menciona cuatro enfoques: el conductual, el funcionalista, el constructivista y el complejo. Cabe mencionar que los tres primeros enfoques hacen referencia al campo laboral; mientras que el enfoque complejo va más allá e incluye la realización como parte de las competencias; además considera las competencias como procesos de desempeño. El enfoque por competencias trae importantes consecuencias para los profesores, que van desde el rol que le asignan a los contenidos en sus cursos, el manejo de los problemas y los proyectos como estrategias didácticas, la modificación del contrato didáctico, la evaluación que se practica, o la mayor o menor separación entre disciplinas. (Perrenoud P, 2002

Es importante recalcar que con el ingreso de las competencias a la educación, se pasó de la evaluación de conocimientos memorísticos a la evaluación de competencias, es decir de desempeños ante situaciones y problemas con sentido para las personas. En la educación superior la evaluación de competencias es parte fundamental del proceso de enseñanza aprendizaje que nos proporciona instrumentos importantes que nos indica qué y cómo estamos realizando nuestra actividad docente y de esta manera detectar lo que debemos corregir o reforzar. En el ámbito de la educación, ¿Qué se entiende por competencias? En las instituciones educativas existe constante preocupación por la calidad de sus servicios, por el proceso pedagógico y sus recursos intelectuales. Razón por la que en los últimos años la formación y la labor del docente se está reestructurando, con la finalidad de dar respuesta a las características y exigencias del mercado, de la sociedad y del mundo actual. La reestructura consiste en pasar de un modelo profesional tecnocrático a un modelo basado en el enfoque de las competencias. Para lo cual es importante identificarlas y reorientar el currículo formativo en torno a estas. No hay una definición exacta que permita determinar lo que realmente significa este concepto “competencias”. Sin embargo, es un término cada vez más usado en el campo de la docencia. Existen muchos estudios al respecto y los educadores han centrado todo su esfuerzo en reproducir rápidamente este tema, sin embargo, el concepto aún es vago. De acuerdo con José Moya, Universidad de la Palma, 20007 en el ámbito de la educación "Competencia es la forma en que una persona moviliza todos sus recursos para resolver una tarea en un contexto determinado, es decir no por mucho que una persona sepa es más competente; es competente cuando logra utilizar adecuadamente todos sus recursos y para una tarea concreta, no para cualquier circunstancia y no para cualquier tarea, también podemos ver otras definiciones de competencias básicas, algunas las más generalizadas dicen que "competencia es el conjunto de conocimiento, valores, actitudes, saberes que una persona posee", pero cuando una competencia se define así, se pierde lo esencial de la definición por que no cualquier conjunto de conocimiento genera una competencia, la competencia sólo se obtiene cuando el conjunto se forma adecuadamente, es decir cuando las personas usan el conjunto adecuadamente. O sea, lo que hace a una persona competente es la forma en que utiliza todos sus recursos para resolver tareas definidos para contextos definidos" En este sentido, (Andrade 2005) sustenta que “El conocimiento como acumulación de saber no es significativo, su valor radica en el uso que se haga del mismo, por tanto las escuelas deben , con esta perspectiva, replantear los programas educativos desde el “saber hacer” a partir del desarrollo de competencias y de su aplicación a situaciones de la vida real”. Por otro lado, (CIDEC, 2004) afirma que “Los nuevos procesos formativos basados en competencias no sólo trasmiten saberes y destrezas manuales, sino que toman

en cuenta otras dimensiones y contemplan los aspectos culturales, sociales actitudinales que tienen relación con las capacidades de las personas” Las competencias, al igual que las actitudes, no son potencialidades a desarrollar, porque no son dadas por herencia ni se originan de manera congénita, sino que forman parte de la construcción pertinente y persistente de la persona. Tomando en cuenta que la construcción de competencias debe relacionarse con una comunidad específica, es decir, desde un entorno social, respondiendo a sus necesidades y de acuerdo con las metas, requerimientos y expectativas cambiantes de una sociedad abierta. “Cada competencia se define de acuerdo con los desempeños idóneos, a partir del diagnóstico de las demandas y tendencias de la profesión, el mercado laboral, las investigaciones y del entorno sociocultural; los cuales deben ser descritos con claridad, de manera que puedan ser evidenciados en un plan de estudios. Esta descripción debe tomar en cuenta, también, los materiales, equipos y herramientas que se requieren para poder ejecutar las competencias. Una vez determinadas las competencias básicas y genéricas, se desglosan las competencias específicas (también llamadas unidades de competencia). Estas unidades de competencia se han de con construir de acuerdo con los distintos saberes antes mencionados; así como los elementos de competencia que según (Tobón 2005, referenciado en Salas, Calvo s.f.) son los componentes específicos de cada unidad de competencia relacionados con actividades y/o tareas concretas, y que van a guiar la valoración del desempeño” Valdés, Senra y Rey (2007), afirman que “Al ser un vínculo efectivo entre la educación y el trabajo, las competencias proveen una metodología y un lenguaje común que permitirá aumentar la legibilidad, comparabilidad y competitividad de los títulos profesionales” En términos generales la calidad de la educación requiere de docentes orientados a la excelencia, es decir, docentes que sean eficaces y eficientes en lo que respecta al proceso de enseñaza y aprendizaje, es decir se necesita profesores que adquieran constantemente competencias pues éstas determinan la calidad de un profesor y la calidad de su enseñanza. Además de determinar, sin duda alguna, la calidad de los alumnos quienes serán los profesionales del mañana. Es así que el perfil del docente está constituido por un conjunto de competencias que integran conocimientos, habilidades y actitudes que el docente pone en juego para generar ambientes de aprendizaje para que los estudiantes desplieguen las competencias genéricas. Como afirma Perrenoud (2004) “las competencias formulan las cualidades individuales, de carácter ético, académico, profesional y social que debe reunir el docente” Finalmente, el trabajo de los docentes, a partir de un enfoque de competencia, permitirá que los estudiantes adquieran las competencias genéricas que expresa el perfil de egreso de las diferentes profesiones, con lo cual se alcanzarán los objetivos fundamentales. Clasificación de las competencias

En el año 1998 la UNESCO en la Conferencia Mundial sobre la Educación Superior indicó, que era trascendental la existencia de una vinculación entre la enseñanza superior, el mundo de trabajo y los demás actores de la sociedad. De esta manera, se considera construir competencias fundamentales en los cuatro pilares básicos: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser. (Salas, Calvo 2008). Aprender a conocer. Este tipo de aprendizaje, que tiende menos a la adquisición de conocimientos clasificados y codificados que al dominio de los instrumentos mismos del saber, puede considerarse a la vez medio y finalidad de la vida humana. En cuanto a medio consiste para cada persona en aprender a comprender el mundo que la rodea, al menos suficientemente para vivir con dignidad, desarrollar sus capacidades profesionales y comunicarse con los demás. Como fin, su justificación es el placer de comprender, conocer, de descubrir. El incremento del saber, que permite comprender mejor las múltiples facetas del propio entorno, favorece el despertar de la curiosidad intelectual, estimula el sentido critico y permite descifrar la realidad, adquiriendo al mismo tiempo una autonomía de juicio. Aprender a hacer. Aprender a conocer y aprender a hacer son, en gran medida, indisociables. Pero lo segundo esta más estrechamente vinculado a la cuestión de la forma profesional: ¿cómo enseñar al alumno a poner en práctica sus conocimientos y, al mismo tiempo, como adaptar la enseñanza al futuro mercado del trabajo, cuya evolución no es totalmente previsible?. Implica contar con los conocimientos y las herramientas (técnicas, metodológicas y procedimentales) necesarios para la ejecución eficiente y eficaz de una actividad o tarea determinada. Aprender a vivir juntos, aprender a vivir con los demás. Sin duda, este aprendizaje constituye una de las principales empresas de la educación contemporánea. En términos generales consiste en desarrollar un comportamiento asertivo. Entendiéndose por éste la habilidad personal que permite expresar sentimientos, opiniones y pensamientos, en el momento oportuno y de la forma adecuada, considerando siempre los derechos de los demás. Aprender a ser. Consiste en tener los conocimientos suficientes para apreciar, valorar y cuidar la salud y al mismo tiempo desarrollar la integridad física (mantener un cuerpo saludable y vigoroso) y la integridad mental. Para lograrlos es importante llevar a cabo actividades recreativas y culturales. El saber ser definitivamente propicia una elevada autoestima. Los cuatro pilares antes descritos constituyen la base para la identificación y definición de las competencias en el ámbito educativo. Éstas al igual que en el ámbito empresarial, son diversas; es decir, no hay sólo una lista o clasificación de competencias, aunado a ello existen también diferentes enfoques. Para efectos de este trabajo, sólo destaceremos algunas clasificaciones propuestas por diferentes autores.

Básicas, genéricas y específicas (CONOCER, 2001; Mertens, 1997) Competencias básicas: describen los comportamientos elementales que deberán mostrar los trabajadores, y que están asociados a conocimientos de índole formativa. Competencias genéricas: describen los comportamientos asociados con desempeños comunes a diversas ocupaciones y ramas de actividad productiva, como son la capacidad de trabajar en equipo, de planear, programar, negociar y entrenar, que son comunes a una gran cantidad de ocupaciones Competencias específicas: identifica comportamientos asociados a conocimientos de índole técnico, vinculados a un cierto lenguaje tecnológico y a una función productiva determinada.

Técnica, metodológica, social, participativa (Bunk referenciado en Tejada, 1999) "Posee competencia técnica aquel que domina como experto las tareas y contenidos de su ámbito de trabajo, y los conocimientos y destrezas necesarios para ello. Posee competencia metodológica aquel que sabe relacionar aplicando el procedimiento adecuado a las tareas encomendadas y a las irregularidades que se presenten, que encuentra de forma independiente vías de solución y transfiere adecuadamente las experiencias adquiridas a otros problemas de trabajo. Posee competencia social aquel que sabe colaborar con otras personas de forma comunicativa y constructiva, y muestra un comportamiento orientado al grupo y un entendimiento interpersonal. Posee competencia participativa aquel que sabe participar en la organización de su puesto de trabajo y también de su entorno de trabajo, es capaz de organizar y decidir, y está dispuesto a aceptar responsabilidades"

Competencias básicas (Fernández, 2008) De acuerdo a este autor las competencia básicas que debe de tener todo docente son: dominio de la materia que imparte (competencia cultural), cualidades pedagógicas (habilidades didácticas, tutoría, técnicas de investigación, conocimientos psicológicos y sociales…), habilidades instrumentales y conocimiento de nuevos lenguajes y características personales (madurez, seguridad, autoestima, equilibrio emocional, empatía

La referencia de las competencias propuestas del IPN son: Se incorpora el diseño de competencias, esto es, los conocimientos, habilidades, actitudes que se ponen en juego de manera integrada para el desempeño en un campo de acción (Perrenoud, 2002; IPN, 2000) 1. Competencias humanas - Hombre pensante y productivo - Actúa en un espacio de sociabilidad e identidad - Proceso creativo de interacción entre realidad, necesidad, pensamiento y acción - Capacidad de pensar, de transformar y de emprender - Formación de personal calificado, responsable, autónomo

2. Competencias profesionales Implica: Formación disciplinar, conocimiento, comprensión, habilidades y actitudes y se ejercitan en la práctica laboral. Se integran 3 componentes: 2.1 Componente disciplinario 2.1.1 Competencias básicas 2.1.2 Competencias genéricas Involucra conocimientos y actitudes que se traducen en capacidad de análisis, síntesis, comprensión y evaluación (IPN, 2000) 2.2 Competencias profesionales Distinguen una profesión de otra, como son: - marcos normativos - Identidad - Medios - lenguaje e instrumentos distintivos Se asocian: 2.2.1 Competencias particulares Tiene que ver con el campo específico de una disciplina 2.3. Competencia práctico-productivo Desempeño óptimo de actividades en las que se expresan las habilidades básicas para el desarrollo de tareas productivas 2.3.1Competencias específicas Asociadas a tareas particulares Las subcompetencias de las competencias profesionales (disciplinario, profesional y práctico-productivo), son: 1. Subcompetencia técnica 2. Subcompetencia metodológica Saber asociado específico 3. Subcompetencia social-participativa Saber referencial El saber asociado es integral, se desglosa: Saber hacer Saber ser Saber convivir 1. Subcompetencia técnica Adquisición de conocimientos, habilidades y actitudes que trascienden los límites de una profesión, está asociado con el saber referencial. Saber referencial

Son los conocimientos de los diversos campos disciplinares (científicos, humanísticos, etc.) que se vinculan con la realización del contenido del trabajo. 2. Subcompetencia metodológica. Adquisición de conocimientos, habilidades y actitudes necesarios para ejecutar con calidad, los procesos de trabajo, actividades y tareas propios del campo de conocimiento de que se trate y tiene asociado al saber hacer Saber hacer Corresponde a la capacidad de llevar a cabo procedimientos y operaciones prácticas diversas, mediante la aplicación de medios de trabajo específicos (equipos e instrumentos). 3. Subcompetencia social o participativa Adquisición de conocimientos, habilidades y actitudes que proporcionan al individuo disposición al trabajo, capacidad de adaptación, intervención y transformación y tiene asociado el saber ser. Saber ser o estar Se refiere a la capacidad de establecer y desarrollar las relaciones que son necesarias en el ámbito de trabajo.

Marqués (2000) las competencias necesarias para una persona que se dedique a la docencia deben contemplar cuatro dimensiones principales:

a) Conocimiento de la materia que imparte, incluyendo el uso específico de las TIC en su campo de conocimiento, y un sólido conocimiento de la cultura actual (competencia cultural). b) Competencias pedagógicas: habilidades didácticas (incluyendo la didáctica digital), mantenimiento de la disciplina (establecer las "reglas de juego" de la clase), tutoría, conocimientos psicológicos y sociales (resolver conflictos, dinamizar grupos, tratar la diversidad...), técnicas de investigación-acción y trabajo docente en equipo (superando el tradicional aislamiento, propiciado por la misma organización de las escuelas y la distribución del tiempo y del espacio). Debe actuar con eficiencia, reaccionando a menudo con rapidez ante situaciones siempre nuevas y con una alta indefinición (una buena imaginación también le será de utilidad) y sabiendo establecer y gestionar con claridad las "reglas de juego" aceptadas por todos. c) Habilidades instrumentales y conocimiento de nuevos lenguajes: tecnologías de la información y la comunicación (TIC), lenguajes audiovisual e hipertextual. d) Características personales. No todas las personas sirven para la docencia, ya que además de las competencias anteriores son necesarias: madurez y seguridad, autoestima y equilibrio emocional, empatía, imaginación..El profesor debe tener entusiasmo (creer en lo que hace, vivirlo, de manera que transmita el entusiasmo y la pasión de aprender a los estudiantes), optimismo pedagógico (ante las posibilidades de mejora de los estudiantes), liderazgo (que nazca de su actuación abriendo horizontes a los estudiantes y representando la voluntad del grupo, de su dedicación y trato, de su ejemplo y

valores...). Debe dar afecto (no por lo que hacen, sino por lo que son) que proporcionará la imprescindible seguridad, y debe dar confianza (creyendo en las posibilidades de todos sus alumnos; las expectativas se suelen cumplir) que reforzará el impulso de los estudiantes para demostrar su capacidad.

) Conceptual, técnica, humana (Tejada, 1999)

a) Competencia conceptual (analizar, comprender, actuar de manera sistemática), integrando el saber (conocimientos)

b) Competencia técnica (métodos, procesos, procedimientos, técnicas de una especialidad), integrando el saber-hacer (procedimientos, destrezas, habilidades.

c) Competencia humana (en las relaciones intra e interpersonales), integrando el saber ser y saber estar (actitudes, valores y normas).

Competencias de acuerdo al proyecto Tuning.

El proyecto Tuning (2003) surge como una iniciativa europea para armonizar las estructuras educativas universitarias de manera que pudiese existir un sistema común de reconocimientos de las titulaciones y es de esta manera que propone el siguiente modelo:

El proyecto en cuestión hace referencia que las competencias pueden ser genéricas y en específicas de cada área. “Aunque Tuning reconoce que es absolutamente preciso formar y desarrollar conocimientos y habilidades específicas de cada área, y que ello debe arrojar la base de los programas conducentes a la obtención de un título universitario, ha puesto de relieve que deberán de consagrarse tiempo y atención al desarrollo de competencias genéricas o habilidades transferibles. Este componente está volviéndose cada vez más importante a la hora de preparar bien a los estudiantes de cara a su futuro papel en la sociedad como profesionales y ciudadanos” (Benetoide, Pablo , Proyecto Tuning América Latina 2004-2007)

Tuning distingue tres tipos de competencias genéricas: Competencias instrumentales (capacidades cognitivas, metodológicas, tecnológicas y lingüísticas); competencias interpersonales: capacidades individuales tales como habilidades sociales (interacción y cooperación sociales); competencias sistemáticas: capacidades y habilidades relacionados con sistemas globales (combinación de comprensión, sensibilidad y conocimientos; para ellos es preciso adquirir previamente competencias instrumentales e interpersonales.

1.- Competencias genéricas

1.1 Instrumentales

Capacidad de análisis y síntesis Capacidad de organizar y planificar

Conocimientos básicos generales Conocimientos básicos en la especialidad Comunicación oral y escrita en la propia lengua Conocimiento de una segunda lengua Habilidades básicas de manejo del ordenador Habilidad de gestión de la información (habilidad para

buscar y analizar información proveniente de fuentes diversas.

Resolución de problemas Toma de decisiones

1.2 Interpersonales

Capacidad de crítica y de autocrítica Trabajo en equipo Habilidades interpersonales Capacidad de trabajar en equipo interdisciplinario Capacidad para comunicarse con expertos de otras

materias Apreciación de la diversidad y de la multiculturalidad Habilidad de trabajar en contexto internacional Compromiso ético

1.3 Sistémicas

Capacidad de aplicar los conocimientos en la práctica Habilidad de investigación Capacidad de aprender Capacidad para adaptarse a nuevas situaciones Capacidad para generar nuevas ideas (creatividad) Liderazgo Conocimiento de cultura y costumbres de otros países Habilidad para trabajar en forma autónoma Diseño y gestión de proyectos Iniciativa y espíritu emprendedor Preocupación por la calidad Motivación del logro

Zabalza, Miguel (Universidad de Santiago de Compostela, España)

A partir de los dominios conceptuales, bibliográficos, metodológicos e instrumentales que posee un profesor universitario en su campo disciplinar, es necesario que en el ejercicio de la docencia construya un conjunto de competencias específicas relativas a la enseñanza y el aprendizaje para desempeñar exitosamente su rol como docente. Estos conocimientos y habilidades son lo que se denominan Competencias Docentes y entre ellas se distinguen las siguientes:

1. La capacidad para: planificar el proceso de enseñanza y de aprendizaje

2. seleccionar y presentar los contenidos disciplinares;

3. ofrecer informaciones y explicaciones comprensibles;

4. motivación para alfabetizarse tecnológicamente (en las TIC);

5. gestionar metodologías para el trabajo didáctico y las tareas del aprendizaje;

6. relacionarse constructivamente con los estudiantes;

7. realizar tutorías y efectuar un acompañamiento a los estudiantes;

9. reflexionar e investigar sobre la enseñanza en la universidad;

10. implicarse en los fines, visión, misión y PEI institucional.

(Bunk 1994, referenciado en Tejada, 1999) nos lleva a considerar una tipología de las competencias profesionales en torno a competencia técnica, competencia metodológica, competencia social y competencia participativa, cuya resultante final integrada nos lleva a la competencia de acción, que como tal es indivisible En este sentido, el autor destaca que:

• “Posee competencia técnica aquel que domina como experto las tareas y contenidos de su ámbito de trabajo, y los conocimientos y destrezas necesarios para ello.

• Posee competencia metodológica aquel que sabe reaccionar aplicando el procedimiento adecuado a las tareas encomendadas y a las irregularidades que se presenten, que encuentra de forma independiente vías de solución y que transfiere adecuadamente las experiencias adquiridas a otros problemas de trabajo.

• Posee competencia social aquel que sabe colaborar con otras personas de forma comunicativa y constructiva, y muestra un comportamiento orientado al grupo y un entendimiento interpersonal.

• Posee competencia participativa aquel que sabe participar en la organización de su puesto de trabajo y también de su entorno de trabajo, es capaz de organizar y decidir, y está dispuesto a aceptar responsabilidades.

Podemos concluir que las competencias deberían permitir desarrollar adecuadamente la función o rol docente. Hay que tener en cuenta que, según diversos estudios, después de los factores familiares, la capacidad del profesor es el factor determinante más influyente en el éxito de los estudiantes, con independencia de su nivel socioeconómico.

En este sentido Zabalza (1997) afirma que los profesores son profesionales del currículo, en el nivel universitario es difícil encontrar una reflexión importante entre los profesores sobre estos temas. Los profesores están muy

motivados por su actualización, el acceso a la información de punta, la investigación y hasta la extensión, pero sólo pequeños enclaves ubican la reflexión curricular y los temas de la didáctica como cruciales para su trabajo docente. 5. Diseño y metodología Se diseñó un cuestionario para ser aplicado a lo profesores de la escuela, utilizando un muestreo aleatorio, con la finalidad de levantar información que soporte la teoría de la presente investigación. El cuestionario se levantó en las diferentes áreas académicas de la ESCOM, estas son: 1. Departamento de Ciencias Básicas 2. Departamento de Ciencias Sociales 3. Departamento de Programación y Sistemas 4. Departamento de Sistemas Electrónicos A continuación muestro el cuestionario diseñado para el levantamiento de información, relacionada con las competencias pedagógicas de los maestros del ESCOM. 6. Instrumento de evaluación

INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL ESCUELA SUPERIOR DE CÓMPUTO

Cuestionario Competencias pedagógicas de los docentes

Asignatura: _________________________________ Fecha:______________ Grupo: _________________________ INSTRUCCIONES: En los siguientes enunciados señale con una “X” la opción que corresponda a lo realizado por el docente durante sus clases Aspectos a evaluar Siempre Regularmente A veces Nunca

1. El maestro tiene la capacidad de analizar y sintetizar los temas expuestos

2. El maestro aplica los conocimientos en la práctica

3. El maestro organiza y planifica el tiempo de clase

4. El maestro tiene los conocimientos sobre el área de estudio y la profesión

5. El maestro demuestra capacidad de comunicación oral y escrita

6. El maestro tiene la capacidad de comunicación en un segundo idioma

7. El maestro tiene las habilidades en el uso de las tecnologías de la información y comunicación

8. El maestro demuestra capacidad de investigación

9. Se detecta en el maestro su actualización permanentemente

10. El maestro demuestra una capacidad critica y autocrítica

11. El maestro demuestra creatividad en sus clases

12. El maestro demuestra tener capacidad para identificar, plantear y resolver problemas

13. El maestro sabe tomar decisiones 14. El maestro usa en sus clases la

dinámica: trabajo en equipo

15. El maestro motiva a sus alumnos a estudiar

16. El maestro demuestra capacidad para formular y gestionar proyectos

17. El maestro demuestra compromiso ético

18. El maestro demuestra un compromiso con la calidad educativa o en sus clases

19. El maestro demuestra dominio en su asignatura

TOTALES 7. Análisis y presentación de datos Los datos se muestran a continuación

Área Siempre % Regularmente % A veces % Nunca % TotalBásicas 96 21% 48 22% 30 22% 52 52% 226,6426Sociales 217 47% 93 42% 16 12% 4 4% 331,0097Sistemas 87 19% 61 28% 82 59% 37 37% 268,0559Electrónica 58 13% 19 9% 11 8% 7 7% 95,29174TOTALES 458 100% 221 100% 139 100% 100 100% 9 De los datos anteriores, se deduce que en cada una de las áreas existen tendencias diferentes de acuerdo a la escala utilizada. Es decir en cada departamento se presento lo siguiente: En el depto. de Ciencias Básicas, predomina el 42% de los profesores, es decir utilizan la escala de siempre en relación a las competencias. En el depto de Ciencias Sociales el 74% de los profesores, es decir siempre utilizan las competencias. En el depto de Sistemas Electrónicos el 62% de los profesores, es decir siempre utilizan las competencias.

En el depto de Programación y Sistemas 32% de los profesores, es decir siempre utilizan las competencias. La gráfico 1. competencias Pedagógicas

0

20

40

60

80

Siempre Regularmente A veces Nunca

Competencias Pedagògicas

SistemasSocialesElectrónicaBásicas

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